pág. 1624
USO TERAPÉUTICO DEL CANNABIDIOL
EN CANINOS
THERAPEUTIC USE OF CANNABIDIOL
IN CANINES
Bernal Roa José Manuel
Escuela de Guías y Adiestramiento Canino
Noreña Valencia Daniel Julián
Escuela de Guías y Adiestramiento Canino
María Angelica Cardozo Niño
Escuela de Guías y Adiestramiento Canino
David Orlando Gutiérrez Guauta
Escuela de Guías y Adiestramiento Canino
Gabriel Antonio Bohorquez
Escuela de Guías y Adiestramiento Canino
pág. 1625
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v8i6.14928
Uso Terapéutico Del Cannabidiol En Caninos
José Manuel Bernal Roa1
jose.bernal1592@correo.policia.gov.co
https://orcid.org/0009-0008-3398-8349
Guía K-9 Dirección Antinarcóticos
Escuela de Guías y Adiestramiento Canino
Agente Álvaro Rojas Ahumada
de la Policía Nacional
Daniel Julián Noreña Valencia
daniel.norena3967@correo.policia.gov.co
https://orcid.org/0009-0006-3030-0399
PONALSAR Policía Nacional
Escuela de Guías y Adiestramiento Canino
Agente Álvaro Rojas Ahumada
de la Policía Nacional
María Angelica Cardozo Niño
maria.cardozo4146@correo.policia.gov.co
https://orcid.org/0009-0007-4489-2580
Escuela de Guías y Adiestramiento Canino
Dirección de Educación Policial
Facatativá Cundinamarca
David Orlando Gutiérrez Guauta
https://orcid.org/0000-0001-9438-3740
david.gutierrez7357@correo.policia.gov.co
Escuela de Guías y Adiestramiento Canino
Dirección de Educación Policial
Facatativá Cundinamarca
Gabriel Antonio Bohorquez
gabrielbohorquez957@gmail.com
https://orcid.org/0000-0003-4189-1092
Escuela de Guías y Adiestramiento Canino
Dirección de Educación Policial
Facatativá Cundinamarca
RESUMEN
El cannabidiol (CBD), el principal compuesto no psicoactivo que se encuentra en la Cannabis Sativa,
se usa con frecuencia tanto como nutracéutico como terapéutico, debido a los efectos farmacológicos
que incluyen antiinflamatorio, analgésico, antipruriginoso, ansiolítico, inhibidor del crecimiento
tumoral y anticonvulsivo, propiedades que han hecho de él una opción de tratamiento atractiva para
evitar o disminuir los efectos secundarios de los fármacos tradicionales. Sin embargo, debido a la
escasez de estudios científicos sólidos prescripción en perros es limitada, el propósito de esta
investigación es describir los beneficios terapéuticos del cannabidiol en caninos a través de una revisión
bibliográfica para proporcionar fiabilidad para que los veterinarios informen a sus usuarios sobre el uso
y la seguridad de los productos de CBD. Se consulta e identifica los reportes más relevantes del
cannabidiol en perros, seleccionando así la información de su uso terapéutico, describiendo sus
características, propiedades, dosificación, vías de administración y eventos adversos. Se discute con
ensayos clínicos y resultados basado en evidencia experimental.
Palabras clave: cannabidiol, CBD, cannabis sativa, cañama, caninos
1
Autor principal
Correspondencia: jose.bernal1592@correo.policia.gov.co
pág. 1626
Therapeutic Use of Cannabidiol in Canines
ABSTRACT
Cannabidiol (CBD), the main non-psychoactive compound found in Cannabis Sativa, is frequently used
as both a nutraceutical and therapeutic, due to pharmacological effects including anti-inflammatory,
analgesic, anxiolytic, inhibitory of tumor growth and anticonvulsant, properties that have made it an
attractive treatment option to avoid or reduce the side effects of traditional drugs. However, due to the
paucity of robust prescription studies in dogs is limited, the purpose of this research is to describe the
therapeutic benefits of cannabidiol in canines through a literature review to provide confidence for
veterinarians to inform their users about the use and the safety of CBD products. The most relevant
reports of cannabidiol in dogs are consulted and identified, thus selecting the information on its
therapeutic use, describing its characteristics, properties, dosage, routes of administration and adverse
events. It is discussed with clinical trials and results based on experimental evidence.
