pág. 1481
LA IMPORTANCIA DE LAS ESTRATEGIAS DE
LECTURA CRÍTICA EN LA COMPRENSIÓN DE
TEXTOS CIENTÍFICOS
THE IMPORTANCE OF CRITICAL READING STRATEGIES IN
THE COMPREHENSION OF SCIENTIFIC TEXTS
MSc. Luis Gabriel Alcivar Ordoñez
Autor independiente
Lcd. Priscila Fanny Maridueña Novillo
Autor independiente
Lcd. Sonnia Judith Paz Flores
Autor independiente
Lcd. Gladys Anita Ordinola Quito
Autor independiente
MSc. Leticia Elizabeth Alcivar Lòpez
Autor independiente
pág. 1482
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v9i3.17759
La importancia de las estrategias de lectura crítica en la comprensión de
textos científicos
RESUMEN
La lectura crítica es una habilidad esencial en el ámbito académico, especialmente para la comprensión
de textos científicos, que requieren un análisis profundo y detallado. Esta competencia no solo permite
entender el contenido, sino también analizar, interpretar y evaluar sus fundamentos, lo que resulta
fundamental para los estudiantes de bachillerato, quienes se enfrentan a contenidos más complejos y
especializados. A través de estrategias específicas como la formulación de preguntas, la elaboración de
resúmenes y la identificación de ideas principales, los estudiantes desarrollan un enfoque analítico que
les permite distinguir entre hechos y opiniones, identificar sesgos y falacias, y evaluar la validez de las
conclusiones presentadas en los textos. Estas habilidades no solo mejoran la comprensión, sino que
también fomentan el pensamiento autónomo, la capacidad crítica de evaluación y la argumentación
sólida, esenciales tanto en el desarrollo académico como en la vida personal y profesional. El estudio,
de enfoque cuantitativo, se centró en una encuesta aplicada a 15 docentes de bachillerato que imparten
asignaturas científicas. Los resultados mostraron que el 86,7% de los docentes utiliza estrategias de
lectura crítica, aunque con frecuencia intermitente. Las estrategias más utilizadas fueron la formulación
de preguntas y la elaboración de resúmenes, que se emplean de manera más frecuente, pero se identificó
que hay menos énfasis en la evaluación profunda de argumentos y evidencias científicas. Este hallazgo
sugiere que, aunque los docentes reconocen la importancia de la lectura crítica, aún existe una brecha
en su implementación sistemática. A pesar de los esfuerzos, la falta de interés estudiantil sigue siendo
una dificultad clave que limita la efectividad de estas estrategias. Este hallazgo subraya la necesidad
urgente de integrar prácticas de lectura crítica de manera más sistemática en el currículo académico, al
mismo tiempo que se fomente el interés de los estudiantes a través de enfoques pedagógicos más
dinámicos y participativos, para lograr una comprensión más profunda y un desarrollo de habilidades
analíticas más robustas y transferibles a diversas áreas del conocimiento.
Palabras clave: lectura crítica, comprensión, estrategias, pensamiento autónomo, docentes
1 Autor principal
Correspondencia: lalcivar2007@gmail.com
MSc. Luis Gabriel Alcivar Ordoñez1
lalcivar2007@gmail.com
https://orcid.org/0009-0001-6998-1447
Autor independiente
Lcd. Priscila Fanny Maridueña Novillo
priscy1967@hotmail.com
https://orcid.org/0009-0005-0820-8820
Autor independiente
Lcd. Sonnia Judith Paz Flores
sonnia_1962@hotmail.com
https://orcid.org/0009-0005-0215-6492
Autor independiente
Lcd. Gladys Anita Ordinola Quito
gaoq42@hotmail.com
https://orcid.org/0009-0003-6657-5341
Autor independiente
MSc. Leticia Elizabeth Alcivar Lòpez
alcyletcontabilidad2022@gmail.com
https://orcid.org/0009-0003-1598-257X
Autor independiente
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v9i3.17759
La importancia de las estrategias de lectura crítica en la comprensión de
textos científicos
RESUMEN
La lectura crítica es una habilidad esencial en el ámbito académico, especialmente para la comprensión
de textos científicos, que requieren un análisis profundo y detallado. Esta competencia no solo permite
entender el contenido, sino también analizar, interpretar y evaluar sus fundamentos, lo que resulta
fundamental para los estudiantes de bachillerato, quienes se enfrentan a contenidos más complejos y
especializados. A través de estrategias específicas como la formulación de preguntas, la elaboración de
resúmenes y la identificación de ideas principales, los estudiantes desarrollan un enfoque analítico que
les permite distinguir entre hechos y opiniones, identificar sesgos y falacias, y evaluar la validez de las
conclusiones presentadas en los textos. Estas habilidades no solo mejoran la comprensión, sino que
también fomentan el pensamiento autónomo, la capacidad crítica de evaluación y la argumentación
sólida, esenciales tanto en el desarrollo académico como en la vida personal y profesional. El estudio,
de enfoque cuantitativo, se centró en una encuesta aplicada a 15 docentes de bachillerato que imparten
asignaturas científicas. Los resultados mostraron que el 86,7% de los docentes utiliza estrategias de
lectura crítica, aunque con frecuencia intermitente. Las estrategias más utilizadas fueron la formulación
de preguntas y la elaboración de resúmenes, que se emplean de manera más frecuente, pero se identificó
que hay menos énfasis en la evaluación profunda de argumentos y evidencias científicas. Este hallazgo
sugiere que, aunque los docentes reconocen la importancia de la lectura crítica, aún existe una brecha
en su implementación sistemática. A pesar de los esfuerzos, la falta de interés estudiantil sigue siendo
una dificultad clave que limita la efectividad de estas estrategias. Este hallazgo subraya la necesidad
urgente de integrar prácticas de lectura crítica de manera más sistemática en el currículo académico, al
mismo tiempo que se fomente el interés de los estudiantes a través de enfoques pedagógicos más
dinámicos y participativos, para lograr una comprensión más profunda y un desarrollo de habilidades
analíticas más robustas y transferibles a diversas áreas del conocimiento.
Palabras clave: lectura crítica, comprensión, estrategias, pensamiento autónomo, docentes
1 Autor principal
Correspondencia: lalcivar2007@gmail.com
MSc. Luis Gabriel Alcivar Ordoñez1
lalcivar2007@gmail.com
https://orcid.org/0009-0001-6998-1447
Autor independiente
Lcd. Priscila Fanny Maridueña Novillo
priscy1967@hotmail.com
https://orcid.org/0009-0005-0820-8820
Autor independiente
Lcd. Sonnia Judith Paz Flores
sonnia_1962@hotmail.com
https://orcid.org/0009-0005-0215-6492
Autor independiente
Lcd. Gladys Anita Ordinola Quito
gaoq42@hotmail.com
https://orcid.org/0009-0003-6657-5341
Autor independiente
MSc. Leticia Elizabeth Alcivar Lòpez
alcyletcontabilidad2022@gmail.com
https://orcid.org/0009-0003-1598-257X
Autor independiente
pág. 1483
The importance of critical reading strategies in the comprehension of
scientific texts
ABSTRACT
Critical reading is an essential skill in the academic field, especially for the comprehension of scientific
texts, which require in-depth and detailed analysis. This skill not only allows for understanding the
content but also for analyzing, interpreting, and evaluating its foundations, which is essential for high
school students, who are faced with more complex and specialized content. Through specific strategies
such as formulating questions, creating summaries, and identifying main ideas, students develop an
analytical approach that allows them to distinguish between facts and opinions, identify biases and
fallacies, and evaluate the validity of conclusions presented in texts. These skills not only improve
comprehension but also foster independent thinking, critical evaluation skills, and sound argumentation,
which are essential for both academic development and personal and professional life. The quantitative
study focused on a survey of 15 high school teachers who teach science subjects. The results showed
that 86.7% of teachers use critical reading strategies, albeit intermittently. The most frequently used
strategies were question-posing and summary-writing, but less emphasis was found on the in-depth
evaluation of scientific arguments and evidence. This finding suggests that, although teachers recognize
the importance of critical reading, there is still a gap in its systematic implementation. Despite these
efforts, lack of student interest remains a key challenge limiting the effectiveness of these strategies.
This finding underscores the urgent need to integrate critical reading practices more systematically into
the academic curriculum, while fostering student interest through more dynamic and participatory
pedagogical approaches, in order to achieve deeper understanding and the development of more robust
analytical skills that are transferable to diverse areas of knowledge.
Keywords: critical reading, comprehension, strategies, independent thinking, teachers
Artículo recibido 15 abril 2025
Aceptado para publicación: 10 mayo 2025
The importance of critical reading strategies in the comprehension of
scientific texts
ABSTRACT
Critical reading is an essential skill in the academic field, especially for the comprehension of scientific
texts, which require in-depth and detailed analysis. This skill not only allows for understanding the
content but also for analyzing, interpreting, and evaluating its foundations, which is essential for high
school students, who are faced with more complex and specialized content. Through specific strategies
such as formulating questions, creating summaries, and identifying main ideas, students develop an
analytical approach that allows them to distinguish between facts and opinions, identify biases and
fallacies, and evaluate the validity of conclusions presented in texts. These skills not only improve
comprehension but also foster independent thinking, critical evaluation skills, and sound argumentation,
which are essential for both academic development and personal and professional life. The quantitative
study focused on a survey of 15 high school teachers who teach science subjects. The results showed
that 86.7% of teachers use critical reading strategies, albeit intermittently. The most frequently used
strategies were question-posing and summary-writing, but less emphasis was found on the in-depth
evaluation of scientific arguments and evidence. This finding suggests that, although teachers recognize
the importance of critical reading, there is still a gap in its systematic implementation. Despite these
efforts, lack of student interest remains a key challenge limiting the effectiveness of these strategies.
This finding underscores the urgent need to integrate critical reading practices more systematically into
the academic curriculum, while fostering student interest through more dynamic and participatory
pedagogical approaches, in order to achieve deeper understanding and the development of more robust
analytical skills that are transferable to diverse areas of knowledge.
Keywords: critical reading, comprehension, strategies, independent thinking, teachers
Artículo recibido 15 abril 2025
Aceptado para publicación: 10 mayo 2025
pág. 1484
INTRODUCCIÓN
La lectura crítica se ha consolidado como una habilidad esencial en el mundo académico, especialmente
cuando se trata del análisis de textos científicos. Este tipo de lectura va más allá de la simple
comprensión del contenido; implica una evaluación profunda de la lógica, las evidencias y la coherencia
interna del texto. Como señala Chipantiza (2024), la lectura crítica no solo permite entender lo que un
texto expresa, sino también cuestionar y analizar sus fundamentos. Esta competencia es especialmente
relevante en los estudiantes de bachillerato, quienes, al estar expuestos a un aumento progresivo de
contenidos científicos, requieren habilidades analíticas superiores para abordar estos textos con eficacia.
