pág. 1
DETERMINANTES DEL ESTRÉS
HÍDRICO EN EL PERÚ ENTRE 2008 Y
2022
DETERMINANTS OF WATER STRESS IN PERU
BETWEEN 2008 AND 2022
Pierina Catherine Norabuena Trejo
Universidad Nacional Santiago Antúnez de Mayolo, Perú
Oscar Guillermo Ellacuriaga San Martin
Universidad Nacional Santiago Antúnez de Mayolo, Perú
Carlos Antonio Reyes Pareja
Universidad Nacional Santiago Antúnez de Mayolo, Perú
pág. 14204
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v9i5.20578
Determinantes del Estrés Hídrico en el Perú Entre 2008 y 2022
Pierina Catherine Norabuena Trejo 1
pnorabuenat@unasam.edu.pe
https://orcid.org/0000-0003-1532-2603
Universidad Nacional Santiago Antúnez de
Mayolo
Huaraz, Perú
Oscar Guillermo Ellacuriaga San Martin
oellacuriagasm@unasam.edu.pe
https://orcid.org/0009-0004-4557-6211
Universidad Nacional Santiago Antúnez de
Mayolo
Huaraz, Perú
Carlos Antonio Reyes Pareja
creyesp@unasam.edu.pe
https://orcid.org/0000-0002-5899-8972
Universidad Nacional Santiago Antúnez de
Mayolo
Huaraz, Perú
RESUMEN
El presente estudio analiza el impacto del cambio climático, la degradación ambiental, la infraestructura
de riego, el crecimiento económico y el crecimiento poblacional sobre el estrés hídrico en el Perú
durante el período 2008-2022. La investigación se enmarca en un enfoque cuantitativo, de tipo
longitudinal no experimental y considera variables, dimensiones e indicadores pertinentes. Para el
análisis se utilizaron datos del Ministerio del Ambiente (2025), las Naciones Unidas (2025) y el Banco
Mundial (2025). Aplicando el método de Mínimos Cuadrados Robustos (MCR), se encontró que una
variación del 1 % en los factores explicativos genera un cambio del 0,098 % (cambio climático), 0,068
% (degradación ambiental), 3,79 % (infraestructura de riego), 0,30 % (crecimiento económico) y 0,074
% (crecimiento poblacional) en el nivel de estrés hídrico. Los resultados evidencian la necesidad urgente
de formular políticas públicas orientadas a mitigar dichos efectos, fortalecer la infraestructura de riego
y reevaluar el modelo de crecimiento económico y demográfico para lograr un desarrollo sostenible
compatible con la conservación de los recursos hídricos.
Palabras clave: estrés hídrico, cambio climático, degradación de ecosistemas, población,
infraestructura
1
Autor principal:
Correspondencia: pnorabuenat@unasam.edu.pe
pág. 14205
Determinants of Water Stress in Peru Between 2008 and 2022
ABSTRACT
The study examines the impact of climate change, environmental degradation, irrigation infrastructure,
economic growth, and population growth on water stress in Peru between 2008 and 2022. The
methodology has a quantitative approach, exploring variables, dimensions, and indicators, and adopting
a non-experimental longitudinal approach, using data from the Ministry of the Environment (2025), the
United Nations (2025), and the World Bank (2025). Using the Robust Least Squares (RLS) method, it
is found that a 1 % variation in the explanatory factors (climate change, environmental degradation,
irrigation infrastructure, economic growth, and population growth) leads to a variation in water stress
of 0.098 %, 0.068 %, 3.79 %, 0.30 %, and 0.074 %, respectively. The study highlights the need to
establish policies to mitigate its effects, strengthen irrigation infrastructure, and reassess demographic
and economic growth to integrate development with the conservation of water resources.
Keywords: water stress, climate change, ecosystem degradation, population, infrastructure
Artículo recibido 02 setiembre 2025
Aceptado para publicación: 30 setiembre 2025
pág. 14206
INTRODUCCIÓN
En el Perú se observa una escalada en la presión ejercida sobre sus recursos hídricos, lo cual se evidencia
en la intensificación del estrés hídrico, fenómeno caracterizado por la divergencia entre la demanda y
el suministro de agua, lo cual constituye una amenaza para la sostenibilidad ambiental, el avance
socioeconómico y la seguridad alimentaria. Frente a la creciente insuficiencia de agua potable a nivel
global, se proyecta que para el año 2025, la mitad de la población global residirá en regiones con
insuficiencia hídrica (Kozicki & Baiyasi-Kozicki, 2019). Al alcanzar los 9 mil millones de individuos
en el año 2050, la población global requerirá un incremento en el suministro de agua dulce en naciones
en desarrollo (Taft, 2015a).
Entre 2011 y 2021, la mayoría de los países latinoamericanos se mantuvieron con niveles de estrés
hídrico inferiores al 10 %, a excepción de México que registró un aumento del 45,02 % en 2021, en
comparación con el 29,81 % en 2011. Perú y Colombia experimentaron aumentos relativos en el estrés
hídrico. Perú experimentó un aumento del 2,67 % al 4,39 %. El Instituto de Recursos Mundiales estima
un aumento de 1000 millones de personas en zonas con alto estrés hídrico, siendo Perú el que presenta
los niveles más altos, entre 40 % - 80 % (Observatorio Ceplan, 2024).
