g. 436
EVALUACIÓN DE COMPETENCIAS Y
HABILIDADES EN EGRESADOS DE
ADMINISTRACIÓN DE EMPRESAS Y SU
ALINEACIÓN CON LAS DEMANDAS
EMPRESARIAL EN NEIVA
EVALUATION OF COMPETENCIES AND SKILLS IN BUSINESS
ADMINISTRATION GRADUATES AND THEIR ALIGNMENT
WITH BUSINESS DEMANDS IN NEIVA
Jeimi Yulisa Perdomo Castañeda
Fundación Universitaria Navarra - UNINAVARRA
Leidy Alejandra Rodríguez Páez
Fundación Universitaria Navarra - UNINAVARRA
Mildrey Alejandra Medina Aroca
Fundación Universitaria Navarra - UNINAVARRA
pág. 437
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v8i6.14666
Evaluación de Competencias y Habilidades en Egresados de Administración
de Empresas y su Alineación con las Demandas Empresarial en Neiva
Jeimi Yulisa Perdomo Castañeda1
Jeimi.perdomo@uninavarra.edu.co
https://orcid.org/0009-0001-2834-3350
Fundación Universitaria Navarra -
UNINAVARRA
Leidy Alejandra Rodríguez Páez
Leidy.rodriguez@uninavarra.edu.co
https://orcid.org/0009-0005-4394-1374
Fundación Universitaria Navarra -
UNINAVARRA
Mildrey Alejandra Medina Aroca
Mildrey.medina@uninavarra.edu.co
https://orcid.org/0009-0003-7159-0992
Fundación Universitaria Navarra –
UNINAVARRA
RESUMEN
El presente estudio examina la alineación entre las competencias y habilidades desarrolladas por los
egresados del programa de Administración de Empresas de una institución de educación superior en
Neiva y las demandas del sector empresarial local entre 2019 y 2022. Utilizando una metodología
cualitativa basada en entrevistas semiestructuradas con 41 egresados y responsables de recursos
humanos de grandes empresas, se identificaron brechas significativas tanto en competencias técnicas
como blandas. Los resultados revelaron que, aunque los egresados poseen una sólida base teórica, la
aplicación práctica de estos conocimientos es limitada. Además, las competencias blandas, como la
comunicación efectiva, el liderazgo y la resolución de problemas, mostraron discrepancias aún mayores
entre lo demandado por las empresas y lo desarrollado por los egresados. Para abordar estas brechas, se
recomienda la integración de más experiencias prácticas en el currículo académico, el fortalecimiento
de programas de mentoría y la colaboración estrecha entre universidades y el sector empresarial.
Asimismo, se destaca la importancia de fomentar una cultura de aprendizaje continuo para mantener la
competitividad en el mercado laboral. Estas estrategias no solo mejorarán la empleabilidad de los
egresados, sino que también contribuirán al éxito y sostenibilidad de las organizaciones en las que
trabajen.
Palabras Claves: competencias técnicas, habilidades blandas, empleabilidad, educación superior,
formación continua
1
Autor principal
Correspondencia: Jeimi.perdomo@uninavarra.edu.co
pág. 438
Evaluation of Competencies and Skills in Business Administration
Graduates and their Alignment with Business Demands in Neiva
ABSTRACT
This study examines the alignment between the skills and competencies developed by graduates of a
Business Administration program at a higher education institution in Neiva and the demands of the local
business sector from 2019 to 2022. Utilizing a qualitative methodology based on semi-structured
interviews with 41 graduates and human resources managers from major companies, significant gaps
were identified in both technical and soft skills. Results revealed that while graduates possess a solid
theoretical foundation, the practical application of this knowledge is limited. Additionally, soft skills
such as effective communication, leadership, and problem-solving showed even greater discrepancies
between what businesses demand and what graduates have developed. To address these gaps, it is
recommended to integrate more practical experiences into the academic curriculum, strengthen
mentorship programs, and foster close collaboration between universities and the business sector.
Furthermore, promoting a culture of continuous learning is crucial to maintaining competitiveness in
the labor market. These strategies will not only enhance graduates' employability but also contribute to
the success and sustainability of the organizations they work for.
Keywords: technical skills, soft skills, employability, higher education, continuous learning
pág. 439
INTRODUCCIÓN
En un contexto económico global caracterizado por constantes transformaciones, las competencias y
habilidades desarrolladas durante la formación académica juegan un papel crucial en la empleabilidad
de los egresados. Este artículo presenta los hallazgos de un estudio exhaustivo realizado sobre las
competencias y habilidades de los egresados del programa de Administración de Empresas de una
institución de educación superior en Neiva, comparándolas con las demandas del sector empresarial
local entre los años 2019 y 2022. El objetivo principal de esta investigación fue determinar la pertinencia
y alineación de las competencias adquiridas durante la formación académica con las necesidades reales
del mercado laboral, identificando las brechas existentes y proponiendo mejoras para potenciar la
empleabilidad de los futuros graduados.
