La pr�ctica pedag�gica en
un proceso de cambio
Mg. Denis
Liz Leiva-Huamanyalli,
https://orcid.org/0000-0002-5501-2274
Universidad C�sar Vallejo, Lima, Per�
Dra. Patricia M�nica
Bejarano-Alvarez,
https://orcid.org/0000-0003-3059-6258;
Universidad
C�sar Vallejo, Lima, Per�
Mg. Miguel
Angel Narro-Le�n,
[email protected],����������������
https://orcid.org/0000-0003-3987-3629
Universidad
C�sar Vallejo, Lima, Per�
�Mg. Sara Mercedes Rojas-Alanya,
https://orcid.org/0000-0002-0253-7659
Universidad
C�sar Vallejo, Lima, Per�
RESUMEN
La
investigaci�n se realiz� con docentes de una instituci�n educativa ubicada en
la provincia de Chanchamayo - �Per�. En
el proceso de la pandemia del COVID 19, para lo cual nos hemos planteado el
siguiente objetivo: Revisi�n te�rica socio cr�tica y socio formativa de la
pr�ctica pedag�gica para identificar teor�as y enfoques que nos ayuden a
fortalecer la pr�ctica del docente en el aula.
Se
realiz� un an�lisis documental que sustent� la variable practica pedag�gica,
desde un paradigma interpretativo, teniendo en cuenta la fenomenolog�a
hermen�utica.
Los
resultados nos demostraron que la pr�ctica pedag�gica del docente es
fortalecida si se asume el enfoque socio formativo de la mano con la teor�a
socio cr�tica, teniendo en cuenta desarrollar un pensamiento complejo, reflexivo,
trabajo colaborativo, retroalimentaci�n, los m�todos, la gesti�n del conocimiento, el proyecto �tico de vida y
la docencia meta cognitiva.
Palabras
clave: practica pedag�gica, teor�a sociocr�tica,
enfoque socioformativo.
Pedagogical practice in a
process of change
ABSTRACT
The research was
carried out with teachers from an educational institution located in the province
of Chanchamayo - Peru. In the process of the COVID 19 pandemic, for which we
have set ourselves the following objective: Socio-critical and socio-formative
theoretical review of pedagogical practice to identify theories and approaches
that help us strengthen the teacher's practice in the classroom.
A documentary
analysis was carried out that supported the pedagogical practice variable, from
an interpretive paradigm, taking into account the hermeneutical phenomenology.
The results showed
us that the pedagogical practice of the teacher is strengthened if the
socio-formative approach is assumed hand in hand with the socio-critical
theory, taking into account the development of complex, reflective thinking,
collaborative work, feedback, methods, knowledge management. , the ethical life
project and metacognitive teaching.
Keywords:
pedagogical practice, sociocritical theory, socioformative approach.
Art�culo recibido:� 03 marzo 2022
Aceptado para publicaci�n: 20 marzo 2022
Correspondencia: [email protected]
Conflictos de Inter�s: Ninguna que declarar
1. INTRODUCCI�N
En la actualidad, la practica pedag�gica
del docente es muy cuestionada por la sociedad, debido a el deficiente uso de
la tecnolog�a por parte de los docentes, pues no fue f�cil responder a las
exigencias de la educaci�n virtual ,�� sin
embargo es la capacidad que tiene el docente para interactuar en el contexto de
ense�anza, aprendizaje, por ello se plante� el problema �C�mo mejorar la
pr�ctica pedag�gica del docente en un proceso de cambio?, se implement� el
an�lisis documental con el prop�sito de brindar claridad al marco te�rico, se
revis� teor�as que respaldan la pr�ctica pedag�gica en la educaci�n virtual y
sus implicancias.
Recolectando
y clasificando informaci�n de art�culos documentales, revistas indexadas,
libros, informes y tesis, utilizando una matriz con la variable de estudio,
trabajando con modelos, teor�as y enfoques que nos sirvieron para el an�lisis
de la pr�ctica pedag�gica del docente.�
Siendo
este un aspecto primordial, se ha revisado la teor�a socio cr�tica y el enfoque
socio formativo para el impulso de la investigaci�n.
Entre
los antecedentes tenemos a Montanero y Tabades (2020) que resaltan de manera
positiva las pr�cticas pedag�gicas de aprendizaje cooperativo entre docentes y
siendo uno de los obst�culos la falta de reflexi�n individual, prevaleciendo
comportamientos seudocolaborativos.�
Tob�n
(2018) manifiesta que la socioformaci�n reside en promover la formaci�n de las
personas integralmente profiriendo dimensiones biol�gicas, psicol�gicas,
sociol�gicas y espirituales, negociando formar estudiantes cr�ticos, creativos
y anal�ticos, que asuman los problemas de vida diaria y su contexto, realizando
un trabajo colaborativo y respetando la evaluaci�n de logros con la intensi�n
de asumir retos nuevos.
