LA DIDÁCTICA DE LA ENSEÑANZA
SOCIOEMOCIONAL: ESTRATEGIAS PARA
FOMENTAR LA RESILIENCIA EN ENTORNOS
ESCOLARES
THE DIDACTICS OF SOCIO-EMOTIONAL TEACHING:
STRATEGIES TO FOSTER RESILIENCE IN SCHOOL
SETTINGS
Oswaldo Xavier Rivadeneira Saraguro
Universidad Estatal Amazónica - Ecuador
Mayra Leonela Calle Lliguicota
Universidad Estatal Amazónica - Ecuador
Alexandra Verónica Velastegui Rodríguez
Universidad Estatal Amazónica - Ecuador
Guicela Elizabeth Veloz Erazo
Universidad Estatal Amazónica - Ecuador
pág. 5714
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v8i6.15280
La didáctica de la enseñanza socioemocional: Estrategias para fomentar la
resiliencia en entornos escolares
Oswaldo Xavier Rivadeneira Saraguro
1
ox.rivadeneiras@uea.edu.ec
https://orcid.org/0009-0005-8063-9617
Universidad Estatal Amazónica
Ecuador
Mayra Leonela Calle Lliguicota
ml.callell@uea.edu.ec
https://orcid.org/0009-0006-6033-1452
Universidad Estatal Amazónica
Ecuador
Alexandra Verónica Velastegui Rodríguez
av.velasteguir@uea.edu.ec
https://orcid.org/0009-0003-4044-241X
Universidad Estatal Amazónica
Ecuador
Guicela Elizabeth Veloz Erazo
ge.veloze@uea.edu.ec
https://orcid.org/0009-0004-3303-5274
Universidad Estatal Amazónica
Ecuador
RESUMEN
El presente artículo analiza la importancia de la enseñanza socioemocional como un componente clave
para el desarrollo de la resiliencia en los estudiantes de educación básica. La resiliencia es una habilidad
fundamental que permite a los individuos enfrentar y superar situaciones adversas, siendo
especialmente relevante en el contexto escolar actual, donde los desafíos emocionales y sociales están
en aumento. Este estudio propone estrategias didácticas específicas, como la implementación de
dinámicas grupales, el aprendizaje basado en proyectos, aprendizaje basado en problemas, técnicas de
regulación emocional y el uso del mindfulness, para fomentar el desarrollo socioemocional y la
resiliencia en los estudiantes. La metodología utilizada es una revisión bibliográfica que examina
estudios recientes sobre las mejores prácticas en la enseñanza socioemocional. Los resultados sugieren
que las estrategias didácticas bien diseñadas no solo promueven un ambiente escolar positivo, sino que
también fortalecen la capacidad de los estudiantes para adaptarse en contextos diversos. En conclusión,
se destaca la necesidad e importancia de integrar la enseñanza socioemocional en el currículo escolar
como una vía efectiva para formar individuos más resilientes y emocionalmente equilibrados que estén
en la capacidad de manejar adecuadamente diferentes situaciones tanto escolares, familiares como
sociales.
Palabras clave: socioemocional, didáctica, resiliencia, educación básica, entornos escolares
1
Autor Principal
Correspondencia: ox.rivadeneiras@uea.edu.ec
pág. 5715
The Didactics of Socio-Emotional Teaching: Strategies to Foster Resilience
in School Settings
ABSTRACT
This article analyzes the importance of socio-emotional teaching as a key component for the
development of resilience in basic education students. Resilience is a fundamental skill that allows
individuals to face and overcome adverse situations, being especially relevant in the current school
context, where emotional and social challenges are increasing. This study proposes specific teaching
strategies, such as the implementation of group dynamics, project-based learning, problem-based
learning, emotional regulation techniques and the use of mindfulness, to promote socio-emotional
development and resilience in students. The methodology used is a literature review that examines
recent studies on best practices in socio-emotional teaching. The results suggest that well-designed
instructional strategies not only promote a positive school environment, but also strengthen students'
ability to adapt in diverse contexts. In conclusion, the need and importance of integrating socio-
emotional teaching into the school curriculum is highlighted as an effective way to form more resilient
and emotionally balanced individuals who are able to adequately handle different school, family and
social situations.
Keywords: socio-emotional, didactics, resilience, basic education, school environments
Artículo recibido 08 noviembre 2024
Aceptado para publicación: 10 diciembre 2024
pág. 5716
INTRODUCCIÓN
En la actualidad, la enseñanza no solo se centra en la adquisición de conocimientos académicos, sino
también en el desarrollo integral de los estudiantes. La educación socioemocional juega un papel crucial
en este proceso, ayudando a los estudiantes a adquirir habilidades que les permiten gestionar sus
emociones, desarrollar empatía, establecer relaciones interpersonales saludables y tomar decisiones
responsables. La resiliencia, entendida como la capacidad de enfrentar la adversidad y recuperarse de
las dificultades, es una de estas habilidades clave.
