El docente universitario y sus competencias en
el proceso de la enseñanza
Freddy Chipana Limachi
Facultad del Desarrollo Rural y Territorial – UMSS
RESUMEN
El estudio desarrollado sobre el dominio conceptual de la formación docente, las competencias de los docentes en el proceso enseñanza, se enmarcó dentro el enfoque cualitativo y corresponde a un estudio descriptivo/correlacional y en cuanto al método específico: Estudio de casos. Los resultados dejan evidencia que hay un exiguo manejo conceptual, así como la prescripción u omisión por desconocimiento en la dinamicidad y dialogo de la labor que desarrollan los docentes, sin percatarse de las implicancias conceptuales en la práctica educativa. Ese desconocimiento de los conceptos inherentes al desarrollo de la educación con calidad, se hace evidente en la exigüidad del dominio de las competencias genéricas, específicas y transversales de los docentes, dificultando el desempeño profesional y ejercicio docente con pertinencia, efectividad y eficacia. En definitiva, la dinámica del quehacer educativo en la universidad impone y exige cambios paradigmáticos y epistemológicos que implica reflexionar en los conceptos de formación del docente, y hacer de ella en un ente que no solo transmita conocimientos, sino que sea orientador y mediador en la construcción autónoma de conocimientos de los estudiantes, así como también en el desarrollo de habilidades, competencias, valores y actitudes del futuro profesional.
Palabras clave: formación docente; docente universitario; competencias; proceso enseñanza – aprendizaje.
The university professor and his competences in
the teaching process
The study developed on the conceptual domain of teacher training, the competencies of teachers in the teaching process, was framed within the qualitative approach and corresponds to a descriptive/correlational study and in terms of the specific method: Case study. The results leave evidence that there is a meager conceptual management, as well as the prescription or omission due to ignorance in the dynamism and dialogue of the work carried out by teachers, without realizing the conceptual implications in educational practice. This lack of knowledge of the concepts inherent to the development of quality education is evident in the exiguity of mastery of generic, specific and cross-cutting skills of teachers, hindering professional performance and teaching practice with relevance, effectiveness and efficiency. In short, the dynamics of the educational task at the university imposes and demands paradigmatic and epistemological changes that implies reflecting on the concepts of teacher training, and making it an entity that not only transmits knowledge, but is also a guide and mediator in teaching. autonomous construction of students' knowledge, as well as in the development of skills, competencies, values and attitudes of the future professional.
Keywords: teacher training; university teacher; competencies; teaching learning process.
Artículo recibido: 15 enero 2022
Aceptado para publicación: 08 febrero 2022
Correspondencia: f.chipana@hotmail.com
Conflictos de Interés: Ninguna que declarar
INTRODUCCIÓN
Abordar la dinámica del proceso de enseñanza – aprendizaje es irrumpir en una actividad humana compleja, evolutiva y con muchas aristas, desde los conceptos inherentes a ella, así como la misma práctica. Esa complejidad reviste la importancia de reflexionar sobre dicho proceso y los conceptos inherentes a la educación superior (universitario), considerando que se ha incrementado en los últimos años acciones de evaluación y acreditación de las universidades en el contexto boliviano, con la finalidad de elevar la calidad educativa y corresponder con pertinencia a las demandas de la sociedad.
En ese contexto una de las aristas, tal vez la de mayor importancia, es la labor que desempeña el docente y ésta va ligada a conceptos teóricos y prácticos de formación y dominio de competencias profesionales en el rol de la enseñanza, pues los docentes deben estar preparados para adaptarse a los cambios continuos en el campo de la ciencia y el conocimiento, así como en el dominio de competencia para ejercitar un mejor rol en la enseñanza. Por otro lado, es importante reflexionar que la formación docente tiene que ser permanente, constituye en un derecho, un compromiso para todo docente y una responsabilidad para quienes administran la institución educativa. Promover la formación de los docentes en la nómina de problemas que enfrenta la educación superior, ayudará a resolver los problemas acuciantes que enfrenta el sistema universitario para cumplir con el encargo social en la formación de profesionales al servicio de la sociedad con pertinencia, calidad y dotados de valores.
Si se hace una mirada en retrospectiva a través de la historia de la educación, es posible advertir que el desarrollo de la formación de docente no ha alcanzado aún satisfacer demanda que exige el sistema educativo. En la actualidad, la formación docente para el catedrático universitario, exige dominio de los saberes concernientes a su rama y/o especialidad, en lo posible relacionado a los nuevos saberes a través de la investigación original, pero nada de formación pedagógica.