El
enfoque socioformativo seg�n Coaquira (2020) es una alternativa para la
generaci�n de procesos de evaluaci�n del desempe�o y para fortalecer el actuar
de las personas en diversos problemas que se presenten de su entorno, con
evidencias; que ayuden a lograr la formaci�n de personas competentes que se inserten
a la sociedad de forma efectiva, eficaz con sostenibilidad y sustentabilidad en
su proceder como profesional, articulando aprendizajes, partiendo de la
indagaci�n de problemas de su entorno, de una necesidad, de una dificultad, de
un conflicto, para superar, logrando un resultado concreto medible con un instrumento
teniendo presente la sensibilizaci�n, la resoluci�n de problemas, el proyecto
�tico de vida, la gesti�n del conocimiento, el pensamiento complejo, mejora de
las condiciones de vida y el trabajo colaborativo los cuales se deben
perfeccionar en la pr�ctica pedag�gica teniendo presente al enfoque
socioformativo. Siendo una necesidad el trabajo de la gesti�n pedag�gica para
la contextualizaci�n de la problem�tica y el aporte critico en la resoluci�n de
problemas por medio de equipos multidisciplinarios, para dar solidez y generar
prop�sito sostenibles y sustentables.
Tambi�n
tenemos a Viveros y S�nchez (2019) en su investigaci�n sobre la apropiaci�n del
modelo socio cr�tico y la pr�ctica pedag�gica del docente donde concluyen con
la importancia del fomento del trabajo colaborativo y en equipo entre docentes,
la reflexi�n de su pr�ctica pedag�gica y el an�lisis del contexto educativo
para la correspondencia con los fundamentos del modelo pedag�gico que se asume,
constituyendo al docente como una persona intelectual, reflexivo con objetivos
claros, que asume un rol democr�tico y protag�nico teniendo la misi�n de
transformar al hombre, la escuela y la sociedad con di�logos dialecticos
enfocados en la reflexi�n cr�tica, respaldado en la teor�a cr�tica, con la
preparaci�n, profundizaci�n y actualizaci�n de los docentes para transformar su
pr�ctica pedag�gica.
Teniendo
el aporte de Arreola, Palomares y �vila (2019) quienes mencionan que tener
claro el concepto de practica pedag�gica desde la socio formaci�n puede
asegurar una transformaci�n del quehacer docente siendo un reto que requiere de
voluntad para el an�lisis de la informaci�n y de comprensi�n para emplearla
pertinentemente y enfatizan la importancia de aplicar elementos de una
planificaci�n consciente con sentido �tico para transformar al individuo, su
entorno y su mundo.
Las
teor�as que se analizaron en la presente investigaci�n son: la teor�a socio
cr�tica, y el enfoque socio formativo que orienta al docente para que realice
una intervenci�n reflexiva y modifique la pr�ctica pedag�gica en el aula
afrontando los requerimientos del mundo actual m�s a�n en esta etapa de la
educaci�n virtual.
El
presente trabajo tiene un enfoque cualitativo y se ha desarrollado haciendo un
an�lisis minucioso de los marcos te�ricos en menci�n cuyo objetivo es
importante por la necesidad de los docentes en empoderarse m�s con teor�as que
van a orientar a fortalecer la pr�ctica pedag�gica en el aula.
En
conclusi�n, a mayor nivel de comprensi�n de las teor�as que fortalezcan la
practica pedag�gica de los docentes, se podr� generar aprendizajes que
coadyuven para conseguir logros en lo acad�mico, social y cultural, con
pr�cticas pertinentes de acuerdo a necesidades y requerimientos de la educaci�n
actual, enfocados en teor�as que aporten al fortalecimiento de la pr�ctica
pedag�gica en todas las esferas del desarrollo profesional.
2.
ESTRATEGIAS METODOL�GICAS
La
elaboraci�n de la presente investigaci�n permiti� realizar un an�lisis
documental de la pr�ctica pedag�gica, ya que, en el tiempo de pandemia, se
asumi� una ense�anza virtual no presencial y la pr�ctica pedag�gica del docente
se vio afectada con muchos retos por asumir, motivo por lo que se hizo un
an�lisis documental exhaustivo de teor�as y enfoques que den sentido a la
interacci�n con el estudiante y reconocer las debilidades existentes en la
pr�ctica pedag�gica.�
Trabajando
la investigaci�n con un paradigma interpretativo haciendo un an�lisis del
fen�meno objeto de estudio, multifactorial, multidimensional, relacionado a
diversos hechos y fen�menos en constante transformaci�n con soporte del m�todo
del nivel te�rico como el anal�tico sint�tico y el m�todo anal�tico sint�tico y
deductivo que se emple� en todo el proceso de la investigaci�n desde la
b�squeda de la bibliograf�a hasta culminar todo el proceso de la investigaci�n,
lo cual coadyuv� en la sistematizaci�n del conocimiento, empleando el an�lisis
documental.
La
pr�ctica pedag�gica del docente
Teniendo
el bagaje documental sobre la pr�ctica pedag�gica, se busca que el docente como
persona adulta mejore su desarrollo profesional de su pr�ctica pedag�gica
cambiando actitudes, lo cual implica lograr nuevos aprendizajes, teniendo en
cuenta la capacidad cr�tica y la reflexi�n.
Derivado
de lo manifestado anteriormente uno de los referentes de la pr�ctica pedag�gica
es de Villalpando, Estrada y Alvarez (2020) que
lo definen como la capacidad que se tiene para la intervenci�n y ense�anza en
diversos contextos que tengan situaciones y problemas genuinos. Montanares y
Junod (2018) manifiestan que es la capacidad de conectar y enmarcar su historia
personal y el lugar donde se desempe�a con hechos y esquemas pedag�gicos que
encaminan para dar vida a su pr�ctica pedag�gica.�
Becerra
y Cristancho (2018) lo asumen como medio de reflexi�n para la construcci�n de
los saberes que se necesitan. Zambrano (2018) refieren que es la uni�n de
preferencias culturales, pol�ticas, creencias, diversas agrupaciones, ideolog�as
e instituciones, reorientando el desarrollo profesional, transformando la
pr�ctica pedag�gica obteniendo conocimientos que son v�lidos y se encuentren
fundamentados en saberes, educativos, culturales y cient�ficos, valorando
enfoques y modelos pedag�gicos, nuevos.
Entre
otras investigaciones sobre la pr�ctica pedag�gica, tenemos a Condori (2019)
quien refiere que es el actuar docente, en las diversas interacciones y
relacionada con el logro de los aprendizajes. Con la intensi�n de promover
aprendizajes en los estudiantes (Gonz�lez, Eguren y De Belaunde, 2017).��
�Bejarano, Leiva, Rojas y Narro (2020)
manifiestan que la educaci�n siempre ha contribuido con dar soluci�n a las
demandas de la sociedad y que tambi�n se ha hecho uso de los avances tecnol�gicos;
pero estos se han hecho indispensables con la llegada de la pandemia causada
por el virus SARS-COV-2 pues se vieron obligados los sistemas educativos a
nivel mundial a enmarcarse con la educaci�n a distancia; trayendo consigo
cambios vertiginosos y desaf�os en la pr�ctica pedag�gica de los docentes que
se vienen implementando con la intensi�n de fortalecer sus competencias.
La
teor�a socio cr�tica y la pr�ctica pedag�gica del docente
Viveros
y S�nchez (2018) manifiestan que el problema educativo est� en la resoluci�n
del problema en funci�n a la sociedad y a la persona que se quiere formar y que
exige comprender la multidimension, la complejidad y la integridad.�
�El
modelo socio cr�tico
Orienta
la construcci�n de un curr�culo democr�tico y protag�nico de un contexto
socio-cultural, promoviendo di�logos dialecticos e intersubjetivos para
transformar a la persona, la escuela y la sociedad; teniendo en cuenta una
reflexi�n cr�tica, sustentado en la teor�a cr�tica, autoevaluaci�n y la gesti�n
acad�mica socio cr�tico, considerando: el proceso curricular de dise�o
pedag�gico, el proceso de la pr�ctica pedag�gica, el proceso de seguimiento
acad�mico y de la gesti�n del aula.�
El
modelo pedag�gico socio critico percibe a la did�ctica como ciencia en
interacci�n discursiva sobre un saber particular. El maestro asume el rol
facilitador, orientador, mediador y estimulador de las experiencias que van a
contribuir en el desarrollo de capacidades, reflexionando sobre su propia
pr�ctica, es consciente del compromiso que asume con la sociedad, practica la
democracia y es aut�nomo. Se compromete con la formaci�n integral de los
educandos, es constructor e investigador de su propia pr�ctica pedag�gica.�
El
rol del docente y la reflexi�n son consideradas como elementos de mejora. La
investigaci�n-acci�n tiene implicancias en el dise�o de la planificaci�n,
observaci�n y reflexi�n. La pr�ctica reflexiva tiene como una caracter�stica
que el docente construya y reconstruya significados al interactuar las
reflexiones con sus pares.�
El
Enfoque socio formativo y la pr�ctica pedag�gica
Teniendo
en cuenta la posici�n de Arreola, Palmares y �vila (2019) el enfoque socio
formativo es caracterizado por el gran valor que se le da a las personas y no
en la cantidad de conocimientos que pueda acumular, teniendo claro la ejecuci�n
que se haga para la resoluci�n de problemas, la colaboraci�n y buscando una
meta en com�n, que obtenga beneficio ambiental, individual y social,
contextualizando los saberes adquiridos en el sal�n y generando resultados con
la participaci�n de todos los involucrados, con un concepto claro de� pr�ctica pedag�gica teniendo en cuenta la
metodolog�a de proyectos y estrategias hol�sticas que van a permitir a los
estudiantes aplicar, participar y evaluar colaborativamente.