La capacidad de realizar un análisis crítico permite que los estudiantes no solo comprendan la
información presentada, sino que también puedan evaluar su validez y pertinencia en el contexto
académico y científico.
El desarrollo de estrategias de lectura crítica juega un papel crucial en la formación de estos estudiantes.
Una de las ventajas fundamentales de enseñar a leer críticamente es que permite a los estudiantes
identificar y desentrañar los argumentos presentes en los textos, diferenciando los hechos de las
opiniones y evaluando la validez de las conclusiones. Según Burgos et al. (2006), no solo se mejora la
comprensión lectora, sino que también se refuerzan habilidades cognitivas como el pensamiento
autónomo y la capacidad de argumentación. Estas competencias, necesarias para poder interactuar de
manera efectiva con textos científicos, permiten que los estudiantes construyan un conocimiento más
robusto y fundamentado. Este proceso no solo favorece la adquisición de contenido académico, sino que
también potencia el desarrollo de un pensamiento crítico que puede ser transferido a diversas áreas del
conocimiento.
Además, Galeano & Ochoa (2022) subrayan que la implementación de estrategias específicas de lectura
crítica facilita la apropiación de contenidos complejos. Entre estas estrategias se incluyen la formulación
de preguntas, la elaboración de resúmenes y la identificación de las ideas principales. La formulación
de preguntas, por ejemplo, invita a los estudiantes a cuestionar la validez de las afirmaciones presentadas
en el texto, lo que fomenta un enfoque reflexivo y analítico. La elaboración de resúmenes, por su parte,
ayuda a los estudiantes a consolidar la información más relevante, permitiéndoles organizarla de forma
lógica y coherente. La identificación de las ideas principales facilita la retención de conceptos clave y
INTRODUCCIÓN
La lectura crítica se ha consolidado como una habilidad esencial en el mundo académico, especialmente
cuando se trata del análisis de textos científicos. Este tipo de lectura va más allá de la simple
comprensión del contenido; implica una evaluación profunda de la lógica, las evidencias y la coherencia
interna del texto. Como señala Chipantiza (2024), la lectura crítica no solo permite entender lo que un
texto expresa, sino también cuestionar y analizar sus fundamentos. Esta competencia es especialmente
relevante en los estudiantes de bachillerato, quienes, al estar expuestos a un aumento progresivo de
contenidos científicos, requieren habilidades analíticas superiores para abordar estos textos con eficacia.
La capacidad de realizar un análisis crítico permite que los estudiantes no solo comprendan la
información presentada, sino que también puedan evaluar su validez y pertinencia en el contexto
académico y científico.
El desarrollo de estrategias de lectura crítica juega un papel crucial en la formación de estos estudiantes.
Una de las ventajas fundamentales de enseñar a leer críticamente es que permite a los estudiantes
identificar y desentrañar los argumentos presentes en los textos, diferenciando los hechos de las
opiniones y evaluando la validez de las conclusiones. Según Burgos et al. (2006), no solo se mejora la
comprensión lectora, sino que también se refuerzan habilidades cognitivas como el pensamiento
autónomo y la capacidad de argumentación. Estas competencias, necesarias para poder interactuar de
manera efectiva con textos científicos, permiten que los estudiantes construyan un conocimiento más
robusto y fundamentado. Este proceso no solo favorece la adquisición de contenido académico, sino que
también potencia el desarrollo de un pensamiento crítico que puede ser transferido a diversas áreas del
conocimiento.
Además, Galeano & Ochoa (2022) subrayan que la implementación de estrategias específicas de lectura
crítica facilita la apropiación de contenidos complejos. Entre estas estrategias se incluyen la formulación
de preguntas, la elaboración de resúmenes y la identificación de las ideas principales. La formulación
de preguntas, por ejemplo, invita a los estudiantes a cuestionar la validez de las afirmaciones presentadas
en el texto, lo que fomenta un enfoque reflexivo y analítico. La elaboración de resúmenes, por su parte,
ayuda a los estudiantes a consolidar la información más relevante, permitiéndoles organizarla de forma
lógica y coherente. La identificación de las ideas principales facilita la retención de conceptos clave y
pág. 1485
contribuye a una mejor comprensión general del texto. En el caso de los textos científicos, estas
estrategias permiten que los estudiantes comprendan no solo los hallazgos presentados, sino también las
metodologías empleadas, lo cual es esencial para una evaluación crítica de los resultados.
Por otro lado, la importancia de promover la lectura crítica en el bachillerato trasciende la simple
comprensión de textos científicos. Esta habilidad prepara a los estudiantes para su vida académica futura,
proporcionándoles herramientas para enfrentar de manera más eficaz los desafíos que encontrarán en
niveles educativos superiores. Además, fomenta la participación activa en una sociedad que demanda
ciudadanos con la capacidad de interpretar y evaluar información de manera crítica y responsable. En
un contexto en el que la cantidad de información disponible es vasta y, en muchos casos, contradictoria,
la capacidad de discernir entre lo que es válido y lo que no lo es, se vuelve indispensable. La lectura
crítica permite a los estudiantes no solo procesar información, sino también desarrollarse como
individuos reflexivos que pueden tomar decisiones informadas y fundamentadas.
En este sentido, este trabajo tiene como objetivo analizar la importancia de las estrategias de lectura
crítica y proponer herramientas prácticas para fortalecer esta competencia en los estudiantes de
bachillerato. La implementación de estas estrategias debe ser vista como un proceso integral, que no
solo consiste en enseñar a los estudiantes a leer textos científicos, sino también en fomentar un enfoque
crítico hacia cualquier tipo de contenido académico. Al promover la lectura crítica, no solo mejoramos
la comprensión de los textos, sino que también preparamos a los estudiantes para enfrentar los desafíos
intelectuales que se les presentarán a lo largo de su carrera académica y en su vida profesional. De esta
manera, se contribuye a formar ciudadanos responsables, con la capacidad de analizar, interpretar y
evaluar la información de manera efectiva, lo que les permitirá participar activamente en la sociedad
actual, caracterizada por su complejidad y pluralidad de fuentes informativas.
En conclusión, la lectura crítica es una habilidad fundamental que debe ser fomentada en los estudiantes
de bachillerato, especialmente al enfrentarse a textos científicos que requieren una comprensión
profunda y reflexiva. A través de estrategias específicas como la formulación de preguntas, la
elaboración de resúmenes y la identificación de ideas principales, los estudiantes no solo mejoran su
comprensión lectora, sino que desarrollan habilidades de pensamiento autónomo y argumentativo. Estas
estrategias son cruciales para una interacción eficaz con los textos científicos y contribuyen
contribuye a una mejor comprensión general del texto. En el caso de los textos científicos, estas
estrategias permiten que los estudiantes comprendan no solo los hallazgos presentados, sino también las
metodologías empleadas, lo cual es esencial para una evaluación crítica de los resultados.
Por otro lado, la importancia de promover la lectura crítica en el bachillerato trasciende la simple
comprensión de textos científicos. Esta habilidad prepara a los estudiantes para su vida académica futura,
proporcionándoles herramientas para enfrentar de manera más eficaz los desafíos que encontrarán en
niveles educativos superiores. Además, fomenta la participación activa en una sociedad que demanda
ciudadanos con la capacidad de interpretar y evaluar información de manera crítica y responsable. En
un contexto en el que la cantidad de información disponible es vasta y, en muchos casos, contradictoria,
la capacidad de discernir entre lo que es válido y lo que no lo es, se vuelve indispensable. La lectura
crítica permite a los estudiantes no solo procesar información, sino también desarrollarse como
individuos reflexivos que pueden tomar decisiones informadas y fundamentadas.
En este sentido, este trabajo tiene como objetivo analizar la importancia de las estrategias de lectura
crítica y proponer herramientas prácticas para fortalecer esta competencia en los estudiantes de
bachillerato. La implementación de estas estrategias debe ser vista como un proceso integral, que no
solo consiste en enseñar a los estudiantes a leer textos científicos, sino también en fomentar un enfoque
crítico hacia cualquier tipo de contenido académico. Al promover la lectura crítica, no solo mejoramos
la comprensión de los textos, sino que también preparamos a los estudiantes para enfrentar los desafíos
intelectuales que se les presentarán a lo largo de su carrera académica y en su vida profesional. De esta
manera, se contribuye a formar ciudadanos responsables, con la capacidad de analizar, interpretar y
evaluar la información de manera efectiva, lo que les permitirá participar activamente en la sociedad
actual, caracterizada por su complejidad y pluralidad de fuentes informativas.
En conclusión, la lectura crítica es una habilidad fundamental que debe ser fomentada en los estudiantes
de bachillerato, especialmente al enfrentarse a textos científicos que requieren una comprensión
profunda y reflexiva. A través de estrategias específicas como la formulación de preguntas, la
elaboración de resúmenes y la identificación de ideas principales, los estudiantes no solo mejoran su
comprensión lectora, sino que desarrollan habilidades de pensamiento autónomo y argumentativo. Estas
estrategias son cruciales para una interacción eficaz con los textos científicos y contribuyen
pág. 1486
significativamente a la formación de individuos capaces de interpretar y evaluar la información de
manera crítica, lo que los prepara para enfrentar los desafíos académicos y profesionales del futuro.
MARCO TEÓRICO
La lectura crítica como competencia académica
La lectura crítica se define como un proceso activo de interpretación, análisis y evaluación de un texto,
más allá de su simple comprensión superficial. Según Guzmán (2024), leer críticamente implica
cuestionar el contenido, los propósitos y las intenciones del autor, buscando no solo entender lo que se
dice, sino también detectar posibles sesgos, falacias o inconsistencias. Esta forma de lectura exige del
estudiante una actitud reflexiva y un pensamiento analítico que le permita construir un conocimiento
propio y fundamentado.
Entre las características principales de la lectura crítica se encuentra la capacidad de identificar
argumentos, evaluar la evidencia presentada y distinguir entre opiniones y hechos verificables. Ramos
(2024) destaca que un lector crítico analiza la estructura lógica del discurso, examina la validez de las
premisas y juzga la relevancia y suficiencia de las pruebas aportadas. De esta manera, la lectura crítica
no se limita a una comprensión literal, sino que promueve habilidades de interpretación profunda y
razonamiento autónomo.
