DESERCIÓN ESCOLAR POR MOTIVOS
DE MIGRACIÓN EN MENORES DE
EDUCACIÓN SECUNDARIA
SCHOOL DROPOUT DUE TO MIGRATION
AMONG SECONDARY SCHOOL STUDENTS
Ma. de Lourdes Salas Luévano
Universidad Autónoma de Zacatecas, México
Yesenia Pinedo Paniagua
Universidad Autónoma de Zacatecas, México
Beatriz Herrera Guzmán
Universidad Autónoma de Zacatecas, México

pág. 3224
DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v9i6.21440
Deserción Escolar por Motivos de Migración en Menores de Educación
Secundaria
Ma. de Lourdes Salas Luévano1
lourdessalas@uaz.edu.mx
https://orcid.org/0000-0001-8652-7716
Universidad Autónoma de Zacatecas
México
Yesenia Pinedo Paniagua
yeseniapinedo95@gmail.com
https://orcid.org/0009-0001-2592-3982
Universidad Autónoma de Zacatecas
México
Beatriz Herrera Guzmán
bherrera@uaz.edu.mx
https://orcid.org/0000-0003-1169-8056
Universidad Autónoma de Zacatecas
México
RESUMEN
Este trabajo tiene como objetivo analizar las causas de la deserción y la migración de estudiantes de la
Escuela Secundaria General Belisario Domínguez, ubicada en el municipio de Morelos, Zacatecas,
México. La investigación se apoyó en la metodología cualitativa, un estudio de caso, aplicando técnicas
como la entrevista semiestructurada a tres jóvenes desertores en diferentes ciclos escolares que
migraron hacia Estados Unidos, así como, a uno de los directivos y a un docente con una amplia
trayectoria en la institución educativa. Los resultados indican que entre los causales que promueven la
deserción-migración de los menores de la Escuela Secundaria General Belisario Domínguez, se debe a
factores relacionados a la reunificación de la familia en el país de destino, las redes migratorias que se
han conformado con el paso del tiempo y la cultura migratoria que prevalece, éstas últimas con gran
influencia en los menores originarios del municipio. Las conclusiones que se desprenden de la
investigación, dan cuenta de que se trata de un fenó meno anó malo que vulnera los derechos de los
menores, que demanda de la atención urgente de las autoridades educativas de los diferentes niveles a
fin de implementar acciones que incidan en la dupla deserción-migración que afecta a los estudiantes
Palabras clave: deserción, educación, educación secundaria, menores, migración
1 Autor principal
Correspondencia: lourdessalas@uaz.edu.mx

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School Dropout Due to Migration Among Secondary School Students
ABSTRACT
This work aims to analyze the causes of student dropout and migration from the Belisario Domínguez
General Secondary School, located in the municipality of Morelos, Zacatecas, México. The research
relied on qualitative methodology, a case study, applying techniques such as semi-structured interviews
with three young dropouts in different school cycles who migrated to the United States, as well as with
one of the directors and a teacher with a long career in the educational institution. The results indicate
that among the causes that promote the dropout-migration of minors from the Belisario Domínguez
General Secondary School, it is due to factors related to the reunification of the family in the destination
country, the migratory networks that have been formed over time and the prevailing migratory culture,
the latter having a great influence on the minors originally from the municipality. The conclusions
drawn from the investigation show that this is an anomalous phenomenon that violates the rights of
minors, which demands the urgent attention of educational authorities at different levels in order to
implement actions that address the dropout-migration duo that affects students
Key Words: dropout, education, secondary education, minors, migration
Artículo recibido 15 octubre 2025
Aceptado para publicación: 28 noviembre2025

