LA PRAXIS DEL DOCENTE UNIVERSITARIO
DESDE LA EXPERIENCIA DE ESTUDIANTES
CON AUTISMO Y DISCAPACIDAD VISUAL
UNIVERSITY TEACHING PRAXIS FROM
THE EXPIRIENCE OF STUDENTS WITH
AUTISM AND VISUAL DISABILITIES
Amanda Briseida Nassri Vargas
Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, México
Janeth Martínez Martínez
Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, México
pág. 1900
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v9i1.15962
La Praxis del Docente Universitario desde la Experiencia de Estudiantes
con Autismo y Discapacidad Visual
Amanda Briseida Nassri Vargas 1
amanda.nassri@uacj.mx
https://orcid.org/0000-0002-5811-1841
Universidad Autónoma de Ciudad Juárez
México
Janeth Martínez Martínez
janeth.martinez@uacj.mx
https://orcid.org/0000-0002-3493-9433
Universidad Autónoma de Ciudad Juárez
México
RESUMEN
En el presente articulo: “La praxis del docente universitario desde la experiencia de estudiantes con
Autismo y Discapacidad Visual”, tiene como propósito conocer el impacto que tuvieron los docentes
en la trayectoria universitaria de estudiantes con autismo y/o discapacidad (en este caso discapacidad
visual), a través de su formación, prácticas y estrategias que estos tuvieron a lo largo de su estancia por
la institución. Bajo un enfoque cualitativo, con un diseño exploratorio- descriptivo y por medio del
método biográfico, se recolectó la experiencia de tres estudiantes con estas condiciones en el Instituto
de Ciencias Sociales y Administración de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez. Entre los
hallazgos más destacables, se resalta la aún carente formación por parte de los docentes universitarios
con respecto a las diversas condiciones, así como las limitadas estrategias didácticas con los que estos
cuentan para la atención de estos grupos. Además, de la urgente necesidad de dotar a la comunidad
universitaria de recursos que fomenten a espacios más inclusivos, donde impere la tolerancia, el respeto
y la dignidad que la comunidad demanda, conviertiendose en una experiencia desafiante pero
“llevadera” para estos estudiantes que cuentan con alguna condición.
Palabras clave: praxis, formación docente, universidad, autismo, discapacidad visual
1
Autor principal
Correspondencia: amanda.nassri@uacj.mx
pág. 1901
University Teaching Praxis from the Expirience of Students with Autism
and Visual Disabilities
ABSTRACT
In this article: "University teaching praxis from the experience of students with Autism and Visual
Disabilities”, the purpose is to know the impact that teachers had on the university trajectory of students
with Autism and/or Disability (in this case Visual Disability), through their training, practices and
strategies that they had throughout their stay at the institution. Under a qualitative approach, with an
exploratory-descriptive design and through the biographical method, the experience of three students
with these conditions was collected at the Institute of Social Sciences and Administration of the
Autonomous University of Ciudad Juárez. Among the most noteworthy findings, it is highlighted the
still lacking training on the part of university teachers with respect to the various conditions as well as
the limited didactic strategies they have for the attention of these groups, in addition to the urgent need
to provide the university community with resources that promote more inclusive spaces where tolerance
prevails. the respect and dignity that the community demands, becoming a challenging but "bearable"
experience for these students who have some condition.
Keywords: praxis, teacher training, university, autism, visual disabilities
Artículo recibido 05 diciembre 2025
Aceptado para publicación: 25 enero 2025
pág. 1902
INTRODUCCIÓN
Diversos estudios han evidenciado aquellos estudiantes que poseen alguna condición de discapacidad
han logrado un nivel de adaptación adecuado, a través de la validación personal y confianza en sus
capacidades. Debido a la alta perseverancia que muestran, tanto los estudiantes como sus padres y sus
docentes (Salinas Alarcón et al, 2013). Sin embargo, en cuanto a la experiencia de los alumnos con sus
profesores señalan que: por un lado, se ha identificado una actitud positiva y disposición de los
educadores hacia los alumnos con discapacidades, mientras que, por otro, se evidencia una carencia de
información sobre temas de discapacidad e inclusión, así como en estrategias pedagógicas y en la
implementación de adaptaciones, planes de estudio acordes a las necesidades de estos estudiantes.
