EL IMPACTO SOCIAL Y ECONÓMICO POR
EL TREN MAYA EN 25 AÑOS, EN EL
SURESTE MEXICANO
THE SOCIAL AND ECONOMIC IMPACT OF THE MAYAN
TRAIN IN 25 YEARS IN SOUTHEASTERN MEXICO
Jesús Eduardo Rosales Acevedo
Egresado Instituto Politécnico Nacional, Escuela Superior de Economía, México
David Alejandro Durán Sánchez
Egresado Instituto Politécnico Nacional, Escuela Superior de Economía, México
Mtra Rita Avila Romero
Profesora investigadora de la ESE-IPN
Lic. Oscar Manuel Gutiérrez Valdéz
Profesora investigadora de la ESE-IPN

pág. 12959
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v9i1.16913
El impacto social y económico por el Tren Maya en 25 años, en el sureste
mexicano
Jesús Eduardo Rosales Acevedo1
jrosalesa2000@alumno.ipn.mx
https://orcid.org/0009-0008-2216-2429
Egresado Instituto Politécnico Nacional,
Escuela Superior de Economía, México
David Alejandro Durán Sánchez
ddurans2000@alumno.ipn.mx
https://orcid.org/0009-0008-6553-3453
Egresado Instituto Politécnico Nacional,
Escuela Superior de Economía, México
Mtra Rita Avila Romero
riavilar@ipn.mx
https://orcid.org/0000-0002-4214-8105
Profesora investigadora de la ESE-IPN
Lic. Oscar Manuel Gutiérrez Valdéz
ogutierrezv@ipn.mx
https://orcid.org/0009-0004-3768-2348
Profesor investigador de la ESE-IPN
RESUMEN
Se analiza el impacto social, económico y ambiental del proyecto del Tren Maya en el sureste de México,
enmarcándolo dentro de las teorías clásicas de localización económica y considerando sus implicaciones
a futuro. Este proyecto, parte del Plan Nacional de Desarrollo 2019-2020, busca reducir desigualdades
regionales mediante una red ferroviaria de 1,5,25 km que conecta zonas urbanas, rurales y turísticas,
con objetivos de fomentar el turismo, crear empleos y modernizar infraestructura. El análisis aplica
modelos teóricos como los anillos concéntricos de Von Thünen, la jerarquización urbana de Christaller
y las dinámicas de industrialización de Weber, destacando como la conectividad del tren puede
transformar economías locales, desde el turismo hasta la industria. También se subraya la importancia
de diversificar las economías regionales, en línea con las propuestas de Prebisch, para evitar la
dependencia exclusiva del turismo. El proyecto presenta desafíos significativos. La participación de las
comunidades locales, especialmente los indígenas, es esencial para garantizar una distribución equitativa
de beneficios y mitigar el riesgo de desplazamiento o marginación. También se requiere abordar los
impactos ambientales, dado que el tren atraviesa ecosistemas sensibles. Además, persisten dudas sobre
su sostenibilidad financiera y la equidad en la distribución de los beneficios.
Palabras clave: tren maya, desarrollo regional, turismo, infraestructura, sostenibilidad
1 Autor principal
Correspondencia: jrosalesa2000@alumno.ipn.mx

pág. 12960
The social and economic impact of the Mayan train in 25 years in
southeastern Mexico
ABSTRACT
The social, economic, and environmental impact of the Maya Train project in southeastern Mexico is
analyzed, framing it within classical economic localization theories and considering its future
implications. This project, part of the 2019-2020 National Development Plan, aims to reduce regional
inequalities through a 1,525 km railway network connecting urban, rural, and tourist areas, with
objectives to promote tourism, create jobs, and modernize infrastructure. The analysis applies theoretical
models such as Von Thünen’s concentric rings, Christaller’s urban hierarchy, and Weber’s
industrialization dynamics, highlighting how the train’s connectivity could transform local economies,
from tourism to industry. It also emphasizes the importance of diversifying regional economies, aligning
with Prebisch’s proposals, to avoid exclusive dependence on tourism. The project faces significant
challenges. The involvement of local communities, especially Indigenous ones, is essential to ensure an
equitable distribution of benefits and mitigate the risk of displacement or marginalization. Additionally,
addressing environmental impacts is crucial, as the train traverses’ sensitive ecosystems. Concerns also
persist regarding its financial sustainability and the equitable distribution of benefits.
Key words: maya train, regional development, tourism, infrastructure, sustainability
Artículo recibido 08 enero 2025
Aceptado para publicación: 13 febrero 2025

