DETERMINAR EL NIVEL DE
CONOCIMIENTOS DE LOS PADRES Y SU
RELACIÓN CON EL ESTADO DE SALUD
BUCAL EN NIÑOS.

DETERMINE THE LEVEL OF KNOWLEDGE OF PARENTS

AND ITS RELATIONSHIP WITH THE ORAL HEALTH

STATUS OF CHILDREN

Luz Karina Ramírez Dueñas

Centro de Investigación Educativa y Formación Docente (CIEFD)

Itza-Bé Canul Alejo

Unidad Médica Familiar Num.57 y 7 del IMSS

Itzel Gutiérrez Gabriel

Unidad Médica Familiar Num.57 y 7 del IMSS

Adán Sergio Bonilla

Unidad Médica Familiar Num.57 y 7 del IMSS

María Nalleli Torres Gutiérrez

Investigación Educativa y Formación Docente IMSS

Liliana Yamilleth Hernández Villagómez

Investigación Educativa y Formación Docente IMSS
pág. 775
DOI:
https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v9i5.19731
Determinar el nivel de conocimientos de los padres y su relación con el
estado de salud bucal en niños.

Luz Karina Ramírez Dueñas
1
luzkramirez@gmail.com

luz.ramirezd@imss.gob.mx

https://orcid.org/0000-0003-4690-9618

Directora del Centro de Investigación Educativa
y Formación Docente (CIEFD) del Instituto
Mexicano del Seguro Social (IMSS), Delegación
Puebla. Calle 35 Norte número 1456, Col. Villa
San Alejandro. Código postal 72070. Puebla,
Puebla, México.

Itza-Bé Canul Alejo

itzabe@hotmail.com

https://orcid.org/0009-0006-6347-888X

Médico Especialista en Medicina Familiar
Puebla, Puebla, México.

Itzel Gutiérrez Gabriel

itzel.qutierrez@imss.gob.mx

https://orcid.org/0000-0002-7036-1579

Coordinadores clínicos de educación e
Investigación en Salud de la Unidad Médica
Familiar Num.57 y 7 del IMSS respectivamente,
Delegación Puebla, Avenida Fidel Velázquez 42
sur S/N Col. Infonavit La Margarita. Código
Postal 72560. Puebla, Puebla, México.

Adán Sergio Bonilla

adan
55921@gmail.com
https://orcid.org/0009-0004-2233-0286

Coordinadores clínicos de educación e
Investigación en Salud de la Unidad Médica
Familiar Num.57 y 7 del IMSS respectivamente,
Delegación Puebla, Avenida Fidel Velázquez 42
sur S/N Col. Infonavit La Margarita. Código
Postal 72560. Puebla, Puebla, México.

María Nalleli Torres Gutiérrez

r2nallelitorres@gmail.com

https://orcid.org/0000-0002-8426-135x

Centro de Investigación Educativa y Formación
Docente IMSS. Profesora becada al CIEFD
Delegación Puebla Calle 35 Norte número 1456,
Col. Villa San Alejandro. Código postal 72070.
Puebla, puebla, México. Teléfono 222 23 02 659

Liliana Yamilleth Hernández Villagómez

yamsvi22@gmail.com

http://orcid.org/0009-0000-1875-0377

Medico Pasante en Servicio Social adscrita al
Centro de Investigación Educativa y Formación
Docente IMSS. Delegación Puebla Calle 35
Norte número 1456, Col. Villa San Alejandro.
Código postal 72070. Puebla, puebla, México.

1
Autor principal
Correspondencia:
luzkramirez@gmail.com
pág. 776
RESUMEN

La salud bucal infantil depende en gran medida del conocimiento y supervisión de los cuidadores. La
falta de información puede llevar a hábitos inadecuados, contribuyendo al desarrollo de caries dental.
Este estudio tuvo como objetivo evaluar el nivel de conocimiento de los padres y su relación con la
salud bucal de los niños de la UMF 57 entre junio y noviembre de 2019. Se realizó un estudio
observacional, transversal y analítico, en 311 niños. Se aplicó el cuestionario “Nivel de conocimiento
de salud bucal de niños preescolares”, el odontograma del Instituto Mexicano del Seguro Social y la
escala de Graffar. Como resultado la mayoría de los informantes fueron madres (81.4 %), con una
edad promedio de 30.7 años DE (± 6.29). Escolaridad de predominó la educación técnica (51.8 %). El
56.6 % de los padres presentó un nivel bueno de conocimiento en salud bucal, mientras que el 53.1 %
de los niños presentó caries dental. Al aplicar la prueba T de Student se halló una relación significativa
(p = 0.30) entre el conocimiento de los padres y el estado de salud bucal infantil. Se concluyo que
existe relación entre el conocimiento parental y la salud bucal de los niños.

Palabras clave: odontología, higiene, educación sanitaria, salud.
pág. 777
Determine the level of knowledge of parents and its relationship with the

oral health status of children

ABSTRACT

Children's oral health depends largely on the knowledge and supervision of caregivers. Lack of

information can lead to poor habits, contributing to the development of dental caries. This study aimed

to evaluate parents' level of knowledge and its relationship with the oral health of children at UMF 57

between June and November 2019. An observational, cross
-sectional, and analytical study was
conducted with 311 children. The questionnaire "Level of Oral Health Knowledge in Preschool

Children," the Mexican So
cial Security Institute odontogram, and the Graffar scale were applied. The
majority of respondents were mothers (81.4%), with an average age of 30.7 years (SD ± 6.29).

