ESTRATEGIAS LÙDICO-PEDAGÒGICAS PARA
DISMINUIR EL IMPACTO AMBIENTAL DE LOS
RESIDUOS SÒLIDOS CON GRADO TERCERO
DE LA INSTITUCIÒN EDUCATIVA LITORAL
PACIFICO
REDUCING ENVIRONMENTAL IMPACT FROM THE
CLASSROOM: A PLAYFUL APPROACH TO WASTE
MANAGEMENT AT THE LITORAL PACÍFICO
EDUCATIONAL INSTITUTION
Sandra Stella Aguirre
Universidad Popular del Cesar, Colombia
Jose Ariel Reina Benitez
Universidad Popular del Cesar, Colombia
Efrain Gonzales Avellaneda
Universidad Popular del Cesar, Colombia
pág. 13478
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v8i5.14808
Estrategias Lúdico-Pedagógicas para Disminuir el Impacto Ambiental de
los Residuos Sólidos con Grado tercero de la Institución Educativa Litoral
Pacifico
Sandra Stella Aguirre1
miltonyesquen@gmail.com
https://orcid.org/0009-0005-9213-8852
Universidad Popular del Cesar
Colombia
Jose Ariel Reina Benitez
jreiben0927@gmail.com
https://orcid.org/0009-0008-4331-9640
Universidad Popular del Cesar
Colombia
Efrain Gonzales Avellaneda
efrain730315@gmail.com
https://orcid.org/0000-0002-3650-9699
Universidad Popular del Cesar
Colombia
RESUMEN
Esta investigación explora cómo las estrategias lúdico-pedagógicas pueden transformar el aprendizaje
ambiental en estudiantes de grado tercero en la Institución Educativa Litoral Pacífico, Sede Boca de
Víbora, ubicada en Bocas de Satinga, Olaya Herrera, Nariño. El estudio tiene como objetivo desarrollar
prácticas educativas que fomenten una mayor conciencia y participación en el manejo de residuos
sólidos, abordando el problema desde la perspectiva del desarrollo sostenible. La metodología utilizada
combina observación directa y entrevistas semiestructuradas, permitiendo una aproximación cualitativa
y cuantitativa de la realidad educativa en el contexto rural. Los resultados indican un impacto positivo
en el compromiso de los estudiantes con el medio ambiente, evidenciando una mejor disposición en el
manejo de residuos, una mayor participación en actividades de reciclaje y un conocimiento más
profundo sobre la conservación ambiental. Las conclusiones destacan la importancia de integrar juegos
y dinámicas interactivas en la educación ambiental para generar cambios significativos en las actitudes
y comportamientos de los estudiantes hacia el entorno.
Palabras clave: educación ambiental, estrategias lúdico-pedagógicas, manejo de residuos,
sostenibilidad, conciencia ambiental
1
Autor principal
Correspondencia: miltonyesquen@gmail.com
pág. 13479
Reducing Environmental Impact from the Classroom: A Playful Approach
to Waste Management at the Litoral Pacifico Educational Institution
ABSTRACT
This research examines how playful-pedagogical strategies can transform environmental learning
among third-grade students at the Litoral Pacífico Educational Institution, Boca de Víbora branch,
located in Bocas de Satinga, Olaya Herrera, Nariño. The study aims to develop educational practices
that promote greater awareness and engagement in solid waste management, addressing the issue from
a sustainable development perspective. The methodology combines direct observation and semi-
structured interviews, allowing for both qualitative and quantitative insights into the educational reality
within a rural setting. Results indicate a positive impact on students’ environmental commitment, as
shown by improved waste management habits, increased participation in recycling activities, and a
deeper understanding of environmental conservation. The conclusions emphasize the importance of
incorporating games and interactive dynamics into environmental education to foster meaningful
changes in students' attitudes and behaviors toward their surroundings.
Keywords: environmental education, playful-pedagogical strategies, waste management,
sustainability, environmental awareness
Artículo recibido 07 septiembre 2024
Aceptado para publicación: 10 octubre 2024
pág. 13480
INTRODUCCIÓN
El impacto ambiental de los residuos sólidos representa un desafío global que exige la formación de una
conciencia ambiental desde edades tempranas. En comunidades rurales como Bocas de Satinga, Olaya
Herrera, Nariño, esta problemática se agudiza debido a limitaciones en la gestión de residuos y
condiciones socioeconómicas particulares. Sin embargo, estas mismas condiciones abren la puerta al
uso de enfoques innovadores como las estrategias lúdico-pedagógicas, que fomentan el aprendizaje
dinámico y significativo en los estudiantes.
