EXPERIENCIA CLÍNICA Y RADIOLÓGICA:
FRACTURA COMPLEJA DE FÉMUR DIAFISARIO
CON MANEJO QUIRÚRGICO Y APOYO
HORMONAL (VITAMINA D)
CLINICAL AND RADIOLOGICAL EXPERIENCE: COMPLEX
DIAPHYSEAL FEMUR FRACTURE WITH SURGICAL
MANAGEMENT AND HORMONAL SUPPORT (VITAMIN D)
Maria Alejandra Suarez
Universidad del Rosario - Clinica Medilaser Tunja
Angel David Salas
Universidad Navarra Neiva - Clinica Medilaser Tunja
Maria Camila Ojeda
Universidad Navarra Neiva - Clinica Medilaser Tunja
Juliet Nathalia Rodriguez
Universidad El Bosque - Bogotá Clinica Medical
pág. 1
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v8i3.11149
Experiencia Clínica y Radiológica: Fractura compleja de Fémur Diafisario
con manejo quirúrgico y apoyo hormonal (vitamina D)
Maria Alejandra Suarez1
draalejandrasuarzortopedia@gmail.com
https://orcid.org/0000-0003-2335-1746
Universidad del Rosario
Clinica Medilaser Tunja
(Bogotá-Colombia).
Angel David Salas
https://orcid.org/0000-0003-4136-3126
Universidad Navarra Neiva
Clinica Medilaser Tunja
Maria Camila Ojeda
https://orcid.org/0000-0002-1602-0829
Universidad Navarra Neiva
Clinica Medilaser Tunja
Juliet Nathalia Rodriguez
https://orcid.org/0000-0003-3062-7579
Universidad El Bosque- Bogotá
Clinica Medical, Bogota
RESUMEN
El apoyo hormonal con vitamina D como coadyuvante en la remodelación ósea en fracturas ha recibido
una gran atención en los últimos años, particularmente por el déficit de vitamina D que ha llegado a ser
un problema a nivel mundial asociado enfermedades musculoesqueléticas como la osteomalacia,
osteopenia y empeoramiento de la osteoporosis. El efecto de la vitamina D sobre la homeostasis ósea se
ha vuelto evidente en procesos enzimáticos, metabólicos y fisiológicos, es por esto que se cree que un
déficit de la misma puede generar un retraso en la adecuada consolidación ósea en un paciente cuando
presenta una fractura, hasta la fecha es poca la evidencia que existe sobre directrices y tratamiento con
vitamina D como suplemento en fracturas para una adecuada remodelación ósea, los estudios existente
son limitados y poco concluyentes. Teniendo en cuenta lo anterior se presenta un caso de una paciente
con una fractura compleja de fémur a la cual se le inició suplementación dietaria con vitamina D como
alternativa para su tratamiento.
Palabras clave: vitamina D, deficiencia, curación ósea, fémur, fractura
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Autor Principal
Correspondencia: draalejandrasuarzortopedia@gmail.com
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Clinical and Radiological Experience: Complex Diaphyseal Femur Fracture
with surgical management and hormonal support (vitamin D)
ABSTRACT
Hormonal support with vitamin D as an adjunct in bone remodeling in fractures has A received
significant attention in recent years, particularly due to the global deficiency of vitamin D, which has
become a problem associated with musculoskeletal diseases such as osteomalacia, osteopenia, and
exacerbation of osteoporosis. The effect of vitamin D on bone homeostasis has become evident in
enzymatic, metabolic, and physiological processes. Therefore, a deficiency in vitamin D is believed to
potentially delay proper bone consolidation in a patient with a fracture. To date, there is limited evidence
on guidelines and treatment with vitamin D as a supplement in fractures for adequate bone remodeling;
existing studies are limited and inconclusive. Taking the above into account, a case of a patient with a
complex femur fracture is presented, in whom dietary c○ supplementation with vitamin D was initiated
as an alternative for treatment.
Keywords: vitamin D, deficiency, bone healing, femur, fracture
Artículo recibido 20 abril 2024
Aceptado para publicación: 25 mayo 2024
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INTRODUCCIÓN
El fémur es el hueso más largo del cuerpo humano y al fracturarse implica una gran morbilidad debido
a la severidad del trauma, compromiso hemodinámico y las secuelas funcionales inherentes a esta
lesión.(1) Su incidencia no supera el 1% del total de las fracturas en general. Dentro de los segmentos
del fémur, la región supracondílea tiene una incidencia de fractura aproximadamente del 3 al 6%,
(2,3)con una distribución bimodal en edad geriátrica con traumas de baja energía y una mortalidad a 5
años del 48.8%, y en adultos jóvenes con traumas de alta energía.(4)
Existen diversos tipos de tratamiento que han variado con el tiempo, pasando de un manejo con yeso en
el 90% de los pacientes en 1960 a un manejo quirúrgico con estabilización mediante osteosíntesis
vigente hoy día. Diferentes dispositivos de fijación se encuentran disponibles: tutores externos, clavos
endomedulares y placas bloqueadas laterales.(4)
Las placas bloqueadas laterales tienen una frecuencia de no unión del 6%, con reportes del 17 al 21%.
