EL CONSTRUCTIVISMO Y LA
IMPLEMENTACIÓN DE LA INTELIGENCIA
ARTIFICIAL EN EDUCACIÓN, PERSPECTIVA A
MEDIANO PLAZO
CONSTRUCTIVISM AND THE IMPLEMENTATION OF
ARTIFICIAL INTELLIGENCE IN EDUCATION, MEDIUM-TERM
PERSPECTIVE
Andrea Carolina Bauz Ruano
Autor Independiente - Ecuador
Ulises Rigoberto Guanga Inca
Autor Independiente - Ecuador
Johanna Estefanía Rosero Carrera
Autor Independiente - Ecuador
Jesús Emilio Caiza Oña
Autor Independiente - Ecuador
Martha Beatriz Guallasamin Guamán
Autor Independiente - Ecuador
pág. 3156
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v8i3.11539
El constructivismo y la implementación de la inteligencia artificial en
educación, perspectiva a mediano plazo
Andrea Carolina Bauz Ruano 1
cpcsem@hotmail.com
https://orcid.org/0009-0008-2330-7976
Autor Independiente
Ecuador
Ulises Rigoberto Guanga Inca
otilu100@hotmail.es
https://orcid.org/0009-0006-3413-8739
Autor Independiente
Ecuador
Johanna Estefanía Rosero Carrera
jecrosero@gmail.com
https://orcid.org/0009-0001-2798-9635
Autor Independiente
Ecuador
Jesús Emilio Caiza Oña
jemiliocaizao@gmail.com
https://orcid.org/0009-0005-6489-8360
Autor Independiente
Ecuador
Martha Beatriz Guallasamin Guamán
beamar.gg@gmail.com
https://orcid.org/0009-0008-6395-1969
Autor Independiente
Ecuador
RESUMEN
Este estudio investiga la integración de la inteligencia artificial (IA) en la educación desde una
perspectiva constructivista, con el objetivo de examinar cómo la IA puede personalizar el aprendizaje y
proporcionar retroalimentación adaptativa para mejorar la efectividad educativa. La metodología
empleada es cualitativa y descriptiva, basada en una revisión sistemática siguiendo las directrices
PRISMA y los criterios de verificación establecidos. La revisión incluyó tesis, artículos científicos y
documentos normativos. Los hallazgos revelan que la IA facilita la personalización del aprendizaje, la
evaluación continua y la colaboración social, promoviendo habilidades esenciales para el siglo XXI. Sin
embargo, también se identifican desafíos como el acceso equitativo a la tecnología y la necesidad de
equilibrar el uso de la IA con la intervención humana. El estudio concluye que, aunque la IA ofrece
oportunidades significativas para transformar la educación, su implementación debe abordarse con una
perspectiva crítica y equilibrada. Asegurar el uso efectivo y equitativo de la IA es esencial para
proporcionar una educación de calidad para todos.
Palabras Claves: constructivismo, inteligencia artificial en educación, aprendizaje
1
Autor Principal
Correspondencia:
pág. 3157
Constructivism and the implementation of artificial intelligence in education,
medium-term perspective
ABSTRACT
This study investigates the integration of artificial intelligence (AI) in education from a constructivist
perspective, with the objective of examining how AI can personalize learning and provide adaptive
feedback to enhance educational effectiveness. The methodology employed is qualitative and
descriptive, based on a systematic review following PRISMA guidelines and established verification
criteria. The review included theses, scientific articles, and regulatory documents. The findings reveal
that AI facilitates personalized learning, continuous assessment, and social collaboration, promoting
essential 21st-century skills. However, challenges such as equitable access to technology and the need
to balance AI use with human intervention are also identified. The study concludes that, although AI
offers significant opportunities to transform education, its implementation must be approached with a
critical and balanced perspective. Ensuring the effective and equitable use of AI is essential to providing
quality education for all
Keywords: constructivism, artificial intelligence in education, learning
Artículo recibido 20 abril 2024
Aceptado para publicación: 25 mayo 2024
pág. 3158
INTRODUCCIÓN
El constructivismo y la implementación de la IA en la educación son temáticas que requieren un análisis
profundo debido a los cambios sociales, educativos y tecnológicos recientes. Este estudio aborda cómo
la IA puede personalizar el aprendizaje dentro del marco constructivista, ofreciendo retroalimentación
y recursos adaptativos que complementen la enseñanza basada en la construcción activa del
conocimiento. También se consideran los desafíos técnicos, pedagógicos y éticos que surgen al integrar
la inteligencia artificial con el constructivismo, explorando cómo esta inmersión puede preparar a los
estudiantes para enfrentar los desafíos del siglo XXI.