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INTRODUCCIÓN
En México, la deserción escolar es una problemática presente en todos los niveles educativos que debe
atenderse de manera permanente por las autoridades.
La deserción, puede entenderse como la acción de abandono del sistema escolar por los estudiantes
antes de terminar algún nivel educativo. Para autores como Himmel, la deserción es el abandono
prematuro de un programa de estudios antes de alcanzar el título o grado, y comprende un tiempo
suficientemente largo como para descartar la posibilidad de que el estudiante se reincorpore” (2002, p.
94).
Por su parte, Del Castillo señala, que la deserción escolar “es el abandono de los educandos y
educadores si nos referimos a las instituciones educativas, no sólo de las aulas donde se adquieren
conocimientos sino también de sus sueños, y perspectivas de una vida futura” (2012, p. 14).
En este mismo tenor, Román apunta que, “el éxito o fracaso de los niños y adolescentes en las escuelas,
son procesos complejos en los cuales confluyen y se articulan factores de índole individual, familiar,
social, material y cultural que se refuerzan y afectan simultáneamente” (2013, p. 37).
En efecto, los factores que subyacen y que determinan la deserción escolar encuentran naturaleza
distinta y se vinculan a tres enfoques teóricos y tres categorías de análisis. En los primeros, se pueden
mencionar al enfoque, a) de integración, que da cuenta de la inadaptación de los alumnos en los entornos
escolares; b) estructural, resultado de las contradicciones que se registran en los diferentes subsistemas
(político, económico y social), encontrando elementos importantes en el aspecto socioeconómico, el
capital cultural familiar y el mercado laboral, principalmente; y c) economicista, que considera al
individuo, como determinante, pues su elección de invertir tiempo, energía y recursos, es comparada
con los beneficios que puede tener en el futuro. (Durán y Díaz-Hernández, 1990; citados en Cajigal,
Arias, Farfán, 2022, p. 203).
Con relación a las categorías, se pueden mencionar a: a) material estructural, que incluye elementos
exógenos (situación económica, apoyo en casa, condiciones de la vivienda, salud, empleo), y elementos
endógenos (equipamiento e infraestructura, y personal docente); b) político-organizativa, que considera
el funcionamiento institucional (gasto público destinado a la educación, políticas para mejorar la
economía y la situación laboral, la articulación de los diferentes niveles de gobierno, la propuesta

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curricular y metodológica, la formación y condiciones laborales de los docentes, entre otras; y c)
cultural, que considera también elementos exógenos, donde interviene la valoración hacia la educación
personal y familiar, consumos culturales, expectativas y aspiraciones, capital cultural de la familia y
uso del tiempo, etc., y los elementos endógenos, donde se incluye el capital cultural de los docentes, las
prácticas pedagógicas, ambiente escolar, valoración y expectativas de docentes y directivos hacia los
estudiantes, entre otros. (Román, 2013, citada en Cajigal, Arias, Farfán, 2022, pp. 203-204).
En cuanto a la deserción escolar de los menores por motivos de migración, si bien, se trata de un
fenómeno que se funda en una compleja combinación de factores, entre los que intervienen: a) el
económico, derivado de la situación que se vive en los hogares de los menores, quienes muchas veces,
abandonan la escuela para migrar con fines laborales y apoyar el ingreso familiar; b) la reunificación
familiar, relacionada a la inicial migración del padre, la madre, o ambos, quienes una vez instalados y
estables en el país de llegada, mandan traer a los hijos que se quedaron en el lugar de origen, obligándo
a los menores a abandonar los estudios; c) motivos políticos, por el incrementó en la solicitud de asilo
(norteamérica), debido a la vulnerabilidad que viviven los jóvenes en algunas regiones, producto de la
inseguridad social que existe en el territorio nacional, orillando incluso a familias completas a
abandonar el país; d) el imaginario, creado por las ideas y constructos generados por la experiencia
migratoria exitosa de familiares, amigos y/o conocidos, que influye enormente en los menores en la
decisión de abandonar sus estudios; e) el cultural, relacionado a la subjetividad popular convertida en
toda una tradición cultural de familias y comunidades, hasta llegar a considerarse un hecho natural y
formar parte de la identidad y pertenencia en los lugares de origen de la migración (Debry & Stutz,
2012; Macias y Reyes, 2004; Márquez, 2012; Olvera, Montoya y González, 2014)
Así, la migración de los menores y que cursan estudios, tiene un impacto directo en la deserción escolar,
es decir, se refleja en los índices de abandono de los planteles escolares, en consecuencia, el panorama
es preocupante considerando que se trata de menores que dejarán de adquirir conocimientos que se
esperaba les brindarían más oportunidades en su futuro próximo.
Desde este escenario, la deserción escolar de los jóvenes, motivada por el deseo de migrar hacia Estados
Unidos, es una realidad presente en las comunidades mexicanas, las instituciones educativas y en todos