Este estudio analiza cómo los juegos sensoriales, artísticos y motores pueden fortalecer la conciencia
ambiental en estudiantes de grado tercero de la Institución Educativa Litoral Pacífico, Sede Boca de
Víbora. Estas actividades no solo captan la atención y participación, sino que también promueven
aprendizajes vivenciales y cambios de comportamiento frente al manejo de residuos. Además, se plantea
que este enfoque fomenta valores y actitudes sostenibles desde la educación básica, permitiendo que los
estudiantes extiendan estos aprendizajes a sus hogares y comunidades.
El contexto rural de Bocas de Satinga añade una dimensión relevante, evidenciando cómo estrategias
adaptadas a las particularidades locales pueden superar barreras logísticas y de infraestructura.
Metodológicamente, la investigación emplea observación directa y entrevistas semiestructuradas,
proporcionando un análisis integral del impacto de estas estrategias en la percepción y prácticas
ambientales de los estudiantes.
Finalmente, se retoma el enfoque de Sterling (2001), quien destaca la necesidad de metodologías
educativas transformadoras que trasciendan la transmisión de conocimientos, involucrando prácticas
reflexivas y activas que conviertan a los estudiantes en agentes de cambio frente a los desafíos
ambientales actuales y futuros.
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Figura 1. Estudiantes de grado tercero Institución Educativa Litoral Pacífico, Sede Boca de Víbora,
municipio Bocas de Satinga Olaya Herrera Nariño
Fuente: Esta investigación 2024
METODOLOGÍA
La metodología implementada se centra en diseñar, ejecutar y evaluar estrategias lúdicas adaptadas al
contexto de los estudiantes de tercer grado de la Institución Educativa Litoral Pacífico, sede Boca de
Víbora, en Bocas de Satinga, Olaya Herrera, Nariño. Este enfoque busca fomentar el aprendizaje
significativo mediante actividades que estimulan la creatividad y la participación activa, integrando
elementos de sostenibilidad y educación ambiental.
Fase 1: Planificación
Se diseñaron actividades lúdicas en colaboración con docentes y expertos en educación ambiental,
priorizando la adaptación al contexto cultural y educativo de los estudiantes. Las estrategias incluyeron:
Juegos de exploración sensorial: Actividades como “El misterio de los materiales” permitieron a los
estudiantes identificar residuos reciclables y no reciclables mediante el tacto y la vista, promoviendo la
comprensión de su adecuado manejo.
Talleres de reciclaje creativo: En “Creadores del cambio”, los estudiantes elaboraron objetos útiles
como macetas o juguetes usando materiales reciclables recolectados de su entorno.
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Dramatización ambiental: Representaciones teatrales como “La historia de una botella que llegó al
mar” ayudaron a comprender el impacto de los residuos en los ecosistemas.
Juegos de roles: En “Guardianes del medioambiente”, los estudiantes asumieron roles activos en la
protección ambiental, promoviendo acciones sostenibles dentro y fuera del aula.
Preparación de Materiales
Se priorizó el uso de recursos reciclables y de fácil acceso, acondicionando espacios como un taller de
reciclaje, un área sensorial y un escenario ambiental. Esto permitió organizar las actividades y facilitar
la transición entre ellas, maximizando el aprendizaje en un contexto rural con recursos limitados.
Fase 2: Ejecución de las Actividades
La segunda fase de la metodología consistió en la implementación de las estrategias lúdico-
pedagógicas con el grupo de estudiantes. Para cada actividad, se llevó a cabo una breve introducción
que explicó el objetivo y contexto de la misma, utilizando un lenguaje simple y motivador. La ejecución
de las actividades se realizó en sesiones semanales de 45 minutos durante un período de tres meses,
permitiendo observar tanto la evolución del conocimiento ambiental en los estudiantes como su
participación e interés en los temas.
Dinámica de Participación Activa
Cada actividad fue diseñada para promover una participación activa y constante. Para garantizar el
interés de los estudiantes, se realizaron pequeños concursos y premios simbólicos que resaltaron la
importancia de las buenas prácticas ambientales. En la actividad “Guardianes del medioambiente”, por
ejemplo, se otorgaron distintivos a los grupos que mejor ejecutaron sus roles, incentivando tanto el
trabajo en equipo como el compromiso individual con la causa ambiental.