En el contexto educativo actual, la combinación del constructivismo y la (IA) ofrece una oportunidad
única para transformar la forma en que los estudiantes adquieren y aplican conocimientos debido a que
genera experiencias personalizadas y adaptativas. Pues la IA puede analizar datos en tiempo real sobre
el proceso educativo ofreciendo una retroalimentación inmediata, así como, los recursos adaptados y
modificados a las necesidades específicas. Esto no solo proporciona un aprendizaje más eficaz y
significativo, sino que también permite a los educadores modificar los métodos pedagógicos para
atender a la diversidad de estilos y ritmos de aprendizaje en el aula.
Al respecto Toala Pilay et al (2023), con su estudio concluye que el uso de la IA en la educación
representa una oportunidad sin precedentes para que el ámbito educativo se ajuste a las tendencias
actuales en el uso de las tecnologías. En este contexto, tanto estudiantes como docentes deben actualizar
sus conocimientos para enfrentar los nuevos desafíos y aprovechar las herramientas disponibles que
mejoran las experiencias educativas, asegurando una enseñanza integral con IA. La implementación de
metodologías de enseñanza aprendizaje con un enfoque constructivista ha fomentado la participación
activa de los estudiantes en actividades teórico prácticas. Es así que, es esencial impulsar el uso de la IA
en las instituciones educativas con el objetivo de garantizar una educación inclusiva, equitativa y de
calidad. Por lo tanto, contribuye a la transformación digital y al desarrollo socioeconómico. Por su parte
Bardalez Castillo (2024), en su estudio sobre la educación primaria mediada con inteligencia artificial
desde la mirada docente concluye que la IA no sustituye al docente, sino que enriquece su trabajo,
requiriendo un equilibrio adecuado entre su uso y los métodos tradicionales de enseñanza. El
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seguimiento activo del progreso de los estudiantes y la retroalimentación inmediata son elementos
esenciales para aprovechar al máximo el potencial de la IA. Por lo tanto, este recurso promueve el
pensamiento crítico, motivando a cuestionar y verificar la información proporcionada por las
aplicaciones de la IA. También, aporta en formación profesional mediante cursos, tutorías y
comunidades de aprendizaje.
A criterio de Carbonell (2023), la utilización de la IA en el sector educativo ofrece oportunidades
revolucionarias para adaptarse a las tendencias tecnológicas emergentes. En este contexto, tanto los
estudiantes como los educadores deben innovar para enfrentar los desafíos y aprovechar las nuevas
herramientas disponibles, con la finalidad de mejorar las experiencias de enseñanza aprendizaje,
impulsando el desarrollo integral del entorno personal de aprendizaje. Por otro lado, refiere que es
evidente la manera de impartir conocimientos está cambiando significativamente, un fenómeno
estrechamente vinculado con la implementación de la IA en la educación. Por lo tanto, se hace prioritario
adoptar estrategias que fortalezcan el proceso formativo de las personas, consolidando una enseñanza
innovadora y efectiva. El objetivo del estudio está relacionado con analizar la integración de la
inteligencia artificial en el contexto educativo desde una perspectiva constructivista.
