LA INTELIGENCIA EMOCIONAL: UNA
ESTRATEGIA TRANSFORMADORA EN LA
ADQUISICIÓN COMPETENCIAS
EMOTIONAL INTELLIGENCE:
A TRANSFORMATIVE STRATEGY IN THE
ACQUISITION OF COMPETENCIES
Anyela Yicel Sánchez Imbachi1
Corporación Universitaria Minuto de Dios, Colombia
Diana Mylena Agudelo
Corporación Universitaria Minuto de Dios, Colombia
Nidia Carolina Jaya Camacho
Corporación Universitaria Minuto de Dios, Colombia
Norma Luz Lozano Márquez
Corporación Universitaria Minuto de Dios, Colombia
Yaneth Ñañez Piamba
Corporación Universitaria Minuto de Dios, Colombia
pág. 6229
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v8i3.11821
La Inteligencia Emocional: Una Estrategia Transformadora en la
Adquisición Competencias
Anyela Yicel Sánchez Imbachi1
anyela.Sanchez-i@uniminuto.edu.co
https://orcid.org/0009-0008-0590-8145
Corporación Universitaria Minuto de Dios
Colombia
Diana Mylena Agudelo
diana.agudelo-my@uniminuto.edu.co
https://orcid.org/0009-0006-8463-9523
Corporación Universitaria Minuto de Dios
Colombia
Nidia Carolina Jaya Camacho
nidia.jaya@uniminuto.edu.co
https://orcid.org/0009-0000-7599-7616
Corporación Universitaria Minuto de Dios
Colombia
Norma Luz Lozano Márquez
norma.lozano-m@uniminuto.edu.co
https://orcid.org/0009-0006-5649-0901
Corporación Universitaria Minuto de Dios
Colombia
Yaneth Ñañez Piamba
ynanezpiamb@uniminuto.edu.co
https://orcid.org/0009-0006-3150-3884
Corporación Universitaria Minuto de Dios
Colombia
RESUMEN
A partir del proyecto 'factores que influyen en la deficiencia en la adquisición de competencias de
estudiantes de secundaria y media en Colombia' se identificó que la inteligencia emocional es uno de
los factores que incide en este proceso formativo, especialmente cuando se trata de tomar decisiones,
autorregular la motivación, resolver problemas y fomentar sanas relaciones en el aula. Para su desarrollo
se tiene como objetivo principal analizar la importancia de la inteligencia emocional en la adquisición
de la competencia lectora, matemática y científica de estudiantes de secundaria de la Institución
Educativa San Vicente Sede Silvania del municipio de Isnos Huila. Por tanto, se sigue la línea de la
investigación descriptiva y enfoque cualitativo, donde se utilizó como instrumento para el análisis de
datos el cuestionario virtual y recopilación de fuentes bibliográficas primarias y secundarias,
estrechamente vinculadas a la temática. Los participantes fueron 56 estudiantes del grado octavo,
décimo y once, quienes corresponden al 2,85% de la muestra total del estudio de maestría. Dentro de
los resultados se evidencia que un estudiante cuando es emocionalmente inteligente alcanza mejores
resultados académicos, manteniendo su concentración, motivación e interés, también es capaz de
controlar el estrés y ansiedad en situaciones conflictivas. Todo esto depende exclusivamente de la
función formadora que adopta tanto la familia como escuela, en el cual se articula un trabajo en conjunto
para alcanzar el máximo aprendizaje del educando.
Palabras claves: inteligencia, sentimiento, habilidad, estudiante, motivación
1 Autor principal
Correspondencia: anyela.Sanchez-i@uniminuto.edu.co
pág. 6230
Emotional Intelligence: A Transformative Strategy in the Acquisition
of Competencies
ABSTRACT
From the project 'factors that influence the deficiency in the acquisition of competencies of high school
and middle school students in Colombia' it was identified that emotional intelligence is one of the factors
that affect this formative process, especially when it comes to making decisions, self-regulating
motivation, solving problems and promoting healthy relationships in the classroom. For its
development, the main objective is to analyze the importance of emotional intelligence in the
acquisition of reading, mathematical and scientific competence of high school students of the San
Vicente Educational Institution, Silvania Branch, in the municipality of Isnos Huila. Therefore, it
follows the line of descriptive research and qualitative approach, where the virtual questionnaire and
the collection of primary and secondary bibliographic sources, closely linked to the subject, were used
as instruments for data analysis. The participants were 56 students from the eighth, tenth and eleventh
grades, who correspond to 2.85% of the total sample of the master's study. The results show that when
a student is emotionally intelligent, he/she achieves better academic results, maintaining his/her
concentration, motivation and interest, and is also capable of controlling stress and anxiety in conflictive
situations. All this depends exclusively on the formative function adopted by both the family and the
school, in which a joint work is articulated to achieve the maximum learning of the student.