Con respecto al Trastorno del Espectro Autista (TEA) y la discapacidad Visual, el desconocimiento de
estas condiciones por parte del profesorado como de estudiantes y personal administrativo se ha
constituido como uno de tantos obstáculos con los que se encuentran los estudiantes con estas
condiciones (Gillispie- Lynch et.al, 2020). Este tipo de alumnado presenta necesidades de apoyo con
las que actualmente las universidades no se encuentran dando ningún tipo de respuesta, lo anterior, no
solo se encuentra relacionado al acceso del contenido curricular, sino al funcionamiento adaptativo y
social del estudiante universitario (Vidríales et.al, 2020).
Por lo anterior, este estudio tiene como propósito conocer las experiencias y opiniones de tres
estudiantes en situación de discapacidad y condiciones tales como el TEA y Discapacidad visual sobre
la praxis de sus docentes y trayectoria por la universidad. A través de un estudio descriptivo –
exploratorio por medio del método biográfico para rescatar la “voz, de aquellos hasta ahora, sin voz”.
La posición teórica deriva del modelo ecológico establecido por Bronfenbrenner (1987) citado por
Pisonero (2007), este, nos permite distinguir cómo una persona se encuentra influida por diferentes
sistemas que se encuentran incluidos uno dentro del otro. En forma más específica, el sistema más
interno (ontogenético) refleja a las personas con discapacidad (en este caso los estudiantes con
discapacidad). El siguiente (microsistema) comprende al núcleo familiar y el tercero (mesosistema)
correspondiente al contexto educativo (en este estudio las instituciones de educación superior) y, por
último, (macrosistema) las influencias sociales, políticas y culturales donde se incluyen creencias y
actitudes (las creencias y actitudes de los docentes).
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Estos sistemas, determinan en cada persona, interacciones complejas por consecuente, funcionamientos
únicos. En este caso, a través de la interacción de un estudiante con discapacidad universitario y sus
docentes (Pisonero, 2007).
Así, a través de la voz de los estudiantes con estas condiciones, conoceremos cual es el impacto que
tuvieron los docentes en su trayectoria académica a través de su trabajo, formación y práctica, lo que
nos permite definir como la inclusión educativa se está llevando a cabo o no en las aulas universitarias.
Revision de la literatura
La política educativa a nivel superior para las personas en situación de discapacidad en México
Según el Consejo Nacional para el Desarrollo y la Inclusión de las personas con Discapacidad de la
Secretaría de Educación Pública (SEP) de México país que, al ratificar la Convención sobre los
Derechos de las Personas con Discapacidad, se compromete asegurar un sistema de educación inclusivo
en todos los niveles, a fin de hacer posible que las personas con discapacidad participen de manera
efectiva en una sociedad libre (SEP, 2015).
La Ley General para la Inclusión de las personas con discapacidad en su artículo 12 propone que la:
“Secretaría de Educación Pública promoverá el derecho a la educación de las personas con
discapacidad, prohibiendo cualquier discriminación en planteles, centros educativos, guarderías o del
personal docente o administrativo del Sistema Educativo Nacional” (Ibid.)
Esto requiere de un conjunto de acciones coordinadas que lo garanticen, coordinando las indicaciones
de organismos internacionales como ONU, UNESCO, UNICEF y los objetivos del milenio. En México
específicamente el Programa Nacional para el Desarrollo y la Inclusión de las Personas con
Discapacidad 2014-2018, publicado en abril de 2014 en el diario oficial de la federación, propone en
su objetivo 4º. “Fortalecer la participación de las personas con Discapacidad en la educación inclusiva
y especial, la cultura, el deporte y el turismo (CONADIS, 2014).
El gobierno de México actualmente, y a partir de la revisión del modelo educativo, ha detectado que se
requieren cambios en las perspectivas teórico-conceptuales, metodológicas, curriculares, y de actitud y
compromiso que favorezcan el cumplimiento de objetivos plateados para la educación inclusiva basada
en la diversidad.
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Por su parte la Ley General de Educación Superior en su texto vigente (2021) anota en su artículo 8,
fracciones V, VI y VII, que debe garantizarse la inclusión para todos los grupos sociales, especialmente
los grupos vulnerables con el objetivo de que participen activamente en el desarrollo del país, a partir
de la igualdad de oportunidades para que todos puedan acceder a la educación superior sin sufrir
discriminación alguna, todo esto basado en el reconocimiento de la diversidad.
La prevalencia de la desigualdad y la discriminación es quizá, nuestra mayor preocupación, ya que el
cambio social siendo estructural es más lento, complicado y complejo, como las sociedades mismas.