Esta variabilidad es debida a la técnica quirúrgica y las comorbilidades del paciente.(3) El caso que
presentamos a continuación constituye una mujer en edad fértil con IMC 32, sin otro antecedente de
relevancia, con diagnóstico de fractura 33B3 clasificación AO-OTA, con fragmentos que abarcaban más
del 60% de la fractura con gran traslación de la misma. Posterior a la fijación se consideró subóptima
debido al espacio mayor a 5mm entre los fragmentos principales de la conminución sin contacto de sus
corticales, con alto riesgo de no unión dado por IMC >30, que se ha descrito como un factor asociado a
no unión (p 003), conminución del segmento (p 001), técnica quirúrgica abierta y osteopenia notoria en
la radiografía simple.(2)
Teniendo en cuenta lo anterior y ante el riesgo elevado de la paciente de no unión, se realizó junta
médica del servicio donde se decide no realizar revisión del procedimiento, suspender el apoyo y
emplear vitamina D como complemento hormonal para favorecer el metabolismo óseo y promover la
consolidación secundaria de la fractura. Se realiza un seguimiento a 6 meses con la consolidación
completa de la fractura sin dolor, con reincorporación a las actividades cotidianas y deportivas, por lo
que consideramos necesario realizar una evaluación de la literatura para determinar el efecto
potencialmente benéfico que tiene la implementación de la vitamina D en el manejo integral y oportuno
de las fracturas.
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Descripción del Caso Clínico
Contando con el consentimiento de la paciente, se trata de una mujer de 38 años sin antecedentes
médicos relevantes quien sufre caída desde su propia altura con posterior dolor, edema, incapacidad
para la marcha y deformidad en el muslo derecho, presentando fractura femoral diafisaria distal (AO
32B3) (Imagen 1.) , tratada con reducción abierta más fijación interna con placa anatómica de fémur
distal. Posteriormente presenta desplazamiento de la lámina medial a más de 5 mm del foco y ausencia
de contacto directo entre los fragmentos proximal y distal y la lámina (Imagen 2. ), no optándose por
reintervención por el riesgo de infección e indicando no apoyo por 12 semanas más suplemento de VD
1866 UI/día. A los tres meses se evidenció evolución satisfactoria con formación de callo óseo
redundante y puentes óseos entre los fragmentos (Imagen 3.), tolerancia a la bipedestación, marcha sin
muletas, apoyo monopodal y ausencia de dolor reintegrándose a su actividad cotidiana, y a los seis meses
contaba con callo óseo exuberante, movilización completa de la rodilla y tolerancia a realizar apoyo
monopodal y sentadillas considerándose una evolución satisfactoria.
