pág. 16357
ESTADO DE CONSERVACIÓN DE LOS
MONUMENTOS FUNERARIOS DEL CEMENTERIO
MUNICIPAL DE COLIMA, MÉXICO
STATE OF CONSERVATION OF THE FUNERARY MONUMENTS
OF THE MUNICIPAL CEMETERY OF COLIMA, MEXICO.
Arq. Nataly Jocelyn Rentería Santana
Universidad de Colima
Dra. en Arq. Minerva Rodríguez Licea
Universidad de Colima
Dr. en Arq. Alfonso Cabrera Macedo
Universidad de Colima
pág. 16358
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v9i5.21018
Estado de conservación de los monumentos funerarios del Cementerio
Municipal de Colima, México
Arq. Nataly Jocelyn Rentería Santana1
nrenteria.arq@gmail.com
https://orcid.org/0009-0006-6571-4188
Universidad de Colima
Colima, México.
Dra. en Arq. Minerva Rodríguez Licea
minelicea@yahoo.com.mx
https://orcid.org/0000-0002-9854-8626
Universidad de Colima
Colima, México.
Dr. en Arq. Alfonso Cabrera Macedo
cabrera_macedo@ucol.mx
http://orcid.org/0000-0001-6565-7191
Universidad de Colima
Colima, México.
RESUMEN
El Cementerio Municipal de Colima constituye un espacio funerario de alto valor histórico, cultural y
social, los monumentos funerarios reflejan las tradiciones, creencias e identidad de la comunidad
colimense. Este conjunto patrimonial representa un testimonio tangible de la memoria colectiva y un
elemento esencial para comprender la evolución del arte y la arquitectura funeraria local. No obstante,
el sitio enfrenta distintos factores de deterioro que amenazan su integridad física y simbólica, derivados
tanto de las condiciones ambientales como del paso del tiempo y la falta de mantenimiento continuo. El
presente estudio tiene como propósito analizar los procesos de deterioro que afectan a los monumentos
funerarios del cementerio, mediante la recopilación de información documental, de archivo histórico,
archivo digital y fuentes bibliográfica, complementada con observaciones directas en campo y registros
fotográficos. A través de un enfoque metodológico mixto, se aplicaron instrumentos de análisis
estadístico y comparativo por zonas, con el fin de identificar los agentes de deterioro predominantes y
establecer el grado de afectación existente. Los resultados obtenidos permiten generar criterios de
diagnóstico y lineamientos para la conservación del patrimonio funerario, promoviendo su valoración
como parte esencial de la identidad cultural de Colima y la necesidad de su preservación para las futuras
generaciones.
Palabras clave: monumentos, cementerio, conservación, deterioros, historia
1 Autor principal
Correspondencia: nrenteria.arq@gmail.com
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v9i5.21018
Estado de conservación de los monumentos funerarios del Cementerio
Municipal de Colima, México
Arq. Nataly Jocelyn Rentería Santana1
nrenteria.arq@gmail.com
https://orcid.org/0009-0006-6571-4188
Universidad de Colima
Colima, México.
Dra. en Arq. Minerva Rodríguez Licea
minelicea@yahoo.com.mx
https://orcid.org/0000-0002-9854-8626
Universidad de Colima
Colima, México.
Dr. en Arq. Alfonso Cabrera Macedo
cabrera_macedo@ucol.mx
http://orcid.org/0000-0001-6565-7191
Universidad de Colima
Colima, México.
RESUMEN
El Cementerio Municipal de Colima constituye un espacio funerario de alto valor histórico, cultural y
social, los monumentos funerarios reflejan las tradiciones, creencias e identidad de la comunidad
colimense. Este conjunto patrimonial representa un testimonio tangible de la memoria colectiva y un
elemento esencial para comprender la evolución del arte y la arquitectura funeraria local. No obstante,
el sitio enfrenta distintos factores de deterioro que amenazan su integridad física y simbólica, derivados
tanto de las condiciones ambientales como del paso del tiempo y la falta de mantenimiento continuo. El
presente estudio tiene como propósito analizar los procesos de deterioro que afectan a los monumentos
funerarios del cementerio, mediante la recopilación de información documental, de archivo histórico,
archivo digital y fuentes bibliográfica, complementada con observaciones directas en campo y registros
fotográficos. A través de un enfoque metodológico mixto, se aplicaron instrumentos de análisis
estadístico y comparativo por zonas, con el fin de identificar los agentes de deterioro predominantes y
establecer el grado de afectación existente. Los resultados obtenidos permiten generar criterios de
diagnóstico y lineamientos para la conservación del patrimonio funerario, promoviendo su valoración
como parte esencial de la identidad cultural de Colima y la necesidad de su preservación para las futuras
generaciones.
Palabras clave: monumentos, cementerio, conservación, deterioros, historia
1 Autor principal
Correspondencia: nrenteria.arq@gmail.com
pág. 16359
State of conservation of the funerary monuments of the Municipal
Cemetery of Colima, Mexico.
ABSTRACT
The Municipal Cemetery of Colima is a funerary space of significant historical, cultural, and social
value, where its monuments reflect the traditions, beliefs, and identity of the local community. This
heritage complex represents a tangible testimony of collective memory and an essential element for
understanding the evolution of local funerary art and architecture. However, the site faces various
deterioration factors that threaten its physical and symbolic integrity, derived from environmental
conditions, the passage of time, and the lack of continuous maintenance. This study aims to analyze the
deterioration processes affecting the funerary monuments of the cemetery through the collection of
documentary, archival, digital, and bibliographic information, complemented by direct field
observations and photographic records. Using a mixed methodological approach, statistical and
comparative instruments were applied by zones to identify the predominant agents of deterioration and
to establish the existing degree of damage. The results obtained allow the development of diagnostic
criteria and guidelines for the conservation of funerary heritage, promoting its recognition as an essential
part of Colima’s cultural identity and emphasizing the need to preserve it for future generations.
Keywords: Monuments, cementery, conservation, deterioration, history
Artículo recibido 02 setiembre 2025
Aceptado para publicación: 29 setiembre 2025
State of conservation of the funerary monuments of the Municipal
Cemetery of Colima, Mexico.
ABSTRACT
The Municipal Cemetery of Colima is a funerary space of significant historical, cultural, and social
value, where its monuments reflect the traditions, beliefs, and identity of the local community. This
heritage complex represents a tangible testimony of collective memory and an essential element for
understanding the evolution of local funerary art and architecture. However, the site faces various
deterioration factors that threaten its physical and symbolic integrity, derived from environmental
conditions, the passage of time, and the lack of continuous maintenance. This study aims to analyze the
deterioration processes affecting the funerary monuments of the cemetery through the collection of
documentary, archival, digital, and bibliographic information, complemented by direct field
observations and photographic records. Using a mixed methodological approach, statistical and
comparative instruments were applied by zones to identify the predominant agents of deterioration and
to establish the existing degree of damage. The results obtained allow the development of diagnostic
criteria and guidelines for the conservation of funerary heritage, promoting its recognition as an essential
part of Colima’s cultural identity and emphasizing the need to preserve it for future generations.
Keywords: Monuments, cementery, conservation, deterioration, history
Artículo recibido 02 setiembre 2025
Aceptado para publicación: 29 setiembre 2025
pág. 16360
INTRODUCCIÓN
La arquitectura funeraria es una fuente valiosa de información sobre las culturas y tradiciones que han
existido a lo largo del tiempo. Los sitios funerarios contribuyen a crear el patrimonio que trasciende
históricamente por generaciones, ofreciendo el legado sobre las prácticas funerarias, la estructura social
y la economía de las civilizaciones pasadas.
La falta de espacio es un problema importante en áreas urbanas, ya que puede llevar a la reutilización
de tumbas, la construcción de cementerios verticales o la exhumación de restos para crear espacios de
nuevos entierros. En el cementerio de Colima, el 60% de los propietarios se adueñan de los predios
laterales, utilizando más metros cuadrados de los que les pertenecen y que se estipulan en las escrituras.
La gestión de las autoridades puede dar lugar a problemas administrativos, como la asignación incorrecta
de tumbas, malos registros y dificultades legales relacionadas con la propiedad y la herencia, incluso el
descuido que provoca vandalismo, ya que los sitios se vuelven vulnerables y fáciles de saquear, dañar,
descuidar y olvidar, así como, la negligencia, como el descuido de monumentos, áreas comunes y la
acumulación de basura, sumándole el contexto natural que constantemente deteriora. Estos factores
hacen que los monumentos funerarios concluyan a daños irreparables y la pérdida de patrimonio.