La importancia de la lectura crítica en el contexto educativo radica en su contribución al desarrollo del
pensamiento independiente y a la formación de ciudadanos críticos y responsables. Huarca (2022)
sostiene que la enseñanza de estrategias de lectura crítica favorece la capacidad de los estudiantes para
enfrentarse de manera activa y consciente a la información que reciben, ya sea en textos académicos,
científicos o en los medios de comunicación. Esta competencia se vuelve especialmente necesaria en un
mundo saturado de información donde discernir fuentes confiables es un desafío constante.
Asimismo, la lectura crítica fomenta el aprendizaje significativo, permitiendo que los estudiantes no
solo memoricen contenidos, sino que los analicen, relacionen y cuestionen, construyendo así un
conocimiento más sólido y duradero. De acuerdo con Pérez (2025), el aprendizaje real ocurre cuando
los individuos logran internalizar y reconstruir activamente la información a través de procesos de
reflexión y diálogo, competencias que están en el corazón de la lectura crítica.
significativamente a la formación de individuos capaces de interpretar y evaluar la información de
manera crítica, lo que los prepara para enfrentar los desafíos académicos y profesionales del futuro.
MARCO TEÓRICO
La lectura crítica como competencia académica
La lectura crítica se define como un proceso activo de interpretación, análisis y evaluación de un texto,
más allá de su simple comprensión superficial. Según Guzmán (2024), leer críticamente implica
cuestionar el contenido, los propósitos y las intenciones del autor, buscando no solo entender lo que se
dice, sino también detectar posibles sesgos, falacias o inconsistencias. Esta forma de lectura exige del
estudiante una actitud reflexiva y un pensamiento analítico que le permita construir un conocimiento
propio y fundamentado.
Entre las características principales de la lectura crítica se encuentra la capacidad de identificar
argumentos, evaluar la evidencia presentada y distinguir entre opiniones y hechos verificables. Ramos
(2024) destaca que un lector crítico analiza la estructura lógica del discurso, examina la validez de las
premisas y juzga la relevancia y suficiencia de las pruebas aportadas. De esta manera, la lectura crítica
no se limita a una comprensión literal, sino que promueve habilidades de interpretación profunda y
razonamiento autónomo.
La importancia de la lectura crítica en el contexto educativo radica en su contribución al desarrollo del
pensamiento independiente y a la formación de ciudadanos críticos y responsables. Huarca (2022)
sostiene que la enseñanza de estrategias de lectura crítica favorece la capacidad de los estudiantes para
enfrentarse de manera activa y consciente a la información que reciben, ya sea en textos académicos,
científicos o en los medios de comunicación. Esta competencia se vuelve especialmente necesaria en un
mundo saturado de información donde discernir fuentes confiables es un desafío constante.
Asimismo, la lectura crítica fomenta el aprendizaje significativo, permitiendo que los estudiantes no
solo memoricen contenidos, sino que los analicen, relacionen y cuestionen, construyendo así un
conocimiento más sólido y duradero. De acuerdo con Pérez (2025), el aprendizaje real ocurre cuando
los individuos logran internalizar y reconstruir activamente la información a través de procesos de
reflexión y diálogo, competencias que están en el corazón de la lectura crítica.
pág. 1487
Comprender la lectura crítica como una competencia académica esencial implica reconocer su papel en
la formación de estudiantes capaces de analizar, interpretar y evaluar la información de manera
consciente y argumentada. A través del fortalecimiento de esta habilidad, no solo se mejora la
comprensión de textos científicos y académicos, sino que también se potencia el desarrollo del
pensamiento crítico, herramienta fundamental para la vida académica, profesional y social.
Estrategias de lectura crítica
La lectura crítica requiere la aplicación de estrategias específicas que permitan a los estudiantes
interactuar de manera reflexiva y analítica con los textos. Entre estas estrategias destaca la formulación
de preguntas, considerada por Delgado & Bravo (2000) como una herramienta esencial para profundizar
en la comprensión lectora. Al preguntar sobre las intenciones del autor, la lógica del argumento y la
validez de la información, el lector desarrolla un pensamiento inquisitivo que le permite analizar los
textos de manera más crítica y significativa.
Otra estrategia fundamental es la elaboración de resúmenes. Según Murillo, (2023), resumir ayuda al
lector a organizar la información relevante, a diferenciar ideas principales de detalles secundarios y a
construir un esquema mental del contenido leído. Esta actividad no solo fortalece la comprensión del
texto, sino que también potencia la capacidad de síntesis y la retención de los conceptos más importantes,
habilidades cruciales para abordar textos científicos densos y complejos.
La identificación de ideas principales también constituye una habilidad central dentro de las estrategias
de lectura crítica. De acuerdo con Ramírez & Fernández (2022), enseñar a los estudiantes a reconocer
las ideas fundamentales de un texto les permite establecer relaciones entre conceptos, formular
inferencias y detectar los propósitos comunicativos del autor. Esta estrategia facilita la comprensión
profunda del mensaje y evita que el lector se disperse en detalles irrelevantes o información secundaria.
Finalmente, la evaluación de la argumentación y la evidencia en los textos es clave para un proceso de
lectura verdaderamente crítico. Para Granja (2023), un lector crítico debe analizar la coherencia de los
argumentos, la calidad de las pruebas presentadas y la solidez lógica de las conclusiones. Este tipo de
análisis permite al estudiante juzgar la credibilidad de los textos científicos, identificar falacias o
manipulaciones, y construir opiniones fundamentadas en evidencia objetiva.
Comprender la lectura crítica como una competencia académica esencial implica reconocer su papel en
la formación de estudiantes capaces de analizar, interpretar y evaluar la información de manera
consciente y argumentada. A través del fortalecimiento de esta habilidad, no solo se mejora la
comprensión de textos científicos y académicos, sino que también se potencia el desarrollo del
pensamiento crítico, herramienta fundamental para la vida académica, profesional y social.
Estrategias de lectura crítica
La lectura crítica requiere la aplicación de estrategias específicas que permitan a los estudiantes
interactuar de manera reflexiva y analítica con los textos. Entre estas estrategias destaca la formulación
de preguntas, considerada por Delgado & Bravo (2000) como una herramienta esencial para profundizar
en la comprensión lectora. Al preguntar sobre las intenciones del autor, la lógica del argumento y la
validez de la información, el lector desarrolla un pensamiento inquisitivo que le permite analizar los
textos de manera más crítica y significativa.
Otra estrategia fundamental es la elaboración de resúmenes. Según Murillo, (2023), resumir ayuda al
lector a organizar la información relevante, a diferenciar ideas principales de detalles secundarios y a
construir un esquema mental del contenido leído. Esta actividad no solo fortalece la comprensión del
texto, sino que también potencia la capacidad de síntesis y la retención de los conceptos más importantes,
habilidades cruciales para abordar textos científicos densos y complejos.
La identificación de ideas principales también constituye una habilidad central dentro de las estrategias
de lectura crítica. De acuerdo con Ramírez & Fernández (2022), enseñar a los estudiantes a reconocer
las ideas fundamentales de un texto les permite establecer relaciones entre conceptos, formular
inferencias y detectar los propósitos comunicativos del autor. Esta estrategia facilita la comprensión
profunda del mensaje y evita que el lector se disperse en detalles irrelevantes o información secundaria.
Finalmente, la evaluación de la argumentación y la evidencia en los textos es clave para un proceso de
lectura verdaderamente crítico. Para Granja (2023), un lector crítico debe analizar la coherencia de los
argumentos, la calidad de las pruebas presentadas y la solidez lógica de las conclusiones. Este tipo de
análisis permite al estudiante juzgar la credibilidad de los textos científicos, identificar falacias o
manipulaciones, y construir opiniones fundamentadas en evidencia objetiva.
pág. 1488
En síntesis, la formulación de preguntas, la elaboración de resúmenes, la identificación de ideas
principales y la evaluación de la argumentación son estrategias que fortalecen la lectura crítica y, en
consecuencia, mejoran la comprensión de textos científicos. Implementarlas de manera sistemática en
el proceso educativo contribuye a formar estudiantes autónomos, reflexivos y preparados para enfrentar
con éxito los desafíos académicos y profesionales de su entorno.
La comprensión de textos científicos
La comprensión de textos científicos requiere conocer sus características particulares, ya que estos
difieren de otros tipos de escritos en estructura, lenguaje y propósito. Según Martínez (2023), los textos
científicos se caracterizan por su objetividad, precisión terminológica, uso de lenguaje técnico y la
presentación lógica y ordenada de información. Estos textos suelen incluir definiciones, descripciones
de procedimientos, análisis de resultados y discusión de hallazgos, lo que exige del lector una atención
especial a los detalles y la relación entre conceptos.
A pesar de su importancia, la lectura de textos científicos presenta diversas dificultades para los
estudiantes de bachillerato. De acuerdo Loayza & Majail (2021), uno de los principales retos radica en
la densidad del contenido, el uso de terminología especializada y la estructura no narrativa que dificulta
la identificación de las ideas principales. Además, muchos estudiantes tienden a leer de manera pasiva,
lo que limita su capacidad para analizar críticamente los datos, interpretar gráficos y tablas, o cuestionar
las conclusiones presentadas por los autores.
Otra dificultad frecuente es la falta de familiaridad con los métodos científicos y las formas de
argumentación basadas en evidencia empírica. Pérez et al., (2022) señalan que los textos científicos
exigen no solo comprender el contenido explícito, sino también inferir relaciones causales, procesos de
experimentación y razonamientos inductivos o deductivos. Esta exigencia cognitiva puede generar
frustración en los lectores no entrenados en estrategias de lectura crítica.
Para superar estos obstáculos, es necesario que los estudiantes desarrollen habilidades específicas.
Según Colque (2025), las competencias esenciales incluyen la activación de conocimientos previos, la
identificación de estructuras textuales (hipótesis, métodos, resultados, discusión), la interpretación de
representaciones gráficas y la formulación de preguntas críticas durante la lectura. Además, es
En síntesis, la formulación de preguntas, la elaboración de resúmenes, la identificación de ideas
principales y la evaluación de la argumentación son estrategias que fortalecen la lectura crítica y, en
consecuencia, mejoran la comprensión de textos científicos. Implementarlas de manera sistemática en
el proceso educativo contribuye a formar estudiantes autónomos, reflexivos y preparados para enfrentar
con éxito los desafíos académicos y profesionales de su entorno.