Keywords: intelligence, feeling, ability, student, motivation
Artículo recibido 20 mayo 2024
Aceptado para publicación: 24 junio 2024
pág. 6231
INTRODUCCIÓN
Actualmente los resultados en las pruebas estandarizadas a nivel nacional e internacional no han sido
muy alentadores, donde se denota que los estudiantes carecen de habilidades de comprensión lectora,
matemáticas y científicas, desencadenando una preocupación para las instituciones, especialmente para
los docentes quienes son los encargados de liderar los procesos de enseñanza-aprendizaje. Con esto, se
descubre que la inteligencia emocional es un factor que incide en el desarrollo y potenciamiento de las
competencias, en el cual se conecta la parte cognitiva con la emocional para encontrar su equilibrio y
operar con éxito en cada fase académica.
La familia es un componente clave para sus hijos, puesto que en este entorno se cultivan las bases para
enfrentarse con su entorno social de una manera responsable y consciente. Un estudiante que recibe
estímulos de afecto, apoyo, seguridad y motivación constante en un entorno saludable, posee mayores
capacidades para relacionarse, aprender y combatir efectivamente los obstáculos que impiden su
desarrollo. Esto indica que tiene menos dificultades para asumir su rol de protagonista en la educación.
Las instituciones en compañía de los docentes llegan a la vida del niño para complementar su formación
y fortalecerla a través de acciones pedagógicos en coherencia al trabajo que se ha venido realizando
desde casa. Inevitablemente la familia o cuidadores deben continuar con su función formadora para
articular un trabajo en conjunto con la escuela, a fin de alcanzar mejores resultados y no dejar solamente
la responsabilidad a los educadores.
Es importante en los planes de estudio incorporar con mayor relevancia la educación emocional,
convirtiéndose una necesidad para promover nuevas formas de aprender. López (2023) menciona que
el padre de la inteligencia emocional es Daniel Goleman, quien la define como una capacidad del ser
humano para controlar y responder a diversas situaciones de su cotidianidad, por ende, el estudiante no
solamente requiere de una formación intelectual, sino que, a su vez, demanda de una formación integral
para establecer una estabilidad emocional y cognitiva que aporta significativamente a su desarrollo. En
este contexto, el docente más que preocuparse por facilitar contenidos y recargar sus estudiantes de
información, es necesario que oriente actividades para identificar y controlar las emociones tanto
propias como ajenas.
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Es relevante esta investigación en el campo educativo porque permite una mejor comprensión de la
importancia de educar en las emociones para lograr la adquisición de competencias básicas para la vida,
en un ambiente de aprendizaje que impulsa al estudiante a estar motivado y seguro de sí mismo a la
hora de interactuar con su entorno, docentes y compañeros. Avanzar en torno a la calidad educativa
exige de una modificación en la manera como se viene orientando la enseñanza, teniéndose en cuenta
la multidimensionalidad del ser humano.
Con todo esto, se direcciona la investigación hacia el análisis de la importancia de la inteligencia
emocional en la adquisición de la competencia lectora, matemática y científica de estudiantes de
secundaria de la Institución Educativa San Vicente Sede Silvania del municipio de Isnos Huila.
MARCO TEÓRICO
Se reconoce la inteligencia emocional como un requisito de la educación, donde el docente la utiliza
para fortalecer sus prácticas pedagógicas y alcanzar mejores resultados en el estudiante, desde un
proceso donde se vincula la dimensión cognitiva y emocional para tener un mejor dominio a la hora de
adquirir competencias. Hoy en día se puede decir que existe la necesidad de una formación docente en
esta área, pues muchos no se encuentran en la capacidad de educar en las emociones, evidenciándose
situaciones de estrés, ansiedad y depresión en el contexto escolar, concretamente en secundaria. En
Chile se implementó una propuesta de intervención en todos los niveles formativos que se orientan en
comprender su importancia y beneficios en la vida educativa del estudiante, generándose prácticas
transformadoras para disminuir los índices de acoso escolar y desde luego, un mejoramiento
significativo en los procesos formativos (Costa et al., 2021).