Es importante abordar estos factores para proteger la historia y la cultura, fomentar la sostenibilidad
ambiental y planificar el futuro de los cementerios en entornos urbanos. La gestión adecuada de los
cementerios satisface las diversas necesidades funerarias y fomenta prácticas más respetuosas con el
medio ambiente.
Mantener estos lugares a salvo de actividades destructivas, prevenir daños y promover el respeto por la
historia y la cultura. Los ejemplares funerarios pueden tener una variedad de formas, estilos y técnicas
estructurales que reflejan la expresión creativa. Estos suelen estar llenos de simbolismos, iconografías
y significados que representan la vida del difunto, sus logros, gustos, creencias religiosas o espirituales,
y aspectos culturales.
Mantener limpio el municipal cementerio es una forma de mostrar respeto por la historia, las tradiciones
y los fallecidos. La conservación de cementerios se vuelve relevante para mantener viva la historia, el
patrimonio cultural y del legado que se trasmite de generación en generación.
INTRODUCCIÓN
La arquitectura funeraria es una fuente valiosa de información sobre las culturas y tradiciones que han
existido a lo largo del tiempo. Los sitios funerarios contribuyen a crear el patrimonio que trasciende
históricamente por generaciones, ofreciendo el legado sobre las prácticas funerarias, la estructura social
y la economía de las civilizaciones pasadas.
La falta de espacio es un problema importante en áreas urbanas, ya que puede llevar a la reutilización
de tumbas, la construcción de cementerios verticales o la exhumación de restos para crear espacios de
nuevos entierros. En el cementerio de Colima, el 60% de los propietarios se adueñan de los predios
laterales, utilizando más metros cuadrados de los que les pertenecen y que se estipulan en las escrituras.
La gestión de las autoridades puede dar lugar a problemas administrativos, como la asignación incorrecta
de tumbas, malos registros y dificultades legales relacionadas con la propiedad y la herencia, incluso el
descuido que provoca vandalismo, ya que los sitios se vuelven vulnerables y fáciles de saquear, dañar,
descuidar y olvidar, así como, la negligencia, como el descuido de monumentos, áreas comunes y la
acumulación de basura, sumándole el contexto natural que constantemente deteriora. Estos factores
hacen que los monumentos funerarios concluyan a daños irreparables y la pérdida de patrimonio.
Es importante abordar estos factores para proteger la historia y la cultura, fomentar la sostenibilidad
ambiental y planificar el futuro de los cementerios en entornos urbanos. La gestión adecuada de los
cementerios satisface las diversas necesidades funerarias y fomenta prácticas más respetuosas con el
medio ambiente.
Mantener estos lugares a salvo de actividades destructivas, prevenir daños y promover el respeto por la
historia y la cultura. Los ejemplares funerarios pueden tener una variedad de formas, estilos y técnicas
estructurales que reflejan la expresión creativa. Estos suelen estar llenos de simbolismos, iconografías
y significados que representan la vida del difunto, sus logros, gustos, creencias religiosas o espirituales,
y aspectos culturales.
Mantener limpio el municipal cementerio es una forma de mostrar respeto por la historia, las tradiciones
y los fallecidos. La conservación de cementerios se vuelve relevante para mantener viva la historia, el
patrimonio cultural y del legado que se trasmite de generación en generación.
pág. 16361
METODOLOGÍA
La presente investigación se desarrolló con un enfoque mixto, utilizando las herramientas cualitativas y
cuantitativas, llevando a cabo el diagnostico de identificación de deterioros y alteraciones en
monumentos funerarios, con el propósito de evaluarlos y proponer acciones de conservación
específicamente en monumentos históricos del siglo XIX y principios del XX del Cementerio Municipal
de Colima.
La metodología elegida permite sustentar la información teórica con observaciones practicas validado
el objeto de estudio provenientes del sitio, así mismo se plantea llevar una investigación bibliográfica
con recursos de biografías web, archivo histórico de colima, el sitio especifico (el cementerio
municipal), bibliotecas y otros recursos que faciliten la información del objeto de estudio y sea
sustentado.
El estudio empleó un método de estudio de caso para analizar fenómenos específicos en su contexto
inmediato. Mediante herramientas como cámaras fotográficas, drones y mapas locales, se realizaron
diagnósticos arquitectónicos y de conservación. Se seleccionaron monumentos funerarios de tres zonas
previamente analizadas para una observación más detallada, que incluyó materiales arquitectónicos,
fotográficos y gráficos, así como el registro de alteraciones, deterioro y elementos relevantes de cada
monumento.
RESULTADOS
El Cementerio Municipal de Colima.
El primer cementerio conocido en Colima se fundó en 1874, pero fue realizado por personas no
especialistas, lo que generó múltiples problemas. Se ubicó en un punto desfavorable respecto a los
vientos predominantes y en un terreno fangoso que, durante las lluvias, dificultaba las sepulturas y
provocaba brotes de cuerpos por la acumulación de agua.
Una nota del periódico El Estado de Colima señalaba la insalubridad del lugar y la urgencia de un nuevo
cementerio con mejor topografía, extensión suficiente y condiciones higiénicas adecuadas (9 de octubre
de 1874).
En respuesta, en 1884 se fundó el Cementerio Municipal de Colima, pensado como un espacio digno
para la sepultura de los difuntos. Este recinto, de gran valor histórico y cultural, reúne tumbas y
METODOLOGÍA
La presente investigación se desarrolló con un enfoque mixto, utilizando las herramientas cualitativas y
cuantitativas, llevando a cabo el diagnostico de identificación de deterioros y alteraciones en
monumentos funerarios, con el propósito de evaluarlos y proponer acciones de conservación
específicamente en monumentos históricos del siglo XIX y principios del XX del Cementerio Municipal
de Colima.
La metodología elegida permite sustentar la información teórica con observaciones practicas validado
el objeto de estudio provenientes del sitio, así mismo se plantea llevar una investigación bibliográfica
con recursos de biografías web, archivo histórico de colima, el sitio especifico (el cementerio
municipal), bibliotecas y otros recursos que faciliten la información del objeto de estudio y sea
sustentado.
El estudio empleó un método de estudio de caso para analizar fenómenos específicos en su contexto
inmediato. Mediante herramientas como cámaras fotográficas, drones y mapas locales, se realizaron
diagnósticos arquitectónicos y de conservación. Se seleccionaron monumentos funerarios de tres zonas
previamente analizadas para una observación más detallada, que incluyó materiales arquitectónicos,
fotográficos y gráficos, así como el registro de alteraciones, deterioro y elementos relevantes de cada
monumento.
RESULTADOS
El Cementerio Municipal de Colima.
El primer cementerio conocido en Colima se fundó en 1874, pero fue realizado por personas no
especialistas, lo que generó múltiples problemas. Se ubicó en un punto desfavorable respecto a los
vientos predominantes y en un terreno fangoso que, durante las lluvias, dificultaba las sepulturas y
provocaba brotes de cuerpos por la acumulación de agua.
Una nota del periódico El Estado de Colima señalaba la insalubridad del lugar y la urgencia de un nuevo
cementerio con mejor topografía, extensión suficiente y condiciones higiénicas adecuadas (9 de octubre
de 1874).
En respuesta, en 1884 se fundó el Cementerio Municipal de Colima, pensado como un espacio digno
para la sepultura de los difuntos. Este recinto, de gran valor histórico y cultural, reúne tumbas y
pág. 16362
monumentos que muestran la evolución de las prácticas funerarias y tradiciones locales. Su diseño
conserva elementos arquitectónicos representativos de distintas épocas, con diversidad de estilos que
van de sencillas lápidas a mausoleos con influencias neoclásicas y neogóticas, muchos ornamentados
con esculturas que reflejan las creencias de cada periodo (Macedo, 2002).
Más que un lugar de descanso, el cementerio es un testimonio de la identidad, la cultura y el desarrollo
social de la comunidad colimense a lo largo del tiempo.
Estado Actual
Actualmente, el Cementerio Municipal de Colima se ubica entre la calle Laguna de Alameda, en la
colonia Las Víboras; al oriente colinda con Villas de San Sebastián, al sur con la colonia Fovissste y el
fraccionamiento Camino Real, y al poniente con la avenida Camino Real, cercano a la Universidad de
Colima. Su superficie alcanza aproximadamente 13.8 hectáreas, delimitadas por una barda perimetral y
destinadas a usos funerarios.
Al recorrerlo, se observa una clara división espacial que organiza las áreas de entierro según propósito,
temporalidad e incluso grupo social. Entre sus secciones, destacan la primera, la segunda y el Cerrito,
consideradas las más representativas.
En el siguiente croquis (ver figura 1), se identifican las áreas, en color amarillo corresponde a las
secciones con monumentos del siglo XX y XXI, con algunos ejemplos aislados del XIX, mientras que
el azul marca el cementerio antiguo, compuesto en su mayoría por monumentos del siglo XIX y
principios del XX, aunque también incluye algunos posteriores, este croquis esta creado desde el plano
catastral del municipio de Colima.
monumentos que muestran la evolución de las prácticas funerarias y tradiciones locales. Su diseño
conserva elementos arquitectónicos representativos de distintas épocas, con diversidad de estilos que
van de sencillas lápidas a mausoleos con influencias neoclásicas y neogóticas, muchos ornamentados
con esculturas que reflejan las creencias de cada periodo (Macedo, 2002).
Más que un lugar de descanso, el cementerio es un testimonio de la identidad, la cultura y el desarrollo
social de la comunidad colimense a lo largo del tiempo.
Estado Actual
Actualmente, el Cementerio Municipal de Colima se ubica entre la calle Laguna de Alameda, en la
colonia Las Víboras; al oriente colinda con Villas de San Sebastián, al sur con la colonia Fovissste y el
fraccionamiento Camino Real, y al poniente con la avenida Camino Real, cercano a la Universidad de
Colima. Su superficie alcanza aproximadamente 13.8 hectáreas, delimitadas por una barda perimetral y
destinadas a usos funerarios.
Al recorrerlo, se observa una clara división espacial que organiza las áreas de entierro según propósito,
temporalidad e incluso grupo social. Entre sus secciones, destacan la primera, la segunda y el Cerrito,
consideradas las más representativas.
En el siguiente croquis (ver figura 1), se identifican las áreas, en color amarillo corresponde a las
secciones con monumentos del siglo XX y XXI, con algunos ejemplos aislados del XIX, mientras que
el azul marca el cementerio antiguo, compuesto en su mayoría por monumentos del siglo XIX y
principios del XX, aunque también incluye algunos posteriores, este croquis esta creado desde el plano
catastral del municipio de Colima.
pág. 16363
La siguiente imagen (ver figura 2), muestra la entrada principal a las secciones de monumentos
contemporáneos (siglos XX y XXI). Este acceso funciona tanto para vehículos como para peatones,
mediante una calle empedrada delimitada por muros bajos de concreto. En la entrada destacan dos
columnas con letreros que señalan “primera” y “segunda sección”, marcando la división interna del
cementerio.
Más allá de su función práctica, este acceso tiene un valor simbólico y arquitectónico: su diseño sencillo,
la integración con el entorno y los elementos que le otorgan identidad cultural e histórica refuerzan su
importancia.
Figura 1.
Croquis de secciones
Zona correspondiente (en su
mayoría) al siglo XX y XIX
Zona correspondiente (en
su mayoría) al siglo XIX
Zona correspondiente
al cerrito
La siguiente imagen (ver figura 2), muestra la entrada principal a las secciones de monumentos
contemporáneos (siglos XX y XXI). Este acceso funciona tanto para vehículos como para peatones,
mediante una calle empedrada delimitada por muros bajos de concreto. En la entrada destacan dos
columnas con letreros que señalan “primera” y “segunda sección”, marcando la división interna del
cementerio.
Más allá de su función práctica, este acceso tiene un valor simbólico y arquitectónico: su diseño sencillo,
la integración con el entorno y los elementos que le otorgan identidad cultural e histórica refuerzan su
importancia.
Figura 1.
Croquis de secciones
Zona correspondiente (en su
mayoría) al siglo XX y XIX
Zona correspondiente (en
su mayoría) al siglo XIX
Zona correspondiente
al cerrito
pág. 16364
Dentro del área correspondiente a la primera sección, es muy notorio que el deterioro es mínimo, con
una traza urbana tiene organizada entre sus calles (ver figura 3) y la división de lápidas, también se
observan tumbas con más mantenimiento, las visitas son constantes, pues muchos de los familiares en
su mayoría aún se encuentran vivos y al pendiente de mantenerlas.
Figura 2.
Acceso principal a secciones del cementerio
(2024)
Figura 3.
Fotografía aérea de primera sección
(2025)
Nota. Fotografía de Iliana Daniela Martínez Badillo (2025).
Dentro del área correspondiente a la primera sección, es muy notorio que el deterioro es mínimo, con
una traza urbana tiene organizada entre sus calles (ver figura 3) y la división de lápidas, también se
observan tumbas con más mantenimiento, las visitas son constantes, pues muchos de los familiares en
su mayoría aún se encuentran vivos y al pendiente de mantenerlas.
Figura 2.
Acceso principal a secciones del cementerio
(2024)
Figura 3.
Fotografía aérea de primera sección
(2025)
Nota. Fotografía de Iliana Daniela Martínez Badillo (2025).
pág. 16365
Esta sección es una de las más representativas del cementerio, pues conserva monumentos de finales del
siglo XIX. Su traza urbana es más austera que la de la primera sección, con calles delimitadas pero
deterioradas y de menor atractivo visual.
La siguiente imagen (ver figura 4) muestra su acceso principal, cuya función es estructural y de
organización interna. A diferencia de la primera sección, carece de elementos decorativos, reflejando
una arquitectura más funcional y orientada al tránsito peatonal. El acceso vehicular es limitado, ya que
en varias áreas los vehículos no pueden ingresar.
Muchos monumentos arquitectónicos carecen ya de propietarios o han sido abandonados, lo que
dificulta mantener la zona en buen estado. Con el paso del tiempo, varios se han perdido total o
parcialmente, reflejando el deterioro acumulado. Aun así, la arquitectura conservada en esta sección
representa fielmente las épocas del antiguo Colima.
Figura 4.
Fotografía de acceso de la segunda sección (2024)
Figura 5.
Fotografía de acceso de la segunda sección (2025)
Esta sección es una de las más representativas del cementerio, pues conserva monumentos de finales del
siglo XIX. Su traza urbana es más austera que la de la primera sección, con calles delimitadas pero
deterioradas y de menor atractivo visual.
La siguiente imagen (ver figura 4) muestra su acceso principal, cuya función es estructural y de
organización interna. A diferencia de la primera sección, carece de elementos decorativos, reflejando
una arquitectura más funcional y orientada al tránsito peatonal. El acceso vehicular es limitado, ya que
en varias áreas los vehículos no pueden ingresar.
Muchos monumentos arquitectónicos carecen ya de propietarios o han sido abandonados, lo que
dificulta mantener la zona en buen estado. Con el paso del tiempo, varios se han perdido total o
parcialmente, reflejando el deterioro acumulado. Aun así, la arquitectura conservada en esta sección
representa fielmente las épocas del antiguo Colima.
Figura 4.
Fotografía de acceso de la segunda sección (2024)
Figura 5.
Fotografía de acceso de la segunda sección (2025)
pág. 16366
El cementerio se divide en varias secciones, pero la más importante es el “Cerrito” o “tumbas del
cerrito”, formado por una elevación natural de unos cuatro metros en dirección norte-sur. En esta área
se concentran los monumentos funerarios más antiguos: mausoleos, capillas, tumbas y lápidas pintadas
de azul, características del siglo XIX, muchas de ellas en mal estado (ver Figura 6).
El deterioro es evidente en la mayoría de los monumentos, con pérdida de elementos, humedad y otros
daños. Aunque carecen en su mayoría de propietarios, se encuentran bajo la protección del INAH por
su valor histórico y cultural.
Consecuencias del abandono: daños y pérdidas del patrimonio funerario.
El deterioro del Cementerio de Colima se debe al desinterés de las autoridades, la falta de cuidado de
los propietarios y los desastres naturales. El abandono constante provoca daños irreparables, suciedad,
vegetación nociva y pérdida del patrimonio histórico, lo que representa un riesgo tanto para la
comunidad como para la conservación del lugar.
Este apartado busca identificar y analizar los principales factores de deterioro que afectan a los
monumentos funerarios, agrupados en cuatro categorías: físicos, relacionados con procesos mecánicos
y estructurales; climáticos, vinculados a radiación solar, humedad, lluvias y cambios térmicos;
biológicos, producto de microorganismos, vegetación y fauna urbana; y antrópicos, derivados del
vandalismo, la falta de mantenimiento y las intervenciones inadecuadas.
Deterioros Físicos
El principal factor de deterioro es la actividad sísmica, ya que la zona se ubica entre la Placa de Cocos
y la norteamericana (Sismología de México, 2024). Estos movimientos han provocado daños en
Figura 6.
Fotografías de área del cerrito (2025)
El cementerio se divide en varias secciones, pero la más importante es el “Cerrito” o “tumbas del
cerrito”, formado por una elevación natural de unos cuatro metros en dirección norte-sur. En esta área
se concentran los monumentos funerarios más antiguos: mausoleos, capillas, tumbas y lápidas pintadas
de azul, características del siglo XIX, muchas de ellas en mal estado (ver Figura 6).
El deterioro es evidente en la mayoría de los monumentos, con pérdida de elementos, humedad y otros
daños. Aunque carecen en su mayoría de propietarios, se encuentran bajo la protección del INAH por
su valor histórico y cultural.
Consecuencias del abandono: daños y pérdidas del patrimonio funerario.
El deterioro del Cementerio de Colima se debe al desinterés de las autoridades, la falta de cuidado de
los propietarios y los desastres naturales. El abandono constante provoca daños irreparables, suciedad,
vegetación nociva y pérdida del patrimonio histórico, lo que representa un riesgo tanto para la
comunidad como para la conservación del lugar.
Este apartado busca identificar y analizar los principales factores de deterioro que afectan a los
monumentos funerarios, agrupados en cuatro categorías: físicos, relacionados con procesos mecánicos
y estructurales; climáticos, vinculados a radiación solar, humedad, lluvias y cambios térmicos;
biológicos, producto de microorganismos, vegetación y fauna urbana; y antrópicos, derivados del
vandalismo, la falta de mantenimiento y las intervenciones inadecuadas.
Deterioros Físicos
El principal factor de deterioro es la actividad sísmica, ya que la zona se ubica entre la Placa de Cocos
y la norteamericana (Sismología de México, 2024). Estos movimientos han provocado daños en
Figura 6.
Fotografías de área del cerrito (2025)
pág. 16367
edificaciones históricas, como el sismo del 21 de enero de 2003, que afectó templos, edificios públicos,
viviendas, el cementerio y otras construcciones patrimoniales.
Las vibraciones comprometen la estabilidad de las construcciones funerarias, cuyas debilidades se
agravan por humedad, desgaste de materiales, biodeterioro o intervenciones inadecuadas. Muchos
elementos presentan uniones debilitadas o anclajes deficientes, lo que los hace más vulnerables.
La siguiente imagen (ver figura 7), muestra un ejemplo en la segunda sección del cementerio
contemporáneo, con daños estructurales y vegetación nociva. Los sismos también generan derrumbes
parciales, fracturas, desprendimiento de materiales, hundimientos y ascensos irregulares en tumbas por
debilitamiento del subsuelo.
Los derrumbes parciales o totales, sobre todo en estructuras con elevaciones altas, suelen originarse por
vibraciones sísmicas que comprometen la estabilidad de los elementos verticales. Las fracturas y fisuras
provocan desprendimiento de materiales como piedra, hormigón o ladrillo, mientras que los
hundimientos son frecuentes por el peso de las estructuras. En algunas tumbas también se observan
ascensos irregulares, posiblemente vinculados a la disolución o debilitamiento del subsuelo tras sismos
repetidos.
Figura 7.
Ejemplo de tumba con deterioro físico
edificaciones históricas, como el sismo del 21 de enero de 2003, que afectó templos, edificios públicos,
viviendas, el cementerio y otras construcciones patrimoniales.
Las vibraciones comprometen la estabilidad de las construcciones funerarias, cuyas debilidades se
agravan por humedad, desgaste de materiales, biodeterioro o intervenciones inadecuadas. Muchos
elementos presentan uniones debilitadas o anclajes deficientes, lo que los hace más vulnerables.
La siguiente imagen (ver figura 7), muestra un ejemplo en la segunda sección del cementerio
contemporáneo, con daños estructurales y vegetación nociva. Los sismos también generan derrumbes
parciales, fracturas, desprendimiento de materiales, hundimientos y ascensos irregulares en tumbas por
debilitamiento del subsuelo.
Los derrumbes parciales o totales, sobre todo en estructuras con elevaciones altas, suelen originarse por
vibraciones sísmicas que comprometen la estabilidad de los elementos verticales. Las fracturas y fisuras
provocan desprendimiento de materiales como piedra, hormigón o ladrillo, mientras que los
hundimientos son frecuentes por el peso de las estructuras. En algunas tumbas también se observan
ascensos irregulares, posiblemente vinculados a la disolución o debilitamiento del subsuelo tras sismos
repetidos.
Figura 7.
Ejemplo de tumba con deterioro físico
pág. 16368
Deterioro por contexto natural
El deterioro por contexto natural es un factor clave que afecta la integridad de los monumentos
funerarios en cementerios históricos. Agentes ambientales como humedad, radiación solar, lluvia,
viento, variaciones térmicas y organismos biológicos (hongos, líquenes, insectos y raíces) provocan una
degradación constante en materiales constructivos y ornamentales.
El crecimiento incontrolado de vegetación también genera daños importantes: las raíces se infiltran en
juntas y grietas, desplazando elementos y debilitando estructuras. Asimismo, la exposición prolongada
al sol produce decoloración y debilitamiento de pinturas, recubrimientos y materiales pétreos, sobre todo
en aquellos no diseñados para resistir condiciones extremas (Castro, 2013).
El viento, al transportar partículas de arena, polvo u otros materiales abrasivos, causa desgaste y
corrosión en superficies monumentales, especialmente en zonas con fuertes corrientes eólicas. La lluvia,
en particular cuando es ácida o contaminada, produce corrosión en metales, lixiviación de componentes
del concreto y disolución de piedras caliza y mármol. Su acción repetida genera erosión, aumenta la
humedad en materiales como madera y textiles y favorece el biodeterioro. Mecánicamente, el agua
desgasta relieves, esculturas e inscripciones, provocando pérdida de detalles y legibilidad (Castro,
2013).
Un ejemplo reciente se observa en las figuras, donde un árbol colapsó sobre varias tumbas debido a
lluvias intensas y la fangosidad del terreno en julio-agosto de 2024 (ver figura 9).
Figura 8.
Conjunto de fotografías de tumbas con daños por radiación solar
Deterioro por contexto natural
El deterioro por contexto natural es un factor clave que afecta la integridad de los monumentos
funerarios en cementerios históricos. Agentes ambientales como humedad, radiación solar, lluvia,
viento, variaciones térmicas y organismos biológicos (hongos, líquenes, insectos y raíces) provocan una
degradación constante en materiales constructivos y ornamentales.
El crecimiento incontrolado de vegetación también genera daños importantes: las raíces se infiltran en
juntas y grietas, desplazando elementos y debilitando estructuras. Asimismo, la exposición prolongada
al sol produce decoloración y debilitamiento de pinturas, recubrimientos y materiales pétreos, sobre todo
en aquellos no diseñados para resistir condiciones extremas (Castro, 2013).
El viento, al transportar partículas de arena, polvo u otros materiales abrasivos, causa desgaste y
corrosión en superficies monumentales, especialmente en zonas con fuertes corrientes eólicas. La lluvia,
en particular cuando es ácida o contaminada, produce corrosión en metales, lixiviación de componentes
del concreto y disolución de piedras caliza y mármol. Su acción repetida genera erosión, aumenta la
humedad en materiales como madera y textiles y favorece el biodeterioro. Mecánicamente, el agua
desgasta relieves, esculturas e inscripciones, provocando pérdida de detalles y legibilidad (Castro,
2013).
Un ejemplo reciente se observa en las figuras, donde un árbol colapsó sobre varias tumbas debido a
lluvias intensas y la fangosidad del terreno en julio-agosto de 2024 (ver figura 9).
Figura 8.
Conjunto de fotografías de tumbas con daños por radiación solar
pág. 16369
En las siguientes imágenes (figura 10), se puede entender el antes y el después de los daños que sufrió
el monumento, esto lleva a la reflexión que en cualquier momento los inmuebles funerarios son tan
vulnerables y propensos a sufrir este tipo de problemáticas.