El creciente interés por el desarrollo de la resiliencia en el ámbito educativo surge de la necesidad de
preparar a los estudiantes no solo para enfrentar los desafíos académicos, sino también para afrontar
situaciones emocionales y sociales complejas. A raíz de la pandemia de COVID-19, se pudo evidenciar
la vulnerabilidad de los estudiantes ante cambios drásticos en su entorno, resaltando la importancia de
estrategias que fomenten su bienestar emocional.
En este artículo se analizó desde un punto de vista teórico la importancia de la educación emocional y
la resiliencia en el entorno educativo, además de proponer algunas estrategias didácticas efectivas que
pueden implementarse en entornos escolares para promover la resiliencia a través de la enseñanza
socioemocional. Se argumenta que, mediante la adopción de enfoques pedagógicos innovadores, los
docentes pueden crear un ambiente propicio para el desarrollo emocional, facilitando a los estudiantes
las herramientas necesarias para sobrellevar la adversidad de manera saludable y constructiva.
METODOLOGÍA
La presente investigación adoptó un enfoque cualitativo fundamentado en una revisión bibliográfica
exhaustiva de estudios sobre la enseñanza socioemocional y el desarrollo de la resiliencia en entornos
escolares. Se revisaron artículos científicos, libros y reportes académicos publicados en los últimos
cinco años, los cuales abordaron estrategias didácticas para fomentar el bienestar emocional en
estudiantes de educación básica. Según Álvarez-García et al. (2020), este tipo de análisis permite
identificar prácticas educativas que fortalecen las competencias emocionales en los contextos escolares.
El alcance del estudio fue descriptivo, centrado en identificar, describir y analizar las estrategias más
efectivas documentadas en la literatura para el desarrollo de la resiliencia. En particular, se analizaron
estudios de intervención escolar que implementaron métodos didácticos como el aprendizaje basado en
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proyectos (ABP), la práctica de mindfulness y las dinámicas grupales, los cuales han demostrado ser
eficaces para la formación de habilidades socioemocionales en niños y adolescentes (Meiklejohn et al.,
2018).
El criterio de selección de las fuentes se basó en la relevancia de su contenido en relación con el tema,
su actualidad y su aplicación directa en contextos escolares. Este proceso aseguró que los resultados
pudieran adaptarse al entorno educativo ecuatoriano, un aspecto clave para garantizar su aplicabilidad
práctica. Como señalan Durlak et al. (2011), la implementación contextualizada de programas
socioemocionales es esencial para maximizar su impacto.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Definición de emociones
Morales Salinas (2023) señala que “son estados internos propios que se caracterizan por contener
cogniciones, sensaciones, reacciones fisiológicas y conducta expresiva” (p.22). Las emociones no solo
son una experiencia interna, sino que se manifiesta en la mente, el cuerpo y el comportamiento,
demostrando así, que son complejas, por tal razón, requiere mirar más allá de solo lo que una persona
siente.
Aunado a esto, Štrbáková (2019) define que “la palabra emoción abarca un amplio abanico de procesos
psíquicos, tales como alegría, miedo, tristeza, ira, amor, odio, desesperación, etc.” (p. 56). Esta
definición reconoce que las emociones no son monolíticas ni unidimensionales, sino que, resalta la
complejidad de las emociones y nos aleja de visiones reduccionistas que las ven solo como respuestas
automáticas o simples reacciones.
Por otra parte, la teoría cognitivista sugiere que las emociones son estados mentales que dependen
principalmente de aspectos cognitivos, como las creencias y valoraciones. Es decir, son procesos
intencionales que se orientan a algo concreto, lo que las hace más que simples sensaciones. Sin embargo,
esta teoría enfrenta algunos problemas difíciles de resolver, por ejemplo, al tratar de definir el contenido
cognitivo de las emociones, se puede confundir con estados mentales, poniendo en duda la idea de que
las emociones puedan ser vistas solo con un tipo específico de estado cognitivo (Buitrago, 2021).