Ahondando en la problemática de la presente investigación, claramente en los últimos años las
competencias evaluadas en los estudiantes de secundaria en pruebas internas y externas muestran
resultados bajos. Según Castillo y Portilla (2020) esto es influenciado por el factor económico, social,
educativo, familiar y emocional, donde inevitablemente surgen situaciones de desigualdad al
compararse con otros países que se encuentran en mejores condiciones. Aunque Colombia es un país
de derechos y la inteligencia emocional sea considerada en la Ley 115 de 1994, Ley 1013 de 2006, Ley
1098 de 2006 y otras, aun no es tan relevante en las actividades escolares que se desarrollan día a día
en el aula.
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Como garantes del cumplimiento de los derechos de los niños y jóvenes se encuentra la UNICEF
quienes en los últimos meses lanzaron la campaña ´abraza tu mente: de salud mental sí hablamos´, con
el objetivo de encontrar el bienestar emocional del estudiante, en un entorno participativo y agradable.
Así pues, se brinda la oportunidad de conocer de cerca todas aquellas situaciones emocionales que
afectan la adquisición de competencias, donde se rompe con el silencio y se promueve la confianza en
sí mimo (Vallejo, 2023). Esta propuesta es bastante innovadora, precisamente porque brinda una voz
de aliento a los jóvenes que se encuentran atravesando situaciones mentales difíciles.
El factor familiar y educativo juegan un papel irreversible en el desarrollo de las habilidades,
conocimientos y talentos en los jóvenes, puesto que en estos entornos se prepara para la vida y de esto
depende el éxito de su desempeño.
De acuerdo con Goñi et al. (como se citó en Pérez et al., 2022) los estudiantes de secundaria se
encuentran “en el periodo transitorio hacia la adultez, en el que los y las adolescentes comienzan a
experimentar numerosos cambios a nivel físico, emocional, social y psicológico, propiciando las
características variaciones en las actitudes, comportamiento, pensamiento e incluso motivaciones” (p.
127). La regulación de las emociones es una característica elemental que debe alcanzar el estudiante
para obtener un optimo desarrollo, siendo capaz de avanzar sin verse afectado por las emociones
positivas o negativas, ya que tienen la habilidad de controlar los diversos impulsos que experimenta a
lo largo de su vida.
Desde una revisión exhaustica a los resultados SABER, ICFES y PISA de los últimos años en Colombia,
se denota un panorama preocupante porque los estudiantes no alcanzan a desarrollar sus habilidades.
Con ello, “el país se ha debatido entre el dilema de la cobertura y la calidad y los esfuerzos por mejorar
la desigualdad entre los niveles lo ha llevado a mejorar la cobertura, pero esto no se evidencia en los
desempeños” (Sanabria et al., 2020, p. 250). Una de las debilidades del sistema educativo público son
las escasas estrategias que se trabajan con los estudiantes sobre la inteligencia emocional, mientras que
en el sector privado si las implementan con frecuencia en el aula, consiguiendo mejores resultados en
estas pruebas.
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Conceptualización y teoría
Desde una aproximación conceptual en este proceso investigativo se contempla la necesidad de ahondar
en las particularidades de inteligencia emocional, educación, competencias, motivación y desarrollo
integral.
Inteligencia emocional: Se caracteriza por ser una competencia del ser humano para gestionar
correctamente las emociones positivas y negativas que experimenta a lo largo de su vida. Desde el punto
de vista Fernández y Cabello (2020) es una habilidad para percibir, valorar y expresar los sentimientos,
promoviéndose el crecimiento intelectual del estudiante. Concretamente es una parte del ser y no puede
ir aislada de los procesos formativos, ya que de esta depende en gran medida el éxito académico.
Educación: es un proceso que experimenta la persona en una faceta de su vida para mejorar sus
condiciones de vida, adquirir conocimiento y competencias útiles para crecer a nivel personal y social.
Así mismo, se considera una ciencia teórica y práctica que se “distingue por ser procesual, por medio
de la cual se transmite a los individuos una serie de conocimientos, comportamientos, cultura, valores,
y formas que permite al individuo desenvolverse en la sociedad” (Hurtado, 2020, p. 178). Frente a esta
premisa la educación es un pilar esencial para seguir avanzando en el desarrollo del territorio.
