El proceso comunicativo como elemento
sustancial en la nivelación
de carrera del instituto de admisión y
nivelación de la
Universidad
Técnica de Manabí
Laura Isabel López Mera
https://orcid.org/0000-0003-3594-8152
Ingeniero en Comercio Exterior,
Magíster Administración en Empresas,
Docente Instituto de Admisión y Nivelación,
Universidad Técnica de Manabí
Lady Diana Intriago Intriago
lady.intriago@utm.edu.ec ; ladyica8@gmail.com
https://orcid.org/0000-0003-0606-0517
Ingeniero en contabilidad y Auditoría,
Master Universitario en dirección y
Asesoramiento Financiero,
Docente Instituto de Admisión y Nivelación,
Universidad Técnica de Manabí
Erika Adriana Hernández Ponce
https://orcid.org/0000-0002-8833-4341
Ingeniero en Contabilidad y Auditoría,
Máster Universitario en Tecnología
Educativa y Competencias Digitales,
Docente Instituto de Admisión y Nivelación,
Universidad Técnica de Manabí
Nexar Lenin
Zambrano Zambrano
https://orcid.org/
0000-0002-4375-7287
Licenciado en Psicología Educativa y
Orientación Vocacional,
Magister en Comunicación Educativa,
Analista 1- Instituto de Admisión y
Nivelación,
Universidad Técnica de Manabí
Ricardo Larry Castro Coello
https://orcid.org/0000-0003-4447-5529
Ingeniero Industrial,
Magister en Gerencia Educativa,
Magister en Calidad,
Docente Carrera Ingeniería Industrial,
Universidad Técnica de Manabí
RESUMEN
El presente artículo se basa en el
proceso comunicativo como elemento sustancial en la Nivelación de carrera del
Instituto de Admisión y Nivelación de la Universidad Técnica de Manabí donde la
definición técnica indica que el proceso de comunicación es aquel que se da
entre un emisor y un receptor, donde el primero emite un mensaje en forma de
código dirigido al segundo, el cual se lleva a cabo mediante un
determinado canal. Es así como se indica que para que se dé
el acto comunicativo, deben existir dos elementos clave,
tanto el emisor como el receptor; sin embargo, la proporción emisor -
receptor puede variar. La presente investigación se ajusta a un diseño no
experimental, por el simple hecho de que no se estimulará ninguna variable para
medir su efecto o relación con la otra, de la misma manera se la considera
transversal ya que fue realizada en un mismo período de tiempo. De la misma
manera, es de nivel explicativo-correlacional, ya que se centra en la
posibilidad de poder medir la relación entre las dos variables de estudio.
Tanto el proceso comunicativo como la creación y gestión del conocimiento han
sido expresados mediante modelos teóricos que los describen y explican. Sin
embargo, no siempre existe un reconocimiento en conceptos, variables,
indicadores y relaciones de los vínculos que existen entre ellos.
Palabras
claves: procesos comunicativos; emisor; receptor;
comunicación; información
The communicative process as a
substantial element in leveling
of career of the institute of
admission and leveling of the
Technical University of Manabi
ABSTRACT
This article is
based on the communicative process as a substantial element in the career
leveling of the Institute of Admission and Leveling of the Technical University
of Manabí where the technical definition indicates that the communication
process is one that occurs between a sender and a receiver. ,
where the first emits a message in the form of a code addressed to the second,
which is carried out through a certain channel. This is how it is indicated
that for the communicative act to take place, there must be two key elements,
both the sender and the receiver; however, the sender-receiver ratio may vary.
The present investigation is adjusted to a non-experimental design, for the
simple fact that no variable will be stimulated to measure its effect or
relationship with the other, in the same way it is considered cross-sectional
since it was carried out in the same period of time. .
In the same way, it is of an explanatory-correlational level, since it focuses
on the possibility of being able to measure the relationship between the two
study variables. Both the communication process and the creation and management
of knowledge have been expressed through theoretical models that describe and
explain them. However, there is not always a recognition in concepts,
variables, indicators and relationships of the links that exist between them.
