REINTERPRETACIÓN DE SONIDOS DE
KOROTKOFF INTEGRANDO FRECUENCIA
CARDÍACA Y PRESIÓN ARTERIAL MEDIA
ENTRE BRAZOS: ESTUDIO PILOTO
REINTERPRETATION OF KOROTKOFF SOUNDS
INTEGRATING HEART RATE AND MEAN ARTERIAL
PRESSURE BETWEEN ARMS: PILOT STUDY
Guillermo Corona Caleri
Investigación Biomédica & Desarrollo, México
María del Rosario Álvarez Valadez
Universidad de Sonora, México
Carlos Iván Ham Rodríguez
School of Engineering and Sciences, México
Horacio Antolín Pineda León
Universidad de Sonora, México
Santos Jesús Castillo
Universidad de Sonora, México

pág. 11623
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v9i4.19789
Reinterpretación de Sonidos de Korotkoff Integrando Frecuencia Cardíaca
y Presión Arterial Media Entre Brazos: Estudio Piloto
Guillermo Corona Caleri1
anoroc.irelac@gmail.com
https://orcid.org/0009-0008-4051-642X
Investigación Biomédica & Desarrollo
México
María del Rosario Álvarez Valadez
rosario.alvarez@unison.mx
https://orcid.org/0000-0002-9046-5594
Departamento de Física
Universidad de Sonora
México
Carlos Iván Ham Rodríguez
cavan@tec.mx
https://orcid.org/0009-0001-7776-4645
School of Engineering and Sciences
Tecnológico de Monterrey
México
Horacio Antolín Pineda León
antolin.pineda@unison.mx
https://orcid.org/0000-0002-1513-2351
Departamento de Matemáticas
Universidad de Sonora
México
Santos Jesús Castillo
santos.castillo@unison.mx
https://orcid.org/0000-0002-0988-1436
Departamento de Investigación en Física
Universidad de Sonora
México
RESUMEN
Históricamente, la medición indirecta de la presión arterial basada en los sonidos de Korotkoff (KKs)
ha carecido de un consenso coherente, y se han producido interpretaciones interesantes en cambio, sin
haber llegado aún a un acuerdo de su origen al través de muchos estudios que ha derivado en un manejo
subóptimo de las condiciones vasculares y circulatorias, en etapas tempranas o estados subclínicos. Este
trabajo busca determinar si los KKs intermedios tienen relevancia clínica y fisiológica, al ubicarlos de
forma indirecta, o suponer su participación, además de explorar un nuevo enfoque para interpretar la
presión arterial media, implicando la frecuencia cardíaca que se usa siempre en pruebas de evaluación
física, pero que no corroboran la simetría pulsátil. Se presenta un análisis de los datos de presión arterial
obtenidos de 46 voluntarios mediante un oscilómetro de muñeca. Los resultados preliminares muestran
variabilidad de la PAM en situaciones de estrés postural leve, con predominio de elevaciones en el lado
izquierdo y mayor estabilidad en las presiones diastólicas. Estos hallazgos sugieren que los KKs
intermedios podrían tener un papel clínico y fisiológico subestimado, al reflejar fenómenos
hemodinámicos relevantes en fases tempranas o subclínicas.
Palabras clave: presión arteial media, sonidos de korotkoff, frecuencia cardiaca
1 Autor principal
Correspondencia: rosario.alvarez@unison.mx

