pág. 8121
LAS ESTRATEGIAS DE MANIPULACIÓN
EN LAS CAMPAÑAS ELECTORALES EN
COLOMBIA
MANIPULATION STRATEGIES IN ELECTORAL CAMPAIGNS IN
COLOMBIA
Jonathan Posada González
Universidad de Manizales
Lina María Arbeláez Rendón
Universidad de Manizales
pág. 8122
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v9i5.20150
Las estrategias de manipulación en las campañas electorales en Colombia
Jonathan Posada González
jposada@umanizales.edu.co
https://orcid.org/0000-0002-4317-1112
Licenciado en filosofía y letras. Universidad de
Caldas. Magister en educación. Universidad de
Manizales. Docente Departamento de
humanidades Universidad de Manizales.
Manizales, Caldas.
Lina María Arbeláez Rendón
larbelaez@umanizales.edu.co
https://orcid.org/0009-0001-1799-7551
Administradora de empresas, universidad
nacional. Magister en mercadeo, Universidad de
Manizales. Docente escuela de mercadeo,
Universidad de Manizales.
RESUMEN
Al explorar el uso de tácticas de manipulación en las campañas electorales, este artículo revisa
someramente la historia electoral colombiana, las repercusiones de la manipulación emocional en
las estrategias electorales y el papel de los medios de comunicación en el fomento de las conexiones
emocionales de los votantes. Además, aborda el impacto cambiante de las redes sociales en la
interacción emocional en las elecciones, así como posibles intervenciones para prevenir la
manipulación emocional en las campañas electorales.
Palabras clave: manipulación, electoral, comunicación, redes sociales
Artículo recibido 09 agosto 2025
Aceptado para publicación: 13 septiembre 2025
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v9i5.20150
Las estrategias de manipulación en las campañas electorales en Colombia
Jonathan Posada González
jposada@umanizales.edu.co
https://orcid.org/0000-0002-4317-1112
Licenciado en filosofía y letras. Universidad de
Caldas. Magister en educación. Universidad de
Manizales. Docente Departamento de
humanidades Universidad de Manizales.
Manizales, Caldas.
Lina María Arbeláez Rendón
larbelaez@umanizales.edu.co
https://orcid.org/0009-0001-1799-7551
Administradora de empresas, universidad
nacional. Magister en mercadeo, Universidad de
Manizales. Docente escuela de mercadeo,
Universidad de Manizales.
RESUMEN
Al explorar el uso de tácticas de manipulación en las campañas electorales, este artículo revisa
someramente la historia electoral colombiana, las repercusiones de la manipulación emocional en
las estrategias electorales y el papel de los medios de comunicación en el fomento de las conexiones
emocionales de los votantes. Además, aborda el impacto cambiante de las redes sociales en la
interacción emocional en las elecciones, así como posibles intervenciones para prevenir la
manipulación emocional en las campañas electorales.
Palabras clave: manipulación, electoral, comunicación, redes sociales
Artículo recibido 09 agosto 2025
Aceptado para publicación: 13 septiembre 2025
pág. 8123
Manipulation strategies in electoral campaigns in Colombia.
ABSTRACT
By exploring the use of manipulation tactics in electoral campaigns, this article briefly reviews
Colombian electoral history, the repercussions of emotional manipulation on electoral strategies,
and the role of the media in fostering voters' emotional connections. Additionally, it addresses the
changing impact of social media on emotional interaction in elections and possible interventions to
prevent emotional manipulation in election campaigns.
Keywords: manipulation, electoral, communication, social networks.
Artículo recibido 09 agosto 2025
Aceptado para publicación: 13 septiembre 2025
Manipulation strategies in electoral campaigns in Colombia.
ABSTRACT
By exploring the use of manipulation tactics in electoral campaigns, this article briefly reviews
Colombian electoral history, the repercussions of emotional manipulation on electoral strategies,
and the role of the media in fostering voters' emotional connections. Additionally, it addresses the
changing impact of social media on emotional interaction in elections and possible interventions to
prevent emotional manipulation in election campaigns.
Keywords: manipulation, electoral, communication, social networks.
Artículo recibido 09 agosto 2025
Aceptado para publicación: 13 septiembre 2025
pág. 8124
INTRODUCCIÓN
Estrategias de manipulación emocional utilizadas en campañas electorales
Se sabe que las campañas electorales utilizan diversas estrategias de manipulación emocional para
influir en el comportamiento de los votantes. Las campañas manipulan el tono, el encuadre y la
orientación de sus mensajes para inducir emociones específicas en los votantes. Los investigadores
sostienen que estas emociones tienen un efecto directo sobre la participación electoral y un efecto
moderador sobre la relación entre las actitudes y el comportamiento político (Kiss, 2013.). Las
campañas suelen utilizar un lenguaje y una retórica cargados de emociones para manipular las
percepciones de los votantes sobre los problemas (Vowles, 2011.). Las apelaciones al miedo son una
estrategia común utilizada en las campañas electorales para influir en el proceso de toma de
decisiones de los votantes. Además del miedo, las campañas también pueden utilizar atractivos
emocionales positivos, como la esperanza y el orgullo, para manipular a los votantes. Estas
emociones positivas se pueden utilizar para crear una imagen o narrativa positiva en torno al
candidato, lo que influye en la percepción que el votante tiene del candidato (Vowles, 2011.). el
pathos es un vínculo claro con el uso de la manipulación emocional en la comunicación política
actual ya que este tipo de comunicación apela a las emociones directas del elector. Los motivos
visuales del patetismo tienen como objetivo activar estas emociones en los votantes en diferentes
campañas comparativas y propaganda electoral (Egea & Garrido, 2021.). Las campañas electorales
modernas utilizan temas visuales que representan diferentes emociones como entusiasmo,
esperanza, miedo e identidad, que se utilizan para manipular las percepciones y comportamientos de
los votantes (Egea & Garrido, 2021.). generando acciones dentro de los votantes para que la
elección este definida según las condiciones de manipulación ya conformadas.
