FACTORES DESENCADENANTES DE
DEPRESIÓN EN PACIENTES DEL
CONSULTORIO PSICOLÓGICO DE UNEMI,
MILAGRO, ENTRE SEPTIEMBRE 2023 Y
AGOSTO 2024
FACTORS TRIGGERING DEPRESSION IN PATIENTS
OF THE UNEMI PSYCHOLOGICAL OFFICE, MILAGRO,
BETWEEN SEPTEMBER 2023 AND AUGUST 2024
Carla Lorena Bustamante Galarza
Universidad Estatal de Milagro, Ecuador
Gianna Nathalie Granizo Ortega
Universidad Estatal de Milagro, Ecuador
pág. 6506
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v8i6.15340
Factores Desencadenantes de Depresión en Pacientes del Consultorio
Psicológico de UNEMI, Milagro, entre Septiembre 2023 y Agosto 2024
Carla Lorena Bustamante Galarza1
cbustamanteg@unemi.edu.ec
https://orcid.org/0009-0007-3604-6472
Universidad Estatal de Milagro
Ecuador
Gianna Nathalie Granizo Ortega
ggranizoo@unemi.edu.ec
https://orcid.org/0009-0006-4344-2783
Universidad Estatal de Milagro
Ecuador
RESUMEN
La investigación tuvo como objetivo analizar los factores desencadenantes de la depresión en adultos
jóvenes de 18 a 40 años que han buscado ayuda en los consultorios psicológicos de la Unemi. Esta
investigación se basa en un enfoque cualitativo, que recolecta y analiza datos para ajustar preguntas o
descubrir nuevas durante el proceso de interpretación. El diseño es no experimental, ya que no se
manipularon variables intencionalmente, y es exofacto porque verifica observaciones previas. Es un
estudio contemporáneo evolutivo longitudinal, abarcando desde el primer contacto con los casos hasta
el diagnóstico. Se usó un diseño de campo, recopilando datos de consultas en el Consultorio Psicológico
de la Unemi entre septiembre de 2023 y agosto de 2024. Los datos se obtuvieron mediante entrevistas
en consulta. En estudios cualitativos, se suele utilizar una muestra de casos tipo cuando el objetivo es
obtener información detallada y de alta calidad, sin poner énfasis en la cantidad o la estandarización.
Para esta investigación, se seleccionaron hombres y mujeres de entre 18 y 40 años que acudieron a los
consultorios psicológicos de la Unemi, incluyendo un total de 135 pacientes, de los cuales 23 fueron
diagnosticados con depresión.
Palabras clave: depresión, ansiedad, autoestima, estrés.
1
Autor principal
Correspondencia: cbustamanteg@unemi.edu.ec
pág. 6507
Factors Triggering Depression in Patients of the UNEMI Psychological
Office, Milagro, Between September 2023 and August 2024
ABSTRACT
The research aimed to analyze the triggers of depression in young adults aged 18-40 years who have
sought help in the psychological offices of the Unemi. This research is based on a qualitative approach,
which collects and analyzes data to adjust questions or discover new ones during the interpretation
process. The design is non-experimental, as no variables were intentionally manipulated, and is
exofactive because it verifies previous observations. It is a contemporary longitudinal evolutionary
study, covering from the first contact with cases to diagnosis. A field design was used, collecting data
from consultations at the Unemi Psychological Office between September 2023 and August 2024. Data
were obtained through consultation interviews. In qualitative studies, a sample of standard cases is
usually used when the objective is to obtain detailed and high-quality information without emphasis on
quantity or standardization. For this research, men and women between 18 and 40 years old were
selected to visit the psychological offices of the Unemi, including a total of 135 patients, 23 of whom
were diagnosed with depression.
