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evidenció una mejoría con la plasmaféresis, ya que un gran número de pacientes fueron capaces de
caminar después de 4 semanas. A su vez, en pacientes con falla hepática fulminante se demostró que la
plasmaféresis es capaz de remover la albúmina que se encuentra unida a las toxinas de alto peso
molecular, además de restaurar la homeostasis al proveer factores de coagulación, fibrina, fibrinógeno,
entre otros. Y por su parte, en pacientes con sepsis y shock séptico, en una revisión de 10 estudios se
demostró que con el uso de plasmaféresis se mejoró la tasa de sobrevida en un 60 a 87% y se disminuyó
la mortalidad de un 53,8% a un 33% (18).
En su estudio de cohorte retrospectivo comparativo de la mortalidad y discapacidad en pacientes con
Guillain Barré tratados con inmunoglobulina y con plasmaféresis, Rodriguez incluyó 142 casos de
Síndrome de Guillain-Barré (SGB) ocurridos entre 2011 y 2020. Se identificó un patrón estacional, con
el 60% de los casos ocurriendo en invierno y primavera. Las formas motoras representaron el 60% de
los casos, mientras que solo el 8.5% correspondió a la forma típica. El 60% de los pacientes fueron
varones, y el 56% de los casos estuvieron en el rango de edad de 20 a 59 años. El grupo de edad ≥60
años representó el 24% del total de casos, con una letalidad del 58.3%. A pesar de que la mortalidad a
los 28 días fue similar en ambos grupos de tratamiento (plasmaféresis o inmunoglobulina), se observó
una tendencia hacia una menor mortalidad en el grupo que recibió plasmaféresis (OR 0.78; IC 95% 0.62-
0.97; p = 0.062), sin embargo, no se encontraron diferencias significativas en términos de discapacidad
al alta entre los pacientes con SGB tratados con plasmaféresis o inmunoglobulina (19).
Por otra parte, Ramirez y colaboradores presentan un análisis retrospectivo de una serie de casos
realizados en la UCI del Hospital Virgen de la Victoria de Málaga, un hospital público de tercer nivel
con 18 camas divididas en 3 áreas. Se utilizaron catéteres venosos de doble luz con un diámetro superior
a 11 F insertados por vía femoral, junto con la máquina Prismas de Hospal S.L. Se realizaron sesiones
de plasmaféresis cuyo número y frecuencia variaron según la enfermedad de base y el curso clínico. Se
utilizaron líquidos para la reposición dependiendo de la enfermedad, siendo la solución de albúmina al
5% la más comúnmente empleada.
Se incluyeron retrospectivamente todos los pacientes que recibieron este procedimiento entre 2003 y
2007. El estudio final incluyó a 24 pacientes con una edad media de 41,67 años y predominio femenino.
Se realizaron 64 sesiones en promedio por paciente, y la puntuación promedio de APACHE II al ingreso