pág. 2257
como el establecimiento de recuperación de cultivos tradicionales de plantas aromáticas, condimentarías
y medicinales realizado por (Hernandez, 2012) en Comunidad Buena Vista y el Chanul, Tumaco, Nariño.
Procesamiento y comercialización de productos de panadería a base de recursos de la región realizado
en la Vereda la Loma del Municipio Bojaya Chocó, realizado por (Guerrero, 2012). ‘LA CHAGRA DE
Tropenbos’ Negociación y reinvención de un programa de cooperación holandesa en el Medio Caquetá
(Zewuster, 2010). Sistematización Aprender de la propia experiencia (Frieri, 2012). Finalmente, el
trabajo realizado por (Renteria, 2012) con la Implementación de parcelas agropecuarias autosostenibles
como estrategia para la seguridad alimentaria en Puerto Martínez, Municipio del Alto Baudó, Chocó.
Adicionalmente, constituye una herramienta clave porque permite evaluar a la comunidad bajo
contextos de interés como la seguridad alimentaria, según la (FAO, 1996) en la Cumbre mundial de la
alimentación “existe seguridad alimentaria cuando todas las personas tienen en todo momento acceso
físico y económico a suficientes alimentos inocuos y nutritivos para satisfacer sus necesidades
alimenticias y sus preferencias en cuanto a los alimentos a fin de llevar una vida activa y sana”. Para
asegurar esa seguridad es necesario realizar un diagnóstico sobre algunas de las dimensiones de esta,
como la disponibilidad de alimentos, el acceso y capacidad de adquirir los mismos, realizar una
evaluación desde la perspectiva de la comunidad y sus propias experiencias, la diversidad dietética en
el hogar (Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, 2010) entre otras
consideraciones, algunas de las cuales fueron abordadas en la presente investigación.
El 28 de enero 2022, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la
Agricultura (FAO), incluyó a Colombia, Honduras y Haití en una lista de países en riesgo de sufrir
hambre durante 2022; sostiene que 7,3 millones de colombianos necesitarán asistencia alimentaria en
2022, y compara esta situación con las de Etiopía, Sudán del Sur, Nigeria y Yemen (Valencia, 2022).
Las comunidades rurales del Pacifico colombiano, en particular el Distrito Especial, Industrial,
Portuario, Biodiverso y Ecoturístico de Buenaventura por la ola de violencia han venido sufriendo
cambios que se manifiestan en los procesos de los sistemas productivos, pérdida de conocimientos
etnoculturales, abandono de tierra, sobreexplotación de los ecosistemas terrestres, situación que es más
sentida en territorios apartados y zonas rurales, en especial en la comunidad de Calle Larga donde no
solo se ha llevado al desplazamiento forzado de la población, sino también a la ejecución de actividades