La pregunta de investigación que guió este estudio fue: ¿El perfil del Administrador de Empresas de una
institución de educación superior de Neiva se alinea con las nuevas habilidades y competencias exigidas
por el sector empresarial hasta el año 2022? Para responder a esta pregunta, se empleó una metodología
cualitativa con un enfoque narrativo y de teoría fundamentada. Se llevaron a cabo entrevistas
semiestructuradas con una muestra representativa de 41 egresados del programa, así como con
responsables de recursos humanos y directores de área de grandes empresas del sector terciario en Neiva.
Estas entrevistas permitieron recoger información detallada sobre las competencias y habilidades
desarrolladas durante la formación académica, su relevancia en el ámbito laboral y la percepción de los
empleadores sobre las competencias necesarias para la contratación de Administradores de Empresas.
Los resultados del estudio revelaron una notable disparidad entre la preparación teórica y la aplicación
práctica de las competencias técnicas adquiridas por los egresados. A pesar de que el 70% de los
egresados se sienten bien preparados teóricamente, solo el 45% consideran que pueden aplicar estas
competencias de manera efectiva en el entorno laboral. En áreas críticas como el análisis financiero, la
gestión de proyectos y el uso de herramientas de software (por ejemplo, Excel y ERP), los egresados
indicaron que su formación podría haber sido más práctica y menos teórica. Esta brecha en la aplicación
práctica sugiere la necesidad urgente de integrar más prácticas profesionales y proyectos colaborativos
con empresas dentro del currículo académico.
pág. 440
Además, el estudio destacó una deficiencia significativa en el desarrollo de competencias blandas.
Habilidades esenciales como la comunicación efectiva, el liderazgo y la resolución de problemas son
altamente valoradas por los empleadores, pero los egresados se sienten insuficientemente preparados en
estas áreas. La comunicación efectiva, por ejemplo, es demandada por el 85% de las empresas, pero solo
el 50% de los egresados se sienten capacitados en esta competencia. De manera similar, las habilidades
de liderazgo son valoradas por el 70% de las empresas, mientras que solo el 45% de los egresados creen
haber recibido una preparación adecuada en esta área.
La necesidad de formación continua y actualización de conocimientos fue otro aspecto crítico
identificado en la investigación. El 80% de los egresados mencionaron la necesidad de recurrir a cursos
adicionales o capacitación externa para mantenerse competitivos en el mercado laboral. Esta necesidad
subraya la importancia de fomentar una cultura de aprendizaje permanente en las instituciones de
educación superior. Este artículo no solo presenta los resultados de esta investigación, sino que también
propone estrategias y recomendaciones para cerrar las brechas identificadas, mejorar la formación
académica y, en última instancia, aumentar la empleabilidad de los egresados de Administración de
Empresas en Neiva.
METODOLOGÍA
La investigación se llevó a cabo utilizando un enfoque cualitativo con una metodología narrativa y de
teoría fundamentada. Se seleccionó una muestra representativa de 41 egresados del programa de
Administración de Empresas de una institución de educación superior en Neiva, abarcando los años
2019 a 2022. Adicionalmente, se realizaron entrevistas semiestructuradas con responsables de recursos
humanos y directores de área de grandes empresas del sector terciario en Neiva. Estas entrevistas fueron
diseñadas para recolectar datos detallados sobre las competencias y habilidades desarrolladas durante la
formación académica y su relevancia en el ámbito laboral.
Los instrumentos de recolección de datos incluyeron guías de entrevistas que exploraban la percepción
de los egresados sobre la efectividad de su formación, las competencias adquiridas y su aplicación
práctica en el entorno profesional. El análisis de los datos se realizó mediante técnicas de análisis
temático y se empleó software cualitativo para facilitar la organización y codificación de la información.
pág. 441
Se construyó una matriz de comparación para identificar las coincidencias y discrepancias entre las
competencias demandadas por el sector empresarial y las desarrolladas por los egresados. Esta
comparación permitió identificar brechas significativas y áreas de mejora, proporcionando una base
sólida para las recomendaciones propuestas en el estudio.
RESULTADOS
Análisis de Competencias Técnicas Desarrolladas por los Egresados
El análisis de las competencias técnicas desarrolladas por los egresados del programa de Administración
de Empresas entre 2019 y 2022 reveló tanto fortalezas como áreas de mejora significativas en la
formación académica impartida. Este estudio, basado en entrevistas semiestructuradas con una muestra
representativa de 41 egresados y responsables de recursos humanos de grandes empresas del sector
terciario en Neiva, proporciona una visión integral de cómo las competencias técnicas adquiridas durante
la formación académica se traducen en el entorno laboral.
Uno de los hallazgos más destacados es la percepción general de los egresados sobre la adecuación de
su formación técnica. Si bien el 70% de los egresados consideran que recibieron una preparación teórica
sólida en áreas clave como el análisis financiero, la gestión de proyectos y el uso de herramientas de
software, solo el 45% sienten que esta formación se traduce efectivamente en su desempeño laboral
(Smith & Tillema, 2019). Esta disparidad subraya una necesidad crítica de mejorar la aplicación práctica
de las competencias técnicas durante el proceso educativo.
