pág. 3948
No obstante, lo que vemos en lo virtuales solo replica lo que nos rodea, tanto la cultura como el lenguaje,
es por eso que existe la lata participación en estos entornos, la red hace que aquello desconocido se
integre en las nuevas dinámicas, aunque los significados no se entiendan del todo.
Es así como llegamos al “ciberlenguaje” el nuevo mecanismo que usan los usuarios para conversar. De
acuerdo con Arango, (2014): "El ciber lenguaje es una de las variantes de la lengua, e incluye una
discusión sobre su carácter como forma intermedia entre oralidad y escritura, y la sustitución de cambios
lingüísticos" (pág. 33).
Vaqueiro, (2012) lo denomina como las manifestaciones donde economizar es más importante que
seguir la gramática. Es por esto que muchos usuarios prefieren escribir “q” en lugar de “que” o “x” en
vez de “por”. Por otro lado, Ibáñez, (2018), lo define como “una nueva especie de comunicación, que
combina propiedades del habla, de la escritura y del medio electrónico. Los textos electrónicos se
caracterizan por su fluidez, su simultaneidad y por no degradarse al ser copiados” (pág. 145).
Aunque se crea que los errores gramaticales virtuales son a causa de la ignorancia, como mencionó antes
Vaqueiro, resulta interesante que la mayoría son intencionales, pues existen ciertas razones por las cuales
se omiten las normas en espacios virtuales, tal es el caso de Twitter que limita el número de palabras
por publicación. De acuerdo con (Palazzo, 2009)
“hay casos en los que la transgresión a las normas ortográficas en el chat o bien la creación de
nuevas formas más “excéntricas” no son parte de la incorrección, sino que son formas
estratégicas que obedecen a necesidades pragmáticas y sociolingüísticas: acentuación de una
actitud, énfasis, empatía, asombro, adecuación al registro de habla, etc.” (p.8)
El lenguaje virtual posee una estructura rebelde que no fue impuesta por alguna institución, lo que
enriquece aún más a la cultura del internet. Este fenómeno no solo se limita a la simplificación, también
se incluye la creación de nuevos términos o traducciones/prestamos de otras lenguas. Estos elementos
incrementan las posibilidades en las que un usuario se puede dar a entender y expresarse en la red.
Sotillos, (2022) plantea las siguientes características que definen al lenguaje informal:
Pronunciación/escritura incorrecta de algunas palabras, Vocabulario reducido y repetitivo, Empleo de
frases con construcciones poco ortodoxas, Empleo de vulgaridades, muletillas o modismos, Repetición
indiscriminada de las palabras.