Keywords: cannabidiol, CBD, cannabis sativa, hemp, canines
Artículo recibido 02 octubre 2024
Aceptado para publicación: 12 noviembre 2024
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INTRODUCCIÓN
El cannabidiol (CBD) es un fitocannabinoide no alucinógeno proveniente de la planta Cannabis sativa,
actualmente se encuentra en varios tipos de productos fabricados y comercializados para el consumo o
aplicación de personas, gatos y perros (Parker, 2021) por sus efectos ansiolíticos, anticonvulsivos,
antiinflamatorios, antipruriginosos, analgésicos, antitumorales y antipsicóticos (Brutlag, A., &
Hommerding., 2018; Gross et al., 2020; Henry et al., 2021; Morris et al. 2021; Simpson et al., 2020),
generando así la necesidad de información que contiene dicho componente a través de la investigación
científica para proporcionar fiabilidad para que los veterinarios informen a sus usuarios sobre el uso y
la seguridad de los productos de CBD (Vaughan, 2020), los cuales, presentan varias vías de
administración como son oral, transdérmica, sublingual e intravenosa. Hasta el día de hoy, todavía se
estudia sobre las propiedades del este y su uso terapéutico para animales de compañía, así mismo, sus
posibles eventos adversos y contraindicaciones.
Existen varios factores que ha perjudicado el avance del Cannabidiol, el primero es la obstaculización
en su investigación debido al estatus de la planta Cannabis Sativa para producir marihuana, siendo esta
una droga ilícita. Así mismo, el más destacado es la cantidad limitada de información, falta de estudios
científicos y recursos disponibles para su prescripción en perros, generando así desconfianza tanto por
parte de la comunidad veterinaria como los propietarios de los animales de compañía. No obstante,
muchos tenedores están cada vez más dispuestos a probar productos con base al CBD para ayudarles en
una amplia gama de problemas médicos y de comportamientos, siendo los más relevantes la osteoartritis
(OA), reducción del dolor, ansiedad y ataques epilépticos, convirtiéndose en un tratamiento alternativo
a los medicamentos tradicionales y que tienen efectos secundarios potenciales, especialmente en
pacientes geriátricos (Kogan et al., 2020).
Por lo tanto, el objetivo de este artículo es describir los beneficios terapéuticos del cannabidiol en
caninos, a través de la revisión sobre los reportes más relevantes del cannabidiol en perros,
seleccionando así la información de su uso terapéutico. Para ello, se define primero el CBD,
características, derivación y composición, posteriormente describiendo una recopilación sobre la
investigación actual sobre los usos y beneficios terapéuticos del CBD en perros, con sus respectivas
presentaciones que existen en el mercado para animales de compañía.
pág. 1628
METODOLOGÍA
La revisión del material bibliográfico se realizó mediante motores de búsqueda como Google
Académico y bases de datos disponibles tales como Science Direct, Scopus, ProQuestm Scielo,
Springerm, PudMed, Frontiers in Veterinary Science, Servicio Internacional de Información Veterinaria
(IVIS). Así mismo, se utilizó información científica disponible en tesis de grado y libros. Siendo así una
investigación de tipo documental con corte descriptivo cualitativo, debido a se extrae y recopila la
información más relevante y necesaria a través de la consulta, identificación y obtención de literatura
científica (Hernández-Sampieri, 2017).
Los criterios de búsqueda para la localización de los artículos se realizaron utilizando los siguientes
términos de búsqueda: Cannabidiol – CBD, animales de compañía (companion animals), perro (dog),
canino (canine), beneficios terapéuticos (therapeutic benefits), mascotas (pets), Cannabis, terapéuticos
(therapeutic), fitoterapéutico (phytotherapeutic), animal.
Empleando diferentes combinaciones y operadores lógicos tales como y/o/and/or, con la finalidad de
incluir artículos que no guardan relación con el tema y evitar la exclusión de aquellos estudios
relevantes. La selección de materiales fue realizada en español e inglés, sin limitación de fecha dado al
que tema seleccionado tiene un bajo material científico a comparación de otros temas.
Además, las pautas de inclusión implicaron en aquellas publicaciones cuya temática tuviera relación con
los beneficios terapéuticos del cannabidiol en el área de veterinaria, mientras que las pautas de exclusión
fue la información de estudios que no se ajuste con los objetivos planteados.