Los fundamentos teóricos están relacionados con lo expresado por Cabanelas Omil (2019) quien refiere
que la IA se describe como la habilidad de los sistemas informáticos, redes de computadoras o robots
controlados por ordenadores para llevar a cabo actividades y tareas que generalmente se asocian a la
inteligencia humana. En el ámbito educativo, este recurso promueve avances y optimiza aspectos,
procesos y procedimientos en el trabajo docente Cruz et al. (2023). En la práctica, el uso de esta
tecnología se refleja en una amplia gama de herramientas y aplicaciones que personalizan la experiencia
de aprendizaje, adaptándose a las necesidades específicas de cada estudiante.
Un componente adicional es el aprendizaje autónomo, que permite a los sistemas analizar datos para
identificar patrones y adaptar la entrega de contenidos de forma individualizada, ofreciendo así rutinas
de aprendizaje que se ajustan a los ritmos y estilos de cada educando. Además, la IA facilita la evaluación
continua y formativa al proporcionar retroalimentación instantánea sobre el aprendizaje y el rendimiento
estudiantil. Eso es posible porque los sistemas pueden analizar respuestas, identificar fortalezas y
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debilidades, y ofrecer recomendaciones para mejorar el desempeño académico Vera (2023).
Por su parte Berni Moran y Olivero Sanchez (2019), el constructivismo es una teoría que sostiene que
el individuo adquiere conocimientos y comprende los significados de las cosas mediante las experiencias
e ideas. Es decir, el sujeto de aprendizaje se apropia del conocimiento siempre y cuando realice acciones
que le permitan comparar situaciones nuevas con las que ya vivió o conoció. Del mismo modo, este
modelo pedagógico, resalta que el educando se convierte parte activa del proceso de aprendizaje cuando
contrasta los conocimientos previos con los nuevos. Esta transición ocurre cuando el individuo, de
manera autónoma investiga o lleva a cabo una tarea específica, lo que le permite integrar tanto
conocimiento teórico como prácticos Ordoñez et al., (2020).
Además, Coll como se cita en Tigse Parreño (2019), el constructivismo es considerado como un conjunto
articulado de principios que permiten identificar problemas y articular diversas soluciones. En este
constructo teórico, los docentes proporcionan a los estudiantes las estrategias necesarias para fomentar
un aprendizaje significativo, interactivo y dinámico, estimulando la curiosidad mediante procesos
investigativos. Igualmente, evita la enseñanza tradicional basada en la memorización y la imposición de
contenidos, que tiende a generar estudiantes pasivos. Por otro lado, refiere que, la finalidad del proceso
educativo debe alinearse con los procesos de construcción del conocimiento para promover la
metacognición y un aprendizaje activo.
Por su parte Bolaño Muñoz (2020), argumenta que el constructivismo permite a los individuos aprender
del entorno que les rodea, explicando cómo la inteligencia, el ambiente y hasta los genes influyen en la
percepción del mundo. Además, da a conocer que es importante incorporar la información recibida del
entorno, profundizando para que el cerebro la decodifique y entienda la realidad experimentada, es decir
perfeccionando las ideas.
Según Piaget, 1973), el constructivismo aboga por diversos principios en la educación. Esto incluye la
participación activa de los estudiantes en su propio aprendizaje, la creación del conocimiento a través
de experiencias significativas, y el aprendizaje contextualizado de un entorno social. También, se pone
énfasis en la evaluación formativa, fomentando la responsabilidad y la autonomía de los estudiantes, así
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como la reflexión y el aprendizaje situado, asegurando que el conocimiento adquirido esté relacionado
con situaciones reales.
De este modo, los principios educativos propuestos pueden ser potenciados mediante el uso de la
inteligencia artificial. En relación con la participación activa de los estudiantes en su propio aprendizaje,
Baltazar (2023) destaca que la inteligencia artificial ha sido utilizada en diversos contextos durante
varios años, proporcionando herramientas que facilitan tanto el aprendizaje autónomo como el
colaborativo. Entre estos recursos se encuentran las presentaciones colaborativas, que permiten la
visualización de diferentes tipos de datos en pantalla, facilitando el intercambio de información entre
grupos de estudiantes. Google Docs, por ejemplo, es un recurso destacado, ya que permite compartir y
editar hojas de cálculo, textos y otros documentos con usuarios de distintos entornos.