Es así, que un primer problema es la confusión entre formación académica y formación pedagógica. En el contexto de la educación superior en Bolivia, siempre que se habla de actualización o formación del docente universitario, lo primero que se piensa, es actualizar al docente en los nuevos conocimientos de su especialidad para estar acorde a los avances de la ciencia. El interés de los docentes es ponerse al día, a través de la capacitación ajustados a su especialidad. Entonces casi todas las actividades y acciones organizadas en las universidades bajo el lema de actualización y/o capacitación docente, persigue sólo objetivos de fortalecimiento profesional en su especialidad y no en el ámbito didáctico pedagógico.
Otro problema que debe considerar con seriedad es que la profesionalización docente del docente universitario es que muy pocos tienen dedicación exclusiva a la enseñanza, pues muchos docentes son universitarios que ejercen la profesión en la que se titularon. Entonces cuando dichos profesionales ingresan a la docencia universitaria, lo hacen por razones como: el prestigio de ser docente universitario, el interés de acceder a becas de perfeccionamiento, etc. Pero no para ejercitar con excelencia la labor docente.
El rol del docente en la universidad es dinámico. Su labor, comienza en el momento de la programación y la planificación del acto pedagógico, y se convierte complejo en el momento en que debe explicar o aclarar, en ser guía y agente motivador del proceso de aprendizaje. Por ello no es posible pasar por alto que la importancia que tiene el docente en el proceso de la enseñanza – aprendizaje, pues el docente es el encargado de fortalecer la programación del trabajo diario. Esto implica ejercitar en el docente universitario un cambio de actitud y compromiso, para llevar adelante su labor como docente con pertinencia y asertividad.
Entonces se requiere un cambio en el actuar del docente universitario, un cambio en su cultura profesional y todo que se refiere e incluye la labor docente, sin embargo, ese cambio es muy lento o casi nulo todavía. Esa lentitud o inexistencia debe ser superada a nivel personal y colectivo. Dichos cambios ayudarán a cambiar la universidad, pues docentes actualizados, con formación permanente y debidamente contextualizados a la realidad donde trabajan reportará en la educación calidad y pertinencia. De manera concreta, es por demás urgente determinar aspectos teóricos y prácticos que dificulta concretar el anhelo de contar con un plantel docente altamente calificado, con visión integral capaz de encarar una enseñanza eficaz y eficiente.
Así, es posible afirmar que, en la actualidad, es cada vez más imperativo la necesidad de contar con docentes debidamente capacitados para responder la demanda lograr personas adecuadamente formadas y capacitadas culturalmente, preparados para aportar en desarrollo local y nacional; un profesional competente para comprender las problemáticas del contexto y aceptar el desafío de ser un aporte en el desarrollo y la evolución de los ideales que la sociedad se plantea y demanda.
Lo expuesto evidencia que el proceso educativo es la herramienta para alcanzar individuos capacitados, donde los principales protagonistas son: el estudiante y el docente que cumple la función de ser el facilitador, estimulador y motivador del aprendizaje. Dicho de otro modo, el proceso de enseñanza – aprendizaje es la integración de lo instructivo y lo educativo; donde lo instructivo es el proceso que permite y presenta como resultado la formación de personas capaces e perspicaces. En tanto que lo educativo promueve formación en valores y emociones que identifican a las personas como un ser social; lo educativo también consigue la mejora de convicciones, la voluntad y otros elementos de la esfera volitiva y afectiva que junto con la cognoscitiva permiten concretar la finalidad del proceso educativo, formar de manera multilateral la personalidad del hombre. (Fernández, 1994).
Dentro ese marco, profundizar el análisis y comprensión de la dinámica y el dominio de las competencias para la enseñanza en la labor docente se reviste de importancia, porque permitirá ahuyentar apreciaciones, juicios y prejuicios que los actores educativos han construido respecto al tema. Teniendo en cuenta que “… la educación verdadera es praxis, reflexión y acción del hombre sobre el mundo para transformarlo”. (Freire, 1997:7). Esto permite visualizar y considerar de manera seria y comprometida que la formación del docente universitario en el ámbito didáctico – pedagógico debe ser un proceso continuo para estimular y fortalecer la labor docente para hacer de ella una actividad evolutiva, renovada cada vez en el uso de las técnicas y estrategias didácticas, facilitando de ese modo el proceso de la enseñanza-aprendizaje.