Figura 9.
Árbol caído
Figura 10.
Tumba dañada por caída de árbol
Marzo 2024 Agosto 2024
En las siguientes imágenes (figura 10), se puede entender el antes y el después de los daños que sufrió
el monumento, esto lleva a la reflexión que en cualquier momento los inmuebles funerarios son tan
vulnerables y propensos a sufrir este tipo de problemáticas.
Figura 9.
Árbol caído
Figura 10.
Tumba dañada por caída de árbol
Marzo 2024 Agosto 2024
pág. 16370
El biodeterioro es el daño que sufren los materiales por acción de organismos vivos como bacterias,
hongos, algas, líquenes e insectos. Este proceso afecta principalmente materiales de construcción,
objetos culturales y diversos elementos industriales, causando manchas, decoloración, fragilidad,
corrosión y otros deterioros. La macroflora, como musgos, hierbas, arbustos y enredaderas, penetra en
grietas y juntas, agravando fracturas y fisuras en los materiales (Sermeño Puerto, 2018).
Biodeterioro por insectos que son organismos como termitas, escarabajos de madera, y hormigas pueden
causar daños significativos, especialmente en estructuras de madera, pero también pueden afectar otros
materiales como papel o textiles. Por otro lado, las aves y roedores causan deterioro físico y químico al
construir nidos, excavar o depositar excrementos, que contienen ácidos capaces de corroer o manchar
superficies, (Sermeño Puerto, M. 2018).
Deterioro Antrópicos.
El vandalismo es un agente destructivo que afecta significativamente a los cementerios de México,
incluido el de Colima. Implica acciones humanas intencionales, como destrucción de elementos
decorativos y religiosos, grafitis, rotulación de esculturas y profanación de tumbas, que dañan
irreversiblemente su valor simbólico y patrimonial. Según Diario Avanza (Redacción, 2023), en Colima
se han destruido cruces, placas y ornamentos de metales valiosos, mientras que el vandalismo gráfico y
mecánico afecta la percepción pública del cementerio como espacio de respeto y memoria.
Además, las intervenciones inadecuadas como reparaciones sin conocimientos técnicos o el uso de
materiales incompatibles, y la reutilización de tumbas como almacenes, aceleran el deterioro, alteran la
Figura 11.
fotografías de biodeterioro por flora
Figura 12.
Ejemplos de tumbas con daños por biodeterioro
El biodeterioro es el daño que sufren los materiales por acción de organismos vivos como bacterias,
hongos, algas, líquenes e insectos. Este proceso afecta principalmente materiales de construcción,
objetos culturales y diversos elementos industriales, causando manchas, decoloración, fragilidad,
corrosión y otros deterioros. La macroflora, como musgos, hierbas, arbustos y enredaderas, penetra en
grietas y juntas, agravando fracturas y fisuras en los materiales (Sermeño Puerto, 2018).
Biodeterioro por insectos que son organismos como termitas, escarabajos de madera, y hormigas pueden
causar daños significativos, especialmente en estructuras de madera, pero también pueden afectar otros
materiales como papel o textiles. Por otro lado, las aves y roedores causan deterioro físico y químico al
construir nidos, excavar o depositar excrementos, que contienen ácidos capaces de corroer o manchar
superficies, (Sermeño Puerto, M. 2018).
Deterioro Antrópicos.
El vandalismo es un agente destructivo que afecta significativamente a los cementerios de México,
incluido el de Colima. Implica acciones humanas intencionales, como destrucción de elementos
decorativos y religiosos, grafitis, rotulación de esculturas y profanación de tumbas, que dañan
irreversiblemente su valor simbólico y patrimonial. Según Diario Avanza (Redacción, 2023), en Colima
se han destruido cruces, placas y ornamentos de metales valiosos, mientras que el vandalismo gráfico y
mecánico afecta la percepción pública del cementerio como espacio de respeto y memoria.
Además, las intervenciones inadecuadas como reparaciones sin conocimientos técnicos o el uso de
materiales incompatibles, y la reutilización de tumbas como almacenes, aceleran el deterioro, alteran la
Figura 11.
fotografías de biodeterioro por flora
Figura 12.
Ejemplos de tumbas con daños por biodeterioro
pág. 16371
apariencia y pueden causar pérdidas irreversibles en la estructura y el valor cultural de los monumentos.
Comprender estos factores es esencial para diseñar estrategias de conservación preventiva.
El deterioro más común es el uso impropio de tumbas antiguas o abandonadas, empleadas por los
trabajadores del cementerio para almacenar herramientas, materiales y artículos de limpieza. Esta
práctica altera el uso original del monumento, modifica o elimina elementos estructurales y decorativos,
y promueve una visión utilitaria de espacios que deberían preservarse como bienes culturales. La
ausencia de regulación y vigilancia evidencia la falta de estrategias de manejo patrimonial.
Figura 14.
Ejemplos de tumbas reutilizadas por personal del cementerio
Figura 13.
Ejemplos de tumbas deterioradas por uso de materiales inapropiados
apariencia y pueden causar pérdidas irreversibles en la estructura y el valor cultural de los monumentos.
Comprender estos factores es esencial para diseñar estrategias de conservación preventiva.
El deterioro más común es el uso impropio de tumbas antiguas o abandonadas, empleadas por los
trabajadores del cementerio para almacenar herramientas, materiales y artículos de limpieza. Esta
práctica altera el uso original del monumento, modifica o elimina elementos estructurales y decorativos,
y promueve una visión utilitaria de espacios que deberían preservarse como bienes culturales. La
ausencia de regulación y vigilancia evidencia la falta de estrategias de manejo patrimonial.
Figura 14.
Ejemplos de tumbas reutilizadas por personal del cementerio
Figura 13.
Ejemplos de tumbas deterioradas por uso de materiales inapropiados
pág. 16372
Estudio de tres contextos y sus deterioros en monumentos.
El estudio se centra en dos áreas: la primera sección del cementerio contemporáneo y la primera sección
del cementerio antiguo, con el objetivo de mostrar que cada una enfrenta distintos niveles de deterioro.
Factores como abandono, circulación vehicular y peatonal, efectos climáticos y frecuencia de
mantenimiento influyen en la conservación. Las secciones contemporáneas suelen mantenerse en
mejores condiciones, mientras que las antiguas presentan mayor deterioro debido a la falta de
propietarios y al abandono.
Para el análisis se seleccionó una muestra de 87 tumbas en la primera sección, evaluadas según
deterioros físicos, humedad, exposición solar, uso de materiales inadecuados, entre otros. La siguiente
imagen muestra la zona de estudio.
Se examinaron los diferentes deterioros y se realizó una tabla, con el fin de graficar los porcentajes de
cada problemática encontrada en la zona y determinar cuál es el factor de daño más importante.
Análisis 1- 87 Unidades de Estudio
Deterioros Estado de
conservación
Deterioros específicos No. Porcentaje
Deterioro físico
Regular Fracturas- Grietas-Fisuras 51 59%
Malo Pérdida de elementos 28 32%
Muy malo Colapso - Derrumbes - Deformidad 13 15%
Humedad
Regular Manchas 43 49%
Malo Desprendimientos de material 15 12%
Muy malo Filtraciones 9 10%
Radiación solar
Regular Manchas 28 32%
Malo Cambios de color y corrosión 13 15%
Biodeterioro
Regular Hongos / Líquenes / vegetación 27 31%
Malo Manchas / Cambios de color 15 17%
Tabla 1. Análisis 1. 87 unidades de estudio.
Estudio de tres contextos y sus deterioros en monumentos.
El estudio se centra en dos áreas: la primera sección del cementerio contemporáneo y la primera sección
del cementerio antiguo, con el objetivo de mostrar que cada una enfrenta distintos niveles de deterioro.
Factores como abandono, circulación vehicular y peatonal, efectos climáticos y frecuencia de
mantenimiento influyen en la conservación. Las secciones contemporáneas suelen mantenerse en
mejores condiciones, mientras que las antiguas presentan mayor deterioro debido a la falta de
propietarios y al abandono.
Para el análisis se seleccionó una muestra de 87 tumbas en la primera sección, evaluadas según
deterioros físicos, humedad, exposición solar, uso de materiales inadecuados, entre otros. La siguiente
imagen muestra la zona de estudio.
