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vez este término, hablaba del auge económico del continente europeo que se generó a partir de la primera
revolución industrial, por otro lado, relacionaba y criticaba duramente, el impacto social que había traído
a la sociedad europea.
Mientras que para otros autores la revolución industrial significó mayor riqueza, nuevos mercados,
mejora de calidad de vida social, acercamiento de ciudades y continentes, descubrimientos científicos
al servicio de la industria y sociedad. Y aquí entra la disyuntiva: ¿la revolución industrial, significó un
avance o un retroceso educativo y social? El siguiente párrafo otorga una de las posibles respuestas a la
pregunta.
“(…) el proyecto civilizatorio moderno capitalista (blanco/occidental, antropocéntrico, colonialista,
racista, masculino/patriarcal, adulto, racionalista/secular, individualista, narcisista, estado céntrico,
industrializador, urbanizador, etc.), se sintetiza y globaliza a través de los aún vigentes discursos,
instituciones y prácticas del desarrollo (…) las ciencias sociales lo subsumen y lo adaptan para
entenderlo como la evolución progresiva de una economía hacia mejores niveles de vida, progreso,
bienestar, modernización, crecimiento económico, político, social o cultural.” (Arévalos Viveros,
Becerra-Valencia, & Puentes-Giraldo, 2022, pág. 5)
3. Otra de las discusiones, un tanto superficial, pero con la debida, fundamentación, parte del
cuestionamiento de: ¿realmente se trata de nuevas revoluciones?, ¿son nuevos movimientos de impacto
irreversible?, o son solo evoluciones, como actos sinérgicos o consecuentes, detonados en la primera
revolución industrial y que han propiciado cambios paulatinamente, es decir, han evolucionado.
A consideración de algunos autores la revolución industrial solo sucedió una vez, y los cambios que se
han gestado a lo largo de la historia son consecuencias de esta primera vez. En el ámbito educativo se
considera que, el avance científico, tecnológico, social, ambiental, político y económico, en su búsqueda
de optimización o mejora, han necesitado desarrollar lo que se tiene con vistas al futuro. El entorno y la
sociedad han adaptado y adoptado esos cambios gradualmente en pro de cubrir las necesidades y
requerimientos y no dichos cambios no han sido drásticos o de forma repentina.
Mientras que otros autores opinan que realmente han habido nuevos detonantes que han impactado y
modificado sorpresivamente al mundo, lo que les permite afirmar, que los cambios consecuentes, deben