También, es pertinente puntualizar que el termino competencia puede conceptualizarse a partir de las palabras de Perrenoud (1999) como las capacidades de actuar de una persona de manera eficaz frente a una situación y definirse como la capacidad de que es sustentada por un cumulo de conocimientos. Lo que permite deducir que la competencia profesional del docente en el proceso de la enseñanza es más que una tarea, implica un nivel conocimientos, capacidades prácticas y cognitivas, actitudes y aptitudes, entre otras. Por otro lado admite relacionar conceptos teóricos y prácticos en la labor docente, considerando su formación profesional y las competencias en el proceso de la enseñanza, que puede ser graficado de la siguiente forma:
Finalmente, el documento presenta los resultados y conclusiones a los que arriba el estudio, esto para dilucidar y ejercitar nuevos estudios, considerando lo que se ha avanzado y lo que aún queda para investigar.
MATERIALES Y MÉTODOS
Toda investigación inicia con el planteamiento del problema, objetivos y preguntas de investigación, estas últimas son las que dan sentido al proceso de investigación. Entonces el estudio estuvo concentrado en responder a las siguientes preguntas de investigación planteadas en su diseño.
§ ¿Cuál es nivel de dominio y manejo de las competencias genéricas, específicas y transversales de los docentes?
§ ¿Cómo influye el dominio de las competencias de los docentes en el proceso de la enseñanza y aprendizaje?
§ ¿Cuál es la conceptualización teórica – práctica de las competencias entre los docentes y su aplicación en la cotidianidad?
La investigación se enmarcó dentro el estudio descriptivo/correlacional y en cuanto al método específico: Estudio de casos. Con la intención de identificar, relacionar y describir las competencias profesionales de los docentes en el proceso de la enseñanza, así como el diálogo y la dinamicidad que ejercita en la práctica educativa las competencias generales, específicas y trasversales, con la finalidad de dilucidar su importancia en el quehacer educativo, conocer el nivel o profundidad de los estudios realizados en el ámbito de la educación superior.
Se considera población de estudio, según Tamayo y Tamayo (1997) al total de las unidades que conforman la población y que comparten características comunes que los identifica y hace distinta de otra. Por ello y dado a las características que debieran poseer la población sujeta a estudio, los sujetos de estudio (población) con la que trabajó el estudio estuvo conformada por 44 docentes de la Facultad del Desarrollo Rural y Territorial de la Universidad Mayor de San Simón, los mismos que se encuentran desempeñando sus labores académicas en los diferentes niveles (semestres) que cursan los estudiantes.
Entre los métodos, técnicas, tratamientos, mediciones, usados para recolectar la información, se utilizó.
El método: Estudio de Caso, un método de investigación utilizado por su relevancia en la comprensión del desarrollo de las ciencias humanas y sociales, pues se caracteriza por ejercitar un proceso de indagación y exploración sistemática y en profundidad de casos de un fenómeno, permitiendo la obtención de conocimientos íntegros y específicos de fenómenos, hechos y problemas en el ámbito educativo.
Las técnicas que se utilizó en el presente estudio fueron:
a. Observación participante: técnica que facilitó en el estudio la oportunidad de revisar y visualizar expresiones no verbales, ayuda a determinar la interacción entre los sujetos en la población de estudio, al mismo tiempo permite comprender cómo los participantes establecen sistemas de comunicación entre ellos en un contexto y tiempo determinado. Como dice Taylor y Bogan: “la investigación que involucra la interacción social entre el investigador y los informantes en el medio de los últimos,…” (2000:36).
La observación participante como técnica de recolección de datos, ha sido escogida por su flexibilidad en el abordaje y profundización del “… conocimiento del problema de investigación…”. (Bautista, 2011: 164), referido a la cotidianidad de la población de estudio.
Esta técnica fue operativizada a través de una Guía de Observación, la misma que se constituyó en el instrumento de recolección de información para el estudio desarrollado.
b. Entrevista enfocada: técnica que ha permitido obtener información a partir del diálogo entre: el investigador y los entrevistados (población sujeta a estudio).
La entrevista ha permitido tomar contacto con el discurso de los docentes que ha dejado en evidencia la mirada, posicionamiento y análisis sobre la realidad, del tema estudiado.