Revisión Bibliográfica
La planta Cannabis Sativa contiene un mínimo de 480 compuestos distintos, hoy en día, no sé tiene
conocimiento del número máximo (Corsetti et al., 2021; Parker, 2021), esta se utiliza para producir tanto
cáñamo como marihuana. Ambos productos vegetales contienen compuestos químicos activos que se
encuentran en los tallos, flores y semillas de la planta conocidos como los cannabinoides, siendo el
cannabidiol (CBD) y el tetrahidrocannabinol (THC) de los más de 110 cannabinoides conocidos
producidos en los tricomas glandulares (Morris et al., 2021). El primero reconocido por tener diferentes
efectos beneficiosos terapéuticos (Brutlag, A., & Hommerding., 2018) (Morris et al., 2021), mientras
que el segundo es responsable de los efectos fisiológicos psicotrópicos y toxicidad en perros en ciertas
pág. 1629
dosis. El cáñamo se caracteriza por tener una reducida concentración de THC y producir un mayor
porcentaje de CBD en comparación con la marihuana. Sin embargo, ambas sustancias comparten la
misma fórmula química, la cual, es C21H30O2 con la excepción de que entre los dos difieren en la
disposición estructural de las moléculas. El perfil farmacológico del CBD es totalmente diferente al del
THC, se han publicado mucha información de posibles objetivos del CDB, en donde, se enfatiza que el
posible mecanismo de acción tiene una relevancia funcional de los receptores endocannabinoides CB1
y CB2 (Potschka et al., 2022).
La investigación actual refleja que la introducción del CBD en el área veterinaria es relativamente
reciente, sin embargo, ha habido un interés considerable en el uso de este en animales de compañía,
ya que, se menciona que puede ayudar a mejorar alergias, ansiedad y miedo, pérdida de apetito y
problemas digestivos, problemas de artritis, articulaciones y movilidad, cáncer y tumores, problemas
de la piel, convulsiones y epilepsia, inflamación, glaucoma y espasmos (Gross et al., 2020; Henry et
al., 2021; Rumple, 2018).
Un estudio realizado en el 2021, el cual, tenía como finalidad determinar la percepción de los
veterinarios con respecto al uso terapéutico del CBD en perros y gatos, determinó que la percepción es
positiva siendo utilizado así para manejo de dolor, neoplasias, convulsiones, ansiedad, cuidados
paliativos y afecciones músculo esqueléticas (Rázuri & Rugen, 2021). Sin embargo, la oferta de los
productos no es directamente proporcional con la investigación que respalda su eficiencia y eficacia. No
obstante, se muestra una tendencia general de resultados benéficos del CBD en animales de compañía
(Morris et al., 2021).
En el control de dolor crónico, especialmente el de origen por osteoartritis (OA) varios estudios
mencionan como resultados la disminución significativa del dolor durante el tratamiento con aceite de
CBD. De igual modo, la adición de este componente mejoró las puntuaciones de dolor reportadas por
los tenedores, la movilidad y calidad de vida de los perros sin efectos adversos graves, permitiendo así
la reducción de la dosis de otros fármacos, demostrando ser más eficiente en una relación de
costo/beneficio, en relación al ketoprofeno, otro fármaco utilizado en esta patología (Achi & Macay,
2021; Gamble et al., 2018, Kogan et al., 2020).
pág. 1630
Por otro lado, también se ha reportado otros resultados en otras afecciones como son los resultados de
la investigación de Morris et al. (2021), sugieren el potencial del CBD para el tratamiento de afecciones
de la piel como alergias en perros, debido que durante el estudio se evidenció un posible efecto
antipruriginoso. McGrath et al. (2019) investigó el uso del CBD en el tratamiento de convulsiones
idiopáticas en perros, en donde, como resultado encontraron una reducción significativa del 89% en la
frecuencia de las convulsiones recibiendo una dosis de 2.5 mg/kg cada 12 horas, en comparación con
una reducción del 43% en el grupo de control. Ambos grupos de estudio estaban recibiendo
simultáneamente tratamiento farmacológico antiepiléptico convencional. Más reciente, se publicaron
los resultados de otro ensayo clínico, en donde, durante la exposición a CBD, la frecuencia de las
convulsiones y la cantidad de días con actividad convulsiva fueron significativamente menores que
durante la fase de placebo (García et al., 2022).
De igual modo, se ha comenzado a identificar actividades potenciales que pueden utilizarse para la
terapia contra el cáncer, debido a que consistentemente este componente ha generado la muerte celular
apoptótica in vitro e in vivo para diversos tipos de neoplasia (Gross et al., 2020; Jeong et al., 2019).