Las competencias técnicas evaluadas incluyen el dominio de Excel avanzado, el uso de sistemas ERP
(Enterprise Resource Planning), el análisis financiero avanzado y la gestión de proyectos. Estas
habilidades son consideradas fundamentales por los empleadores, quienes las identifican como
esenciales para el desempeño eficaz en roles administrativos y financieros. Sin embargo, las entrevistas
revelaron que, aunque los egresados están familiarizados con estos conceptos, a menudo carecen de la
experiencia práctica necesaria para aplicarlos de manera efectiva en el trabajo.
pág. 442
Tabla 1. Comparación de Competencias Técnicas Demandadas y Desarrolladas
Competencia Técnica
% de Empresas que la
Demandan
% de Egresados que la Consideran
Adecuada
Dominio de Excel avanzado
80%
60%
Uso de ERP
65%
55%
Análisis financiero avanzado
70%
50%
Gestión de proyectos
60%
45%
El dominio de Excel avanzado es una de las competencias técnicas más demandadas, con el 80% de las
empresas considerándola esencial. Sin embargo, solo el 60% de los egresados sienten que su formación
en esta área es adecuada. Esta brecha puede atribuirse a la falta de ejercicios prácticos y casos de estudio
que simulen situaciones reales del entorno laboral (Helyer & Lee, 2014). Los sistemas ERP, cruciales
para la gestión de recursos empresariales, también muestran una discrepancia, con el 65% de las
empresas demandando esta competencia y solo el 55% de los egresados sintiéndose preparados.
El análisis financiero avanzado es otra área crítica donde se observa una brecha significativa. Mientras
que el 70% de las empresas demandan esta competencia, solo el 50% de los egresados consideran que
su formación es adecuada. Este hallazgo sugiere la necesidad de integrar más simulaciones financieras
y análisis de casos reales en el currículo académico, permitiendo a los estudiantes aplicar sus
conocimientos teóricos en contextos prácticos (Andrews & Higson, 2008).
La gestión de proyectos es igualmente importante, con el 60% de las empresas identificándola como
una competencia clave. No obstante, solo el 45% de los egresados sienten que están adecuadamente
preparados en esta área. Este déficit puede ser abordado mediante la inclusión de proyectos
colaborativos con empresas, donde los estudiantes puedan trabajar en proyectos reales bajo la
supervisión de profesionales experimentados (Harvey, 2000).
El estudio de Chell y Athayde (2011) destaca que la integración de experiencias prácticas y casos de
estudio reales es esencial para el desarrollo de competencias técnicas transferibles. Los programas
educativos que combinan teoría con prácticas profesionales tienden a preparar mejor a los estudiantes
para los desafíos del mercado laboral. Esto se alinea con las sugerencias de los egresados, quienes ven
la necesidad de una mayor integración de experiencias prácticas en su formación académica.
pág. 443
Además, la investigación de Robles (2012) subraya la importancia de las competencias técnicas en la
empleabilidad y el desempeño laboral. Según su estudio, habilidades como el análisis financiero, la
gestión de proyectos y el uso de herramientas de software avanzadas son cruciales para el éxito en el
entorno profesional. Este hallazgo es consistente con los resultados de las entrevistas, que indican que
las competencias técnicas deben recibir más atención en la formación académica.
Para abordar estas brechas, se recomienda que las instituciones de educación superior en Neiva
implementen estrategias específicas para mejorar la formación técnica de sus estudiantes. Estas
estrategias pueden incluir la integración de más casos de estudio, simulaciones y ejercicios prácticos en
el currículo, así como la colaboración con empresas locales para desarrollar programas de prácticas
profesionales y proyectos conjuntos. Estas experiencias permitirán a los estudiantes aplicar sus
conocimientos en contextos reales, desarrollando así competencias técnicas transferibles y mejorando
su preparación para el mercado laboral.
La investigación de Smith y Tillema (2019) respalda esta recomendación, destacando que la formación
práctica en el uso de herramientas tecnológicas avanzadas es esencial para cerrar la brecha entre la
preparación teórica y la aplicación práctica. La gestión de proyectos, aunque valorada por el 60% de las
empresas, es una competencia en la que solo el 45% de los egresados se sienten adecuadamente
preparados, lo que sugiere la necesidad de un enfoque más práctico y aplicado en la enseñanza de esta
habilidad.
Además de mejorar la formación técnica, es crucial que las instituciones de educación superior fomenten
una cultura de aprendizaje continuo, ofreciendo programas de educación continua y capacitación que
permitan a los profesionales mantenerse al día con las últimas tendencias y tecnologías del mercado. La
formación continua es un aspecto crítico para los egresados, ya que el entorno empresarial actual
requiere profesionales que se mantengan actualizados con las últimas tendencias y tecnologías.
