RELACIÓN ENTRE HIPERKALEMIA Y
ALTERACIONES ELECTROCARDIOGRÁFICAS
EN ENFERMEDAD RENAL CRÓNICA KDIGO V
SIN TRATAMIENTO SUSTITUTIVO
RELATIONSHIP BETWEEN HYPERKALEMIA
AND ELECTROCARDIOGRAPHIC ALTERATIONS IN
KDIGO V CHRONIC KIDNEY DISEASE WITHOUT
REPLACEMENT TREATMENT
Enrique Antonio Tlacaelelt Valencia Rueda
Instituto Mexicano del Seguro Social, México
Laura Serrano Vértiz
Instituto Mexicano del Seguro Social, México
Beatriz Tlatelpa Romero
Instituto Mexicano del Seguro Social, México
Gregoria Lucia Cisneros-Díaz
Instituto Mexicano del Seguro Social, México
Nancy Vianey Díaz Rodríguez
Instituto Mexicano del Seguro Social, México

pág. 10028
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v9i1.16623
Relación entre Hiperkalemia y Alteraciones Electrocardiográficas en
Enfermedad Renal Crónica KDIGO V sin Tratamiento Sustitutivo
Enrique Antonio Tlacaelelt Valencia Rueda 1
enrique.valencia9760041@gmail.com
https://orcid.org/0009-0008-7912-7368
Instituto Mexicano del Seguro Social
México
Laura Serrano Vértiz
lavz314@gmail.com
https://orcid.org/0009-0005-0114-8722
Instituto Mexicano del Seguro Social
México
Beatriz Tlatelpa Romero
beatlarom@gmail.com
https://orcid.org/0000-0003-4080-2975
Instituto Mexicano del Seguro Social
México
Gregoria Lucia Cisneros Díaz
lucyernega@gmail.com
https://orcid.org/0000-0003-0380-3688
Instituto Mexicano del Seguro Social
México
Nancy Vianey Díaz Rodríguez
nvdr.tt@gmail.com
https://orcid.org/0000-0001-7811-8656
Instituto Mexicano del Seguro Social
México
RESUMEN
Introducción: la hiperkalemia puede causar alteraciones electrocardiográficas, principalmente en onda
T, ensanchamiento del QRS y bloqueos AV, por lo que es vital su adecuada identificación. Objetivo:
determinar la relación entre hiperkalemia y las alteraciones electrocardiográficas en enfermedad renal
crónica KDIGO V sin tratamiento sustitutivo. Materiales y métodos: estudio retrospectivo, unicéntrico,
descriptivo, observacional; donde se incluyeron pacientes mayores de 18 años que ingresaron al
Hospital General de Zona No. 23 que cumplieran con los criterios de inclusión. Resultados: de 120
pacientes estudiados, se observó que 60.8% fueron hombres y 39.2% mujeres, asociado en 69.2% a
diabetes tipo 2 y en 62.5% con hipertensión arterial, con una media de 7.22 mEq (DE ±1.46) de potasio.
Detectando una evolución superior de los 12 meses en un 54% (n=54) los cuales mostraron alteraciones
electrocardiográficas. Mediante la aplicación de la prueba estadística de Chi cuadrada de Pearson,
observamos una relación entre la hiperkalemia y los bloqueos AV (7.83), igual que entre la hiperkalemia
y la alteración del QRS (17.25), finalmente las alteraciones de la onda T (47.77). Finalmente se encontró
una relación positiva entre la hiperkalemia y las alteraciones electrocardiográficas (p=0.05).
Conclusiones: Los pacientes que cursaron con hiperkalemia sí presentaron alteraciones en el EKG.
Palabras clave: potasio, cambios electrocardiograficos, enfermedad renal crónica
1 Autor principal.
Correspondencia: enrique.valencia9760041@gmail.com