Keywords: depression, anxiety, self-esteem, stress
Artículo recibido 18 noviembre 2024
Aceptado para publicación: 15 diciembre 2024
pág. 6508
INTRODUCCIÓN
A nivel global y nacional, la depresión se sitúa como una de las principales causas de enfermedad,
afectando a millones de personas. Las políticas de salud pública, elaboradas por instituciones como la
Organización Mundial de la Salud, reconocen la depresión como un problema de salud prioritario
(Organización Mundial de la Salud, 2001). En Ecuador, la prevalencia de trastornos mentales, incluida
la depresión, ha dado impulso al gobierno y a organismos de salud, Principalmente el Ministerio de
Salud Pública (MSP) a desarrollar programas de intervención, campañas de psicoeducación, y acceso a
tratamientos para mejorar el bienestar de la población. Sin embargo, la brecha entre la necesidad y la
disponibilidad de servicios de salud mental, es decir la cantidad de profesionales en salud mental, sigue
siendo un desafío, lo que contribuye al aumento y mantenimiento de casos no atendidos.
A nivel comunitario e institucional, la Universidad Estatal de Milagro (UNEMI) ha observado un
incremento significativo en la demanda de atención psicológica debido a un aumento en los casos de
depresión entre estudiantes, docentes y usuarios de la comunidad desde septiembre de 2023 a agosto de
2024. Este acontecimiento refleja la necesidad de establecer las redes de apoyo y fortalecer servicios
psicológicos en instituciones educativas, así como la implementación de políticas internas que
promuevan el bienestar emocional, la detección temprana y la intervención oportuna.
A nivel individual, la depresión afecta profundamente la vida de las personas, manifestándose en la
pérdida de interés, tristeza persistente, problemas de sueño, fatiga y dificultad para realizar tareas
cotidianas (Organización Mundial de la Salud, 2001). En los consultorios de Psicología de la UNEMI,
los casos atendidos entre septiembre de 2023 y agosto de 2024 refieren cómo la depresión varía en
gravedad (leve, moderada o grave), desarrollando consecuencias en la capacidad de los individuos para
funcionar en el ámbito académico y personal.
Descripción del Problema
La depresión puede aparecer en distintos momentos de la vida, especialmente tras eventos estresantes.
Viktor E. Frankl, reconocido por su “Logoterapia” de la cual escribe a través de su obra “El hombre en
busca de sentido”, refirió que la forma en que las experiencias traumáticas y ciertos factores estresantes,
pueden influir profundamente en el estado emocional y psicológico de las personas, lo cual puede
desarrollar trastornos como la depresión (Frankl, 2015).
pág. 6509
Asimismo, Aaron Beck al desarrollar su enfoque en la década de los 60, se basó en la idea de que los
pensamientos distorsionados y negativos constituyen las principales causas para la depresión.
Durante la infancia y adolescencia, traumas como el abuso o la pérdida pueden predisponer a la
depresión. En la adultez temprana, rupturas amorosas y presiones laborales pueden desencadenarse. En
la edad adulta, la muerte de un ser querido o el estrés crónico son factores desencadenantes. En la vejez,
la pérdida de amigos y familiares puede causar una profunda tristeza. Este estudio se centra en hombres
y mujeres de 18 a 40 años que han buscado ayuda en los consultorios psicológicos de la Unemi y que
han presentado depresión
Son muchas las preguntas que se pueden formular, pero la investigación solo se concretó en la siguiente
interrogante:
¿Cuáles son los factores desencadenantes más comunes de la depresión en adultos jóvenes de 18 a 40
años que buscan ayuda en los consultorios psicológicos de la Unemi en el periodo septiembre 2023 a
agosto de 2024?
JUSTIFICACIÓN
La depresión, una de las condiciones mentales más prevalentes y debilitantes a nivel mundial, tiene
amplias repercusiones en la vida de quienes la padecen, así como en su entorno familiar, laboral y
comunitario (Salud, s.f.). Este trastorno se manifiesta a través de síntomas emocionales, físicos, sociales
y económicos que pueden afectar profundamente la calidad de vida.