El análisis de las competencias técnicas desarrolladas por los egresados del programa de Administración
de Empresas en Neiva ha revelado varias brechas significativas que deben ser abordadas para mejorar
la empleabilidad de los graduados. Las instituciones de educación superior deben implementar
estrategias específicas para integrar más experiencias prácticas en el currículo académico, colaborando
con empresas locales para ofrecer programas de prácticas profesionales y proyectos conjuntos. Estas
pág. 444
mejoras no solo aumentarán la empleabilidad de los egresados, sino que también contribuirán al éxito y
sostenibilidad de las organizaciones en las que trabajen.
Evaluación de Competencias Blandas y su Impacto en la Empleabilidad
El análisis de las competencias blandas desarrolladas por los egresados del programa de Administración
de Empresas en Neiva entre 2019 y 2022 ha revelado áreas críticas que requieren atención para mejorar
la preparación de los graduados y su adaptación a las demandas del mercado laboral. Las competencias
blandas, aunque menos tangibles que las técnicas, son fundamentales para el desempeño exitoso en
cualquier entorno laboral moderno. Este estudio se basó en entrevistas semiestructuradas con 41
egresados y responsables de recursos humanos de grandes empresas en Neiva para evaluar cómo estas
habilidades han sido desarrolladas y aplicadas en el ámbito profesional.
Las competencias blandas evaluadas incluyen la comunicación efectiva, el trabajo en equipo, las
habilidades de liderazgo y la resolución de problemas. Estos aspectos son cruciales para la empleabilidad
y el éxito en roles administrativos y de gestión. Sin embargo, los resultados del estudio indican que estas
competencias no siempre reciben la atención necesaria durante la formación académica.
Gráfica 1. Evaluación de Competencias Blandas por Egresados y Empresas
La gráfica 1 ilustra la percepción tanto de los egresados como de las empresas respecto a la adecuación
de diversas competencias blandas. Se observa que, mientras el 75% de los egresados consideran estar
bien preparados para trabajar en equipo, solo el 50% se sienten suficientemente capacitados en
pág. 445
habilidades de comunicación efectiva. Por otro lado, las empresas valoran estas competencias aún más:
el 85% de las empresas consideran crucial la comunicación efectiva, pero solo el 45% de los egresados
sienten haber recibido una formación adecuada en esta área.
La comunicación efectiva es una competencia fundamental en cualquier entorno laboral. Sin embargo,
la discrepancia observada entre la percepción de los egresados y las demandas del sector empresarial
indica una necesidad de mejorar significativamente esta área durante la formación académica. El estudio
de Jackson (2010) respalda estos hallazgos, señalando que las habilidades de comunicación son vitales
para la integración y el desempeño en el trabajo, y que los empleadores a menudo encuentran que los
graduados carecen de estas habilidades cruciales.
Las habilidades de liderazgo también muestran una brecha significativa. Mientras que el 70% de las
empresas identifican esta competencia como esencial, solo el 45% de los egresados creen haber sido
preparados adecuadamente. Esto sugiere que los programas académicos deben incorporar más
oportunidades para el desarrollo de liderazgo, como roles en proyectos de equipo, actividades
extracurriculares y programas de mentoría.
El trabajo de Kelley y Bridges (2005) destaca la importancia de las competencias de liderazgo para la
empleabilidad. Según su investigación, los empleadores valoran altamente la capacidad de los graduados
para liderar equipos, gestionar proyectos y tomar decisiones estratégicas. Esta capacidad es vista como
un diferenciador clave en el mercado laboral competitivo.
Además, la resolución de problemas es otra competencia crítica donde se observa una brecha notable.
Mientras que el 65% de las empresas demandan esta habilidad, solo el 40% de los egresados consideran
estar adecuadamente preparados. Este hallazgo sugiere que la enseñanza de resolución de problemas
debe ser más práctica y orientada a la aplicación en situaciones reales.
La investigación de Heckman y Kautz (2012) resalta que las habilidades de resolución de problemas son
esenciales para la innovación y la adaptación en el lugar de trabajo. Los programas académicos deben
incorporar más simulaciones, estudios de caso y proyectos que desafíen a los estudiantes a aplicar sus
conocimientos en contextos prácticos.
pág. 446
Tabla 2. Comparación de Competencias Blandas Demandadas y Desarrolladas
% de Empresas que la
Demandan
% de Egresados que la Consideran
Adecuada
85%
50%
75%
65%
70%
45%
65%
40%
Esta tabla revela las discrepancias significativas entre las competencias blandas demandadas por las
empresas y las desarrolladas por los egresados. La brecha más notable se observa en la comunicación
efectiva, seguida de las habilidades de liderazgo y resolución de problemas. Estas discrepancias indican
áreas críticas donde la formación académica debe ser mejorada para alinearse mejor con las expectativas
del mercado laboral.
Para abordar estas brechas, se recomienda que las instituciones de educación superior en Neiva
implementen estrategias específicas para mejorar el desarrollo de competencias blandas. Estas
estrategias pueden incluir:
Talleres de Comunicación y Liderazgo: Organizar talleres específicos centrados en la comunicación
efectiva y las habilidades de liderazgo. Estos talleres pueden ser impartidos por profesionales del sector,
proporcionando una perspectiva práctica y actualizada.