Las investigaciones han demostrado que las condiciones emocionales desempeñan un papel
importante en el comportamiento de los votantes durante las campañas políticas. Manipular el tono,
el encuadre y la orientación de los mensajes de campaña puede inducir emociones específicas en los
ciudadanos (Kiss, 2013.). Las condiciones emocionales a menudo se consideran manipuladores,
pero pueden identificar eficazmente las técnicas aplicadas en las campañas políticas (Marmor &
Weimann, 2006.). Por ejemplo, los mensajes de campaña que utilizan música e imágenes para
INTRODUCCIÓN
Estrategias de manipulación emocional utilizadas en campañas electorales
Se sabe que las campañas electorales utilizan diversas estrategias de manipulación emocional para
influir en el comportamiento de los votantes. Las campañas manipulan el tono, el encuadre y la
orientación de sus mensajes para inducir emociones específicas en los votantes. Los investigadores
sostienen que estas emociones tienen un efecto directo sobre la participación electoral y un efecto
moderador sobre la relación entre las actitudes y el comportamiento político (Kiss, 2013.). Las
campañas suelen utilizar un lenguaje y una retórica cargados de emociones para manipular las
percepciones de los votantes sobre los problemas (Vowles, 2011.). Las apelaciones al miedo son una
estrategia común utilizada en las campañas electorales para influir en el proceso de toma de
decisiones de los votantes. Además del miedo, las campañas también pueden utilizar atractivos
emocionales positivos, como la esperanza y el orgullo, para manipular a los votantes. Estas
emociones positivas se pueden utilizar para crear una imagen o narrativa positiva en torno al
candidato, lo que influye en la percepción que el votante tiene del candidato (Vowles, 2011.). el
pathos es un vínculo claro con el uso de la manipulación emocional en la comunicación política
actual ya que este tipo de comunicación apela a las emociones directas del elector. Los motivos
visuales del patetismo tienen como objetivo activar estas emociones en los votantes en diferentes
campañas comparativas y propaganda electoral (Egea & Garrido, 2021.). Las campañas electorales
modernas utilizan temas visuales que representan diferentes emociones como entusiasmo,
esperanza, miedo e identidad, que se utilizan para manipular las percepciones y comportamientos de
los votantes (Egea & Garrido, 2021.). generando acciones dentro de los votantes para que la
elección este definida según las condiciones de manipulación ya conformadas.
Las investigaciones han demostrado que las condiciones emocionales desempeñan un papel
importante en el comportamiento de los votantes durante las campañas políticas. Manipular el tono,
el encuadre y la orientación de los mensajes de campaña puede inducir emociones específicas en los
ciudadanos (Kiss, 2013.). Las condiciones emocionales a menudo se consideran manipuladores,
pero pueden identificar eficazmente las técnicas aplicadas en las campañas políticas (Marmor &
Weimann, 2006.). Por ejemplo, los mensajes de campaña que utilizan música e imágenes para
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provocar emociones como miedo o entusiasmo pueden afectar significativamente el comportamiento
de votación (Brader, 2020.). La teoría funcional, la publicidad política, los estándares emocionales y
el respaldo social o la apología a la popularidad son conceptos teóricos utilizados para realizar un
análisis de contenido de las campañas oficiales (Borah, 2016.). Sin embargo, los ciudadanos
desinformados son más fácilmente manipulados mediante apelaciones emocionales que los más
informados (Brader, 2005.). Además, las campañas políticas pueden recurrir a diversas estrategias
para atraer a los votantes. Algunos pueden depender en gran medida de apelaciones emocionales,
mientras que otros pueden involucrarse en un nivel emocional o normativo, pero buscan persuadir a
los votantes a través de evidencia y poca argumentación racional (Vowles, 2011.). La manipulación
de los ciudadanos es una táctica común en las campañas políticas, en la que distintas respuestas
emocionales desempeñan funciones estratégicas (Marcus & MacKuen, 2004.). Sin embargo, el
término "manipulación" puede aplicarse a tácticas que influyen en las percepciones de los votantes
sobre las cuestiones políticas y los candidatos. Por lo tanto, los investigadores han aplicado el
concepto de manipulación política a las tácticas tanto psicológicas como propagandísticas utilizadas
en las campañas electorales (Noggle, 2018.) (Egea & Garrido, 2021.). En general, el uso de
apelaciones emocionales y tácticas de manipulación en las campañas políticas puede afectar
significativamente el comportamiento de los votantes, por lo que es esencial comprender los efectos
de estas estrategias.
El uso de estrategias de manipulación emocional en las campañas electorales se ha vuelto cada vez
más frecuente, particularmente en el entorno digital donde el potencial de manipulación aumenta
significativamente (Balakhonskaya & Gavra, 2020.). La estrategia comunicativa de manipulación se
utiliza activamente para lograr resultados electorales óptimos en las campañas electorales. Esto
plantea consideraciones éticas, ya que la manipulación puede influir encubiertamente en la
conciencia pública, cambiar las actitudes sociales y de comportamiento de los votantes potenciales
en una dirección que sea beneficiosa para el manipulador e incluso "obligarlos" a votar por un
candidato en particular (Balakhonskaya & Gavra, 2020.). Las investigaciones han demostrado que
los elementos emocionales se utilizan ampliamente en los anuncios políticos, y casi las tres cuartas
partes de todos los anuncios políticos se basan en las emociones más que en la lógica. De hecho, los
provocar emociones como miedo o entusiasmo pueden afectar significativamente el comportamiento
de votación (Brader, 2020.). La teoría funcional, la publicidad política, los estándares emocionales y
el respaldo social o la apología a la popularidad son conceptos teóricos utilizados para realizar un
análisis de contenido de las campañas oficiales (Borah, 2016.). Sin embargo, los ciudadanos
desinformados son más fácilmente manipulados mediante apelaciones emocionales que los más
informados (Brader, 2005.). Además, las campañas políticas pueden recurrir a diversas estrategias
para atraer a los votantes. Algunos pueden depender en gran medida de apelaciones emocionales,
mientras que otros pueden involucrarse en un nivel emocional o normativo, pero buscan persuadir a
los votantes a través de evidencia y poca argumentación racional (Vowles, 2011.). La manipulación
de los ciudadanos es una táctica común en las campañas políticas, en la que distintas respuestas
emocionales desempeñan funciones estratégicas (Marcus & MacKuen, 2004.). Sin embargo, el
término "manipulación" puede aplicarse a tácticas que influyen en las percepciones de los votantes
sobre las cuestiones políticas y los candidatos. Por lo tanto, los investigadores han aplicado el
concepto de manipulación política a las tácticas tanto psicológicas como propagandísticas utilizadas
en las campañas electorales (Noggle, 2018.) (Egea & Garrido, 2021.). En general, el uso de
apelaciones emocionales y tácticas de manipulación en las campañas políticas puede afectar
significativamente el comportamiento de los votantes, por lo que es esencial comprender los efectos
de estas estrategias.
El uso de estrategias de manipulación emocional en las campañas electorales se ha vuelto cada vez
más frecuente, particularmente en el entorno digital donde el potencial de manipulación aumenta
significativamente (Balakhonskaya & Gavra, 2020.). La estrategia comunicativa de manipulación se
utiliza activamente para lograr resultados electorales óptimos en las campañas electorales. Esto
plantea consideraciones éticas, ya que la manipulación puede influir encubiertamente en la
conciencia pública, cambiar las actitudes sociales y de comportamiento de los votantes potenciales
en una dirección que sea beneficiosa para el manipulador e incluso "obligarlos" a votar por un
candidato en particular (Balakhonskaya & Gavra, 2020.). Las investigaciones han demostrado que
los elementos emocionales se utilizan ampliamente en los anuncios políticos, y casi las tres cuartas
partes de todos los anuncios políticos se basan en las emociones más que en la lógica. De hecho, los
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"anuncios de entusiasmo" positivos tienden a ser más polarizadores que los "anuncios de miedo"
negativos. Un estudio demostró que es más probable que las imágenes de vídeo en blanco y negro
indiquen una apelación al miedo o la ira que al entusiasmo o el orgullo (Brader, 2005.). Esto pone
de relieve el poder de los elementos emocionales en las campañas políticas y el potencial de abuso
mediante la manipulación. Así pues, las consideraciones éticas que rodean el uso de estrategias de
manipulación emocional en las campañas electorales deben tomarse en serio para garantizar la
justicia y la integridad de los procesos democráticos.