Los desencadenantes de la depresión son multifacéticos, incluyendo factores genéticos, biológicos,
hormonales, ambientales y eventos estresantes en la vida de una persona (Salud, s.f.). Desde una
perspectiva genética, antecedentes familiares de depresión aumentan la predisposición a esta
enfermedad. Los desequilibrios en neurotransmisores cerebrales como la serotonina también juegan un
papel importante en su desarrollo, al igual que los cambios hormonales, particularmente en mujeres
durante períodos como la menstruación o el posparto (Clínica de la Universidad de Navarra, s.f.).
Los eventos traumáticos y estresantes, especialmente en la infancia, pueden dejar una marca profunda
en el desarrollo emocional y psicológico, aumentando la vulnerabilidad a la depresión en la edad adulta.
La depresión puede surgir en diferentes etapas de la vida, desde la infancia hasta la vejez, y puede estar
influenciada por experiencias como abusos, pérdidas amorosas, cambios laborales o la jubilación.
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En el contexto de la investigación, se busca comprender mejor la depresión entre adultos jóvenes de 18
a 40 años que han buscado ayuda en los consultorios psicológicos de la Unemi. Se identifican aspectos
no resueltos en el tratamiento de la depresión, como factores psicosociales subyacentes y la presencia
de comorbilidades, que pueden complicar la recuperación.
Las consecuencias de la depresión son diversas y abarcan aspectos emocionales, físicos, sociales y
económicos. Reconociendo la gravedad de este trastorno, es esencial implementar intervenciones
integrales y personalizadas que aborden las necesidades específicas de cada individuo.
Proporcionar acceso a tratamientos efectivos, apoyo social y educación sobre la depresión puede mitigar
estas consecuencias y mejorar la calidad de vida de las personas afectadas, así como contribuir al
bienestar general de la sociedad.
Objetivo General
▪ Describir los factores desencadenantes de la depresión en pacientes que asisten al consultorio
psicológico de la Universidad estatal de Milagro UNEMI, de la ciudad de Milagro entre septiembre
2023 y septiembre 2024.
Objetivos Específicos
▪ Describir los síntomas de la depresión, que manifiestan los pacientes que asisten al consultorio
psicológico de la Universidad estatal de Milagro UNEMI, de la ciudad de Milagro entre septiembre
2023 y mayo 2024.
▪ Identificar los factores desencadenantes en pacientes jóvenes según su edad dentro del rango de 18
a 40 años pacientes que asisten al consultorio psicológico de la Universidad estatal de Milagro
UNEMI, de la ciudad de Milagro entre septiembre 2023 y agosto 2024.
Bases Teóricas
La depresión es uno de los trastornos de salud mental más prevalentes y debilitantes a nivel global. De
acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (Organización Mundial de la Salud, 2001), la
depresión se describe como un trastorno mental que se manifiesta mediante una variedad de síntomas,
tales como tristeza persistente, pérdida de interés o placer en actividades que anteriormente resultaban
gratificantes, sentimientos de culpa o baja autoestima, así como alteraciones en el sueño y el apetito,
fatiga constante y dificultades para concentrarse.
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La depresión, puede ser crónica o presentarse en episodios recurrentes, impactando de manera
significativa la capacidad de una persona para desempeñarse en su trabajo, en la escuela y en las tareas
diarias. No solo afecta el bienestar emocional y mental de los individuos, sino que también tiene
repercusiones físicas y sociales que pueden ser profundamente perturbadoras. En sus manifestaciones
más graves, la depresión puede llevar al suicidio, una tragedia que causa un dolor inmenso y duradero
a las familias y comunidades involucradas (Coryell, 2023).
La depresión ya sea leve, moderada o grave, es uno de los trastornos de salud mental más frecuentes
que se ha evidenciado durante la atención desde el mes de septiembre de 2023 y agosto de 2024 en los
consultorios de Psicología de la Unemi.
