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La familia es la base fundamental de la sociedad y es primordial para el desarrollo social de los niños y
niñas, de hecho, como institución ejerce un papel fundamental en la dinámica internacional del ser
humano y la sociedad en la que se contextualiza, en otros términos, se puede decir que la influencia que
ejerce la familia en los niños es de gran motivación, ya que el vínculo familiar les permite sentirse más
confiados y entusiasmados por rendir académicamente. El acompañamiento y participación de los
padres en las instituciones es una necesidad prioritaria tanto para los niños y niñas como para la
comunidad educativa, participar en las actividades académicas de los niños es; opinar, intervenir en las
actividades educativas, estar informado sobre los procesos educativos de sus hijos, seguir ideas que
sean para el beneficio de los niños y niñas, de tal forma que muestren el interés por participar en su
proceso de formación. (Ortiz, K.M. 2021)
El lenguaje expresivo es el proceso neuropsicológico que permite la comunicación de los niños, la
adquisición de aprendizajes, la organización del pensamiento y la regulación del comportamiento, entre
otros. En educación infantil, se consolida el lenguaje oral expresivo que comienza con las primeras
expresiones en forma de balbuceos hasta la adquisición de expresiones más elaboradas entre los 2 y los
3 años de edad, cuando se produce la explosión del lenguaje, aumentando el léxico – semántico y los
elementos gramaticales (Alberts, 2016).
De esta forma el lenguaje es la capacidad propia que tiene todo ser humano para poder expresar
pensamientos e ideas, bien sea de forma oral o escrita, el lenguaje expresivo se comprende como esa
capacidad de máxima expresión, trasmitir un mensaje ya sea una frase o realizar un gesto. Y el trastorno
del lenguaje expresivo, es una alteración que se caracteriza por tener mejor apreciación en el lenguaje
receptivo, manifestando dificultades en la producción de sonidos del habla, tiempos verbales y en la
memorización de frases o palabras.
Teniendo en cuenta lo anterior, los niños con trastornos del lenguaje expresivo se enfrentan cada día a
desafíos que los amedranta y los limita en su rendimiento académico y social. En el departamento de
Córdoba, exactamente en el municipio de Tuchin en el Centro Educativo el Porvenir (Sede Nueva Vida)
ubicado en la zona rural. Se ha observado a niños en edades de 4 a 6 años del nivel prescolar, los cuales
presentan dificultades para comunicarse y comprender, no captan las sugerencias de la docente,
presentan dificultad en el lenguaje escrito, reconocen solo algunas vocales, no diferencian las figuras