pág. 11299
descubrir el conocimiento a través del juego es la forma más auténtica para esta edad, ya que el niño
aprende mientras se divierte realizando diferentes actividades.
Por su parte, Huizinga (2007), afirma que la lúdica permite a los individuos interactuar, jugar y
manipular escenarios, ofreciéndoles la posibilidad de elegir, construir y diseñar contextos acordes a lo
que desean representar; lo anterior, permite que se experimenten diversas emociones mientras se
desarrollan habilidades y destrezas aplicables en cualquier situación. Por lo anterior, es fundamental
crear entornos donde el niño pueda actuar como si estuviera en un ambiente real que le permita explorar
y generar respuestas para desenvolverse en diferentes situaciones, resaltando la importancia de
enriquecer y potenciar las actividades en la clase de inglés.
Lo Planteado por Huizinga coincide con Uberman (1998) cuando afirma que las actividades lúdicas
“motivan, entretienen y enseñan al niño a descubrir y valorar la belleza del lenguaje como medio de
comunicación” (p. 20). Por eso, es importante planificar actividades interesantes adecuadas a la edad
del niño y a la habilidad que se desea desarrollar, como el habla y la escucha, mediante ejercicios que
creen la necesidad de comunicarse en el idioma extranjero.
Adicionalmente es importante anotar que el juego no solo es una actividad recreativa, sino también una
herramienta fundamental para cultivar la creatividad y la capacidad de organización. Los niños, a través
del juego, aprenden a construir ideas y a sistematizar conocimientos, habilidades esenciales para el
progreso no sólo en las ciencias, y las artes, sino también en el aprendizaje de lenguas extranjeras como
el inglés. Además, el juego prepara a los niños para el trabajo futuro, enseñándoles disciplina y la
importancia de perseverar en sus esfuerzos. Por lo tanto, el juego es vital para el desarrollo académico
y personal. Lo anterior puede verse reflejado en la cita planteada por Labrador y Morote (2008) quienes
afirman que “El juego contribuye a desarrollar el espíritu constructivo; la imaginación, la capacidad de
sistematizar, además lleva al trabajo, sin el cual no habría ni ciencia ni arte” (p.78).
Para finalizar este aparte, caben mencionar los planteamientos de Vygotsky (1978) quien enfatiza la
importancia del aprendizaje de la lengua materna como fundamento para aprender otros idiomas. Los
valores afectivos, culturales y sociales inherentes a la lengua materna facilitan el aprendizaje del inglés.
El juego simbólico, en particular, es crucial para el desarrollo cognitivo de los niños, ya que les permite
superar su nivel actual de desarrollo y alcanzar nuevos niveles de comprensión y habilidad. Las