Las sociedades actuales enajenadas con el consumo, con los estereotipos de belleza y salud y
concepciones de “normalidad” que no consideran a la diversidad, imposibilitan avanzar a mayor
velocidad con la eliminación de la discriminación. Las actitudes de la gente en general e incluso de las
personas que están en contacto con las personas en situación de discapacidad, son buena muestra de
ello. Ante estos factores aun cuando va actualizándose la legislación, van cambiando los modelos
educativos, van accediendo un número mayor de estudiantes en situación de discapacidad a la educación
superior y los profesores se interesan más por el tema en aras de mejorar su práctica docente, aún nos
queda mucho por hacer.
La formación, actualización y sensibilización del docente universitario en temas de inclusión a la
discapacidad
La educación inclusiva, es un concepto multidimensional que demanda de los educadores atender los
planes y programas, la evaluación, la enseñanza, la aceptación, el acceso y apoyo, los recursos y el
liderazgo, (Dávila y Manjarrez; Mitchel, 2016). De lo anterior, se deriva la necesidad de una formación
inclusiva a los docentes, a través de un espacio cara a cara orientado al uso de estrategias pedagógicas
adaptadas a la población con discapacidad.
Diversos investigadores han expresado distintas concepciones acerca del rol que debería tener el
docente, respecto a los cambios que ha experimentado la educación, con temas relacionados tanto a la
inclusión educativa y discapacidad, como a las necesidades educativas especiales (Luque, 2016). Así,
los docentes deben observar a los estudiantes en condición de discapacidad como una oportunidad para
mejorar e innovar tanto en su actividad como en su formación docente, orientados a la calidad, con la
capacitación apropiada para promover la inclusión de manera efectiva al aula (Duran y Giné, 2011).
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Por otra parte, la actualización docente respecto a la inclusión educativa, autores sostienen que, si bien
la inclusión educativa es un mecanismo para asegurar que los estudiantes en situación de discapacidad
tengan la posibilidad de acceder a los recursos de la institución sin ninguna discriminación, es notoria
la falta de capacitación de estos en cuanto al manejo de estudiantes que cuentan con alguna necesidad
o discapacidad (Fernández y Duarte, 2016). Ante esto, los docentes han mostrado sus inquietudes sobre
los procesos de enseñanza que deben implementar, percibiéndose muchas limitaciones en sus
capacidades y competencias (Aranda y Jiménez, 2021).
Pese a los esfuerzos que realizan las IES, el personal docente, no se encuentra preparado ni actualizado
para hacer frente a los casos de inclusión de estudiantes en situación de vulnerabilidad. Tampoco,
considerando la diversidad de los estudiantes, lo cual implicará modificaciones metodológicas,
desarrollo de competencias, mediación áulica a fin de mejorar los procesos de enseñanza y aprendizaje,
(Luque, 2016; Martínez 2008). Por ello, se requiere de capacitación profesional en áreas cruciales para
el desarrollo del trabajo autosuficiente y estrategias de enseñanza colaborativa para estudiantes con
discapacidad (Montaner, 2018; Rodríguez, 2018; Aranda y Jiménez, 2021). Para lograr lo anterior, es
necesario concientizar a los docentes sobre la importancia de su rol en la educación inclusiva. Se precisa
de sensibilizar a los docentes con el propósito de mejorar su práctica con estudiantes que presentan
discapacidad, buscando su derecho a ser tratados con igualdad y dignidad.
Para llevar a cabo una buena práctica inclusiva, estos, deben contar con una actitud abierta al cambio y
a la innovación, buscando alternativas a sus prácticas que les permitan responder adecuadamente a las
necesidades de todos sus estudiantes. En este sentido, autores han demostrado que aquellos docentes
que mantienen una actitud favorable hacia la inclusión resultan beneficiosos en la formación de
estudiantes, por tanto, la importancia de una buena actualización, sensibilización y formación en estos
temas, (Aranda y Jiménez, 2021; Miranda, et al, 2020).
De lo anterior, se considera al docente como elemento clave para una escuela inclusiva teniendo el aula
como espacio por excelencia, donde los estudiantes encuentren las respuestas educativas a su manera
de ser y de aprender. Por tanto, es importante que los docentes aprendan a utilizar la capacidad de sus
estudiantes con el fin de ofrecerse ayuda mutua para el aprendizaje.
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Es por ello por lo que, se considera esencial dar voz a los estudiantes, especialmente aquellos que se
encuentran en situación de vulnerabilidad indagando que piensan y sienten esto con el fin de poder
identificar las necesidades y los desafíos que, como docentes e institución se deben de confrontar y
trabajar.