Keywords:
communicative processes, sender, receiver, communication, information
Artículo
recibido: 03 marzo 2022
Aceptado para
publicación: 20 marzo 2022
Correspondencia:
laura.lopez@utm.edu.ec
Conflictos de Interés: Ninguna que declarar
INTRODUCCIÓN
La comunicación es un fenómeno social
que engloba todo proceso social, con distintos signos que forman lenguajes
comunes comprensibles para la generación de la retroalimentación o comúnmente
conocido la comunicación. La Real Academia de la Lengua Española (REA) define a
la comunicación, como: “el trato o efecto de comunicar, así como la transmisión
de señales mediante un código común entre un emisor y un receptor”. Guzmán
(2017).
El lenguaje como elemento esencial
para la comunicación humana ha sido una de las grandes preocupaciones a lo
largo de la historia de la educación. Por ello este tema ocupa un lugar
preponderante en los programas curriculares de todos los niveles educativos,
principalmente en los niveles de Universidad. Las habilidades escritas
(escribir y leer) han adquirido mayor prestigio social y, en consecuencia, los
procesos de lectura y escritura tienen más atención pedagógica en las aulas de
clases. Esto se debe, por una parte, a que estos procesos son más complejos de
adquirir y, por otra parte, a que tradicionalmente se creía que la función de
la escuela era enseñar a leer y escribir.
Esta realidad representa un gran
desafío para los docentes, puesto que, no se trata solo de enseñar nuevos
conocimientos que deben dominar los educandos, también deben enfrentarse a la
realidad de repensar y reinventar su práctica pedagógica para lograr la
formación de estudiantes que puedan comunicarse de manera oral y escrita en
forma competente en las diferentes situaciones y escenarios que se les
presente.
La naturaleza social del ser humano
hace que necesite de otras personas para realizar sus propios proyectos
individuales o personales que éstos sean; por lo que la comunicación, en todos
sus niveles (intrapersonal, interpersonal), hace parte fundamental de la vida
humana, lo que la lleva a ser uno de los procesos que sostiene la sociedad,
porque por medio de ella el hombre ha podido evolucionar y llevar a cabo
grandes transformaciones sociales que no habrían sido posibles sin el
desarrollo de la capacidad comunicativa. Mancera (2021).
Queda claro que el proceso comunicativo
no consiste simplemente en hacer uso del lenguaje para transmitir
unilateralmente determinados conocimientos que antes las personas no los
poseían. Es necesario usar el lenguaje apropiadamente en las diversas
situaciones que se presentan día a día, entre hablantes reales y en contextos
sociales e históricos concretos, es decir, desarrollar la competencia
comunicativa (Cassany, 1994). Al respecto Zebadúa y García (2021) plantean que,
para el enfoque comunicativo, el estudiante se convierte en el principal centro
de interés, porque es en quien se verá reflejado el aprendizaje y, juntamente
con el docente, constituye el binomio necesario para lograr que los procesos de
enseñanza y aprendizaje sean significativos. Al plantear la competencia
comunicativa como enfoque didáctico y propósito educativo central, se pretende
mejorar las capacidades de comprensión y producción textual de los estudiantes
y desarrollar sus capacidades como oyentes y hablantes reales, de acuerdo con
situaciones concretas de comunicación.
A partir de tal
reconocimiento, se genera un particular proceso comunicativo. De aquí que quepa
tomar precauciones con respecto a la identificación de las prácticas de
investigación social con procesos comunicativos especiales, en sí mismos. Tales
procesos son producto de una definida situación social, configurada por un
conjunto de normas que incluyen las relativas a los procesos
comunicativos.
Desarrollo
Kaplún
(2020) en su libro ‘Una Pedagogía de la Comunicación (El Comunicador Popular)”
identifica dos formas de entender el término comunicación, son: “1.- Acto de
informar, de transmitir, de emitir. 2.- Diálogo, intercambio; relación de
compartir, de hallarse en correspondencia, en reciprocidad. Verbo: comunicarse.
En realidad, la más antigua de estas acepciones es la segunda. Comunicación
deriva de la raíz latina communis: poner en común
algo con otro. Es la misma raíz de comunidad, de comunión; expresa algo que se
comparte: que se tiene o se vive en común”. (p. 54). Por ende, la comunicación
es un fenómeno social, inter – multi disciplinario en constante evolución, que
surge de la necesidad propia del ser humano para comunicarse con otras
personas, empleando códigos comunes entre emisor y receptor, por medio de un
canal sin interferencia de ruidos y enmarcados en un contexto.