Apoyo en el Proceso de Reflexión
Al finalizar cada actividad, se dedicó un tiempo específico para que los estudiantes pudieran compartir
sus experiencias y reflexionar sobre lo aprendido. Estos momentos de reflexión ayudaron a consolidar
el aprendizaje y a dar sentido a las actividades lúdicas, relacionándolas directamente con su vida
cotidiana y con la realidad ambiental de su comunidad.
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Observación y Registro de Progresos
Para evaluar el impacto de cada actividad, se llevó a cabo una observación detallada del
comportamiento, las respuestas y la interacción de los estudiantes con los materiales y el tema ambiental.
Este proceso incluyó el registro en diarios de campo y la recopilación de comentarios espontáneos de
los estudiantes, permitiendo así un análisis cualitativo de los avances en la comprensión y valoración
ambiental de cada participante.
Fase 3: Evaluación y Análisis de Resultados
La última fase de la metodología se centró en analizar los resultados obtenidos a través de la aplicación
de las estrategias lúdicas. La evaluación incluyó una serie de técnicas cuantitativas y cualitativas que
permitieron medir tanto el impacto de las actividades en el conocimiento ambiental de los estudiantes
como su cambio de actitud hacia el cuidado del medio ambiente.
Encuestas de Percepción y Conocimiento Ambiental
Al inicio y al final del período de intervención, se aplicaron encuestas que midieron la percepción y
conocimientos ambientales de los estudiantes. Estas encuestas incluyeron preguntas sencillas y gráficas
para que los estudiantes de tercer grado pudieran expresar su nivel de comprensión sobre el reciclaje, la
importancia de reducir el uso de materiales no biodegradables y su rol en la conservación del entorno.
Análisis de Cambios en la Conducta
Uno de los aspectos más relevantes fue observar los cambios en la conducta de los estudiantes respecto
al manejo de residuos. Se registraron las veces en las que, durante el recreo o al finalizar las actividades,
los estudiantes depositaban los residuos en los lugares adecuados, así como las ocasiones en que
explicaban a sus compañeros y familiares la importancia de clasificar los residuos. Este análisis fue
clave para identificar la efectividad de las estrategias en la generación de prácticas sostenibles.
Por ello Hungerford y Volk (1990) sostienen que la educación ambiental debe enfocarse en el desarrollo
de habilidades prácticas que fomenten la resolución de problemas ambientales. En sus investigaciones,
estos autores defienden la idea de que el aprendizaje efectivo en temas ambientales requiere de una
participación activa y de la construcción de valores ecológicos, lo cual se alinea con la implementación
de estrategias pedagógicas que permitan a los estudiantes experimentar y comprometerse con el cuidado
del medio
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Retroalimentación y Revisión de Actividades
Para finalizar, se realizó una retroalimentación con los estudiantes y los docentes, quienes compartieron
sus impresiones sobre las actividades lúdicas. Este proceso de retroalimentación brindó información
valiosa para ajustar y mejorar las estrategias, asegurando que el enfoque lúdico-pedagógico pueda ser
replicado en otros grupos y contextos.
Conclusión de la Metodología
La metodología propuesta logró integrar de manera efectiva el aprendizaje lúdico con la educación
ambiental, promoviendo en los estudiantes de tercer grado un cambio de percepción y una actitud más
comprometida hacia el cuidado del medio ambiente. Las actividades lúdico-pedagógicas mostraron ser
una herramienta poderosa y replicable para fomentar en los estudiantes un sentido de responsabilidad
ambiental, destacando la importancia de actuar desde lo cotidiano y de manera colectiva para preservar
el planeta.
Por otro lado, Brundtland establece en el informe Our Common Future la idea fundamental de desarrollo
sostenible, entendida como la satisfacción de las necesidades presentes sin comprometer la capacidad
de las futuras generaciones. Este principio inspira la propuesta educativa, ya que refuerza la importancia
de promover prácticas que fomenten un equilibrio entre el crecimiento humano y el respeto por el
entorno natural.
Figura 2. Vigilantes del reciclaje
Fuente: Esta investigación 2024
pág. 13485
Figura 3. Creadores del cambio.
Fuente: Esta investigación 2024
De tal manera, Leopold (1949), en A Sand County Almanac, invita a repensar la relación entre las
personas y la naturaleza, estableciendo principios éticos que conectan la educación y la conservación.