Dentro ese contexto, es importante mencionar que la guía de entrevista fue de carácter semi-estructurada, además de enfocarse específicamente en la temática del estudio abordado, y en las unidades de análisis y los objetivos planteados para el proceso investigativo (Bisquerra, 1989).
c. La encuesta: en la investigación social, la encuesta es considerada como una técnica de recogida de datos a través de la interrogación a los sujetos parte de la investigación, con la finalidad de obtener de manera sistemática deducciones sobre los conceptos que resultan del problema, los objetivos y las unidades de análisis previstos para el proceso de investigación previamente. Entonces, la recogida de datos se realizó a través de un cuestionario (instrumento de recogida de los datos) que se administró a la población de estudio, con una principal característica: el anonimato del sujeto (docente).
Esta técnica fue el medio que fortaleció la aplicación de los otros instrumentos, la observación participante y la entrevista.
Posteriormente, para el análisis e interpretación de los datos se estableció categorías atendiendo al tema planteado en la investigación. Además de ejercitar la estrategia de análisis de datos fue la triangulación que facilitó la validez y rigor en los datos.
RESULTADOS
Los resultados del proceso de investigación son posibles de ser expuestos tras la conclusión del proceso de recojo de datos, su análisis y reflexión; todo con la ayuda de las técnicas y los instrumentos aplicados a la población de estudio. Debido a que la investigación se concentró inicialmente en establecer el manejo conceptual de los docentes sobre: formación docente, docente universitario y sus competencias. Posteriormente a explorar el diálogo y dinamicidad de dichos conceptos siendo ejercitados en la práctica educativa que desarrollan los docentes en la Facultad del Desarrollo Rural y Territorial en la Universidad Mayor de San Simón.
Los resultados son presentados en dos momentos, el primero que expone el manejo conceptual de los docentes de las unidades de análisis; y el segundo momento el diálogo y dinamicidad que dichos conceptos son ejercitados en la práctica educativa.
Primer momento – manejo conceptual
Los resultados obtenidos en el primer momento de la investigación, se presenta siguiendo el orden de las técnicas y sus respectivos instrumentos en que fueron recogidos y como fue planificado.
a. La observación participante: permitió advertir que los conceptos son una forma de cómo un individuo refleja su realidad, a partir de conocimientos sobre un determinado fenómeno y/o proceso, también puede considerarse que es una representación mental muy individualiza, puesto que su origen está relacionado con los conocimientos, realidad y el contexto donde el individuo vive su experiencia individual, laboral, cultural, social, etc.
Dado que los conceptos son personales y muy subjetivos, sólo en combinación con las otras dos técnicas puede dejar evidente que la labor docente y su formación no debe ser entendida como un juicio imaginario (teórico) abstracto, alejado de realidad, o muy restringido a un salón de clases, sino más bien con significación practica expresado en la realidad, trascendiendo lo cognoscitivo con la finalidad de mejorar la función docente, deduciendo que el docente participa en el contenido práctico de la enseñanza como en su formación pedagógica, donde el uso de su motivación y compromiso con la labor educativa; en el afán ayudar a formar habilidades intelectuales y prácticas de los estudiantes.
b. La entrevista enfocada, arrojó los siguientes resultados respecto a la conceptualización de:
§ Formación docente: El cien por ciento de los docentes de la facultad se han esforzado y limitado en definir la “formación docente”, no así en conceptualizar. Coincidiendo con la frase “yo creo que quiere decir que uno debe ser un buen profesional, aquel que quiere ser docente”.
Esa apreciación teóricamente exime al docente en la universidad de su formación pedagógica y en competencias, vale decir de no actualizarse en conocimientos, y perfeccionar habilidades, destrezas, actitudes y aptitudes para la investigación, el desarrollo, la innovación y al mismo tiempo ejercer su labor con pertinencia y efectividad.
§ Docente universitario: Esbozada la pregunta presentada a los docentes ¿Cuál es el concepto sobre Docente Universitario? Las respuestas más relevantes fueron:
§ “Es el profesional que instruye a los estudiantes en la universidad …”
§ “Son los formadores de los profesionales en la universidad … ”
§ “Son profesores de los universitarios …”
De dichas repuestas es posible establecer que los docentes de la facultad tienen una exigua conceptualización del “docente universitario”, pues hace posible considerar que al docente universitario no se le asigna o exige la comprensión de que la universidad es el nivel donde se forma los futuros profesionales especializados en alguna área para servir a la sociedad, además que también se le exime de una consolidación personal y profesional para la enseñanza con principios y valores, en ética y responsabilidad, que puedan ser visualizados en el aporte significativo en el desarrollo de la sociedad.