pág. 12961
INTRODUCCIÓN
Se analiza el impacto social, económico y ambiental del proyecto del Tren Maya en el sureste mexicano,
una de las iniciativas de infraestrucutra más ambiciosas y controversiales del país. A través de in enfoque
multidimensional, se explora las implicaciones de este megaproyecto en aspecto como el desarrollo
económico regional, la equidad social y la sostenibilidad ambiental. Se vinculan teorías económicas
clásicas, como las de Von Thünen, Christaller, Weber y Prebisch, para interpretar cómo la conectividad
ferroviaria puede reconfigurar la distribución de actividades económicas y fomentar nuevos polos de
desarrollo.
Se destaca tanto las oportunidades como los desafíos asociados con el Tren Maya. Por un lado, promete
dinamizar sectores clave como el turismo, la agricultura y la industria local, con el potencial de reducir
las desigualdades histórocas en la región. Por otro lado, plantea preocupaciones sobre la distribución
ambiental, el desplazamiento de comunidades indígenas y la concentración de beneficios en zonas
urbanas y turísticas, en detrimento de áreas rurales más marginadas. En este contexto, se resalta la
necesidad de equilibrar los objetivos de crecimiento económico con la conservación del medio ambiente
y el respeto por los derechos de las comunidades locales.
El análisis culmina con recomendaciones para garantizar que el proyecto contribuya a un desarrollo
regional inclusivo y sostenible, estableciendo al Tren Maya como un modelo que podría combinar la
modernización económica con la justicia social y la preservación ecológica.
El Tren Maya y las teorías de localización: Un enfoque económico para el desarrollo regional
sostenible
La distribución espacial de las actividades económicas es un tema central en la geografía económica,
dado su impacto en el desarrollo regional, la organización de las ciudades y la dinámica de los mercados.
Las teorías de localización proporcionan marcos analíticos fundamentales para entender estos
fenómenos, desde las bases agrícolas propuestas por Johann Heinrich Von Thünen hasta los modelos de
planificación industrial y regional de Alfred Weber, Walter Christaller y Raúl Prebisch. Este articulo
analiza como estas teorías clásicas pueden interpretarse y aplicarse a proyectos contemporáneos, como
el Tren Maya en México, para explorar su influencia en la planificación del desarrollo y del uso del
suelo.

pág. 12962
Johann Heinrich Von Thünen, propuso una estructura espacial basada en anillos concéntricos, alrededor
de un mercado central, donde los cultivos más perecederos o de mayor valor se ubican en las zonas más
cercanas al centro, mientras que los productos menos perecederos y de mayor requerimiento de tierra se
situaban más alejados; aunque el modelo simplifica factores como la tecnología y las políticas
gubernamentales, sigue siendo un pilar para entender la distribución agrícola y su interacción con los
costos de transporte.
En el caso del Tren Maya, este modelo ayuda a visualizar como las estaciones podían influir en las
economías locales. Las zonas cercanas a los puntos de acceso al tren podrían especializarse en productos
de alta demanda en los mercados turísticos, mientras que en las regiones más alejadas podrían desarrollar
cultivos extensivos o actividades menos dependientes del transporte rápido.
La “teoría de los lugares centrales” destaca la jerarquización de asentamientos urbanos en función de la
oferta de servicios y bienes. Según Walter Christaller, los lugares centrales funcionan como nodos que
atienden a áreas tributarias específicas, organizando la economía regional de manera eficiente. Este
modelo ha sido clave en la planificación urbana y regional, proporcionando un marco conceptual para
la organización de servicios.
Aplicada al Tren Maya, esta teoría permite prever que las estaciones ferroviarias pueden convertirse en
centros estratégicos para el desarrollo de servicios turísticos y comerciales, organizando una red
jerárquica de asentamientos. Las estaciones principales, como Cancún y Mérida, podrían operar como
centros de alto nivel, mientras que otras áreas podrían atender demandas locales.
Alfred Weber, identificó tres factores principales para la localización industrial: transporte, trabajo y
aglomeración. Según su teoría, las industrian buscan ubicaciones donde los costos de transporte sean
mínimos, la mano de mano de obra sea accesible y las economías de escalas favorezcan la productividad.
(Asuad, 2014)
En el contexto del Tren Maya, Weber ofrece una perspectiva útil para analizar como la conectividad
ferroviaria puede incentivar la instalación de industrias turísticas, agrícolas y manufactureras a lo largo
de su ruta. La cercanía a centros urbanos, como Tulum o Playa del Carmen, podría favorecer la creación
de polos industriales especializados, mientras que las regiones con oferta laborar abundante y accesible
podrían atraer nuevas inversiones.