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Relationship Between Hyperkalemia and Electrocardiographic Alterations
in KDIGO V Chronic Kidney Disease Without Replacement Treatment
ABSTRACT
Introduction: hyperkalemia can cause electrocardiographic alterations, mainly in the T wave, widening
of the QRS and AV blocks, so its proper identification is vital. Objective: to determine the relationship
between hyperkalemia and electrocardiographic alterations in KDIGO V chronic kidney disease
without replacement treatment. Materials and methods: retrospective, single-center, descriptive,
observational study; where patients over 18 years of age who were admitted to the General Hospital of
Zone No. 23 who met the inclusion criteria were included. Results: of 120 patients studied, it was
observed that 60.8% were men and 39.2% women, associated in 69.2% with type 2 diabetes and in
62.5% with arterial hypertension, with an average of 7.22 mEq (SD ±1.46) of potassium. Detecting a
superior evolution of the 12 months in 54% (n=54) which showed electrocardiographic alterations. By
applying the Pearson Chi square statistical test, we observed a relationship between hyperkalemia and
AV blocks (7.83), as well as between hyperkalemia and QRS alteration (17.25), finally T wave
alterations (47.77). ). Finally, a positive relationship was found between hyperkalemia and
electrocardiographic alterations (p=0.05). Conclusions: Patients who had hyperkalemia did present
alterations in the EKG.
Keywords: potassium, electrocardiographic changes, chronic kigney disease
Artículo recibido 18 diciembre 2024
Aceptado para publicación: 20 enero 2025

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INTRODUCCIÓN
El potasio (K+) es el principal catión intracelular del cuerpo humano, donde el 98% de su concentración
se encuentra en el interior de las células, particularmente en los músculos, mientras que solo el 2%
circula en el espacio extracelular. La homeostasis del potasio es esencial para mantener el potencial de
reposo de las membranas celulares, lo cual es crucial para el funcionamiento normal del corazón, los
músculos y el sistema nervioso (1). La hiperkalemia, definida por niveles elevados de potasio en sangre
(más de 5.0 mEq/L), es una condición grave que puede resultar en consecuencias fatales si no se maneja
adecuadamente. Entre los factores de riesgo para desarrollar hiperkalemia se incluyen la enfermedad
renal crónica (ERC), la insuficiencia cardíaca (IC) y la diabetes, especialmente en pacientes que reciben
inhibidores del sistema renina-angiotensina-aldosterona (SRAA) (2).
El potasio corporal se distribuye principalmente en los tejidos musculares, el hígado, los eritrocitos y
en menor cantidad en el plasma y los líquidos extracelulares. La regulación del potasio depende de
varios mecanismos fisiológicos, entre los cuales destaca la excreción renal, que se ajusta a las
necesidades del cuerpo, alcanzando una tasa de excreción mínima de 5 mEq/día en situaciones de
deficiencia. Además, el potasio es filtrado libremente por el glomérulo renal y la mayor parte es
reabsorbido en el túbulo proximal y el asa de Henle. La secreción de potasio ocurre principalmente en
el túbulo distal y el conducto colector cortical, donde las células principales son cruciales para la
regulación de su concentración (7). La excreción de potasio también está influenciada por factores
como la aldosterona, el flujo urinario y el suministro de sodio en la nefrona distal (9).
Aunque la hiperkalemia es relativamente infrecuente en la población general, su incidencia varía
dependiendo de los umbrales utilizados para su diagnóstico. En pacientes hospitalizados, la incidencia
ha sido reportada entre el 3.5% y el 4.9%, dependiendo de la definición adoptada para los niveles
elevados de potasio. Factores como el monitoreo frecuente y las condiciones subyacentes de los
pacientes, como la ERC, diabetes y enfermedades cardíacas, incrementan la probabilidad de que se
detecten casos de hiperkalemia (11, 12).
Los factores de riesgo para desarrollar hiperkalemia incluyen enfermedades como la insuficiencia renal
crónica y la insuficiencia cardíaca (14).