METODOLOGÍA
La presente investigación se sustenta bajo un enfoque cualitativo, exploratorio – descriptivo apoyado
con el método biográfico, ya que este método nos permite tener una forma de acercamiento para rescatar
“la voz de los sin voz”, es decir, de esos sujetos sociales de los que poco sabemos, que son marginales
o pertenecen a las minorías sociales, y que, en interacción constante con el entorno social, tienen
experiencias, saberes, necesidades y opiniones que bien vale la pena rescatar. (Thomson,1978).
En este sentido, los relatos de vida funcionan como una especie de termómetro que muestra la
complejidad extrema de las trayectorias de vida de los sujetos, que reflejan los modelos normativos que
impone la sociedad.
De lo anterior, este marco metodológico se utilizó para recolectar información de tres estudiantes con
autismo y/o ceguera, extrayendo para este documento tres categorías de las cuales se desprende en
primera instancia la formación de los docentes, seguido por las experiencias y desafíos que han pasado
los estudiantes durante su trayectoria en la universidad, cerrando con las prácticas de sus docentes en el
aula y la repercusión de esta en su trayectoria académica.
Participantes
La muestra estuvo conformada por 3 participantes pertenecientes a la Universidad Autónoma de Ciudad
Juárez, adscritos al campus del Instituto de Ciencias Sociales y Administración. Los participantes
fueron seleccionados a través de una estrategia no probabilística con un muestreo por conveniencia
(Cossio y Bolaños, 2015). Para los criterios de selección se requirió: ser estudiante del campus de
ciencias sociales, llevar más del 75% de avance de su carrera o estar por culminar, estar diagnosticado
con TEA o alguna discapacidad por algún médico por lo menos 6 meses antes de iniciar la presente
investigación. Los antecedentes de los tres participantes seleccionados se describen en la Tabla1.
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Tabla 1. Descripción de los participantes del estudio.
Participante
Edad
Carrera
Semestre
Participante 1
26 años
Enseñanza
del Inglés.
8vo
Participante 2
23 años
Educación
9no
Participante 3
26 años
Psicología
9no
Fuente: Autoría propia (2024).
Aspectos éticos
Con referencia a los aspectos éticos de la presente investigación, se protegieron la integridad y los
derechos de los participantes de estudio, se señaló el carácter voluntario de dicha participación, así
como la confidencialidad y privacidad de la información obtenida. Con ello, se buscó cumplir con todos
los criterios éticos establecidos en el Convenio de Helsinki, (Opazo, 2011).
Procedimiento de recopilación y análisis de los datos
Para la recopilación de la información, en primer lugar, fue otorgado un consentimiento informado a
cada participante, asegurando de esa manera la confidencialidad de sus datos. Posterior a ello, se les
hizo entrega de una guía de entrevista semiestructurada con 12 preguntas de las cuales cuatro eran
establecidas para cada categoría formulada, finalmente fue programado y llevado a cabo las tres
entrevistas por separado a través de la plataforma educativa TEAMS mismas que fueron grabadas para
su posterior transcripción.
En cuanto el proceso de sistematización de la información, esta fue realizada de manera manual
tomando en cuenta los elementos propuestos por Mayring (2014) en la tabla 2.
Tabla 2. Procesos de sistematización de Mayring (2014)
1. Delimitación de las unidades de
información
La información obtenida a través de las
entrevistas permite elaborar a profundidad
las categorías establecidas.
2. Maping.
Selección de extractos significativos de las
opiniones proporcionadas por los
participantes.
3. Codificación y Resaltado
Creación de códigos con relación a la guía
de entrevista y categorías propuestas.
4. Elaboración de Categorías.
Revisión general y extracción de
fragmentos compilados para la elaboración
de los resultados.
Fuente: elaboración propia (2024).
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RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Del análisis cualitativo realizado, emergieron tres categorías, en primera instancia: 1) Formación
docente, seguido por: 2) Experiencia y desafíos en su trayectoria universitaria y cerrando con: 3) La
praxis docente.