La depresión es una condición multifacética que puede ser desencadenada por una combinación de
factores genéticos, biológicos, hormonales y ambientales. Cada uno de estos elementos puede influir de
manera significativa en el desarrollo de este trastorno mental (Salud, s.f.)
Desde lo genético, la depresión tiende a presentarse con mayor frecuencia en individuos con
antecedentes familiares de esta condición. La predisposición genética juega un papel importante.
Estudios de gemelos y de familias han demostrado que existe una mayor probabilidad de desarrollar
depresión si un pariente cercano también la padece, indicando una herencia genética que puede
predisponer a las personas a esta enfermedad (Gutiérrez & García, 2024)
En términos biológicos, se ha observado que los desequilibrios en ciertos neurotransmisores del cerebro,
como la serotonina, la norepinefrina y la dopamina, están asociados con la depresión. Estos
neurotransmisores son cruciales para la regulación del estado de ánimo, el apetito, el sueño y otros
procesos corporales. Un desequilibrio en estas sustancias químicas puede contribuir significativamente
al desarrollo de síntomas depresivos ( (Neuro Class, 2020).
En cuanto a los cambios hormonales, también pueden desencadenar o agravar la depresión. Esto es
particularmente notable en las mujeres, quienes pueden experimentar depresión durante los periodos de
cambios hormonales significativos como la menstruación, el embarazo, el posparto y la menopausia.
Las alteraciones en los niveles hormonales pueden afectar el equilibrio químico del cerebro, influyendo
en el estado de ánimo y la predisposición a la depresión (National Institute of Mental Health, 2024).
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Así también los eventos estresantes y traumáticos en la infancia son factores determinantes que pueden
predisponer a una persona a desarrollar depresión más adelante en la vida. Experiencias como traumas
infantiles, abusos físicos, psicológicos y/o sexuales, la muerte de un ser querido, y las rupturas amorosas
pueden dejar una huella duradera en el desarrollo emocional y psicológico de una persona. El acoso
escolar o la intimidación también pueden tener un impacto devastador en la autoestima y el bienestar
emocional de un niño, aumentando el riesgo de depresión. Tanto el acoso presencial como el ciberacoso
tienen afectación negativa en la vida de los niños, como por ejemplo en sus relaciones sociales,
rendimiento escolar, su autoestima y salud emocional además de la calidad de sueño. Estas afectaciones
repercuten también a su entorno familiar y escolar, deteriorando el clima escolar (Tobalino, Dolorier,
Villa, & Vargas, 2017).
Estas experiencias no solo afectan el bienestar inmediato del niño o adolescente, sino que también
pueden ser factores predisponentes a desarrollar depresión más adelante en la vida. La muerte de un ser
querido durante estos años formativos también puede ser un factor desencadenante significativo,
causando un dolor y una tristeza profundos que pueden evolucionar hacia la depresión. En el duelo, los
adolescentes suelen experimentar fases como la negación, depresión y aceptación, aunque no siempre
pasan por todas las etapas del duelo (Tena & Isidro de Pedro, 2019).
En la adultez temprana, las rupturas amorosas o la pérdida de relaciones significativas pueden
desencadenar episodios depresivos. Este periodo de la vida a menudo implica importantes cambios y
transiciones, como el inicio de una carrera, la independencia económica y la formación de nuevas
relaciones (TOPDOCTORS, 2020). El estrés asociado con estas transiciones, combinado con
experiencias de rechazo o pérdida, puede aumentar la vulnerabilidad a la depresión. Además, los
jóvenes adultos pueden enfrentar presiones académicas y laborales que contribuyen al desarrollo de
síntomas depresivos. Además, el estrés crónico relacionado con el trabajo, las dificultades financieras,
los problemas matrimoniales o familiares y las enfermedades crónicas también pueden contribuir al
desarrollo de la depresión en la edad adulta (National Institute of mental Health, s.f.).