Dado que la comunicación se encuentra
alimentada por varias ciencias del conocimiento, tales como: la psicología, la
sociología, la antropología humana, la neurociencia, entre otros. José Martínez
Terreno (2016) en su texto ‘Teorías de comunicación’ aborda un análisis de la
evolución de las teorías de la comunicación social, desde dos enfoques la
primera se basa en el estudio de los medios de comunicación social y su
influencia en la construcción de los imaginarios y el segundo enfoque habla
sobre el sistema social y las funciones que estas ejercen, teniendo en
consideración la segunda propuesta para este apartado.
Todo este proceso de recreación de
significados parte desde los saberes culturales comunes, ya que tanto el
representante como el intérprete son entidades mentales, ya que mediante las
experiencias ellos crean símbolos en relación al objeto que comprende el mundo
que nos rodea, y no es posible construir signo para un objeto que no hubiera
sido signo previamente, y si por cualquier causa llegara a deformar un código,
esto se vería afectado en el proceso comunicativo.
“La comunicación es un proceso que
relaciona comunidades, sociedades intermedias, gobiernos y ciudadanos en la
participación y toma de decisiones conjunta ante los estímulos y los factores
que, de manera permanente, presenta aquellos ambientes socioeconómicos y
políticos” de forma generalizada lo dijo Uranga (2018) en una recopilación de
su artículo titulado ‘La comunicación como objeto de estudio’. La REA define
proceso, como: “cualquier fenómeno que presenta una continua modificación a
través del tiempo; esto es entender que un proceso es dinámico, en un constante
devenir, eternamente cambiante y continuo”.
Uranga (2018) también sintetiza los
elementos que intervienen en el proceso comunicacional, dice que: “La
comunicación es un proceso social de producción, intercambio y negociación de
formas simbólicas, que es fase constitutiva del ser práctico del hombre,
generadora de conocimientos y bases de la cultura” (p. 1). Torres (2017), en su
apartado de lenguaje y comunicación, el cual enfatiza la importancia del
lenguaje en la producción de procesos comunicacionales, dice que: “La producción
del lenguaje debe ser interpretada también como un proceso comunicativo, con
repercusiones sociales”. Torres (2017). El proceso comunicación va de la mano
con los códigos del lenguaje, las cuales se encuentran delimitadas según el
contexto socio – cultural en la cual se encuentran. Al hablar de procesos
comunicaciones es pensar, en ‘un motor de un vehículo que necesita movilizar’ a
partir de los elementos como los signos, y la retroalimentación, son variables
importantes en la comunicación social.
La interacción, es una de las
condicionantes de la acción social dada la importancia que tiene la interacción
en el proceso comunicativo, Martínez (2016) dice que: “La interacción es
escenario de la comunicación, y a la inversa. No existe una sin la otra. En el
proceso de comunicación los sujetos proyectan sus subjetividades y modelos del
mundo, interactúan desde sus lugares de construcción de sentido.” La sociología
está dentro del estudio de la comunicología, debido a sus aportes en la
interacción social, en la generación de signos a partir del empirismo en la
vida cotidiana, la identificación social, y todo esto enmarcado en un contexto;
sobra decir que la sociología, es una de las ciencias que ayudan a la
construcción de procesos comunicacional.
Tomando en base el libro de
‘Psicología de la comunicación’ de Torres (2017), se juntan cuatro modelos
principales: la primera, hecha por Aristóteles; la segunda, por Lasswell; la
tercera pertenece a Shannon y Weaver; y la última, de Jakobson, cada una desde diferentes
puntos de vista. El primero pertenece al modelo Aristotélico de la comunicación
Torres (2017) en el cual se identifica ya los tres primeros elementos “Emisor –
Discurso – y; Audiencia” formando así un modelo lineal de comunicación.
Al analizar el carácter de la
comunicación social, participativo e innovador en el aprendizaje de los
estudiantes, conlleva a concebirla cada vez más creativa e innovadora.