La formación docente
Con lo que respecta a la formación de los docentes, los tres participantes expresaron mayoritariamente
opiniones negativas. Por una parte, señalaron que los docentes pese a contar con una buena preparación,
tener altos grados y ser académicos reconocidos, la mayoría de estos no cuentan con ningún tipo de
formación y/o conocimiento sobre cómo trabajar con personas con diversas discapacidades, lo cual para
ellos es una barrera didáctica importante en su trayectoria por la universidad como lo muestran los
siguientes extractos:
[…] Mis profes no tienen idea de mi condición, piensan que estoy mintiendo que actuó así porque
no quiero trabajar y ellos no imaginan el esfuerzo… hasta donde yo sé, ninguno de ellos conoce
o ha querido formarse para trabajar con personas como yo. La mayoría son profesores por
asignatura y son maestros que se dedican a dar clases (ni siquiera son de mi propia carrera)
…cada semestre les pregunto si saben o conocen sobre casos como el mío y solo dos maestras
se han preparado o tomado cursos para poder apoyarme, el resto es como si yo no existiera…
(participante 1).
[…] Si conozco la formación de mis maestros, de hecho, es gracias a una maestra que desde que
entre a la carrera, ella se ha encargado de asesorar a los maestros que van a darme clases, y
hay varios maestros que sé que son de educación, otros que son investigadores y antropólogos,
algunos que me han dicho que son de educación especial, que trabajan con personas como yo,
de hecho, trabajo con uno de ellos, pero, no le miento que si hay maestros que pese a que es un
programa de educación siento bien como me ignoran aunque no pueda verlos lo siento…
(participante 2).
[…] Con todos los que he llevado clase la mayoría son psicólogos y uno que otro de educación
o de derecho, pero que yo sepa que conocen o saben de mi condición fue un maestro de la
maestría que me vio y fue quien me diagnosticó, pero para la mayoría les pasa de noche… lo
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que sí, se es que la universidad les da cursos de inclusión, pero muchos dicen que no es de su
interés formarse en eso que eso es solamente para los que estudian educación… (participante
3).
En este sentido, los alumnos si bien han tratado de identificar a docentes cuya formación contenga al
menos conocimientos sobre sus condiciones, solo en el caso del participante 2, es donde se puede
percibir que los docentes cuentan con formación, conocimientos sobre su condición y ello mayormente
reside al apoyo de una docente que, según el participante, esta lo ha apoyado en toda su trayectoria
académica a fin de poder avanzar en ella con el menor problema. No obstante, en mayoría denota la
falta de conocimiento o apertura por parte de ellos para asistirlos en las aulas.
Experiencia y desafíos en su trayectoria universitaria
Dentro de las experiencias y desafíos que estos han tenido por su paso en la universidad, los tres
participantes han mencionado de manera general ha sido buena, esto derivado no tanto a los docentes
sino al gran apoyo recibido por sus compañeros semestre a semestre. Son los mismos estudiantes,
quienes, al ver las condiciones de sus compañeros, son ellos mismos quienes se informan, se preocupan
y los apoyan a que sus clases y sus experiencias dentro del campus sean lo más llevaderas y aún, más
allá de lo que aprenden en las aulas:
Participante 1 […] Dentro de la universidad, elegí la carrera de enseñanza del inglés no fue mi
primera opción, pero me agradan los idiomas. Los principales retos que he vivido es mi
sensibilidad, no puedo tolerar ver alguna injusticia o ver que traten mal a alguien, es como “una
brújula moral”; dentro de mis mayores aprendizajes buscar ser un agente de cambio, el ser
humano siempre me ha parecido problemático, irracional y lógico, me di cuenta de que la mejor
forma de hacer un cambio es educar… cuando se enseña un idioma se abre un panorama más
amplio se aprende ideas, cultura, puedo enseñar cosas que nos haga más humanos… la
universidad me ha permitido desarrollar habilidades sociales, aprender el trabajo en equipo y
técnicas que me han permitido solucionar conflictos.
Participante 2 […] La vida dentro de la universidad es bastante amable, aunque con lo primero
que me topé al ingreso a la universidad fue con profesores que carecen de una didáctica que les
permita trabajar con personas con mi discapacidad. La universidad tiene procesos que
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complican bastante el panorama como la inscripción de cada semestre, la ubicación de los
espacios, el presentarse y dialogar o negociar con profesores sobre ajustar sus formas de
trabajo. Dentro del campus algo que me ha facilitado es la ayuda de mis compañeros, siempre
me ofrecen ayuda, aunque no lo hagan de manera adecuada, agradezco siempre la buena
voluntad…
Participante 3 […] En mi paso por la universidad no he tenido ningún problema, la carrera de
psicología fue mi primera elección, simplemente porque deseo entender por qué la gente actúa
como actúa… no he sentido ningún reto, pero…. Si siento que no encajo he llegado al grado de
fingir con mis maestros, siempre busco aprender por mis propios medios he tenido buenos
maestros, pero no han sabido como apoyarme o enseñarme así que ha sido como estar en modo
automático aquí… solo deseo ser un buen psicólogo y ayudar a otros como yo
En cuanto a las experiencias que han tenido los estudiantes durante su paso por la universidad, se puede
observar que para los tres casos ha sido “llevadero” gracias al apoyo de sus compañeros. También, han
señalado sentir que “no encajan” pese a que por parte de la comunidad estos son incluidos y apoyados.