Proyectos de Grupo y Actividades Colaborativas: Fomentar la participación en proyectos de grupo y
actividades colaborativas que desarrollen habilidades de trabajo en equipo y liderazgo. Los estudiantes
pueden asumir roles de liderazgo en estos proyectos, desarrollando así su capacidad para gestionar
equipos y tomar decisiones.
Simulaciones y Estudios de Caso: Integrar simulaciones y estudios de caso en el currículo académico
para desarrollar habilidades de resolución de problemas. Estas actividades permiten a los estudiantes
aplicar sus conocimientos en situaciones prácticas y desafiar su capacidad para encontrar soluciones
efectivas.
Programas de Mentoría: Establecer programas de mentoría que emparejen a estudiantes con
profesionales experimentados. Estos programas pueden proporcionar orientación y apoyo en el
desarrollo de competencias blandas, así como en la transición al mercado laboral.
pág. 447
Actividades Extracurriculares: Fomentar la participación en actividades extracurriculares que
desarrollen habilidades blandas. Estas actividades pueden incluir debates, presentaciones y trabajos en
grupo, proporcionando oportunidades adicionales para desarrollar competencias de comunicación y
liderazgo.
El estudio de Andrews y Russell (2012) respalda estas recomendaciones, indicando que las experiencias
prácticas y la participación en actividades extracurriculares son cruciales para el desarrollo de
competencias blandas. Los programas educativos deben adoptar un enfoque más holístico, integrando
estas experiencias en el currículo para preparar mejor a los estudiantes para el mercado laboral.
Además de mejorar la formación académica, es crucial que las instituciones de educación superior
fomenten una cultura de aprendizaje continuo. Ofrecer programas de educación continua y capacitación
que permitan a los profesionales mantenerse al día con las últimas tendencias y tecnologías del mercado
es esencial para su éxito a largo plazo. La formación continua es un aspecto crítico para los egresados,
ya que el entorno empresarial actual requiere profesionales que se mantengan actualizados con las
últimas tendencias y tecnologías.
La investigación de Bridgstock (2009) subraya la importancia de la formación continua para la
empleabilidad. Según su estudio, los profesionales que participan en programas de educación continua
y capacitación son más propensos a mantenerse competitivos en el mercado laboral y a adaptarse a los
cambios en el entorno empresarial. Las instituciones de educación superior deben ofrecer una variedad
de programas de actualización y capacitación que permitan a los egresados desarrollar y mantener sus
competencias a lo largo de su carrera.
El análisis de las competencias blandas desarrolladas por los egresados del programa de Administración
de Empresas en Neiva ha revelado varias brechas significativas que deben ser abordadas para mejorar
la empleabilidad de los graduados. Las instituciones de educación superior deben implementar
estrategias específicas para integrar más experiencias prácticas y colaborativas en el currículo
académico, así como fomentar una cultura de aprendizaje continuo. Estas mejoras no solo aumentarán
la empleabilidad de los egresados, sino que también contribuirán al éxito y sostenibilidad de las
organizaciones en las que trabajen.
pág. 448
Comparación entre Competencias Demandadas y Desarrolladas
La comparación detallada entre las competencias y habilidades demandadas por el sector empresarial y
aquellas desarrolladas por los egresados del programa de Administración de Empresas de una institución
de educación superior en Neiva revela áreas clave de alineación y discrepancias significativas. Esta
tercera parte del análisis se centra en identificar estas áreas y ofrecer una visión integral de las
implicaciones para la formación académica y la empleabilidad.
Para realizar esta comparación, se utilizó una matriz de competencias que permitió identificar
coincidencias y brechas entre las habilidades demandadas por las empresas y las desarrolladas por los
egresados. El objetivo fue proporcionar una base sólida para la implementación de mejoras en el
currículo académico y en las estrategias de formación.
Gráfica 2. Comparación de Competencias Demandadas y Desarrolladas
La gráfica 2 muestra la comparación entre las competencias blandas y técnicas demandadas por las
empresas y aquellas que los egresados consideran haber desarrollado adecuadamente. Se observa que,
en general, existe una mayor alineación en las competencias técnicas que en las blandas. Sin embargo,
aún hay brechas significativas que deben ser abordadas para mejorar la preparación de los egresados.
Una de las competencias técnicas con mejor alineación es el dominio de Excel avanzado, demandado
por el 80% de las empresas y considerado adecuado por el 60% de los egresados. Aunque hay una brecha
del 20%, esta es menor en comparación con otras competencias. El uso de sistemas ERP también
pág. 449
muestra una brecha similar, con el 65% de las empresas demandando esta competencia y el 55% de los
egresados sintiéndose preparados.