Su visión resalta la necesidad de inculcar en las nuevas generaciones una ética de respeto y cuidado
hacia el medio ambiente, promoviendo una responsabilidad compartida por preservar el equilibrio
natural. Este enfoque se vuelve esencial en el contexto educativo, donde los estudiantes pueden aprender
a valorar y proteger los ecosistemas a través de un entendimiento práctico y ético de su rol dentro del
entorno natural.
RESULTADOS
La investigación evidencia el impacto positivo de las estrategias lúdicas en la educación ambiental de
los estudiantes de tercer grado de la Institución Educativa Litoral Pacífico. A través de actividades como
juegos, dramatizaciones y talleres, se lograron avances significativos en tres dimensiones: conocimiento
ambiental, actitud proambiental y prácticas de manejo de residuos.
Conocimiento Ambiental
El conocimiento de los estudiantes sobre residuos y reciclaje aumen notablemente. Antes de la
intervención, solo el 30% podía clasificar correctamente materiales reciclables. Al finalizar, esta cifra
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ascendió al 85%, gracias a actividades como “El misterio de los materiales”, donde identificaron
materiales mediante experiencias sensoriales. Estos resultados coinciden con estudios que destacan el
aprendizaje multisensorial como facilitador de la comprensión ambiental.
Actitud Proambiental
Las actividades lúdicas fomentaron un cambio profundo en la actitud de los estudiantes hacia el cuidado
del entorno. Juegos de rol y dramatizaciones como “La historia de una botella que llegó al mar”
generaron reflexión y empatía hacia los problemas ambientales, mientras que el 90% mostró interés en
implementar prácticas sostenibles tanto en casa como en la escuela. Estas experiencias reforzaron el
compromiso emocional y práctico con la sostenibilidad.
Prácticas de Manejo de Residuos
Se observó una mejora en la separación y disposición de residuos dentro de la escuela. Más del 80% de
los estudiantes participaron activamente en el proyecto “Creadores del cambio”, reutilizando materiales
reciclables para elaborar objetos útiles. Esta práctica tangible reforzó la comprensión de los beneficios
del reciclaje y la reutilización.
DISCUSIÓN
Los resultados destacan la eficacia de las estrategias lúdicas para promover aprendizajes significativos
y cambios de conducta ambiental. Estas actividades no solo integran conocimientos, sino que también
desarrollan valores y habilidades prácticas, convirtiéndose en herramientas clave para la sensibilización
ambiental, especialmente en contextos rurales con limitaciones educativas.
Sin embargo, es importante reconocer ciertas limitaciones en el diseño de la investigación, tales como
la disponibilidad de materiales para las actividades y el tiempo de intervención, que puede haber influido
en la sostenibilidad a largo plazo de las prácticas aprendidas. En futuros estudios, sería ideal ampliar el
período de observación para evaluar cómo estos cambios perduran en el tiempo y cómo pueden
reforzarse mediante un acompañamiento continuo de las familias y la comunidad en general.
Reflexión Final
A la luz de los resultados obtenidos, se puede afirmar que las estrategias lúdicas constituyen una a
prometedora para la educación ambiental en comunidades rurales. Este enfoque no solo proporciona
conocimientos teóricos, sino que también fomenta un aprendizaje que se refleja en acciones concretas y
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un compromiso genuino de los estudiantes. La experiencia de asumir roles de protectores del medio
ambiente y de participar activamente en la clasificación y reutilización de materiales demuestra que,
cuando se involucra al estudiante de forma práctica y emocional, los conceptos de sostenibilidad se
convierten en parte integral de su vida cotidiana. Como señala Tilbury (1995), la educación ambiental
en el contexto de la sostenibilidad debe ir más allá de la mera transmisión de conocimientos para
“habilitar a los estudiantes a tomar decisiones informadas y desarrollar habilidades críticas y prácticas
que los empoderen para actuar en favor del medio ambiente."
En conclusión, esta investigación revela que las actividades lúdico-pedagógicas tienen el potencial de
inspirar en los estudiantes de tercer grado una actitud de respeto y cuidado hacia el medio ambiente, un
paso crucial hacia la construcción de una sociedad más consciente y comprometida con el desarrollo
sostenible. Este enfoque puede servir como modelo para otras instituciones educativas en contextos
similares, abriendo un camino hacia una educación ambiental más inclusiva, efectiva y significativa para
las generaciones futuras.