Perú es una nación susceptible al estrés hídrico, con una población de 34,049,588 individuos y un
crecimiento económico sostenido en el 2022 (Naciones Unidas, 2025). La capital de esta nación,
enfrenta un grave estrés hídrico, especialmente durante la temporada seca de mayo a diciembre. A pesar
de la abundancia de recursos hídricos, la región experimenta escasas lluvias y escasez de agua en
pantanos, arroyos y ríos (Gammie & De Bievre, 2015). A ello se suma que la escasez de agua se ha
ampliado por la afirmación política e ideológica de mercado y relaciones de propiedad privada, que fue
utilizado como legitimación para mantener desigualdades sociales y espaciales (Ioris, 2012). Además,
el acceso y utilización indiscriminada de los servicios ecológicos forestales conducen a la degradación,
el incremento del estrés hídrico, el deterioro de las condiciones de vida y una mayor susceptibilidad a
la pobreza (Rijalba-Palacios, 2024).
El estrés hídrico, cuantificado por el aumento sostenido en la extracción de agua dulce, ha
experimentado una evolución desde un 0,83 % en 2008 hasta un 2,07 % en 2022, atribuible a elementos
como el crecimiento económico y el cambio climático. Además, los ecosistemas peruanos enfrentan
pág. 14207
desafíos ambientales debido a la expansión de la extracción de caña de azúcar, incluyendo la reducción
de la cobertura vegetal, el estrés hídrico y el uso de compuestos que agotan la capa de ozono
(Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial, 2021). Para mantener los
ecosistemas de agua dulce a nivel mundial, aproximadamente 20-50 % del agua fluvial anual debería
ser destinado a estos ecosistemas (Smakhtin et al., 2004).
Una vez examinadas las variables de estudio, se planteó la siguiente interrogante: ¿Cuáles son los
determinantes que inciden en el estrés hídrico en Perú entre 2008 y 2022? El propósito es examinar la
repercusión del cambio climático, la degradación ambiental, la infraestructura de riego, así como el
crecimiento poblacional y el desarrollo económico.
Los hallazgos posibilitarán la priorización de medidas destinadas a mitigar la insuficiencia hídrica
(estrés hidrológico), en consonancia con los objetivos de desarrollo sostenible. Asimismo, servirán
como fuente de información para las autoridades sectoriales (Ana, Minam, Minagri) en la formulación
de estrategias adaptativas.
Diversos autores señalan que la desertificación, el estrés hídrico y el cambio climático son soluciones
económicas y eficaces para que las comunidades rurales cuenten con agua para cubrir sus bajos ingresos
(Ponce-Vega, 2015). El cambio climático global y regional ha incrementado la magnitud e intensidad
de las sequías, incrementando la prevalencia de zonas áridas. Los eventos de estrés secuencial han
incrementado el estrés de las plantas (Pulido Pulido, 2014). En la Amazonía, las condiciones climáticas
extremas y los modelos climáticos predicen condiciones más frías y más cálidas, lo que aumenta el
estrés hídrico en la región (Olivares et al., 2015). El cambio global en los recursos hídricos es importante
para las sociedades y ecosistemas, pero la falta de datos e información deben considerar el futuro
abastecimiento de recursos hídricos (Drenkhan et al., 2015). Figueroa et al. (2023) abordan la escasez
de agua en países con alta presión y infraestructura inadecuada, enfrentando costos y escasez total,
sumado al crecimiento económico que ha propiciado una demanda incrementada de agua, dado que la
producción industrial y la generación de energía demandan volúmenes significativos de agua.
Respecto a la degradación ambiental, el acceso y uso indiscriminado de los servicios forestales
contribuyen a la degradación, al aumento del estrés hídrico, al deterioro de las condiciones de vida y al
aumento de la pobreza en Piura (Rijalba-Palacios, 2024). Además, los ecosistemas son hábitats
pág. 14208
terrestres y acuáticos que no solo preservan una amplia variedad de especies, sino que también brindan
servicios culturales, suministro de alimentos y regulación del control climático y la administración de
plagas (Arlinghaus et al., 2018). Además, la inseguridad, el desempleo y la corrupción representan
factores que fomentan la pobreza, la migración, el abandono de zonas rurales, la deforestación y la
extracción de recursos naturales, lo que conduce a una degradación ecológica y complica la
conservación ambiental (Perevochtchikova, 2014).
En cuanto infraestructura de riego, diversos países caribeños se encuentran con altos grados de estrés
hídrico y falta de agua, a causa del incremento en la demanda, la infraestructura deficiente y la escasa
inversión en el sector del agua (Kaidou-Jeffrey et al., 2018). Es preciso destacar que existen países
declarados en situación de escasez total de agua, “Día Cero”. Se caracterizan por una infraestructura
hidroeléctrica inadecuada, una gobernanza ineficiente y sequías extremas, evidenciando el alto costo
asociado al acceso de agua potable (Figueroa et al., 2023).