En contraste, las competencias blandas presentan brechas más pronunciadas. La comunicación efectiva
es demandada por el 85% de las empresas, pero solo el 50% de los egresados se sienten adecuadamente
preparados en esta área. La resolución de problemas también muestra una discrepancia significativa,
con el 65% de las empresas demandando esta habilidad y solo el 40% de los egresados considerando
estar preparados.
Tabla 3. Brechas Identificadas en Competencias Blandas y Técnicas
Competencia
% de Empresas que
la Demandan
% de Egresados que la
Consideran Adecuada
Brecha (%)
Comunicación efectiva
85%
50%
35
Trabajo en equipo
75%
65%
10
Habilidades de liderazgo
70%
45%
25
Resolución de problemas
65%
40%
25
Dominio de Excel
avanzado
80%
60%
20
Uso de ERP
65%
55%
10
Análisis financiero
avanzado
70%
50%
20
Gestión de proyectos
60%
45%
15
Esta tabla destaca las brechas más significativas entre las competencias demandadas y desarrolladas,
subrayando la necesidad de intervenciones específicas en la formación académica para mejorar la
alineación.
Para abordar estas brechas y mejorar la preparación de los egresados, se recomiendan varias estrategias:
Integración de Experiencias Prácticas: Una de las principales recomendaciones es la integración de
más experiencias prácticas en el currículo académico. Esto incluye prácticas profesionales obligatorias,
proyectos colaborativos con empresas y simulaciones que permitan a los estudiantes aplicar sus
conocimientos en contextos reales (Billet, 2011).
Desarrollo de Competencias Blandas: Dado que las competencias blandas presentan las brechas más
significativas, es crucial implementar talleres y programas específicos que aborden habilidades como la
pág. 450
comunicación efectiva, el liderazgo y la resolución de problemas. Estas actividades deben ser diseñadas
para proporcionar a los estudiantes oportunidades de desarrollar y practicar estas competencias en
entornos controlados y reales (Robinson & Garton, 2008).
Programas de Mentoría y Coaching: Establecer programas de mentoría donde los estudiantes puedan
recibir orientación y apoyo de profesionales experimentados en su campo. Esto no solo ayuda a
desarrollar competencias blandas sino también a proporcionar una comprensión más profunda de las
expectativas del mercado laboral (Eby et al., 2013).
Actualización Continua del Currículo: Es esencial que las instituciones de educación superior revisen
y actualicen continuamente su currículo para asegurar que esté alineado con las demandas del mercado
laboral. Esto incluye la incorporación de nuevas tecnologías y prácticas empresariales emergentes,
asegurando que los egresados estén bien preparados para los desafíos actuales y futuros (Yorke, 2006).
Colaboración Universidad-Empresa: Fomentar una colaboración más estrecha entre las universidades
y las empresas para desarrollar programas de formación que respondan directamente a las necesidades
del mercado. Esto puede incluir la co-creación de módulos de enseñanza, la participación de
profesionales en la impartición de cursos y la organización de talleres y seminarios conjuntos (Harvey,
2000).
La formación continua se presenta como una solución vital para cerrar las brechas identificadas y
mantener la competitividad de los egresados en el mercado laboral. Los programas de educación
continua y capacitación deben ser diseñados para proporcionar a los profesionales la oportunidad de
actualizar sus conocimientos y habilidades en respuesta a las demandas cambiantes del entorno
empresarial (Friedman & Phillips, 2004).
La investigación de Eraut (2004) destaca que el aprendizaje continuo y el desarrollo profesional son
esenciales para adaptarse a los cambios en el lugar de trabajo y para el crecimiento personal y
profesional. Las instituciones de educación superior deben fomentar una cultura de aprendizaje
permanente y proporcionar los recursos necesarios para que los egresados puedan continuar
desarrollándose a lo largo de sus carreras.
Los resultados de este estudio tienen varias implicaciones importantes para la educación superior en
Neiva. Primero, es crucial que las instituciones de educación superior reconozcan y aborden las brechas
pág. 451
existentes entre las competencias demandadas por el sector empresarial y las desarrolladas por los
egresados. Esto requiere una revisión continua y actualización del currículo, así como la implementación
de estrategias específicas para mejorar tanto las competencias técnicas como las blandas.
Segundo, la colaboración con el sector empresarial debe ser fortalecida para asegurar que los programas
de formación estén alineados con las necesidades del mercado. Esta colaboración puede incluir la co-
creación de contenidos, la participación de profesionales en la enseñanza y la organización de
experiencias prácticas y proyectos conjuntos.
Finalmente, es esencial fomentar una cultura de aprendizaje continuo entre los estudiantes y egresados.
Ofrecer programas de educación continua y capacitación que permitan a los profesionales mantenerse
actualizados con las últimas tendencias y tecnologías del mercado es fundamental para su éxito a largo
plazo.
La comparación entre las competencias demandadas y desarrolladas ha revelado varias áreas críticas
que requieren atención para mejorar la formación académica y la empleabilidad de los egresados. Las
instituciones de educación superior deben implementar estrategias específicas para integrar más
experiencias prácticas y colaborativas en el currículo académico, así como fomentar una cultura de
aprendizaje continuo. Estas mejoras no solo aumentarán la empleabilidad de los egresados, sino que
también contribuirán al éxito y sostenibilidad de las organizaciones en las que trabajen.