Competencias: Las respuestas a la pregunta ¿Cómo conceptualizan el término competencia en la labor docente?
Las respuestas fueron muy elementales, ligado a la expresión común saber hacer, por otro lado, también fue confundido con el acto de competir, aspecto que no está mal porque es una de las primeras concepciones sobre el término, sin embargo, es importante señalar que el termino en el ámbito educativo y en esencia de la labor docente la competencia implica la relación entre formación teórica y la puesta en práctica de las características peculiares inherentes al docente las mismas son: la motivación, las formas de comportamiento, el auto concepto, los conocimientos, las destrezas motoras y cognitivas entre otras. Entonces un docente competente tendría que exhibir en teoría y la práctica un repertorio de recursos cognitivos y motores para evidenciar el potencial de ser un educador.
En definitiva, es exiguo, poco claro y preciso el concepto sobre las “competencias” en la función de la labor docente.
c. El cuestionario presenta las siguientes apreciaciones de los docentes:
Formación docente: Las respuestas a la consulta si los docentes tuvieron formación pedagógica para ejercitar la labor educativa, fue unánime en indicar que “no tuve formación pedagógica para ser docente”. Sin embargo, desarrollan todos los días la labor docente con el propósito de formar a los estudiantes en los diferentes ámbitos donde se desarrolla la práctica pedagógica, estas pueden ser: salón de clases, laboratorios, trabajo de campo, etc.
Fuente: Elaboración propia.
El Grafico 1, evidencia que no ha habido formación docente, y que sólo el 9% de los docentes han accedido a un Diplomado en Educación Superior, se deduce del grafico que todos los docentes son profesionales en el área de su formación y no en el campo educativo.
Docente universitario: Respecto a la consulta sobre el concepto sobre el Docente Universitario, las respuestas fueron las mismas presentadas en la entrevista.
Competencias: Los resultados al cuestionario aplicado a la población de estudio, arrojó los mismos resultados de la entrevista.
Segundo momento – dinamicidad y el dialogo de los conceptos en la práctica del desarrollo del proceso de la enseñanza.
El acto educativo es el momento en el que el docente y los estudiantes tienen el encuentro personal, momento en que ambos exhiben saberes, comportamientos, actitudes, destrezas y habilidades respecto a un tema, donde el docente es el agente motivador del aprendizaje de los estudiantes. Entonces el acto de la enseñanza, así como el aprendizaje es un dialogo dinámico en el proceso de la enseñanza y los resultados tras el proceso investigativo se exponen a continuación.
a. La observación participante, ha permitido aproximarse a la verificación de la puesta en práctica los conceptos inherentes al estudio, así puede se puede aseverar que la actividad que ejercitan los docentes tienen las siguientes características.
Los docentes, presentan dificultades en:
§ El manejo y conocimiento de la didáctica general, los principios, leyes, así como los componentes esenciales del proceso enseñanza aprendizaje y las funciones didácticas de la clase, parece trivial la necesidad del conocimiento de la didáctica para algunos docentes, predomina la creencia que pueden lograr resultados sin tener que preparase en fundamentos didácticos – pedagógicos.
§ Caracterizar a los estudiantes, pues no presta atención a los diferentes estilos de aprendizajes y tiene dificultades en atender casos particulares y con ello los intereses y motivaciones, ritmo de aprendizaje de los estudiantes.
§ En la planificación, programación y las orientaciones metodológicas de la asignatura.
§ El docente descuida tomar en cuenta que la clase forma parte del sistema de la facultad y su relación con las otras asignaturas del plan de estudio.
§ Exhibición del lenguaje científico de la asignatura y poca comprensión de este por parte de los estudiantes
§ Dominio y cientificidad de los contenidos, el docente poco actualizado con los contenidos de su asignatura.
§ Motivación durante toda la clase y el desarrollo de la asignatura.
§ El uso del sistema de evaluación, no siempre corresponde a lo planificado.
§ La selección y tratamiento de los temas a desarrollarse en clases, así como en el tratamiento de los problemas que surgen en la dinámica del acto educativo.
§ La organización y secuencia del acto educativo, porque se pudo observar desaciertos en el manejo de criterios lógicos y los criterios pedagógicos en el desempeño de su labor.