Perú es un país con una ubicación estratégica para los recursos hídricos. Sin embargo, al igual que
muchos otros países, enfrenta problemas de oferta y demanda de agua debido al crecimiento de la
densificación y a la contaminación causada por el uso agrícola e industrial (Eda & Chen, 2010). En esa
línea, el crecimiento poblacional, las actividades económicas intensivas y el cambio climático han
generado una considerable presión o estrés sobre el recurso hídrico (Bahamon Urrea et al., 2018).
Además, un aumento de la urbanización y población ejerce presión sobre los recursos naturales (Lario,
2022). Al mismo tiempo, el 47 % de la población global se encuentra en regiones de alto estrés hídrico
y es crucial proporcionar retroalimentación real sobre la calidad del agua (Kozicki & Baiyasi-Kozicki,
2019).
La administración sostenible del agua demanda una evaluación de la presión demográfica sobre los
recursos hídricos, la densidad demográfica relativa y las variables hidrológicas y climáticas que inciden
en la cantidad de agua disponible (Chamba-Ontaneda et al., 2019). La capacidad del recurso hídrico se
encuentra en peligro debido al incremento poblacional y al cambio climático en la nación. El agua gris,
definida como agua residual separada de las aguas negras y susceptible de tratamiento y reutilización
en procesos de riego y descarga de inodoros, emerge como una oportunidad atractiva para incrementar
la disponibilidad de agua (Díaz et al., 2021).
pág. 14209
En relación con el crecimiento económico, resulta imperativo que las naciones ricas transfieran el 0,7 %
del Producto Bruto Interno per cápita (PBI) a las naciones pobres, tal como se establece en la
Convención de 1949 y otros acuerdos de la Organización de las Naciones Unidas para cumplir con los
Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM). Es urgente confrontar la globalización mediante la
implementación de acciones positivas e iniciativas económicas sociales sostenibles para erradicar la
pobreza tanto en las naciones ricas como en las desfavorecidas (Chanuka, 2005).
Las bases teóricas se fundamentan en la teoría de la Huella Hídrica de Hoekstra & Mekonnen (2011)
que presenta una evaluación global de las huellas hídricas nacionales, que se enfoca en el uso y gestión
del agua dulce. Esta evaluación se basa en las cuantificaciones y mapeos de las huellas hídricas en los
países asociados con la producción agrícola, la producción industrial y el suministro de agua doméstica.
Se enfoca en el aprovechamiento de los recursos hídricos y en la evaluación de las políticas nacionales
y la seguridad alimentaria nacional.
El cambio climático es el resultado de las modificaciones en la teoría del capital natural y los servicios
ecosistémicos, las cuales afectan la viabilidad y el bienestar de la población global. Esta perturbación
del ecosistema se origina debido a la contaminación de la propiedad privada, denominada teoría de las
tragedias comunes de (Garret, 1968), que provoca el agotamiento de los recursos. Las modificaciones
significativas, tales como la modificación de la composición forestal local, tienen la capacidad de alterar
los ecosistemas terrestres y acuáticos (Costanza et al., 1997). La purificación del agua dulce se lleva a
cabo cada 10 milisegundos; sin embargo, la densificación poblacional provoca la saturación de los
procesos naturales de reciclaje químico y biológico, lo que requiere una redefinición de los derechos de
propiedad en función de los intereses particulares.
Los paradigmas actuales se fundamentan en la administración sustentable de calidad y cantidad del
agua, asegurando así los beneficios económicos y de salud pública (Chiang et al., 2014). En un mundo
en acelerada urbanización, las naciones en desarrollo presentan una capacidad restringida para afrontar
este cambio acelerado. Las estructuras urbanas inciden en el ciclo hidrológico de diversas formas:
extraen volúmenes considerables de agua de las fuentes de agua superficiales y subterráneas y descargan
aguas residuales sin tratar en los cuerpos de agua (UN-Water, 2015).
pág. 14210
Alegría (2007) propone un nuevo paradigma para la gestión sostenible de los recursos hídricos mediante
la educación y la sensibilización, partiendo del análisis de inadecuadas políticas, una deficiente
autoridad hídrica y deficiencias institucionales del Perú, por lo que es necesario una política de Gestión
Integrada de los Recursos Hídricos que involucra al gobierno, empresas privadas y organizaciones
comunitarias para ayudar a la participación de mujeres y grupos económicamente desfavorecidos, en
lugar de la falta de información sobre los recursos hídricos (Guevara-Pérez, 2018)
La evaluación de la suficiencia de los recursos de agua dulce es compleja y rápidamente fluctuante, con
un gran porcentaje de la población atravesando estrés y escalada de demanda (Vörösmarty et al., 2000).
Finalmente, la conservación de recursos valiosos se ve amenazada por la contaminación y los desechos
provocados por infraestructuras deficientes u obsoletas en los países en desarrollo, así como en los
países avanzados (Taft, 2015a).
METODOLOGÍA
El método de investigación adoptado fue cuantitativo, empleando variables, dimensiones e indicadores.