En cuanto a la figura docente, en su mayoría sigue siendo una figura neutral en sus experiencias. En lo
que respecta a los desafíos, se identifica la carencia de conocimientos por parte de los docentes, así
como la burocracia institucional que se vive semestre a semestre por parte de los participantes.
Praxis docente
Para el análisis de la praxis de los docentes, este se divide en tres secciones: las actitudes que han tenido
los docentes en el aula frente a los casos con estas condiciones, seguido de las prácticas, estrategias y
didácticas que han marcado en la formación de los participantes, cerrando con recomendaciones que
estos hacen a los docentes a fin de crear prácticas más inclusivas dentro del aula.
Con referencia a las actitudes que han tenido los docentes dentro del aula con respecto a tener entre sus
filas a personas con alguna discapacidad y/o condición, los participantes los han dividido entre docentes
con actitudes buenas y malas:
[…] He tenido maestros buenos y malos… para mí los buenos maestros que son pocos, han sido
empáticos y humildes que son solo dos y son las maestras que se tomaron el tiempo de informarse
de mi condición, son maestras muy buena onda, muy humanas, pero… hay maestros malos,
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aparte de tener desinterés por las materias, han sido poco flexibles conmigo, por ejemplo, tuve
un episodio en el salón y el maestro solo se burló y me sacó del salón pensando que era mentira
¿Quién hace eso? … Pensé que en la universidad los maestros por su nivel de conocimiento
serian distintos, así que agradezco a esas dos maestras que no me he salido de la carrera…
(Participante 1) …
[…] Mmm… actitud… han sido relativamente buenos, una maestra me dijo que me tenía miedo,
que no sabía cómo enseñarme, solo me reí le dije: “como les enseña a todos” jajaja…tengo esa
idea que por ese miedito que tienen o que no saben que hacer conmigo porque no veo, piensan
¿Cómo voy a dar clases? o ¿Cómo voy a trabajar o encontrar trabajo?... no quiero decir que
son malos porque no creo que sean así solo que si se realmente… si se tomarán el tiempo de
hablar conmigo y ver mis necesidades como estudiantes otra cosa hubiera sido la carrera, digo…
no estoy mal, pero pudo haber sido mejor… (Participante 2) …
[…] Solo quiero decir que son buenos maestros, pero con poca empatía a la discapacidad y poco
interés por informarse… (Participante 3) …
En cuanto a las prácticas, estrategias o didácticas que los docentes han utilizado en las aulas y si
consideran que son inclusivas o no, los participantes señalaron lo siguiente:
[…] Hay maestros que utilizan casos reales, e investigar sobre eso, otros docentes siempre nos
pasan a exponer, no dan clase y para ellos todo es darnos un tema y exposiciones, no toman en
cuenta si aprendemos o no, solo ver los temas, a mi parecer para ellos estar en equipo y exponer
es señal de incluirnos y parte de nuestra formación… no recuerdo más estrategias que solo
exponer y ver casos… (participante 1) …
[…] he tenido muchos obstáculos con las practicas que hacen en sus clases, los maestros saben
de mi discapacidad pero su costumbre es hacer clases muy visuales… se les olvida que tienen un
alumno ciego, tengo una compañera que es mi sombra… muchos maestros se dirigen a ella como
si yo no estuviera o fuera un tonto y eso me ha molestado mucho, hubo una ocasión que en un
examen se lo dieron a mi compañera y le dijeron “contéstalo por favor” era mi examen y me
invisibilizaron, en mi caso, están carentes de estrategias, desconocen sobre los ajustes
razonables, pocos se han tomado la tarea de ponerme las actividades en Braille y esa transición
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ha sido muy dura. Otro claro ejemplo, es que ellos escriben mucho en el pizarrón, o proyectan
presentaciones igual que mis compañeros, ellos son más empáticos en eso, pero es evidente el
poco interés por modificar sus estrategias e incluirme…he tomado la tarea de sensibilizar a mis
maestros yo mismo, cuando pasan esas cosas, es cosa de todos los semestres… (participante 2)
…
[…] hay docentes o sobre todo los jóvenes que cuanto tomas clases con ellos, sientes que puedes
cambiar el mundo, hay una docente que utiliza mucho la palabra “agente de cambio” y cuando
tomo clases con un profe de psicología me hace sentir eso, que puedo cambiar el mundo. Pero
también hay profes de tercera edad que…. sus estrategias se basan solo en hacer exposiciones,
ensayos, son cero empáticos se escudan en su vieja escuela y algunos que saben de mi condición
me utilizan como un “sabelotodo” para ahorrarse la clase, hay profes que, si hacen unas
estrategias que te hacen sentir incluido, que respetan mi condición, pero son contados o son con
los que he tomado clases de educación y otros que me hacen a veces querer dejar la carrera, si
hace falta mucha sensibilización… (participante 3) ...