En la vejez, la depresión puede surgir como resultado de una combinación de factores físicos, sociales
y psicológicos. La pérdida de cónyuges, amigos y familiares es común en esta etapa de la vida y puede
provocar un profundo sentido de soledad y tristeza.
pág. 6513
Además, la jubilación y la pérdida de identidad asociada al trabajo pueden afectar negativamente la
autoestima y el sentido de propósito (Llanes, López, Vázquez, & Hernández, 2015).
La depresión es una condición mental seria que puede tener un impacto profundo y extenso en varias
áreas de la vida de una persona. Estas repercusiones abarcan aspectos emocionales, físicos, sociales y
económicos, afectando no solo al individuo que sufre de depresión, sino también a su familia, su
desempeño laboral y la comunidad en general. Las consecuencias de la depresión son amplias y
diversificadas, permeando todos los aspectos de la existencia de una persona (RTVE, 2022).
METODOLOGÍA
La presente investigación está basada en el enfoque cualitativo, tal como refieren Hernández, Fernández
y Baptista, “el enfoque cualitativo utiliza la recolección y análisis de los datos para afinar preguntas de
investigación o revelar nuevas interrogantes en el proceso de interpretación” (Hernández, Fernández,
& Baptista, 2014).
El diseño de investigación de éste artículo es no experimental, ya que se estudiaron los fenómenos sin
manipular variables de manera intencional. Además, éste diseño es exofacto, ya que se basa en la
verificación de las observaciones, es decir se confirmarán las observaciones realizadas en consulta de
los casos que se atendieron. Según su temporalidad presente en diseño se presenta como contemporáneo
evolutivo longitudinal, ya que los casos fueron las atenciones, que van desde el primer contacto, hasta
la resolución del diagnóstico, en la mayoría de los casos (Hurtado de Barrera, 2012).
Se ha considerado además el diseño de campo, ya que la información que se ha tomado en
consideración, han sido de las atenciones que se han llevado a cabo en el Consultorio Psicológico de la
Unemi. Cabe destacar que la información obtenida es la recopilación de datos concernientes sólo a las
consultas efectuadas desde septiembre del 2023 a agosto de 2024. La técnica con la que se recolectaron
los datos fue la de la entrevista en consulta.
Población y muestra
Cuando se trata de estudios cuantitativos exploratorios y en investigaciones cualitativas, es utilizada la
muestra de casos tipo, cuando el objetivo o propósito principal es obtener información rica, profunda y
de alta calidad, sin centrarse en la cantidad ni en la estandarización.
pág. 6514
En investigaciones con enfoque fenomenológico, en donde se analizan valores, experiencias y
significados dentro de un grupo social, es común emplear muestras tanto de expertos como de casos
tipo (Hernández, Fernández, & Baptista, 2014).
Para ésta investigación, se ha considerado:
Personas entre hombres y mujeres que corresponden a edades entre 18 a 40 años, los cuales han asistido
a los consultorios psicológicos de la Unemi: 135 pacientes con primera atención, en donde se hallan 23
usuarios diagnosticados con depresión. La siguiente tabla muestra las estadísticas de las atenciones.
Tabla 1 Estadística referente a las atenciones en el Consultorio Psicológico Unemi, Ubicado en la Planta
Baja del Bloque M
Atenciones
Cantidad
Atenciones con código z
86
Trastorno de del estado de ánimo (depresivos)
23
trastornos de ansiedad
17
trastornos de personalidad
4
Problemas relacionados con dificultades para afrontar la vida
1
Trastorno mixto de las habilidades escolares
1
Autismo
3
Total
135
Fuente: Los datos de la tabla, fueron tomados de la matriz de atenciones del Consultorio Psicológico Unemi.
Nota de la Tabla: Las atenciones que han llevado a cabo, han sido discriminadas de acuerdo a los
diagnósticos encontrados, siendo un total de 135 diagnósticos. Cabe considerar que para esta cantidad
no se ha tomado en consideración las atenciones por primera vez, subsecuencias o tratamiento en curso.