En otras palabras, las emociones son procesos cognitivos complejos que influyen en cómo percibimos,
pensamos y aprendemos. Definiéndose de acuerdo a la perspectiva en la que le observemos, si es
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biológica, se estudian los diversos mecanismos cerebrales y químicos que se encuentran implicados,
mientras que si el enfoque es cognitivo se centra en los pensamientos y evaluaciones dejando a un lado
lo fisiológico. Por otro lado, quienes analizan la expresión emocional suele destacar su papel en la
comunicación, Esta diversidad de perspectivas refleja la complejidad de las emociones, lo que a su vez
dificulta una definición universalmente aceptada (Limonero et al., 2019).
Clasificación de las emociones
Emociones positivas
Las emociones positivas generan sensaciones agradables y están relacionadas con la sensación de logro
y bienestar, no requieren esfuerzo cognitivo ni planificación, siendo estas espontáneas y pasajeras. Sin
embargo, no se experimentan constantemente; son menos predecibles; no obstante, son muy
fundamentales para nuestro equilibrio emocional. Estas emociones, como la felicidad, el amor, la
curiosidad y la satisfacción, no solo nos hace sentir bien, sino también, contribuyen a un estado mental
saludable (Buceta M.,2019). Es por eso que son tan importantes, ya que nos motivan para enfrentar los
desafíos que vivimos a diario.
Emociones negativas
Según lo indicado por Buceta (2019), las emociones negativas son aquellas que nos generan malestar y
suelen aparecer cuando nos enfrentamos a diferentes situaciones complicadas, como pérdida, peligro,
obstáculo en nuestros objetivos. Estas emociones requieren de gran esfuerzo mental y de
comportamiento para idear soluciones que nos ayuden a aliviar o superar cualquier dificultad. Dentro
de las respuestas emocionales negativas se encuentran la tristeza, la ansiedad, el miedo, la culpa, los
celos, y la vergüenza.
Emociones Neutras
Estas emociones son aquellas que no se clasifican ni en positivas ni en negativas, ya que no generan
una sensación de bienestar ni de malestar, compartiendo elementos de ambos tipos, es decir, tienen
características similares de las emociones positivas como de las negativas. Esta mezcla de
características las coloca en un punto intermedio entre lo beneficioso y lo perjudicial, un ejemplo de
esto, es la emoción de la sorpresa (Buceta M.,2019).
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Definición de resiliencia
“La resiliencia es la capacidad de afrontar el dolor y la adversidad sobreponiéndose y adaptándose con
éxito al infortunio” (Saldarriaga Ccoricasa et al., 2022, p.264). No implica la ausencia de sufrimientos
o dificultades, sino más bien, es la habilidad de enfrentar y superar los desafíos que se presenten de
manera constructiva, dejando un aprendizaje, lo cual conlleva al crecimiento personal derivado de las
experiencias adversas que se hayan tenido.
Igualmente, Lechuga Nevarez, (2021), menciona que es un proceso dinámico y continuo que abarca
diferentes aspectos internos como externos que permite a las personas mantener una vida saludable a
pesar de que sus condiciones sean adversas, la resiliencia no es una característica innata, más bien se
desarrolla con el tiempo y a través de la experiencia; esta habilidad se consigue mediante emplear
estrategias específicas, así como también las destrezas personales.
Importancia de la enseñanza socio emocional en la educación
La enseñanza socioemocional es un componente fundamental en la educación, ya que permite a los
estudiantes desarrollar habilidades esenciales para su bienestar y éxito en su vida ya sea presente o
futura (CASEL, 2020).
Por lo tanto, la enseñanza socioemocional es un mecanismo clave para el éxito en la vida, ya que permite
a los estudiantes desarrollar destrezas esenciales para la toma de decisiones, la resolución de problemas
y la gestión de emociones.
Según Goleman (2019), la inteligencia emocional es crucial para el éxito en la vida, ya que incluye
habilidades como la conciencia emocional, la empatía y la toma de decisiones, relaciones
interpersonales, manejo de estrés y ansiedad.
Goleman (2019) destaca la importancia de la inteligencia emocional para alcanzar el éxito de la vida ya
que abarca habilidades fundamentales y reflexivas para la gestión del estrés, ansiedad entre otros.
Teorías y Modelos
La enseñanza socioemocional se basa en varias teorías y modelos incluyendo los más destacados:
La teoría de la inteligencia emocional de Goleman (2019) que se refiere a la capacidad de reconocer y
gestionar las emociones propias y ajenas identificando cinco componentes clave:
• Conciencia emocional. - Reconocer y comprender las emociones propias.
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• Regulación emocional. - Gestionar y controlar las emociones propias.
• Motivación. - Utilizar las emociones para impulsar la motivación y el logro.
• Empatía. - Reconocer y comprender las emociones ajenas.
• Habilidades Sociales. – Aplicar inteligencia emocional en las interacciones sociales.