Historia de las campañas electorales en Colombia
El orden político en Colombia surgió a mediados del siglo XX después de un largo período de caos.
Esto se debió, en parte, a un nuevo conjunto de reglas electorales acordadas después de la Guerra de
los Mil Días, respetando el resultado de las elecciones presidenciales de 1904. Después en la
composición del frente nacional las nuevas reglas implicaban compartir el poder entre dos partidos
principales (conservadores y liberales), y la transición a la representación proporcional se completó
en 1974 con el cierre del frente nacional que conlleva a un ejercicio democrático de apertura. Esta
fue una concesión del gobierno, que ayudó a los liberales a abandonar la insurrección militar como
estrategia política (Mazzuca & Robinson, 2009.). La votación incompleta fue otra concesión
estratégica del gobierno conservador a la oposición liberal, a cambio de una representación
permanente en las legislaturas (Mazzuca & Robinson, 2009.). Estos cambios marcaron un giro
significativo en la historia de las campañas electorales en Colombia. Antes de ese momento, hubo
un largo período de inestabilidad y conflicto. Sin embargo, con la introducción de estas nuevas
reglas electorales, hubo una mayor sensación de orden y estabilidad en el sistema político.
El uso de estrategias de manipulación emocional en las campañas electorales colombianas tiene una
larga historia. El campo de la historia electoral colombiana, particularmente la historia de las
elecciones en Colombia, ha sido enfatizado por Malcolm Deas en sus 'Algunas notas sobre la
historia del caciquismo en Colombia'. Las campañas a menudo utilizaron lenguaje y retórica
emocional para moldear la percepción de los votantes sobre los temas en cuestión. Por ejemplo, en
una campaña, el candidato José Hilario López utilizó un estilo tradicional que representaba la
opinión liberal histórica durante toda la campaña. En otro caso, Buitrago siguió el consejo de
"anuncios de entusiasmo" positivos tienden a ser más polarizadores que los "anuncios de miedo"
negativos. Un estudio demostró que es más probable que las imágenes de vídeo en blanco y negro
indiquen una apelación al miedo o la ira que al entusiasmo o el orgullo (Brader, 2005.). Esto pone
de relieve el poder de los elementos emocionales en las campañas políticas y el potencial de abuso
mediante la manipulación. Así pues, las consideraciones éticas que rodean el uso de estrategias de
manipulación emocional en las campañas electorales deben tomarse en serio para garantizar la
justicia y la integridad de los procesos democráticos.
Historia de las campañas electorales en Colombia
El orden político en Colombia surgió a mediados del siglo XX después de un largo período de caos.
Esto se debió, en parte, a un nuevo conjunto de reglas electorales acordadas después de la Guerra de
los Mil Días, respetando el resultado de las elecciones presidenciales de 1904. Después en la
composición del frente nacional las nuevas reglas implicaban compartir el poder entre dos partidos
principales (conservadores y liberales), y la transición a la representación proporcional se completó
en 1974 con el cierre del frente nacional que conlleva a un ejercicio democrático de apertura. Esta
fue una concesión del gobierno, que ayudó a los liberales a abandonar la insurrección militar como
estrategia política (Mazzuca & Robinson, 2009.). La votación incompleta fue otra concesión
estratégica del gobierno conservador a la oposición liberal, a cambio de una representación
permanente en las legislaturas (Mazzuca & Robinson, 2009.). Estos cambios marcaron un giro
significativo en la historia de las campañas electorales en Colombia. Antes de ese momento, hubo
un largo período de inestabilidad y conflicto. Sin embargo, con la introducción de estas nuevas
reglas electorales, hubo una mayor sensación de orden y estabilidad en el sistema político.
El uso de estrategias de manipulación emocional en las campañas electorales colombianas tiene una
larga historia. El campo de la historia electoral colombiana, particularmente la historia de las
elecciones en Colombia, ha sido enfatizado por Malcolm Deas en sus 'Algunas notas sobre la
historia del caciquismo en Colombia'. Las campañas a menudo utilizaron lenguaje y retórica
emocional para moldear la percepción de los votantes sobre los temas en cuestión. Por ejemplo, en
una campaña, el candidato José Hilario López utilizó un estilo tradicional que representaba la
opinión liberal histórica durante toda la campaña. En otro caso, Buitrago siguió el consejo de
pág. 8127
Marroquín y publicó artículos periódicos sobre las actividades del gobierno y el congreso, así como
sobre las campañas electorales (Posada, 2006.). Las campañas se adaptaron a diferentes públicos y
se utilizaron las emociones para influir en las opiniones de los votantes (Mazzuca & Robinson,
2009.). El estudio de las campañas electorales y la historia electoral en Colombia ha revelado que
los ricos pudieron restringir la ciudadanía plena a un estrecho rango de electores y al mismo tiempo
extender los impuestos a todos los colombianos, lo que llevó a la incapacidad del gobierno para
extraer impuestos de los ricos (Palacios, 2006.). Además, las campañas están compuestas por
actores que realmente compiten por el poder y mantener ejércitos en campañas militares requirió
enormes sacrificios para una población (LaRosa & Mejía, 2017.). El análisis de las campañas
políticas en Colombia reveló además que el declive de los dos partidos históricos genera muchas
competencias interpartidistas en las elecciones colombianas en todos los niveles (Leongómez &
Mainwaring, 2006.), que fueron vigentes hasta la constitución de 1991 que permitió una apertura
democrática en el país.