Technical education predominated (51.8%). 56.6% of parents had a good level of oral health

knowledge, while 53.1% of children had dental caries. A significant relationship (p = 0.30) was found

between parental knowledge and children's oral health using the Student t
-test. It is concluded that
there is a relationship between parental knowledg
e and children's oral health.
Keywords
: dentistry, hygiene, health education, health
Artículo recibido 09 agosto 2025

Aceptado para publicación: 13 septiembre 2025
pág. 778
INTRODUCCIÓN

En el mundo, existen un sinfín de enfermedades, sin embargo una de las que más alta prevalencia tiene
son las afines a la cavidad bucal, entre ella la más común es la caries dental, en México de acuerdo con
el programa de acción específico sobre prevención, detección y control de los problemas de salud
bucal específicamente en los menores de 5 años uno de cada tres niños tiene caries severa, siendo esta
la enfermedad crónica más frecuente en la primera década de la vida afectando a más del 60% de
niños en nuestro país (Leal Fonseca & Hernández Molinar, 2016). (1)

En el IMSS, la caries constituye una de las cinco primeras causas de consulta en el primer nivel de
atención. (Zohrabian et al., 2015). (2)

Visto de esta forma, el médico familiar es pieza fundamental para la prevención, detección y
canalización oportuna de estas patologías al ser considerado el primer contacto de los pacientes a
programas de salud, sin embargo, esta patología en ocasiones tiende a ser pasada desapercibida por los
padres por falta de conocimiento ocasionando retraso en el tratamiento de manera oportuna, lo cual
concluye en complicaciones en los niños.

El Instituto mexicano del seguro social se cuenta además con el programa PREVENIMSS que tiene
como objetivo colocar en las unidades de medicina familiar módulos en donde se realizan prácticas de
prevención de enfermedades dentales como aplicación de flúor de manera anual, a realizar el cepillado
correctamente y uso de hilo dental (Zohrabian et al., 2015). (2)

La salud bucal a lo largo de nuestra existencia ha cobrado importancia debido a que se ha observado
que el conservar un adecuado estado de higiene ha prevenido diversas enfermedades que afectan al ser
humano, sin embargo, en la actualidad la caries dental es la enfermedad con más prevalencia a nivel
mundial ubicándola como un problema de salud pública de alto impacto (Leal Fonseca & Hernández
Molinar, 2016). (1)

Esta enfermedad ha sido relacionada con diversos factores predisponentes en primer lugar la mala
higiene dental, la dieta cariogénica, el nivel socioeconómico, sexo, etcétera, los cuales al conjuntarse
conducen a la presencia de la enfermedad desde edades tempranas de la vida (Leal Fonseca &
Hernández Molinar, 2016). (1)

La relación que existe entre padres- hijos representa una función importante, ya que desde pequeños el
pág. 779
aprendizaje es por imitación, el adquirir hábitos de higiene es en su mayoría una tarea que los padres
deben realizar desde el nacimiento de sus hijos para poder adquirir este conocimiento. (Martínez
Abreu et al., 2014). (3)

Sin embargo, es sabido que la falta de conocimiento sobre higiene dental, dieta cariogénica y el no
hacer uso de servicios institucionales como medicina preventiva, entre otros, representa una limitante
para evitar la aparición de diversas enfermedades en los niños, en primer lugar de caries dental, la cual
si no es tratada oportunamente, ocasionará problemas graves de salud. En México, el Sistema
Nacional de Vigilancia Epidemiológica de patologías bucales 2012, determinó que la caries dental
afecta a más del 60% de los niños y adolescentes en México.

Por lo anterior, se tiene como objetivo encontrar la asociación entre la presencia de caries dental en
niños y su relación con el grado de conocimiento del responsable de su cuidado, con el fin de buscar
áreas de oportunidad para poder realizar acciones de mejora en salud infantil.

La medicina y la odontología se han desarrollado simultáneamente a lo largo de la historia, uniéndose
por la presencia de la enfermedad, dolor y la necesidad de alivio; desde tiempos remotos el hombre ha
tenido la necesidad de buscar métodos para la preparación de los alimentos, sin embargo, conforme ha
ocurrido la evolución de la alimentación se han presentado distintas enfermedades en la cavidad oral,
se observó que con ciertos alimentos algunos dientes se caían o las encías se inflamaban llegando a
deducir que la alimentación era la causa de estas enfermedades. (Leal Fonseca & Hernández Molinar,
2016). (1)

La boca, embriológicamente se desarrolla desde la cuarta semana de gestación, la diferenciación de la
mandíbula y la cara sucede entre la semana 8 a 4. (Zohrabian et al., 2015). (2)

Por otro lado, la odontogénesis es de dos tipos: la dentición primaria, 20 dientes (de leche) y la
secundaria o permanente 32 dientes, cada diente se desarrollará y erupcionará en un momento
específico, sin embargo, el patrón de crecimiento es similar en todos los humanos. (Kliegman et al.,
2016; Zohrabian et al., 2015). (2,4)