DISCUSIÓN
La investigación realizada sobre las competencias y habilidades desarrolladas por los egresados del
programa de Administración de Empresas de una institución de educación superior en Neiva y su
comparación con las demandas del sector empresarial local ha revelado hallazgos significativos que
tienen importantes implicaciones para la educación superior y la empleabilidad. Los resultados muestran
una disparidad notable entre las competencias técnicas y blandas desarrolladas por los egresados y las
demandas del mercado laboral, subrayando la necesidad de intervenciones específicas y mejoras en la
formación académica.
En primer lugar, la evaluación de las competencias técnicas indica que, aunque los egresados poseen
una base teórica sólida, existe una brecha considerable en la aplicación práctica de estas habilidades.
Esta discrepancia es evidente en áreas como el análisis financiero avanzado, el uso de sistemas ERP y
pág. 452
la gestión de proyectos. A pesar de que los egresados se sienten preparados teóricamente, solo una
fracción de ellos considera que pueden aplicar eficazmente estos conocimientos en el entorno laboral.
Este hallazgo sugiere que los programas académicos deben integrar más experiencias prácticas, como
proyectos colaborativos, simulaciones y prácticas profesionales obligatorias, que permitan a los
estudiantes aplicar sus conocimientos en contextos reales.
Las competencias blandas, por otro lado, presentan una brecha aún más pronunciada. Habilidades como
la comunicación efectiva, el liderazgo y la resolución de problemas son altamente valoradas por los
empleadores, pero los egresados reportan sentirse insuficientemente preparados en estas áreas. Este
resultado resalta la necesidad urgente de incorporar más oportunidades para desarrollar competencias
blandas en el currículo académico. Talleres específicos, actividades colaborativas y programas de
mentoría pueden proporcionar a los estudiantes las herramientas necesarias para desarrollar y practicar
estas habilidades cruciales en entornos controlados y reales.
El análisis también destaca la importancia de la formación continua y la actualización de conocimientos
para mantener la competitividad en el mercado laboral. La participación en programas de educación
continua y capacitación es alta entre los egresados, lo que indica un reconocimiento de la necesidad de
mantenerse al día con las últimas tendencias y tecnologías del mercado. Sin embargo, las instituciones
de educación superior deben fomentar aún más esta cultura de aprendizaje permanente, ofreciendo una
variedad de programas de actualización y capacitación que permitan a los profesionales seguir
desarrollándose a lo largo de sus carreras.
La colaboración entre las universidades y el sector empresarial es otro aspecto crítico identificado en el
estudio. Las instituciones de educación superior deben trabajar en estrecha colaboración con las
empresas locales para desarrollar programas de formación que respondan directamente a las necesidades
del mercado. Esto puede incluir la co-creación de módulos de enseñanza, la participación de
profesionales en la impartición de cursos y la organización de talleres y seminarios conjuntos. Este
enfoque no solo asegurará que los egresados estén mejor preparados para las demandas del mercado
laboral, sino que también fortalecerá las relaciones entre las universidades y las empresas, beneficiando
a ambas partes.
pág. 453
Los hallazgos de esta investigación tienen varias implicaciones importantes. Primero, es evidente que
las instituciones de educación superior deben revisar y actualizar continuamente sus currículos para
asegurar que estén alineados con las demandas del mercado laboral. Esto incluye la incorporación de
nuevas tecnologías y prácticas empresariales emergentes, así como la integración de más experiencias
prácticas y oportunidades para el desarrollo de competencias blandas. Segundo, la colaboración con el
sector empresarial debe ser fortalecida para asegurar que los programas de formación estén alineados
con las necesidades del mercado. Finalmente, es esencial fomentar una cultura de aprendizaje continuo
entre los estudiantes y egresados, ofreciendo programas de educación continua y capacitación que
permitan a los profesionales mantenerse actualizados con las últimas tendencias y tecnologías del
mercado.
La comparación entre las competencias demandadas y desarrolladas ha revelado varias áreas críticas
que requieren atención para mejorar la formación académica y la empleabilidad de los egresados. Las
instituciones de educación superior deben implementar estrategias específicas para integrar más
experiencias prácticas y colaborativas en el currículo académico, así como fomentar una cultura de
aprendizaje continuo. Estas mejoras no solo aumentarán la empleabilidad de los egresados, sino que
también contribuirán al éxito y sostenibilidad de las organizaciones en las que trabajen.
CONCLUSIONES
Las conclusiones de esta investigación subrayan la necesidad urgente de reevaluar y actualizar los
programas académicos de Administración de Empresas en Neiva para cerrar la brecha entre las
competencias desarrolladas por los egresados y las demandas del mercado laboral. El análisis ha
demostrado que, aunque los egresados poseen una base teórica sólida en competencias técnicas, la
aplicación práctica de estos conocimientos es insuficiente. Esta discrepancia indica que los programas
académicos deben integrar más prácticas profesionales, proyectos colaborativos y simulaciones que
permitan a los estudiantes aplicar sus conocimientos en contextos reales, mejorando así su preparación
para el entorno laboral.