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Además, el uso de ciertos medicamentos, como inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina
(IECA), bloqueadores beta, heparina y diuréticos ahorradores de potasio, también puede aumentar el
riesgo de hiperkalemia (15). La hiperkalemia también está asociada con otras condiciones como
insuficiencia suprarrenal, acidosis tubulorrenal tipo IV, hemólisis, y ciertos estados de destrucción
celular (15).
La enfermedad renal crónica (ERC) es una condición caracterizada por la presencia de alteraciones
renales durante al menos tres meses, que se manifiestan por una disminución del filtrado glomerular
(FG) y otros marcadores de daño renal. En estos pacientes, la regulación de potasio puede verse
afectada, incrementando el riesgo de hiperkalemia. La clasificación de la ERC depende de la tasa de
filtración glomerular (TFG) y de la presencia de albuminuria, con el objetivo de determinar el grado
de compromiso renal y las opciones de tratamiento (3).
La hiperkalemia puede ser asintomática o presentarse con síntomas como debilidad muscular,
parestesias, y anomalías en la conducción cardíaca. La parálisis y las arritmias cardíacas graves pueden
resultar de los efectos de la hiperkalemia en el corazón, donde el aumento de la concentración de potasio
extracelular afecta el potencial de acción de las células miocárdicas (16). En el electrocardiograma
(ECG), los cambios típicos incluyen el aumento de la amplitud de la onda T, la prolongación del
intervalo PR, la pérdida de las ondas P, y la eventual aparición de un patrón de onda sinusoidal, lo que
puede culminar en asistolia (18).
El tratamiento de la hiperkalemia se basa en tres estrategias principales: eliminación del exceso de
potasio, redistribución del potasio hacia el interior celular y estabilización de la membrana miocárdica.
Eliminación: Los diuréticos de asa y la diálisis son opciones para aumentar la excreción de potasio en
pacientes con función renal comprometida. En casos de hiperkalemia aguda y persistente, la consulta
con un especialista en nefrología es esencial (23).
Redistribución: Agonistas beta-2 como el albuterol y la administración de insulina con dextrosa ayudan
a mover el potasio fuera del espacio extracelular hacia el interior celular (24). El bicarbonato de sodio
también ha sido utilizado para promover la entrada de potasio en las células, aunque su eficacia ha sido
cuestionada en ciertos estudios (25, 26).

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Estabilización de la membrana: El gluconato de calcio intravenoso se administra para contrarrestar los
efectos de la hiperkalemia en el ECG y estabilizar la excitabilidad de las células miocárdicas (24).
Diversos estudios han analizado la relación entre la hiperkalemia y las alteraciones
electrocardiográficas. Un estudio realizado por Montague en 2018 con pacientes mayores de 65 años
mostró que el 48% de los pacientes con hiperkalemia y ERC presentaron cambios en su ECG, aunque
los criterios de diagnóstico no fueron definitivos (27). Por otro lado, Khanagavi en 2014 investigó los
predictores de mortalidad en pacientes hospitalizados con hiperkalemia y encontró que la presencia de
comorbilidades como hipertensión, diabetes y enfermedades cardíacas, así como el uso de
medicamentos que afectan la excreción renal de potasio, estaban asociados con un mayor riesgo de
complicaciones y mortalidad (28).
La hiperkalemia es una condición peligrosa que requiere un manejo adecuado, especialmente en
pacientes con enfermedades subyacentes como la ERC y la insuficiencia cardíaca. La comprensión de
la fisiología del potasio, la identificación de factores de riesgo y la implementación de estrategias de
tratamiento eficaces son esenciales para prevenir complicaciones graves y mejorar los resultados
clínicos en los pacientes afectados.
METODOLOGÍA
Estudio retrospectivo, unicéntrico, descriptivo, observacional; donde se incluyeron pacientes mayores
de 18 años de edad que ingresaron al Hospital General de Zona No. 23 con diagnóstico de enfermedad
renal crónico KDIGO V y que hasta el momento de su ingreso no han iniciado un tratamiento sustitutivo
de la función renal, del mes de enero 2023 a junio 2023, se incluyeron mayores 18 años, de sexos
indistintos, con cualquier comorbilidad, el tiempo de diagnóstico y niveles séricos de potasio superiores
a 5.5 mEq y a los cuales se les realizó un electrocardiograma de 12 derivaciones para identificar bloqueo
AV, la alteración del QRS y de la onda T, El análisis estadístico fue descriptivo, se utilizó Rho spearman
para la relación entre las alteraciones del EKG con los niveles de potasio.
Se realizó un estudio de tipo retrospectivo, unicéntrico, descriptivo, observacional, que se llevó cabo en
el Servicio de Urgencias del Hospital General de Zona # 23.” Teziutlán”, Puebla, con el título de
“Relación entre hiperkalemia y alteraciones electrocardiográficas en enfermedad renal crónica KDIGO
V sin tratamiento sustitutivo”, con número de registro institucional: R-2022-2108-151.