Se examinaron los diferentes deterioros y se realizó una tabla, con el fin de graficar los porcentajes de
cada problemática encontrada en la zona y determinar cuál es el factor de daño más importante.
Análisis 1- 87 Unidades de Estudio
Deterioros Estado de
conservación
Deterioros específicos No. Porcentaje
Deterioro físico
Regular Fracturas- Grietas-Fisuras 51 59%
Malo Pérdida de elementos 28 32%
Muy malo Colapso - Derrumbes - Deformidad 13 15%
Humedad
Regular Manchas 43 49%
Malo Desprendimientos de material 15 12%
Muy malo Filtraciones 9 10%
Radiación solar
Regular Manchas 28 32%
Malo Cambios de color y corrosión 13 15%
Biodeterioro
Regular Hongos / Líquenes / vegetación 27 31%
Malo Manchas / Cambios de color 15 17%
Tabla 1. Análisis 1. 87 unidades de estudio.
pág. 16373
Muy malo Raíces y vegetación nociva 7 8%
Materiales
inadecuados
Regular Pinturas de aceite, vinílicas o neones 5 6%
Malo Azulejos, biotropismos 27 31%
Muy malo Metales, vidrios, cualquier material
colapsado naturalmente
3 3%
Intervenciones
inadecuadas
Regular Modificación excesiva 4 5%
Malo Invasión de terrenos y áreas de
circulación
27 31%
Muy malo Metales, vidrios, cualquier material
colapsado naturalmente
1 1%
Otros
Invasión de terrenos y áreas de circulación 26 30%
Perdida de elementos 2 2%
Mantenimiento regular 38 44%
Sin mantenimiento 25 29%
Posible abandono 27 31%
Cambio de uso 1 1%
De las 87 tumbas, el primer deterioro analizado corresponde a los daños físicos, los cuales se clasifican
en estado regular, mal estado y muy mal estado, considerando cualquier modificación en la unidad de
estudio. Todos los resultados se expresan como porcentajes sobre el total del 100%.
Nota. Fotografías de autora (2025)
Muy malo Raíces y vegetación nociva 7 8%
Materiales
inadecuados
Regular Pinturas de aceite, vinílicas o neones 5 6%
Malo Azulejos, biotropismos 27 31%
Muy malo Metales, vidrios, cualquier material
colapsado naturalmente
3 3%
Intervenciones
inadecuadas
Regular Modificación excesiva 4 5%
Malo Invasión de terrenos y áreas de
circulación
27 31%
Muy malo Metales, vidrios, cualquier material
colapsado naturalmente
1 1%
Otros
Invasión de terrenos y áreas de circulación 26 30%
Perdida de elementos 2 2%
Mantenimiento regular 38 44%
Sin mantenimiento 25 29%
Posible abandono 27 31%
Cambio de uso 1 1%
De las 87 tumbas, el primer deterioro analizado corresponde a los daños físicos, los cuales se clasifican
en estado regular, mal estado y muy mal estado, considerando cualquier modificación en la unidad de
estudio. Todos los resultados se expresan como porcentajes sobre el total del 100%.
Nota. Fotografías de autora (2025)
pág. 16374
Como resultado de esto, se observa que los inmuebles cuentan en su mayoría con un estado regular de
deterioro siendo el 59% de estos predios, por otro lado, el 32% están en estado regular y solo el 15% de
estos cuentan con muy mal estado de conservación, lo que desde esta perspectiva se puede clasificar
como bueno, ya que, es un porcentaje mínimo de daños, sin embargo, no deja de ser preocupante que
de 87 unidades el 59% presentan deterioro.
A continuación, se presenta la gráfica (ver figura 16), correspondiente a daños por humedad donde el
49% de las unidades de estudio presentan un daño regular, mientras que el 12% cuenta con un mal estado
y el restante mínimo es de 10% en mal estado.
Figura 15.
Gráfica de deterioros físicos – 87 unidades de estudio
59%
32%
15%
Deterioros fisicos
Regular
Malo
Muy malo
Figura 16.
Gráfica de deterioros por humedad – 87 unidades de estudio
49%
12%
10%
Deterioros por humedad
Regular
Malo
Muy malo
Como resultado de esto, se observa que los inmuebles cuentan en su mayoría con un estado regular de
deterioro siendo el 59% de estos predios, por otro lado, el 32% están en estado regular y solo el 15% de
estos cuentan con muy mal estado de conservación, lo que desde esta perspectiva se puede clasificar
como bueno, ya que, es un porcentaje mínimo de daños, sin embargo, no deja de ser preocupante que
de 87 unidades el 59% presentan deterioro.
A continuación, se presenta la gráfica (ver figura 16), correspondiente a daños por humedad donde el
49% de las unidades de estudio presentan un daño regular, mientras que el 12% cuenta con un mal estado
y el restante mínimo es de 10% en mal estado.
Figura 15.
Gráfica de deterioros físicos – 87 unidades de estudio
59%
32%
15%
Deterioros fisicos
Regular
Malo
Muy malo
Figura 16.
Gráfica de deterioros por humedad – 87 unidades de estudio
49%
12%
10%
Deterioros por humedad
Regular
Malo
Muy malo
pág. 16375
El siguiente deterioro es por la radiación solar, se representa en la siguiente gráfica (ver figura 17), en
donde solo se clasifico en dos, el estado regular obtuvo un 32% de deterioro en tumbas y el resto que se
encuentran en mal estado es de un 15%.
El siguiente deterioro es el correspondiente al biodeterioro, se representa en la siguiente grafica (ver
figura 18), en donde se muestra en estado regular un 31% de deterioro en tumbas, en mal estado es de
un 17 % y por último en mal estado al 8% de estos inmuebles.
Figura 17.
Gráfica de deterioros por radiación solar – 87 unidades de estudio
32% 15%
Deterioro por radiación solar
Regular
Malo
Figura 18.
Gráfica de deterioros por biodeterioro – 87 unidades de estudio
31%
17%
8%
Biodeterioro
Regular
Malo
Muy malo
El siguiente deterioro es por la radiación solar, se representa en la siguiente gráfica (ver figura 17), en
donde solo se clasifico en dos, el estado regular obtuvo un 32% de deterioro en tumbas y el resto que se
encuentran en mal estado es de un 15%.
El siguiente deterioro es el correspondiente al biodeterioro, se representa en la siguiente grafica (ver
figura 18), en donde se muestra en estado regular un 31% de deterioro en tumbas, en mal estado es de
un 17 % y por último en mal estado al 8% de estos inmuebles.
Figura 17.
Gráfica de deterioros por radiación solar – 87 unidades de estudio
32% 15%
Deterioro por radiación solar
Regular
Malo
Figura 18.
Gráfica de deterioros por biodeterioro – 87 unidades de estudio
31%
17%
8%
Biodeterioro
Regular
Malo
Muy malo
pág. 16376
El siguiente deterioro es el correspondiente a materiales inapropiados, se representa en la siguiente
gráfica (ver figura 19), en donde se muestra en estado regular un 6 % de deterioro en tumbas, en mal
estado es de un 31 % cabe mencionar que este porcentaje es bastante alto, a diferencia de las gráficas
anteriores y por último en mal estado al 3% de estos inmuebles.
Otros deterioros detectados en esta zona se muestra en la siguiente gráfica (ver figura 20). La invasión
de terrenos y áreas de circulación representa un 30%, un porcentaje relativamente bajo respecto a otras
zonas, aunque sigue siendo preocupante. Las pérdidas de elementos en tumbas alcanzan un 2%. En
cuanto al mantenimiento, 44% de las unidades cuentan con mantenimiento regular, 29% sin
mantenimiento y 31% presentan posible abandono. Finalmente, un 1% corresponde a cambio de uso,
como el caso de una tumba cuya placa es lo único que permanece, debido a que vecinos ocuparon su
terreno.
6%
31% 3%
Materiales inapropiados
Regular
Malo
Muy malo
Figura 20.
Gráfica de otros deterioros – 87 unidades de estudio
30%
2
%
44% 29%31% 1
%
Otros deterioros
Invación de terrenos y areas de circulación Perdida de elementos
Mantenimiento regular Sin mantenimiento
Posible abandono Cambio de uso
Figura 19.