pág. 12963
Raúl Prebisch propuso que los países en desarrollo, dependientes de la exportación de materias primas,
enfrentan términos de intercambio desiguales que perpetúan su posición subordinada en la economía
global. Este enfoque resalta la importancia de diversificar la economía y promover la industrialización
interna.
En el Tren Maya, esta teoría destaca la necesidad de evitar la dependencia del turismo como principal
motor económico. En su lugar, el proyecto podría promover industrial locales que agreguen valor a los
productos regionales y contribuyan a un crecimiento económico más sostenible. Por ejemplo, las
comunidades cercanas al tren podrían desarrollar productos artesanales, agrícolas o tecnológicos
orientados tanto al mercado interno como a la exportación.
El Tren Maya tiene el potencial de redistribuir actividades económicas a lo largo de su ruta, creando
corredores de desarrollo económico. Sin embargo, es esencial prever posibles desequilibrios como la
concentración excesiva de actividades en ciertas estaciones principales, dejando a tras a las comunidades
más alejadas. Las teorías de localización ayudan a visualizar escenarios y planificar estrategias que
favorezcan la equidad regional.
“Un factor crucial es la participación de las comunidades locales, especialmente de los pueblos
indígenas, en la planificación y ejecución del proyecto. Según, el Convenio 169 de la Organización
Internacional del Trabajo (OIT), es necesario realizar consultas para garantizar que las comunidades
indígenas sean beneficiarias directas de las actividades económicas derivadas del tren” (OIT, 2015)
El proyecto enfrenta retos relacionados con la conservación ambiental. La Lley General de Equilibro
Ecológico y Protección Ambiental subraya la necesidad de valuar los impactos sobre especies en peligro
y ecosistemas frágiles. La planificación del Tren Maya debe equilibrar la explotación económica con la
preservación ambiental para garantizar su sostenibilidad a largo plazo.
El desarrollo del Tren Maya está sujeto a un entramado jurídico que incluye regulaciones sobre
transporte ferroviario, impacto ambiental, ordenamiento territorial y consulta indígena.
La Ley Reglamentaria del Servicio Ferroviario establece los lineamientos básicos para garantizar la
conectividad y la competitividad del sistema ferroviario mientras que las leyes ambientales y agrarias
imponen límites y condiciones para su construcción.

pág. 12964
El análisis del Tren May desde la perspectiva de las teorías de localización evidencia como los modelos
clásicos de Von Thünen, Christaller, Weber y Prebisch siguen siguen siendo relevantes en la
planificación contemporánea. No obstante, estos marcos deben completarse con enfoques actuales que
incluyan la sostenibilidad y la participación comunitaria y la justicia social. El éxito del Tren Maya
dependerá de su capacidad para integrar estos elementos, promoviendo un desarrollo equitativo y
sostenible que beneficie a las comunidades locales como a la economía regional.
Motor de Desarrollo Regional y Sostenibilidad en el Sureste Mexicano
El Tren Maya es uno de los proyectos de infraestructura más emblemático y controvertidos del gobierno
actual. Concebido como un eje transformado en el sureste del país, sus implicaciones van más allá del
ámbito económico, tocando aspectos sociales, ambientales y culturales. Este artículo examine a
profundidad el contexto, los beneficios y los desafíos que plantea este proyecto, enmarcado en un debate
nacional e internacional sobre sostenibilidad y equidad en el desarrollo regional.
“El Tren Maya es parte del plan nacional de desarrollo 2019-2020, una estrategia del gobierno para
reducir las desigualdades regionales y promover el crecimiento económico en los Estados de Chiapas,
Tabasco, Campeche, Yucatán y Quinta Roo. Es proyecto contempla un recorrido de 1,525 km que
conectara zonas urbanas, rurales y turísticas, reforzando la infraestructura en una región históricamente
marginada en términos de inversión pública y desarrollo social” (DOF, 2019)
El costo estimado de entre 120,000 y 150,000 millones de pesos será financiado mediante recursos
públicos, privados y sociales. Entre sus objetivos destacan:
1. Impulsar la actividad turística en una de las regiones más visitadas del país
2. Crear empleos y mejorar las condiciones económicas de comunidades vulnerables
3. Ordenar el desarrollo territorial y proteger los recursos naturales
4. Incrementar la conectividad logística para promover el comercio y el transporte
El Tren Maya tiene el potencial de revitalizar el turismo en la península de Yucatán, una región
reconocida por biodiversidad, sitios arqueológicos y playa de renombre mundial. Al mejorar la
conectividad entre destinos turísticos, como Cancún, Tulum y Chichen Itzá, se espera aumentar la
llegada de turistas nacionales, internaciones, generando una mayor derrama económica.