Cabe agregar que la inteligencia emocional según Goleman (2019) mejora las relaciones
interpersonales, se toma decisiones informadas, gestiona el estrés y la ansiedad, incrementa la
motivación y el logro, desarrolla el liderazgo y efectividad en el campo educativo.
La teoría del aprendizaje Socioemocional de CASEL (2020), menciona que los estudiantes desarrollan
habilidades sociales y emocionales esenciales para su bienestar y éxito en la vida a través de un proceso
de aprendizaje intencional y sistemático.
• Relaciones Interpersonales. - Establecer y mantener relaciones saludables.
• Manejo de estrés y ansiedad. - Manejarlos de manera efectiva.
Esta teoría de CASEL (2020) tiene implicaciones importantes para, mejorar la salud mental y bienestar
de los estudiantes, incrementar la motivación y el logro académico, fomentar un ambiente escolar
positivo y seguro, desarrolla habilidades sociales emocionales para la vida.
La teoría del aprendizaje social de BANDURA (1977,1986) Sostiene que el aprendizaje se produce a
través de la observación y la imitación de comportamientos de otros individuos.
Proceso de Aprendizaje
• Atención. - Las personas prestan atención a los comportamientos observados.
• Retención. – Los individuos conservan el comportamiento observado.
• Reproducción. – Los individuos imitan el comportamiento observado.
• Motivación. - Influye en la repetición del comportamiento.
La teoría del aprendizaje social de Bandura tiene implicaciones importantes para la educación el
modelado y refuerzo positivo que pueden mejorar su aprendizaje, la psicología clínica la terapia
cognitivo-conductual se basa en esta teoría. La salud pública, la promoción de comportamientos
saludables puede ser influenciada por la observación y la imitación.
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En efecto, la enseñanza socioemocional es un componente fundamental en la educación, ya que permite
a los estudiantes desarrollar habilidades esenciales para su bienestar y éxito. La enseñanza
socioemocional mejora la salud mental, la motivación y el logro académico, mientras que reduce los
problemas de comportamiento y la violencia en la escuela (CASEL,2020; Durlak et;2020)
Por lo tanto, es crucial que los educadores y políticos prioricen la enseñanza socioemocional en la
educación proporcionando recursos de apoyo para su implementación efectiva. Al hacerlo podemos
ayudar a los estudiantes a desarrollar habilidades necesarias para enfrentar los desafíos del siglo XXI y
alcanzar su máximo potencial.
Relación entre emociones y resiliencia
Las emociones y la resiliencia desempeñan un papel crucial en el ámbito académico de los estudiantes,
donde las emociones positivas contribuyen significativamente al desarrollo de la resiliencia, facilitando
la incorporación de estrategias efectivas para afrontar situaciones de estrés. Según Gómez & Molinero
(2020) “Las emociones positivas tienen un efecto directo en la resiliencia académica, lo que a su vez
mejora el bienestar psicológico de los estudiantes” (p.7). Es por ello necesario fomentar experiencias
emocionales positivas en el entorno educativo.
Según Cassidy (2020) define a la resiliencia en el contexto educativo, como “la capacidad de los
estudiantes para adaptarse y superar los desafíos académicos y superar con éxito los contratiempos y la
presión en el entorno educativo” (p.2). Se resalta la importancia de desarrollar habilidades de resiliencia
efectivas para mantener un rendimiento académico estable incluso en situaciones de adversidad.
Es muy importante tomar en consideración que la relación entre emociones y resiliencia es
bidireccional, debido a que mientras las emociones positivas fomentan la resiliencia, la capacidad de
ser resiliente promueven experiencias emocionales más positivas. Galiano & Ramirez (2023)
observaron que “los estudiantes con mayor resiliencia académica mostraron niveles más altos de
bienestar emocional y satisfacción con la vida” (p.12).
Por lo antes mencionado, es indispensable la integración de estrategias para fomentar tanto las
emociones positivas como la resiliencia, que permitan mantener bienestar psicológico y rendimiento
académico estable en los estudiantes.
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Estrategias didácticas para el desarrollo de la resiliencia
La investigación realizada permite evidenciar que las siguientes estrategias didácticas tienen un impacto
significativo en el desarrollo de la resiliencia en los estudiantes de educación básica:
• Aprendizaje basado en proyectos (ABP): “es una metodología activa y globalizadora que se
desarrolló a finales del siglo XIX y que fue evolucionando y tomando cada vez más relevancia en
las aulas:” (Aragay & Martinez, 2020). Esta metodología involucra a los estudiantes en la
resolución de problemas reales, fomentando la colaboración, la toma de decisiones y la gestión de
emociones durante el proceso. El ABP permite que los estudiantes desarrollen una mentalidad
resiliente al enfrentarse a desafíos y encontrar soluciones, fortaleciendo su capacidad de adaptación.