Además, las competencias blandas, esenciales para el desempeño eficaz en cualquier entorno
profesional, presentan una brecha aún más significativa. Habilidades como la comunicación efectiva, el
liderazgo y la resolución de problemas son altamente valoradas por los empleadores, pero los egresados
pág. 454
reportan sentirse insuficientemente preparados en estas áreas. Las instituciones de educación superior
deben implementar talleres específicos, actividades colaborativas y programas de mentoría que
proporcionen a los estudiantes oportunidades para desarrollar y practicar estas competencias en entornos
controlados y reales.
La investigación también destaca la importancia de la formación continua y la actualización de
conocimientos como factores clave para mantener la competitividad en el mercado laboral. Los
egresados reconocen la necesidad de participar en programas de educación continua y capacitación para
mantenerse al día con las últimas tendencias y tecnologías del mercado. Las instituciones de educación
superior deben fomentar esta cultura de aprendizaje permanente, ofreciendo una variedad de programas
de actualización y capacitación que permitan a los profesionales seguir desarrollándose a lo largo de sus
carreras.
Finalmente, la colaboración entre las universidades y el sector empresarial es esencial para asegurar que
los programas de formación estén alineados con las necesidades del mercado. Esta colaboración puede
incluir la co-creación de contenidos, la participación de profesionales en la enseñanza y la organización
de experiencias prácticas y proyectos conjuntos. Fortalecer estas relaciones no solo asegurará que los
egresados estén mejor preparados para las demandas del mercado laboral, sino que también beneficiará
a ambas partes, contribuyendo al éxito y sostenibilidad de las organizaciones en las que trabajen y al
desarrollo continuo de las instituciones educativas.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Andrews, J., & Higson, H. (2008). Graduate employability, 'soft skills' versus 'hard' business knowledge:
A European study. Higher Education in Europe, 33(4), 411-422.
doi: 10.1080/03797720802522627
Andrews, M., & Russell, M. (2012). Employability Skills Development: Strategy, Practice and
Performance in University Education. Journal of Education and Work, 25(3), 275-295.
doi: 10.1080/13639080.2010.511175
Billet, S. (2011). Learning Through Practice: Models, Traditions, Orientations and Approaches.
Springer.
pág. 455
Bridgstock, R. (2009). The Graduate Attributes We’ve Overlooked: Enhancing Graduate Employability
through Career Management Skills. Higher Education Research & Development, 28(1), 31-44.
doi: 10.1080/07294360802444347
Chell, E., & Athayde, R. (2011). Planning for Uncertainty: Soft Skills, Hard Skills, and Innovation in
Creative Disciplines. International Journal of Innovation Science, 3(3), 131-143.
Eby, L. T., Allen, T. D., Evans, S. C., Ng, T., & DuBois, D. L. (2013). Does Mentoring Matter? A
Multidisciplinary Meta-Analysis Comparing Mentored and Non-Mentored Individuals. Journal
of Vocational Behavior, 72(2), 254-267.
Eraut, M. (2004). Informal Learning in the Workplace. Studies in Continuing Education, 26(2), 247-
273.
Friedman, T. L., & Phillips, M. (2004). The Role of Work Experience in the Future Employability of
Higher Education Graduates. Higher Education Quarterly, 58(3), 348-372.
Harvey, L. (2000). New Realities: The Relationship between Higher Education and Employment.
Tertiary Education and Management, 6(1), 3-17. doi: 10.1080/13583883.2000.9967007
Heckman, J. J., & Kautz, T. (2012). Hard Evidence on Soft Skills. Labour Economics, 19(4), 451-464.
doi: 10.1016/j.labeco.2012.05.014
Helyer, R., & Lee, D. (2014). The Role of Work Experience in the Future Employability of Higher
Education Graduates. Higher Education Quarterly, 68(3), 348-372. doi: 10.1111/hequ.12055
Jackson, D. (2010). An International Profile of Industry-Relevant Competencies and Skill Gaps in
Modern Graduates. International Journal of Management Education, 8(3), 29-58. doi:
10.3794/ijme.83.288
Kelley, C., & Bridges, C. (2005). Introducing Leadership Skills to Undergraduate Engineering Students.
Journal of Engineering Education, 94(2), 175-181. doi: 10.1002/j.2168-9830.2005.tb00838.x
Robinson, J. P., & Garton, B. L. (2008). An Assessment of the Employability Skills Needed by Graduates
in the College of Agriculture, Food and Natural Resources at the University of Missouri. Journal
of Agricultural Education, 49(4), 96-105.
Robles, M. M. (2012). Executive Perceptions of the Top 10 Soft Skills Needed in Today’s Workplace.
Business Communication Quarterly, 75(4),