El tipo aplicado, conforme a la propuesta de investigación, se caracteriza por ser explicativo; se trabajó
con variables de naturaleza causal. El estudio longitudinal no experimental se expandió durante un
período de 15 años, desde el año 2008 hasta 2022. Se recurrió a las series estadísticas de Sistema
Nacional de Información Ambiental del Ministerio del Ambiente (2025), Naciones Unidas (2025)
Banco Mundial (20125) para la recolección de datos. La metodología de recolección de datos se basó
en el análisis y revisión de documentos estadísticos, también conocidos como fuentes secundarias. Las
variables empleadas se enumeran en la Tabla 1.
Tabla 1:Variables de estudio
Tipo de variable
Dimensión
Indicadores
Variable dependiente
Estrés hídrico
Ambiental
Porcentaje de los recursos de agua
dulce disponibles (%)
Variables independientes
Cambio climático
Ambiental
Consumo de sustancias agotadoras de
la capa de ozono
pág. 14211
Degradación de
ecosistemas
Ambiental
Pérdida de la cobertura vegetal por
unidad de ecosistemas
Infraestructura de
irrigación
Ambiental
Superficie cultivada equipada para
riego
Crecimiento
poblacional
Demográfico
Tasa de crecimiento de población
Crecimiento
económico
Económico
Crecimiento del pib
Tras la adquisición de información del Ministerio del Ambiente, de las Naciones Unidas y del Banco
Mundial, los datos fueron exportados a Excel con el objetivo de organizar, analizar y clasificarlos.
Además, se garantizó que los datos estuvieran adecuadamente organizados y preparados para su análisis
detallado en fases subsiguientes del estudio. Se empleó un análisis de regresión lineal de Mínimos
Cuadrados Robustos (MCR) para evaluar el efecto de cada factor en el estrés hídrico. Este tipo de
regresión resulta apropiado para la interpretación de datos que exhiben valores atípicos. La ecuación de
regresión empleada se detalla a continuación:
     
Donde
 
 
 
 
 
 
 

pág. 14212
RESULTADOS
Descripción de las variables objeto de análisis
Pese a las intervenciones emprendidas para la gestión de este recurso, factores como el cambio
climático, la degradación ambiental, la infraestructura de riego, aumento demográfico y crecimiento
económico podrían estar agravando la insuficiencia hídrica. La figura 1 muestra una escalada alarmante
en el estrés hídrico, lo que sugiere una presión incrementada sobre los recursos hídricos en el Perú
durante el 2008 y 2014. La tasa de crecimiento es relativamente moderada; sin embargo, a partir de
2015, la curva se intensifica, lo que señala una aceleración en la escasez de agua. Entre el 2020 y 2022
se evidencia una estabilización en niveles elevados, potencialmente asociada a factores como el cambio
climático, el incremento en la demanda hídrica o la administración de recursos.
Figura 1: Estrés hídrico, recursos de agua dulce disponibles (porcentaje)
Nota. La figura muestra un incremento creciente del estrés hídrico en el Perú. Tomado del SINIA MINAM (2025).
El cambio climático, junto con la degradación de los ecosistemas, está contribuyendo al estrés hídrico
en Perú, mientras que la deforestación está disminuyendo la habilidad de los bosques para almacenar y
regular el agua dulce. En la Figura 2, se observa que el cambio climático está provocando una
disminución en las precipitaciones en determinadas regiones peruanas, lo cual eleva la necesidad de
agua de los sistemas de irrigación (FAO, 2020).
Figura 2:Cambio climático, consumo de sustancias agotadoras de la capa de ozono (toneladas métricas)
Nota. La figura muestra un mayor incremento del cambio climático en el 2013. A partir del 2017 se redujo
considerablemente. Tomado del SINIA MINAM (2025).
0
0,5
1
1,5
2
2,5
3
3,5
0
200
400
600
800
1000
1200
1400
pág. 14213
La disminución de la cobertura vegetal, el estrés hídrico y la utilización de sustancias agotadoras de la
capa de ozono representan algunos de los desafíos ambientales vinculados a la extracción de agua dulce.
La Figura 3 ilustra que la degradación ambiental en Perú ha sido notable en los años recientes. En 2008,
la cobertura vegetal ascendía al 68.9 % y descendió al 65.8 % en 2022. Este resultado se atribuye a la
deforestación, entendida como la tala de árboles para propósitos agrícolas, ganaderos o de desarrollo,
así como a la modificación del uso de la tierra, como la agricultura o la urbanización. Adicionalmente,
la disminución de la cobertura vegetal puede contribuir al cambio climático, dado que los árboles son
responsables de la absorción de dióxido de carbono procedente del aire.
Figura 3: Degradación ambiental, pérdida de la cobertura vegetal por unidad de ecosistemas (hectáreas)
Nota. La figura muestra una mayor degradación ambiental en el 2017. Tomado de SINIA MINAM (2025).
Los productores agrarios y las autoridades gubernamentales pueden invertir en infraestructura de riego
para apoyar o aumentar la producción agrícola en zonas con alto estrés hídrico, pero las estrategias de
riego convencionales pueden intensificar el estrés hídrico. En la Figura 4, la infraestructura de riego
creció de 39.79 % en el 2008 a 47.10 % en el 2022, lo que indica una expansión sostenida de la
infraestructura de riego en relación al área cultivada total, sugiriendo una mayor inversión en agricultura
irrigada, posiblemente para mejorar la productividad o adaptarse a cambios climáticos.