Si bien las estrategias de manipulación emocional han sido utilizadas en las campañas electorales a
lo largo de la historia colombiana, su impacto ha sido tema de estudio y debate. En su obra "Algunas
notas sobre la historia del caciquismo en Colombia", Malcolm Deas destaca el papel de la opinión
liberal histórica en las campañas electorales en Colombia (Posada, 2006.). Las estrategias políticas
que pueden haber funcionado en otros países, como Venezuela o Ecuador, pueden no haber sido tan
efectivas en Colombia. Además, la falta de plenos derechos de ciudadanía para todos los
colombianos contribuyó a que se utilizaran condiciones emocionales para influir en el electorado
(Palacios, 2006.). En tiempos más recientes, la estrategia del ex presidente Álvaro Uribe Vélez de
"seguridad democratica" logró asegurar su reelección (Posada, 2010.). Sin embargo, es importante
señalar que la competencia dentro de los partidos políticos también es un factor importante en las
elecciones colombianas (Leongómez & Mainwaring, 2006.). A pesar de que el uso de condiciones
emocionales se considera manipulador, siguen siendo una práctica común en las campañas
electorales colombianas, donde las campañas se adaptan a diferentes públicos y se invierte
financiamiento en las elecciones (Mazzuca & Robinson, 2009.), que en concepciones electorales
Marroquín y publicó artículos periódicos sobre las actividades del gobierno y el congreso, así como
sobre las campañas electorales (Posada, 2006.). Las campañas se adaptaron a diferentes públicos y
se utilizaron las emociones para influir en las opiniones de los votantes (Mazzuca & Robinson,
2009.). El estudio de las campañas electorales y la historia electoral en Colombia ha revelado que
los ricos pudieron restringir la ciudadanía plena a un estrecho rango de electores y al mismo tiempo
extender los impuestos a todos los colombianos, lo que llevó a la incapacidad del gobierno para
extraer impuestos de los ricos (Palacios, 2006.). Además, las campañas están compuestas por
actores que realmente compiten por el poder y mantener ejércitos en campañas militares requirió
enormes sacrificios para una población (LaRosa & Mejía, 2017.). El análisis de las campañas
políticas en Colombia reveló además que el declive de los dos partidos históricos genera muchas
competencias interpartidistas en las elecciones colombianas en todos los niveles (Leongómez &
Mainwaring, 2006.), que fueron vigentes hasta la constitución de 1991 que permitió una apertura
democrática en el país.
Si bien las estrategias de manipulación emocional han sido utilizadas en las campañas electorales a
lo largo de la historia colombiana, su impacto ha sido tema de estudio y debate. En su obra "Algunas
notas sobre la historia del caciquismo en Colombia", Malcolm Deas destaca el papel de la opinión
liberal histórica en las campañas electorales en Colombia (Posada, 2006.). Las estrategias políticas
que pueden haber funcionado en otros países, como Venezuela o Ecuador, pueden no haber sido tan
efectivas en Colombia. Además, la falta de plenos derechos de ciudadanía para todos los
colombianos contribuyó a que se utilizaran condiciones emocionales para influir en el electorado
(Palacios, 2006.). En tiempos más recientes, la estrategia del ex presidente Álvaro Uribe Vélez de
"seguridad democratica" logró asegurar su reelección (Posada, 2010.). Sin embargo, es importante
señalar que la competencia dentro de los partidos políticos también es un factor importante en las
elecciones colombianas (Leongómez & Mainwaring, 2006.). A pesar de que el uso de condiciones
emocionales se considera manipulador, siguen siendo una práctica común en las campañas
electorales colombianas, donde las campañas se adaptan a diferentes públicos y se invierte
financiamiento en las elecciones (Mazzuca & Robinson, 2009.), que en concepciones electorales
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han sido normalizadas por las campañas políticas, los medios de comunicación y los mismos
electores.
Impacto de las estrategias de manipulación emocional en el comportamiento de los votantes
Los estudios han demostrado que las estrategias de manipulación emocional pueden impactar
significativamente el comportamiento de los votantes en Colombia. Un estudio encontró que los
anuncios de campaña que generan emociones pueden afectar el comportamiento electoral, y los
candidatos pueden utilizar apelaciones emocionales para manipular a los votantes (Brader, 2020.).
Otro estudio examina la importancia del partidismo y la manipulación electoral, como la
manipulación y el análisis de votantes, en el comportamiento electoral (Kiss, 2013.) (Izatt, 2023.).
La personalidad, la emoción y la participación también son factores importantes para comprender el
comportamiento de los votantes, y el potencial de manipulación por parte de políticos o grupos de
intereses especiales siempre está presente (Burkell & Regan, 2019.). Las emociones negativas
también pueden influir en el comportamiento de los votantes, pero el impacto de la manipulación
intencional depende de la respuesta a la comunicación (Světlík, 2016.). Las tácticas de manipulación
a menudo se basan en manipular las actitudes de las personas, y el desarrollo de estrategias de
marketing avanzadas ha hecho que sea más fácil influir en el comportamiento de los votantes. Sin
embargo, sigue siendo una cuestión abierta si la función de la ansiedad se ha convertido más bien en
una palanca de manipulación política (Neuman, 2007.). En última instancia, las respuestas
emocionales a los candidatos pueden predecir en gran medida el comportamiento electoral, y los
candidatos pueden manipular sistemáticamente las evaluaciones que los votantes hacen de ellos sin
que el votante se dé cuenta (Isbell & Ottati, 2002.). En general, el impacto de la publicidad en el
cambio del comportamiento de los votantes es un tema complejo con implicaciones importantes para
el sistema electoral de Colombia (Gburova et al., 2023.).
La manipulación emocional juega un papel importante en el comportamiento de los votantes, tanto a
corto como a largo plazo. Los estudios han demostrado que los atractivos emocionales en los
anuncios de campaña pueden afectar significativamente el comportamiento de votación al invocar
emociones específicas (Brader, 2005.). Las campañas políticas suelen utilizar este conocimiento
para planificar y manipular estratégicamente el comportamiento de los votantes (Kiss, 2013.).
han sido normalizadas por las campañas políticas, los medios de comunicación y los mismos
electores.
Impacto de las estrategias de manipulación emocional en el comportamiento de los votantes
Los estudios han demostrado que las estrategias de manipulación emocional pueden impactar
significativamente el comportamiento de los votantes en Colombia. Un estudio encontró que los
anuncios de campaña que generan emociones pueden afectar el comportamiento electoral, y los
candidatos pueden utilizar apelaciones emocionales para manipular a los votantes (Brader, 2020.).
Otro estudio examina la importancia del partidismo y la manipulación electoral, como la
manipulación y el análisis de votantes, en el comportamiento electoral (Kiss, 2013.) (Izatt, 2023.).
La personalidad, la emoción y la participación también son factores importantes para comprender el
comportamiento de los votantes, y el potencial de manipulación por parte de políticos o grupos de
intereses especiales siempre está presente (Burkell & Regan, 2019.). Las emociones negativas
también pueden influir en el comportamiento de los votantes, pero el impacto de la manipulación
intencional depende de la respuesta a la comunicación (Světlík, 2016.). Las tácticas de manipulación
a menudo se basan en manipular las actitudes de las personas, y el desarrollo de estrategias de
marketing avanzadas ha hecho que sea más fácil influir en el comportamiento de los votantes. Sin
embargo, sigue siendo una cuestión abierta si la función de la ansiedad se ha convertido más bien en
una palanca de manipulación política (Neuman, 2007.). En última instancia, las respuestas
emocionales a los candidatos pueden predecir en gran medida el comportamiento electoral, y los
candidatos pueden manipular sistemáticamente las evaluaciones que los votantes hacen de ellos sin
que el votante se dé cuenta (Isbell & Ottati, 2002.). En general, el impacto de la publicidad en el
cambio del comportamiento de los votantes es un tema complejo con implicaciones importantes para
el sistema electoral de Colombia (Gburova et al., 2023.).
