ROL DE PROBIÓTICOS EN
INFECCIONES VAGINALES
ROLE OF PROBIOTICS IN VAGINAL INFECTIONS
Carlos Andrés Chango Rodríguez
Consultorio Médico Rodríguez y Rodríguez, Ecuador
Adonis Aarón Gavilánez Rodríguez
Pontificia Universidad Católica del Ecuador
Bryan Aníbal Villota Moreta
Pontificia Universidad Católica del Ecuador, Ecuador
Jhonatan David Arias Flores
Hospital de las Fuerzas Armadas del Ecuador, Ecuador
Lizeth Eliana Nuñez Núñez
Hospital Gineco Obstétrico Isidro Ayora, Ecuador
Luis Patricio Dávila Aguilar
Hospital de las Fuerzas Armadas del Ecuador, Ecuador
pág. 1265
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v8i3.11334
Rol de Probióticos en Infecciones Vaginales
RESUMEN
Las infecciones vaginales son caracterizadas por un sobrecrecimiento de microorganismos oportunistas
y disminución de los niveles de Lactobacillus. Las vaginosis son comunes en mujeres de edad fértil,
perimenopausicas , mujeres con síndrome de ovario poliquistico , embarazadas y adolescentes. Las
vaginosis son a menudo subestimadas o diagnosticadas de manera errónea . Múltiples estudios
mencionan que se debe realizar pruebas de detección de vaginosis a todas los embarazos de alto riesgo
, mujeres con antecedentes obstétricos de importancia como abortos prematuros y aquellas que padecen
de tuberculosis, esto debido a que son un factor de riesgo para el desarrollo de abortos , ruptura
prematuras de membranas, coriomanionitis o partos pretérminos. Un desafío que cada vez se vuelve
más común gira en torno a la resistencia de los microorganismos causantes de las vaginosis a los
tratamientos instaurados, generando infecciones recurrentes y multiresistentes. Para el tratamiento de
las diferentes vaginosis se instaura antibióticos, antimicóticos .Estudios señalan la importancia de la
prescripción de antibióticos conjuntamente con probióticos y así evitar la disbiosis con la finalidad de
evitar recurrencia en las infecciones vaginales.Los probióticos deben ser administrados en la dosis y
tiempo necesario para que puedan generar un efecto positivo . Más del 80 % de especies de Lactobacillus
debe estar presente en un probiótico para garantizar la producción adecuada de ácido y bactericidas para
lograr evitar la formación de microfilms. Los resultados del uso de probióticos dependerá de la calidad
de la fórmula y el mantenimiento de la cadena de frío.
Palabras clave: infecciones vaginales, vaginosis, probióticos, multiresistencia bacteriana
1
Autor principal
Correspondencia: carlosachangor@gmail.com
Carlos Andrés Chango Rodríguez1
carlosachangor@gmail.com
https://orcid.org/0009-0000-1856-8188
Consultorio Médico Rodríguez y Rodríguez
Quito- Ecuador
Adonis Aarón Gavilánez Rodríguez
agavilanez9612@gmail.com
https://orcid.org/0009-0000-1865-4166
Pontificia Universidad Católica del Ecuador
Quito-Ecuador
Bryan Aníbal Villota Moreta
bvillota372@puce.edu.ec
https://orcid.org/0009-0005-8530-6504
Pontificia Universidad Católica del Ecuador
Quito-Ecuador
Jhonatan David Arias Flores
jhonnarias52@hotmail.com
https://orcid.org/0009-0000-9078-7668
Hospital de las Fuerzas Armadas del Ecuador
Quito-Ecuador
Lizeth Eliana Nuñez Núñez
liz.med2015@hotmail.com
https://orcid.org/0009-0000-2686-7671
Hospital Gineco Obstétrico Isidro Ayora
Quito-Ecuador
Luis Patricio Dávila Aguilar
patovenmd@hotmail.com
https://orcid.org/0009-0004-2190-7522
Hospital de las Fuerzas Armadas del Ecuador
Quito-Ecuador
pág. 1266
Role of Probiotics in Vaginal Infections
ABSTRACT
Vaginal infections are characterized by an overgrowth of microorganisms opportunistic and decreased
levels of Lactobacillus. Vaginosis is common in women of childbearing age, perimenopausal women,
women with polycystic ovary syndrome, pregnant women, and adolescents. Vaginosis is often
underestimated or misdiagnosed. Multiple studies mention that vaginosis detection tests should be
performed on all high-risk pregnancies, women with significant obstetric history such as premature
abortions, and those who suffer from tuberculosis, because they are a risk factor for the development of
abortions, premature rupture of membranes, choriomanionitis or preterm births. A challenge that is
becoming more and more common revolves around the resistance of the microorganisms that cause
vaginosis to the established treatments, generating recurrent and multi-resistant infections. For the
treatment of different vaginosis, antibiotics and antifungals are prescribed. Studies point out the
importance of prescribing antibiotics together with probiotics and thus avoiding dysbiosis in order to
avoid recurrence of vaginal infections. Probiotics must be administered in the necessary dose and time
so that they can generate a positive effect. More than 80% of Lactobacillus species must be present in a
probiotic to ensure adequate acid and bactericidal production to prevent microfilm formation. The
results of the use of probiotics will depend on the quality of the formula and the maintenance of the cold
chain.
