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Bajo este enfoque, la gestión del talento humano se convierte en un eje estratégico para fortalecer la
cultura preventiva, fomentar la capacitación y promover el aseguramiento integrado. De esta manera,
se construye un modelo sostenible donde la seguridad ocupacional y la resiliencia empresarial
convergen como pilares de competitividad y estabilidad organizacional. (Guzmán & Torres, 2025).
De manera que, requiere un enfoque estratégico basado en los riesgos ESG (ambientales, sociales y de
gobernanza), los cuales permiten identificar amenazas y oportunidades vinculadas al entorno productivo.
Conceptualmente, el riesgo implica la posibilidad de un evento adverso, y al aplicarse al ámbito ESG,
este cobra mayor relevancia al relacionarse con la reputación, la transparencia y el impacto social y
ambiental de las organizaciones. En este sentido, la gestión de riesgos laborales no debe limitarse a la
prevención de accidentes, sino alinearse con principios de sostenibilidad que garanticen prácticas
responsables y perdurables. El control interno, bajo modelos como COSO (Committee of Sponsoring
Organizations of the Treadway Commission), constituye un soporte esencial al fortalecer la
identificación, evaluación y monitoreo de estos riesgos, asegurando el cumplimiento normativo y la
transparencia. De esta manera, la sostenibilidad se consolida como un eje transversal que articula la
seguridad ocupacional con la competitividad y resiliencia empresarial. (Vargas y otros, 2025).
Tendencias internacionales en salud ocupacional y su impacto en Panamá
Las tendencias internacionales en salud ocupacional evidencian una transición hacia modelos de
prevención basados en tecnologías de la Industria 4.0, que integran inteligencia artificial, Big Data, IoT
y sistemas ciberfísicos para anticipar riesgos y optimizar la gestión preventiva. En Panamá, estas
innovaciones impactan directamente en los sectores productivos, donde la seguridad y salud laboral se
articulan con la competitividad y la sostenibilidad empresarial. La aplicación de herramientas digitales
permite un monitoreo en tiempo real, diagnósticos más precisos y la reducción de la exposición a
entornos riesgosos. Asimismo, se fortalece la formación de los trabajadores mediante simulaciones con
realidad virtual y aumentada, mejorando las competencias preventivas. En este contexto, el país enfrenta
el reto de cerrar la brecha entre la adopción tecnológica y la implementación efectiva, garantizando así
un entorno laboral más seguro, resiliente y alineado a estándares internacionales (Sanes, 2024).