pág. 12965
Durante la fase de construcción y operación, el Tren Maya podría generar decenas de miles de empleos
directos e indirectos. Esto incluye puestos en sectores como la construcción, el transporte, el comercio
y los servicios. Además, el proyecto pretende fomentar el desarrollo de las micro, pequeñas y medianas
empresas locales.
“El proyecto del Tren Maya es uno de los más importantes dentro de este gobierno, ya que abrirá el paso
al turismo, así como el desarrollo socioeconómico de la península del sureste. El proyecto más grande
de infraestructura en México consiste en medios de transporte férreos que aportaran a la economía y a
la industria” (Gomez Cruz, Carrera Torres, & Sanchez Lopez, 2023)
El Tren Maya también pretende modernizar la infraestructura regional. Las estaciones están diseñadas
para servir como polos de desarrollo, promoviendo la urbanización planificada y mejorando el acceso a
servicios básicos como el agua, electricidad y salud en áreas aleñadas.
A pesar de las promesas de sostenibilidad el proyecto a enfrentado críticas por la posible destrucción de
ecosistemas sensibles, como selvas y manglares. La fragmentación de hábitats y la alteración de
corredores bilógicos podría afectar la biodiversidad en la región, poniendo en riesgo especies
emblemáticas como el jaguar.
Aunque el gobierno ha llevado acabo consultas con comunidades indígenas, varios organismos y
activistas han señalado que estos procesos no han sido plenamente representativos ni vinculantes. Esto
ha generado tensiones entre grupos locales que temen la perdida de tierras y recursos.
Especialistas han cuestionado la capacidad del Tren Maya para generar los ingresos suficientes para
cubrir sus costos operativos. El proyecto depende en gran medida de una demanda sostenida de usuarios
y tarifas competitivas, lo cual podría ser difícil de garantizar en el mediano plazo.
El proyecto ha enfrentado acusaciones de promover el desplazamiento forzado de comunidades y la
perdida de patrimonio cultural. Además, algunos temen que los beneficios económicos del Tren Maya
se concentran en varias concentraciones turísticas, dejando de lado a las comunidades locales.
El éxito del Tren Maya depende de como logre equilibrar sus objetivos de desarrollo económico con la
protección del medio ambiente y el respeto a los derechos de las comunidades. Esto implica:
1. Implementar planes robustos de restauración ambiental para mitigar la perdida de ecosistemas

pág. 12966
2. Establecer mecanismos transparentes de consulta y participación ciudadana para involucrar a
todos los actores afectados
3. Fomentar practicas turísticas responsables que valoren el patrimonio cultural y natural de la
región
Además, la colaboración con el sector privado, la sociedad civil y organismos internacionales, será
crucial para garantizar que el proyecto cumpla con estándares de sostenibilidad.
El Tren Maya simboliza una oportunidad única para transformar el sureste de México, integrándolo al
desarrollo nacional e internacional. Sin embargo, su implementación debe ir acompañada de un enfoque
integral que priorice la equidad, la transparencia y la sostenibilidad.
Como modelo de desarrollo regional, el Tren Maya podría convertirse en un referente global si logra
demostrar que es posible combinar el crecimiento económico con la conservación ambiental y la justicia
social. No obstante, para alcanzar este ideal, será necesario un compromiso continuo de las autoridades
y una supervisión activa de la sociedad civil para garantizar que el proyecto beneficie verdaderamente
a todos los mexicanos.
Este proyecto tiene el potencial de ser un catalizador para el progreso, pero su éxito dependerá de
decisiones informadas y responsables en cada etapa de su desarrollo.
El sureste de México es una zona de gran diversidad, geográfica y cultural, que va desde la selva tropical
más exuberante hasta las costas bañadas por el mar caribe. Pese a tener amplios recursos naturales,
constituye una de las partes más empobrecidas del país, lo que deja a distintos actores económicos,
políticos y sociales ante la realidad de una serie de problemas socioeconómicos, tanto para los habitantes
de la región como para las dinámicas del resto del país. La pobreza asoladora, una estructura económica
centrada en la agricultura, escasa infraestructura y acceso limitado a servicios básicos, son algunos de
los problemas que caracterizan la realidad del Sureste. A través de este ensayo, abordaremos las
relaciones entre la composición geográfica del Sureste, la pobreza, la agricultura y el índice de desarrollo
humano (IDH) en esta región, y sus efectos en la realidad económica, política y social del resto de
México.
La geografía del sureste de México puede considerarse una de las principales características que
determinan su desarrollo. Desde las montañas de Chiapas hasta la llanura y las litorales Veracruz y la

pág. 12967
península de Yucatán, la región presenta una gran diversidad de recursos naturales que, en teoría, son
motores del desarrollo económico. Las tierras la cultivan y el clima tropical favorecen la producción
agrícola, convirtiendo esta zona en un potencial productor de productos como el maíz, el café y el cacao,
además de diversos cultivos para el sustento familiar. Sin embargo, en esta misma geografía, conviven
diversas características cuya representación escasa dificulta el acceso a algunas zonas para explotar el
recurso natural, por un lado, dado que la alta densidad de la selva impide poder obtener los recursos de
forma correcta.
A pesar de estas oportunidades que se dibujan para la economía regional, las actividades productivas de
la región están todavía fuertemente volcadas hacia un modelo agrícola tradicional, que mantiene su
dependencia de la agricultura de subsistencia y se encuentra alejado de las tecnologías más modernas.
La falta de infraestructura vial, de riego y de acceso a los mercados limita las posibilidades de
producción. Además, los pequeños agricultores continúan siendo víctimas de una competencia desleal
con las grandes corporaciones agroindustriales, que tienden a ocupar los mercados y a desplazar a los
productores locales, manteniendo la pobreza y la marginación económica de las comunidades rurales.
“La región sureste de México vive una realidad distinta de crecimiento económico si se compara con
las otras regiones del centro y norte del país. De tal manera que, como se mostró en este análisis, no se
han obtenido cifras exactas de personas en condición de pobreza en los estados que fueron analizados,
ya que dicha cifra es manipulable en función de los indicadores que se eligen. En consecuencia, la
política económica debe entenderse y orientarse como un mecanismo de empoderamiento de la
población en situación de pobreza y vulnerabilidad, especialmente en las zonas rurales e indígenas de
México (población que mayoritariamente habita la región sureste de México), y no como compensación
de las inminentes pérdidas que se ocasionan debido a las políticas laborales, fiscales y monetarias”
(Barrera, Ruiz, & Sanchez, 2020)
Uno de los aspectos más dramáticos de la pobreza en la región está constituido por la vulnerabilidad de
las comunidades rurales, que dependen casi en su totalidad de la agricultura para obtener su
alimentación. Sin un acceso adecuado a los mercados, al crédito o a las tecnologías más avanzadas, las
comunidades rurales quedan atrapadas en una lógica de reproducción de la pobreza de generación en
generación. En este sentido, la competencia con las grandes empresas agroindustriales, que cuentan con

pág. 12968
mayores recursos y con mayor capacidad de negociación, tienden a acentuar todavía más dicha
desigualdad, dejando a los pequeños productores sin medios para escapar de su situación de pobreza.
El índice de desarrollo humano (IDH) es un importante indicador que permite evaluar las condiciones
socioeconómicas de una región; en el auge del Sureste de México los índices de desarrollo humano son
drásticamente bajos, las tasas de pobreza, de desnutrición infantil, así como el poco acceso a las
condiciones que favorecen el uso de los servicios educativo, así como la atención de salud son algunas
de las más importantes variables que nos pueden explicar la baja calidad de vida con la que cuentan los
habitantes de la región.
En este sentido, en el caso de la región del Sureste de México, a lo largo de las últimas décadas ha
prevalecido un rezago en el desarrollo regional frente a regiones más desarrolladas; así, las tasas de
distribución de la riqueza han sido un claro indicador de la reproducción del ciclo de pobreza en la
región, a pesar de contar con la riqueza natural, el Sureste de México sigue siendo una de las regiones
con mayor vulnerabilidad frente al desarrollo humano, planteando una contradicción profunda, en tanto
que el Sureste tiene la capacidad de ser uno de los espacios más productivos del país, los habitantes de
su población enfrentan serias condicionantes para el acceso al bienestar social.
La desigualdad socioeconómica ha sido una de las causas estructurales de la pobreza propia del Sureste
de México, en tanto que, como sabemos, ha quedado marcada históricamente por los procesos de
desigualdad en la distribución de la riqueza, así como el acceso a la oportunidad de bienestar social; las
comunidades y población rural e indígena suponen una parte de la población de la región y además
enfrentan las discriminaciones, tales como la de índole racial, así como las dificultades de acceso a la
tierra en tanto que estos grupos han estado excluidos de las condiciones que determinarían la exclusión
de los procesos económicos y políticos; esta discriminación interseccional, que involucra las
dimensiones de clase social, categoría, raza, género en el Sureste de México ha sido una de las
estructuras clave en el estancamiento del progreso en la región.
En particular, los pueblos indígenas del Sureste, tales como los tsotsiles, los tseltales, los mayas, etc.,
han sido el claro legado de las formas de exclusión que han sido tradicionales en la apropiación y control
sobre las formas de desarrollo social.

pág. 12969
Para hacer frente a la pobreza y a las desigualdades del Sureste de México, hay que abordar este desafío
desde un enfoque integral que combine un impulso a la productividad agrícola y un desarrollo humano.
Algunas de las más eficaces son las siguientes:
Inversiones en infraestructura rural: Cuando el acceso a caminos, electricidad, agua potable y tecnología
agrícola se mejora, también aumenta la productividad y las condiciones de vida de las comunidades
rurales.
Fomento a la agricultura diversificada y sostenible: La promoción de una agricultura diversificada y
sostenible que contemple la rotación de cultivos, el uso de tecnologías ambientales y la capacitación en
técnicas modernas para el cultivo200c estrella sin duda permitirá a los agricultores mejorar sus ingresos
y reducir la vulnerabilidad de la región.
Acceso a servicios básicos y educación: El acceso a servicios educativos y de salud aclara que en las
comunidades rurales e indígenas deben mejorarse, ya que será clave para romper el ciclo de la pobreza
y fomentar un desarrollo humano a largo plazo.
Políticas de desarrollo económico inclusivo: Deben orientarse las políticas que generen la inclusión
social y económica respetando los derechos de los pueblos indígenas y dando poder a las comunidades
para la participación en el desarrollo de la economía de la región.
Cuadro 1
Composición geográfica
Aspectos Características del Sureste de México
Ubicación geográfica Incluye los estados de Chiapas, Tabasco,
Campeche, Yucatán, Quintana Roo.
Diversidad geográfica Variedad de paisajes: salves tropicales, montañas
(Sierra madre de Chiapas), llanuras costeras,
península de Yucatán (topografía plana)
Clima Yucatán: tropical húmedo, altas temperaturas y
lluvias abundantes.
Chiapas: microclimas desde cálidos hasta frescos
en las montañas.
Tabasco y Campeche: cálido y húmedo durante
gran parte del año.
Biodiversidad Flora y fauna: selvas tropicales con jaguares,
tapires, monos arañas, aves tropicales.
Arrecifes de coral en Quintana Roo con alta
biodiversidad (peces tropicales, tortugas,
delfines).
Patrimonio Cultural Ruinas mayas: Chichén Itzá, Palenque, Uxmal.

pág. 12970
Ciudades coloniales: Mérida, Campeche, San
Cristóbal de las Casas, Arquitectura colonial,
calles empedradas.
Elaboración propia. (2024). Composición geográfica del Sureste de México.
Las variaciones climáticas pertimen el cultivo de una amplia gama de productos agrícolas lo que ha
favorecido su crecimiento como región agrícola exportadora.
El sureste ha experimentado un crecimiento notable en la agricultura, particularmente en los cultivos
tropicales, lo que ha experimentado acceder a mercados internacionales. Sin embargo la diversificación
de cultivos y el apoyo gubernamental sigue siendo factores clave para su competitividad en el mercado
global.
“Este megaproyecto, por ser tal, integra múltiples emprendimientos: turísticos, agrícolas, industriales,
energéticos e inmobiliarios. fonatur planifica a más largo plazo la creación de parques industriales
cárnicos, forestales y frutales, cuencas lecheras, granjas avícolas y porcinas, producción de sorgo y caña
de azúcar, palma de aceite y soya. El plan agroalimentario es parte sustancial de este nuevo ordenamiento
territorial en el área de influencia del corredor ferroviario con sus estaciones y polos de desarrollo, ya
que se proyecta impulsar la producción de insumos para abastecer los centros de consumo turístico y el
mercado regional” (Barabas, 2022)
Gráfica 1. Exportaciones trimestrales de Campeche, 1er trimestre de 2007 al 2do trimestre de 2024.
Elaboración propia
Fuente: (INEGI, 2024)
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Exportaciones trimestrales de Campeche.
2007-2024
(Miles de Dólares)

pág. 12971
La gráfica muestra que el Estado de Campeche, México, ha experimentado fluctuaciones en sus
exportaciones desde 2007. El punto más alto de exportaciones se registro en el segundo trimestre de
2008, alcanzando el nivel más elevado hasta la fecha. Sin embargo, actualmente se observa una
tendencia a la baja en los ingresos generados por las exportaciones en la región.
Este descenso en los niveles de exportación puede ser consecuencia de una combinación de factores
tanto internos como externos, uno de los factores más importantes que incide en la caída de las de las
exportaciones de Campeche es una dependencia económica de sectores específicos, especialmente el
energético. La caída en los precios internacionales del petróleo y la disminución de la producción
petrolera, consecuencia de la saturación de los campos y la falta de nuevas inversiones en infraestructura
energética, han afectado negativamente a la economía estatal, lo que sigue siendo altamente dependiente
de la industria petrolera. Este fenómeno ha repercutido en las exportaciones, ya que el petróleo y sus
derivados representan una parte significativa de las exportaciones del Estado.
Además, Campeche enfrenta desafíos estructurales en otros sectores productivos, como la agricultura y
la pesca. Aunque el estado tiene potencial agrícola considerable, la falta de infraestructura adecuada, la
bajan tecnológica en el sector y la escasa inversión en proyectos de desarrollo agrícola sostenible han
limitado la capacidad de estos sectores para competir en mercados internacionales de manera eficiente.
Gráfica 2. Exportaciones trimestrales de Chiapas, 1er trimestre de 2007 al 2do trimestre de 2024.
Elaboración propia.
Fuente: INEGI (2024).
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2022/03
2023/01
2023/03
2024/01
Exportaciones Trimestrales de Chiapas.
2007-2024
(Miles de Dólares)

pág. 12972
La gráfica revela que el Estado de Chiapas, México, ha experimentado variaciones en sus exportaciones
desde 2007. El pico más elevado de exportaciones se alcanzó en el segundo trimestre de 2011, en el que
se registró el nivel máximo hasta el momento. No obstante, en la actualidad se puede identificar una
tendencia creciente en los ingresos derivados de las exportaciones en la región.
La falta de infraestructura adecuada, como carreteras, sistemas de riego y acceso a tecnologías modernas
en el sector agrícola, puede limitar la capacidad de los productores chiapanecos para aumentar su
competitividad en los mercados internacionales. Además, las políticas públicas implementadas en la
región han tenido un impacto mixto. Si bien ha habido esfuerzos por mejorar la productividad y la
diversificación de las exportaciones, también han identificado desafíos en la implementación efectiva
de estos programas, lo que ha obstaculizado un crecimiento sostenido.
Este crecimiento reciente podría ser un indicio de que Chiapas está logrando estabilizar y diversificar
sus exportaciones, especialmente en productos como el café, el caco, las frutas tropicales y la miel, que
siguen siendo pilares fundamentales en su economía.
Gráfica 3. Exportaciones trimestrales de Quintana Roo, 1er trimestre de 2007 al 2do trimestre de 2024.
Elaboración propia.
Fuente: INEGI (2024).
La gráfica presentada ilustra las fluctuaciones significativas en los ingresos por exportaciones en el
estado de Quintana Roo, México, a lo largo de los últimos años. El pico más alto de exportaciones se
alcanzó en el primer trimestre de 2011, momento en el que se registró el nivel más elevado de ingresos.
0
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Sin embargo, en contraste, el primer semestre de 2017 marco el periodo de menores ingresos por
exportaciones, destacándose como el punto mas bajo de la serie temporal analizada.
En la actualidad, la tendencia de las exportaciones no muestra una mejora sustancial en comparación
con los picos históricos de 2011, lo que sugiere una posible estabilización en los ingresos generados por
este sector. Esta situación refleja no solo una desaceleración en el crecimiento de las exportaciones, sino
también los desafíos económicos que enfrenta Quintana Roo. A nivel social y económico, el estado
depende en gran medida del turismo como fuente de ingresos, lo que puede haber desviado atención y
recursos de otros sectores productivos, como la agricultura o la manufactura, que también son claves
para la economía regional.
Gráfica 4. Exportaciones trimestrales de Tabasco, 1er trimestre de 2007 al 2do trimestre de 2024.
Elaboración propia
Fuente: INEGI (2024).
La grafica expuesta revela que el estado de Tabasco, México, ha experimentado fluctuaciones notorias
en los ingresos generados por sus exportaciones desde 2007, el punto más alto de exportaciones se
alcanzó en el primer trimestre de 2011, cuando se registró el nivel máximo de ingresos hasta le fecha.
Este crecimiento pudo haber sido impulsado por varios factores, entre los cuales destacan la alta
demanda internacional de productos como el petróleo, el cacao y la palma de aceite que son sectores
clave en la economía tabasqueña. Durante ese periodo, la región pudo haber aprovechado un contexto
económico global favorable, con precios elevado sen los mercados internacionales de hidrocarburos y
una mayor competitividad en productos agrícolas y agroindustriales.
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Exportaciones trimestrales de Tabasco.
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Sin embargo, después de este auge, la gráfica muestra una clara tendencia a la baja en los ingresos
derivados de las exportaciones en Tabasco, este descenso en los ingresos podría explicarse por una serie
factores económicos y sociales que han afectado tanto la competitividad de la región en los mercados
internacionales como a su estructura productiva interna.
Grafica V. Exportaciones trimestrales de Yucatán, 1er trimestre de 2007 al 2do trimestre de 2024.
Elaboración propia. Fuente: INEGI (2024).
Como se observa en la grafica V, el estado de Yucatán, México, ha experimentado pocas fluctuaciones
en los ingresos derivados de sus exportaciones en los últimos años. No obstante, uno de los puntos mas
bajos en esta trayectoria se registro durante la pandemia de COVID-19, específicamente en el tercer
trimestre de 2020. Este descenso en los ingresos es comprensible, dado el contexto global de la
pandemia, que afecto de manera significativa las cadenas de suministros internacionales, interrumpió
las actividades comerciales y redujo la demanda de productos en los mercados globales. A pesar de este
retroceso temporal, en la actualidad se identificó una tendencia creciente en los ingresos por
exportaciones en la región, lo que refleja una recuperación progresiva y un resurgimiento en la actividad
económica de Yucatán.
El impacto de la pandemia en la economía de Yucatán fue profundo, ya que la crisis sanitaria afecto
principalmente a sectores clave como turismo, la manufactura y la agricultura, que aunque no tan
dependientes de la exportación directa, influyente considerablemente en el ecosistema económico de le
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Exportaciones trimestrales de Yucatan.
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región. La reducción de la movilidad global y las restricciones impuestas durante el confinamiento
afectaron la demanda de productos exportables como el hequen. El sorgo y ciertos productos
agroindustriales, que son algunos de los principales bienes de Yucatán comercializa en el ámbito
internacional. Asimismo, la interrupción de las cadenas de suministros globales y las medidas
restrictivas en diversas partes del mundo disminuyeron temporalmente la capacidad del estado para
acceder a los mercados internacionales.
No obstante, en los últimos meses se observa una tendencia al alza en los ingresos derivados de las
exportaciones, lo que puede atribuirse a varios factores positivos que ha favorecido a la economía
yucateca.
Tren Maya y las Exportaciones.
El Tren Maya tiene como objetivo principal fomentar el desarrollo económico, el turismo y la
conectividad entre estas regiones, y está previsto que atraviese áreas de gran riqueza cultural y natural
incluidas zonas arqueológicas mayas, selvas tropicales y costas caribeñas. El impacto del Tren Maya en
las exportaciones de estos estados puede ser positivo como negativo, dependiendo de los sectores
involucrados y de cómo se gestionen los recursos y las políticas públicas.
Una de las principales ventajas que el Tren Maya podría ofrecer a la región sureste es la mejora en la
infraestructura de transporte. El tren podría facilitar el acceso al mercado tanto nacionales como
internacionales, reduciendo costos de transporte y mejorando la conectividad de las exportaciones,
especialmente en sectores como la agricultura, la manufactura y el turismo. Para estados como Yucatán,
Chiapas y Campeche, la posibilidad de mejorar la conectividad ferroviaria con los puertos de Veracruz
o Progreso.
El Tren Maya tiene un gran potencial para aumentar el flujo de turistas hacia sureste de México, lo que
generaría ingresos adicionales a través del ecoturismo, el turismo cultural y las exportaciones de
servicios, Quinta Roo y Yucatán son estados que podrían verse particularmente beneficiados por el
crecimiento del turismo, ya que el tren permitiría una mayor conectividad con destinos menos visitados,
como las zonas arqueológicas y las comunidades rurales, lo que incrementaría la demanda de productos
locales y servicios turísticos.