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los niveles de instrucción escolar, sobre todo, en aquellas regiones cuya tradición migratoria es añeja y
continúa denotando gran influencia en las nuevas generaciones.
Entre los marcos teóricos existentes se explica a la migración desde las condiciones económicas que
guardan los países involucrados donde se entretejen los factores push-pull, como es el caso de la: a) la
nueva economía de la migración, que plantea que la decisión de migrar no se determina de manera
individual, sino por unidades más amplias, como las familias, y b) las redes migratorias, conformada
por los lazos que conectan a los futuros migrantes en los lugares de origen, con familiares, amigos y/o
conocidos en el lugar de destino, quienes intercambian información oportunidades de empleo, vivienda,
etc., además de proporcionar apoyo emocional, y de disminuir la incertidumbre, estrés, etc., que el
proceso genera (Arango, 2003; De Haas, 2010; citado por Jardón, 2011), es decir, se visualiza a la
migración como una estrategia que permite la diversificación de ingresos, el aseguramiento y mejora
de las condiciones de vida de las familias, en las que se puede incorporar la explicación de la
participación en la migración de los menores; son teorías que ponen la mirada, por un lado, en las
condiciones económicas macroestructurales, así como, en la situación que guarda el contexto
comunitario y familiar, ambas, predeterminantes para orillar a los adolescentes a participar en la
migración.
La deserción-escolar-migración en Educación Secundaria
Al hablar de la deserción en México, se hace mayor énfasis a la registrada en educación media superior,
considerado el nivel educativo donde se concentran las expresiones más graves de este indicador, sin
embargo, es la deserción en educación secundaria uno de los desafios presentes al buscar evitar que las
y los adolescentes abandonen la escuela antes de su conclusión.
La educación secundaria brinda la atención educativa a la población de entre 12 y 15 años de edad, es
el nivel que le sigue a la educación primaria, tiene una duración de tres años, y es requisito indispensable
para el ingreso a la educación media superior. Estudiosos como Ducoing, comenta muy puntualmente
la importancia del estudio del nivel secundaria para los menores, así, señala que:
El capital básico que se adquiere durante la educació n secundaria es un factor esencial para
mejorar la calidad de vida de la població n, en virtud de que, entre otros tó picos, determina
en muy buena medida el acceso al empleo, aun cuando sea anticipadamente y, en

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consecuencia, favorece el desarrollo econó mico del paí s. La carencia de capacidades y
habilidades mí nimas, así como de conocimientos fundamentales, no solo limita la entrada
y la estabilidad en el mercado laboral, sino que también impacta en la reproducció n
persistente intergeneracional de las desigualdades y de la pobreza (2018, p. 12).
Con relación a la deserción escolar en este nivel, según datos del Instituto Nacional de Estadística y
Geografía (INEGI), en los últimos años en México, se ha logrado reducir de manera importante y
paulatina la tasa de deserción en educación secundaria, al pasar de un 8.3 % registrado en el ciclo 2000-
2001, y ubicarse en un 2.9 % en el ciclo 2022-2023 (s/f), no obstante, continúa siendo un problema
latente, al tratarse de un nivel educativo que se brinda a la población que se convertirá en el futuro
próximo, en el relevo generacional.
Entre la relación educación-deserción, en algunas regiones de México la migración suele estar asociada
con jóvenes que desde antes de los 15 años le pierden el interés al estudio (secundaria, media superior
y superior), y que solo esperan una oportunidad para migrar hacia Estados Unidos (Tinley, 2008), desde
la perspectiva de Echeverría y Lewin, la deserción escolar decidida por la decisión de migrar de un
sujeto muchas veces no deriva de una situación económica apremiante, “se cultiva lentamente a partir
de las creencias, valores, y predisposiciones que circulan en una comunidad y que perfilan a la
migración como una opción de vida aceptable” (2016, p. 11).
La participación de los jóvenes en el movimiento migratorio entre México-Estados Unidos, es de
especial relevancia por las características que guardan, resumidas en:
▪ Estados Unidos es el país de destino más importante para la población mexicana, en el 2023,
constituye el mayor grupo de inmigrantes en ese país con cerca del 23 %, de un total de 47.8 %
millones de residentes nacidos en el extranjero.
▪ Para el 2010, la inmigración de mexicanos, encontró su máximo, al ubicarse en 11.7 millones de
personas, y pasar a 10.7 millones en el 2022, como consecuencia del endurecimiento de la política
antiimigrante, los efectos de la pandemia del COVID-19, para registrar nuevamente un crecimiento
en el 2023, y colocarse en 10.9 % millones de migrantes mexicanos.

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▪ En 1990, la población en edades de 10-19 años se ubicó en 11.4 %, de estos, 5.6 % fueron hombres
y 5.8 % mujeres. Para el año 2020, este mismo grupo de edad se ubicó en un 8.1 %, correspondiendo
un 3.9 % para los hombres, y un 4.2 % para mujeres.
▪ En el 2018, las causas que explican la migración de mexicanos hacia Estados Unidos, un 80% de
los hombres lo hace en busca de empleo, mientras que el 32.2% de las mujeres busca la
reunificación familiar (SEGOB, CONAPO, Fundación BBVA Bancomer, y BBVA Research,
2018).
▪ En el 2023, el 83 % de la población inmigrante mexicana se encontraba en el grupo de edad de 18-
64 años, y un 4 % de los inmigrantes tenían menos de 18 años. (Batalova, 2024; SEGOB-CONAPO,
2012; SEGOB-CONAPO, Fundación BBVA Bancomer, y BBVA Research,, 2012; 2018; 2022)
Los datos anteriores, dan cuenta de la participación de los NNA en el movimiento migratorio, donde
muchos de ellos, lo han hecho por voluntad propia, y otros más, obligados por las circunstancias; NNA
que independientemente de las condiciones de su partida, desertaron de sus escuelas a las que asistían
para migrar hacia el vecino país del norte.
Al interior de México, se encuentra el estado de Zacatecas, reconocido por la importante participacion
de su población en la migración hacia Estados Unidos, cuyos antecedentes se remontan a finales del
siglo XIX, originada por factores de índole económico, social y natural, que favorecen y permiten la
reproducción del flujo con la participación de casados, solteros y hasta de familias completas.
La participación de los menores de edad, en la migración por la interacción que tienen con el proceso
migratorio de sus familiares o conocidos llega a formar parte cotidiana en su vida, la que muchas veces
origina que se registre una desvalorización por la educación, en este escenario, muchos jóvenes optan
por desertar de las escuelas a las que asisten y búscan migrar también hacia Estados Unidos.
La deserción de los estudiantes zacatecanos en el nivel secundaria, es mayor con relación a la que se
registra a nivel nacional, las estadísticas muestran un comportamiento a la baja, así , en el ciclo escolar
2000-2001, la tasa de deserció n se ubicó en 10.8 %, para pasar a 6.6 % en el 2015- 2016, y un 5.2 % en
el 2023-2024 (INEGI, s/f). Son datos, que independientemente de las causas del origen de la deserción,
se trata de un problema que tiene repercusiones profundas y que desencadena, además, otro tipo de

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problemas, como la disminución de alumnos atendidos en las aulas, la reducción de docentes y hasta el
cierre de las escuelas.
El municipio de Morelos, Zacatecas, México, localizado en la zona centro de los valles del estado de
Zacatecas, se ubica a 15 km., de distancia de la ciudad capital, cuenta con una extensión territorial de
172 km2, y una población de 13,207 personas (COEPLA, 2022).
En la cabecera municipal del municipio, se encuentra la Escuela Secundaría Belisario Domínguez,
institución educativa pública, que ofrece educación a la población morelense en ese nivel. Las
estadísticas escolares de la Secundaria Gelisario Domínguez, dan cuenta de la deserción en la
institución, así, para el Ciclo 2019-2020, de un ingreso de 568 alumnos, desertó un 21.1 %, con un
egreso solamente de 78.9 % estudiantes; por su parte, en el Ciclo 2021-2022, se registró un ingreso de
580 alumnos de los cuales concluyó el 88.6 %, es decir, registró una deserción de 11.4 % estudiantes,
y para el Ciclo 2023-2024 se tiene una estadística de ingreso de 560 y una deserción del 13.8 %, la tasa
de deserción es alta debido a factores relacionados a la situación económica y la falta de interés por
parte de sus estudiantes, por lo que muchos de ellos, optan por migrar hacia Estados Unidos con alguno
de sus familiares radicados en ese país.
METODOLOGÍA
La investigación tuvo como objetivo, analizar las causas de la deserción y la migración de estudiantes
de la Escuela Secundaria General Belisario Domínguez, ubicada en el municipio de Morelos,
Zacatecas, México, para lo cual, se recurrió a la investigación cualitativa, que en palabras de Quecedo
y Castaño, produce datos descriptivos: las propias palabras de las personas, habladas o escritas, y la
conducta observable” (2002, p. 7), y al estudio de caso “que permite caracterizar el desarrollo y las
peculiaridades de un caso” (Soto y Escribano, 2019), utilizando la entrevista semiestructurada. Los
sujetos de estudio fueron tres alumnos, una hembra (desertó en el ciclo escolar 2018-2019), y dos
varones desertores (uno del ciclo escolar 2016-2017, y otro del 2018-2019), de la mencionada escuela,
jóvenes que por motivos diversos migraron a Estados Unidos y se encuentran radicando en ese país. La
entrevista semiestructurada se aplicó, a través de Google Meet, a fin de identificar las características
individuales, escolares y familiares que los motivó a desertar de las aulas escolares para migrar al vecino
país del norte, también, se aplicó una entrevista al director de la Secundaria y a un docente con una