La comprensión de textos científicos
La comprensión de textos científicos requiere conocer sus características particulares, ya que estos
difieren de otros tipos de escritos en estructura, lenguaje y propósito. Según Martínez (2023), los textos
científicos se caracterizan por su objetividad, precisión terminológica, uso de lenguaje técnico y la
presentación lógica y ordenada de información. Estos textos suelen incluir definiciones, descripciones
de procedimientos, análisis de resultados y discusión de hallazgos, lo que exige del lector una atención
especial a los detalles y la relación entre conceptos.
A pesar de su importancia, la lectura de textos científicos presenta diversas dificultades para los
estudiantes de bachillerato. De acuerdo Loayza & Majail (2021), uno de los principales retos radica en
la densidad del contenido, el uso de terminología especializada y la estructura no narrativa que dificulta
la identificación de las ideas principales. Además, muchos estudiantes tienden a leer de manera pasiva,
lo que limita su capacidad para analizar críticamente los datos, interpretar gráficos y tablas, o cuestionar
las conclusiones presentadas por los autores.
Otra dificultad frecuente es la falta de familiaridad con los métodos científicos y las formas de
argumentación basadas en evidencia empírica. Pérez et al., (2022) señalan que los textos científicos
exigen no solo comprender el contenido explícito, sino también inferir relaciones causales, procesos de
experimentación y razonamientos inductivos o deductivos. Esta exigencia cognitiva puede generar
frustración en los lectores no entrenados en estrategias de lectura crítica.
Para superar estos obstáculos, es necesario que los estudiantes desarrollen habilidades específicas.
Según Colque (2025), las competencias esenciales incluyen la activación de conocimientos previos, la
identificación de estructuras textuales (hipótesis, métodos, resultados, discusión), la interpretación de
representaciones gráficas y la formulación de preguntas críticas durante la lectura. Además, es
pág. 1489
fundamental la capacidad de realizar inferencias y de relacionar la información nueva con conceptos ya
conocidos para construir significados más profundos.
La comprensión de textos científicos no solo depende de la decodificación literal de la información, sino
también del uso estratégico de habilidades críticas y analíticas. Conocer las características de estos
textos, reconocer las dificultades que presentan y fomentar el desarrollo de competencias específicas
permitirá a los estudiantes abordar los contenidos científicos con mayor autonomía, reflexión y éxito
académico.
Relación entre estrategias de lectura crítica y comprensión de textos científicos
La lectura crítica y la comprensión de textos científicos están profundamente interrelacionadas, ya que
aplicar estrategias críticas permite a los estudiantes interpretar de manera más efectiva la información
especializada. De acuerdo con Jiménez et al., (2024), el pensamiento crítico fortalece la habilidad para
analizar argumentos, evaluar evidencias y detectar supuestos, aspectos fundamentales en la lectura de
textos científicos. Así, quienes aplican estrategias de lectura crítica son capaces de ir más allá del
contenido superficial para comprender la lógica y la metodología que sustentan un estudio.
El impacto de las estrategias de lectura crítica en la interpretación de textos científicos ha sido
ampliamente documentado. Según Afflerbach, Camero (2024), los lectores estratégicos tienden a
monitorear constantemente su comprensión, ajustando sus procesos cognitivos a medida que enfrentan
dificultades. Este monitoreo incluye actividades como releer, resumir, formular hipótesis y cuestionar
las afirmaciones del texto, acciones que potencian significativamente la comprensión profunda de
materiales científicos complejos.
Además, las estrategias de lectura crítica permiten al estudiante construir un juicio informado sobre la
validez y la relevancia de la información presentada. Como indica Freire (2024), un lector crítico no
acepta automáticamente todo lo que lee, sino que examina cuidadosamente las fuentes, la consistencia
lógica de los argumentos y la calidad de las evidencias. Esta postura resulta esencial en el contexto
científico, donde la evaluación rigurosa de la información es clave para construir conocimiento
confiable.
Entre los beneficios del pensamiento crítico aplicado a la lectura científica se destaca el desarrollo de
habilidades transferibles a otras áreas académicas y profesionales. Vera (2023) sostiene que el
fundamental la capacidad de realizar inferencias y de relacionar la información nueva con conceptos ya
conocidos para construir significados más profundos.
La comprensión de textos científicos no solo depende de la decodificación literal de la información, sino
también del uso estratégico de habilidades críticas y analíticas. Conocer las características de estos
textos, reconocer las dificultades que presentan y fomentar el desarrollo de competencias específicas
permitirá a los estudiantes abordar los contenidos científicos con mayor autonomía, reflexión y éxito
académico.
Relación entre estrategias de lectura crítica y comprensión de textos científicos
La lectura crítica y la comprensión de textos científicos están profundamente interrelacionadas, ya que
aplicar estrategias críticas permite a los estudiantes interpretar de manera más efectiva la información
especializada. De acuerdo con Jiménez et al., (2024), el pensamiento crítico fortalece la habilidad para
analizar argumentos, evaluar evidencias y detectar supuestos, aspectos fundamentales en la lectura de
textos científicos. Así, quienes aplican estrategias de lectura crítica son capaces de ir más allá del
contenido superficial para comprender la lógica y la metodología que sustentan un estudio.
El impacto de las estrategias de lectura crítica en la interpretación de textos científicos ha sido
ampliamente documentado. Según Afflerbach, Camero (2024), los lectores estratégicos tienden a
monitorear constantemente su comprensión, ajustando sus procesos cognitivos a medida que enfrentan
dificultades. Este monitoreo incluye actividades como releer, resumir, formular hipótesis y cuestionar
las afirmaciones del texto, acciones que potencian significativamente la comprensión profunda de
materiales científicos complejos.
Además, las estrategias de lectura crítica permiten al estudiante construir un juicio informado sobre la
validez y la relevancia de la información presentada. Como indica Freire (2024), un lector crítico no
acepta automáticamente todo lo que lee, sino que examina cuidadosamente las fuentes, la consistencia
lógica de los argumentos y la calidad de las evidencias. Esta postura resulta esencial en el contexto
científico, donde la evaluación rigurosa de la información es clave para construir conocimiento
confiable.
Entre los beneficios del pensamiento crítico aplicado a la lectura científica se destaca el desarrollo de
habilidades transferibles a otras áreas académicas y profesionales. Vera (2023) sostiene que el
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pensamiento crítico mejora la resolución de problemas, el razonamiento lógico y la toma de decisiones
basadas en evidencias, competencias fundamentales para la formación de ciudadanos informados y
responsables. En este sentido, fomentar la lectura crítica no solo impacta positivamente la comprensión
de textos científicos, sino que también contribuye al desarrollo integral del estudiante.
Las estrategias de lectura crítica y el pensamiento crítico son pilares esenciales para interpretar
adecuadamente textos científicos. Su aplicación favorece una comprensión profunda, una evaluación
rigurosa de los contenidos y el fortalecimiento de habilidades cognitivas superiores. Por ello, su
incorporación sistemática en el proceso educativo resulta indispensable para formar estudiantes capaces
de interactuar críticamente con el conocimiento científico.
Implicaciones educativas
La lectura crítica es una competencia indispensable que debe ser promovida desde los niveles de
bachillerato, especialmente ante el creciente acceso a textos científicos en la formación académica.
Según Bejarano (2024), enseñar a leer críticamente implica empoderar a los estudiantes para cuestionar,
interpretar y transformar la realidad, habilidades esenciales en el análisis de producciones científicas.
Por tanto, incorporar la lectura crítica como un eje transversal en la educación secundaria es vital para
formar lectores autónomos, reflexivos y comprometidos.
La enseñanza de la lectura crítica en bachillerato requiere un enfoque sistemático y progresivo. En
palabras de Paternina (2022), los estudiantes deben ser guiados no solo en la comprensión literal de los
textos, sino en el descubrimiento de las estructuras discursivas, la evaluación de argumentos y la
identificación de sesgos o falacias. Esto exige prácticas educativas que vayan más allá de la lectura
pasiva, proponiendo actividades de análisis, debate y reflexión sobre distintos tipos de textos científicos.
Dentro de las propuestas metodológicas para fortalecer la comprensión de textos científicos, se destacan
estrategias como el aprendizaje basado en problemas, los debates argumentativos y el uso de
organizadores gráficos. De acuerdo con Romero & Novillo (2024), el aprendizaje significativo se
potencia cuando los estudiantes participan activamente en la construcción de su conocimiento,
interactuando entre pares y reflexionando sobre los contenidos. Aplicar métodos activos en torno a la
lectura crítica puede mejorar no solo la comprensión, sino también la motivación y el interés hacia los
textos científicos.
pensamiento crítico mejora la resolución de problemas, el razonamiento lógico y la toma de decisiones
basadas en evidencias, competencias fundamentales para la formación de ciudadanos informados y
responsables. En este sentido, fomentar la lectura crítica no solo impacta positivamente la comprensión
de textos científicos, sino que también contribuye al desarrollo integral del estudiante.
Las estrategias de lectura crítica y el pensamiento crítico son pilares esenciales para interpretar
adecuadamente textos científicos. Su aplicación favorece una comprensión profunda, una evaluación
rigurosa de los contenidos y el fortalecimiento de habilidades cognitivas superiores. Por ello, su
incorporación sistemática en el proceso educativo resulta indispensable para formar estudiantes capaces
de interactuar críticamente con el conocimiento científico.
Implicaciones educativas
La lectura crítica es una competencia indispensable que debe ser promovida desde los niveles de
bachillerato, especialmente ante el creciente acceso a textos científicos en la formación académica.
Según Bejarano (2024), enseñar a leer críticamente implica empoderar a los estudiantes para cuestionar,
interpretar y transformar la realidad, habilidades esenciales en el análisis de producciones científicas.
Por tanto, incorporar la lectura crítica como un eje transversal en la educación secundaria es vital para
formar lectores autónomos, reflexivos y comprometidos.
La enseñanza de la lectura crítica en bachillerato requiere un enfoque sistemático y progresivo. En
palabras de Paternina (2022), los estudiantes deben ser guiados no solo en la comprensión literal de los
textos, sino en el descubrimiento de las estructuras discursivas, la evaluación de argumentos y la
identificación de sesgos o falacias. Esto exige prácticas educativas que vayan más allá de la lectura
pasiva, proponiendo actividades de análisis, debate y reflexión sobre distintos tipos de textos científicos.