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Un aspecto controvertido del Tren Maya es su impacto sobre las comunidades locales y el medio
ambiente. Si el proyecto no se maneja adecuadamente, podría resultar en la explotación desmedida de
recursos naturales y en el desplazamiento de comunidades indígenas que depende de estos recursos para
sus actividades económicas. Esto podría generar tensiones sociales y políticas que, a largo plazo, afectan
la estabilidad económica de la región.
Aunque el Tren Maya podría generar ingresos adicionales para la región, existe el riesgo de que estos
beneficios no se distribuyan equitativamente. Las comunidades más cercanas a las principales estaciones
y destinos turísticos podrían ver mejoras económicas, mientras que zonas rurales más alejadas podrían
seguir siendo marginadas.
CONCLUSIÓN
El Tren Maya representa una oportunidad significativa para el desarrollo del sureste de México al
combinar conectividad, turismo y comercio como motores económicos. Sin embargo, su éxito dependerá
de equilibrar objetivos económicos con sostenibilidad ambiental y justicia social. Es imperativo
involucrar activamente a las comunidades locales, especialmente indígenas, garantizar consultas
representativas y promover un desarrollo equitativo para evitar el desplazamiento y la marginación.
Además, se debe priorizar la preservación de ecosistemas y la diversificación económica para reducir la
dependencia del turismo y fomentar industrias locales. Este enfoque integral podría posicionar al Tren
Maya como un modelo global de desarrollo sostenible y equitativo.
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