Figura 4:Infraestructura de riego, superficie cultivada equipada para riego (porcentaje)
Nota. La figura muestra una tendencia creciente de la infraestructura de riego en el Perú. Tomado de Naciones
Unidas (2025).
0
50000
100000
150000
200000
36
38
40
42
44
46
48
pág. 14214
La expansión demográfica ha propiciado un incremento en la demanda de agua para el consumo
humano, la irrigación agrícola y la industria. La Figura 5 destaca una reducción significativa del
incremento poblacional en Perú desde 2008, atribuido a una disminución en la tasa de fecundidad y la
migración, lo que significa una expansión demográfica y una reducción de presión sostenible sobre los
recursos naturales y servicios públicos.
Figura 5: Crecimiento de la población (% anual)
Nota. La figura muestra una tendencia creciente de la población peruana hasta el 2019. En adelante se redujo
ligeramente. Tomado de Banco Mundial (2025).
La expansión del crecimiento económico ha demostrado ser positiva en los años recientes. En 2008, el
crecimiento del PBI ascendió al 9,1 %, mientras que en 2022 se incrementó al 2,6 %. La tendencia
favorable se deriva de una serie de factores, entre los que se incluye el incremento de la inversión
extranjera directa. La inversión extranjera directa en Perú ha experimentado un incremento en años
recientes, lo cual ha contribuido significativamente al crecimiento económico.
Figura 6: Crecimiento de económico (% anual)
Nota. La figura muestra una tasa de crecimiento del PBI moderada, a excepción el 2020 en la cual ocurrió la
pandemia Covid19. Tomado de Banco Mundial (2025).
0,00
0,50
1,00
1,50
2,00
2,50
-15,00
-10,00
-5,00
0,00
5,00
10,00
15,00
pág. 14215
Resultados de prueba empírica
A continuación, se muestran los resultados detallados de las tendencias agrupadas de las variables de
estudio, así como del modelo econométrico de regresión de mínimos cuadrados robustos que se ha
aplicado en el análisis.
Figura 7: Variables de estudio agrupadas
-0.2
0.0
0.2
0.4
0.6
0.8
1.0
1.2
2008 2010 2012 2014 2016 2018 2020 2022
L_EH
5.2
5.6
6.0
6.4
6.8
7.2
2008 2010 2012 2014 2016 2018 2020 2022
L_CC
0.0
0.5
1.0
1.5
2.0
2.5
3.0
2008 2010 2012 2014 2016 2018 2020 2022
L_CE
9.5
10.0
10.5
11.0
11.5
12.0
12.5
2008 2010 2012 2014 2016 2018 2020 2022
L_DE
3.68
3.72
3.76
3.80
3.84
3.88
2008 2010 2012 2014 2016 2018 2020 2022
L_IR
-.4
-.2
.0
.2
.4
.6
.8
2008 2010 2012 2014 2016 2018 2020 2022
L_POB
Nota. La figura muestra la tendencia de las variables de estudio expresadas en logaritmo. Tomado de Eviews13
En la Tabla 2, se presentan detalladamente los resultados obtenidos a través del análisis econométrico
utilizando el método de Mínimos Cuadrados Robustos (MCR). Es importante destacar que todos los
coeficientes presentados en la tabla representan elasticidades, ya que los datos se encuentran expresados
en logaritmos. Esta característica facilita la interpretación de los resultados, ya que los coeficientes
pueden ser entendidos como porcentajes de cambio. Asimismo, es relevante mencionar que todas las
variables incluidas en el modelo son estadísticamente significativas, como lo demuestra el bajo valor
del p-valor, el cual es igual a 0.0000. Los coeficientes proporcionan información acerca de cómo
diferentes factores impactan el nivel de estrés hídrico. Por ejemplo, se ha observado que un incremento
pág. 14216
del 1 % en el cambio climático resulta en un aumento del 0.098 % en el estrés hídrico. Asimismo, se ha
determinado que un aumento del 1 % en la degradación ambiental conlleva a un incremento del 0.068 %
en el estrés hídrico. Por otro lado, se ha evidenciado que un aumento del 1 % en la infraestructura de
riego se traduce en un incremento del 3.79 % en el estrés hídrico. Además, se ha comprobado que un
aumento del 1 % en el crecimiento poblacional provoca un incremento del 0.30 % en el estrés hídrico,
mientras que un aumento del 1 % en el crecimiento económico resulta en un incremento del 0.074 %
en el estrés hídrico.
La bondad de ajuste y robustez del modelo se refleja en que el coeficiente de determinación robusto
(Rw-squared) es igual a 0.999, mientras que el coeficiente de determinación tradicional alcanza un valor
de 0.5905, lo que implica el 59.05 % de la variabilidad observada. Además, la significancia global del
modelo queda confirmada por la prueba de Rn-squared (p = 0.0000).
Tabla 2: Modelo de Mínimos Cuadrados Robustos
Huber Type I Standard Errors & Covariance
Variable
Coefficient
Std. Error
z-Statistic
Prob.
