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para las familias involucradas. La participación familiar se reconoce como un factor clave en el éxito
del proceso educativo de niños con TEA, ya que los padres y familiares juegan un rol crucial en el
apoyo al aprendizaje y desarrollo del niño (Valverde & Engracia, 2023).
En la Escuela Especial "Luis Alberto Luna Tobar", dedicada a la educación de niños con necesidades
educativas especiales, específicamente aquellos con TEA, se ha observado que la participación familiar
en el proceso educativo puede ser insuficiente o inefectiva. Si bien el entorno escolar está adaptado con
métodos de enseñanza especializados y recursos como terapeutas y personal de apoyo, es necesario
evaluar cómo las familias se involucran en dicho proceso. La falta de participación familiar puede estar
incidiendo negativamente en el rendimiento académico y el desarrollo social de los estudiantes con
TEA, limitando su integración efectiva en el entorno escolar (Cruz, 2021).
Los principales conceptos que se deben abordar en este estudio incluyen la "participación familiar", el
"apoyo conductual", y las "adaptaciones curriculares". La participación familiar se refiere al nivel de
involucramiento de los padres o tutores en las actividades escolares, reuniones, tareas, y otras formas
de apoyo directo al aprendizaje (Rodríguez, 2020). El apoyo conductual, por otro lado, implica la
implementación de estrategias personalizadas para manejar conductas desafiantes, permitiendo que el
estudiante con TEA participe activamente en el entorno escolar (Rodríguez, 2020). Las adaptaciones
curriculares son modificaciones al plan de estudios y métodos de enseñanza para garantizar que los
estudiantes con TEA puedan acceder al aprendizaje en igualdad de condiciones (Vera & Cecilia, 2023).
El estudio se delimitará en el análisis de la participación de las familias de estudiantes con TEA en la
Escuela Especial "Luis Alberto Luna Tobar", durante el ciclo escolar 2023-2024, enfocándose en los
niveles inicial 1, 2 y preparatoria. Se evaluarán factores como el involucramiento en actividades
escolares, la comunicación entre la escuela y las familias, y los obstáculos que puedan limitar la
participación, tales como horarios laborales, recursos limitados o una comprensión insuficiente de las
necesidades educativas especiales.
A pesar de los esfuerzos de la escuela por integrar a las familias en el proceso educativo, es posible que
existan barreras significativas que dificultan una participación activa y efectiva, lo que impacta en el
desarrollo integral del estudiante con TEA. Por ello, la investigación busca responder a la siguiente
pregunta: