An�lisis fenomenol�gico de las experiencias del docente-investigador de posgrado de la FES Arag�n UNAM: uso de las TIC en

pandemia-pospandemia

 

Estephany Alvarado Solis

[email protected]

[email protected]

Facultad de Estudios Superiores Arag�n

Universidad Nacional Aut�noma de M�xico

EDOM�X, M�xico.

https://orcid.org/0009-0000-9695-1991

 

RESUMEN

La presente investigaci�n parte de la reflexi�n de las experiencias docentes en torno al uso de las TIC (Tecnolog�as de la Informaci�n y la Comunicaci�n), as� como su impacto y protagonismo en un momento de crisis mundial causado por la pandemia.

Su objetivo es analizar las experiencias de la pr�ctica educativa del docente-investigador de Posgrado de la FES Arag�n UNAM en torno al uso de las TIC en pandemia-pospandemia. En tal sentido, nos enfocamos en el aspecto m�s profundo y complejo de la perspectiva de los participantes desde el m�todo fenomenol�gico de Alfred Schutz a trav�s del paradigma cualitativo de investigaci�n. Asimismo, los hallazgos obtenidos como resultado est�n formulados en seis categor�as: I. Colocarse en el lugar del otro; II. Enfrent�ndose al contexto: el coronavirus y el virus m�s all� de la pandemia; III. Entre complicaciones y desaf�os: adapt�ndose a la educaci�n virtual a �marchas forzadas�; IV. Desdibujando el distanciamiento para encontrarse con el otro; V. Intersubjetividad, di�logo e intercambio para la construcci�n de conocimiento; VI. Transform�ndose durante la pr�ctica: propuestas reflexivas despu�s de la pandemia.

 

Palabras clave: experiencia docente; tecnolog�as de la informaci�n y la comunicaci�n (TIC); pandemia, pospandemia; posgrado UNAM.

 

 

 

 

 

Phenomenological analysis of the experiences of the postgraduate teacher-researcher of the FES Arag�n UNAM: use of ICT in pandemic-post-pandemic

 

ABSTRACT

This research is based on the reflection of teaching experiences around the use of ICT (Information and Communication Technologies), as well as its impact and role in a time of global crisis caused by the pandemic. Its objective is to analyze the experiences of the educational practice of the postgraduate teacher-researcher of the FES Arag�n UNAM regarding the use of ICT in pandemic-post-pandemic. In this sense, we focus on the deepest and most complex aspect of the perspective of the participants from the phenomenological method of Alfred Schutz, through the qualitative research paradigm. In adittion, the findings obtained as a result are formulated in six categories: I. Putting oneself in the other's place; II. Facing the context: the coronavirus and the virus beyond the pandemic; III. Between complications and challenges: adapting to virtual education at "forced marches"; IV. Blurring the distance to meet the other; V. Intersubjectivity, dialogue and exchange for the construction of knowledge; VI. Transforming during practice: reflective proposals after the pandemic.

 

Keywords: teaching experience, information and communication technologies, pandemic, post-pandemic, UNAM postgraduate.

 

 

 

 

 

Art�culo recibido 15 febrero 2023

Aceptado para publicaci�n: 15 marzo 2023

 

 

 


INTRODUCCI�N

Con la llegada del SARS-CoV 2 (COVID -19) la situaci�n en el �mbito educativo fue a�n m�s compleja. Las brechas econ�micas, el acceso a espacios de aprendizaje, los recursos y herramientas tecnol�gicas para facilitar acciones a distancia de ense�anza-aprendizaje, la comunicaci�n e informaci�n clara y pertinente, son algunas de las problem�ticas que se necesitan retomar desde una perspectiva cr�tica en la educaci�n (Schewe y P�rez, 2020).

Es justamente, en el contexto de la pandemia donde se acrecentaron los problemas educativos, claramente perjudiciales en todo el mundo. Durante este per�odo la educaci�n sufri� cambios profundos que obligaron a pensar en diversas modalidades en la l�gica de la no presencialidad y, por tanto, diversas formas de adaptaci�n, priorizaci�n y ajuste (CEPAL-UNESCO, 2020).

Las comunidades escolares, por su parte, intentaron resolver con lo que estaba a su disposici�n y de la mejor forma las dificultades que se presentaban d�a a d�a. Esto implic� que los docentes tuvieran un rol con mayor protagonismo en los siguientes meses, aunque se volv�a cada vez m�s impredecible, sobre todo porque todo lo que se estaba experimentando socialmente no ten�a ning�n tipo de precedente.

En consecuencia, ha habido una serie de experiencias y relatos que yacen de la actividad docente en interacci�n con sus estudiantes que, sobrepasaron la cotidianidad del aula, al estar latente los problemas de salud y de muerte, de los familiares, amigos o bien, de los propios estudiantes.

