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INTRODUCCIÓN
El síndrome mediastinal es un conjunto de síntomas y signos que resultan de la compresión de uno o
más órganos en el mediastino, una región anatómica crítica que se localiza entre los pulmones y que
alberga estructuras vitales como el corazón, los grandes vasos, la tráquea y el esófago. (1)Esta condición
puede ser desencadenada por diversas etiologías, incluyendo masas tumorales, procesos inflamatorios
o anomalías congénitas, lo que complica su diagnóstico y manejo. En niños, las causas más comunes
de masas mediastinales incluyen tumores neurogénicos, quistes enterogénicos y linfomas, siendo los
tumores neurogénicos los más frecuentes.(2)(3) Las masas mediastinales del compartimento anterior
son las más frecuentes, representando casi el 50% de los casos. (4)
La presentación clínica del síndrome mediastinal puede variar, pero frecuentemente incluye síntomas
como disnea, dolor torácico y disfagia, que pueden progresar rápidamente y comprometer la calidad de
vida del paciente. (3)(5) El diagnóstico requiere un enfoque multidisciplinario que combina la
evaluación clínica, estudios de imagen como radiografías y tomografías computarizadas, y en muchos
casos, procedimientos invasivos como biopsias para determinar la naturaleza de la masa.(6)
Las patologías que pueden dar lugar a este síndrome son variadas. En el mediastino anterior, las causas
más comunes incluyen timomas, linfomas, teratomas y tumores tiroideos benignos; sin embargo, se
estima que alrededor del 60% de estas masas son malignas, lo que requiere un manejo cuidadoso y un
diagnóstico preciso. (7)(4) En el mediastino medio, las linfadenopatías y los quistes broncogénicos son
frecuentes, mientras que, en el mediastino posterior, los tumores neurogénicos, como neuroblastomas y
neurfibromas, pueden ser responsables de la compresión. Además, el síndrome de la vena cava superior
y el síndrome de la vena cava inferior son condiciones asociadas que pueden surgir debido a la
compresión de los grandes vasos en esta región.
El linfoma de Hodgkin es una de las causas más relevantes de masas mediastinales en pediatría,
representando aproximadamente el 6% de los cánceres infantiles. Esta enfermedad se presenta con
mayor frecuencia en adolescentes de 15 a 19 años, aunque también puede ocurrir en niños más
pequeños. (8) (9)La relación entre la exposición a infecciones, como el virus de Epstein-Barr, y el
desarrollo del linfoma de Hodgkin ha sido objeto de estudio, sugiriendo que ciertos factores
inmunológicos pueden influir en su aparición.(10,11) (11)