Ambrosio
(2018) refiere que el enfoque socio formativo lo realizan agrupaciones de
personas en convivencia y que comparten su trabajo, su historia y se
caracterizan por el desarrollo de una cultura. Tob�n (2015) aporta que este
enfoque tiene en cuenta la perspectiva educativa, las herramientas necesarias y
un proyecto de vida con �tica, la que difiere de otros enfoques pedag�gicos.� En la socio formaci�n, los problemas del
contexto son parte de una transformaci�n metodol�gica y filos�fica (Hern�ndez,
Guerrero y Tob�n, 2015) por ello involucran a los docentes en su papel de
mediador de los conocimientos con la intensi�n de formar estudiantes que sean
conscientes de su realidad (Rabad�n, 2012).�
Tob�n
(2007) manifiesta que la educaci�n es oportunidad que nos va acercando a la
sociedad del conocimiento, la socio formaci�n es relevante, ya que se forma al
docente en competencias trascendentales que le servir� toda su vida. Una
educaci�n integral, modelando a la persona gradualmente e influyendo en su
personalidad para impactar en la sociedad cuando es id�nea (Colunga y Garc�a,
2016).��
En
la actualidad el docente es mediador y generador de ambientes de formaci�n,
estimulantes, din�micos y flexibles. El maestro como mediador intercede para
que sus estudiantes desarrollen competencias sustentables, para la resoluci�n
de situaciones complejas. (Parra, Acosta, Tob�n, L�pez y Loya, 2015).�
La
pr�ctica pedag�gica socio formativa en la sociedad del conocimiento . Ju�rez y
Torres (2016) se inicia en la base del pensamiento complejo, siendo
indispensable comprender lo que sabe, teniendo en cuenta la fusi�n con la
participaci�n en la problem�tica y haciendo suyo el conocimiento, caracterizado
por una formaci�n integral, con un proyecto �tico de vida, dando resalte a los
entornos sociales, organizaciones, comunidades, m�todo de proyectos, con una
formaci�n integral del educando, realizaci�n de metas a nivel personal, social
y ambiental y el aprendizaje colaborativo.�
El
concepto de pr�ctica pedag�gica, partiendo del enfoque socio formativo,
considera las caracter�sticas: curr�culo, apoyo tecnol�gico y trabajo
colaborativo. Y teniendo en cuenta la socio formaci�n encontramos: la docencia
meta cognitiva, el trabajo colaborativo; los m�todos; la gesti�n de
conocimientos y el proyecto �tico de vida (Hern�ndez, Tob�n y V�zquez, 2015).
La pr�ctica pedag�gica socio formativa est� vinculada con el m�todo del pensamiento
complejo de Mor�n, (2016) con la caracter�stica que es la estimulaci�n y la
comprensi�n humana la que est� orientada por conocimiento y moral (Pe�aranda,
2016)
Quiriz y Tob�n (2019)
manifiestan que la socio formaci�n promueve la vinculaci�n de lo cognitivo y emocional para motivar y
alcanzar metas; cimentar concepciones con la intensi�n de resolver problemas y
desarrollar actividades; interpretar, argumentar, resolver conflictos;
fortalecer los valores universales; promover el trabajo en equipo, la
comunicaci�n con respeto hacia los dem�s, determinando los aspectos a mejorar
en el desempe�o.
Un proyecto de ense�anza tradicional trabaja con contenidos.