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amplia trayectoría en la institución educativa para conocer las percepciones que tienen, desde su
experiencia, sobre las causas de la deserción-migración de los estudiantes.
RESULTADOS
La deserción escolar por motivos de migración es una realidad que enfrentan las instituciones
educativas, NNA que generalmente, de manera obligada, renuncian a sus procesos de socialización y
educación desarrollados en sus territorios de origen y ha establecer nuevos procesos de socialización y
educativos, en los lugares de destino. Sobre la experiencia de deserción por motivos de migración, los
alumnos desertores de la Escuela Secundaria General Belisario Domínguez, mencionan:
Mi papá arregló documentos para que mi mamá y yo, nos vinieramos a vivir con él a
Estados Unidos, él ya tenía 14 años viviendo aquí en Atlanta. Cuando nos venimos, yo
estaba en 2do año de Secundaria, fue en el año 2018. La verdad, yo no quería irme de
Morelos, porque allá tenía mis amigos, mis primos, mis compañeros; allá yo era muy feliz,
me gustaba mi escuela, mi casa, mi pueblo; pero mis padres decidieron que nos vinieramos
para estar juntos. Cuando mi papá se vino para Estados Unidos, vivió un tiempo con mi
tío, un hermano de él. (Valeria, alumna desertora de la Escuela Secundaria General
Belisario Domínguez)
Desde que estaba en 2do año de Secundaria, yo ya no quería ir a la escuela, no me gustaba
estudiar, ya estaba pensaba en venirme con mi hermano a New York, a trabajar en la
construcción, actualmente trabajamos juntos. Mis papás no estaban de acuerdo con que yo
dejara la escuela, no terminé el 3er año cuando me vine. Siempre he contado con el apoyo
de mi hermano y con el de un tío, me han apoyado emocional y económicamente, es muy
importante que alguien te respalde en este tipo de decisiones. (Ramón, alumno desertor de
la Escuela Secundaria General Belisario Domínguez)
Yo, ya tenía familiares viviendo aquí en Estados Unidos, cuando íban a Morelos me decían
que me viniera para acá, llegaban en trocas muy bonitas, yo quería andar como ellos. La
escuela dejó de interesarme, ya no tenía motivación para continur con mis estudios, deje
la escuela antes de terminar 3er año de secundaria, quería venirme a Kansas para buscar un
futuro con mayor estabilidad económica y oportunidades de crecimiento personal, mis

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padres se molestaron mucho porque abandoné la escuela. Para venirme a Kansas, conté
con el apoyo de mis tíos, hermanos de mi mamá, ellos me recibieron en su casa mientras
encontraba trabajo y me estabilizaba, estoy trabajando duro, aprovechando esta
oportunidad que me dieron (Antonio, alumno desertor de la Escuela Secundaria General
Belisario Domínguez)
Las respuestas que emiten los jóvenes sobre la deserción por motivos de migración, refieren a
situaciones relacionadas con: 1) la reunificación familiar; que orilla a muchos adolescentes a desertar
de la escuela pese a que la decisión de migrar, muchas veces escapa de la opinión de los menores por
ser decisiones adulcéntricas (del padre, la madre, o ambos); 2) el imaginario y/o constructos sobre la
migración; relacionados a los significados y expectativas que genera y representa el proyecto
migratorio, generalmente visualizado desde una perspectiva positiva, es decir, una forma de acceder a
un estilo de vida, estatus, prestigio, dinero, etc., “de manera fácil” (García, Estupiñán y Avendaño,
2022, p. 539), reproduciendo así, la tan conocida cultura migratoria, donde los no-migrantes ven a
amigos, parientes y conocidos que mejoran su situación socioeconó mica a través del trabajo en Estados
Unidos, además, escuchan los relatos de éxito de los migrantes retornados, desarrollando aspiraciones
que los orientan psicoló gicamente en la prospectiva de vida y trabajo al norte de la frontera,
incrementando así las posibilidades de dejar la escuela para buscar trabajo en Estados Unidos.
Conforme se incrementa el ví nculo de la familia de una persona joven con la emigració n en el país
vecino, se registra una mayor probabilidad de que esa persona aspire a trabajar y/o vivir en el vecino
país del norte (Márquez, 2012; Kandel y Massey, 2002), y 3) la presencia de redes migratorias, que
facilitan la continuidad migratoria, estableciendo la dirección y destino de llegada a través del contacto
entre los potenciales migrantes que se encuentran en el lugar de origen, y con los migrantes establecidos
en el lugar de destino (Massey, Arango, Hugo, Kouaouci, Pellegrino & Taylor, 2008). En el caso de los
jóvenes desertores de la Escuela Secundaria General Belisario Domínguez, sus familiares, tíos, primos,
hermanos, han sido fundamentales en el proceso, por el apoyó otorgado en la decisión de migrar, como
lo apunta Arango, “el apoyo de la familia y amigos se describe como un tipo de recurso económico
migratorio, en el cual las conexiones van formando una especie de capital social” (2003, p. 19).