Competencias: son todas aquellas destrezas adquiridas por el estudiante para desenvolverse en
diferentes contextos. A juicio de Mego y Saldaña (2021) son aquellos conocimientos y habilidades
generales que se desarrollan en función de la comprensión lectora, resolución de problemas
matemáticos e interpretación de textos científicos. Claramente son competencias necesarias que miden
la calidad de la educación, siendo una prioridad para el docente orientar su quehacer pedagógico.
Motivación: es una sensación positiva que percibe el estudiante para seguir avanzando y alcanzar
excelentes resultados en las metas que se proponga. Por tanto, “es de vital importancia para el
aprendizaje de los educandos, porque constituye el punto de partir para aprender, crea el impulso de
actuar y hace posible el aprendizaje” (Soledispa et al., 2020, p. 1). La motivación depende en gran parte
del contexto donde se desenvuelve el niño, incentivándolo a seguir adelante a pesar de las dificultades.
Desarrollo integral: es un término muy utilizado en la educación que alude a la realización del
estudiante en todas sus dimensiones. Yenchong y Barcia (2020) indican que es una formación que busca
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desarrollar y potenciar todas las áreas del individuo mediante un proceso continuo. Todo esto depende
de las oportunidades de aprendizaje que se le facilitan al niño para avanzar progresivamente.
Teoría de las emociones
Vincular las emociones en las instituciones educativos no debe ser una obligación sino una necesidad
para seguir avanzando en la tan anhelada calidad, donde los estudiantes independientemente que
pertenezcan al sector público o privado alcancen las competencias exigidas en las pruebas
estandarizadas. Aunque Vigotsky no sea el padre de esta teoría fue el promotor de los primeros
conceptos para entender esta parte del ser humano, la cual da respuesta a las actuales problemáticas que
atraviesa el sistema educativo, en el que se incorpora un cuestionario para conocer el nivel de autoestima
y motivación que posee el educando (Bonhomme, 2021).
La calidad educativa depende exclusivamente de los resultados que se obtienen en las pruebas
nacionales e internaciones, para mejorarlos es necesario adaptar en los procesos educativos una nueva
forma de aprender donde el estudiante encuentre su equilibrio cognitivo y emocional, puesto que esta
conexión influye notoriamente en la toma de decisiones, bienestar y desarrollo de competencias. El
padre de esta teoría como se mencionó en líneas anteriores es Daniel Goleman quien “afirma que
realmente lo que hace la diferencia en las personas es la inteligencia emocional” (Cervantes y Castro,
2021, p. 16), en este caso posee habilidades para atender los desafíos de la vida con satisfacción,
especialmente cuando se trata de mejorar el rendimiento académico.
METODOLOGÍA
Tipo de investigación
Se adoptó como metodología la investigación descriptiva con el propósito de analizar la importancia de
la inteligencia emocional en el desarrollo y fortalecimiento de las competencias de secundaria desde
una postura analítica, detallada y explicativa. Al respecto Guevara et al. (2020) esta se centra en
“describir algunas características fundamentales de conjuntos homogéneos de fenómenos, utilizando
criterios sistemáticos que permiten establecer la estructura o el comportamiento de los fenómenos en
estudio, proporcionando información sistemática y comparable con la de otras fuentes” (p. 163). Frente
a esta postura se estudia detalladamente el fenómeno de estudio, brindándose la oportunidad de mejorar
la educación desde acciones donde se involucra la razón con lo emocional.
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Método de investigación
Por todo lo anterior, se integra al estudio el enfoque cualitativo para la validación, contrastación y
teorización del análisis de resultados. “Esta ruta permite evaluar la percepción, sentimientos y
experiencias de todo grupo humano para cualquier contexto” (Padilla y Marroquín, 2021, p. 339), en el
cual se tiene en cuenta las perspectivas u opiniones del estudiante, orientado en un estudio subjetivo a
las realidades del estudiante.
Fases de la investigación
Fase 1: observación de la situación problema.
Fase 2: búsqueda y recopilación rigurosa de fuentes bibliográficas vinculadas al estudio.
Fase 3: selección y análisis de los resultados obtenidos en el cuestionario aplicado a los estudiantes de
secundaria en la Institución Educativa San Vicente Sede Silvania, pertenecientes a la tesis de maestría
denominada 'factores que influyen en la deficiencia en la adquisición de competencias de estudiantes
de secundaria y media en Colombia'.