La dentadura primaria tiene su primera erupción de los 5 a 7 meses de edad, siendo primero los
incisivos centrales, seguidos de los incisivos laterales a los 8 meses, caninos y primeros molares a los
16 meses y los segundos molares a los 20 a 30 meses, en cuanto a la dentición permanente comienza a
pág. 780
los 7 -8 años de edad con la erupción de los incisivos centrales, seguido de los laterales de los 8 a 9
años de edad, posteriormente tenemos la salida de caninos a los 11 años, después primer molar a los 11
años, segundo premolar a los 10 a 12 años y el tercer molar de 17 a 21 años de edad. (Kliegman et al.,
2016). (4)

Los dientes de la mandíbula y el maxilar se encuentran incrustado en una cresta ósea de forma similar
a una herradura que se conoce como proceso alveolar, esta cresta ósea también es conocida como arco
dental. La parte del diente que se encuentra expuesta en la cavidad oral se denomina corona
anatómica, y la parte del diente incrustada se denomina raíz, la mayor parte del diente está compuesto
por dentina, sin embargo, la superficie externa está cubierta por esmalte liso y denso y la parte externa
de la raíz se encuentra cubierta por cemento denso que es un tejido muy similar al hueso (Zohrabian et
al., 2015). (2)

El concepto de salud se refiere al estado completo de bienestar físico, mental y social y no únicamente
como la ausencia de enfermedades, la salud es un derecho fundamental de todo ser humano sin
distinción de religión, raza, ideología política, condición económica y/o social, la salud entonces es
fundamental para lograr en toda la población, paz y seguridad, en el caso específico de los niños es de
suma importancia ya que la capacidad de poder vivir en un mundo cambiante es indispensable para
poder desarrollarse de manera adecuada. (G. R. Martínez & Albuquerque, 2017; OMS, 2014). (5,6)

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) la salud bucal se define como “La
ausencia de dolor oro facial crónico, cáncer bucal o garganta, úlceras bucales, defectos congénitos
como labio leporino o paladar hendido, enfermedades periodontales, caries dental, pérdida de dientes,
así como otras enfermedades y trastornos que afectan la cavidad bucal” (OMS, 2014; Secretaría de
Salud, 2013). (6,7)

Basándose en los fundamentos mencionados, nos podemos acercar a definir el significado de la salud
bucal, que no implica enfocarse en la boca misma, si no en la persona y las vías en la que las
enfermedades están relacionadas con esta estructura las cuales amenazan a la salud, el bienestar y la
calidad de vida (Martínez Abreu et al., 2014; Secretaría de Salud, 2013). (3,7)

Actualmente las enfermedades orales más comunes son: caries dental, gingivitis y la periodontitis
crónica; afectando a 3,9 billones de personas en el mundo (Contreras Rengifo, 2016). (8)
pág. 781
En México, en los niños menores de cinco años, la caries dental puede ocasionar efectos devastadores
como dolor intenso, infecciones, desnutrición, trastornos en el desarrollo del habla, trastornos
gastrointestinales, y baja autoestima, de acuerdo a las cifras del Sistema Nacional de Vigilancia
Epidemiológica de patologías bucales 2012 uno de cada tres niños que recibe atención primaria tiene
caries severa, convirtiéndola entonces en la enfermedad crónica más común en la primera década de la
vida, afectando a más del 60% de los niños y adolescentes en México. En el Estado de Puebla, el
índice de Dientes cariados en niños con dentición temporal fue menor al menor o igual a 4 (Secretaría
de Salud, 2013). (7)

La familia es un elemento activo y mediador de relaciones de los individuos con la sociedad, siendo
este el componente fundamental para el desarrollo del proceso de formación de un individuo como ser
activo y creador (Capote Fernández & Campello Trujillo, 2012). (9)

La importancia de la familia en el cuidado y conservación de la salud bucal es fundamental, ya que en
ella se establecen y trasmiten hábitos y costumbres que permanecen en el individuo para toda la vida
(Capote Fernández & Campello Trujillo, 2012). (9)

Desde el siglo XVIII, diversos pedagogos ilustres han estudiado sobre la importancia del desarrollo
ulterior del niño desde edad temprana y a la familia como la parte fundamental de la educación de los
hijos, los primeros años los pequeños pasan la mayor parte del tiempo con las madres, convirtiéndose
ella en la principal protagonista de la educación del niño, tomándola como ejemplo, adquiriendo
normas y hábitos necesarios para toda la vida.