En una investigación realizada por Henry et al. (2021), mencionan como resultado le reducción
significativa de la proliferación de células cancerosas caninas, siendo más efectivo en combinación
con la vincristina con un efecto sinérgico, concluyendo que el CBD es eficaz para obstaculizar la
proliferación celular y la inducción de autofagia y apoptosis rápidamente en líneas celulares
neoplásica.
Datos recientes han demostrado que el sistema endocannabinoide es completamente funcional en la
piel y es responsable de mantener muchos factores de la homeostasis tales como la proliferación, la
diferenciación y la liberación de mediadores inflamatorios. En el 2012, un estudio presentó como
resultado la presencia de receptores cannabinoides tipo 1 y 2 en piel de perros sanos y diagnosticados
con Dermatitis Atópica (DA), conllevando que el uso de CBD redujera significativamente las
respuestas alérgicas, indicando su capacidad de ser utilizado para el tratamiento de la DA y otras
enfermedades inflamatorias en animales de compañía (Campora et al., 2012; Milando & Friedman,
2019).
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Las dosis de cannabidiol utilizadas en estudios caninos son bien toleradas, no obstante, el rango de
dosificación es variable debido a la forma de presentación y concentración del producto, lo que implica
que cualquier posible variabilidad entre las diferentes genéticas de las plantas se puede superar
demostrando, a través de un análisis independiente, la presencia y concentración de la molécula activa
de CBD. Sin embargo, según varios estudios la dosis puede ir de 2 a 8 mg/kg (Kogan et al., 2020;
Gamble et a., 2018, Potschka et al., 2022).
El primer estudio norteamericano que investigó la eficacia de CBD para la OA en perros, se utilizó la
dosis de 2 mg/kg de CBD cada 12 horas durante 4 semanas, sin presentar efectos clínicos adversos
observables (Brutlag, A., & Hommerding., 2018). Rumple (2018), menciona que dicha investigación
reveló que entre los métodos de administración se encuentran las cápsulas, crema transdérmica y tinturas
de aceite, esta última tenía la tasa de absorción más alta y estable en el torrente sanguíneo, debido a que
el compuesto tiene baja solubilidad acuosa y experimenta un alto efecto de primer paso a través del
hígado, para mejorar la biodisponibilidad oral y debido a su naturaleza altamente lipófila, las
formulaciones a base de aceite tienen un perfil farmacocinético más favorable (Potschka et al., 2022).
En un estudio piloto donde se utilizó aceite rico en CBD para tratar el dolor relacionado con la
osteoartritis sugieren que el uso de este producto en una dosis terapéutica adecuada puede proporcionar
un efecto de ahorro en los fármacos tradicionales para los perros que experimentan este signo clínico a
nivel crónico (Kogan et al., 2020).
Actualmente, existe una preparación magistral CBD certificada y comercializada de origen colombiano
que tiene como compuestos moleculares Cannabidiol, Acido Cannabidiolitico – CBDA y Delt 9
Tetrahidrocannabidiol – 9 THC, la cual, viene en un frasco gotero en presentaciones de 15 y 30 mL con
una concentración del 1% con 150 o 300mg y al 2% con 300 o 600mg, respectivamente y registrado con
el nombre de Klean - Vet®. Siendo el único producto disponible en el país con una dosificación ya
establecida que se determina según el peso y patología que presenta el animal cada 12 horas (Tabla 1).
Tabla 1 Guía de dosificación según peso y condición del fármaco Klean-Vet®
mg/kg máximo
recomendado por día
Concentración de la formulación magistral
Patología
2%
Ansiedad
1 mg x kg
0,05 mL/kg
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Cáncer
1 mg x kg
0,05 mL/kg
Emesis
0,5 mg x kg
0,025 mL/kg
Falta de apetito
0,25 mg x kg
0,0125 mL/kg
Dermatitis atópica
0,25 mg x kg
0,0125 mL/kg
Artritis
0,75 mg x kg
0,0375 mL/kg
Problemas de
comportamiento
1 mg x kg
0,05 mL/kg
Conductas
neurodegenerativas
0,75 mg x kg
0,075 mL/kg
0,0375 mL/kg
Convulsiones
1 mg x kg
0,1 mL/kg
0,05 mL/kg
Patologías articulares
0,75 mg x kg
0,075 mL/kg
0,0375 mL/kg
Dolor crónico
0,75 mg x kg
0,075 mL/kg
0,0375 mL/kg
Insuficiencia renal
0,25 mg x kg
0,025 mL/kg
0,0125 mL/kg
Epilepsia
1 mg x kg
0,1 mL/kg
0,2 mL/kg
Inflamación
0,75 mg x kg
0,075 mL/kg
0,0375 mL/kg
Trastornos
gastrointestinales
0,75 mg x kg
0,075 mL/kg
0,0375 mL/kg
Trastornos de
movilidad
0,75 mg x kg
,075 mL/kg
0,0375 mL/kg
Estrés
0,5 mg x kg
0,05 mL/kg
0,025 mL/kg
Nota. Fuente Klean-Vet, 2022.