Asimismo, debe contribuir a que el estudiante alcance, en las circunstancias
específicas en que se gesta, mayores grados de dominio sobre el mundo que lo
rodea y sobre sí mismo. La preocupación educativa, constituye un medio
específico de marcado interés, que exige la articulación de nuevas y
emprendedoras acciones comunicativas y didácticas, que justifican la
investigación. Otro aspecto es, la pertinencia consciente sobre el análisis de
la ética y la comunicación a través de las visiones y perspectivas actuales. Lo
cual conlleva a visibilizar con objetividad donde se acentúa la
individualización y unicidad del proceso. En este ambiente, se articulan
estrategias universitarias enfocadas a la búsqueda de soluciones efectivas, que
contribuyan al intercambio de saberes y de pensamientos lógicos para la
formación de valores morales e intelectuales.
Por otra parte, los profesores de la
educación superior tienen ante sí distintos desafíos. Primero, compartir
contenidos preestablecidos en los programas de estudios a través de diferentes
tipos de clases. “Las clases se clasifican sobre la base de los objetivos que
deben alcanzar”. Por tanto, responden a múltiples acciones que conllevan en la
práctica ordenada, la renovación de métodos de comunicación en favor de un
modelo educativo que actúe sobre los procesos cognoscitivos del estudiante. En
segundo lugar, los estudiantes que incursionan por primera vez en la
universidad como cambio sociocultural, evidencian una nueva filosofía entre el
pensar y el ser. En estas circunstancias, la actividad cognoscitiva y
científica del profesor, requiere de la sistemática auto preparación
disciplinaria, para cumplir con la función social de la comunicación humana,
que se establece entre la materia a impartir y el sujeto que aprende.
Romeros (2020) menciona que, el
proceso de comunicación puede concebirse desde la objetividad, como un espacio
de aprendizaje creativo entre los actores participantes, pues esta demanda de
nuevas formas de pensar-ser. Los nuevos escenarios exigen la filosofía
pedagógica, rompe con los esquemas normativos centrados en la actividad
protagónica del profesor, sujeto de conocimiento, el enfoque asistencialista
como control social, y la actividad pasiva de los estudiantes, los cuales
muestran la ausencia de conocimientos significativos que pueden estar
condicionado por los modelos educacionales.
Por tanto, la comunicación, debe
transitar desde un enfoque reactivo a un espacio proactivo de acciones. Herrero
(2019) esta situación debe incorporar distintas formas de saber, de aprender a
aprender, de desaprender, del deber ser, de dialogar, de satisfacer necesidades
sociales, de participar en el empoderamiento social, al cambio del sujeto
mismo, y la estrecha relación con la misión universitaria comprometida con el
encargo social. Los profesionales preparados para trasmitir y difundir
conocimientos útiles que faciliten la comprensión, incidan en la transformación
de la sociedad desde una nueva concepción del mundo dialéctico materialista.
Para cumplir con estos objetivos,
resulta necesario superar los procesos comunicativos oficialistas, dogmáticos,
rígidos y acompañados por espíritus triunfalistas. La construcción de nuevas
mentalidades y estrategias que dinamicen la comunicación, la ética, la empatía
y el aprendizaje auténtico, desde las universidades, con saberes científicos. Sarmiento
(2021), el proceso de comunicación demanda con urgencia, la renovación de los
quehaceres pedagógicos contemporáneos. El protagonismo y participación de los
profesores y los estudiantes inmersos en el proceso, de cara al cambio social,
comprometido con el modelo de desarrollo del país.
Ante esta realidad, CIPS (2020) se
propone concebir una comunicación creadora que dinamice y rompa con las cadenas
de la dependencia de la enseñanza centrada en el profesor. Proceso de
construcción colectiva, por una parte, del profesor como facilitador de
conocimientos teóricos y prácticos para ser comprendidos. Por otra parte, la
responsabilidad y compromiso de los estudiantes de aprender estos saberes
trasmitidos desde la formación docente y científica, que conllevan interés,
motivación, actitud activa de los contenidos que reciben, la cultura de la
búsqueda constante de literaturas u otras fuentes que enriquezcan el
conocimiento, arte de saber y no de saber repetitivo carente de análisis.
Establecer una comunicación clara y
efectiva en el contexto Educativo Superior demuestra su relevancia para
proporcionar un proceso formativo de calidad donde las interrelaciones y logros
de acuerdos entre los actores implicados generan beneficios de índole personal,
cultural, político, sean estos de interés individual o colectivos.