Fase 4: resultados y discusión de los datos recolectados con el análisis.
Fase 5: conclusiones del grupo investigativo.
Población y muestra
La Institución Educativa San Vicente Sede Silvania se encuentra ubicada en la zona rural del municipio
de Isnos-Huila. Es una institución de carácter pública que ofrece educación preescolar, primaria,
secundaria, media y educación para adultos en el sector. Los participantes fueron 56 estudiantes del
grado octavo, décimo y once, quienes corresponden al 2,85% de la muestra total del estudio de maestría.
Instrumento de recolección de datos
El instrumento de recolección de datos se orienta bajo los parámetros del cuestionario inicial del
proyecto de maestría implementado a los estudiantes de secundaria, donde se extraen solamente los
resultados obtenidos de la Institución Educativa San Vicente Sede Silvania que se encuentran
relacionadas con la inteligencia emocional. Según Cisneros et al. (2021) esta técnica es muy utilizada
en las investigaciones científicas y es diseñada estructuradamente para aplicar a una población en
específico. Antes de su aplicación a todos los participantes, se empleó una encuesta piloto a una muestra
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pequeña para validar su efectividad en el cumplimiento de los objetivos, haciéndose mejoras
sustanciales a la encuesta final.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Factores emocionales en la adquisición de competencias
Figura 1. Influencia de la cantidad de integrantes en el desarrollo de la inteligencia emocional
Datos obtenidos de la encuesta aplicada a estudiantes en el municipio de Isnos-Huila de Colombia (entre abril y mayo, 2024).
Tal y como se muestra en la figura, de los 56 estudiantes encuestados, 26 indicaron que conviven en su
vivienda con entre 4 y 6 integrantes, 12 más de 6 y 17 menos de 4. Indiscutiblemente la cantidad de
integrantes de la familia influye en el desarrollo de la inteligencia emocional, debido a que en este
entorno se desenvuelve para adquirir las bases para su vida, especialmente cuando se trata de conseguir
habilidades para identificar y regular sus estados de ánimo. Por este motivo, aquellos estudiantes que
crecen en un clima familiar propicio se sienten seguros, motivados, tranquilos y confiados a la hora de
obtener su éxito educativo de una manera más fácil y sencilla (Martínez et al., 2020). Su suma relevancia
impacta en el equilibrio emocional de los jóvenes a la hora de aprender, teniendo en cuenta las aptitudes
de las personas que lo rodean.
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Figura 2. Apoyo de la familia en las actividades académicas de sus hijos
Datos obtenidos de la encuesta aplicada a estudiantes en el municipio de Isnos-Huila de Colombia (entre abril y mayo, 2024).
Según los datos arrojados en la gráfica se evidencia que el 35 de los participantes reciben a menudo el
apoyo de su familia en las actividades académicas, 1 nunca, 16 ocasionalmente y 4 rara vez. Aquellos
que reciben el apoyo con frecuencia de sus padres de familia o cuidadores se sienten más motivados en
seguir aprendiendo, puesto que son capaces de reconocer sus emociones y actuar con responsabilidad
en diversas situaciones (Maldonado et al., 2022). Así mismo, desarrollan un pensamiento creativo para
autocontrolarse y conservar las sanas relaciones en el aula, en este caso fortalecen sus competencias
para rendir académicamente.
Figura 3. Relación de las emociones con el estrés o ansiedad
Datos obtenidos de la encuesta aplicada a estudiantes en el municipio de Isnos-Huila de Colombia (entre abril y mayo, 2024).
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A menudo Nunca Ocasionalmente Rara vez
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De acuerdo a la intrínseca relación que existe entre la inteligencia emocional con el estrés o ansiedad,
se revela en la figura anterior que 13 de los 56 estudiantes no han experimento estas reacciones en sus
estudios y 43 registraron que sí. Casualmente el ser humano se encuentra inmerso en una serie de
eventualidades que provocan diversas sensaciones, esto depende de la forma como el estudiante las
percibe para alcanzar su éxito personal y académico. Sentir estrés o ansiedad es algo normal, el
problema se genera cuando el joven no sabe controlarse, provocando efectos negativos en su estabilidad
emocional, y consecuentemente en sus relaciones con el entorno (Montenegro, 2020). En este sentido,
tiene sus efectos en la comprensión, interpretación y resolución de operaciones, en el cual debe existir
una estabilidad para un excelente desarrollo de las habilidades.