Respecto a vías de administración, las más utilizadas tanto en estudios como en práctica es la oral, tópica
e intravenosa. Siendo la primera la más común y la más tolerada (Morris et al., 2020), Deabold et al.
(2019) en su estudio sobre la farmacocinética del CBD en perros y gatos, sugieren que este suministrado
por vía oral en perros no es perjudicial sí se cumple con un intervalo de tiempo de 12 horas o más entre
una administración y la otra. Mientras que la tópica, es la menos administrada, pero esto es debido a la
falta de estudios que soporten la favorabilidad de su perfil farmacocinético, sin embargo, se utiliza en
crema transdérmica para afectaciones de piel en una concentración de 75 mg y 150 mg (Bartner et al.,
2018). De igual modo, un ensayo clínico realizado por Samudre et al. en el 2014 concluye que los
cannabinoides aplicados tópicamente son agentes efectivos que reducen la presión intraocular y
confieren neuroprotección, siendo así candidatos potenciales para el tratamiento potencial del glaucoma.
Por último, la vía intravenosa ha sido muy poco investigada en animales de compañía, sin embargo, De
Briyne et al. (2021) menciona que después de administrar una dosis de 45 mg de CBD por esta vía, se
pág. 1633
distribuyó rápidamente durando más que las otras vías.
La seguridad y tolerabilidad de la administración de CBD, respecto a los efectos secundarios y eventos
adversos (EA), en un estudio evaluativo sobre analgesia, no sé observó ninguna reacción negativa del
grupo de perras en posoperatorio con la dosificación de 2 mg/Kg cada 6 horas, con una concentración
de 300 mg (Achi & Macay, 2021). Otro ensayo clínico evaluó después de administrar hasta diez dosis
crecientes hasta la décima dosis (alrededor de 62 mg/kg), se informaron EA (Vaughn et al., 2020).
En la literatura veterinaria con poca frecuencia se reporta EA, no obstante, varios ensayos clínicos
describen la mayoría de estos leves e incluyen signos gastrointestinales (náuseas, emesis, diarrea, apetito
hiperactivo), constitucionales (apatía, letargo, hiperestesia) o neurológicos (temblor muscular, ataxia) y
cambios hematológicos como la elevación de la fosfatasa alcalina (FA) (Kogan et al., 2020; Simpson et
al., 2020, Vaughn et al., 2020) Un estudio reciente de este grupo informó, vómitos, heces sueltas,
hipersalivación, lamerse los labios y deshidratación después de la aplicación de dosis altas de CBD (12
mg/kg) (Vaughn et al., 2021).
Por lo tanto, varias investigaciones han revelado que durante la dosificación con CBD se ha presentado
elevaciones de las enzimas hepáticas en la química sérica como la FA, sin evidencia clínica de
enfermedad hepática, además de diarrea intermitente o vómito durante el estudio (Gamble et al., 2018;
McGrath et al., 2019; Mejía et al., 2021; Rumple, 2018).
DISCUSIÓN
Se ha identificado la actividad anticancerígena del CBD, sin embargo, el mecanismo de acción exacto
que subyace a la citotoxicidad que genera, no sé ha dilucido completamente, sin embargo, se ha
planteado la hipótesis de que la disfunción mitocondrial precipitada por la alteración de la actividad del
canal VDAC1 es fundamental para las vías antineoplásica, apoptóticas y anti proliferativas observadas
(Gross et al., 2020; Olivas-Aguirre et al., 2019; Velasco et al., 2015).