Por último, en lo que respecta a las recomendaciones que los participantes hacen en general para las
praxis de los docentes, se muestra una concordancia en la urgente necesidad no de sensibilizar a los
docentes sino de dotarles de información y estrategias que les permita realmente fomentar espacios
donde impere el respeto a las diversas condiciones más allá de un espacio inclusivo.
[…] Más que recomendación ya que voy de salida les pido que sean más empáticos y se informen
de las condiciones, y a la universidad si hay manera que sepa de lo que vivimos día con día que
tome cartas en el asunto que se dejen de cursos que no hay interés si no que realmente tomen en
cuenta las necesidades, para que los que van a entrar a la universidad no vivan las mismas cosas
que viví, no digo que ha sido malo, pero pudo haber sido mejor… (participante 1) …
[…] Que nos dejen de tratar como estudiantes de secundaria… que se quiten el miedo a las
personas como yo, que también tenemos derecho a una educación digna, agradezco sus
enseñanzas, los espacios, a mis compañeros que han tenido siempre la disposición, si hace falta
mucho trabajo para atender las necesidades de personas vulnerables, nos hacen sentir
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vulnerables entre los más vulnerables… así como hay cursos para mejorar sus prácticas en el
aula, busquen como trabajar con gente como nosotros… (participante 2)…
[…] Quisiera decir muchas cosas, pero como siempre no se hará nada… si en mis manos
estuviera, les daría mis ojos para que entendieran como me siento y vivo día a día… (participante
3) …
Considerando los hallazgos de este estudio, las discusiones tienen como propósito conocer las
experiencias y opiniones de estudiantes en situación de discapacidad o con alguna condición sobre la
praxis de sus docentes y su trayectoria por la universidad a partir de las categorías analíticas abordadas.
En cuanto a la primera categoría, se buscó conocer la formación de los docentes que han marcado a los
participantes durante su trayectoria académica, estos señalaron que, si bien son docentes con niveles
académicos elevados, la mayoría de ellos carecen de conocimiento sobre sus condiciones. Sin embargo,
son contados los casos donde la formación de los docentes radica en la educación especial lo cual ha
favorecido en cierta parte su proceso dentro de las aulas siendo esto en una parte mínima.
Por lo anterior, en concordancia con Luque (2016) y Martínez (2008), el personal docente, no se
encuentra preparado ni actualizado para hacer frente a los casos de inclusión de estudiantes en situación
de discapacidad. Tampoco, considerando la diversidad de los estudiantes, lo cual implicará
modificaciones metodológicas, desarrollo de competencias, mediación áulica a fin de mejorar los
procesos de enseñanza y aprendizaje. En este mismo tenor, Durán y Giné (2011), señalan que los
docentes deben observar a los estudiantes en condición de discapacidad como una oportunidad para
mejorar e innovar tanto en su actividad como en su formación docente, orientados a la calidad, con la
capacitación apropiada para promover la inclusión de manera efectiva en el aula, tal y como se ha
sugerido en los hallazgos identificados.
Por otra parte, con referencia a las experiencias y desafíos que han surgido durante su trayectoria por la
universidad, entre los hallazgos más destacables se identifica como llevadera y no gracias al papel de
los docentes, sino al apoyo que estos han recibido por parte de los estudiantes.
A través de las entrevistas se pudo observar en repetidas ocasiones que los participantes hicieron énfasis
en el apoyo recibido por sus compañeros de diversas asignaturas. Estos mismos se informaban por su
cuenta sobre las condiciones y tomaban en cuenta las necesidades que estos manifestaban con el fin de
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poderlos apoyar durante su travesía en las clases, contrario al papel de los docentes que, en algunos
casos, se convirtieron en un obstáculo más que en una oportunidad de crecimiento en ambos sentidos.