Para el criterio de los estudiantes,
esta percepción no es por el sistema, sino por la calidad de comunicación que
poseen ellos con los docentes, ya que sus dudas e interrogantes no son
subsanadas a tiempo y en la medida que ellos requieren, donde el criterio del
educador se ajusta a la revisión meticulosa de las rúbricas diseñadas para cada
tarea, es decir que el estudiante tiende a divagar por mucho tiempo sin
encontrar respuesta alguna, lo que implica que el tiempo asignado para su ejecución
es mínimo, lo que conlleva en muchos de los casos a su incumplimiento.
La importancia de potencializar la
comunicación efectiva en el sistema de enseñanza superior radica en el enfoque
central del ser humano como miembro activo de la sociedad; por consiguiente, se
han derivado una serie de estudios realizados con antelación que destacan la
importancia de la comunicación entre los que se encuentra el estudio realizado
por Sanz (2016), que destaca la importancia de las características
comunicativas que se evidencian con frecuencia en el proceso docente y que
influyen negativamente en su relación con el educando si éstas son mal
orientadas.
De la misma manera, Kaplún (2018), en su libro titulado “Una Pedagogía de la
Comunicación” hace alusión al término de Comunicación Educativa, que bajo su
perspectiva no es solo una especialidad, que encierra el desarrollo profesional
de los docentes, más bien considera que toda acción educativa, aun aquella que
se realiza de forma presencian dentro de clases y sin ningún medio, implica un
proceso comunicativo.
Para Peñalosa et al. (2020),
conceptualizar el aprendizaje amerita la revisión de los modelos y estrategias
utilizados para la creación de programas de enseñanza, donde se debe considerar
el ambiente de entrega, la estructura de los contenidos y materias, el diseño
de experiencias educativas, el fomento de las estrategias de aprendizaje, los
procesos cognitivos de construcción de conocimiento y como factor fundamental
la comunicación. Lo que implica que el docente debe estar preparado para
generar una comunicación educativa a través del diseño y uso adecuado de las
estrategias de enseñanza, donde se pone en manifiesto su creatividad,
imaginación y predisposición.
A pesar del éxito manifestado por
Luis Solís, director del área durante el año 2016 Comunicación Institucional, (2016),
han surgido una serie de dificultades dentro de los procesos educativos, los
mismos que se relacionan a la calidad de la comunicación por parte de los
docentes, quienes condicionan a la misma a una frialdad centrada en el acceso y
administración del Sistema de Gestión Académica-SGA, el mismo que posee una
serie de recursos tecnológicos que le permite manejar información y material de
aprendizaje por materia, visualización de tareas y notas ajustadas a una
rúbrica de presentación que limita la interacción con el docente, ya que su
criterios se sustentan en la lectura y ejecución de la misma.
En cuanto a la competencia
comunicativa profesional pedagógica, Pompa y Pérez (2015) hicieron referencia a
que durante el proceso educativo, no solo se dirige a generar un clímax
adecuado, sino que tiene una influencia directa sobre los individuos, a
consecuencia es necesaria una preparación de los profesores; para que usen la
lengua adecuadamente en los contextos diversos, adicionalmente de utilizar el
lenguaje en sus diversas manifestaciones o como mecanismo de expresión
inclusivo, que permita codificar con claridad el mensaje e influenciar en el
escucha. Se puede afirmar que posee peculiaridades y finalidad específica, ya
que es un elemento singular durante la formación de la personalidad en el campo
pedagógico, por ello sería también una destreza profesional.
En la educación, es capital la
comunicación entre los diferentes actores que intervienen en él,
fundamentalmente entre profesores y alumnos, esto implica la implementación de
estrategias adecuadas de comunicación tanto de manera oral como escrita. En las
diferentes tendencias del proceso de enseñanza, a lo largo de su historia, se
ha revelado en diferentes niveles la comprensión del aprendizaje, en calidad de
proceso humano complejo multifactorial e intersubjetivo, mediado por la praxis
del hombre, la cual constituye su principio, base y fundamento, evidenciando su
naturaleza social, por lo que comunicarse es una necesidad para el ser humano,
para su existencia y desarrollo. Errázuriz (2017).
En este sentido, existe la necesidad
de que los estudiantes de cualquier nivel de educación y en particular, en la
Educación Universitaria, posean un nivel alto en el desarrollo de las
competencias de la comunicación tanto oral como escrita. Existe unanimidad en cuanto a considerar como
necesaria e imprescindible la educación del sujeto en la formación de
competencias comunicativas. Un buen aprendizaje necesita del desarrollo de un
elevado nivel comunicacional. Comprender el aprendizaje como proceso de
comunicación implica la interacción en el proceso de enseñanza profesor-alumno
y alumno–alumno, en calidad de actores esencia-les del proceso de construcción
del conocimiento. González et al., (2015).
La comunicación favorece la
construcción del conocimiento bajo las siguientes condiciones: la existencia de
un clima interactivo sano basado en: el respeto, la confianza, la motivación,
el trabajo en
equipo y la
tolerancia; la construcción
del conocimiento se efectúa a través de la comunicación
marcado por la labor de búsqueda y reflexión crítica; la interacción debe
garantizar la continuidad del proceso de construcción del conocimiento en lo
individual Aguilar et al., (2016) En
la enseñanza actual,
el proceso docente,
se desarrolla a
través de la
interacción entre profesor
y alumno y
entre los estudiantes.
Por tales razones, los procesos de enseñanza constituyen por excelencia
un espacio de comunicación en el campo pedagógico. Errázuriz (2017).
La enseñanza es imposible sin un
proceso de comunicación. Una de las
funciones esenciales y universales de la educación es transmitir de generación
en generación, toda la tradición, historia, conocimiento y cultura en general
del desarrollo alcanzado por la humanidad a lo largo de su existencia; esta
herencia solo se puede transmitir a través del proceso de comunicación La
actividad docente tiene como función esencial establecer la adecuada
correlación entre el saber aportado por el profesor y el saber del alumno,
vinculado indisoluble-mente al proceso de comunicación activa, y de
comunicación, en este orden las relaciones interpersonales constituyen un
componente esencial del proceso docente y le confieren características
suigéneris.
Es incuestionable el valor educativo
de la comunicación, los hombres se educan en el proceso de comunicación,
compartiendo el saber, socializando los conocimientos y aprendiendo por medio
de la comunicación en cualquiera de sus formas; en la interacción humana es
obligatorio el proceso de comunicación.
En torno a la comunicación en el
proceso educativo Aguilar et al. (2016) exige la necesidad de que el docente: (...)
exhiba un conjunto de competencias comunicativas, que permiten el entendimiento
entre las personas, la importancia de esta competencia, rebasa los límites de
la comunicación en el proceso docente. En el proceso docente es tan importante
la comunicación oral como escrita, esta última es una acción compleja, que
implica que el escritor posea conocimientos, habilidades básicas, estrategias y
capacidad para coordinar un conjunto de procesos. (p.16).
El acto de escribir ha conectado a
las personas durante toda su vida por una diversidad de objetivos personales y
profesionales: comunicarse con familiares y amigos, realizar una función
relacionada con el trabajo, mantener un registro confidencial de las acciones,
expresar una perspectiva o estimación política. Los profesores deben ser conscientes
de que la capacidad para escribir de los estudiantes sin importar su propósito
ha de desarrollarse en un ambiente positivo y útil. Además, es necesario que
los docentes se centren en la escritura como un proceso comunicativo y alentar
el esfuerzo personal al producir textos breves, exploratorios o incluso más
ampliados y pulidos que permitan a los estudiantes desarrollar confianza y
fluidez, por un lado, y el control de sus habilidades de comunicación, por el
otro.
Elementos del proceso
comunicativo
Como lo menciona Comunicación
Institucional. (2016), una forma de entender lo que es el proceso
comunicativo y cómo funciona, es aprendiendo a diferenciar
los elementos básicos que lo conforman, estos son:
§ Emisor:
Este es el encargado de transmitir o emitir el mensaje con el objetivo de que
sea recibido de forma clara, concisa y eficaz. La cantidad a la cual esté
dirigido el mensaje puede variar, pero debe existir una intención
comunicativa para que se genere este proceso.
§ Mensaje:
Para que se dé el proceso comunicativo debe existir un contenido, una idea, un
mensaje a transmitir, es por eso que este elemento es clave para llevar a cabo
la actividad de la comunicación. Se define como todo aquel contenido que se
quiere hacer llegar al receptor, pero es importante resaltar que este debe ser
bien estructurado, para que sea fácilmente entendible por el
receptor.
§ Código:
Entre los elementos comunicativos este determina la forma en la que
el emisor configura el mensaje, lo que define el éxito o fracaso de la transmisión
del mismo, ya que se debe escoger el código más adecuado. Ejemplo de esto
puede ser el idioma en el cual está expresado el mensaje, el lenguaje
corporal utilizado, etc.
§ Canal:
Básicamente es el medio por el cual llega el mensaje al receptor. Es por eso
que la elección del canal más adecuado es tan importante, ya que permite que el
mensaje llegue al receptor de una forma clara y precisa; el más utilizado para
comunicarse de forma inmediata es la comunicación oral o comunicación
verbal, pero también se puede usar la forma escrita como periódicos, correos
electrónicos, mensajes de texto, etc.
§ Decodificación:
Esta parte del proceso es correspondiente al receptor, el cual trata sobre
comprender o interpretar el mensaje que le ha llegado para así dar una
respuesta coherente de ser necesario.
Para finalizar, es importante aclarar
que lo que es el proceso comunicativo como tal, debe catalogarse
como una actividad dinámica, ya que los papeles dentro de la misma tienen dicha
característica y tienden a cambiar. Una forma de entender
este esquema es señalando que el emisor, una vez expresado el
mensaje, debe aguardar una respuesta del receptor, convirtiéndose a sí mismo en
receptor y el otro en emisor.
Hay algunos elementos que pueden
impedir que el proceso de comunicación no se lleve a cabo de manera fluida, y
eficaz. Es el caso del ruido. Puede ser que se produzca si el mensaje no está
bien elaborado, si el canal escogido no es el más adecuado, o si el receptor no
es capaz de entender los códigos y los contenidos que está recibiendo. Rosario (2020), Si se da este
problema el proceso comunicativo no se lleva a cabo de forma óptima por lo que
habría que valorar en que se está fallando y llevar a cabo un proceso de
comunicación más cuidado y eficaz cuidando al detalle cada elemento que
interviene.
Es mediante el acto de interacción
humana y social donde encuentra su síntesis y posibilidad de objetivar la
capacidad activa de un sujeto que puede orientarse hacia el objeto, percibirlo,
experimentarlo, valorarlo, razonarlo, manipularlo, imaginarlo y representárselo
y de esa manera aprenderlo y desarrollar las habilidades para asumirlo, saber
hacer cosas con él y transformarlo. En ello juega un papel importante el
proceso comunicativo, pocas veces reconocido como tal, enunciado con su propia
terminología y menos asociado al conocimiento, su generación y gestión.
Desde las Ciencias de la Información
han aparecido posturas interesantes que proponen un análisis de los conceptos
operativos de información y comunicación, a partir de los cuales recrea una
plataforma conceptual que apuesta por el entendimiento de estas categorías en
una óptica complementaria y arraigada a orientaciones socioculturales. Con ello
sienta las bases para una redimensión de supuestos históricos que regulan los
acercamientos a los actores sociales de los procesos informacionales y
comunicativos Malheiro da Silva, (2020). Igualmente
se enriquecería la visión académica de estos procesos, necesitados de visiones
convergentes a las que está llamando la sociedad de la Información, la
Comunicación y el Conocimiento, también denominada del Aprendizaje o Sociedad
Red, nominaciones que muestran, -además de ausencia de consensos y multiplicad
de perspectivas intervinientes en los debates contemporáneos-, la necesidad de
calificar y distinguir el mundo de hoy con complejo entramado económico,
político y sociocultural emergente, de otros modelos y lógicas de articulación.
Para Martín (2017), en la
comunicación están implicados elementos de distinta naturaleza cuyas relaciones
están pautadas. Los intercambios comunicativos de información son procesos que
ocurren en el interior de un sistema: el sistema de comunicación (SC) que se
interrelaciona con un objeto de referencia (SR), o sea “aquello a propósito de
lo que se comunica” y que, hasta la aparición de las representaciones, el
universo referencial y el de las indicaciones comunicativas se desarrollan
solidariamente. Esta observación es de la mayor importancia para el
planteamiento de las ciencias de la comunicación; porque significa que el
estudio de todos los sistemas comunicativos, sean animales o humanos, requiere
del análisis de las relaciones que tienen con el sistema de objetos de
referencia.