§ La organización de la asignación de funciones a los docentes, pues muchos docentes no están desempeñándose en el área de su especialidad.
§ La planificación y organización del desarrollo de las asignaturas no tienen un formato modelo, cada docente lo prepara de acuerdo a su criterio.
En definitiva, es posible aseverar que la labor docente está siendo menguado por el exiguo manejo de los conceptos inherentes a la labor docente, lo que es evidente en su actuación y desempeño en el proceso educativo, pues la mayoría reproduce el actuar de los que fueron sus docentes mientras ellos eran estudiantes, un aspecto negativo en el proceso, sumado a ello también se ha podido observar que muchos docentes no actualizan el contenido de las asignaturas que dictan.
b. La entrevista enfocada, ha permitido colectar las siguientes declaraciones y las más relevantes son:
§ “Estoy aprendiendo a ser docente …”
§ “En la facultad y también la universidad no hay plan de capacitación para los docentes, ni siquiera talleres de capacitación para saber en qué nos estamos equivocando en esto que es la labor docente. …”
§ “No hay tiempo, andamos recargados porque tengo que atender mi otro trabajo”.
§ “Estoy esperando mi jubilación, entonces creo no hay mucho interés para capacitaciones, así no más …”
§ “Ya son 25 años que sirvo como docente, mi pregunta es ¿será que pueden en enseñarme a enseñar?, así he hecho mi trabajo durante todo el tiempo que estoy aquí en la facultad …”
§ “… lo que más me interesa es todo aquello relacionado con mi profesión, porque pienso que el docente deber quien dé el ejemplo de cómo se hacen las cosas …”
§ “Sostener que hay con una directriz o modelo para la planificación y organización del desarrollo de las asignaturas, es complicado porque cada uno planifica y organiza la materia a dictar, claro que esto es fundamentado en la autonomía universitaria”.
De las declaraciones es posible asumir que los docentes de la facultad manifiestan por interés en alcanzar excelencia docente con formación y actualización docente, así también como un pequeño reclamo a las instancias administrativa la falta de apoyo en el mejoramiento de la labor docente a partir de promover formación y actualización docente.
c. Los resultados obtenidos con el cuestionario tiene mucha coincidencia con la entrevista y los resultados de la observación, además de evidenciar lo siguiente:
§ Los docentes soslayan los pasos previos a la planificación de una asignatura: Diagnostico – Identificación – Programación – Ejecución – Evaluación .
§ Hay coincidencia en que no se tiene un modelo para planificar las clases y el desarrollo de la asignatura.
§ Las clases se planifican en base a un silabo y nada más, esto lo hace cada uno a su criterio.
En definitiva, explorado la dinamicidad y el dialogo de los conceptos en la práctica del desarrollo del proceso de la enseñanza, donde el docente juega un rol preponderante se ha podido advertir que es repetidamente prescrita u omitido por los docentes, tal vez sin percatarse por el desconocimiento de las implicancias conceptuales y su importancia en la práctica educativa. Ese desconocimiento de los conceptos de formación docente, docente universitario y sus competencias se hace evidente en la exigüidad del dominio de las competencias genéricas, específicas y transversales de los docentes en la Facultad del Desarrollo Rural y Territorial, dificultando el desempeño profesional y ejercicio docente con pertinencia, efectividad y eficacia.
DISCUSIÓN
La conceptualización y la puesta en práctica de los términos: formación docente, docente universitario y competencias, es exigua, porque los docentes no han alcanzado la formación pedagógica para ejercitar la labor docente con pertinencia y solvencia, la gran mayoría de los docentes se limitan en reproducir el comportamiento de los que fueron sus docentes en su formación profesional, a ello se suma el descuido personal e institucional para mejorar la conceptualización de los términos que implican el ejercicio de labor docente en el proceso de la enseñanza.
Esa incomprensión y desidia es apremiante subsanar, a partir del diseño y activación de un plan de contingencia para inducir a conceptualizar e internalizar en los docentes aquellos conceptos inherentes a la labor docente, esencialmente lo referido a las competencias y lo que ello implica, siendo que el termino competencia implica una categorización para su mejor comprensión antes de trasladar a la practica en el proceso de la enseñanza. Se asevera esto porque los docentes, manifestaron desconocimiento conceptual a cerca de la categorización del término competencia, que bien puede ser visto de la siguiente manera:
§ Competencias generales, aquellas que corresponden a los conocimientos y actitudes personales del docente, podría decirse que son las que configuran los requisitos o condiciones mínimas para la selección de un docente. Estas están relacionadas con las asignaturas que dictan y el trabajo en equipo con los colegas docentes.