L_CC
0.097706
0.003901
25.04556
0.0000
L_CE
0.073980
0.002102
35.20238
0.0000
L_DE
0.067736
0.003335
20.31340
0.0000
L_IR
3.785191
0.046910
80.69043
0.0000
L_POB
0.298368
0.006741
44.25979
0.0000
C
-15.23586
0.185450
-82.15618
0.0000
Robust Statistics
R-squared
0.590548
Adjusted R-squared
0.334641
Rw-squared
0.999946
Adjust Rw-squared
0.999946
Akaike info criterion
42.05698
Schwarz criterion
54.77864
Deviance
0.000707
Scale
0.004262
Rn-squared statistic
56076.46
Prob(Rn-squared stat.)
0.000000
Non-robust Statistics
Mean dependent var
0.515553
S.D. dependent var
0.375030
S.E. of regression
0.206960
Sum squared resid
0.342658
En la Figura 7, se puede apreciar que el valor del Q-Stat es considerablemente bajo (alcanzando un
máximo de 2.0235 en el rezago número 12), lo cual confirma de manera contundente la inexistencia de
autocorrelación significativa en el modelo. Por consiguiente, no se encontraron pruebas que respalden
la presencia de autocorrelación en los residuos al cuadrado hasta un máximo de 12 rezagos.
pág. 14217
Figura 7: Correlograma de residuos al cuadrado
DISCUSIÓN
Los hallazgos de la investigación demuestran de forma inequívoca que los factores determinantes del
estrés hídrico en Perú durante el periodo 2008-2022 son complejos y multifactoriales. Los factores
primordiales que precipitan esta problemática incluyen el impacto del cambio climático, la degradación
ambiental, la infraestructura de riego, el incremento constante de la población y el crecimiento
económico sostenido; todos ellos identificados como variables de significativa importancia y relevancia
en el análisis efectuado.
Este artículo se fundamenta principalmente en la teoría de la Huella Hídrica. Se basa en las
cuantificaciones y mapeos de las huellas hídricas en los países asociados con la producción agrícola, la
producción y el suministro de agua doméstica. Por otra parte, el cambio climático resulta de
modificaciones en la teoría del capital natural y los servicios ecosistémicos, afectando la viabilidad y el
bienestar de la población global. Esta perturbación se origina por la contaminación de la propiedad
privada y las alteraciones de los ecosistemas terrestres y acuáticos, necesitando una redefinición de los
derechos de propiedad según la teoría de las tragedias comunes. Estos develamientos coinciden con
Kozicki & Baiyasi-Kozicki (2019), quienes destacan que la creciente escasez de suministro de agua
potable a nivel global está estrechamente vinculada con las presiones demográficas y climáticas que
actualmente existen en diversas regiones del planeta. En el contexto particular de la nación peruana, se
ha evidenciado un aumento sostenido del grado de estrés hídrico, elevándose de un índice del 0,83 %
en el año 2008 a un 2,07 % en el año 2022. La tendencia progresiva refleja una situación fuertemente
preocupante que pone en grave peligro, tanto la preservación del entorno natural como la garantía de
pág. 14218
abastecimiento de alimentos, tal como fue detallado por Taft (2015b) en su exhaustivo estudio llevado
a cabo en el año 2015.
El cambio climático ha manifestado un impacto positivo en el estrés hídrico, mostrando un incremento
del 0,098 % por cada aumento del 1 % en esta variable ambiental específica. Esta revelación se alinea
con los estudios de la FAO (2020), que resalta que la reducción de las precipitaciones en determinadas
zonas del territorio peruano provoca un incremento en la necesidad de recursos hídricos para llevar a
cabo las labores agrícolas. Además, es fundamental resaltar que la degradación ambiental, claramente
evidenciada por la pérdida acelerada de la valiosa cobertura vegetal, contribuyó de manera significativa
con un 0,068 % al ya preocupante fenómeno del estrés hídrico, lo cual confirma y respalda plenamente
lo expuesto por Rijalba-Palacios (2024) acerca de cómo la despiadada deforestación no solo agrava de
forma alarmante la escasez de agua, sino que también deteriora de manera irremediable las condiciones
de vida de las comunidades afectadas.
La infraestructura de riego demostró un acrecentamiento significativo del 3,79 % en el nivel de estrés
hídrico por cada punto porcentual. Este notable hallazgo es afín con lo presentado por (Figueroa et al.,
2023), que sostienen que las prácticas de riego convencionales podrían agravar significativamente la
problemática de la escasez de agua en naciones que presentan una elevada necesidad de recursos
hídricos. Es importante destacar que tanto el crecimiento demográfico como el avance económico han
generado efectos de magnitud significativa, lo cual corrobora las conclusiones formuladas por Bahamon
Urrea et al. (2018) y su equipo de colaboradores en el análisis llevado a cabo en 2018.
La solidez y consistencia del modelo respaldan la validez de los hallazgos, pero la detección de asimetría
y curtosis en los residuos mediante la prueba de Jarque-Bera enfatiza la necesidad de cautela al inferir.