• Técnicas de regulación emocional: “la regulación emocional se refiere a los procesos multimodales
mediante los cuales los individuos modifican la trayectoria de sus estados emocionales en función
del contexto” (Gross, 2023) En el ámbito educativo es crucial desarrollar la regulación emocional
en los estudiantes, y se pueden trabajar a través de diversas técnicas, entre las que se pueden
mencionar está el semáforo emocional, juego de roles, diario emocional, relajación muscular y entre
algunas otras que contribuyen a que los niños puedan desarrollar y poner en práctica este proceso.
• Mindfulness y gestión emocional: La práctica del mindfulness en las aulas ayuda a los estudiantes
a desarrollar conciencia emocional y autocontrol, factores claves para la resiliencia. Varios estudios
han demostrado que los programas de mindfulness en las escuelas reducen la ansiedad y mejoran
la capacidad de los estudiantes para enfrentar situaciones estresantes.
• Dinámicas grupales: La participación en actividades colaborativas promueve habilidades sociales
como la empatía, la escucha activa y el trabajo en equipo. Estas dinámicas fortalecen el sentido de
comunidad en el aula y proporcionan a los estudiantes una red de apoyo social, lo cual es
fundamental para la resiliencia.
Impacto de las estrategias socio emocionales en los estudiantes
El análisis de los estudios muestra que los estudiantes que participan en programas de enseñanza
socioemocional presentan una mayor capacidad para regular sus emociones y enfrentar situaciones
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difíciles. Asimismo, el uso de estrategias como el ABP y el mindfulness mejora el bienestar general de
los estudiantes, reduciendo el riesgo de problemas emocionales a largo plazo.
En el estudio de Pacheco et al. (2024), se muestra que las habilidades socioemocionales, como la
autoestima, el manejo de emociones, y la convivencia, influyen directamente en el rendimiento
académico de los estudiantes de primaria. Aquellos con mayor desarrollo en estas habilidades tienden
a tener mejor rendimiento académico y una mayor capacidad para resolver problemas. Además, se
resalta que los estudiantes con un entorno emocional favorable muestran una mejor disposición hacia
el aprendizaje y logran mayores niveles de motivación.
Otro artículo, realizado por Hernández Aguirre et al. (2022), concluye que los programas de
intervención en habilidades socioemocionales en diferentes niveles educativos generan mejoras en la
convivencia, bienestar y calidad de vida, tanto de los estudiantes como del profesorado. Se destaca la
importancia de la formación docente en habilidades socioemocionales para crear ambientes escolares
saludables.
En general, ambos estudios coinciden en que el desarrollo socioemocional no solo mejora el
rendimiento académico, sino que también fortalece el bienestar emocional y social, elementos claves
para una formación integral.
Para los siguientes autores Lara-Andino, Jarrín-Trujillo, Chiluisa-Toapanta y Zurita-Malliquinga
(2024), las habilidades socioemocionales son fundamentales en el proceso de enseñanza-aprendizaje,
ya que la variabilidad en este proceso depende en un 97% de dichas habilidades. Esto sugiere que las
competencias socioemocionales son cruciales para mejorar el rendimiento académico y la interacción
social en la educación básica (Lara-Andino et al., 2024).
Muy cercano tenemos a López-Coronel, Bernal-Cerza y Ortíz-Aguilar (2024) que destacan la
importancia de las competencias socioemocionales, que combinan aspectos cognitivos y emocionales,
tanto en la relación intrapersonal como en las interacciones sociales. Estas competencias se desarrollan
gradualmente durante la infancia y son esenciales en la vida cotidiana de los estudiantes (López-Coronel
et al., 2024).
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CONCLUSIONES
A partir de la revisión de la literatura, se concluye que la implementación de estrategias didácticas
orientadas a la enseñanza socioemocional es fundamental para el desarrollo de la resiliencia en los
estudiantes de educación básica. El aprendizaje basado en proyectos, el mindfulness y las dinámicas
grupales son herramientas eficaces que no solo mejoran el rendimiento académico, sino que también
promueven el bienestar emocional.
Se recomienda que la comunidad educativa integre estrategias de resiliencia en sus prácticas diarias,
adaptándolas a las necesidades específicas de sus estudiantes en el ámbito escolar, lo cual es clave para
prepararlos para los desafíos del futuro, tanto dentro como fuera del aula.
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