Figura 4. Autocontrol de las emociones destructivas
Datos obtenidos de la encuesta aplicada a estudiantes en el municipio de Isnos-Huila de Colombia (entre abril y mayo, 2024).
Haciendo énfasis en las situaciones que causan estrés o ansiedad en los estudiantes, 2 respondieron que
los exámenes, 3 falta de concentración, 9 inseguridad, 16 no aplica, 1 muchas tareas, 1 problemas
auditivos y 19 sobrecarga de tareas. Armenta et al. (2020) indican que “distintos estudios establecen
alteraciones emocionales relacionadas con el estrés académico, alguno de ellos son la tristeza, enojo,
miedo y ansiedad, entre otros, como demostraciones psicológicas importantes” (p. 404). Claramente la
sobrecarga de tareas es una de las situaciones que más desestabiliza al educando, puesto que no se
encuentran preparados para afrontar responsabilidades que los reta a dar todo de sí mismo para alcanzar
los objetivos que se proponga, poniéndose en juego sus conocimientos, destrezas y competencias.
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Figura 5. Beneficios de la inteligencia emocional en la seguridad y comodidad del estudiante
Datos obtenidos de la encuesta aplicada a estudiantes en el municipio de Isnos-Huila de Colombia (entre abril y mayo, 2024).
Un estudiante que es altamente emocional tiene más probabilidades de sentirse seguro y cómodo en su
proceso formativo, asumiendo un rol activo y participativo en cada una de las actividades académicas.
Con respecto a los resultados obtenidos en la graficación anterior, 13 de los encuestados indicaron que
no sienten seguridad y comodidad al participar en clases y hacer preguntas, mientras que 43 contestaron
que sí. Estos sentimientos se generan cuando los jóvenes crecen en un entorno familiar que les brinda
estabilidad y bienestar para desarrollarse, siendo estas reflejadas en el aula de clase. También los
docentes son los responsables de construir entornos educativos donde se brindan las mismas
oportunidades para adquirir competencias desde la interacción permanente.
Figura 6. Seguridad emocional en las actividades académicas
Datos obtenidos de la encuesta aplicada a estudiantes en el municipio de Isnos-Huila de Colombia (entre abril y mayo, 2024).
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Dentro de los resultados obtenidos en la figura, 20 respondieron que sienten seguridad en las actividades
académicas cuando el ambiente de aprendizaje es cómodo, 11 cuando el docente ofrece escenarios
participativos, 8 disposición del docente y 2 empatía del docente. Por su parte, 1 indico que no siente
seguridad por falta de interés y 14 porque se sienten inseguros de sí mismos. En este orden de ideas, es
de vital importancia para el desarrollo de las habilidades matemáticas, científicas y lingüísticas las
interacciones, apoyo emocional, materiales didácticos, estrategias pedagógicas y entorno.
Figura 7. Incidencia de las emociones en las relaciones interpersonales
Datos obtenidos de la encuesta aplicada a estudiantes en el municipio de Isnos-Huila de Colombia (entre abril y mayo, 2024).
Atendiendo los resultados de la gráfica, 12 de los participantes contestaron que no son relevantes las
relaciones interpersonales en la experiencia de aprendizaje y adquisición de competencias, mientras que
44 indicaron que sí. En palabras de Fierro et al. (2021) un clima de aula positivo, permite el intercambio
de conexiones emocionales, lo cual demanda de una formación docente en la educación emocional para
contagiar a sus estudiantes de aptitudes positivas, lográndose la flexibilidad cognitiva, salud mental y
desarrollo integral.
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Figura 8. Autocontrol de las emociones positivas
Datos obtenidos de la encuesta aplicada a estudiantes en el municipio de Isnos-Huila de Colombia (entre abril y mayo, 2024).
La regulación de las emociones positivas también cumple una función relevante en el desarrollo de las
competencias, convirtiéndose en un estímulo para el estudiante seguir avanzando. Según los datos
arrojados en la gráfica, concretamente en la práctica de autorreflexión y el autorreconocimiento frente
al éxito académico, 24 de los encuestados mencionaron que se sienten bien, 19 felices, 2 no aplica, 2
normal y 9 orgullosos. Estas dos son capacidades de introspección para el adolescente identificar y
gestionar sus resultados académicos, donde su inteligencia emocional lo direcciona a tomar las mejores
decisiones y desde luego, a celebrar sus triunfos.