Keywords: vaginal infections, vaginosis, probiotics, multi-resistance
Artículo recibido 10 abril 2024
Aceptado para publicación: 20 mayo 2024
pág. 1267
INTRODUCCION
Las vaginosis son una de las causas más comunes de flujo vaginal anormal en mujeres en edades
reproductivas y premenopausicas (Challa A, 2022). Dentro de ellas las que causan mayor molestia son
las vaginosis bacterianas (VB) que se caracterizan por un sobre crecimiento de bacterias oportunistas y
reducción en los niveles de Lactobacillus. Una flora vaginal saludable es dominada por Lactobacillus
con un 95 % del total de la flora bacteriana, sin embargo algunos estudios indican que algunas mujeres
sanas no existen dominancia de Lactobacillus. En los casos de VB los microorganismos coco gram
positivos y bacilos gram negativos dominan la flora bacteriana. Estas incluyen: especies de Prevotella,
Gardenella vaginales y Mobiluncus (Coudray MS, 2020).
La prevalencia de las VB oscila desde el 15 % al 30 % en mujeres no gestantes mientras que en las
mujeres embarazadas es más del 50 %. La prevalencia de infecciones vaginales varía en cada país y
continente, siendo los de menores recursos económicos quienes la padecen con mayor frecuencia. Una
alta incidencia se ha reportado en África, moderada prevalencia en Asia y baja en Finlandia, Australia
y Nueva Zelanda (Bautista CT, 2016). Factores culturales, sociales, económicos y ambientales juegan
un papel fundamental en la presencia e incidencia de las diferentes infecciones vaginales.
Adicionalmente existen diferencias en las técnicas de vigilancia utilizadas y es posible que las VB no
sea una enfermedad reportada por el sistema epidemiológico de cada país.
Las técnicas de diagnóstico varían en cada país y dependen de la habilidad, recursos y técnicas
implementadas por cada operador y laboratorio. Actualmente la prevalencia de las infecciones vaginales
se encuentra al aumento. Los factores de riesgo asociadas con alta prevalencia de las VB incluyen la
actividad sexual sin protección, uso frecuente de condones, duchas vaginales y diabetes (Challa A,
2022).
El enfoque para el diagnóstico y manejo de las VB pueden variar, aunque presenta una alta prevalencia
en diferentes países sigue siendo sub diagnosticada y no tomada con la seriedad del caso, lo cual hace
que las posibilidades e recibir un tratamiento adecuado sea lejano y así aumentar la morbilidad y
aumenta la posibilidad de contraer otras infecciones de transmisión sexual (ETS).
En estudios observacionales se ha encontrado que las duchas vaginales están asociadas con el aumento
de las infecciones vaginales debido a la alteración de la flora vaginal (Brotman RM, 2020).