La manipulación emocional juega un papel importante en el comportamiento de los votantes, tanto a
corto como a largo plazo. Los estudios han demostrado que los atractivos emocionales en los
anuncios de campaña pueden afectar significativamente el comportamiento de votación al invocar
emociones específicas (Brader, 2005.). Las campañas políticas suelen utilizar este conocimiento
para planificar y manipular estratégicamente el comportamiento de los votantes (Kiss, 2013.).
pág. 8129
Además, la manipulación electoral, como la manipulación y la supresión de votantes, también puede
afectar el comportamiento electoral al influir en las actitudes y percepciones hacia ciertos candidatos
o temas (Izatt, 2023.). Es importante señalar que la manipulación emocional puede ser intencional o
no, y las emociones negativas pueden tener un doble efecto en el destinatario, ya sea alejándolo o
aumentando su compromiso con el mensaje (Světlík, 2016.). El desarrollo de estrategias de
marketing avanzadas ha permitido que las campañas políticas manipulen las actitudes y creencias de
las personas de manera más efectiva, aunque las implicaciones éticas de tales tácticas aún están en
debate. Las investigaciones también han demostrado que las respuestas emocionales a los
candidatos predicen en gran medida el comportamiento electoral, lo que sugiere que los candidatos
pueden manipular sistemáticamente las evaluaciones que los votantes hacen de ellos (Isbell &
Ottati, 2002.). En general, el impacto de la publicidad en el cambio del comportamiento de los
votantes es una cuestión compleja con implicaciones importantes para el proceso democrático
(Gburova et al., 2023.), comprendiendo que el ejercicio electoral a trasegado del voto consciente e
informado a un voto definido por los medios de comunicación que influyen en un carácter esencial
en la toma de decisiones de los votantes en Colombia.
Investigaciones anteriores sugieren que las relaciones emocionales desempeñan un papel crucial en
las campañas electorales y pueden influir en el comportamiento de los votantes (Brader, 2020.)
(Isbell & Ottati, 2002.). Sin embargo, el impacto de estos componentes puede variar según los
diferentes grupos demográficos. Por ejemplo, los candidatos pueden utilizar estrategias de
manipulación emocional para persuadir a los votantes a comportarse de cierta manera (Kiss, 2013.).
El principio de los partidos y la identidad de grupo también desempeñan un papel importante en el
comportamiento electoral (Kiss, 2013.). Además, las técnicas de manipulación electoral, como la
manipulación y la supresión de votantes, también pueden tener un impacto en el comportamiento
electoral (Izatt, 2023.). Los avances recientes en análisis de votantes y técnicas de focalización
pueden influir aún más en las elecciones y el comportamiento de los votantes (Burkell & Regan,
2019.). Sin embargo, la eficacia de estas estrategias puede depender de la respuesta emocional del
grupo objetivo. Los anuncios negativos que provocan irritación pueden tener un efecto
contraproducente en el comportamiento de los votantes, lo que indica que el impacto de la
Además, la manipulación electoral, como la manipulación y la supresión de votantes, también puede
afectar el comportamiento electoral al influir en las actitudes y percepciones hacia ciertos candidatos
o temas (Izatt, 2023.). Es importante señalar que la manipulación emocional puede ser intencional o
no, y las emociones negativas pueden tener un doble efecto en el destinatario, ya sea alejándolo o
aumentando su compromiso con el mensaje (Světlík, 2016.). El desarrollo de estrategias de
marketing avanzadas ha permitido que las campañas políticas manipulen las actitudes y creencias de
las personas de manera más efectiva, aunque las implicaciones éticas de tales tácticas aún están en
debate. Las investigaciones también han demostrado que las respuestas emocionales a los
candidatos predicen en gran medida el comportamiento electoral, lo que sugiere que los candidatos
pueden manipular sistemáticamente las evaluaciones que los votantes hacen de ellos (Isbell &
Ottati, 2002.). En general, el impacto de la publicidad en el cambio del comportamiento de los
votantes es una cuestión compleja con implicaciones importantes para el proceso democrático
(Gburova et al., 2023.), comprendiendo que el ejercicio electoral a trasegado del voto consciente e
informado a un voto definido por los medios de comunicación que influyen en un carácter esencial
en la toma de decisiones de los votantes en Colombia.
Investigaciones anteriores sugieren que las relaciones emocionales desempeñan un papel crucial en
las campañas electorales y pueden influir en el comportamiento de los votantes (Brader, 2020.)
(Isbell & Ottati, 2002.). Sin embargo, el impacto de estos componentes puede variar según los
diferentes grupos demográficos. Por ejemplo, los candidatos pueden utilizar estrategias de
manipulación emocional para persuadir a los votantes a comportarse de cierta manera (Kiss, 2013.).
El principio de los partidos y la identidad de grupo también desempeñan un papel importante en el
comportamiento electoral (Kiss, 2013.). Además, las técnicas de manipulación electoral, como la
manipulación y la supresión de votantes, también pueden tener un impacto en el comportamiento
electoral (Izatt, 2023.). Los avances recientes en análisis de votantes y técnicas de focalización
pueden influir aún más en las elecciones y el comportamiento de los votantes (Burkell & Regan,
2019.). Sin embargo, la eficacia de estas estrategias puede depender de la respuesta emocional del
grupo objetivo. Los anuncios negativos que provocan irritación pueden tener un efecto
contraproducente en el comportamiento de los votantes, lo que indica que el impacto de la
pág. 8130
manipulación emocional no siempre es sencillo (Světlík, 2016.). Además, la manipulación de las
emociones en la política tiene implicaciones importantes para el bienestar de los ciudadanos y los
procesos democráticos. Por lo tanto, es importante examinar cómo los diferentes grupos
demográficos responden a las estrategias de manipulación emocional utilizadas en las campañas
electorales e identificar su impacto potencial en el comportamiento electoral (Gburova et al., 2023.).