pág. 11624
Reinterpretation of Korotkoff Sounds Integrating Heart Rate and Mean
Arterial Pressure Between Arms: Pilot Study
ABSTRACT
Historically, the indirect measurement of blood pressure based on Korotkoff sounds (KKs) has lacked
a clear consensus, and various interpretations have emerged without agreement on their origin despite
numerous studies. This has led to suboptimal management of vascular and circulatory conditions in
early or subclinical stages. This study seeks to determine whether intermediate KKs have clinical and
physiological relevance by indirectly locating them or suggesting their involvement, while exploring a
new approach to interpreting mean arterial pressure that incorporates heart rate, which is routinely used
in physical assessments but does not confirm pulsatile symmetry. We present an analysis of blood
pressure data from 46 volunteers measured with a wrist oscillometer. Preliminary results show
variability in mean arterial pressure under mild postural stress, with a predominance of left-sided
elevations and greater stability in diastolic pressures. These findings suggest that intermediate KKs may
play an underestimated clinical and physiological role, reflecting relevant hemodynamic phenomena in
early or subclinical stages.
Keywords: mean arterial pressure, korotkoff sounds, heart rate
Artículo recibido 04 Agosto 2025
Aceptado para publicación: 29 Agosto 2025

pág. 11625
INTRODUCCIÓN
El sistema cardiovascular desempeña funciones esenciales como el transporte de oxígeno y nutrientes
a los tejidos y la eliminación de productos metabólicos. Está compuesto por tres elementos
fundamentales: corazón, vasos sanguíneos y sangre; la interacción dinámica entre estos elementos
genera las presiones necesarias para mantener el flujo sanguíneo, especialmente la presión arterial, que
es la fuerza ejercida por la sangre contra las paredes de las arterias (Acoltzin-Vidal et al., 2010; Rabadia
et al., 2024).
Desde principios del siglo XX, los sonidos de Korotkoff (KKs) se han utilizado para medir
indirectamente la presión arterial. Sin embargo, su origen fisiológico exacto sigue siendo motivo de
debate, y numerosos estudios han abordado su interpretación sin llegar a un consenso claro (Anliker &
Raman, 1966; Brown et al., 1998; Chio et al., 2011; Conrad et al., 1980; Drzewiecki et al., 1989; Knecht
et al., 2009; O’Sullivan et al., 2001; Sibley, 1984; Venet et al., 2000).
Derivado de lo anterior, solo se han considerado clínicamente relevantes el primer sonido (presión
sistólica) y el cuarto sonido (presión diastólica), mientras que los sonidos intermedios han sido
descartados. Este enfoque se consolidó en 1954 con el concepto de presión media (PM), desarrollado
por Arthur C. Guyton a partir de la “presión media” descrita por Ernst H. Weber casi un siglo antes.
Guyton incorporó el concepto de complianza vascular y, bajo condiciones de flujo estacionario, definió
la PM como la “presión propulsora” del gasto cardíaco o volumen de sangre expulsada por minuto (Q)
(Dalmau, 2017; Kim, 2012; Leca & Groza, 2008).
Inspirados por observaciones clínicas previas desde 1987, en las que pacientes con diversas dolencias
mostraban diferencias de presión arterial (5–7 mmHg), temperatura axilar y pulso entre ambos brazos
que se normalizaban con la remisión de los síntomas, se realizó este estudio con 46 voluntarios sanos a
finales de 2018. Un tercio de ellos presentó diferencias de presión significativas sin síntomas clínicos,
lo que sugiere que estas asimetrías leves podrían representar un mecanismo transitorio de adaptación al
estrés diario. En este caso, dicho estrés fue inducido de forma controlada mediante cambios posturales.
Los resultados obtenidos, especialmente en presión de pulso y presión arterial media (PAM), justifican
la necesidad de estudios más amplios.

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Además, aunque la frecuencia cardíaca (FC) se utiliza de forma rutinaria en las pruebas de evaluación
física y en estudios clínicos (Antonio Alejandro Becerril Garduno, 2013; Furtado et al., 2009; Patel et
al., 2016), su posible relación con la simetría pulsátil o con el cálculo más preciso de la PAM no ha sido
sistemáticamente explorada.
Se han documentado diferencias de 10 a 20 mmHg entre brazos en personas con problemas de salud,
como se observa en la tesis de Vargas Cabello (Gloria Ma Vargas Cabello, 2018). Sin embargo, nuestro
enfoque propone una forma simple y práctica de detectar oportunamente desigualdades de presión que
podrían pasar inadvertidas si la medición solo se realiza en reposo, sentado o en decúbito supino.
En Medicina, es posible que se cometan errores al validar premisas como la de la normalidad cuando
se evalúa únicamente de forma univariada, omitiendo la revisión bivariada (por ejemplo, midiendo
ambos brazos). Con apenas unos minutos adicionales se podría identificar a pacientes que requieran
estudios complementarios. Los avances tecnológicos actuales abren nuevas posibilidades diagnósticas,
pero no deben desplazar métodos tradicionales como la auscultación comparada de los KKs, que puede
revelar fenómenos no abordados en la formación convencional pero explicables a la luz de hallazgos
recientes (Allen et al., 2004; Baranger et al., 2023).
Los KKs han tenido otras aplicaciones, como la distancia Q–Kd descrita desde 1979 para evaluar
patologías como trastornos tiroideos, o la monitorización ambulatoria de la tensión arterial en 24 horas
(Lin et al., 2022). Asimismo, se han empleado junto con métodos de bioseñales como el ECG y estudios
de ultrasonido. Un ejemplo relevante es la tesis de Mio Chuzon y Chileno Yesquen, donde se propone
utilizar variaciones de la PAM como factor predictivo en pacientes con dengue y riesgo de
complicaciones (Mio Chuzon Wendy Elizabeth & Chileno Yesquen Adita Margarita, 2024). Esto
sugiere que los KKs intermedios podrían ofrecer información valiosa en patologías de alta prevalencia
en la población actual, si se investigan de forma adecuada.
METODOLOGÍA
Enfoque y tipo de estudio
Se realizó un estudio cuantitativo, observacional y transversal, de carácter exploratorio-descriptivo, con
el objetivo de analizar la relación entre los sonidos de Korotkoff, la frecuencia cardíaca y la presión
arterial media entre brazos en dos diferentes posiciones corporales.

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Población y muestra
La muestra estuvo conformada por 46 voluntarios sanos, seleccionados por conveniencia. Los datos
fueron obtenidos siguiendo la metodología previamente descrita por los autores en un trabajo anterior
(Corona Caleri et al., 2024).
Criterios de inclusión y exclusión
Inclusión: personas adultas sanas, sin antecedentes de enfermedad cardiovascular o neurológica, y con
disposición para participar.
Exclusión: presencia de fiebre, síntomas agudos, arritmias o estar tomando algún medicamento.
Procedimiento y recolección de datos
Las mediciones se llevaron a cabo utilizando un oscilómetro de muñeca digital, siguiendo los protocolos
estándar para la evaluación de parámetros cardiovasculares no invasivos. Se realizaron mediciones en
dos posiciones corporales distintas: - De pie (bipedestación) y - Recostado boca arriba con pies
elevados.
Antes de cada medición, se permitió un periodo de reposo de al menos 5 minutos para garantizar la
estabilización hemodinámica. Se solicitó a los participantes que evitaran hablar o moverse durante el
procedimiento para no alterar los valores.
Las variables fisiológicas registradas fueron: - Presión arterial sistólica (PS), medida en milímetros de
mercurio (mmHg), - Presión arterial diastólica (PD), en mmHg, - Frecuencia cardíaca (FC), expresada
en latidos por minuto (lpm), cada variable fue registrada de forma inmediata tras cada medición, y se
anotaron los resultados en las bitácoras correspondientes.
Cálculo de la presión arterial media tradicional y ajustada por frecuencia cardíaca
Tradicionalmente, la PAM se calcula mediante la fórmula:
𝑃𝐴𝑀 = [2(𝑃𝐷) + 𝑃𝑆]
3
También expresada como:
𝑃𝐴𝑀 = 𝑃𝐷 + 𝑃𝑆 − 𝑃𝐷
3
Esta aproximación proporciona una estimación cercana al valor obtenido durante el tercer KKs.
En nuestra formulación propuesta a continuación:

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𝑃𝐴𝑀 =
{
0.5(𝑃𝑆) + 1(𝑃𝐷) 𝑠𝑖 𝐹𝐶 > 100 𝑙𝑝𝑚
0.46(𝑃𝑆) + 1.17(𝑃𝐷) 𝑠𝑖 𝐹𝐶 = 90 − 100 𝑙𝑝𝑚
0.42(𝑃𝑆) + 1.38(𝑃𝐷) 𝑠𝑖 𝐹𝐶 = 80 − 89 𝑙𝑝𝑚
0.37(𝑃𝑆) + 1.7(𝑃𝐷) 𝑠𝑖 𝐹𝐶 = 70 − 79 𝑙𝑝𝑚
0.33(𝑃𝑆) + 2(𝑃𝐷) 𝑠𝑖 𝐹𝐶 < 70 𝑙𝑝𝑚 }
Esta estructura mantiene la ponderación tradicional (2:1 en favor de la presión diastólica) válida para
frecuencias cardíacas bajas (FC < 70 lpm), en las cuales la diástole ocupa aproximadamente dos tercios
del ciclo cardíaco. Tal justificación está respaldada por los estudios que demostraron la prolongación
relativa del tiempo diastólico a bajas frecuencias (Anliker & Raman, 1966; Sibley, 1984).
Sin embargo, a frecuencias cardíacas elevadas (FC > 100 lpm), los tiempos de sístole y diástole tienden
a igualarse, por lo que la presión diastólica ya no debe duplicarse en la fórmula. En estos casos, la media
aritmética simple (es decir, división entre 2) entre presión sistólica y diastólica se aproxima mejor al
valor real.
Las diferencias en centésimas que son muy desiguales en columna central de diastólicas pueden
relacionarse con la variancia en velocidad cambiante de los KKs al desinflar el brazalete que ya se ha
documentado (Sibley, 1984), o tal vez sea por la influencia de la FC en el ciclo cardiaco y/o una posible
participación de mecanismos como la Ley de Frank-Starling, Estas observaciones nos llevaron a un
ajuste empírico de la fórmula, mediante prueba y error, hasta lograr una correspondencia más precisa
entre los valores calculados de PAM y la relación dinámica entre PS y PD.
Esta manera pondera la contribución de la presión diastólica y sistólica en función de la frecuencia
cardíaca, justificando la duplicación en ciclo cardíaco del tiempo de duración de la PD a bajas
frecuencias de pulso, y en frecuencias altas la sístole y diástole igualan tiempos.
Análisis de datos
Los gráficos fueron elaborados en los softwares Origin y GraphPad Prism, utilizando principalmente
gráficas de líneas y de barras para representar comparaciones clave. En algunos casos, se aplicó la
prueba t de Student para determinar la significancia estadística de las diferencias observadas.
Consideraciones éticas
Este estudio se llevó a cabo siguiendo los principios éticos establecidos en la Declaración de Helsinki,
que protege los derechos y el bienestar de los participantes en investigaciones médicas.

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Todos los voluntarios fueron informados de forma clara sobre los objetivos y procedimientos del
estudio, y expresaron su consentimiento verbal antes de la recolección de datos.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
A continuación, se presentan las gráficas correspondientes a casos específicos donde se observaron
patrones distintivos en la relación entre la PAM calculada mediante la fórmula tradicional y la propuesta
ajustada con la FC. Estos casos se caracterizan por condiciones particulares de FC y presión de pulso
(PP), lo que permite explorar posibles implicaciones fisiológicas en la interpretación de la PAM y su
vínculo con los KKs intermedios. Las diferencias visualizadas en los trazos ofrecen elementos
relevantes para el análisis comparativo entre ambas metodologías.
En la gráfica 1 con líneas negras verticales en los casos señalados, se observan en los trazos inferiores
que las diferencias entre nuestra PAM y las presiones sistólicas (PS) / diastólicas (PD) convergían en
un punto central equidistante en mmHg entre PS y PD, sugiriendo una intervención o modificación de
los KKs intermedios (segundo y tercer sonido). En todos esos casos la FC era alta (alrededor de 100
lpm) y coincidiendo siempre con separación del trazo de las dos PAM en trazo superior.
En los casos de trazo inferiores en separación que coincide con separación del trazo de la PAM en: - De
pié Izq. (Gráfica 1a; casos 8, 11, 12, 19, 30 y 44 con PP de 35 a 46 mmHg, FC de 81 a 136 lpm), - De
pié Der. (Gráfica 1b; casos 8, 9 y 28 con PP de 38 a 42 mmHg y FC de 92 a 99 lpm), - Recostado Izq.
(Gráfica 1c; casos 8, 12, 30 y 31 con PP de 38 a 50 mmHg y FC de 82 a 89 lpm) y - Recostado Der.
(Gráfica 1d; casos 2, 8, 13 y 30 con PP de 37 a 43 mmHg y FC de 77 a 89 lpm). Sin embargo, el caso
44 es un valor extremo ya que la FC fue inusualmente alta (136 lpm), lo que sugiere la posibilidad de
una respuesta fisiológica atípica o una alteración puntual en la medición, posiblemente relacionada con
factores externos o individuales no controlados durante la prueba, como el efecto de un fármaco que el
paciente no mencionó.

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Gráfica 1
Comparación entre la PAM obtenida mediante la fórmula tradicional (PAM estándar, en gris) y la
fórmula propuesta ajustada por FC (PAM modificada, en azul), en posiciones de pie (a y b) y en decúbito
supino (c y d), en brazos izquierdo (a y c) y derecho (b y d). Las PAM con respecto a la PS se muestran
en verde (PAS – PAM) y a la PD en rojo (PAM – PAD).
La separación discreta entre la PAM propuesta y la fórmula tradicional, observada en sujetos con FC
elevada (alrededor de 100 lpm), especialmente en posición recostada, sugiere la posible participación
de mecanismos fisiológicos más complejos. Este patrón coincide con un aumento del retorno venoso
que, al elevar el volumen en las cavidades derechas del corazón y en el circuito pulmonar, podría
incrementar el gasto cardíaco. Tal comportamiento es consistente con la participación de la Ley de
Frank-Starling, que postula que un mayor llenado ventricular produce una contracción más eficaz,
fenómeno que, en este caso, podría estar reflejándose en la aparición o modificación de los KKs
intermedios (segundo y tercero). Este vínculo funcional plantea la necesidad de explorar dichas
correlaciones mediante comprobación auscultatoria directa, como lo han sugerido observaciones
clínicas previas (Knecht et al., 2009; O’Sullivan et al., 2001).

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Asimismo, en los registros correspondientes a los casos 11 y 12 (brazo izquierdo, 100 y 99 lpm) y el
caso 28 (brazo derecho, 99 lpm), se observó una aproximación de los trazos PAS–PAM y PAM–PAD
en la Gráfica 1, con tendencia a tocarse o converger, lo que podría estar indicando una sincronización
hemodinámica específica en torno a estos KKs intermedios. Por el contrario, en los casos sin separación
entre los trazos, y con frecuencias cardíacas intermedias o bajas, se sugiere la posible implicación del
primer y cuarto KKs, pero la interpretación de la metodología de ponderación empleada con FC altas,
indicaría el mecanismo Frank-Starling manifestándose a través del 1er. o 4to. Sonidos KKs.
Tras comparar ambas fórmulas de cálculo de la PAM y observar su comportamiento bajo diferentes FC,
se procedió a analizar las variaciones en la PP en función de la postura corporal y su posible relación
con los KKs intermedios, tomando a los pacientes como grupo. Este enfoque permitió identificar
patrones fisiológicos que podrían estar implicando dinámicas cardiovasculares más complejas,
especialmente bajo condiciones de estrés postural o aumento de la FC.
En la Gráfica 2, se presenta la PP obtenida para los cuatro grupos (posición de pie y recostada, en ambos
brazos). No se encontraron diferencias significativas entre los brazos dentro de un mismo grupo
postural; sin embargo, al comparar posiciones, la PS fue mayor al estar de pie, mientras que la PD
mostró una leve disminución. Como resultado, la PP fue significativamente más baja en la posición de
pie.
Gráfica 2.
Presión de pulso en los cuatro grupos con diferentes condiciones. Los valores están expresados como
media ± error estándar de la media. Se utilizó la prueba t de Student; * p < 0.05 con respecto a la postura
recostado.

pág. 11632
Además de la presión de pulso, se analizaron los valores de presión arterial media en las mismas
condiciones (Gráfica 3). Se realizaron mediciones en ambos brazos, y al igual que con la presión de
pulso, no se encontraron diferencias significativas entre las determinaciones del brazo derecho y las del
brazo izquierdo. Sin embargo, al comparar las posiciones, la presión arterial media fue
significativamente mayor en posición de pie.
Gráfica 3. Determinación de la presión arterial media en los cuatro grupos con diferentes condiciones.
Los valores están expresados como media ± error estándar de la media. Se utilizó la prueba t de Student;
* p < 0.05 con respecto a la postura recostado.
La interpretación tradicional de los KKs ha ignorado su posible relación con fenómenos fisiológicos
más complejos. Este estudio propone que los sonidos intermedios podrían reflejar dinámicas
cardiovasculares adicionales no consideradas previamente, salvo raras excepciones hemos visto pocos
trabajos que sugieren lo mismo (Baranger et al., 2023; Gloria Ma Vargas Cabello, 2018; Kim, 2012).
Si bien, las variaciones observadas en la PP y PAM podrían estar relacionadas con los KKs intermedios.
En la postura de pie, con una PS elevada, es posible que la turbulencia del flujo sanguíneo y el mayor
volumen de sangre en las arterias, causado por el retorno venoso y el incremento del gasto cardíaco,
modifiquen la frecuencia y patrón de los KKs intermedios, especialmente el segundo y tercer sonido.
Estos sonidos podrían estar influenciados por un aumento en la velocidad de flujo sanguíneo y un mayor
colapso de las arterias durante la fase de descompresión del manguito, lo que hace más pronunciados
estos sonidos y los hace reflejar de manera más exacta las variaciones hemodinámicas que ocurren
durante el ciclo cardíaco.

pág. 11633
Lo que sugiere que la diferencia en la PP y la PAM según la postura corporal podría estar asociada con
cambios dinámicos no lineales en la hemodinámica que afectan la forma en que se escuchan los KKs.
Estos cambios podrían ser un indicador importante de alteraciones cardiovasculares que podrían pasar
desapercibidas si solo se consideran las mediciones estáticas sin tener en cuenta los efectos del estrés
postural o de la FC.
Desde una perspectiva fisiológica, el corazón realiza movimientos tridimensionales durante la sístole
que podrían relacionarse con estos sonidos intermedios (Buckberg et al., 2015; Sallin, 1969; Torrent-
Guasp et al., 2001). Aunque hay controversia (MacIver, Partridge, et al., 2018; MacIver, Stephenson, et
al., 2018). Estudios recientes sobre el corazón helicoidal respaldan esta hipótesis desde un enfoque
funcional más que anatómico (Carreras et al., 2006). Ha esto agregamos que en nuestra experiencia
clínica palpando pulsos radiales en nuestros pacientes distinguimos tres regiones de sensación distintas,
las cuales son muy parecidas a las que se registran en libros muy antiguos conservados en algunos países
de la región del continente asiático (Ferreira, 2013).
Después de analizar de manera conjunta las variaciones de la PP según la postura corporal, se observó
en la gráfica 4 aumentos preferentemente positivos en postura recostada con pies arriba (Gráfica 4b) lo
cual indica una tendencia a responder con elevaciones izquierdas de la PS y PD ante un estrés poco
usual de la postura comparado con el hecho de solo posicionamiento de pie (Gráfica 4a), que es lo usual.
Gráfica 4
Diferencias de PS (barras verdes) y PD (barras azules) entre brazo izquierdo y derecho en posición de
pie (a) y recostado con pies elevados (b).

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En el grupo con postura recostados (pies arriba) se encontraron 9 casos con diferencias en la PS y PD,
ocho de los cuales fueron siempre en el lado izquierdo. En el total de la muestra en la gráfica 4b
(recostados pies arriba) hay un franco predominio izquierdo del aumento de presiones. En cambio, en
los de pie hay un predominio izquierdo más discreto de lateralidad (Gráfica 4a). La diferencia en
diastólicas del caso 25 puede tratarse de un error de registro.
Por otro lado, aunque inicialmente no se buscaba comparar cifras tensionales en un mismo lado, sino
entre brazo izquierdo y derecho, el análisis de las series temporales resultó relevante. En la gráfica 5 (la
evolución durante la prueba fue de aproximadamente cinco minutos) se evalúa la respuesta al estrés
generada por la respuesta a posiciones de pie y recostados. Lo que se observa es una respuesta al estrés
hace preferencia a lados izquierdos, y en las gráficas (5c y 5d) de comparaciones en hombres mismo
brazo, las alteraciones de entrecruzamiento de trazos predominan sobre las mediciones sistólicas
[11casos de 34] y [10 casos de 34] en cambio diastólicas [5 casos de 34] y [6 casos de 34] es menor, lo
que sugiere una mayor estabilidad de la respuesta diastólica ante el estrés postural.
Gráfica 5.
Series temporales de PS (línea negra con cuadros) y PD (línea roja con círculos) en brazo izquierdo (a
y c) y derecho (b y d) durante la prueba en posiciones de pie (c y d) y recostado (b y d).

pág. 11635
El hallazgo de que, en postura recostada con pies elevados, ocho de los nueve casos con diferencias
laterales presentaran incrementos siempre en el lado izquierdo refuerza la idea de que la respuesta
tensional se acompaña de un sesgo en la manifestación de los KKs. Esto sugiere que los sonidos
intermedios no solo son sensibles a la presión absoluta, sino también a las modificaciones posturales
que alteran la dinámica de la columna sanguínea y la pared arterial.
CONCLUSIONES
Las diferencias en la presión arterial entre los brazos pueden identificarse tempranamente si se formaliza
su medición comparada. La fórmula tradicional para calcular la PAM sigue siendo útil, pero no podemos
asumir que siempre se alinee perfectamente con el valor del tercer KKs. Es necesario confirmar esto
mediante un análisis directo con auscultación y baumanómetro.
Proponemos una fórmula alternativa para la PAM ajustada por frecuencia cardíaca, que sugiere que los
KKs intermedios (el segundo y tercer sonido) juegan un papel más relevante en la medición de la presión
arterial de lo que se había considerado previamente. Además, la relación entre la PAM y la FC, en
diferentes posiciones corporales (de pie y recostado), resalta la influencia de la dinámica hemodinámica
en los KKs.
Nuestra propuesta gráfica de PAM plantea una alternativa en la que las variaciones de la presión podrían
reflejarse de forma diferente en los KKs, dependiendo de su interacción con los cambios dinámicos en
el sistema cardiovascular, como los ajustes adaptativos entre presiones simétricas o asimétricas. Este
enfoque sugiere que no es apropiado particularizar solo el primer y cuarto KKs, y que tratar la presión
arterial como sistólica y diastólica podría llevar a la conclusión errónea de que se origina únicamente
en el corazón, sin considerar las resistencias periféricas.
Sin embargo, se requiere mayor investigación para evaluar la relación de los KKs intermedios con otros
métodos diagnósticos, como el ECG y ultrasonido, lo que podría mejorar la precisión diagnóstica en la
evaluación cardiovascular.

pág. 11636
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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