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MATERIALES Y METODOS
Se realizó una revisión de la literatura en PubMed, Elsevier, Web of Science y Google Scholar para
identificar artículos que discutieran infecciones vaginales desde el año 2010 hasta el año 2024. Se
realizaron búsquedas mediante una combinación de palabras de texto, vaginosis bacteriana, beneficios
de probióticos en infecciones vaginales, resistencia antimicrobiana, alteración de flora vaginal. Nosotros
revisamos estudios publicados en idioma inglés en la gran mayoría y estudios con alto impacto en
español. Los artículos relevantes fueron analizados y presentados en la revisión.
RESULTADOS
Definición
Las infecciones ginecológicas se clasifican como infecciones altas y bajas. Las infecciones altas
incluyen la Enfermedad Pélvica Inflamatoria (EPI), la tuberculosis genital, entre otras. Las infecciones
bajas afectan a la vulva, vagina y cérvix. En este grupo encontramos vaginosis, vaginitis, tricomoniasis,
candidiasis, enfermedades de transmisión sexual conocidas tales como gonorrea, sífilis, herpes, chancro
(Norma, 2019).
Vaginosis
La vaginosis es una alteración de la flora vaginal normal. Se caracteriza por el crecimiento de alguna
bacteria que reside y es parte de la flora natural de la mucosa vaginal. Las mujeres al cursar con vaginosis
bacterianas se incrementa el riesgo de desarrollar infecciones de transmisión sexual (Kairys, 2023).
Vaginitis
La vaginitis es un proceso inflamatorio del epitelio vaginal y su tejido conectivo. Es una enfermedad
ginecológica común. La etiología puede ser por patógenos exógenos que ingresan al conducto vaginal
y causan alteraciones a nivel de la flora normal de la mucosa vaginal (Pan, 2023). La tricomoniasis es
una enfermedad de alta prevalencia a nivel mundial. Causada por Tricomona vaginalis, un parasito que
se transmite por contacto sexual (Norma, 2019).La candidiasis es una inflamación frecuente causada
por el desequilibrio de la flora normal del tracto vaginal. En la flora vaginal existen especies Candida
donde el más común es la Candida Albicans, que es el organismo causal de la misma. Cuando los
episodios son frecuentes se debe sospechar de Candida no albicans (Martínez-García, 2016).En la figura
I podemos observar la microbiota vaginal en las diferentes edades.
pág. 1269
Figura 1
Microbiota Vaginal en diferentes etapas de la vida. Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia.
Diagnóstico y tratamiento de las infecciones vulvovaginales. Prog Obstet Ginecol 2022;65:61-75.
Epidemiología
Durante toda su vida, las mujeres presentan por lo menos un cuadro de secreción vaginal de origen
infeccioso o inflamatorio. Esto quedó demostrado en un estudio realizado por Pan Zhengmei y sus
colaboradores en el año 2023 donde estudiaron a más de 15000 pacientes femeninas ambulatorias que
presentaron secreciones vaginales. Los resultados de dicho estudio fueron más del 50% de los casos
fueron infecciosos y aproximadamente el 45% fueron inflamatorios. (Pan et al., 2023)La vaginitis tiene
una prevalencia amplia entre 5 a 52%.
La candidiasis vaginal no cuenta con reportes epidemiológicos por lo que su incidencia no está del todo
clara. Sin embargo, se estima que aproximadamente el 15% de los casos reales son asintomáticos,
colonización en el 75 % de los casos y aproximadamente el 50% de la población femenina ha
experimentado al menos un cuadro confirmado de esta enfermedad (Gonçalves, 2015).
Implicaciones clínicas
Aunque las BV son consideradas como leves enfermedades, estas pueden estar asociadas a infecciones
uterinas y efectos sobre el embarazo que incluye parto prematuro o aborto espontáneo. Es común la
asociación infecciones vaginales con enfermedad pélvica inflamatoria, ETS severas incluidas la
Chlamidya trachomatis, Neisseria gonorrhoeae e incrementan el riesgo de la adquisición del virus de
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inmunodeficiencia humana (HIV) y papiloma humano (HPV). Las mujeres con VB pueden
experimentar una disminución en la calidad de vida (Coudray MS, 2020) (Bhavana AM, 2019).