Por otro lado, los sistemas de apoyo son recursos que agilizan el proceso de toma de decisiones mediante
representaciones gráficas. Herramientas como Mentimeter, Quizziz y Kahoot, Google Form permiten la
creación de encuestas, pruebas, lecciones, exámenes y actividades tanto individuales como grupales.
Además, los recursos de groupware facilitan la gestión de la comunicación a través de
audioconferencias, videoconferencias y chat. Aplicaciones como WhatsApp, Zoom y Google Meet son
fundamentales para impulsar el aprendizaje colaborativo, ya que están orientadas a un uso pedagógico
y didáctico.
El uso de la inteligencia artificial en la educación no solo facilita la personalización del aprendizaje,
adaptándose a las necesidades específicas de cada estudiante, sino que también fomenta un ambiente de
aprendizaje más dinámico e interactivo. Al integrar estas herramientas tecnológicas, los educadores
pueden crear experiencias de aprendizaje más significativas y efectivas, promoviendo una mayor
participación y colaboración entre los estudiantes.
En definitiva, la implementación de la inteligencia artificial en el contexto educativo representa una
evolución significativa en la forma en que se imparte y se recibe la educación. Al proporcionar una
amplia gama de herramientas y aplicaciones diseñadas para mejorar la eficiencia y la efectividad del
proceso educativo, la IA no solo optimiza los resultados académicos, sino que también prepara a los
estudiantes para enfrentar los desafíos del futuro con habilidades y competencias reforzadas.
pág. 3162
En relación a la creación del conocimiento a través de experiencias significativas, es fundamental tener
en cuenta los criterios establecidos por Adams y Turner (2019), quienes señalan que la IA brinda a los
estudiantes la posibilidad de sumergirse en contextos auténticos mediante el uso de generadores de texto,
simulaciones y entornos virtuales de aprendizaje. Esta metodología permite un aprendizaje basado en la
práctica y el ensayo - error, lo que posibilita afianzar los conocimientos antes de ingresar a una etapa
escolar y/o al entorno laboral. Este enfoque se alinea al principio constructivista relacionado con que, el
conocimiento se construye a través de experiencias significativas, ya que permite que los educandos
aprendan mediante la interacción activa y la reflexión sobre los errores y aciertos en un entorno
controlado.
Según Clark (2022) destaca que la simulación virtual, apoyada por la inteligencia artificial, está
revolucionando la adquisición de habilidades prácticas al ofrecer un entorno seguro para la práctica y la
experimentación. Esta tecnología no solo facilita la comprensión de conceptos teóricos, sino que
también permite a los estudiantes aplicar estos conocimientos en situaciones simuladas promoviendo la
mayor retención y entendimiento. Al practicar en un ambiente simulado, los estudiantes pueden
enfrentarse a situaciones complejas y variadas, obteniendo una comprensión más profunda y aplicada
de los contenidos, lo que a su vez contribuye a un aprendizaje significativo y duradero.
Además, Green y Hall (2021) subrayan la importancia de la inteligencia artificial en el análisis de
diversos datos, lo que permite a los estudiantes abordar problemas del mundo real con una base
informada. Este enfoque no solo mejora la capacidad de resolución de problemas, sino que también
fomenta un pensamiento crítico y analítico. Es así que, al trabajar con datos reales y relevantes, los
estudiantes hacen conexiones más profundas entre la teoría y la práctica, lo que enriquece su aprendizaje
y lo hace más relevante para su vida diaria y su carrera profesional.