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Imagen 1. Radiografia AP y lateral de femur derecho con imagen de fractura diafisiaria distal 32B3,
fractura supracondilea, artrosis incipiente tricompartimental
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Imagen 2. Radiografía Ap Y Lateral Postquirgica Inmediata
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Imagen 3. Radiografía AP y lateral de control a los 3 meses
DISCUSIÓN
Al revisar la evidencia nos encontramos con una gran variabilidad en la tasa de consolidación de las
fracturas conminutas de fémur distal, asociadas en parte a la técnica quirúrgica y las condiciones del
paciente(2) . Consideramos, en el momento de la fijación al valorar las imágenes postoperatorias, que
los fragmentos se encontraban sin contacto de las corticales y pese al pronóstico ominoso, decidimos no
someter a la paciente a un procedimiento de revisión debido a los riesgos inherentes de una cirugía,
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sumado al aumento en riesgo de infección y no unión por la reintervención temprana. Consideramos en
ese momento el uso hormonal de vitamina D como inductor del metabolismo óseo. Realizamos una
búsqueda en la literatura encontrando que la utilidad de la suplementación diaria con vitamina D es
controversial aunque es aceptado que las necesidades metabólicas del adulto son de aproximadamente
400ui día(5) , algunas refieren que incluso los niveles mínimos pautados son escasos para los verdaderos
requerimientos metabólicos de esta vitamina(6), teniendo en cuenta que su función va más allá del
metabolismo óseo, teniendo efectos en múltiples tejidos que expresan el receptor (VDR). Se ha
reportado que alrededor del 3% del genoma humano está bajo control directo o indirecto de la expresión
de 1,25(OH)2 D3 (forma activa de la vitamina D)(7,8). Se ha reportado que la suplementación en
grandes poblaciones para alcanzar una concentración sérica de 25OHD mayor a 50 nmol/l puede generar
un retraso modesto en la pérdida ósea y la progresión de diabetes mellitus tipo 2, mejorar la función
renal y disminuir la mortalidad en pacientes con cáncer(6). Hasta la fecha no existen estudios que
demuestren un efecto beneficioso significativo en la salud general con la suplementación de vitamina
D, pero es necesario evitar la deficiencia de esta hormona por las funciones esqueléticas y
extraesqueléticas que tiene sobre los tejidos(7,911)
Es importante saber que la evidencia actual es insuficiente para determinar si existe una correlación
entre la suplementación de calcio en pacientes clínicamente sanos durante la consolidación de las
fracturas, debido a la no realización de niveles de vitamina D como estándar de tratamiento para
determinar si existe una deficiencia de esta hormona(1,2). Los estudios aleatorizados controlados
pueden presentar sesgos y limitaciones que comprometen su validez interna y externa, como el
reclutamiento de pacientes con niveles adecuados de vitamina D, limitación para la retención y
seguimiento de la población por la temporalidad de los estudios, acceso de los pacientes a los
suplementos de vitamina D y exámenes de sangre que pueden desenmascarar el doble ciego.(12) Es
necesario la implementación de estudios observacionales que tengan en cuenta una población
heterogénea y real. El tamizaje de vitamina D ha aumentado con los años, tomando como parámetro de
deficiencia severa un resultado menor a 30 nmol/l, (16,17)pero no quiere decir que un valor de 30 o
levemente superior represente un valor óptimo, sigue siendo deficiente solo cuando supera los 50 nmol/l
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se considera adecuado. Se ha reportado en Europa, Canadá y Estados Unidos hasta un 40% de la
población con deficiencia y un 13% con deficiencia severa(6).
Después de realizar una revisión exhaustiva de lo descrito en la literatura, encontramos que no tenemos
una incidencia clara en nuestra población general de los niveles de vitamina D, si se encuentran en
deficiencia o deficiencia severa, con las implicaciones esqueléticas y extra esqueléticas que esto
conlleva, y tampoco tomamos estos niveles en los pacientes que presentan traumas asociados a fractura
que requieren manejo quirúrgico y osteosíntesis, pese a que la deficiencia es prevalente y el adecuado
metabolismo óseo determinante en una evolución adecuada.(8,11,1315)
CONCLUSIÓN
Este caso nos abre los ojos a una realidad a la que nos enfrentamos día a día pero que omitimos, existen
diversos factores que pueden determinar la consolidación de una fractura más allá del material y la
técnica quirúrgica.como omo es el estado inicial de la vitamina D, la edad , tipo de fractura, y el IMC.
Se sabe que la vitamina D es una hormona que tiene efecto sobre de la homeostasis esquelética y extra
esquelética, su déficit sigue siendo prevalente a nivel mundial actualmente tenemos datos insuficientes
de su deficiencia en nuestra población y mucho menos en el paciente clínicamente sano que presenta
una fractura pues no es de rutina en estos pacientes cuantificar las concentraciones de 25(OH)D que es
el marcador utilizado para diagnosticar su deficiencia.
Nos vemos enfrentados a una enfermedad totalmente curable a la cual se le ha prestado poca atención
quizás por la falta de estudios o evidencia publicada, sin embargo esta incertidumbre no debe disminuir
la necesidad de investigar más para confirmar estos resultados, a pesar de que en la literatura no se
encuentre información concluyente sobre un beneficio específico en pacientes con niveles óptimos de
vitamina D no determina que no se requiera de más estudios que evalúen cuál es la prevalencia de esta
deficiencia en pacientes con fractura clínicamente sanos y qué porcentaje de estos tienen déficit severos
que se verían beneficiados de iniciar suplencia para una adecuada remodelación ósea y salud en general
disminuyendo así reintervenciones quirúrgicas y los problemas que trae consigo un segundo tiempo
quirúrgico.
Declaración de financiación
Este estudio no recibió apoyo financiero de fuentes públicas, comerciales o sin fines de lucro.
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Conflicto de interés
La elaboración del estudio no tuvo ningún conflicto de interés
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