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Con relación a la deserción de estudiantes del nivel Secundaria, sobre todo en las comunidades del
estado de Zacatecas, de acuerdo con Muro (2012), influye mucho la cultura migratoria, de ahí que, en
las escuelas se debe de promover y orientar a los alumnos sobre las implicaciones de la migración,
sobre todo, en aquellas escuelas que se encuentran en regiones donde el fenómeno de la migración es
histórico y arraigado, además, se deben de implementar estrategias y apoyos para los alumnos en un
afán de evitar la deserción-migración.
Al respecto, los jóvenes que desertaron para migrar comentaron que “no tuvieron información sobre
estrategias que ayudaran a prevenir la deserción escolar, ni recibieron ningún tipo de orientación sobre
las implicaciones que tiene la migración” (Valeria, Ramón y Antonio, alumnos desertores de la Escuela
Secundaria General Belisario Domínguez).
Desde la perspectiva de Coronel (2013), la escuela, es un espacio que brinda a los alumnos, las
herramientas necesarias para defenderse en la vida, por lo que, es ahí, donde se deben implementar
estrategias que coadyuven a disminuir la deserción escolar en general, así como, de informar a los
estudiantes sobre las situaciones que derivan de la migración en edades tempranas, por ello, consideran
fundamental que “la escuela brinde información, asesor ías y/o apoyo a los estudiantes, que contribuyan
a no abandonar la escuela, y les permitan ir construyendo una visión de su futuro, como profesionistas”,
mencionan que es muy importante, “organizar reuniones regulares con la participación de padres-
tutores/maestros/estudiantes, donde se expongan los progresos de sus hijos, además de charlas con
temáticas sobre problemáticas actuales y que afectan en especial a los jóvenes” (Valeria, Ramón y
Antonio, alumnos desertores de la Escuela Secundaria General Belisario Domínguez), son estrategias
que inciden en la solución de problemáticas relacionadas con la actividad escolar de los alumnos.
Valeria por su parte, agrega que las autoridades y los docentes de la Secundaria, deben de tener un
acercamiento más estrecho con los alumnos para evitar la deserción-migración, además de recibir
orientación que aliente las expectativas futuras relacionadas a la educación, es decir, como futuros
profesionistas (alumna desertora de la Escuela Secundaria General Belisario Domínguez).
Si bien, la deserción y el abandono escolar, se relaciona con una formación trunca, muchos jóvenes
vuelven a retomar los estudios, algunos de manera inmediata, otros de manera tardía. Al respecto, solo
uno de los alumnos desertores, mencionó que en su arribo a Estados Unidos, tuvo la oportunidad de dar