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Se incluyeron mayores de 18 años, de sexos indistintos, con diagnóstico de enfermedad renal crónico
KDIGO V y que hasta el momento de su ingreso no han iniciado un tratamiento sustitutivo de la función
renal, del mes de enero 2023 a junio 2023, con cualquier comorbilidad, el tiempo de diagnóstico y
niveles séricos de potasio superiores a 5.5 mEq y a los cuales se les realizó un electrocardiograma de
12 derivaciones para identificar bloqueo AV, la alteración del QRS y de la onda T, el tipo de muestreo
del presente estudio fue consecutivo no probabilístico. A todos los participantes se les realizó un
cuestionario en el cual se recolectaron datos como edad, sexo, comorbilidades, niveles de potasio sérico,
tiempo de diagnóstico de la enfermedad renal crónica y tipo de alteraciones electrocardiográfica
presentada
Se recolectaron los datos de todos los pacientes ingresados al presente estudio durante los 6 meses que
duro el tiempo de reclutamiento de los estos, se vacío la información obtenida mediante el Instrumento
de Recolección de Datos al programa estadístico. Todo el análisis de la información recolectada en las
hojas del Instrumento de recolección de datos se efectúo mediante un análisis de correlación a través
del cálculo del Coeficiente de correlación de Spearman y analisis de chi cuadrada para las variables
cualitativas.
RESULTADOS
Se realizó un análisis descriptivo inicial de los pacientes ingresados al servicio de urgencias del Hospital
General de Zona número 23, en el cual se evaluaron a 120 pacientes, de los cuales el 60.8%
correspondieron a hombres (n=73), y un 39.2% a mujeres (n=47); presentando una mediana de edad de
59 años (mínimo 23 y máximo de 85 años).
La principal comorbilidad presentada en los pacientes con enfermedad renal crónica KDIGO V sin
tratamiento sustitutivo de la función renal fue la diabetes tipo 2 en un 69.2% (n=83).

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En los 120 pacientes estudiados, se determinó contar con el diagnóstico de enfermedad renal crónica
KDIGO V con un tiempo de evolución superior a los 12 meses en un 54% (n=54), quienes no aceptan
el inicio de una terapia de sustitución renal, reportando en la tabla 2 el resto de los períodos de
diagnóstico.
De acuerdo con los resultados obtenidos los niveles de potasio se dividieron en leve, moderado y severo
con una mediana de 6.84 mEq (mínimo de 5.5 y máximo 13.05 mEq). Presentando mayor número de
pacientes con hiperkalemia severa en un 71.7% (n= 86), el resto de los pacientes se explica en la tabla
3.
De acuerdo con la muestra obtenida podemos identificar la alteración más frecuente en este tipo de
pacientes siendo la alteración de la onda T en un 74.2% (n=89), seguido de las alteraciones en el
complejo QRS con una presentación del 26.7% (n= 32), finalmente en menor presentación la presencia
de bloqueos AV, con una presentación demostrada de 14.2% (n=17).
Para determinar la correlación entre los niveles de potasio y los cambios electrocardiográficos
enunciadas anteriormente, se decidió utilizar la prueba estadística Chi cuadrada de Pearson, observando
una relación entre el nivel de potasio y los bloqueos AV, chi cuadrada: 7.83, igual que entre los niveles
de potasio y la alteración del QRS, chi cuadrada: 17.25 y finalmente entre los niveles de potasio y las
alteraciones de la onda T hay una asociación con chi cuadrada: 47.77, p= <0.05 para cada una de las
variables.