Figura 9. Impacto del apoyo de la familia y amigos en la motivación del estudiante
Datos obtenidos de la encuesta aplicada a estudiantes en el municipio de Isnos-Huila de Colombia (entre abril y mayo, 2024).
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Bien Feliz No aplica Normal Orgulloso
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Como se ha venido mencionando la motivación del estudiante depende del apoyo de las personas más
cercanas, incitándolo a seguir adelante. En la figura se observa que 5 de los participantes respondieron
que el reconocimiento y apoyo de sus padres, cuidadores o amigos no tienen ningún impacto en su
motivación escolar, por su parte, 51 contestaron que sí. Estos resultados confirman la necesidad de
articular un trabajo en conjunto entre familia y docentes para ofrecer estímulos motivacionales que
ayuden al estudiante a desarrollar competencias que faciliten la comprensión de textos, resolver
problemas e interpretar situaciones científicas.
Figura 10. Relación de las actividades extracurriculares con las emociones
Datos obtenidos de la encuesta aplicada a estudiantes en el municipio de Isnos-Huila de Colombia (entre abril y mayo, 2024).
Las actividades extraescolares contribuyen positivamente en la inteligencia emocional del estudiante,
aumentando su confianza, motivación y mejorando sus habilidades sociales para interactuar con los
demás bajo un pensamiento optimista y empático. También aprende a gestionar tanto sus emociones
positivas como negativas con un alto grado de responsabilidad. Atendiendo los datos arrojados en la
gráfica 19 indicaron que no participan en actividades extracurriculares y 37 sí. Gonzáles (como se citó
en García, 2023) estas se constituyen de “medios facilitadores del aprendizaje, en particular, de quienes
se hallan en un contexto más desfavorecido, y simbolizando según organismos como las UNESCO o la
OCDE una herramienta de impacto en el desarrollo cognitivo y social” (p. 5). Probablemente aquellos
jóvenes que participan en las actividades de deporte, danza, música u otras que se encuentran fuera del
horario escolar obtienen un mejor rendimiento académico.
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Figura 11. Contribuciones de la motivación en las competencias del estudiante
Datos obtenidos de la encuesta aplicada a estudiantes en el municipio de Isnos-Huila de Colombia (entre abril y mayo, 2024).
De los 56 participantes,1 indico que las actividades extracurriculares le han ayudado a aumentar la
confianza y 12 la motivación. Por su parte, 3 respondieron que fomenta la colaboración, 9 mejora las
habilidades, 13 mejora el desempeño académico, 17 no aplica y 1 participar en eventos. Efectivamente
estas actividades contribuyen en el desarrollo integral, proporcionándole al estudiante habilidades
vitales para su crecimiento personal y académico de una manera innovadora y transformadora. Muchos
jóvenes descubren sus talentos con estas actividades, sintiéndose cómodos, seguros, motivados y
tranquilos porque hacen lo que les apasiona.
Figura 12. Aportaciones del entorno educativo en la inteligencia emocional
Datos obtenidos de la encuesta aplicada a estudiantes en el municipio de Isnos-Huila de Colombia (entre abril y mayo, 2024).
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confianza Aumenta la
motivación Fomenta la
colaboración Mejora las
habilidades Mejorar el
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acádemico
No aplica Participar en
eventos
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El entorno, materiales didácticos, docentes, estrategias de enseñanza y planes de estudio son ejes
centrales en el fomento de la motivación, impulsando a los jóvenes a cumplir sus metas, especialmente
cuando se trata de definir su personalidad. Desde la figura anterior se puede apreciar que 11 estudiantes
consideran que no hay aspectos del entorno educativo que podrían mantener o aumentar su motivación
para adquirir competencias académicas, mientras que 45 sí. Torres et al. (2021) afirman que “el control
de las emociones es clave para el éxito, puesto que es un impulso que nos moviliza a la acción, el cual
constituye múltiples opciones en el desarrollo aprendizaje del estudiante que lo favorece en las
actividades cognitivas” (p. 684). El educando muestra motivación e interés en la educación en el
momento que encuentra un equilibrio con las emociones y razón, logrando con satisfacción su
rendimiento académico.