De acuerdo con Nassri (2024), los compañeros que han tenido personas con alguna condición se han
convertido en un apoyo, los cuales constantemente se encuentran buscando información. Estos
señalaron que el problema no radica en la comunidad estudiantil sino en la pobre actitud que tienen los
docentes quienes al carecer de recursos se convierten en una barrera tanto metodológica como
actitudinal en el aula, esto coincidente a su vez con lo establecido por los tres casos, donde es gracias a
sus compañeros que no se dieron por vencido durante su travesía por la universidad.
Con relación a la praxis de los docentes, y en concordancia al propósito de cómo esta ha impactado en
la trayectoria de los estudiantes durante la universidad, entre los hallazgos más relevantes se encuentra
que, los docentes tienen una actitud ambivalente. Por un lado, son buenos docentes con apertura, pero,
por otro lado, cerrados a formarse en estas áreas a fin de apoyar de una manera más personalizada a los
estudiantes. Sin embargo, entre los hallazgos más destacables se encuentra el de las estrategias que
utilizan los docentes en sus prácticas y si estas mismas, los participantes a través de su experiencia lo
han considerado inclusivo o no. Son los maestros noveles lo que tienen la apertura a estos casos, donde
sus estrategias radican en elaborar casos vivenciales con los estudiantes, otros casos en donde por medio
de la empatía se asesoran a través de otros colegas a fin de mejorar sus prácticas,
Pero, por otra parte, no sucede lo mismo con aquellos docentes que los estudiantes señalan como “vieja
guardia” que son aquellos que no dejan de lado sus viejas prácticas y las siguen llevando a cabo en las
aulas sin medir las consecuencias que esto puede conllevar en estudiantes vulnerables. Por ello, en
concordancia con autores como (Aranda y Jiménez, 2021; Miranda, et al, 2020) quienes destacan que,
para llevar a cabo una buena práctica inclusiva, los docentes deben contar con una actitud abierta al
cambio y a la innovación, buscando alternativas a sus prácticas que les permitan responder
adecuadamente a las necesidades de todos sus estudiantes.
Aquellos docentes que mantienen una actitud favorable hacia la inclusión resultan beneficiosos en la
formación de estudiantes, por tanto, la importancia de una buena actualización, sensibilización y
formación en estos temas propiciará a una buena praxis en el aula.
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Por último, con respecto a las recomendaciones que mencionan los participantes, estos, señalan con
calidad de “urgencia” que los docentes sean dotados de estrategias, sean más empáticos sobre las
diversas condiciones y discapacidades ya que con sus actitudes han propiciado que estos se sientan más
vulnerables dentro del aula. En la misma sintonía, Nassri (2024) menciona que no solo es urgente sino
indispensable empezar a desarrollar cursos de formación docente que les permita obtener tanto las
herramientas como las estrategias necesarias a la comunidad académica, esto con el fin de optimizar
sus procesos de enseñanza y aprendizaje en estos grupos vulnerables, propiciando no solo espacios
inclusivos sino una atención digna a la diversidad universitaria.
CONCLUSIONES
Por todo lo anterior y teniendo en cuenta todo lo referido a lo largo de la presente investigación, a
manera de conclusión se establecen las siguientes recomendaciones a desarrollar dentro de la institución
y de tomar en cuenta por la comunidad universitaria:
La sensibilización a la comunidad universitaria no solo hacia el TEA y la discapacidad visual, sino a
todas las condiciones que se encuentran identificadas dentro de la institución, fomentando el respeto y
tolerancia hacia estos grupos.
Facilitar el asesoramiento y apoyos individualizados a cualquier estudiante con alguna condición a
través de los espacios de tutoría el cual permita establecer la atención de las necesidades específicas de
estos.
Para la comunidad docente y administrativa: El manejo de la información a través de pláticas con
especialistas en los temas de interés detectados, tales como información general de inclusión, tolerancia
y respeto con compañeros en situación de vulnerabilidad, conocimiento de discapacidad, trastornos y
necesidades, así como espacios de convivencia sana.
Así mismo, facilitar apoyo a los docentes desde las instancias administrativas a fin de posibilitarles el
conocimiento a nivel individual de aquellos estudiantes que cuenten con algún tipo de condición o
discapacidad teniendo al alcance la información de dichas condiciones con el objetivo de poder atender
las necesidades que se puedan presentar dentro del aula.
Dotar a los docentes de estrategias y recursos pedagógicos más allá de información generalizada que
les permita realmente establecer una mejor atención a la diversidad en sus aulas.
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