Diagnóstico
El diagnóstico de los diferentes tipos de enfermedades vaginales no se puede determinar por la presencia
de signos y síntomas esto debido a que depende expresamente del personal médico que la determina. La
VB por lo general se diagnostica con los criterios de Amsel o Nugent mostrando una mayor especificada
y sensibilidad esta última (Workowski, 2021) .En la tabla I podemos encontrar los diferentes criterios y
puntajes asignados.
Tabla 1: Criterios para el diagnóstico de vaginitis bacteriana
Criterios de AMSEL
(Sensibilidad: 37% - especificidad 70%)
SCORE NUGENT
(Sensibilidad: 94% - especificidad 99%)
1. Flujo homogéneo lechoso que cubre las paredes
vaginales
2. Presencia de células clue detectadas por
microscopia
3. pH > 4.5 del flujo vaginal
4. Olor a pescado tras adición de 10% de KOH.
Concentración relativa de Lactobacillus:
▪ 0 a 3 es consistente con Lactobacillus
como microbiota vaginal
predominante
▪ 4-6 referente a microbiota intermedia
▪ 7 a 10 vaginosis bacteriana
Elaboración propia. Fuente: Workowski, K. A., Bachmann, L. H., Chan, P. A., Johnston, C. M., Muzny, C. A., Park, (2021).
Sexually Transmitted Infections Treatment Guidelines, 2021. MMWR. Recommendations and reports : Morbidity and
mortality weekly report. Recommendations and reports, 70(4), 1–187.
La candidiasis vulvovaginal suele ser diagnosticada clínicamente, ocasionando diagnósticos erróneos e
insuficientes que conducen a un tratamiento ineficaz sin resolución de la infección, por lo cual para un
diagnóstico preciso se recomienda pruebas de laboratorio confirmatorias como microscopia y cultivo de
hongos (Neal, 2022). La tricomoniasis suele detectarse mediante métodos convencionales como la
microscopía o preparaciones húmedas de flujo vaginal o uretral mediante la adición de solución salina,
evidenciando la presencia de microorganismos móviles (sensibilidad 50% - especificidad 70%) siendo
de gran importancia el tiempo entre la recolección y examen de la muestra, sin embargo se considera
como gold standard el cultivo del fluido genital tras 18-24 horas de incubación logrando una
sensibilidad de hasta el 80% comparado con la prueba anterior (J. Rodríguez-Granger, 2019).
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Tratamiento
Los antibióticos con el tratamiento de primera línea para los pacientes con VB. El màs común utilizado
es el metronidazol y clindamicina. Ellos pueden mejorar el 80 5 de los síntomas en todas la pacientes a
las 4 semanas posteriores a su uso. A pesar de que estos antibióticos son seguros pueden presentar
efectos adversos como nausea, vómito, y dolor abdominal. (Menard, 2021). La recurrencia de las VB
puede ocurrir en el 40 % a 50 % de casos después de 12 meses del uso del antibiótico. Otro impacto
asociado al uso de antibióticos es lo que ocurre con la flora vaginal y que en la gran mayoría de ocasiones
no es considerada. La disbiósis de la microbiota vaginal puede estar alterada posterior a un uso excesivo
de antibióticos. Los principios del tratamiento de la VB se basa en tres pilares: aliviar los síntomas
clínicos de los pacientes, reducir la tasa de recurrencia abordando los factores de riesgo y regenerar la
microbiota vaginal.
DISCUSION
La microbiota vaginal es un ecosistema intrínseco y dinámico que se encuentra constantemente en
fluctuaciones, durante el período menstrual y toda la vida de la mujer. Esta microbiota es afectada por
niveles de progesterona, estradiol, pH vaginal y factores inmunológicos. Un tracto genital femenino
saludable alberga una microbiota dominada por lactobacilos productores de ácido láctico y peróxido de
hidrógeno, que brindan protección contra las infecciones al mantener el pH bajo. La prevalencia de las
VB está en incremento debido a los múltiples cambios en los estilos de vida y excesivos usos de duchas
vaginales. El uso de tampones y copas menstruales incrementa el riesgo de VB.