De acuerdo, con trabajos previos tanto en perros como en otras especies, la administración oral de CBD
es la más utilizada, donde no sé observan eventos adversos (EA) constitucionales ni gastrointestinales.
Sin embargo, otros estudios informan sobre la posibilidad de EA, tales como letargia, vómito, diarrea y
cambios hematológicos como es el aumento de las enzimas hepáticas (Deabold et al., 2019; Gamble et
al., 2018; McGrath et al., 2018; Vaughn et al., 2020). En la mayoría de estudios in vivo en perros en el
pág. 1634
uso de CBD para diferentes patologías, se reporta una elevación de la fosfatasa alcalina y aunque se le
atribuye que es simplemente a la inducción de enzimas (Mejia et al., 2021) se justifica una mayor
investigación sobre su impacto hepático a nivel fisiológico y estructural.
Observándose así la necesidad de profundizar en investigaciones futuras sobre la seguridad de la
administración del CBD, particularmente porque se anticipa su prescripción a largo plazo sí se utiliza
en patologías tales como la OA, en donde Mejía et al. 2021 no la sugieren hasta que se realicé más
estudios donde se tenga en cuenta las limitaciones que tuvieron en su respectivo estudio.
De igual modo, existen varias investigaciones en que difieren en la administración del CBD en ayunas
o con los alimentos, McGrafth et al. (2019) describen que los perros lo toleran bien si los ácidos biliares
en ayunas y posprandiales se mantienen estables, mientras que otros autores recomiendan por la
naturaleza lipofílica del aceite de CBD administrarlo con alimentos para generar una mayor y más
constante absorción, mejorando la biodisponibilidad, concordando con un estudio realizado en humanos
en donde resultó una resultó una biodisponibilidad significativamente mayor en estado de alimentación
que durante las condiciones de ayuno (Gamble et al., 2018; Potschka et al., 2022). Por lo tanto, se
evidencia, que según la presentación sea en cápsula, a base de aceite u otra así mismo varía el criterio
de darlo antes o con el alimento.
Si bien los estudios clínicos que evaluaron la eficacia del CBD en la osteoartritis o epilepsia idiopática
canina o no informaron eventos adversos graves, sin embargo, el informe de un caso proporcionó la
primera evidencia de que, en casos raros, es posible que se produzcan reacciones adversas graves como
consecuencia del tratamiento con un aceite de cáñamo que contiene CBD, con signos clínicos que
incluían letargia, anorexia, diarrea y ulceración extendida en la mucosa y a nivel cutáneo, sin embargo,
los mismos autores enfatizan que esto no permite ninguna conclusión sobre un posible riesgo asociado
a la exposición al CBD, debido a que el aceite implementando contenía otros componentes (Simpson et
al., 2020). Un estudio realizado en 1977 describe que la administración diaria de extracto de cannabis a
una dosis de 12,5 mg/kg de peso corporal durante 30 días produjo una detención completa de la
espermatogénesis en perros, no obstante, en dicha investigación habla de la planta completa, más no del
CBD respectivamente.
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CONCLUSIONES
El creciente interés en los productos de CBD junto con una investigación mínima en perros hasta la
fecha impulsó la realización de este estudio. A pesar de los estudios donde se evidencian los beneficios
terapéuticos tales como analgésico, antineoplásicos, anticonvulsivos, antiinflamatorios y ansiolíticos,
entre otros, su uso sigue siendo puesta en duda, debido a que la mayoría de los estudios especialmente
del año 2020 y 2021 mencionan la necesidad de realizar más estudios en poblaciones más grandes de
pacientes caninos para tener claridad científica, resultados sólidos y disminuir aquella variabilidad
respecto a su eficacia, dosificación terapéuticas y seguridad lo que hace fundamental continuar con la
investigación en animales de compañía para alentar su inclusión en un enfoque farmacológico
multimodal del CBD. Sin embargo, es evidente el potencial que tiene este componente a nivel
terapéutico clínico y que actualmente es utilizado como tratamiento único o complementario para
disminuir o evitar los efectos secundarios de los fármacos tradicionales, con una formulación a base de
aceite utilizando una dosis de 2 a 8 mg/kg cada 12 horas según la patología, considerando la asociación
temporal con la alimentación y el tipo de alimento. Se recomienda monitorear de cerca los niveles de
fosfatasa alcalina, Además, de tener en cuenta la limitación de dosis, ya que 10 mg/kg de CBD puede
asociarse a EA inaceptables para perros.
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