Figura 4. Logro de los estudiantes de tercero
Fuente: Esta investigación 2024
El autor Orr (1994) explora el papel fundamental de la educación ambiental como una herramienta para
la construcción de una sociedad sustentable. Su análisis resalta que el aprendizaje debe estar orientado
a la acción y no solo a la teoría, impulsando en los estudiantes una conciencia que trascienda el aula
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para llevarse a la vida cotidiana. Orr enfatiza la necesidad de prácticas educativas que desarrollen
habilidades críticas para enfrentar los retos ambientales desde una perspectiva consciente y responsable.
Para Jickling y Wals (2008) discuten la importancia de una educación ambiental que fomente el
pensamiento crítico y la participación activa de los estudiantes en el contexto de la sostenibilidad. Estos
autores proponen un enfoque que permita a los estudiantes analizar los problemas ambientales de forma
amplia y práctica, ayudándolos a desarrollar una conciencia ambiental que se refleje en sus acciones y
decisiones. Sus planteamientos refuerzan la relevancia de metodologías pedagógicas que incluyan
actividades lúdicas y participativas en el proceso de aprendizaje.
CONCLUSIONES
La implementación de estrategias lúdico-pedagógicas en el contexto educativo de grado tercero en la
Institución Educativa Litoral Pacífico, Sede Boca de Víbora, municipio de Bocas de Satinga, ha
demostrado ser una experiencia transformadora, tanto para los estudiantes como para el proceso mismo
de enseñanza. Los resultados obtenidos revelan que el aprendizaje ambiental a través de actividades
lúdicas permite a los estudiantes desarrollar una comprensión más profunda sobre el manejo de residuos
sólidos y una conexión emocional con la protección de su entorno. Estas actividades, cuidadosamente
diseñadas para fomentar la exploración, el descubrimiento y la creatividad, promovieron cambios
positivos no solo en el conocimiento de los estudiantes, sino también en sus actitudes y comportamientos
ambientales.
La metodología empleada en esta investigación mostró cómo los juegos, las dramatizaciones y los
talleres de reciclaje pueden trascender el aprendizaje teórico, al conectar los contenidos educativos con
experiencias de vida significativas. En un contexto donde el manejo de residuos sólidos suele percibirse
como algo ajeno, el enfoque lúdico ayudó a que los estudiantes internalicen valores y prácticas de
sostenibilidad de manera natural y auténtica. Este cambio fue posible porque las actividades apelaron a
su curiosidad y les dieron la oportunidad de asumir roles proactivos, como guardianes del medio
ambiente, lo cual facilitó un compromiso genuino con las acciones proambientales.
La introducción de la lúdica en la enseñanza ambiental en comunidades rurales, como la de Bocas de
Satinga, plantea un modelo que responde a las necesidades específicas de los estudiantes en contextos
locales. En un mundo donde los retos ambientales exigen soluciones innovadoras y participativas, el uso
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de herramientas pedagógicas que incluyan el juego, la experimentación y la creación de roles activos
permite que los estudiantes se sientan no solo involucrados, sino responsables del bienestar de su
entorno. Esta conexión emocional y práctica refuerza el aprendizaje de una manera que va más allá del
aula, promoviendo hábitos que pueden extenderse a sus hogares y comunidades.
A pesar de los logros observados, esta investigación también destaca ciertas limitaciones, como la
duración de la intervención y la necesidad de recursos adicionales para la sostenibilidad de las prácticas
ambientales en el tiempo. Estos factores subrayan la importancia de un seguimiento continuo y de la
participación activa de otros actores sociales, como las familias y las organizaciones comunitarias, en el
fortalecimiento de estos aprendizajes. Integrar a los estudiantes en iniciativas que tengan un impacto
más amplio en su comunidad podría multiplicar los efectos positivos de este tipo de educación,
generando una cultura ambiental que perdure y se expanda.
Finalmente, los hallazgos obtenidos en esta investigación contribuyen a validar el enfoque lúdico-
pedagógico como una herramienta educativa valiosa y necesaria para la educación ambiental en las
primeras etapas de la vida escolar. La capacidad de los estudiantes para apropiarse del conocimiento
ambiental, desarrollar un sentido de responsabilidad y aplicar acciones concretas demuestra que la lúdica
puede ser una estrategia clave para formar ciudadanos conscientes, comprometidos y capaces de
enfrentar los desafíos ambientales de manera ética y responsable. Es posible que, al replicar y adaptar
este enfoque en otros entornos escolares y comunidades, se puedan cultivar generaciones de jóvenes que
no solo entiendan los problemas ambientales, sino que también adopten, desde temprana edad, un rol
activo en la construcción de un mundo más sostenible.
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