Cambios en la composición vaginal de la microbiota puede guiar a infecciones vaginales, los cuales son
asociados a inflamaciones. Una microbiota vaginal saludable es dominada por especies del
Lactobacillus tales como: L. crispatus, L. gasseri, L. jensenii, y L. iners, en menor medida L.
acidophilus, L. brevis, L. delbrueckii, L. fermentum, L. mucosae, L. paracasei, L. plantarum, L.
reuteri, L. rhamnosusand L. vaginalis. Las vaginosis bacterianas es asociada con la disbiosis de la
microbiota vaginal donde el Lactobacilus son desplazados por bacterias anaeróbicas como:
Gardnerellavaginalis, Atopobiumvaginae, Prevotellaand Porphyromonas, Mobiluncusspp., Sneathia
(Leptotrichia) y Mycoplasma hominis (Bhavana AM, 2019).
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Uso de probióticos para regenerar la microbiota vaginal
El efecto del metronidazol / clindamicina combinada con probióticos para el tratamiento de infecciones
vaginales muestra múltiples evidencias positivas. Algunos de los estudios realizados con sus resultados
los mostramos en la Tabla II.
Tabla 2.
Autor
Resultados
Jeng et al
Los probióticos tienen un efecto significativo a corto
plazo en el tratamiento de infecciones vaginales comunes
en mujeres no embarazadas. Las intervenciones con
probióticos se asociaron significativamente con una
menor tasa de recurrencia de vaginitis
Li et al
Los probióticos pueden tener un efecto positivo en el
tratamiento de la VB. Se requieren más datos
Liu et al
En comparación con el tratamiento con probióticos a
corto plazo (<1 mes), el tratamiento con probióticos a
largo plazo (1-3 meses) produce resultados beneficiosos
y eficacia superiores en el tratamiento de la VB. En
comparación con los antibióticos, los probióticos
disminuyeron significativamente la tasa de recurrencia de
la VB
Chen et al
Los probióticos pueden desempeñar un papel positivo en
el tratamiento de la VB, pero se necesitan pruebas más
sólidas
VB: Vaginosis Bacteriana
Elaboración propia. Fuente : (Jeng H-S, 2020), (Li C, 2019), (Liu HF, 2022), (Chen R, 2022)
Los antibióticos pueden ser prescritos con probióticos para mejorar la disbiosis. En mujeres
embarazadas se debe administrar por alrededor de 2 semanas. Varios estudios muestran su seguridad e
eficacia, incluso reduciendo el riesgo de aborto. Mujeres que presentan infertilidad tubárica, muestran
una asociación alta de VB, la cuál podría ser una causa improtante en el 20 % -25 % de los pacientes
con infertilidad.En ocaciones se peude recomendar el uso profiláctico de probióticos en estás pacientes.
La tasa de recurrencia de VB es del 30% al final de 3 meses y casi del 50% al final de un año. La VB
recurrente puede requerir un tratamiento prolongado para devolver la flora vaginal a un ambiente normal
predominantemente dominado por lactobacilos (Bagnall P, 2017).
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CONCLUSIONES
Las infecciones vaginales son patología muy frecuentes que todas la mujeres alrededor el mundo
padecerá por lo menos alguna vez en su vida, en los últimos años se ha evidenciado una crecida
incidencia y prevalencia, esto debido a múltiples causas entre ellas, el excesivo uso de duchos vaginales,
uso de métodos anticonceptivos como el condón, tampones o copas vaginales, además de prácticas
sexuales con varias parejas. El uso de antibióticos sin criterio o diagnóstico específico aumenta la
resistencia bacteriana e incluso juegan un rol en el riesgo de aparición de infecciones vaginales debido
al cambio en la microbiota vaginal.
Los probióticos presentan muy buena evidencia en el apoyo de la incidencia de las infecciones vaginales,
pudiendo ser administrado conjuntamente, ante o después del tratamiento antibiótico, sin reportar
efectos adversos e incluso mostrando grandes beneficios, entre ellos la reducción de vaginosis
bacterianas, ayudando a la microbiota vaginal a mantener su flora normal y su pH bajo.
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