La ausencia de autocorrelación en los residuos refuerza significativamente la validez y robustez de los
hallazgos derivados.
CONCLUSIONES
El estudio revela que los principales determinantes del estrés hídrico en el Perú en el período 2008-
2022 incluyen el cambio climático, la degradación ambiental, la infraestructura de riego, el crecimiento
poblacional y el avance económico, que interactúan de manera compleja, provocando una discrepancia
entre la disponibilidad y la demanda de agua.
pág. 14219
El cambio climático y el deterioro ambiental contribuyen significativamente al estrés hídrico,
enfatizando la urgente necesidad de establecer políticas que mitiguen sus efectos, como la reforestación
y la reducción de emisiones contaminantes.
A pesar de la importancia de la infraestructura de riego para el desarrollo agrícola, su expansión requiere
una evaluación crítica desde un enfoque sostenible, a fin de evitar que contribuya al agravamiento de la
escasez hídrica.
El crecimiento demográfico y económico subraya la urgente necesidad de estrategias que integren el
desarrollo con la conservación de los recursos hídricos, en alineación con los Objetivos de Desarrollo
Sostenible.
Finalmente, este estudio proporciona evidencia empírica relevante para la toma de decisiones en la
gestión del agua en el Perú, destacando la necesidad de abordar los factores involucrados de manera
integral. En investigaciones futuras, sería pertinente profundizar en el análisis de políticas públicas
específicas y evaluar su efectividad para mitigar el estrés drico en contextos especialmente
vulnerables.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Alegría, J. F. (2007). The Challenges of Water Resources Management In Peru.
https://citeseerx.ist.psu.edu/document?repid=rep1&type=pdf&doi=ab707745192c7a5ecd79f7a0
c70d1dcdc938e969
Arlinghaus, J., Calder, J., Danielson, L., Ellis, J., Paciorek, A., & Perry, E. (2018). Proteger mejor el
medio ambiente. En OCDE, Getting it Right: Prioridades estratégicas para México (pp.125–
136).
https://www.oecd.org/content/dam/oecd/es/publications/reports/2018/05/getting-it-
right_g1g8aa19/9789264292871-es.pdf
Bahamon Urrea, C., Londoño Ciro, L. A., & Osorio Restrepo, A. D. J. (2018). Caracterización espacial
de la precipitación en el cañón del rio cauca, tramo comprendido entre los municipios de
caramanta y sabanalarga, jurisdicción de corantioquia, departamento de Antioquia, durante el
periodo 2004 - 2014. Ingenierías USBMed, 9(1), 58–68.
https://doi.org/10.21500/20275846.3319
pág. 14220
Chanuka, W. (2005). Book review: The End of Poverty: Economic Possibilities for Our Time, by Jeffrey
D Sachs, 2005. South African Journal of Information and Communication, 14(6), 0.
https://doi.org/10.23962/10539/19811
Chiang, G., Munkittrick, K. R., Mcmaster, M. E., Barra, R., & Servos, M. (2014). Regional Cumulative
Effects Monitoring Framework: Gaps and Challenges for the Biobío River Basin in South Central
Chile. Gayana (Concepción), 78(2), 109–119.
https://doi.org/10.4067/s0717-65382014000200004
Costanza, R., d'Arge, R., de Groot, R., Farber, S., Grasso, M., Hannon, B., Limburg, K., Naeem,
S., O'Neill, R., Paruelo, J., Raskin, R. G., Sutton, P., & van den Belt, M. (1997). The value of the
world's ecosystem services and natural capital. Nature, 387, 253–260.
https://doi.org/10.1038/387253a0
Díaz, M. A., Decinti, A., Blanco, D., & Vasquez, K. (2021). Methodology for the reuse of grey water in
dwelling located in areas of water stress and extreme hydric stress - Characterization, quality and
treatment options for reuse in Chile. Informes de La Construccion, 73(563), 1–12.
https://doi.org/10.3989/ic.80823
Drenkhan, F., Carey, M., Huggel, C., Seidel, J., & Oré, M. T. (2015). The changing water cycle: climatic
and socioeconomic drivers of water-related changes in the Andes of Peru. Wiley Interdisciplinary
Reviews: Water, 2(6), 715–733. https://doi.org/10.1002/WAT2.1105
Eda, L. E. H., & Chen, W. (2010). Integrated water resources management in Peru. Procedia
Environmental Sciences, 2, 340–348.
https://doi.org/10.1016/j.proenv.2010.10.039
FAO (2020). El estado mundial de la agricultura y la alimentación 2020. Superar los desafíos
relacionados con el agua en la agricultura.
https://doi.org/10.4060/cb1447es
Figueroa, C. M., Teutli-Sequeira, E. A., Castillo Suárez, L. A., & Linares Hernández, I. (2023). El estrés
hídrico en méxico: retos, estrategias y tendencias futuras de cómo enfrentar el día cero. Revista
Científica de Estudios Transdisciplinaria, 8 (23), 1-9.
pág. 14221
https://agua.org.mx/wp-content/uploads/2023/06/El-estres-hidrico-en-Mexico-retos-estrategias-
y-tendencias-futuras-de-como-enfrentar-el-dia-cero-Revista-Diotima.pdf
Chamba-Ontaneda, M., Massa-Sánchez, P., & Fries, A. (2019). Presión demográfica sobre el agua: un
análisis regional para Ecuador. Revista Geográfica Venezolana, 60(2), 360-377.