Los medios de comunicación, las redes sociales y la manipulación emocional en las campañas
electorales
Los medios de comunicación juegan un papel importante en el uso de estrategias de manipulación
emocional durante las campañas electorales. Las estrategias de manipulación emocional pueden
influir potencialmente en el comportamiento de los votantes, y los activistas políticos utilizan
herramientas de marketing digital, incluidas herramientas psicográficas y de neuromarketing, para
optimizar el impacto emocional de los mensajes publicitarios en las necesidades psicológicas de
audiencias específicas (Kiss, 2013.). Los medios han permitido el uso de estrategias de
manipulación emocional más avanzadas mediante el uso de herramientas de marketing digital
combinadas con datos y métodos de seguimiento (Bakir, 2020.). Un algoritmo puede predecir los
rasgos de personalidad de un individuo, incluidas opiniones políticas, religiosas, orientación sexual,
origen étnico, inteligencia, felicidad, separación de los padres, edad y género, entre muchos otros
(Bakir, 2020.). El análisis y modelado de “big data” han permitido el acceso a características
psicológicas e inferencias políticas mucho más allá del alcance de las bases de datos tradicionales
(Bakir, 2020.). Los perfiles psicográficos se utilizan para predecir la personalidad con “big data”
(Bakir, 2020.). Las pruebas emocionales y la medición del estado de ánimo han sido durante mucho
tiempo fundamentales para las campañas políticas (Bakir, 2020.). La eficacia de las tácticas de
campaña política digital que utilizan estrategias de manipulación emocional no se puede demostrar
de manera concluyente debido a diversas limitaciones en la investigación de los "efectos" de los
medios; sin embargo, estas limitaciones no invalidan los intentos de comprender los intentos de
operaciones psicológicas en campañas políticas digitales y los esfuerzos sostenidos de los activistas
políticos para influir en el comportamiento humano utilizando métodos opacos de uso de datos. El
uso de estrategias de manipulación emocional en las campañas electorales ataca las normas y
manipulación emocional no siempre es sencillo (Světlík, 2016.). Además, la manipulación de las
emociones en la política tiene implicaciones importantes para el bienestar de los ciudadanos y los
procesos democráticos. Por lo tanto, es importante examinar cómo los diferentes grupos
demográficos responden a las estrategias de manipulación emocional utilizadas en las campañas
electorales e identificar su impacto potencial en el comportamiento electoral (Gburova et al., 2023.).
Los medios de comunicación, las redes sociales y la manipulación emocional en las campañas
electorales
Los medios de comunicación juegan un papel importante en el uso de estrategias de manipulación
emocional durante las campañas electorales. Las estrategias de manipulación emocional pueden
influir potencialmente en el comportamiento de los votantes, y los activistas políticos utilizan
herramientas de marketing digital, incluidas herramientas psicográficas y de neuromarketing, para
optimizar el impacto emocional de los mensajes publicitarios en las necesidades psicológicas de
audiencias específicas (Kiss, 2013.). Los medios han permitido el uso de estrategias de
manipulación emocional más avanzadas mediante el uso de herramientas de marketing digital
combinadas con datos y métodos de seguimiento (Bakir, 2020.). Un algoritmo puede predecir los
rasgos de personalidad de un individuo, incluidas opiniones políticas, religiosas, orientación sexual,
origen étnico, inteligencia, felicidad, separación de los padres, edad y género, entre muchos otros
(Bakir, 2020.). El análisis y modelado de “big data” han permitido el acceso a características
psicológicas e inferencias políticas mucho más allá del alcance de las bases de datos tradicionales
(Bakir, 2020.). Los perfiles psicográficos se utilizan para predecir la personalidad con “big data”
(Bakir, 2020.). Las pruebas emocionales y la medición del estado de ánimo han sido durante mucho
tiempo fundamentales para las campañas políticas (Bakir, 2020.). La eficacia de las tácticas de
campaña política digital que utilizan estrategias de manipulación emocional no se puede demostrar
de manera concluyente debido a diversas limitaciones en la investigación de los "efectos" de los
medios; sin embargo, estas limitaciones no invalidan los intentos de comprender los intentos de
operaciones psicológicas en campañas políticas digitales y los esfuerzos sostenidos de los activistas
políticos para influir en el comportamiento humano utilizando métodos opacos de uso de datos. El
uso de estrategias de manipulación emocional en las campañas electorales ataca las normas y
pág. 8131
valores democráticos fundamentales, que incluyen tener un acceso justo a información sobre
partidos y candidatos que esté libre de influencias o coerciones indebidas. El impacto de las
estrategias de manipulación emocional en el comportamiento electoral es difícil de cuantificar, y los
esfuerzos por establecer vínculos causales entre estas estrategias y el comportamiento electoral hasta
ahora han concluido que los impactos son difíciles de analizar (Bakir, 2020.). Sin embargo, el
engaño y la coerción son cada vez más comunes en las campañas políticas digitales, y el engaño
dirigido.
En los últimos años, las plataformas de redes sociales se han convertido en una fuerza dominante en
las campañas electorales, facilitando el uso de estrategias de manipulación emocional para influir en
el público objetivo. Se ha descubierto que las plataformas de redes sociales como Facebook y
Whatsapp son las principales fuentes de casos denunciados de desinformación electoral (Bakir,
2020.). El engaño microdirigido es particularmente problemático en países con protecciones de
privacidad y datos más débiles y tradiciones electorales más débiles, ya que permite atacar
encubiertamente a individuos o grupos específicos (Bakir, 2020.). A pesar de las preocupaciones
sobre su papel en las campañas electorales, Facebook todavía permite el engaño microdirigido
durante los ciclos electorales (Bakir, 2020.). Se espera que el uso cada vez mayor de análisis de “big
data”, publicidad dirigida y psicografía en las campañas electorales se intensifique con el aumento
de la inteligencia artificial (IA) en las comunicaciones políticas (Bakir, 2020.). El uso de engaños
microdirigidos es una importante amenaza democrática durante las elecciones, ya que excluye
oportunidades de reflexión y deliberación, y limita las opciones de las personas al hacerlas sentir o
comportarse de una determinada manera (Bakir, 2020.). Además, las campañas electorales utilizan
herramientas de sondeo como Nationbuilder para crear perfiles de partidarios y dirigirse a ellos
utilizando las redes sociales y los datos del censo electoral (Bakir, 2020.). Se pueden utilizar
estrategias de manipulación emocional en publicidad en línea microdirigida en plataformas de redes
sociales, que es una táctica común utilizada en las campañas electorales (Bakir, 2020.). Se cuestiona
la exactitud de la elaboración de perfiles realizada por los partidos políticos, lo que pone de relieve
aún más las preocupaciones sobre el uso de estrategias de manipulación emocional en las
plataformas de redes sociales (Bakir, 2020.). La naturaleza encubierta de la focalización
valores democráticos fundamentales, que incluyen tener un acceso justo a información sobre
partidos y candidatos que esté libre de influencias o coerciones indebidas. El impacto de las
estrategias de manipulación emocional en el comportamiento electoral es difícil de cuantificar, y los
esfuerzos por establecer vínculos causales entre estas estrategias y el comportamiento electoral hasta
ahora han concluido que los impactos son difíciles de analizar (Bakir, 2020.). Sin embargo, el
engaño y la coerción son cada vez más comunes en las campañas políticas digitales, y el engaño
dirigido.