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Las pruebas de correlación realizadas evidencian que existen mayores niveles de potasio sérico en
pacientes cuyo diagnóstico de enfermedad renal crónica KDIGO V fue con un período superior de 12
meses, los cuales cursaron con mayores alteraciones electrocardiográficas. La presentación de bloqueos
AV con hiperkalemia severa fue de 17 casos (19.7%), alteraciones del QRS fueron 32 casos (37.2%) y
alteraciones de la onda T fueron 78 casos (90.6%)
DISCUSIÓN
Este estudio descriptivo en pacientes con enfermedad renal crónica KDIGO V en su gran mayoría con
hiperkalemia severa se relacionó directamente con la conducción eléctrica del corazón, debido a la
alteración del gradiente de potasio transmembrana, lo que afecta el registro electrocardiográfico, similar
a lo reportado por Zubaid Rafique en 2022 quien encontro una correlación entre la hiperkalemia y la
duración de 120 ms o más del complejo QRS al igual que en este estudio.
Nuestro estudio aporta datos relevantes al demostrar que incluso niveles moderadamente elevados de
potasio pueden inducir alteraciones significativas en el electrocardiograma, siendo respaldados por los
estudios de Wrenn y colaboradores que en 2020, indicarón que las alteraciones electrocardiográficas
son un marcador sensible pero no específico de hiperkalemia, sugiriendo la necesidad de una evaluación
clínica integral.
Los resultados de este estudio subrayan la importancia del monitoreo continuo del electrocardiograma
en pacientes con hiperkalemia, especialmente en aquellos con condiciones predisponentes, además la
identificación temprana de alteraciones electrocardiográficas podría guiar decisiones terapéuticas
oportunas.
CONCLUSIONES
En conclusión, en este estudio se observó una relación entre la presencia de hiperkalemia en pacientes
con enfermedad renal crónica KDIGO V y las alteraciones electrocardiográficas estudiadas, donde se
evidenció en mayor porcentaje la alteración de la onda T, consistente en un aumento de voltaje y
duración en milisegundos (onda T hiperaguda), presente en hombres de la sexta década de la vida con
comorbilidades asociadas como lo son hipertensión arterial sistémica y diabetes tipo 2, en mayor
frecuencia, asociándose también al tiempo de evolución de la enfermedad renal crónica, donde a un año
de este diagnóstico es más probable hallar las alteraciones electrocardiográficas mencionadas

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Se destaca el papel crítico de una adecuada interpretación del electrocardiograma como herramienta
diagnóstica, así mismo recomendándose un seguimiento a largo plazo de los pacientes con hiperkalemia
en enfermedad renal crónica y la evaluación de la efectividad de intervenciones específicas en la
reversión de las alteraciones electrocardiográficas y la disminución de los niveles séricos de este
electrolito, así como la complementación de otros estudios médicos, logrando una valoración integral,
esto debido a la poca sensibilidad y especificidad del electrocardiograma y la interpretación del mismo
que puede variar por cada personal médico, recordando que la enfermedad renal es un padecimiento
muy frecuente en la población mexicana, lo que ocasiona múltiples ingresos al servicio de urgencias,
siendo una patología que amenaza la vida
Es recomendable otorgar una capacitación continua al personal médico adscrito, así como al personal
de salud becario, quienes están en mayor contacto y vigilancia de los pacientes, todo ello para lograr
una interpretación más homogénea de este padecimiento, y una mejor correlación de estos hallazgos.
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