Este avance tecnológico representa una transformación en la educación, promoviendo una formación
integral y adaptativa que responde a las necesidades y demandas del siglo XXI. Al utilizar la inteligencia
artificial para crear experiencias de aprendizaje ricas y relevantes, los educadores pueden asegurar que
el conocimiento adquirido sea duradero y aplicable en múltiples contextos, beneficiándose en su
desarrollo académico y profesional.
pág. 3163
Con respecto al aprendizaje contextualizado de un entorno social Silva Hernández y Martínez Prats
(2022), destacan que, mediante algoritmos de inteligencia artificial, estas herramientas pueden conectar
a estudiantes con intereses similares, promoviendo la colaboración en proyectos conjuntos y el
intercambio de ideas entre pares. Esta interacción fomenta una experiencia de aprendizaje enriquecedora
y colaborativa, contribuyendo al desarrollo personal y académico de los estudiantes. Este enfoque se
alinea estrechamente con el principio del aprendizaje contextualizado dentro de un entorno social, una
de las bases del constructivismo. Al crear comunidades de aprendizaje, la inteligencia artificial facilita
la construcción de conocimientos colectivos y el desarrollo de habilidades sociales y emocionales, como
la empatía y la comunicación efectiva, esenciales para el aprendizaje integral.
La IA también juega un papel crucial en fomentar la responsabilidad y la autonomía de los estudiantes,
proporcionar herramientas y recursos que permiten a los estudiantes controlar su propio ritmo y estilo
de aprendizaje, la IA facilita un entorno donde los estudiantes pueden tomar decisiones informadas sobre
su proceso educativo Guilherme (2019) Aplicaciones personalizadas y plataformas de aprendizaje
adaptativo ofrecen retroalimentación en tiempo real, ayudando a los estudiantes a identificar sus
fortalezas y áreas de mejora Niu et al. (2024). Esta capacidad de autoevaluación y ajuste constante
promueve un sentido de responsabilidad hacia su propio aprendizaje, alentando a los estudiantes a ser
más independientes y proactivos Zimmerman y Schunk (2019)
Además, la inteligencia artificial promueve la reflexión, una competencia vital para el aprendizaje
profundo Zawacki Richter (2019). Al utilizar herramientas que permiten a los estudiantes revisar y
analizar su propio trabajo, la IA facilita un ciclo continuo de autoevaluación y mejora Seo (2021). Por
ejemplo, las plataformas de tutoría virtual pueden ofrecer análisis detallados de las respuestas de los
estudiantes, destacando patrones y tendencias en su desempeño. Esta retroalimentación no solo ayuda a
los estudiantes a corregir errores, sino que también les invita a reflexionar sobre sus estrategias de
aprendizaje y pensamiento crítico, desarrollando una comprensión más profunda de los conceptos
estudiados.
El aprendizaje situado, que se refiere a la adquisición de conocimientos en contextos auténticos y
relevantes, también se ve potenciado por la inteligencia artificial (Niu et al., 2024). Mediante el uso de
simulaciones, entornos virtuales y experiencias de aprendizaje inmersivas, los estudiantes pueden
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aplicar teorías y conceptos en escenarios realistas. Esto no solo hace que el aprendizaje sea más
significativo y aplicable, sino que también prepara a los estudiantes para enfrentar situaciones reales en
su vida profesional y personal Aslan (2019). La IA, por tanto, no solo enriquece el contenido educativo,
sino que también transforma la manera en que los estudiantes interactúan con el conocimiento,
fomentando una educación más integral y adaptativa. La incorporación de la IA en el ámbito educativo
es un avance que, sin duda, transforma la forma en que enseñamos y aprendemos. Sin embargo, es
fundamental evaluar críticamente tanto sus beneficios como sus posibles desventajas. La capacidad de
la IA para personalizar el aprendizaje y proporcionar retroalimentación en tiempo real representa una
oportunidad para mejorar el rendimiento académico y la motivación de los estudiantes. No obstante,
esta tecnología también puede generar una dependencia excesiva, donde los estudiantes podrían volverse
pasivos receptores de información en lugar de participantes activos en su propio proceso de aprendizaje.
