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El fútbol y sus orígenes
Desde la perspectiva de Heig (2012), para empezar a narrar la historia del fútbol y localizar el origen
de este deporte sería necesario remontarse hasta las antiguas civilizaciones e imperios, donde pueden
encontrarse diversos antecedentes de juegos de pelota con características similares.
Así, según algunas teorías, la historia del futbol comienza en el antiguo Egipto, ya que durante el siglo
III a.C, se realizaba un juego de pelota como parte del rito de la fertilidad, en el que se practicaba algo
parecido al balonmano; sin embargo, en China ya se había inventado la pelota de cuero un siglo antes,
cuando Fu-Hi, inventor y uno de los cinco grandes gobernantes de la China de la antigüedad, creó una
masa esférica juntando varias raíces duras en forma de cerdas a las que recubrió de cuero crudo; con
esto nacía la pelota de cuero, con la que jugaba simplemente a pasarla de mano en mano. Esta pelota
fue adoptada posteriormente en los juegos populares de sus vecinos India y Persia.
Por otra parte, en las antiguas civilizaciones prehispánicas también se conocen juegos de pelotas más
similares a lo que se conoce como fútbol. Así por ejemplo los aztecas practicaban el tlachtli, una mezcla
entre tenis, futbol y baloncesto en el que se prohibía el uso de las manos y los pies y el capitán del
equipo derrotado era sacrificado.
La historia del fútbol continuaría en la Grecia clásica, donde incluso Homero llegó a hacer alusión
también a un juego de pelota, al que llamaban ‘esfaira’ o ‘esferomagia’ debido a la esfera hecha de
vejiga de buey que se utilizaba en el mismo. “Desde ahí paso al imperio Romano, que utilizaba en su
juego ‘Harpastum’ un elemento esférico llamado ‘pila’ o ‘pilotta’ que evoluciono hasta el término
‘pelota’ utilizado actualmente”.
Durante la edad media tuvo mucha fama entre diferentes caballeros y culturas; entre otras anécdotas se
dice que Ricardo Corazón de León llego a proponer al caudillo musulmán Saladino, que dimieran sus
diferencias sobre la propiedad de Jerusalén con un partido de pelota.
Los primeros códigos británicos se caracterizaban por tener pocas reglas y por su extrema violencia,
siendo uno de los más populares, el football multitudinario.
El football multitudinario no fue el único código de la época, de hecho, existieron otros
códigos más organizados, menos violentos, e incluso que se desarrollaron fuera de las islas
británicas. Uno de los juegos más conocidos fue el calcio florentino, originario de la ciudad