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continuidad a sus estudios, aunque reconoce que “fue un periodo muy complicado adaptarme a un nuevo
entorno escolar y lo complicado del idioma, después de seis meses en la escuela, decidí abandonarla
nuevamente y empezar a trabajar” (Valeria, alumna desertora de la Escuela Secundaria General
Belisario Domínguez).
Por su parte, Ramón y Antonio, una vez instalados en los lugares de destino, ya no les interesó la
continuidad de sus estudios, el primero de ellos, comentó que se dedicó de lleno al trabajo en el área de
la construcción, y el segundo, comparte su tiempo en dos trabajos, ambos en el área de alimentos
(alumnos desertores de la Escuela Secundaria General Belisario Domínguez).
Los jóvenes, reconocen que el abandono temprano de la escuela, limita las opciones de empleo, sin
embargo, las percepciones divergen al tratarse de uno, u otro país, pues por un lado de acuerdo con
Valeria, “en México, las opciones de empleo y de un futuro digno se acortan, son mal remunerados y
de poca calificación, mientras que en Estados Unidos, en iguales condiciones, se puede encontrar un
trabajo bien, y tener una vida digna” (alumna desertora de la Escuela Secundaria General Belisario
Domínguez)2, “considero que no, porque sí se puede encontrar un buen trabajo acá en Estados Unidos,
acá el estudio no garantiza tener algo seguro” (Ramón, alumno desertor de la Escuela Secundaria
General Belisario Domínguez), para Antonio, la deserción si reduce las opciones laborales para todas
las personas “en México, cuanto menos educación se tenga, existe una mayor probabilidad de trabajos
y de oportunidades limitadas, bajos salarios, sin embargo, en Kansas, si no estudias puedes tener buena
vida, solo que existe mucha sobreexplotación del trabajador, aunque esta, tambien depende de cuanto
quieres trabajar” (alumno desertor de la Escuela Secundaria General Belisario Domínguez desertor
radicado en Kansas).
En efecto, para muchos jóvenes, migrar representa una oportunidad de tener una vida mejor, cumplir
aspiraciones educativas, o lograr un desarrollo personal, sin embargo, la escasa escolaridad que algunos
tienen, solo les permite acceder a espacios laborales de bajo estatus, baja remuneración, jornadas largas
2 Valeria, al momento de la entrevista manifestó encontrarse trabajando en una fábrica industrial especializada en cartón, donde
se dedica al ensamblaje de cajas y la construcción de estantes “mi trabajo implica no solo la habilidad para armar productos
con precisión, sino también la atención a los estándares de calidad y la eficiencia en el proceso de producción” (alumna
desertora de la Escuela Secundaria General Belisario Domínguez).

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y de trabajos de alto riesgo, así lo señalan autores como Anguiano y Cruz (2014), quienes comentan
que una parte importante de los mexicanos que laboran en Estados Unidos se encuentran en el sector
terciario, realizando actividades de limpieza, mantenimiento de edificios y preparación de alimentos.
Por su parte, desde la visión y experiencia de los docentes y directivos sobre la deserción-migración de
los alumnos de la Escuela Secundaria General Belisario Domínguez, reconocen estar relacionada con
la cultura migratoria de los hogares, que tiene su efecto en la disminución de la matricula escolar. Los
comentarios que emiten:
Tenemos varias experiencias de deserción-migración con nuestros alumnos, muchos de
ellos tienen familiares en Estados Unidos y desde pequeños se les va metiendo la idea de
irse con ellos, es parte de la cultura migratoria que hay en el municipio y en el estado; los
chamacos pierden el interés por el estudio y muchos, pese a la edad que tienen han
desertado para irse a trabajar a Estados Unidos; otras veces, migra la familia completa, lo
que inevitablemente deriva en la salida de sus hijos de la Secundaria, nosotros nos damos
cuenta que se fueron hasta que el alumno ya no asiste a clases, pues muy pocas veces dan
aviso a la dirección de que se van a salir y de que se van para Estados Unidos. También
sabemos que existe mucho desinterés de los alumnos por el estudio; vienen familiares o
amigos a Morelos y los chamacos se impresionan por lo que ven y escuchan de la vida en
el otro lado, piensan que allá la vida es mejor. Sí, en la Secundaria, tenemos deserción, y
también, alumnos que migran por iniciativa propia, o porque se van con sus padres. Para
evitar algunas problemáticas con los alumnos, implementamos en la escuela sistemas de
seguimiento del estudiantado que nos permite detectar problemas de asistencia irregular,
bajo rendimiento académico, mal comportamiento, reprobación, etc., creo que esta
actividad nos ayuda a evitar la deserción de los alumnos, aunque tenemos que reconocer
que sobre migración casi no hacemos nada (Director y docente de la Escuela Secundaria
General Belisario Domínguez)
En opinión de Echeverría y Lewin, “la cultura migratoria en los menores, promueve el deseo de
experimentar la migración” (2016, p. 12), así, los no-migrantes observan a los migrantes que han
mejorado de manera importante su aspecto económico, además, al escuchar los relatos, historias y