Dentro de las propuestas metodológicas para fortalecer la comprensión de textos científicos, se destacan
estrategias como el aprendizaje basado en problemas, los debates argumentativos y el uso de
organizadores gráficos. De acuerdo con Romero & Novillo (2024), el aprendizaje significativo se
potencia cuando los estudiantes participan activamente en la construcción de su conocimiento,
interactuando entre pares y reflexionando sobre los contenidos. Aplicar métodos activos en torno a la
lectura crítica puede mejorar no solo la comprensión, sino también la motivación y el interés hacia los
textos científicos.
pág. 1491
Otra propuesta metodológica efectiva es la enseñanza explícita de estrategias de lectura crítica, como la
formulación de preguntas, la síntesis de información y la evaluación de la evidencia presentada.
Wainberg (2022) afirma que enseñar de manera explícita cómo pensar y leer estratégicamente facilita
que los estudiantes internalicen procesos de comprensión profunda, transfiriendo estas habilidades a
diferentes disciplinas académicas, especialmente a las ciencias.
Las implicaciones educativas de fomentar la lectura crítica en bachillerato son amplias y fundamentales
para la formación integral de los estudiantes. Implementar propuestas metodológicas activas y enseñar
de forma explícita las estrategias de lectura crítica permitirá que los futuros ciudadanos enfrenten con
éxito los desafíos de un mundo basado en la producción y análisis de información científica.
METODOLOGÍA
El presente estudio adoptará un enfoque cuantitativo con el objetivo de analizar la importancia de las
estrategias de lectura crítica en la comprensión de textos científicos, específicamente en el contexto
educativo de los docentes. Para ello, se realizará una encuesta dirigida a 15 docentes de bachillerato que
imparten asignaturas científicas. Este enfoque permitirá obtener datos numéricos y objetivos sobre las
percepciones y prácticas actuales de los docentes en relación con las estrategias de lectura crítica
aplicadas en la enseñanza de textos científicos.
La encuesta constará de preguntas cerradas y de escala Likert, diseñadas para medir la frecuencia con
que los docentes emplean estrategias de lectura crítica, su conocimiento sobre dichas estrategias y su
percepción sobre la efectividad de estas en el proceso de comprensión de textos científicos por parte de
los estudiantes. Las preguntas incluirán aspectos como la utilización de técnicas de formulación de
preguntas, resúmenes y la identificación de ideas principales en los textos científicos, así como su
impacto en la comprensión de los contenidos por parte de los estudiantes.
El instrumento será validado por un grupo de expertos en el área de educación y pedagogía para
garantizar su relevancia y precisión en la medición de las variables propuestas. Posteriormente, las
encuestas serán aplicadas de forma presencial o digital, dependiendo de la disponibilidad de los
docentes, con el fin de recolectar datos de manera eficiente y respetuosa con el tiempo de los
participantes. Los docentes seleccionados serán informados previamente sobre los objetivos de la
investigación, y su participación será completamente voluntaria y anónima.
Otra propuesta metodológica efectiva es la enseñanza explícita de estrategias de lectura crítica, como la
formulación de preguntas, la síntesis de información y la evaluación de la evidencia presentada.
Wainberg (2022) afirma que enseñar de manera explícita cómo pensar y leer estratégicamente facilita
que los estudiantes internalicen procesos de comprensión profunda, transfiriendo estas habilidades a
diferentes disciplinas académicas, especialmente a las ciencias.
Las implicaciones educativas de fomentar la lectura crítica en bachillerato son amplias y fundamentales
para la formación integral de los estudiantes. Implementar propuestas metodológicas activas y enseñar
de forma explícita las estrategias de lectura crítica permitirá que los futuros ciudadanos enfrenten con
éxito los desafíos de un mundo basado en la producción y análisis de información científica.
METODOLOGÍA
El presente estudio adoptará un enfoque cuantitativo con el objetivo de analizar la importancia de las
estrategias de lectura crítica en la comprensión de textos científicos, específicamente en el contexto
educativo de los docentes. Para ello, se realizará una encuesta dirigida a 15 docentes de bachillerato que
imparten asignaturas científicas. Este enfoque permitirá obtener datos numéricos y objetivos sobre las
percepciones y prácticas actuales de los docentes en relación con las estrategias de lectura crítica
aplicadas en la enseñanza de textos científicos.
La encuesta constará de preguntas cerradas y de escala Likert, diseñadas para medir la frecuencia con
que los docentes emplean estrategias de lectura crítica, su conocimiento sobre dichas estrategias y su
percepción sobre la efectividad de estas en el proceso de comprensión de textos científicos por parte de
los estudiantes. Las preguntas incluirán aspectos como la utilización de técnicas de formulación de
preguntas, resúmenes y la identificación de ideas principales en los textos científicos, así como su
impacto en la comprensión de los contenidos por parte de los estudiantes.
El instrumento será validado por un grupo de expertos en el área de educación y pedagogía para
garantizar su relevancia y precisión en la medición de las variables propuestas. Posteriormente, las
encuestas serán aplicadas de forma presencial o digital, dependiendo de la disponibilidad de los
docentes, con el fin de recolectar datos de manera eficiente y respetuosa con el tiempo de los
participantes. Los docentes seleccionados serán informados previamente sobre los objetivos de la
investigación, y su participación será completamente voluntaria y anónima.
pág. 1492
Una vez recolectados los datos, se procederá a un análisis estadístico utilizando herramientas como el
software SPSS para procesar la información. Se calcularán frecuencias, promedios y correlaciones para
identificar patrones y tendencias en las respuestas de los docentes, lo que permitirá evaluar la
importancia y efectividad de las estrategias de lectura crítica en la comprensión de textos científicos.
Los resultados obtenidos proporcionarán una visión clara sobre el uso de estas estrategias en la práctica
educativa y su impacto en el aprendizaje de los estudiantes, lo cual servirá para generar propuestas de
mejora en el ámbito pedagógico.
RESULTADOS
La lectura crítica se ha consolidado como una habilidad fundamental en la formación de estudiantes,
especialmente en el ámbito de los textos científicos, donde la capacidad de analizar, evaluar y
comprender de manera profunda resulta esencial para el desarrollo del pensamiento autónomo. En este
contexto, el presente análisis busca explorar las estrategias de lectura crítica utilizadas por los docentes,
así como sus percepciones sobre la efectividad de estas prácticas en la comprensión y el análisis de los
contenidos científicos. A través de una encuesta aplicada a un grupo de 15 docentes, se han recopilado
datos que permiten identificar las principales estrategias empleadas en la enseñanza de textos científicos,
las dificultades que enfrentan los estudiantes y el impacto que estas prácticas tienen en el fomento del
pensamiento crítico. Este estudio, por tanto, no solo resalta la importancia de la lectura crítica en el
contexto educativo, sino que también proporciona una visión detallada sobre las áreas que requieren
atención para mejorar la eficacia de estas estrategias en el aula.
El análisis de los resultados de la pregunta “¿Con qué frecuencia utiliza estrategias de lectura crítica en
la enseñanza de textos científicos en su asignatura?” revela que una amplia mayoría de los docentes
encuestados, específicamente el 86,7%, indica que utiliza estas estrategias de manera frecuente. De los
15 docentes participantes, 13 afirmaron emplearlas "frecuentemente", mientras que uno manifestó
hacerlo "siempre" y otro "ocasionalmente". Es importante destacar que ninguno de los encuestados
señaló "nunca", lo que evidencia un reconocimiento generalizado de la importancia de fomentar
habilidades de lectura crítica en el proceso de comprensión de textos científicos.
La interpretación de estos resultados sugiere que, en el contexto educativo evaluado, existe un
compromiso notable por parte de los docentes para integrar prácticas de lectura crítica en su enseñanza.
Una vez recolectados los datos, se procederá a un análisis estadístico utilizando herramientas como el
software SPSS para procesar la información. Se calcularán frecuencias, promedios y correlaciones para
identificar patrones y tendencias en las respuestas de los docentes, lo que permitirá evaluar la
importancia y efectividad de las estrategias de lectura crítica en la comprensión de textos científicos.
Los resultados obtenidos proporcionarán una visión clara sobre el uso de estas estrategias en la práctica
educativa y su impacto en el aprendizaje de los estudiantes, lo cual servirá para generar propuestas de
mejora en el ámbito pedagógico.
RESULTADOS
La lectura crítica se ha consolidado como una habilidad fundamental en la formación de estudiantes,
especialmente en el ámbito de los textos científicos, donde la capacidad de analizar, evaluar y
comprender de manera profunda resulta esencial para el desarrollo del pensamiento autónomo. En este
contexto, el presente análisis busca explorar las estrategias de lectura crítica utilizadas por los docentes,
así como sus percepciones sobre la efectividad de estas prácticas en la comprensión y el análisis de los
contenidos científicos. A través de una encuesta aplicada a un grupo de 15 docentes, se han recopilado
datos que permiten identificar las principales estrategias empleadas en la enseñanza de textos científicos,
las dificultades que enfrentan los estudiantes y el impacto que estas prácticas tienen en el fomento del
pensamiento crítico. Este estudio, por tanto, no solo resalta la importancia de la lectura crítica en el
contexto educativo, sino que también proporciona una visión detallada sobre las áreas que requieren
atención para mejorar la eficacia de estas estrategias en el aula.
El análisis de los resultados de la pregunta “¿Con qué frecuencia utiliza estrategias de lectura crítica en
la enseñanza de textos científicos en su asignatura?” revela que una amplia mayoría de los docentes
encuestados, específicamente el 86,7%, indica que utiliza estas estrategias de manera frecuente. De los
15 docentes participantes, 13 afirmaron emplearlas "frecuentemente", mientras que uno manifestó
hacerlo "siempre" y otro "ocasionalmente". Es importante destacar que ninguno de los encuestados
señaló "nunca", lo que evidencia un reconocimiento generalizado de la importancia de fomentar
habilidades de lectura crítica en el proceso de comprensión de textos científicos.
La interpretación de estos resultados sugiere que, en el contexto educativo evaluado, existe un
compromiso notable por parte de los docentes para integrar prácticas de lectura crítica en su enseñanza.
pág. 1493
La frecuencia de uso reportada respalda la idea de que los profesores consideran que estas estrategias
no solo facilitan la comprensión de los contenidos científicos, sino que también potencian el desarrollo
del pensamiento crítico en los estudiantes. Sin embargo, el hecho de que la mayoría indique
"frecuentemente" y no "siempre" podría señalar la necesidad de reforzar su aplicación sistemática,
asegurando que cada actividad de lectura científica incluya prácticas críticas como la formulación de
preguntas, la evaluación de argumentos o la identificación de ideas principales.