Dentro de esta perspectiva se han relacionado los conocimientos, actitudes y prácticas de salud bucal
con la salud de los niños, encontrando factores asociados a la salud bucal como son: baja escolaridad
de los padres, el nivel socioeconómico bajo y el que los niños se queden al cuidado de terceras
personas como abuelos o cuidados por las largas jornadas de trabajo de los padres, también se ha visto
relación cuando existe antecedente de problemas de salud bucal de los miembros de la familia, el tener
más de 4 hijos, la disfuncionalidad familiar, así como las familias monoparentales (Pausa Carmenate
& Suárez Hernández, 2015). (10)

La consulta de índole dental en México es proporcionada por el sector público y privado, el Instituto
Mexicano del Seguro Social ofrece el Programa de Acción específico “Prevención, Detección y
pág. 782
Control de los Problemas de Salud Bucal 2013-2018” (Secretaría de Salud, 2017). (11)

Las principales acciones incluyen: el cepillado dental, el uso de seda dental, dentífricos y enjuagues
antibacterianos, que son acciones básicas de salud que sin duda disminuyen la incidencia de
enfermedades orales (Contreras Rengifo, 2016). (8)

La profilaxis oral es la base para la salud oral, el remover la placa dental de manera diaria y constante,
específicamente para remover la “placa bacteriana” que es la principal causa de caries y gingivitis, el
método más comúnmente utilizado para eliminar la placa es el cepillado dental (Hayasaki et al., 2014;
Rizzo Rubio et al., 2016). (12,13)

El tiempo de duración del cepillado es un factor crítico que afecta la eficacia en la eliminación de la
placa bacteriana dental, inclusive se ha propuesto que la principal causa de higiene oral deficiente es
que el tiempo de cepillado es demasiado corto, sin embargo en un aspecto difícil de cambiar, se ha
demostrado que el mayor efecto del cepillado para reducción de la placa se logra pasados 30 a 45
segundos de cepillado por cuadrante, variando los tiempos de 120 segundos en Estados unidos a 180
segundos en Europa (Hayasaki et al., 2014). (12)

La técnica más adecuada para el cepillado es la técnica de Bass, para esta técnica se necesita un
cepillado de cerdas suaves para evitar la abrasión de la estructura dental y también la encía marginal
por trauma directo, esta técnica consiste en que el cepillo se coloca en un ángulo de 45 grados con
respecto al eje longitudinal del diente; los filamentos del cepillo se introducen en los nichos
interdentales y el surco gingival, al estar ahí se realizan pequeños movimientos vibratorios y después
un movimiento de barrido hacia oclusal. Con esta técnica está limitada la limpieza de las superficies
oclusales (Rizzo Rubio et al., 2016). (13)

La dieta de una persona tiene una influencia en su estado nutricional y simultáneamente repercute en
la salud oral, ya que, de acuerdo con los alimentos, la cantidad y calidad de ellos se tendrá un efecto a
nivel dental. Por otro lado, la cavidad oral como parte del sistema gastrointestinal influye en el proceso
de digestión de los alimentos, un ejemplo sería la ausencia de piezas o alguna enfermedad periodontal,
las cuales pueden provocar dificultad al paciente para realizar una masticación adecuada, haciendo que
el paciente tenga preferencia por cierto grupo de alimentos o determinadas preparaciones, los cuales
pueden tener bajo nivel de nutrientes y repercutir sistémicamente a largo plazo.
pág. 783
En relación con la evidencia del consumo de hidratos de carbono se ha demostrado su relación con el
desarrollo de caries dental. Otro punto importante es la lactancia materna, ya que una deficiencia
nutricional puede ocasionar hipoplasia dental, por lo tanto, los dientes serán más susceptibles a caries;
también se debe evitar la costumbre de dar alimentos azucarados a los lactantes como chupones,
bebidas y fórmulas; en edad escolar la ingesta de dulces entre comidas y aquellos que se adhieren a los
dientes se deben evitar en medida de lo posible (Secretaría de Salud, 2013). (7)

Existen factores de riesgo asociados al desarrollo de patología de la cavidad oral, en específico para
caries dental, a continuación, se mencionan los más relevantes:

Factores familiares: familias numerosas, familias monoparentales.

Factores sociales: Bajo nivel de ingresos, bajo nivel de instrucción de los padres o cuidadores,
bajo nivel de conocimientos en educación para la salud e inadecuadas políticas de servicios de salud
(Mayor Hernández et al., 2014). (14)

Baja frecuencia o mala técnica en cepillado dental.

Amamantamiento o alimentación nocturna

Falta de higiene bucal por la noche (Aguilar Ayala et al., 2014). (15)

El más asociado: dieta cariogénica (Escalona et al., 2015). (16)

La gingivitis resulta de la acumulación de placa bacteriana en la región cervical de los dientes y su
extensión apical a lo largo del diente, esta enfermedad se caracteriza por enrojecimiento o inflamación
de las encías, mismas que sangran con facilidad al contacto, más frecuentemente asociado al momento
del cepillado dental, ocasionando de forma crónica una separación entre los espacios dentales
llamados bolsas, que pueden llegar a ulcerarse permitiendo así el paso de bacterias y virus al torrente
sanguíneo (López Silva et al., 2017). (17)

La caries dental es la enfermedad infecciosa más frecuente en el mundo, su etiología microbiana está
asociada con el grupo de bacterias de nombre Streptococci mutans, de las especies mutans y sobrinus,
así como lactobacillus y actinomices, las cuales forman parte del microbiota oral.

La fisiopatología de la caries dental se esquematiza en 3 etapas, la primera etapa es la unión inicial del
microorganismo al esmalte, mediado por interacciones entre antígeno y proteínas salivales que forman
la película adquirida, la segunda etapa es en donde se presenta una acumulación de microorganismos
pág. 784
conformando un complejo de ecosistema microbiano a través de la producción de las enzimas
gluconiltransferasas, que sintetizan glucanos solubles e insolubles a partir de sacarosa por proteínas
fijadoras de glucanos, esto favorece la adhesión de microorganismos cariogénicos a la superficie del
diente, como resultado se produce la tercera etapa en donde se produce ácido láctico, el cual
desmineraliza la superficie del diente, por último si este proceso es crónico, se genera la pérdida de
tejido mineral que da lugar a cavitaciones formándose el signo patognomónico de la enfermedad
(Calle Sánchez et al., 2018). (18)

La gravedad de esta enfermedad en la dentición primaria consiste en el difícil diagnóstico, que puede
desencadenar complicaciones más graves como invasión a hueso, abscesos o sepsis (Calle Sánchez et
al., 2018). (18)

Se ha comprobado en diversos estudios que el nivel de conocimiento de los cuidadores de niños en
cuanto a salud bucal está relacionado con el nivel de gravedad de caries, además la detección oportuna
del médico familiar es fundamental para la canalización con el estomatólogo, el detectar los factores
relacionados con la aparición de caries y relacionarlos con el nivel de conocimiento de los cuidadores
nos ayuda a identificar las áreas susceptibles a intervenir para prevenir este padecimiento y así evitar
complicaciones en la población, por lo que nos interesa responder la siguiente pregunta: ¿Cuál es la
relación que existe entre el nivel de conocimiento de los padres y el estado de salud bucal en menores
de 5 años?

METODOLOGÍA

Se realizó un estudio observacional, relacional, transversal, ambispectivo, Analítico. En población
derechohabiente de niños y niñas de 3 a 5 años de edad que acuden a consulta externa ambos turnos,
en la UMF No. 57 IMSS Puebla, durante el periodo de 1° de junio al 30 de noviembre de 2019. Se
excluyeron aquellos pacientes con limitaciones mentales, diagnóstico de alteraciones genéticas,
alteraciones anatómicas, así como aquellos que no deseen participar.

Una vez registrado el protocolo en SIRELCIS se solicitó la autorización a las autoridades
correspondientes de la UMF 57 IMSS Puebla, Puebla, para la realización de las encuestas a los padres
de niños de 3 a 5 años que acudieron a la UMF No 57, se realizó la encuesta a los padres y a los niños
se les realizó una revisión de la cavidad bucal.
pág. 785
Se utilizó el instrumento de estudio: conocimientos de los padres de salud bucal en niños preescolares,
método creado por la Dra. Ana Cecilia Cupé Araujo y Carmen Rosa García Gupaya, en el año 2015,
utilizado para medir el nivel de conocimientos sobre la salud bucal en padres y madres de niños de
edad preescolar (Cupé Araujo & García-Rupaya, 2015). (19)

El instrumento es un test de 20 preguntas cerradas divididas en 4 rubros: caries, prevención, dieta y
salud bucal. La corroboración adicional resulta al aplicar una escala de calificación según el Ministerio
de Educación AD: MUY BUENO: 18 A 20 Puntos, BUENO: de 15 a 17 puntos, REGULAR: 11 a 14
puntos, MALO: 0 a 10 puntos.

Posteriormente se aplicó el formato MF 7- 2000 para medir el nivel de Salud Bucal se utilizó el
formato del instituto Mexicano del Seguro Social, mismo que consta de datos sociodemográficos de
cada paciente, dentro de este se encuentra la odontograma con el que se evalúa la salud bucal del
paciente, A-G para dientes temporales, con el siguiente significado:

Clave de llenado
Significado
A
Sano
B
Cariado
C
Obturado y Cariado
D
Obturado
E
Ausente por caries
F
Sellante, barniz, cariado
G
Sobre corona o corona
Posterior a la recolección los valores de las mediciones se codificaron los mismos y se elaboró una
base de datos en el Programa Estadístico SPSS v.25 para Windows. Para la estadística descriptiva
utilizaremos moda, media y mediana, para la estadística inferencial utilizaremos T student en donde se
asoció el nivel de conocimiento y el estado de salud bucal de los niños, rechazando H0 si p es menor
de 0.05.
pág. 786
RESULTADOS Y DISCUSIÓN

El presente estudio contemplo una muestra de 311 niños que cumplieron con los criterios de inclusión
establecidos para la investigación, los cuales los padres o cuidadores brindaron información con los
siguientes resultados. Respecto a la edad del informante se encontró UNA media de 30.7 con DE±
6.929 años, la edad mínima fue de 18 años, la edad, máxima de 65 años

El familiar o cuidador responsable de responder a las preguntas llevadas a cabo en esta investigación
fue en más elevado porcentaje madres con 81.4 % (n=253) y el restante padres en 18.6% (n=58)

Respecto a la escolaridad de los informantes se encontró que la mayoría tiene educación técnica 51.8%
(n=161) y en menor porcentaje escolaridad nula con 1.6% (n=5).

Referente al estado civil del informante se encontró que la mayoría se encuentra casado 44.4 %
(n=138). Mediante la escala de Graffar se estableció el nivel socioeconómico de los encuestados en
donde 53.1% (n=165) tienen un nivel medio. Todos estos resultados se muestran a detalle a
continuación en la tabla 1.

Tabla 1: Características sociodemográficas de los padres o cuidadores

Variables
Indicadores n %
Escolaridad
Ninguna 5 1.6
Primaria
11 3.5
Secundaria
82 26.4
Técnica
161 51
Bachillerato
41 136.2
Universidad
11 3.5
Estado civil
Soltero 84 27
Casado
138 44.4
Unión Libre
89 28.6
Nivel socioeconómico
Alto 4 1.3
Medio Alto
97 31.2
Medio
165 53.1
Obrero
45 14.5
Total
311 100
Fuente: Encuesta “nivel de conocimiento y estado de salud bucal en niños”

De una muestra de 311 pacientes, encontramos que la media de edad es de 4.18 años con una
pág. 787
Desviación Estándar de ± 0.763 años. Acorde al sexo de los niños la mayoría fueron masculinos
56.3% (n=175), mientras que el 43.7% (n=136) del sexo femenino.

Respecto al nivel de conocimiento sobre salud bucal, se encontró que los informantes tienen en su
mayoría un nivel de conocimiento bueno con 56.6 % (n=176) y únicamente el 1.0 (n=3) obtuvo el
nivel malo.

Tabla 2: Nivel de conocimiento de salud bucal

Nivel de conocimiento
n %
Muy bueno
79 25.4
Bueno
176 56.6
Regular
53 17.0
Malo
3 1.0
Total
311 100
Fuente: Encuesta “nivel de conocimiento y estado de salud bucal en niños”

En relación con la variable sobre el estado de salud bucal se encontró que la mayoría de los niños
tienen caries dental 53.1 (n=165).

Tabla 3: Estado de salud bucal

Estado de salud bucal
N %
Sano
100 32.2
Cariado
165 53.1
Obturado y cariado
1 0.3
Obturado
35 11.3
Ausente por caries
10 3.2
Total
311 100
Fuente: Encuesta “nivel de conocimiento y estado de salud bucal en niños”

La relación encontrada entre el nivel de conocimiento de los padres y el estado de salud bucal de los
niños se muestra en el siguiente cuadro en donde p tiene un valor de .003, lo cual indica que el
conocimiento si infiere en el estado de salud del niño.
pág. 788
Tabla 4: Nivel de conocimiento de los padres y estado de salud bucal de los niños de 3 a 5 años.

Promedio nivel
de conocimiento

T
P
Estado de Salud
Bucal

Sano
16.87
Cariado
16.26 3.010 .003
Fuente: Encuesta “nivel de conocimiento y estado de salud bucal en niños”

En un estudio realizado en Perú se utilizó un instrumento que mide el conocimiento sobre salud bucal,
en madres y padres de niños que acudían a Instituciones educativas en zonas urbano marginales, el
cuestionario generado se tituló “Conocimientos de los padres de Salud Bucal de niños preescolares se
analizaron las respuestas de 311 padres con el análisis factorial, con base en lo anterior, en el presente
estudio, se aplicó el cuestionario “Conocimiento de los padres de Salud Bucal de niños preescolares” a
311 niños de 3 a 5 años de edad en la consulta externa de la UMF No 57 en Puebla.

En un artículo en donde se publicó una investigación realizada en Perú, se determinó el nivel de
conocimiento en salud oral relacionada a la calidad de la higiene oral de la población escolar de 9 a 12
años de edad en una institución educativa durante el año 2012, ahí se realizó un estudio de tipo
observacional, descriptivo y transversal, la muestra estuvo conformada por 76 escolares ,la
distribución del sexo fue de 39 mujeres (51.3 % ) y 37 hombres (48.7 % ) , mientras que en nuestro
estudio encontramos una distribución de igual manera predominantemente el sexo femenino con un
56.3% y 43.7% del sexo masculino (Ávalos Márquez et al., 2015). (20)

En un grupo de investigación en cuba, se realizó un estudio experimental en el año 2014- 2015 tipo
intervención con pre prueba y pos prueba, con el objetivo de evaluar el nivel de conocimiento sobre
anomalías dento-maxilofaciales en padres o tutores y educadoras de los niños de cuarto y quinto año
de vida en una provincia, en este estudio se observa que la mayoría de los padres o tutores responsable
tenía una edad entre 30 a 34 años (30.93%) mientras que en nuestro estudio observamos que la
mayoría tiene 33 años, con una edad máxima de 65 años y una mínima de 18 años, se observa también
que la distribución de la escolaridad de los responsables para el estudio mencionado previamente fue
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en su mayoría nivel universitario 80 (82.47 %), mientras que en nuestro estudio 161 personas tienen
educación técnica es decir el 51.8% (Chalet et al., 2017). (21)

En el año 2012 en Paraguay un grupo de trabajo investigó sobre el nivel de conocimiento y la salud
bucal en preescolares, su objetivo fue interrelacionar el estado de salud bucal y el nivel de
conocimientos de higiene bucal que tienen sus madres, fueron evaluados 221 niños en 8 escuelas
elegidas por muestreo probabilístico, referente al estado de salud bucal se reporta que a menos el 43%
presenta piezas cariadas y el 49% presenta piezas dentales sanas, por otra parte en nuestro estudio se
muestra que la mayoría presenta piezas con caries 53.1 % y el 32.2% presenta caries dental (Gaona et
al., 2016). (22)

En Ecuador se realizó un estudio para determinar el nivel de conocimiento de higiene oral en las
madres su influencia en la salud bucodental en sus hijos de 0 a 3 años, resultado que la mayoría de las
madres tiene un nivel de conocimiento bajo (55%), mientras que el nuestro estudio encontramos en la
mayoría un nivel bueno 176 (56.6%) y el nivel malo únicamente en 3 personas (1 %) (Pilozo et al.,
2016). (23)

En un estudio de tipo observacional, descriptivo, prospectivo y transversal, que se realizó para
determinar la asociación entre el nivel de conocimiento en salud bucal de las madres y el índice de
higiene oral (IHO) de sus hijos de 3 a 5 años, cuya muestra estuvo conformada por 89 parejas se
encontró significancia estadística que demuestra que si hay relación con un valor de P: 0.002 así como
en nuestro estudio se demuestra con un valor de P: .003 que el nivel de conocimiento si infiere en la
salud bucal de los niños (Ruiz García & Campos Campos, 2017). (24)

En un estudio realizado en Cartagena Un total de 333 padres y ocho cuidadores de hogares infantiles,
durante 2010, diligenciaron encuestas y entrevistas de grupos focales. En los padres se observaron
buenos niveles de conocimientos (58,9%) y actitudes favorables (74,5%). Para las prácticas, 50,6% de
los niños duermen con los dientes cepillados y 69,6% de los padres colocan el dentífrico sobre el
cepillo. En los cuidadores, se perciben actitudes positivas para desarrollar estrategias promocionales,
pero consideran que los padres son los principales responsables de implementar hábitos orales
saludables (F. G. Martínez et al., 2011). (25)

En un estudio realizado en CENDI de centro de Villahermosa, Tabasco con el fin de Conocer el nivel
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de conocimiento de salud bucal de padres y/o cuidadores, se incluyó padres/cuidadores de niños en
etapa lactante. (50 lactantes y 30 padres/cuidadores). Concluyo que el 2% de los padres tiene nivel
moderado de conocimientos de salud, la mayoría delegan cuidado de menores a familiares/empleados.
87% de lactantes presentaron lesión cariosa: mancha blanca hasta lesión marrón con cavidad y
destrucción de la corona. Órganos dentarios anteriores superiores mayormente afectados (Gutiérrez et
al., 2021). (26)

CONCLUSIONES

De acuerdo a los resultados de la encuesta nacional el 70% de la población general consume alcohol

(Villatoro Velázquez, 2017). En un estudio en estudiantes del área de salud, la prevalencia de consumo
fue

del 80.13% (Tena Suck et al., 2018). En nuestro estudio, 89% de los participantes ha probado o
consumido alcohol, y 79% del total de la muestra continúa consumiéndolo. Los resultados de la
encuesta indican que la mayoría de las personas necesita entre 5 y 7 copas para llegar a un estado de
ebriedad (29.1%), seguido de 8 a 11 copas (24.3%) y 12 o más (23%) (Villatoro Velázquez, 2017). En
nuestro estudio se encontró que el 38.37% precisa de 1 a 4 copas para llegar a la embriaguez, el 32.2%
de 5 a 7 copas y el 13.8% de 8 a 11 copas, es decir se reporta un menor número de copas o un menor
consumo para alcanzar el estado de ebriedad. Con una diferencial por género (p < 0,01) arroja una
mayor cantidad de consumo de copas en el género masculino. Al igual en nuestro estudio se muestra
un mayor nivel de consumo en el grupo etario de 20 a 30 años, no obstante esta diferencia es no
significativa respecto a otros grupos etarios p > 0,05 con un valor de (0,513). Similar a los hallazgos
de otros estudios (Palacios Delgado, 2012), que reportan de igual manera, un consumo excesivo mayor
en los grupos etarios más jóvenes. En nuestro estudio del total de la muestra estudiada, 41.8%
corresponde al grupo de 20 a 30 años, y 46.5% al de 31 a 40 años, lo que indica un predominio hacia
grupos de edad mayores en comparación con estudios previos (Thiebaud et al., 2021).

En relación al consumo excesivo, los resultados son similares a los reportados (Ramírez Toscano et al.,
2023), donde la prevalencia en hombres fue del 40.4%. En nuestro estudio, el 36% de la muestra
presentó un consumo elevado, a favor del Género masculino (0,014) y un consumo excesivo 56.97%
(SAMSHA), igual mayormente significativo en hombres (0,021), es decir ambas con p < 0,05. El
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inicio del consumo de alcohol se reporta en la encuesta nacional, en hombres con comienzo a los 17
años y mujeres entre 18 a 25 años (Villatoro Velázquez, 2017). En nuestro estudio, la edad de inicio
obtuvo Mdn18 años (RIQ 17-20). Los resultados muestran (Tamez Rodríguez et al., 2013) que el 61 %
de la muestra tiene de acuerdo al patrón de uso un uso sin riesgo, 30 % uso de riesgo y el 8.5 % de la
muestra consumo problema o perjudicial, ninguno con puntaje de dependencia, en tanto que en nuestro
estudio los patrones de consumo revelaron que el 20.9% eran abstemios, el 60.4% presentó un uso sin
riesgo, el 16.27% un consumo de riesgo y un 2.4% con patrón de consumo perjudicial y dependencia.