En los últimos años, las plataformas de redes sociales se han convertido en una fuerza dominante en
las campañas electorales, facilitando el uso de estrategias de manipulación emocional para influir en
el público objetivo. Se ha descubierto que las plataformas de redes sociales como Facebook y
Whatsapp son las principales fuentes de casos denunciados de desinformación electoral (Bakir,
2020.). El engaño microdirigido es particularmente problemático en países con protecciones de
privacidad y datos más débiles y tradiciones electorales más débiles, ya que permite atacar
encubiertamente a individuos o grupos específicos (Bakir, 2020.). A pesar de las preocupaciones
sobre su papel en las campañas electorales, Facebook todavía permite el engaño microdirigido
durante los ciclos electorales (Bakir, 2020.). Se espera que el uso cada vez mayor de análisis de “big
data”, publicidad dirigida y psicografía en las campañas electorales se intensifique con el aumento
de la inteligencia artificial (IA) en las comunicaciones políticas (Bakir, 2020.). El uso de engaños
microdirigidos es una importante amenaza democrática durante las elecciones, ya que excluye
oportunidades de reflexión y deliberación, y limita las opciones de las personas al hacerlas sentir o
comportarse de una determinada manera (Bakir, 2020.). Además, las campañas electorales utilizan
herramientas de sondeo como Nationbuilder para crear perfiles de partidarios y dirigirse a ellos
utilizando las redes sociales y los datos del censo electoral (Bakir, 2020.). Se pueden utilizar
estrategias de manipulación emocional en publicidad en línea microdirigida en plataformas de redes
sociales, que es una táctica común utilizada en las campañas electorales (Bakir, 2020.). Se cuestiona
la exactitud de la elaboración de perfiles realizada por los partidos políticos, lo que pone de relieve
aún más las preocupaciones sobre el uso de estrategias de manipulación emocional en las
plataformas de redes sociales (Bakir, 2020.). La naturaleza encubierta de la focalización
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psicográfica en las plataformas de redes sociales hace que el público objetivo no sea consciente de
la manipulación. En última instancia, las plataformas de redes sociales se utilizan en las campañas
electorales para transmitir mensajes que influyen o empujan al público objetivo, lo que puede tener
implicaciones significativas para el proceso democrático.
La manipulación de las emociones en las campañas electorales a través de los medios de
comunicación es una preocupación creciente y algunas plataformas de redes sociales han intentado
regular los anuncios políticos. Por ejemplo, Twitter y Google cuentan con políticas para prevenir
ciertos tipos de anuncios políticos, como “deepfakes” o noticias falsas y afirmaciones engañosas
sobre el proceso electoral (Bakir, 2020.). Estas políticas tienen como objetivo aumentar la
transparencia en la financiación y el alcance de los anuncios políticos proporcionando información
como quién financió el anuncio, cuánto gastaron y el alcance del anuncio en múltiples grupos
demográficos (Bakir, 2020.). Sin embargo, las políticas de Twitter y Google no impiden que los
actores políticos inserten mensajes de manera oculta en las redes sociales (Bakir, 2020.). Facebook
ha adoptado un enfoque diferente, negándose a vigilar Internet en busca de discursos políticos
(Bakir, 2020.). Sin embargo, Facebook y Google han creado bibliotecas de anuncios electorales en
las redes sociales para aumentar la transparencia, permitiendo a las personas inspeccionar los
anuncios y hacer sus propias evaluaciones (Bakir, 2020.). Si bien Twitter no acepta anuncios
explícitamente políticos, Google elimina los anuncios políticos que violan claramente sus políticas
publicitarias (Bakir, 2020.). Por lo tanto, es necesario trabajar más para regular el uso de estrategias
de manipulación emocional en las campañas electorales a través de los medios de comunicación.
Prevención de estrategias de manipulación emocional en campañas electorales
Las campañas electorales suelen emplear estrategias de manipulación emocional para influir en los
votantes, pero se pueden tomar medidas para evitar su uso. Una posible solución es la creación de
políticas que protejan contra tales tácticas. Sin embargo, es fundamental comprender qué políticas
serían más eficaces para ofrecer protección (Albertson & Gadarian, 2015.). Por ejemplo, puede
resultar útil redactar cuestionarios y diseñar estrategias de campaña con miras a prevenir la
manipulación. Además, analizar el lenguaje utilizado en los anuncios políticos también puede
ayudar a prevenir el uso de estrategias de manipulación emocional. Algunos países han promulgado
psicográfica en las plataformas de redes sociales hace que el público objetivo no sea consciente de
la manipulación. En última instancia, las plataformas de redes sociales se utilizan en las campañas
electorales para transmitir mensajes que influyen o empujan al público objetivo, lo que puede tener
implicaciones significativas para el proceso democrático.
La manipulación de las emociones en las campañas electorales a través de los medios de
comunicación es una preocupación creciente y algunas plataformas de redes sociales han intentado
regular los anuncios políticos. Por ejemplo, Twitter y Google cuentan con políticas para prevenir
ciertos tipos de anuncios políticos, como “deepfakes” o noticias falsas y afirmaciones engañosas
sobre el proceso electoral (Bakir, 2020.). Estas políticas tienen como objetivo aumentar la
transparencia en la financiación y el alcance de los anuncios políticos proporcionando información
como quién financió el anuncio, cuánto gastaron y el alcance del anuncio en múltiples grupos
demográficos (Bakir, 2020.). Sin embargo, las políticas de Twitter y Google no impiden que los
actores políticos inserten mensajes de manera oculta en las redes sociales (Bakir, 2020.). Facebook
ha adoptado un enfoque diferente, negándose a vigilar Internet en busca de discursos políticos
(Bakir, 2020.). Sin embargo, Facebook y Google han creado bibliotecas de anuncios electorales en
las redes sociales para aumentar la transparencia, permitiendo a las personas inspeccionar los
anuncios y hacer sus propias evaluaciones (Bakir, 2020.). Si bien Twitter no acepta anuncios
explícitamente políticos, Google elimina los anuncios políticos que violan claramente sus políticas
publicitarias (Bakir, 2020.). Por lo tanto, es necesario trabajar más para regular el uso de estrategias
de manipulación emocional en las campañas electorales a través de los medios de comunicación.
Prevención de estrategias de manipulación emocional en campañas electorales
Las campañas electorales suelen emplear estrategias de manipulación emocional para influir en los
votantes, pero se pueden tomar medidas para evitar su uso. Una posible solución es la creación de
políticas que protejan contra tales tácticas. Sin embargo, es fundamental comprender qué políticas
serían más eficaces para ofrecer protección (Albertson & Gadarian, 2015.). Por ejemplo, puede
resultar útil redactar cuestionarios y diseñar estrategias de campaña con miras a prevenir la
manipulación. Además, analizar el lenguaje utilizado en los anuncios políticos también puede
ayudar a prevenir el uso de estrategias de manipulación emocional. Algunos países han promulgado
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leyes para proteger contra afirmaciones falsas y técnicas de manipulación que producen emociones
o sentimientos. En Estados Unidos, la preocupación por las campañas manipuladoras de
desinformación sobre vacunas subraya la necesidad de protección contra tales tácticas (Chou &
Budenz, 2020.). Además, las leyes de financiación de campañas pueden utilizarse para evitar gastos
excesivos, manipulación estratégica que podrían conducir a comportamientos poco éticos. Es
importante señalar que prevenir estrategias de manipulación emocional en las campañas electorales
no es sólo una cuestión de política; también depende de cambiar la forma en que consumimos
noticias políticas y en quién confiamos, así como de promover un comportamiento ético entre los
candidatos y partidos políticos (Shiner, 2019.) (Cătău, 2019.) (McDermott & Zimbardo, 2007.). En
última instancia, la mejor manera de prevenir estrategias de manipulación emocional en las
campañas electorales puede ser una combinación de leyes, regulaciones y un cambio en las normas
sociales.