En relación con la pregunta “¿Cuál de las siguientes estrategias de lectura crítica utiliza más
frecuentemente en la clase?”, los resultados muestran que la "elaboración de resúmenes" es la estrategia
más utilizada por los docentes, con 8 de 15 respuestas, lo que representa el 53,3%. Le sigue la
"formulación de preguntas", elegida por 6 docentes, equivalente al 40%. En contraste, la "identificación
de ideas principales" fue seleccionada solo una vez (6,7%) y no se registraron respuestas para
"evaluación de argumentos y evidencias". Este panorama indica que los docentes tienden a preferir
estrategias que promueven la síntesis de información y la activación de la comprensión activa.
La interpretación de estos datos sugiere que los educadores priorizan actividades que permiten a los
estudiantes organizar y resumir el contenido de los textos científicos, facilitando su comprensión global.
La alta frecuencia en la elaboración de resúmenes y la formulación de preguntas refleja un enfoque
didáctico orientado al procesamiento de la información, aunque se evidencia una limitada atención hacia
estrategias más profundas, como la evaluación de argumentos y evidencias. Esta situación plantea la
oportunidad de fortalecer la formación docente en técnicas que promuevan un análisis crítico más
riguroso de los textos científicos.
La frecuencia de uso reportada respalda la idea de que los profesores consideran que estas estrategias
no solo facilitan la comprensión de los contenidos científicos, sino que también potencian el desarrollo
del pensamiento crítico en los estudiantes. Sin embargo, el hecho de que la mayoría indique
"frecuentemente" y no "siempre" podría señalar la necesidad de reforzar su aplicación sistemática,
asegurando que cada actividad de lectura científica incluya prácticas críticas como la formulación de
preguntas, la evaluación de argumentos o la identificación de ideas principales.
En relación con la pregunta “¿Cuál de las siguientes estrategias de lectura crítica utiliza más
frecuentemente en la clase?”, los resultados muestran que la "elaboración de resúmenes" es la estrategia
más utilizada por los docentes, con 8 de 15 respuestas, lo que representa el 53,3%. Le sigue la
"formulación de preguntas", elegida por 6 docentes, equivalente al 40%. En contraste, la "identificación
de ideas principales" fue seleccionada solo una vez (6,7%) y no se registraron respuestas para
"evaluación de argumentos y evidencias". Este panorama indica que los docentes tienden a preferir
estrategias que promueven la síntesis de información y la activación de la comprensión activa.
La interpretación de estos datos sugiere que los educadores priorizan actividades que permiten a los
estudiantes organizar y resumir el contenido de los textos científicos, facilitando su comprensión global.
La alta frecuencia en la elaboración de resúmenes y la formulación de preguntas refleja un enfoque
didáctico orientado al procesamiento de la información, aunque se evidencia una limitada atención hacia
estrategias más profundas, como la evaluación de argumentos y evidencias. Esta situación plantea la
oportunidad de fortalecer la formación docente en técnicas que promuevan un análisis crítico más
riguroso de los textos científicos.
pág. 1494
Respecto a la percepción sobre cómo la formulación de preguntas ayuda a los estudiantes en la
comprensión de textos científicos, la mayoría de los docentes considera que esta estrategia es altamente
beneficiosa. El 66,7% (10 de 15) indicó que es “útil” y el 26,7% (4 docentes) opinó que es “muy útil”.
Solo un 6,6% (1 docente) señaló que la estrategia es “poco útil” y no se registraron respuestas en la
opción “nada útil”. Estos datos muestran una valoración positiva generalizada hacia la formulación de
preguntas como técnica para fomentar la comprensión crítica de contenidos científicos.
La interpretación de estos resultados permite inferir que los docentes reconocen el valor de la
formulación de preguntas como un medio para estimular el pensamiento crítico, guiar la interpretación
de textos complejos y promover la reflexión en los estudiantes. El hecho de que casi todos los
encuestados consideren esta estrategia como útil o muy útil refuerza la necesidad de seguir impulsando
su aplicación sistemática en el aula, especialmente en la enseñanza de textos científicos, donde la
comprensión profunda y el análisis detallado son fundamentales.
En relación con la eficacia de la elaboración de resúmenes para mejorar la comprensión de textos
científicos, los resultados muestran que una gran mayoría de los docentes valora positivamente esta
estrategia. El 73,3% (11 de 15) consideró que elaborar resúmenes es “eficaz”, mientras que el 13,3% (2
docentes) lo calificó como “muy eficaz”. Solo un 13,3% indicó que es “poco eficaz” y ningún docente
Respecto a la percepción sobre cómo la formulación de preguntas ayuda a los estudiantes en la
comprensión de textos científicos, la mayoría de los docentes considera que esta estrategia es altamente
beneficiosa. El 66,7% (10 de 15) indicó que es “útil” y el 26,7% (4 docentes) opinó que es “muy útil”.
Solo un 6,6% (1 docente) señaló que la estrategia es “poco útil” y no se registraron respuestas en la
opción “nada útil”. Estos datos muestran una valoración positiva generalizada hacia la formulación de
preguntas como técnica para fomentar la comprensión crítica de contenidos científicos.
La interpretación de estos resultados permite inferir que los docentes reconocen el valor de la
formulación de preguntas como un medio para estimular el pensamiento crítico, guiar la interpretación
de textos complejos y promover la reflexión en los estudiantes. El hecho de que casi todos los
encuestados consideren esta estrategia como útil o muy útil refuerza la necesidad de seguir impulsando
su aplicación sistemática en el aula, especialmente en la enseñanza de textos científicos, donde la
comprensión profunda y el análisis detallado son fundamentales.
En relación con la eficacia de la elaboración de resúmenes para mejorar la comprensión de textos
científicos, los resultados muestran que una gran mayoría de los docentes valora positivamente esta
estrategia. El 73,3% (11 de 15) consideró que elaborar resúmenes es “eficaz”, mientras que el 13,3% (2
docentes) lo calificó como “muy eficaz”. Solo un 13,3% indicó que es “poco eficaz” y ningún docente
pág. 1495
eligió la opción “nada eficaz”. Estos datos reflejan que la estrategia de resumen es ampliamente
reconocida como un recurso efectivo para fortalecer la comprensión crítica en el estudio de textos
científicos.
La interpretación de estos hallazgos sugiere que los docentes consideran que la elaboración de
resúmenes permite a los estudiantes organizar, sintetizar y retener información esencial, facilitando así
un entendimiento más claro y profundo de los contenidos científicos. Además, al no registrarse
respuestas en “nada eficaz”, se refuerza la idea de que esta estrategia es vista como una herramienta
sólida en el proceso de enseñanza-aprendizaje, especialmente cuando se busca desarrollar competencias
de lectura crítica en el ámbito académico.
Respecto a la frecuencia con la que los estudiantes emplean la identificación de ideas principales al leer
textos científicos, los resultados reflejan una tendencia positiva. El 66,7% de los docentes señaló que
sus estudiantes “frecuentemente” utilizan esta estrategia, mientras que el 20% indicó que “siempre” la
aplican. Solo un 13,3% mencionó que los estudiantes la emplean “ocasionalmente” y ninguno afirmó
que “nunca” la usen. Esto evidencia que la identificación de ideas principales es una práctica común en
las clases y que la mayoría de los estudiantes están familiarizados con su importancia en la comprensión
de textos científicos.
La interpretación de estos datos sugiere que la estrategia de identificar las ideas principales ha sido bien
incorporada en las prácticas de lectura dentro del aula. El hecho de que no existan respuestas en la opción
“nunca” demuestra un compromiso generalizado por parte de los docentes y estudiantes en fortalecer
esta habilidad. Además, la frecuencia con que se utiliza esta estrategia apoya el desarrollo de una
comprensión más estructurada y profunda de los contenidos científicos, facilitando a los estudiantes el
análisis y la síntesis de información compleja.
eligió la opción “nada eficaz”. Estos datos reflejan que la estrategia de resumen es ampliamente
reconocida como un recurso efectivo para fortalecer la comprensión crítica en el estudio de textos
científicos.
La interpretación de estos hallazgos sugiere que los docentes consideran que la elaboración de
resúmenes permite a los estudiantes organizar, sintetizar y retener información esencial, facilitando así
un entendimiento más claro y profundo de los contenidos científicos. Además, al no registrarse
respuestas en “nada eficaz”, se refuerza la idea de que esta estrategia es vista como una herramienta
sólida en el proceso de enseñanza-aprendizaje, especialmente cuando se busca desarrollar competencias
de lectura crítica en el ámbito académico.
Respecto a la frecuencia con la que los estudiantes emplean la identificación de ideas principales al leer
textos científicos, los resultados reflejan una tendencia positiva. El 66,7% de los docentes señaló que
sus estudiantes “frecuentemente” utilizan esta estrategia, mientras que el 20% indicó que “siempre” la
aplican. Solo un 13,3% mencionó que los estudiantes la emplean “ocasionalmente” y ninguno afirmó
que “nunca” la usen. Esto evidencia que la identificación de ideas principales es una práctica común en
las clases y que la mayoría de los estudiantes están familiarizados con su importancia en la comprensión
de textos científicos.
La interpretación de estos datos sugiere que la estrategia de identificar las ideas principales ha sido bien
incorporada en las prácticas de lectura dentro del aula. El hecho de que no existan respuestas en la opción
“nunca” demuestra un compromiso generalizado por parte de los docentes y estudiantes en fortalecer
esta habilidad. Además, la frecuencia con que se utiliza esta estrategia apoya el desarrollo de una
comprensión más estructurada y profunda de los contenidos científicos, facilitando a los estudiantes el
análisis y la síntesis de información compleja.
pág. 1496
Los resultados muestran un consenso positivo sobre la influencia de las estrategias de lectura crítica en
el fomento del pensamiento autónomo de los estudiantes. El 73,3% de los docentes respondió estar “de
acuerdo” con esta afirmación, mientras que el 26,7% se manifestó “totalmente de acuerdo”. Es
importante destacar que no se registraron respuestas en las opciones “en desacuerdo” ni “totalmente en
desacuerdo”, lo cual refleja una percepción generalizada de que las estrategias de lectura crítica tienen
un impacto favorable en el desarrollo de habilidades de razonamiento y reflexión independiente en los
estudiantes.