En cuanto a las motivaciones para el consumo, encontramos que las razones más comunes incluyen
celebraciones con amigos y el deseo de mejorar la diversión en eventos sociales, refiriéndose a las
dimensiones de motivos sociales y motivos para sobresalir, esta última con p < 0.05 (0.035) respecto
del género masculino. Sin embargo, las respuestas cualitativas revelaron un repertorio más amplio de
motivaciones, que incluye desde la búsqueda de emociones positivas, de bienestar emocional, de
convivencia y socialización, como las de presentación más común, los motivos relacionados a estar en
calma, los de evitación o liberación, de alivio o ajuste emocional, situacionales, etc... de menor
presentación. En relación a las distintas crisis normativas y para normativas, se muestra una gran
diversidad de crisis experimentadas tanto esperables del ciclo vital como circunstancial los cuales
arrojan una correlación débil NS respecto el nivel de consumo de alcohol. La correlación entre los
motivos de consumo y el patrón de consumo fue significativa (0.689) p < 0,001, sugiriendo que un
mayor puntaje en motivos de consumo se asocia con un patrón de consumo más elevado. Similar a lo
que arrojan en el estudio, alta correlación positiva (0,697) (Martínez et al., s. f.).

Mostrándose que el principal problema en nuestra población, con base a los resultados es el consumo
de riesgo y el consumo excesivo de alcohol, cuyos hallazgos tienen gran relevancia y utilidad clínica,
ya que como lo refiere la literatura, puede influir en su desempeño como clínico o bien agravarse con
sintomatología asociada de depresión y estrés, aunada a los hábitos de salud irregulares que caracterizan
al periodo formativo de las residencias médicas, constituyendo a su vez factores predisponentes de
aumento del nivel de consumo de alcohol, por lo que se precisa tomar acciones a través de programas
preventivos e intervenciones dirigidas, tales como acciones de educación y promoción a la salud en
especial por considerarse grupo de riesgo, acciones de consejería y terapia breve con apoyo de materiales
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educacionales, monitorización continuada así como una mayor profundización en su evaluación
diagnostica o bien derivación a un siguiente nivel de atención especializado en casos de dependencia.
Cabe añadir que los elementos esenciales en una intervención breve que destaca la literatura, incluye: dar
a conocer a los individuos los resultados del cribaje para incrementar la motivación al cambio hacia la
conducta de no consumo, resaltando que lo más beneficioso para la salud seria no consumir alcohol o
hacerlo en dosis de bajo riesgo, informar a su vez sobre los peligros de la ingesta de alcohol, negociar la
reducción y motivación a comprometerse a la reducción del consumo, brindarle material que reafirme la
consejería. Se destaca que la intervención breve es efectiva y disminuye el consumo de hasta 100 gramos
de alcohol a la semana (Córdoba García & Camarelles Guillem, 2022).

Muestra de 86 residentes de medicina familiar, 65 % género femenino, Mdn edad 31 años RIQ (29-36),
72.1 % soltero y 43 % cursa 2do año residencia. Se concluye que existe una correlación positiva
moderada entre el patrón de consumo de alcohol y motivos relacionados a su consumo (0,689 p <
0,001). Con respecto al patrón de consumo de alcohol el 60.4 % presenta un patrón de consumo Nivel 1
(sin riesgo), 16.27 % Nivel 2 (consumo de riesgo), 1.2 % nivel 3 (consumo perjudicial), 1.2 % nivel 4
(dependencia). Sin diferencia significativa en cuanto a la integración familiar y enfermedad mental
comórbido (p 0,085), (0,055) respectivamente. El 36 % (AUDIT) 56.9% (SAMHSA) de la muestra
tienen un consumo elevado de alcohol por ocasión de consumo. Las principales motivaciones hacia el
consumo del alcohol incluyen: pensamientos orientados por motivaciones afectivas, de bienestar,
sociales y/o convivencia, de evitación y ajuste emocional.

Este estudio tiene como fortalezas el poseer un enfoque de complementariedad mixta. El manejo
estadístico de la parte cuantitativa muestra resultados de pruebas de asociación con realización de
pruebas preliminares de normalidad de datos cuantitativos. Se realizó dos ciclos para la codificación
en líneas amplias. Como parte de las limitaciones del estudio la muestra deberá ampliarse en caso de
buscar que los resultados puedan ser generalizados garantizando así una mayor representatividad.
Convenientemente la muestra que abarcara especialidades quirúrgicas donde quizás su nivel de
exigencia o tensión pueda ser diferente al de especialidades clínicas. Los resultados nos permitirán la
detección de médicos residentes, ya sea con riesgo, uso problema o dependencia de alcohol a fin de
determinar el tipo de intervención que correspondería aplicar a cada uno de ellos. También resultarán
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útiles los resultados de este estudio para sensibilizar a los médicos en formación acerca de su propio
patrón de uso y consumo del alcohol y tomar conciencia de cómo es que este influye en su desempeño
clínico, toda vez que existe una asociación significativa entre el hábito de consumo de alcohol y el
abordaje de problemas de consumo de alcohol en la población a la que atiende.

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