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aventuras de los migrantes en el norte, los alienta a participar en el movimiento migratorio, definiendo
desertar de la escuela para irse a Estados Unidos a trabajar, pese a la corta edad en que se encuentran.
En palabras de Márquez “los migrantes incuban una fascinación entre los lugareños que se deslumbran
ante el aparente éxito de los visitantes en los periodos vacacionales o en las festividades del pueblo,
quienes se preocupan por desplegar una imagen de triunfadores” (2012, p. 62).
Aunado a lo anterior, las redes que se han creado en el municipio, ejercen una importante influencia en
las definiciones tomadas por muchos de los desertores, pues muchos de ellos optan por seguir los
mismos pasos de estos.
Los docentes, reconocen que los alumno que desertan y que se van a Estados Unidos entrentarán
situaciones adversas, pues “una baja escolaridad reduce en mucho las alternativas de trabajo, además
de que se exponen a situaciones poco o nada favorables, además hay que considerar el desconocimiento
del idioma y una cultura ajena para ellos” (Director y docente de la Escuela Secundaria General
Belisario Domínguez), pese a ello, los menores migrantes, contruyen realidades e imaginarios futuros
que suponen, los acerca al prestigio, poder y dinero, escenarios que la mayoría de las veces torna ser
difícil e irreal.
Los docentes implementan acciones para hacer frente a problemáticas educativas que pueden
desencadenar la deserción, sin embargo, con relación al tema migratorio, reconocen no hacer nada.
CONCLUSIONES
Desde la experiencia de los exalumnos de la Escuela Secundaria General Belisario Domínguez, en
torno a la deserción-migración, se destacan las complejidades a las que se enfrentan y que involucra no
solo desafíos presentes, sino futuros, por las implicaciones que esta guarda.
A partir de las declaraciones de los entrevistados, la deserción por motivos de migración encuentra sus
causales en dos vertientes principales: a) la reunificación familiar, y b) las redes y la cultura migratoria;
en la primera de ellas, refiere a la búsqueda de la reagrupación de la unidad familiar, menores que al
tener la experiencia migratoria parental, y desde decisiones adulcéntricas (sobre todo de los padres), se
busca la runificación de los miembros de la familia en el país de destino, orillándo a los menores a
abandonar su educación (la mayoría de las veces de manera temporal). En el segundo de los causales,
la cultura migratoria, es un aspecto presente al interior del estado de Zacatecas, que ejercen gran

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influencia en los menores por el intercambio de la información que reciben sobre el éxito de los
migrantes en el país del norte, convirtiéndose en todo un referente para los no-migrantes, apoyadas,
además, en la labor de las redes migratorias ya establecidas por familiares, amigos y/o conocidos,
permitiendo la continuidad de esa cultura migratoria alentada por los constructos e imaginarios que se
creean en torno a que esta, pues consideran “muy seguramente les permitirá lograr sus aspiraciones
futuras”.
Además, desde la narrativa y percepción de los jóvenes desertores, es más fácil acceder en Estados
Unidos a un empleo y aun buen salario aún con baja escolaridad (tal comparativo lo hacen considerando
las condiciones que imperan en ambos países), motivo por el cual, pierden interés en el estudio y deciden
desertar de la Secundaria a la que asisten, aunque también reconocen el riesgo de la exposición a la
sobreexplotación, bajos salarios y de lograr trabajos de bajo estatus.
Reconocen la importancia de que en la institución se apliquen estrategias que contibuyan a disminuir
los problemas académicos de los alumnos, además, de construir una visión como futuros profesionistas,
lo que muy seguramente frenará la deserción-migración.
Por su parte, desde las declaraciones que hacen directivos y docentes, coinciden en que la deserción-
migración de los alumnos es consecuencia de la falta de interés por la educación, la reunificación
familiar, y la influencia de familiares y amigos ya migrados, así como, por la búsqueda de oportunidades
económicas.
La culminación de las trayectorias académicas no siempre constituyen el objetivo de los estudiantes, a
veces estas se separan de sus intereses personales, de ahí que, la deserción de los menores por motivos
de migración, sea un asunto de gran relevancia que demanda de la atención urgente de las autoridades
educativas, pues constituye un fenó meno anó malo que vulnera sus derechos, producto de la utopizació n
que motiva y alienta muchas veces a los menores a desertar y participar en la migració n, y a enfrentar
por tanto, de manera directa o indirecta, las secuelas de ésta.
Si bien, la deserción por si misma, ocasiona una baja de la estadística escolar, puede desencadenar otras
situaciones más complejas, relacionadas con la disminución de los alumnos atendidos en el aula, la
reducción de docentes por grupo y hasta el cierre de escuelas, así como, de problemáticas más graves,

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como es el caso de que el menor desertor engrose las filas de crimen organizado, por lo que amérita de
una mayor atención de las autoridades educativas.
Finalmente, es importante mencionar que de esta investigación se desprenden nuevos tópicos por
trabajarse, como son, las particularidades de los menores que participan de manera directa o indirecta
en la migración, los problemas socioemocionales generados por la migración parental y la posterior
migración de los menores por motivos de reunificación, incluyendo la perspectiva de género en ambos,
por mencionar algunos.
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