Por lo contrario, los proyectos formativos, est�n orientados en el desarrollo
de actividades para la resoluci�n de problemas contextualizados, favoreciendo el
desarrollo de las competencias a base de evidencias, criterios, trabajo
colaborativo y la formulaci�n de saberes; con ayuda de las TICS (Cardona, et
al., 2016). Insertar los proyectos formativos en la valoraci�n del desempe�o
docente contribuir� en la motivaci�n de los mismos.
La Pr�ctica Pedag�gica H�brida seg�n Torres
y Guti�rrez (2017) es la combinaci�n de diversos modelos pedag�gicos, entre ellos
el conductismo, el cognitivismo y al constructivismo, surgiendo la autonom�a como
un concepto usual en el aprendizaje y la adquisici�n del conocimiento. Tambi�n,
se evidencia la integraci�n de experiencias tecno-pedag�gicas con dise�os de
dispositivos did�cticos, precisando con ello unas pr�cticas educativas
normativas, aunada a contenidos tem�ticos presentados mediante plataformas
virtuales que est�n dados por el trayecto curricular, asignaturas disciplinares,
dise�o instruccional y el uso de dispositivos did�cticos.
3.
RESULTADOS Y DISCUSI�N
De la informaci�n recopilada hemos arribado al resultado que, a
mayor manejo disciplinar de la teor�a cr�tica y el enfoque socio formativo se
logra una mejora considerable en la pr�ctica pedag�gica del docente.
�La investigaci�n ha
demostrado que cuando el docente cumple de forma �ptima su rol mediador y
acompa�a en el proceso de aprendizaje, logra transformar su pr�ctica
pedag�gica.
El
empoderamiento del enfoque socioformativo en el docente permite la
revalorizaci�n de su pr�ctica pedag�gica y su desempe�o frente a la sociedad.
La nueva escuela pone de manifiesto que la formaci�n continua del
docente la utilizaci�n de tecnolog�as y la ense�anza h�brida con el enfoque socioformativo
logran una sinergia de su pr�ctica pedag�gica permitiendo la adecuaci�n
diversificaci�n y contextualizaci�n curricular.
Queda demostrado que el empoderamiento de la teor�a cr�tica y el
enfoque socioformativo
permite afrontar con mayor solvencia la pr�ctica pedag�gica logrando
cubrir los requerimientos y necesidades de la educaci�n actual.
4.
CONCLUSI�N
Teniendo
en cuenta que a las teor�as las consideran como modelos sistem�ticos
progresivos y din�micos en el proceso de ense�anza aprendizaje, se realiz� el
an�lisis documental de la teor�a socio cr�tica y el enfoque socio formativo,
logrando establecer conclusiones en la pr�ctica pedag�gica del docente.�
Una
primera conclusi�n es la importancia de tener claro los conceptos de la teor�a
socio cr�tica y el enfoque socio formativo para ayudar al docente a transformar
su pr�ctica pedag�gica, pues es necesario tener voluntad para el an�lisis de la
informaci�n y la comprensi�n para emplearla de manera adecuada y pertinente
(Hernandez, Tob�n y Vasquez, 2015).
Una
segunda conclusi�n de la teor�a socio critica es que el docente acompa�a y es
mediador en todo el proceso, impulsando la elaboraci�n de saberes nuevos,
desarrollando valores y actividades propuestas en el curr�culum.� El docente socio cr�tico est� en la capacidad
de suministrar elementos conceptuales, actitudinales y procedimentales a los
educandos.��
En
tercer lugar, los procesos de cambio social y educativo en el enfoque socio
formativo van a dar origen a la modificaci�n del trabajo del docente en el
aula, y la valoraci�n que pueda manifestar la sociedad de su desempe�o
(Vaillant, y Marcelo, 2015).�
Los
procesos educativos son medios indispensables para la participaci�n de los
educandos, el conocimiento para desarrollar capacidades y competencias que les
permita una mejor calidad de vida y educaci�n (Garc�a, Heredia, y
Mart�nez,2016).�
�En cuarto lugar, mencionamos que es necesario
la formaci�n de docentes teniendo en cuenta las caracter�sticas de las
instituciones educativas, urbana, rural, biling�e, monoling�e, asumiendo las
escuelas formadoras de docentes, con estrategias de formaci�n permanente en
gesti�n acad�mica.�
Para
terminar, a mayor nivel de comprensi�n de las teor�as, se podr� generar
aprendizajes que contribuyan a conseguir logros en lo acad�mico, social y
cultural de los estudiantes, con pr�cticas pedag�gicas pertinentes de acuerdo a
las necesidades y requerimientos de la educaci�n actual, enfocados en teor�as
que coadyuven al fortalecimiento de la pr�ctica pedag�gica en todas las esferas
del desarrollo personal.�
5.
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