Gráfica de materiales inapropiados – 87 unidades de estudio
El siguiente deterioro es el correspondiente a materiales inapropiados, se representa en la siguiente
gráfica (ver figura 19), en donde se muestra en estado regular un 6 % de deterioro en tumbas, en mal
estado es de un 31 % cabe mencionar que este porcentaje es bastante alto, a diferencia de las gráficas
anteriores y por último en mal estado al 3% de estos inmuebles.
Otros deterioros detectados en esta zona se muestra en la siguiente gráfica (ver figura 20). La invasión
de terrenos y áreas de circulación representa un 30%, un porcentaje relativamente bajo respecto a otras
zonas, aunque sigue siendo preocupante. Las pérdidas de elementos en tumbas alcanzan un 2%. En
cuanto al mantenimiento, 44% de las unidades cuentan con mantenimiento regular, 29% sin
mantenimiento y 31% presentan posible abandono. Finalmente, un 1% corresponde a cambio de uso,
como el caso de una tumba cuya placa es lo único que permanece, debido a que vecinos ocuparon su
terreno.
6%
31% 3%
Materiales inapropiados
Regular
Malo
Muy malo
Figura 20.
Gráfica de otros deterioros – 87 unidades de estudio
30%
2
%
44% 29%31% 1
%
Otros deterioros
Invación de terrenos y areas de circulación Perdida de elementos
Mantenimiento regular Sin mantenimiento
Posible abandono Cambio de uso
Figura 19.
Gráfica de materiales inapropiados – 87 unidades de estudio
pág. 16377
Para el segundo análisis se estudiaron una muestra de 71 tumbas ubicadas en la primera sección del
cementerio antiguo, estas fueron analizadas bajo diferentes esquemas de deterioros físicos, de humedad,
radiación solar, usos de malos materiales, entre otros. La siguiente imagen muestra la zona de estudio
analizada.
Se examinaron los diferentes daños y se creó una tabla para ilustrar los porcentajes de cada problema en
el área y determinar el factor de daño más significativo.
Análisis 2- 71 Unidades de Estudio
Deterioros
Estado de
conservación
Deterioros específicos No. Porcentaje
Deterioro físico
Regular Fracturas- Grietas-Fisuras 63 89%
Malo Pérdida de elementos 38 54%
Muy malo Colapso - Derrumbes - Deformidad 28 39%
Humedad
Regular Manchas 45 68%
Malo Desprendimientos de material 29 41%
Muy malo Filtraciones 16 23%
Soleamiento
Regular Manchas 59 83%
Malo Cambios de color y corrosión 50 70%
Biodeterioro
Regular Hongos / Líquenes / vegetación 45 63%
Malo Manchas / Cambios de color 19 27%
Muy malo raíces y vegetación nociva 15 21%
Otros
Azulejos, biotropismos 2 3%
Modificación excesiva 3 4%
Invasión de terrenos y áreas de circulación 46 65%
Mantenimiento regular 14 20%
Sin mantenimiento 29 41%
Posible abandono 44 62%
Tabla 2. Análisis 2. 71 unidades de estudio.
Para el segundo análisis se estudiaron una muestra de 71 tumbas ubicadas en la primera sección del
cementerio antiguo, estas fueron analizadas bajo diferentes esquemas de deterioros físicos, de humedad,
radiación solar, usos de malos materiales, entre otros. La siguiente imagen muestra la zona de estudio
analizada.
Se examinaron los diferentes daños y se creó una tabla para ilustrar los porcentajes de cada problema en
el área y determinar el factor de daño más significativo.
Análisis 2- 71 Unidades de Estudio
Deterioros
Estado de
conservación
Deterioros específicos No. Porcentaje
Deterioro físico
Regular Fracturas- Grietas-Fisuras 63 89%
Malo Pérdida de elementos 38 54%
Muy malo Colapso - Derrumbes - Deformidad 28 39%
Humedad
Regular Manchas 45 68%
Malo Desprendimientos de material 29 41%
Muy malo Filtraciones 16 23%
Soleamiento
Regular Manchas 59 83%
Malo Cambios de color y corrosión 50 70%
Biodeterioro
Regular Hongos / Líquenes / vegetación 45 63%
Malo Manchas / Cambios de color 19 27%
Muy malo raíces y vegetación nociva 15 21%
Otros
Azulejos, biotropismos 2 3%
Modificación excesiva 3 4%
Invasión de terrenos y áreas de circulación 46 65%
Mantenimiento regular 14 20%
Sin mantenimiento 29 41%
Posible abandono 44 62%
Tabla 2. Análisis 2. 71 unidades de estudio.
pág. 16378
Pérdida de elementos 2 3%
Como consecuencia de lo anterior, de monumentos se encuentra en un estado de deterioro regular, con
un 89% en esta condición. Por el contrario, el 52% se encuentra en un estado regular y solo el 39% se
encuentra en un estado de conservación muy deficiente. Esto puede clasificarse como preocupante, ya
que, hablamos de una zona con porcentajes altos de deterioro físico.
El siguiente gráfico (ver figura 22) ilustra el daño asociado a la humedad, el cual se caracteriza por un
daño regular en el 68% de las unidades de estudio, un estado insalubre en el 41% y un mínimo del 23%
mal estado.
68% 41% 23%
Deterioros por Humedad
Regular
Malo
Muy malo
Figura 21.
Grafica de deterioros físicos – 71 unidades de estudio
89% 54% 39%
Deterioros fisicos
Regular
Malo
Muy malo
Figura 22.
Grafica de deterioro por humedad – 71 unidades de estudio
Pérdida de elementos 2 3%
Como consecuencia de lo anterior, de monumentos se encuentra en un estado de deterioro regular, con
un 89% en esta condición. Por el contrario, el 52% se encuentra en un estado regular y solo el 39% se
encuentra en un estado de conservación muy deficiente. Esto puede clasificarse como preocupante, ya
que, hablamos de una zona con porcentajes altos de deterioro físico.
El siguiente gráfico (ver figura 22) ilustra el daño asociado a la humedad, el cual se caracteriza por un
daño regular en el 68% de las unidades de estudio, un estado insalubre en el 41% y un mínimo del 23%
mal estado.
68% 41% 23%
Deterioros por Humedad
Regular
Malo
Muy malo
Figura 21.
Grafica de deterioros físicos – 71 unidades de estudio
89% 54% 39%
Deterioros fisicos
Regular
Malo
Muy malo
Figura 22.
Grafica de deterioro por humedad – 71 unidades de estudio
pág. 16379
El deterioro posterior se debe a la radiación solar, como se ilustra en el siguiente gráfico (ver figura 23).
Se clasifica en dos categorías: el estado regular experimentó un 83% en los monumentos s y el 70 %
restante se encuentra en mal estado, lo que concluye en que es una zona con alta densidad de radiación
solar.
La degradación posterior es la relacionada con la biodegradación, como se ilustra en el siguiente gráfico
(ver figura 24). En estado normal, el 26 % de las lápidas están degradadas, el 13 % están en mal estado
y el 8 % restante en el estado.
Por último, otros deterioros detectados para esta zona se representan en la siguiente tabla (ver tabla 25),
en donde se muestra que el 3% es de uso de materiales inapropiados, el 4% la modificación de
monumentos y el 3% de perdida de elementos, siendo estos los valores mínimos de daño, esto indica
que no han sido intervenidas en su mayoría. Por otro lado, en esta zona se encuentra un 65% de invasión
83% 70%
Deterioro por radiación solar
Regular
Malo
Figura 23.
Grafica de deterioros por radiación solar – 71 unidades de estudio
63% 27% 21%
Biodeterioro
Regular
Malo
Muy malo
Figura 24.
Gráfica de deterioro por biodeterioro – 71 unidades de estudio
El deterioro posterior se debe a la radiación solar, como se ilustra en el siguiente gráfico (ver figura 23).
Se clasifica en dos categorías: el estado regular experimentó un 83% en los monumentos s y el 70 %
restante se encuentra en mal estado, lo que concluye en que es una zona con alta densidad de radiación
solar.
La degradación posterior es la relacionada con la biodegradación, como se ilustra en el siguiente gráfico
(ver figura 24). En estado normal, el 26 % de las lápidas están degradadas, el 13 % están en mal estado
y el 8 % restante en el estado.