La educación y la concientización de los votantes son cruciales para reducir el impacto de las
estrategias de manipulación emocional empleadas durante las campañas electorales. Para fortalecer
la protección de los votantes, se deben implementar políticas que aborden el uso de técnicas de
engaño y manipulación por parte de las campañas (Shiner, 2019.). Las campañas que utilizan
lenguaje y retórica cargados de emociones para manipular la opinión pública (Cătău, 2019.) pueden
contrarrestarse ofreciendo a los votantes información clara y precisa sobre los temas que se están
considerando. Escribir cuestionarios y diseñar estrategias de campaña con la ayuda de académicos
especializados en psicología también puede proporcionar información sobre hasta qué punto las
campañas pueden manipular a los votantes. Se debe alentar a las campañas a utilizar temas que
representen una amplia gama de emociones, en lugar de basarse únicamente en unos pocos temas
con carga emocional (Albertson & Gadarian, 2015.). Además, se deben hacer cumplir las leyes y
reglamentos que ofrecen protección contra la publicidad engañosa y otras técnicas de manipulación.
También se debe controlar el gasto de campaña para evitar manipulaciones estratégicas y
contribuciones subóptimas. Por último, es importante abordar las preocupaciones sobre el uso de
campañas manipuladoras de información errónea sobre las vacunas, activando emociones positivas
en las conductas preventivas de la COVID (Chou & Budenz, 2020.). Al implementar estas políticas
leyes para proteger contra afirmaciones falsas y técnicas de manipulación que producen emociones
o sentimientos. En Estados Unidos, la preocupación por las campañas manipuladoras de
desinformación sobre vacunas subraya la necesidad de protección contra tales tácticas (Chou &
Budenz, 2020.). Además, las leyes de financiación de campañas pueden utilizarse para evitar gastos
excesivos, manipulación estratégica que podrían conducir a comportamientos poco éticos. Es
importante señalar que prevenir estrategias de manipulación emocional en las campañas electorales
no es sólo una cuestión de política; también depende de cambiar la forma en que consumimos
noticias políticas y en quién confiamos, así como de promover un comportamiento ético entre los
candidatos y partidos políticos (Shiner, 2019.) (Cătău, 2019.) (McDermott & Zimbardo, 2007.). En
última instancia, la mejor manera de prevenir estrategias de manipulación emocional en las
campañas electorales puede ser una combinación de leyes, regulaciones y un cambio en las normas
sociales.
La educación y la concientización de los votantes son cruciales para reducir el impacto de las
estrategias de manipulación emocional empleadas durante las campañas electorales. Para fortalecer
la protección de los votantes, se deben implementar políticas que aborden el uso de técnicas de
engaño y manipulación por parte de las campañas (Shiner, 2019.). Las campañas que utilizan
lenguaje y retórica cargados de emociones para manipular la opinión pública (Cătău, 2019.) pueden
contrarrestarse ofreciendo a los votantes información clara y precisa sobre los temas que se están
considerando. Escribir cuestionarios y diseñar estrategias de campaña con la ayuda de académicos
especializados en psicología también puede proporcionar información sobre hasta qué punto las
campañas pueden manipular a los votantes. Se debe alentar a las campañas a utilizar temas que
representen una amplia gama de emociones, en lugar de basarse únicamente en unos pocos temas
con carga emocional (Albertson & Gadarian, 2015.). Además, se deben hacer cumplir las leyes y
reglamentos que ofrecen protección contra la publicidad engañosa y otras técnicas de manipulación.
También se debe controlar el gasto de campaña para evitar manipulaciones estratégicas y
contribuciones subóptimas. Por último, es importante abordar las preocupaciones sobre el uso de
campañas manipuladoras de información errónea sobre las vacunas, activando emociones positivas
en las conductas preventivas de la COVID (Chou & Budenz, 2020.). Al implementar estas políticas
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y prácticas, podemos mejorar la educación y la conciencia de los votantes y reducir el impacto de
las estrategias de manipulación emocional durante las campañas electorales.
CONCLUSIÓN
Las consecuencias de descuidar las estrategias de manipulación emocional en las campañas
electorales pueden ser graves. Se sabe que las campañas políticas utilizan consideraciones
emocionales para manipular a los votantes. El uso de tales técnicas tiene el potencial de alterar la
forma en que consumimos noticias políticas, en quién confiamos y qué políticas apoyamos o nos
oponemos (Albertson & Gadarian, 2015.). De hecho, se ha argumentado que el uso de estrategias de
manipulación emocional en campañas políticas puede tener graves implicaciones para la democracia
misma. Por ejemplo, tales estrategias pueden impedir que los votantes tomen decisiones informadas
basadas en las políticas y calificaciones del candidato (Riker et al., 1996.). Además, estas campañas
pueden devaluar el discurso político y provocar discordia política, lo que puede dañar aún más el
proceso democrático (Chou & Budenz, 2020.). Aunque las condiciones emocionales a menudo se
consideran manipuladores, se utilizan habitualmente en campañas políticas.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Albertson, B., & Gadarian, S. K. (2015). Anxious politics: Democratic citizenship in a threatening
world. Cambridge University Press.
Bakir, V. (2020). Psychological operations in digital political campaigns: Assessing Cambridge
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manipulation in the electoral communication in a digital environment. In 2020 IEEE
Communication Strategies in Digital Society Seminar (ComSDS) (pp. 91-98). IEEE.
https://10.1109/ComSDS49898.2020.9101306
Borah, P. (2016). Political Facebook use: Campaign strategies used in 2008 and 2012 presidential
elections. Journal of Information Technology & Politics, 13(4), 326-338.
https://doi.org/10.1080/19331681.2016.1163519
y prácticas, podemos mejorar la educación y la conciencia de los votantes y reducir el impacto de
las estrategias de manipulación emocional durante las campañas electorales.
CONCLUSIÓN
Las consecuencias de descuidar las estrategias de manipulación emocional en las campañas
electorales pueden ser graves. Se sabe que las campañas políticas utilizan consideraciones
emocionales para manipular a los votantes. El uso de tales técnicas tiene el potencial de alterar la
forma en que consumimos noticias políticas, en quién confiamos y qué políticas apoyamos o nos
oponemos (Albertson & Gadarian, 2015.). De hecho, se ha argumentado que el uso de estrategias de
manipulación emocional en campañas políticas puede tener graves implicaciones para la democracia
misma. Por ejemplo, tales estrategias pueden impedir que los votantes tomen decisiones informadas
basadas en las políticas y calificaciones del candidato (Riker et al., 1996.). Además, estas campañas
pueden devaluar el discurso político y provocar discordia política, lo que puede dañar aún más el
proceso democrático (Chou & Budenz, 2020.). Aunque las condiciones emocionales a menudo se
consideran manipuladores, se utilizan habitualmente en campañas políticas.
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