El uso de la IA debe ir acompañado de una reflexión profunda sobre cómo equilibrar la tecnología con
la intervención humana. Los docentes deben seguir desempeñando un papel crucial, no solo como
facilitadores de conocimiento, sino también como guías que fomentan el pensamiento crítico y la
resolución de problemas. La interacción humana en el proceso educativo es insustituible, ya que
proporciona contextos y matices que los algoritmos de IA aún no pueden replicar completamente.
La implementación de la IA en la educación plantea cuestiones éticas y de equidad. Es esencial asegurar
que todos los estudiantes tengan acceso equitativo a estas tecnologías y que su uso no amplíe la brecha
digital existente. También se deben considerar las implicaciones de privacidad y seguridad de los datos
recopilados por las herramientas de IA, garantizando que se protejan los derechos de los estudiantes.
Finalmente, aunque la inteligencia artificial tiene el potencial de revolucionar la educación, es vital
abordarla con una perspectiva crítica y equilibrada. Integrar la IA de manera efectiva requiere no solo
inversiones tecnológicas, sino también una formación continua de los educadores y un enfoque centrado
en el estudiante que promueva tanto el aprendizaje autónomo como la interacción significativa. Solo así
se podrá aprovechar al máximo los beneficios de la IA, minimizando sus posibles riesgos y asegurando
una educación de calidad para todos.
pág. 3165
METODOLOGÍA
El enfoque metodológico adoptado es cualitativo y se caracteriza por su naturaleza descriptiva. La
investigación incluyó una revisión sistemática de tesis de maestría y doctorado, así como repositorios
de revistas científicas y documentos legales y normativos, siguiendo las directrices de PRISMA-SCR.
Los términos utilizados en la búsqueda incluyeron “constructivismo”, “aprendizaje”, “inteligencia
artificial”, “aplicaciones de IA”, “Aprendizaje con IA”. Se consultaron diversas fuentes como los
repositorios de Educational Tecnology, Repositorios Universitarios, Revista Espacios, Revista Educare,
Mercado de Negocios, Humanities, Revista Andina, Transformar, entre otros, abarcando un periodo de
los últimos diez años.
Se aplicaron los criterios PICO y la lista de verificación PRISMA como herramientas clave en el
proceso. Los criterios PICO permitieron formular cuatro preguntas de investigación relevantes, mientras
que la lista de verificación PRISMA garantiza la calidad y claridad del análisis sistemático. Este proceso
incluyó la exploración de la literatura, la selección de estudios pertinentes, la recopilación de datos, la
síntesis de la información y la presentación de los resultados. De este modo, estas herramientas
proporcionan un enfoque metodológico riguroso y objetivo, facilitando una evaluación precisa.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Del presente estudio se obtienen los siguientes resultados:
La IA permite la personalización del aprendizaje adaptándose a las necesidades específicas de cada
estudiante, lo que facilita una educación más efectiva y significativa (Bardalez Castillo, 2024).
Herramientas como generadores de texto, simulaciones y entornos virtuales de aprendizaje ofrecen
contextos auténticos para que los estudiantes se sumerjan en experiencias prácticas, alineándose con los
principios constructivistas de aprendizaje significativo (Adams y Turner, 2019).
La retroalimentación y evaluación continua proporcionada por la IA es otro resultado destacado. La IA
ofrece retroalimentación instantánea sobre el rendimiento de los estudiantes, permitiendo una
evaluación formativa constante que identifica fortalezas y áreas de mejora (Toala Pilay et al., 2023).
Este proceso no solo optimiza el rendimiento académico, sino que también fomenta la reflexión y el
autoaprendizaje, aspectos cruciales en el enfoque constructivista. Se ha observado un aumento en la
pág. 3166
colaboración y el aprendizaje social mediante el uso de algoritmos de IA, que conectan a estudiantes
con intereses similares, promoviendo proyectos conjuntos y el intercambio de ideas. Esta interacción
enriquece el aprendizaje individual y fortalece las habilidades sociales y emocionales, esenciales para
un aprendizaje integral (Silva Hernández y Martínez Prats, 2022).