Aun cuando en la frecuencia de atenciones marca el código “z” como mayor, éste corresponde a la
clasificación de la estadística en cuanto al tipo de entrevista, el cual ha quedado con aquella clasificación
dado que en la consulta respectiva se encuentra en curso, o la misma está o estuvo en proceso de
presunción diagnóstica.
Por tanto, el grupo de diagnóstico con más atenciones, es el grupo de trastornos del estado de ánimo,
con referencia a la depresión.
pág. 6515
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
De acuerdo a las atenciones realizadas entre septiembre 2023 a agosto 2024, se han establecido factores
causales en común en los casos, los que se pueden referir de la siguiente manera:
Se ha podido apreciar la existencia de experiencias adversas en la infancia y adolescencia que ha
conducido a el establecimiento progresivo de Depresión en la juventud y adultez. Las causas que han
predispuesto la aparición de los síntomas depresivos, entre otras, la violencia física o sexual en la
infancia. Cabe destacar que el abuso ya sea físico o sexual en la infancia, está relacionado con trastornos
mentales en edades posteriores, como la depresión o la ansiedad. No sólo se genera un daño psicológico
directo, sino que también afecta el desarrollo neurológico, que puede afectar áreas cerebrales
relacionadas con la regulación de las emociones, la memoria y la respuesta al estrés.
Éstos cambios pueden predisponer y aumentar la vulnerabilidad a la depresión y otros trastornos del
estado de ánimo en la vida adulta. Así también refiere Felitti et al. (2020), que los efectos a largo plazo
de los abusos sufridos tanto físicos como sexuales no se limitan a daños psicológicos inmediatos, sino
que suele alterar sistemas biolóquicos que se activan en respuesta al estrés, lo que puede exacerbar
nuevas respuestas estresoras (Felliti, y otros, 2020).
Otra causa que se ha observado, se da en la prevalencia de la Violencia Intrafamiliar, es decir que
algunos de los consultantes han crecido en un entorno que se ha caracterizado por violencia doméstica,
situación en la que el consultante ha sido testigo o víctima. Recordemos que según la Teoría del Apego
de Bowlby (1980) refiere que las experiencias tempranas con cuidadores primarios, por lo generan
pueden influir en la capacidad de las personas para poder generar relaciones seguras y saludables. Por
tanto, al exponerse a violencia doméstica, se puede internalizar emociones negativas, tales como la
culpa o la vergüenza, lo cual puede llevar al desarrollo de trastornos depresivos posteriores. Es decir
que los niños que han sido expuestos a violencia doméstica pueden desarrollar estilo de apego inseguro,
lo que puede asociarse con mayor prevalencia de síntomas depresivos y ansiosos en la vida adulta
(Bolby, 1980).
Así también se ha observado la victimización sufrida por acoso escolar o bullyin, el cual se ha
presentado de manera física, como psicológica. Los consultantes que han sufrido este tipo de acoso por
lo general han experimentado disminución en la autoestima, sentimiento de soledad y aislamiento,
pág. 6516
además de sentido de desesperanza que se ha asociado directamente con la aparición de depresión.
Según Copeland et al. (2013) las personas que han sufrido bullying tienen más probabilidades de tener
depresión, ya sea en la adolescencia o en la vida adulta, está tendencia puede incrementarse si el acoso
es continuado y persiste por largo tiempo (Copeland, Angold, Wolke, & Costello, 2013).
En algunos casos, se ha observado el conflicto de los padres que ha terminado en la disolución del
matrimonio o de la unión conyugal. Los hijos generalmente han sido testigos o se han encontrado
envueltos en las disputas de los progenitores, lo que no solo ha ocasionado sentimientos de culpa,
tristeza, sino también incremento de la ansiedad. Si bien es cierto, no todos los hijos de parejas que se
separan desarrollan depresión, los que han experimentado un divorcio o separación conflictiva o
distanciamiento emocional severo, son más vulnerables a desarrollar problemas de salud mental en la
adolescencia y adultez.