CONCLUSIONES
Se reconoce la inteligencia emocional un eje fundamental en la adquisición y fortalecimiento de las
habilidades, conocimientos y destrezas del estudiante de secundaria, donde la familia e instituciones
educativas son los responsables de brindar estímulos emocionales para los jóvenes identificar y
gestionar sus estados de ánimo de manera correcta, sin verse afectado su proceso formativo e
interacciones sociales. Un estudiante que se desenvuelve en un entorno familiar desfavorable tiene
menos posibilidades de sentirse seguro, motivado e interesado por seguir aprendiendo, pues todas estas
situaciones negativas lo desestabilizan y provocan un bajo rendimiento académico.
Las emociones no pueden desvincularse de los procesos de enseñanza-aprendizaje, ya que como se ha
venido mencionando, estas cumplen un papel fundamental en el desarrollo de la competencia lectora,
matemática y científica. Lastimosamente se desconoce su función formadora en los contextos
educativos de secundaria, pues los docentes se han enfocado en el desarrollo cognitivo, dejando de lado
lo que siente el estudiante. Ante esta situación surge la necesidad de darle un giro a la educación, donde
no solamente se tenga en cuenta la dimensión emocional en la primera infancia, sino a lo largo de la
vida formativa del educando para que sea capaz de responder con satisfacción a los retos y desafíos
latentes de su contexto.
Hablar de emociones va más allá de los sentimientos o estados de ánimos que experimenta el ser
humano en diversas ocasiones, pues comprender su verdadera esencia lleva al docente a implementar
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estrategias donde se fortalezcan las interacciones sociales, autoconciencia y motivación, todo esto con
el propósito de formar individuos emocionalmente inteligentes. Cuando un estudiante posee habilidades
para gestionar sus sentimientos se encuentra en la capacidad de mantener su concentración, pensar
positivo y actuar de acuerdo a sus emociones y razón.
Las pruebas estandarizadas son un instrumento que miden el desempeño de los estudiantes, donde el
país a entrado en esta dinámica para sistematizar su calidad administrativa y pedagógica que se orienta
en las instituciones educativas. Los resultados obtenidos en los últimos años no han sido muy
satisfactorios, en el cual se han buscado las causas principales para entender el porqué de este problema.
El factor familiar, socioemocional, económico y pedagógico son unas de las posibles causas que incide
en el poco desarrollo de la adquisición de competencias.
Evidentemente todos estos factores redundan con la poca relevancia que se le ha dado a la inteligencia
emocional en la educación, aunque existan normativas que garantizan su incorporación en las
actividades escolares. Hoy por hoy se puede decir que falta más interés por parte de la familia,
instituciones y docentes sobre la intrínseca relación que existe entre las emociones y cognición para los
jóvenes alcanzar un verdadero desarrollo integral. Todo esto conlleva a comprender que no solamente
el docente tiene la responsabilidad de educar en las emociones, pues la familia es una parte crucial para
generar conocimientos significativos de una forma más profunda.
Las actividades extraescolares aportan positivamente en la adquisición de competencias emocionales,
cognitivas, motrices, comunicativas y sociales, puntualmente se articula una vía motivacional para el
joven enfrentar las diversas situaciones académicas con éxito. Con esto, se previenen efectos negativos
que interrumpan su realización plena, donde se ofrecen ambientes propicios para sentirse más seguros
y motivados, todo gracias a las interacciones positivas que estable en los diferentes contextos en el que
se desenvuelve.
El bienestar social, emocional y cognitivo se logra cuando el estudiante sabe reconocer, valorar y regular
el estrés, ansiedad, confianza, motivación, seguridad y otras emociones para interactuar consigo mismo
y con los demás. De este modo, se encuentran en la capacidad de resolver situaciones problemas con
mayor responsabilidad, autonomía y confianza, lo cual conlleva a la construcción de una sociedad más
colaborativa.
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Las pruebas estandarizadas es una situación que desencadena en el estudiante ansiedad, nervios, estrés
y temor, debido a que se pone en juego la continuidad de su formación académica o futuro. Por tal
motivo, se debe enseñar a gestionar estas emociones disruptivas que pueden afectar negativamente sus
resultados, aunque cuente con las habilidades cognitivas suficientes, difícilmente podrán sobrevivir con
éxito a estas pruebas. Finalmente, ayudar a encontrar el equilibrio cognitivo y emocional del estudiante
se convierte en una posible oportunidad para orientar una educación de calidad.
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