Esta interpretación evidencia que los docentes reconocen el valor de la lectura crítica no solo como una
técnica para mejorar la comprensión de textos científicos, sino también como una herramienta clave
para formar estudiantes más autónomos y críticos. El hecho de que todos los participantes hayan
coincidido en su valoración positiva indica que fortalecer la enseñanza de estas estrategias podría tener
beneficios significativos no solo en el rendimiento académico, sino también en la capacidad de los
estudiantes para analizar información de manera independiente y tomar decisiones fundamentadas.
Los resultados de la encuesta revelan que la principal dificultad que enfrentan los estudiantes al aplicar
estrategias de lectura crítica en textos científicos es la falta de interés, señalada por el 73,3% de los
docentes. En menor medida, se reportaron problemas como la dificultad para identificar ideas
Los resultados muestran un consenso positivo sobre la influencia de las estrategias de lectura crítica en
el fomento del pensamiento autónomo de los estudiantes. El 73,3% de los docentes respondió estar “de
acuerdo” con esta afirmación, mientras que el 26,7% se manifestó “totalmente de acuerdo”. Es
importante destacar que no se registraron respuestas en las opciones “en desacuerdo” ni “totalmente en
desacuerdo”, lo cual refleja una percepción generalizada de que las estrategias de lectura crítica tienen
un impacto favorable en el desarrollo de habilidades de razonamiento y reflexión independiente en los
estudiantes.
Esta interpretación evidencia que los docentes reconocen el valor de la lectura crítica no solo como una
técnica para mejorar la comprensión de textos científicos, sino también como una herramienta clave
para formar estudiantes más autónomos y críticos. El hecho de que todos los participantes hayan
coincidido en su valoración positiva indica que fortalecer la enseñanza de estas estrategias podría tener
beneficios significativos no solo en el rendimiento académico, sino también en la capacidad de los
estudiantes para analizar información de manera independiente y tomar decisiones fundamentadas.
Los resultados de la encuesta revelan que la principal dificultad que enfrentan los estudiantes al aplicar
estrategias de lectura crítica en textos científicos es la falta de interés, señalada por el 73,3% de los
docentes. En menor medida, se reportaron problemas como la dificultad para identificar ideas
pág. 1497
principales (13,3%), la falta de tiempo (6,7%) y la dificultad para formular preguntas críticas (6,7%).
Este panorama sugiere que el desinterés de los estudiantes constituye una barrera significativa para el
desarrollo de habilidades de lectura crítica, por encima de las dificultades técnicas asociadas a la
comprensión y el análisis de los textos.
Esta interpretación resalta la necesidad de implementar estrategias pedagógicas más dinámicas y
motivadoras que logren captar la atención de los estudiantes hacia los textos científicos. Además, pone
en evidencia que, aunque existen desafíos en habilidades específicas como identificar ideas principales
o formular preguntas críticas, estos son secundarios frente al reto de fomentar una actitud de interés y
compromiso por parte del alumnado. Trabajar en la motivación podría ser, por tanto, un primer paso
clave para potenciar la eficacia de las estrategias de lectura crítica.
De acuerdo con los resultados de la encuesta, el 93,3% de los docentes considera que la lectura crítica
tiene un impacto positivo en la capacidad de los estudiantes para analizar y evaluar los argumentos en
los textos científicos, mientras que el 6,7% la percibe como de impacto muy positivo. No se registraron
respuestas que indiquen ausencia de impacto o impacto negativo, lo que refleja un consenso claro entre
los docentes sobre la efectividad de la lectura crítica como herramienta para fortalecer las competencias
analíticas de los estudiantes en el ámbito científico.
Esta tendencia sugiere que la lectura crítica no solo mejora la comprensión superficial del contenido,
sino que también impulsa el pensamiento evaluativo y reflexivo, habilidades fundamentales en la
formación académica de los estudiantes de bachillerato. Los resultados reafirman la importancia de
seguir promoviendo prácticas de lectura crítica en las aulas, pues contribuyen directamente a desarrollar
un razonamiento autónomo y una interpretación fundamentada de la información científica.
principales (13,3%), la falta de tiempo (6,7%) y la dificultad para formular preguntas críticas (6,7%).
Este panorama sugiere que el desinterés de los estudiantes constituye una barrera significativa para el
desarrollo de habilidades de lectura crítica, por encima de las dificultades técnicas asociadas a la
comprensión y el análisis de los textos.
Esta interpretación resalta la necesidad de implementar estrategias pedagógicas más dinámicas y
motivadoras que logren captar la atención de los estudiantes hacia los textos científicos. Además, pone
en evidencia que, aunque existen desafíos en habilidades específicas como identificar ideas principales
o formular preguntas críticas, estos son secundarios frente al reto de fomentar una actitud de interés y
compromiso por parte del alumnado. Trabajar en la motivación podría ser, por tanto, un primer paso
clave para potenciar la eficacia de las estrategias de lectura crítica.
De acuerdo con los resultados de la encuesta, el 93,3% de los docentes considera que la lectura crítica
tiene un impacto positivo en la capacidad de los estudiantes para analizar y evaluar los argumentos en
los textos científicos, mientras que el 6,7% la percibe como de impacto muy positivo. No se registraron
respuestas que indiquen ausencia de impacto o impacto negativo, lo que refleja un consenso claro entre
los docentes sobre la efectividad de la lectura crítica como herramienta para fortalecer las competencias
analíticas de los estudiantes en el ámbito científico.
Esta tendencia sugiere que la lectura crítica no solo mejora la comprensión superficial del contenido,
sino que también impulsa el pensamiento evaluativo y reflexivo, habilidades fundamentales en la
formación académica de los estudiantes de bachillerato. Los resultados reafirman la importancia de
seguir promoviendo prácticas de lectura crítica en las aulas, pues contribuyen directamente a desarrollar
un razonamiento autónomo y una interpretación fundamentada de la información científica.
pág. 1498
Los resultados muestran que el 100% de los docentes encuestados está de acuerdo en que la lectura
crítica puede mejorar la comprensión de metodologías científicas complejas. El 26,7% indicó estar "de
acuerdo", mientras que el 73,3% manifestó estar "totalmente de acuerdo", lo cual evidencia una
percepción altamente positiva sobre el papel que desempeñan las estrategias de lectura crítica en el
entendimiento de procesos científicos detallados y técnicos.
Esta unanimidad resalta que los docentes reconocen la lectura crítica no solo como un medio para
interpretar contenidos generales, sino también como una herramienta esencial para desentrañar
estructuras metodológicas, procedimientos y análisis presentes en los textos científicos. Esto subraya la
necesidad de integrar estrategias de lectura crítica de manera sistemática en la enseñanza, para fortalecer
las competencias de interpretación metodológica en los estudiantes de bachillerato.
Los resultados reflejan que la mayoría de los docentes (73,3%) considera que el análisis de casos
prácticos es la estrategia más adecuada para fortalecer la comprensión de textos científicos mediante la
lectura crítica. Un porcentaje menor propone la discusión en grupo (13,3%), mientras que el uso de
recursos audiovisuales y los ejercicios prácticos adicionales fueron mencionados solo por el 6,7% cada
uno. Esto indica una fuerte preferencia por métodos que conecten la teoría científica con situaciones
aplicadas, donde los estudiantes puedan interpretar y evaluar información en contextos reales.
Los resultados muestran que el 100% de los docentes encuestados está de acuerdo en que la lectura
crítica puede mejorar la comprensión de metodologías científicas complejas. El 26,7% indicó estar "de
acuerdo", mientras que el 73,3% manifestó estar "totalmente de acuerdo", lo cual evidencia una
percepción altamente positiva sobre el papel que desempeñan las estrategias de lectura crítica en el
entendimiento de procesos científicos detallados y técnicos.
Esta unanimidad resalta que los docentes reconocen la lectura crítica no solo como un medio para
interpretar contenidos generales, sino también como una herramienta esencial para desentrañar
estructuras metodológicas, procedimientos y análisis presentes en los textos científicos. Esto subraya la
necesidad de integrar estrategias de lectura crítica de manera sistemática en la enseñanza, para fortalecer
las competencias de interpretación metodológica en los estudiantes de bachillerato.
Los resultados reflejan que la mayoría de los docentes (73,3%) considera que el análisis de casos
prácticos es la estrategia más adecuada para fortalecer la comprensión de textos científicos mediante la
lectura crítica. Un porcentaje menor propone la discusión en grupo (13,3%), mientras que el uso de
recursos audiovisuales y los ejercicios prácticos adicionales fueron mencionados solo por el 6,7% cada
uno. Esto indica una fuerte preferencia por métodos que conecten la teoría científica con situaciones
aplicadas, donde los estudiantes puedan interpretar y evaluar información en contextos reales.
pág. 1499
Este resultado sugiere que los docentes valoran estrategias activas y contextualizadas para fomentar el
pensamiento crítico en torno a textos científicos. El análisis de casos prácticos no solo permite aplicar
conceptos, sino también promueve habilidades como la argumentación y la resolución de problemas,
esenciales para una lectura crítica eficaz. Así, se reafirma la importancia de integrar actividades prácticas
que complementen las técnicas tradicionales de lectura crítica en el bachillerato.
DISCUSIÓN DE RESULTADOS
La implementación de estrategias de lectura crítica en la enseñanza de textos científicos muestra un
compromiso significativo por parte de los docentes encuestados, con el 86,7% de los participantes
utilizando estas estrategias de manera frecuente. Este hallazgo resalta el reconocimiento generalizado
de la importancia de desarrollar habilidades de lectura crítica en los estudiantes, especialmente en el
contexto académico donde la comprensión profunda de textos científicos es esencial. Sin embargo, la
observación de que la mayoría de los docentes indica una frecuencia de "frecuentemente" en lugar de
"siempre" sugiere que, aunque estas estrategias son consideradas importantes, podrían no ser aplicadas
de manera sistemática en todas las lecciones. Esto podría indicar la necesidad de fomentar la integración
continua de prácticas de lectura crítica en el currículo académico, asegurando que cada actividad de
lectura científica incluya análisis críticos detallados.
Entre las estrategias de lectura crítica más utilizadas, la elaboración de resúmenes y la formulación de
preguntas destacan como las más frecuentes, mientras que la identificación de ideas principales y la
evaluación de argumentos tuvieron una presencia menor. La preferencia por estrategias como la
elaboración de resúmenes refleja una tendencia hacia técnicas que faciliten la organización y
comprensión global del contenido. Sin embargo, la escasa atención hacia estrategias más profundas,
como la evaluación de argumentos y evidencias, sugiere que aún existen oportunidades para mejorar el
enfoque crítico en el aula. El énfasis en la formulación de preguntas y resúmenes muestra un enfoque
orientado a la comprensión activa, pero sería beneficioso incorporar técnicas que promuevan un análisis
más exhaustivo de los textos científicos.