Cabe destacar que la mayoría de estas causas, han ocurrido generalmente entre la infancia y
adolescencia, periodo importante para el desarrollo emocional, social y neurológico, lo cual pueden
generar una disfunción en la elaboración de mecanismos saludables para afrontar el estrés y las
emocionas. El exponerse tempranamente a estas situaciones, no solo puede predisponer a la Depresión,
sino también puede tener efectos en las habilidades sociales y emocionales que son importantes para la
vida adulta funcional.
En cuanto a los síntomas, si bien es cierto existen criterios ya establecidos en los manuales diagnósticos
para depresión, es relevante referir los más comunes en los consultantes. Los síntomas que se han
presentado en los consultantes se alinean con cuadros de depresión, los cuales pueden ir desde leve a
severa. Al presentarse además síntomas somáticos como opresión torácica, taquicardia, disnea y
temblores, lo cual se suele combinar con componentes de ansiedad, puede resaltar la complejidad
psicofisiológica del trastorno. Hofmann y Hinton (2014), desatacan que la coexistencia de síntomas
tanto depresivos como ansiosos y que se acompañan de manifestaciones somáticas, refieren un perfil
psicofisiológico complejo, en el que se requiere tratamiento integral (Hoffmann & Hinton , 2014).
Cabe destacar que los síntomas cognitivos y emocionales que se han presentado (culpa, autoreproche,
sensación de torpeza, baja concentración y temores relacionados al futuro), no solo refiere un impacto
negativo en el bienestar del individuo, sino que contribuyen a alteraciones significativas en su
pág. 6517
funcionamiento diario, tal como indica Teicher et al. (2016), refieren que las personas que han sufrido
experiencias tempranas adversas o conflictivas, pueden presentar dificultades en la atención, el proceso
cognitivo y la toma de decisiones (Teicher, Samson, Anderson, & Ohashi, 2016).
Asimismo, se puede denotar la presencia de pensamientos recurrentes de muerte y posibles planes o
intentos suicidas, los cuales requieren una intervención inmediata. Por lo que cabe destacar que éstos
síntomas no sólo indican la severidad del cuadro depresivo, sino que son también predictores de riesgo
físico o emocional. Refiere Hawton et al. (2012) que la presencia recurrente de pensamientos de muerte
y la planificación suicida en consultantes depresivos, se deben tratar como emergencia, por tanto, deben
ser referidos a Psiquiatría. Es menester también la vigilancia por su grupo primario de apoyo (Hawton,
Saunders, & O'Connor, 2012).
CONCLUSIONES
En cuanto a los síntomas de Depresión de las personas que han acudido a consulta en el consultorio
psicológico de la Universidad estatal de Milagro UNEMI, de la ciudad de Milagro entre septiembre
2023 y mayo 2024, se puede destacar que la mayoría que han sido diagnosticados, han presentado
cuadros depresivos que van de intensidad leve a grave.
Asimismo, se puede referir que los factores que han desencadenado éstos cuadros de depresión se
centran principalmente en experiencias adversas en la infancia, tales como violencia física, psicológica
o sexual, Apego inadecuado, acoso escolar o bullying, conflictos familiares que terminan en separación
o divorcio, además de Ideación suicida.
De igual manera se deben tener en cuenta las manifestaciones comorbidas, como lo son los síntomas
somáticos que se expresan en manifestaciones psicofisiológicas que en muchos casos pueden estar
desatendidas. Futuras investigaciones deberían tener en consideración esto último, así como el apoyo
necesario en situaciones de ideación suicida, en la cual es necesario el grupo de apoyo primario, así
como la referencia efectiva al área de psiquiatría.
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