Por último, otros deterioros detectados para esta zona se representan en la siguiente tabla (ver tabla 25),
en donde se muestra que el 3% es de uso de materiales inapropiados, el 4% la modificación de
monumentos y el 3% de perdida de elementos, siendo estos los valores mínimos de daño, esto indica
que no han sido intervenidas en su mayoría. Por otro lado, en esta zona se encuentra un 65% de invasión
83% 70%
Deterioro por radiación solar
Regular
Malo
Figura 23.
Grafica de deterioros por radiación solar – 71 unidades de estudio
63% 27% 21%
Biodeterioro
Regular
Malo
Muy malo
Figura 24.
Gráfica de deterioro por biodeterioro – 71 unidades de estudio
pág. 16380
de terrenos, sugiriendo que en este espacio en su mayoría las tumbas sobre pasan sus límites de terreno
predeterminados; continuando con el mantenimiento regular que cuenta con un 20 %, las tumbas sin
mantenimiento son un 41% y en su máximo valor el 62% que equivale a tumbas posiblemente
abandonadas.
3%4%
65%
20
%41%
62% 3%
Otros Deterioros
Azulejos, vitropisos
Modificación excesiva
Invación de terrenos y
areas de circulación
Mantenimiento regular
Figura 25.
Gráfica de otros deterioros – 71 unidades de estudio
de terrenos, sugiriendo que en este espacio en su mayoría las tumbas sobre pasan sus límites de terreno
predeterminados; continuando con el mantenimiento regular que cuenta con un 20 %, las tumbas sin
mantenimiento son un 41% y en su máximo valor el 62% que equivale a tumbas posiblemente
abandonadas.
3%4%
65%
20
%41%
62% 3%
Otros Deterioros
Azulejos, vitropisos
Modificación excesiva
Invación de terrenos y
areas de circulación
Mantenimiento regular
Figura 25.
Gráfica de otros deterioros – 71 unidades de estudio
pág. 16381
RESULTADO
Como resultado del análisis comparativo de las dos zonas previamente estudiadas, se puede muestra que
la primera presenta un nivel considerable de daño físico, siendo uno de los principales factores de
deterioro la presencia de humedad. Esta condición se ve favorecida por la abundante vegetación del
entorno, la cual, si bien aporta sombra y frescura, también impide una adecuada ventilación y prolonga
el tiempo de secado durante la temporada de lluvias. La persistencia de humedad genera un ambiente
propicio para el desarrollo de agentes biológicos, como microorganismos, líquenes y musgos, además
del crecimiento de vegetación nociva que compromete la estabilidad de los materiales constructivos y
acelera los procesos de biodeterioro.
Por otro lado, la segunda zona analizada muestra un deterioro físico significativo, aunque derivado de
factores distintos. A diferencia de la primera, esta área recibe una mayor exposición a la radiación solar
debido a la escasa presencia de vegetación. Asimismo, se observan daños ocasionados por el abandono
y la falta de mantenimiento, evidentes en estructuras con colapsos parciales y tumbas completamente
destruidas. Esto refleja un estado avanzado de deterioro, resultado tanto de los agentes naturales como
del descuido antrópico, lo que demanda estrategias específicas de conservación. En este sentido, resulta
fundamental proponer acciones que mitiguen los efectos detectados y garanticen la preservación del
conjunto funerario.
CONCLUSIONES
El Cementerio Municipal de Colima constituye un espacio de valor histórico, cultural y social para la
comunidad. En su interior se resguarda una muestra significativa del arte y la arquitectura funeraria
donde cada monumento refleja no solo los estilos arquitectónicos de las épocas, sino también las
costumbres, creencias y vínculos familiares que han conformado la identidad. Estos monumentos
funerarios representan una conexión tangible con el pasado, un testimonio material de las personas que
contribuyeron al desarrollo histórico de la ciudad y una manifestación visible de la memoria colectiva
que une a distintas generaciones.
No obstante, la conservación de este patrimonio se ha visto afectada por la ausencia de mantenimiento
constante y la limitada aplicación de medidas preventivas, lo que ha permitido que diversos factores de
deterioro actúen de manera progresiva sobre los monumentos. Esta situación evidencia la necesidad de
RESULTADO
Como resultado del análisis comparativo de las dos zonas previamente estudiadas, se puede muestra que
la primera presenta un nivel considerable de daño físico, siendo uno de los principales factores de
deterioro la presencia de humedad. Esta condición se ve favorecida por la abundante vegetación del
entorno, la cual, si bien aporta sombra y frescura, también impide una adecuada ventilación y prolonga
el tiempo de secado durante la temporada de lluvias. La persistencia de humedad genera un ambiente
propicio para el desarrollo de agentes biológicos, como microorganismos, líquenes y musgos, además
del crecimiento de vegetación nociva que compromete la estabilidad de los materiales constructivos y
acelera los procesos de biodeterioro.
Por otro lado, la segunda zona analizada muestra un deterioro físico significativo, aunque derivado de
factores distintos. A diferencia de la primera, esta área recibe una mayor exposición a la radiación solar
debido a la escasa presencia de vegetación. Asimismo, se observan daños ocasionados por el abandono
y la falta de mantenimiento, evidentes en estructuras con colapsos parciales y tumbas completamente
destruidas. Esto refleja un estado avanzado de deterioro, resultado tanto de los agentes naturales como
del descuido antrópico, lo que demanda estrategias específicas de conservación. En este sentido, resulta
fundamental proponer acciones que mitiguen los efectos detectados y garanticen la preservación del
conjunto funerario.
CONCLUSIONES
El Cementerio Municipal de Colima constituye un espacio de valor histórico, cultural y social para la
comunidad. En su interior se resguarda una muestra significativa del arte y la arquitectura funeraria
donde cada monumento refleja no solo los estilos arquitectónicos de las épocas, sino también las
costumbres, creencias y vínculos familiares que han conformado la identidad. Estos monumentos
funerarios representan una conexión tangible con el pasado, un testimonio material de las personas que
contribuyeron al desarrollo histórico de la ciudad y una manifestación visible de la memoria colectiva
que une a distintas generaciones.
No obstante, la conservación de este patrimonio se ha visto afectada por la ausencia de mantenimiento
constante y la limitada aplicación de medidas preventivas, lo que ha permitido que diversos factores de
deterioro actúen de manera progresiva sobre los monumentos. Esta situación evidencia la necesidad de
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fortalecer la gestión y la atención al sitio, promoviendo una colaboración más activa entre las
autoridades, los propietarios y la comunidad para asegurar su adecuada preservación y evitar la pérdida
irreversible de un legado único. Por ello, resulta indispensable promover estrategias de difusión,
sensibilización y participación comunitaria, acompañadas de medidas técnicas de conservación
preventiva y mantenimiento continuo. Solo a través de un esfuerzo conjunto será posible garantizar la
preservación de este patrimonio funerario y asegurar su transmisión a las futuras generaciones.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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https://www.aacademica.org/teresa.montiel.alvarez/4
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Colima (Maestría). Universidad de Colima / Facultad de Arquitectura.
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sobremodernidad. Gedisa Editorial.
4. Ballart, J. B. (1997-2002). El patrimonio histórico y arqueológico valor y uso (2ª ed.). Ariel,
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conformantes de monumentos patrimoniales de importancia histórica y cultural. Redalyc.org.
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6. Del Toro. E. (2018). “Las tumbas históricas del Panteón Municipal de Colima están
resguardadas por el INAH y se encuentran en la zona del Cerrito, sobre un basamento prehispánico”.
Diario de Colima
7. Diario de Colima (2017, 29 julio). Panteón de colima, sin más espacio para gavetas.
https://diariodecolima.com/index.php/noticias/detalle/2017-07-29-panteon-de-colima-sin-mas-espacio-
para-gavetas
8. Diario de Colima. (2018, 11 de noviembre). Monumentos históricos en el cementerio.
Recuperado de https://diariodecolima.com/noticias/detalle/2018-11-11-monumentos-histricos-en-el-
cementerio
fortalecer la gestión y la atención al sitio, promoviendo una colaboración más activa entre las
autoridades, los propietarios y la comunidad para asegurar su adecuada preservación y evitar la pérdida
irreversible de un legado único. Por ello, resulta indispensable promover estrategias de difusión,
sensibilización y participación comunitaria, acompañadas de medidas técnicas de conservación
preventiva y mantenimiento continuo. Solo a través de un esfuerzo conjunto será posible garantizar la
preservación de este patrimonio funerario y asegurar su transmisión a las futuras generaciones.
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evaluación de tratamientos biocidas (Doctorado). [Universidad de Sevilla].
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