Según este autor la comunicación
humana presenta todas y cada una de las características que identifican a los
sistemas finalizados; en la comunicación intervienen componentes cuyas
relaciones están organizadas; los componentes de la comunicación son
heterogéneos y asumen funciones diferenciadas en el proceso comunicativo; la
comunicación humana persigue algún fin. La comunicación entre actores humanos
aparece como un sistema finalizado, cuyos componentes están constreñidos a
ocupar las posiciones y cumplir las funciones que les asignan los
comunicadores. Estas características de la comunicación permiten estudiar los
intercambios de información como procesos que ocurren en el interior del
sistema comunicativo, el cual no es completamente autónomo; funciona abierto a
las influencias exteriores de otros sistemas no comunicativos, las mismas que
controlan en mayor o menor grado el funcionamiento del sistema de comunicación.
El control se ejerce sobre todos y cada uno de los componentes. A la vez, el
propio sistema de comunicación afecta al funcionamiento de los otros sistemas
con los que está relacionado, o sea, el social y el de referencia.
Información y comunicación
constituyen dos conceptos operativos que sirven para designar y comprender un
fenómeno humano y social, que consiste en la capacidad innata y adquirida de
dar forma (ideas, sensaciones, emociones, etc.) y de interactuar con los otros
o de poner en común aquello a lo que se da forma”. Silva (2019, p.30). Teniendo
en cuenta esta revisión de los cimientos conceptuales acerca de la información
y la comunicación, a raíz de encuadres distanciados de los paradigmas
hegemónicos, el propio autor defiende la pertinencia de la noción de info-comunicación Silva, (2019).
Recordar que el modelo dialéctico del
sistema comunicativo que se acaba de describir queda abierto a una relación de
interdependencia con otros sistemas que intervienen en su funcionamiento: los
objetos de referencia de la comunicación y las intervenciones y mediaciones
originadas en el sistema social. Una mirada detenida permite observar un modelo
descriptivo- explicativo de la comunicación en general aplicable al mundo
animal y a los humanos en cualquier escenario de relación, micro, meso y macro,
con o sin tecnologías y con los más disímiles propósitos. No falta en él la
alusión a la información y al conocimiento, al resultarles elementos
consustanciales, y al hacerlo lo refieren con sus denominaciones y resultan
componentes de una relación mucho más diversa y compleja.
Martín Serrano (2017), sintetiza las
características que distinguen a las interacciones comunicativas, en una
contribución que se instituye como referente básico en la aproximación a la
comunicación en tanto proceso esencialmente humano y social. Estas
características son el intercambio de roles de emisión y recepción entre los
agentes, carácter recurrente de la actividad comunicativa, capacidad de
configuración de información de los agentes emisores, mutua regulación entre
las formas de emisión y recepción, y vínculo entre autorregulación y heterorregulación de los comunicantes.
CONCLUSIONES
No se puede afirmar que el proceso
comunicativo sea obviado en el proceso de creación y gestión del conocimiento y
mucho menos que no sea referido. Tampoco en la dirección inversa, o sea, que el
proceso comunicativo ignore su capacidad para generar y compartir el
conocimiento. Lo que sí es un hecho demostrado en el análisis formulado es que
desde el punto de vista disciplinar no se hacen visibles las conexiones
existentes de manera conceptual entre el proceso comunicativo y la creación y
gestión del conocimiento en los estudiantes universitarios. Resulta evidente el
uso de términos distintos para llamar a la misma cosa, lo cual no es un simple
hecho léxico, es una realidad teórica que como modelos construcciones
realizadas por los investigadores corren el riesgo de representar y describir
realidades distintas y por tanto, mostrar relaciones
poco claras de variables que caracterizan el proceso que expresan.
La comunicación es un factor muy
importante para el ser humano, es un medio por el cual nos podemos expresar y
dar a conocer información con algún motivo. Es fundamental que tanto la persona
que envía y la que recibe el mensaje tengan una manera de entenderse, en lo
contrario la comunicación no sería exitosa. Es importante saber reconocer cuál
es la intención con la que enviamos o recibimos un mensaje, para así poder
hacer un buen uso de las funciones lingüísticas y además no llegar a
malentendidos dado el caso. Para llegar a cualquier acuerdo lo primero que se
necesita es el diálogo, lo cual la mayoría de las veces es complicado,
por esta razón es útil comprender toda esta información.
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