Los docentes también valoran positivamente las estrategias de lectura crítica en términos de su impacto
sobre el pensamiento autónomo de los estudiantes, con un 73,3% de ellos de acuerdo en que estas
estrategias fomentan la reflexión independiente. Este resultado resalta la importancia de la lectura crítica
Este resultado sugiere que los docentes valoran estrategias activas y contextualizadas para fomentar el
pensamiento crítico en torno a textos científicos. El análisis de casos prácticos no solo permite aplicar
conceptos, sino también promueve habilidades como la argumentación y la resolución de problemas,
esenciales para una lectura crítica eficaz. Así, se reafirma la importancia de integrar actividades prácticas
que complementen las técnicas tradicionales de lectura crítica en el bachillerato.
DISCUSIÓN DE RESULTADOS
La implementación de estrategias de lectura crítica en la enseñanza de textos científicos muestra un
compromiso significativo por parte de los docentes encuestados, con el 86,7% de los participantes
utilizando estas estrategias de manera frecuente. Este hallazgo resalta el reconocimiento generalizado
de la importancia de desarrollar habilidades de lectura crítica en los estudiantes, especialmente en el
contexto académico donde la comprensión profunda de textos científicos es esencial. Sin embargo, la
observación de que la mayoría de los docentes indica una frecuencia de "frecuentemente" en lugar de
"siempre" sugiere que, aunque estas estrategias son consideradas importantes, podrían no ser aplicadas
de manera sistemática en todas las lecciones. Esto podría indicar la necesidad de fomentar la integración
continua de prácticas de lectura crítica en el currículo académico, asegurando que cada actividad de
lectura científica incluya análisis críticos detallados.
Entre las estrategias de lectura crítica más utilizadas, la elaboración de resúmenes y la formulación de
preguntas destacan como las más frecuentes, mientras que la identificación de ideas principales y la
evaluación de argumentos tuvieron una presencia menor. La preferencia por estrategias como la
elaboración de resúmenes refleja una tendencia hacia técnicas que faciliten la organización y
comprensión global del contenido. Sin embargo, la escasa atención hacia estrategias más profundas,
como la evaluación de argumentos y evidencias, sugiere que aún existen oportunidades para mejorar el
enfoque crítico en el aula. El énfasis en la formulación de preguntas y resúmenes muestra un enfoque
orientado a la comprensión activa, pero sería beneficioso incorporar técnicas que promuevan un análisis
más exhaustivo de los textos científicos.
Los docentes también valoran positivamente las estrategias de lectura crítica en términos de su impacto
sobre el pensamiento autónomo de los estudiantes, con un 73,3% de ellos de acuerdo en que estas
estrategias fomentan la reflexión independiente. Este resultado resalta la importancia de la lectura crítica
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no solo como una herramienta para la comprensión, sino también como un medio para fortalecer
habilidades de razonamiento autónomo. La unanimidad en cuanto al impacto positivo de la lectura
crítica sobre la capacidad de analizar y evaluar argumentos en textos científicos subraya la efectividad
de estas estrategias en la formación de estudiantes críticos, capaces de interpretar información de manera
profunda y fundamentada.
Finalmente, la dificultad más común que enfrentan los estudiantes al aplicar estrategias de lectura crítica
es la falta de interés, lo que destaca como un desafío clave a superar. Este hallazgo señala que, aunque
los docentes implementan estrategias efectivas, la motivación estudiantil sigue siendo un factor
determinante en el éxito de las actividades de lectura crítica. Para abordar este desafío, sería fundamental
desarrollar estrategias pedagógicas más dinámicas que no solo enfoquen la comprensión, sino que
también fomenten el interés y la participación activa de los estudiantes. Esto podría mejorar la eficacia
de las estrategias de lectura crítica y contribuir al desarrollo de competencias analíticas más profundas
en los estudiantes de bachillerato.
CONCLUSIÓN
La lectura crítica se ha demostrado como una habilidad esencial en la formación académica de los
estudiantes de bachillerato, especialmente al enfrentarse a textos científicos. Los resultados de este
estudio subrayan la importancia de desarrollar estrategias de lectura crítica que vayan más allá de la
simple comprensión, permitiendo a los estudiantes evaluar, cuestionar y analizar profundamente la
información. A través de estrategias como la formulación de preguntas y la elaboración de resúmenes,
los estudiantes no solo comprenden mejor el contenido, sino que también desarrollan habilidades
cognitivas fundamentales, como el pensamiento autónomo y la capacidad de argumentación.
Sin embargo, los hallazgos revelan que, aunque la mayoría de los docentes emplea estrategias de lectura
crítica con frecuencia, estas no siempre se implementan de manera sistemática en todas las lecciones.
Esto sugiere que, si bien existe un reconocimiento generalizado de la importancia de estas estrategias,
es necesario integrar de forma continua y más estructurada el análisis crítico en el currículo académico.
De este modo, se aseguraría que los estudiantes se beneficien plenamente de estas herramientas en su
proceso de aprendizaje.
no solo como una herramienta para la comprensión, sino también como un medio para fortalecer
habilidades de razonamiento autónomo. La unanimidad en cuanto al impacto positivo de la lectura
crítica sobre la capacidad de analizar y evaluar argumentos en textos científicos subraya la efectividad
de estas estrategias en la formación de estudiantes críticos, capaces de interpretar información de manera
profunda y fundamentada.
Finalmente, la dificultad más común que enfrentan los estudiantes al aplicar estrategias de lectura crítica
es la falta de interés, lo que destaca como un desafío clave a superar. Este hallazgo señala que, aunque
los docentes implementan estrategias efectivas, la motivación estudiantil sigue siendo un factor
determinante en el éxito de las actividades de lectura crítica. Para abordar este desafío, sería fundamental
desarrollar estrategias pedagógicas más dinámicas que no solo enfoquen la comprensión, sino que
también fomenten el interés y la participación activa de los estudiantes. Esto podría mejorar la eficacia
de las estrategias de lectura crítica y contribuir al desarrollo de competencias analíticas más profundas
en los estudiantes de bachillerato.
CONCLUSIÓN
La lectura crítica se ha demostrado como una habilidad esencial en la formación académica de los
estudiantes de bachillerato, especialmente al enfrentarse a textos científicos. Los resultados de este
estudio subrayan la importancia de desarrollar estrategias de lectura crítica que vayan más allá de la
simple comprensión, permitiendo a los estudiantes evaluar, cuestionar y analizar profundamente la
información. A través de estrategias como la formulación de preguntas y la elaboración de resúmenes,
los estudiantes no solo comprenden mejor el contenido, sino que también desarrollan habilidades
cognitivas fundamentales, como el pensamiento autónomo y la capacidad de argumentación.
Sin embargo, los hallazgos revelan que, aunque la mayoría de los docentes emplea estrategias de lectura
crítica con frecuencia, estas no siempre se implementan de manera sistemática en todas las lecciones.
Esto sugiere que, si bien existe un reconocimiento generalizado de la importancia de estas estrategias,
es necesario integrar de forma continua y más estructurada el análisis crítico en el currículo académico.
De este modo, se aseguraría que los estudiantes se beneficien plenamente de estas herramientas en su
proceso de aprendizaje.
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Es relevante destacar que la elaboración de resúmenes y la formulación de preguntas son las estrategias
más utilizadas por los docentes, lo que refleja un enfoque hacia la comprensión global del contenido.
No obstante, la escasa atención hacia estrategias más profundas, como la evaluación de argumentos y
evidencias, muestra que existe un margen considerable para promover un análisis más exhaustivo de los
textos científicos. La incorporación de estas técnicas contribuiría a mejorar la calidad del análisis crítico
y profundizaría la comprensión de los estudiantes.
Por último, la falta de interés por parte de los estudiantes representa el principal desafío en la aplicación
efectiva de las estrategias de lectura crítica. Este factor debe ser abordado mediante el diseño de
estrategias pedagógicas más dinámicas y motivadoras, que fomenten la participación activa y el
compromiso de los estudiantes con el proceso de lectura. Solo así se podrán consolidar los beneficios
de la lectura crítica, ayudando a los estudiantes a desarrollar competencias analíticas que serán cruciales
tanto en su vida académica como en su desempeño profesional y ciudadano.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Galeano-Sánchez, N., & Ochoa-Angrino, S. (2022). Estrategias para el mejoramiento de la comprensión
lectora de textos argumentativos en la escuela secundaria. Íkala, revista de Lenguaje y
Cultura, 27(2), 504-526.
Burgos, G. D. C. V., Granda, L. M. G., & Suarez, S. V. C. (2024). Estrategias efectivas para mejorar la
comprensión lectora en estudiantes universitarios: Un enfoque basado en la
investigación. Ciencia y Educación, 5(12), 108-121.
Chipantiza Urquizo, J. R. (2024). Lectura crítica en la comprensión de textos argumentativos en los
estudiantes de décimo año de la Unidad Educativa 17 de Abril.
Guzmán López, L. E. (2024). Propuesta de mejora a la compresión de la lectura crítica de microcuentos
en estudiantes de décimos años de la Unidad Educativa Isabel de Godín, Riobamba–Ecuador
2024.
Ramos López, J. C. (2024). Estándar de prueba de la medida de aseguramiento en Colombia¿ Es la
inferencia razonable un estándar preciso, univoco y claro para la imposición de medidas de
aseguramiento?.
Es relevante destacar que la elaboración de resúmenes y la formulación de preguntas son las estrategias
más utilizadas por los docentes, lo que refleja un enfoque hacia la comprensión global del contenido.
No obstante, la escasa atención hacia estrategias más profundas, como la evaluación de argumentos y
evidencias, muestra que existe un margen considerable para promover un análisis más exhaustivo de los
textos científicos. La incorporación de estas técnicas contribuiría a mejorar la calidad del análisis crítico
y profundizaría la comprensión de los estudiantes.
Por último, la falta de interés por parte de los estudiantes representa el principal desafío en la aplicación
efectiva de las estrategias de lectura crítica. Este factor debe ser abordado mediante el diseño de
estrategias pedagógicas más dinámicas y motivadoras, que fomenten la participación activa y el
compromiso de los estudiantes con el proceso de lectura. Solo así se podrán consolidar los beneficios
de la lectura crítica, ayudando a los estudiantes a desarrollar competencias analíticas que serán cruciales
tanto en su vida académica como en su desempeño profesional y ciudadano.
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