https://www.redalyc.org/journal/3477/347766130008/html/
Gammie, G., & De Bievre, (2015). Assessing Green Interventions for the Water Supply of Lima, Peru
Cost-Effectiveness, Potential Impact, and Priority Research Areas.
https://www.forest-trends.org/publications/assessing-green-interventions-for-the-water-supply-
of-lima-peru/
Garret, H. (1968). TheTragedy of the Commons. The population problem has no technical solution; it
requires afundamental extension in morality. Science, 162(3859), 1243-1248.
https://doi.org/10.1126/science.162.3859.1243
Guevara-Pérez, E. (2018). Synthetic analysis of the debate on the integrated management of water
resources in Peru. Revista INGENIERÍA UC, 25(2),
https://www.redalyc.org/journal/707/70757669019/html/
Hoekstra, A. Y., & Mekonnen, M. M. (2011). The water footprint of humanity, Proc. Natl. Acad. Sci.
U.S.A., 109(9) 3232-3237.
https://doi.org/10.1073/pnas.1109936109
Ioris, A. (2012). Scarcity, Neoliberalism and the “Water business” in Lima, Peru. Human Geography,
5(2), 93–105.
https://www.pnas.org/doi/full/10.1073/pnas.1109936109
Kaidou-Jeffrey, D., Kendall, P., Peters, A. C., & Ram, J. (2018). Managing water resources for
sustainable development in the Caribbean: Dynamic policy options. Social and Economic
Studies, 67(4), 37–66.
https://www.mona.uwi.edu/ses/article/151
Kozicki, Z. A., & Baiyasi-Kozicki, S. J. S. (2019). The survival of mankind requires a Water Quality
and Quantity Index (WQQI) and Water Applied Testing and Environmental Research (WATER)
Centers. World Water Policy, 5(1), 55–70.
pág. 14222
https://doi.org/10.1002/wwp2.12007
Lario, O. (26 de junio de 2022). Cada gota cuenta. Actualidad Económica, 12.
https://www.proquest.com/magazines/cada-gota-cuenta/docview/2680662943/se-2
Naciones Unidas (2025, January 5). UnWater.
https://sdg6data.org/en/system/404
Observatorio Ceplan (2024, December). Aumento del estrés hídrico.
Https://Observatorio.Ceplan.Gob.Pe/Ficha/Tg43.
Olivares, I., Svenning, J. C., van Bodegom, P. M., & Balslev, H. (2015). Effects of Warming and
Drought on the Vegetation and Plant Diversity in the Amazon Basin. Botanical Review, 81(1),
42–69.
https://doi.org/10.1007/s12229-014-9149-8
Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial. (2021). El Futuro de la
industrialización en un mundo post-pandémico.
https://www.unido.org/sites/default/files/files/2021-11/IDR%202022%20OVERVIEW%20-
%20SP%20EBOOK.pdf
Perevochtchikova, M. (2014). Pago por servicios ambientales en México Un acercamiento para su
estudio. El Colegio de México.
https://books.google.com.pe/books/about/Pago_por_servicios_ambientales_en_M%C3%A9xic.
html?id=l9Y2CAAAQBAJ&redir_esc=y
Ponce-Vega, L. A. (2015). Puquios, qanats y manantiales: gestión del agua en el Perú antiguo.
Agricultura Sociedad y Desarrollo, 12(3), 279-296.
https://www.scielo.org.mx/scielo.php?pid=S1870-54722015000300002&script=sci_abstract
Pulido Pulido, S. Y. (2014). Especies reactivas de oxígeno y la enzima Superóxido Dismutasa como
defensa de las plantas al estrés hídrico. Revista de Investigación Agraria y Ambiental, 5(2), 269-
276.
https://doi.org/10.22490/21456453.1342
Rijalba-Palacios, P. (2024). Relaciones entre recurso hídrico y ecosistemas: análisis y propuesta de
gestión. European Public & Social Innovation Review, 9, 1–15.
pág. 14223
https://doi.org/10.31637/epsir-2024-676
Smakhtin, V., Revenga, C., & Döll, P. (2004). A pilot global assessment of environmental water
requirements and scarcity. Water International, 29(3), 307–317
https://doi.org/10.1080/02508060408691785
Taft, H. L. (2015). Water Scarcity: Global Challenges for Agriculture. In S. Ahuja (Ed.), Food, Energy,
and Water (pp. 395-429). Elsevier.
https://doi.org/10.1016/B978-0-12-800211-7.00016-8
UN-Water (2015). World Water Development Report: Water for a sustainable world.
http://www.unesco.org/new/en/natural-sciences/environment/water/wwap/wwdr/2015-water-
for-a-sustainable-world/
Vörösmarty, C. J., Green, P., Salisbury, J., & Lammers, R. B. (2000). Global Water Resources:
Vulnerability from Climate Change and Population Growth. Science, 289(5477), 284-288.
10.1126/science.289.5477.284