§ Competencias específicas, aquellas que son parte fundamental para llevar adelante el proceso de enseñanza – aprendizaje, son las estimula en los docentes la búsqueda e identificación y al mismo tiempo permitirá distinguir al docente las mejores estrategias de enseñanza. Además de ayudar a reflexionar al docente sobre su realidad y la realidad de las características individuales y grupales de los estudiantes, que participan del proceso enseñanza – aprendizaje.
§ Competencias transversales, se considera como las responsables de presentar el valor agregado en el proceso de enseñanza – aprendizaje. Relacionado directamente con la capacidad metacognitiva, autocrítica y reflexiva del docente.
De lo expuesto resalta la necesidad de optimizar la labor del docente para formar personas capaces de responder con pertinencia, efectividad y eficacia a los requerimientos que la sociedad demanda. Para esto, la capacitación en el dominio de las competencias de los docentes es un proceso de vital importancia, pues permitirá el mejoramiento de la calidad del producto y servicio que la universidad oferta a la sociedad. Pues la tarea que se demanda a la universidad, es que ofrezca a la sociedad profesionales altamente capacitados que aporten conocimientos, trabajo y sean capaces de promover desarrollo, con responsabilidad, competencia y compromiso, eso sólo será posible con docentes debidamente cualificados en el cumplimiento de su labor y misión. Docentes que continuamente respondan a las interrogantes: ¿Cuál es nuestra visión cómo docente? ¿Cómo me ven los demás? ¿Quién soy? ¿Soy el docente ideal? ¿Cuáles son los valores y convicciones que orientan mi actuación como docente?
En definitiva, es imperativo operativizar el reto de lograr que los docentes alcancen, comprendan y asuman el compromiso de dominar las competencias precisas para ejercitar mejor su rol en el proceso de la enseñanza – aprendizaje. Esto permitirá contar con docentes que dinamicen la transformación en el salón de clases, desarrollando métodos, técnicas de enseñanza innovadoras y creativas, favoreciendo situaciones de aprendizaje y proveyendo material coherente a las exigencias del acto pedagógico.
CONCLUSIÓN
La dinámica del quehacer educativo en la universidad ha interpuesto y exige cambios paradigmáticos y epistemológicos que implica reflexionar en la formación del docente, y hacer de ella en un ente que no solo transmita conocimientos, sino que sea orientador y mediador en la construcción autónoma de conocimientos de los estudiantes, así como también en el desarrollo de habilidades, competencias, valores y actitudes del futuro profesional.
En conclusión, se requiere:
§ Intentar una comprensión de la actual discusión sobre calidad educativa, que involucra reflexionar sobre los conceptos de competencias en la formación docente, ¿cómo esas concepciones tienen su influencia en el acto educativo? y ¿de qué manera incide en los actuales desafíos educacionales formar profesionales que respondan a los requerimientos y necesidades de la sociedad?
§ Pensar en calidad educativa es reflexionar en una tarea dinámica que aún tiene un significado incompleto, esto requiere de acciones que ayuden a mejorar su conceptualización, explicación y difusión. Por tanto, es ineludible dilucidar la necesidad de responder a la interrogante: ¿cuál la importancia de las competencias en la formación docente y en el ejercicio de la labor docente en la optimización del proceso de enseñanza – aprendizaje?
§ La discusión sobre la formación docente, exige una aproximación inicial en su conceptualización, dilucidar ¿qué significado tiene educar con y para la creatividad? Es decir, reflexionar en cómo se desarrolla el proceso de la enseñanza en los salones de clase con relación a la pertinencia.
§ ¿Hay crisis en la teoría del conocimiento que subyace en el debate sobre las competencias en formación docente y su puesta en práctica en el ejercicio de la labor docente? Si se admite que existe crisis de la teoría del conocimiento, esto es un segundo desafío de la propuesta para ofertar una posible solución.
Finalmente, se asume que los alcances y desafíos propuestos adquieren un carácter reflexivo y transitorio, constituyéndose en una aproximación educativa que tiene la finalidad de orientar y contribuir la comprensión e internalización sobre los conceptos de competencias en ejercicio de la labor docente.
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