La IA también ha demostrado su capacidad para fomentar la responsabilidad y autonomía de los
estudiantes, proporcionando herramientas que permiten a los estudiantes controlar su propio ritmo y
estilo de aprendizaje. Las aplicaciones personalizadas y plataformas de aprendizaje adaptativo ofrecen
retroalimentación en tiempo real, ayudando a los estudiantes a identificar sus fortalezas y áreas de
mejora. Esta capacidad de autoevaluación y ajuste constante promueve un sentido de responsabilidad
hacia su propio aprendizaje, alentando a los estudiantes a ser más independientes y proactivos
(Guilherme, 2019; Niu et al., 2024). La implementación de la IA en la educación plantea desafíos
importantes, como la equidad en el acceso a las tecnologías, la privacidad y seguridad de los datos, y la
necesidad de equilibrar la tecnología con la intervención humana. Es esencial asegurar que todos los
estudiantes tengan acceso equitativo a estas tecnologías y que se protejan los derechos de los estudiantes
en cuanto a la privacidad de los datos recopilados (Cabanelas Omil, 2019; Cruz et al., 2023).
La inteligencia artificial representa una herramienta poderosa para transformar la educación, pero su uso
debe ser equilibrado con una fuerte intervención humana. Los docentes siguen siendo cruciales como
facilitadores de conocimiento y guías en el proceso educativo. La interacción humana proporciona
contextos y matices que los algoritmos de IA no pueden replicar completamente, y es vital que los
docentes fomenten el pensamiento crítico y la resolución de problemas junto con el uso de tecnologías
avanzadas (Clark, 2022; Green y Hall, 2021).
Finalmente, la combinación del constructivismo y la inteligencia artificial en la educación ofrece
oportunidades significativas para mejorar el aprendizaje personalizado, la retroalimentación continua y
la colaboración entre estudiantes. Sin embargo, es crucial abordar estos avances con una perspectiva
crítica y equilibrada, asegurando que la tecnología se utilice de manera efectiva y equitativa, y que los
docentes continúen desempeñando un papel fundamental en el proceso educativo. La integración exitosa
de la IA en la educación requiere inversiones tecnológicas, formación continua de los educadores y un
pág. 3167
enfoque centrado en el estudiante, promoviendo tanto el aprendizaje autónomo como la interacción
significativa para asegurar una educación de calidad para todos.
Ilustraciones, Tablas, Figuras
Ilustración 1. Registro identificado mediante la búsqueda en base de datos.
Nota: Elaboración propia (2024)
Tabla 1. Lista de verificación de evaluación de calidad del documento.
QA1
¿El documento aborda la personalización del
aprendizaje mediante la IA?
(+1) Sí/(+0) No
QA2
¿Se analizan los beneficios de la retroalimentación
continua proporcionada por la IA?
(+1) Sí/(+0) No
QA3
¿Se considera la promoción de la colaboración y el
aprendizaje social a través de la IA?
(+1) Sí/(+0) No
QA4
¿Se discuten los desafíos y la necesidad de equilibrio
entre la IA y la intervención humana?
(+1) Sí/(+0) No
Nota: Elaboración propia (2024)
pág. 3168
CONCLUSIONES
Del estudio se puede concluir:
La integración del constructivismo y la inteligencia artificial en la educación permite personalizar el
aprendizaje, adaptándose a las necesidades individuales de los estudiantes y mejorando la efectividad
educativa.
La inteligencia artificial facilita la colaboración y el aprendizaje social, promoviendo el desarrollo de
habilidades sociales y emocionales que son esenciales para un aprendizaje integral y constructivista.
La inteligencia artificial potencia la autonomía y responsabilidad de los estudiantes, proporcionando
herramientas para la autoevaluación y el aprendizaje adaptativo, fomentando así un mayor compromiso
y proactividad en su educación.
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