En tal sentido, el problema se transform� en algo �ntimo y subjetivo para cada sujeto del presente. El conocimiento de su pr�ctica de los docentes fue esencial para resolver problemas de la ense�anza-aprendizaje, dado que, en algunas de las ocasiones, no s�lo se trataba de ense�ar o comunicar el contenido de cada asignatura sino de transformar su propia realidad atenuando el conflicto acontecido desde sus propias vivencias.

En el caso espec�fico de posgrado, la responsabilidad tiene diferentes aristas: por un lado, las problem�ticas surgidas durante el confinamento fueron abordadas a trav�s de� mecanismos de adaptaci�n, pero que al ser el �ltimo grado de formaci�n acad�mica es suceptible a la creencia de que es relativamente m�s sencillo sobrellevar los problemas en comparaci�n con otros espacios, y por ende, que el docente-investigador, es o deber�a de ser un experto o por lo menos, un profesional que domina el uso de recursos y herramientas tecnol�gicas por la propia naturaleza del grado que se ense�a. En este sentido, es cuestionable si el cambio de modalidad de lo presencial a lo virtual[1] en el grado acad�mico de posgrado fue realmente m�s f�cil que en otros espacios.

En cualquier caso, las condiciones de cada estudiante de la que el docente es testigo, fueron sustanciales para determinar el �xito del t�rmino de investigaciones de los estudiantes de Maestr�a y Doctorado en Pedagog�a. En esta diferenciaci�n no s�lo se profundiza la brecha socioecon�mica y cultural sino la brecha tecnol�gica durante los procesos educativos (Acu�a y S�nchez, 2020).

Es por ello, que mirar el aspecto humano de las experiencias en torno a las TIC (Tecnolog�as de la Informaci�n y Comunicaci�n) es en s� mismo, una posibilidad de dar lectura a la pr�ctica educativa del docente, sin colocarnos �nica y exclusivamente en las cualidades t�cnicas que se ejecutan en el �mbito de la educaci�n formal.

La problem�tica de investigaci�n se teje desde la observaci�n de la compleja realidad que exige mirar todas sus partes y, por consiguiente, pensar en las experiencias del docente-investigador de Posgrado UNAM en relaci�n con el contexto econ�mico, social y educativo principalmente, lo que nos obliga a situar la relevancia del uso de las TIC durante y despu�s de la pandemia causada por la COVID-19. Su objetivo es analizar las experiencias del docente-investigador en torno al uso de las TIC en pandemia-pospandemia para develar su relevancia en el espacio acad�mico de Posgrado de la FES Arag�n UNAM.

De igual modo, es a partir de la metodolog�a cualitativa que se construye la presente investigaci�n a trav�s del enfoque fenomenol�gico de Alfred Schutz (1932) para dar cuenta de las experiencias del docente desde una mirada sustancialmente sensible a las particularidades y condiciones del otro.

FUNDAMENTO TE�RICO

Concepto de experiencia

La palabra experiencia es recurrente en el campo educativo, pero tambi�n es ambigua, polis�mica y confusa por lo que es necesario para los investigadores explicitar el concepto sin establecer definiciones cerradas (Guzm�n y Saucedo, 2015). De esta manera, se precisa en la presente investigaci�n el enfoque de experiencia desde la mirada del fen�meno educativo en su cotidianidad, complejidad e importancia en el �mbito acad�mico. Desde este enfoque, su trascendencia deviene de las vivencias de los sujetos que otorgan significados a sus pr�cticas educativas.

La experiencia

La experiencia est� ligada a la vida misma, a lo que sucede en la cotidianidad.� Para Larrosa (2013) la experiencia es un acontecimiento, de aquello que sucede independientemente de lo que uno es. La experiencia, dice el autor que es �eso que me pasa�, pero no le pasa a nadie m�s que a �m�, �el lugar de la experiencia soy yo�, es, por tanto, en la subjetividad �donde la experiencia tiene lugar� dado que afecta todos los aspectos de la vida del sujeto, transformando su propia existencia. �La experiencia supone que el acontecimiento me afecta a m�, que tiene efectos en m�, en lo que soy, en lo que pienso, en lo que yo siento, en lo que yo s�, en lo que yo quiero, etc.� (Larrosa, 2013, p.13). Este rasgo de transformaci�n que menciona el autor tiene un aspecto en com�n con la concepci�n de experiencia significativa de Schutz (1993) y esto es, que esto que me pasa, es en principio reflexionado y se procesa seg�n este �ltimo autor, en la conciencia. Pero lo destacable, es que efectivamente, es un proceso �nico e irrepetible que afecta al sujeto de la experiencia. En palabras de Larrosa (2013), la experiencia tiene que ver con traves�a, con pasaje, con camino, con viaje. En este sentido, la espera del sujeto de la experiencia es pasiva, pero pasional, es sensible a lo que pasa y a lo que acontece en s�, es el que padece. Por lo tanto, el acontecimiento deja huella en quien experiencia. De alguna manera, aquello que pasa en lo exterior, pero que afecta al sujeto de experiencia, tambi�n es incertidumbre.

Ahora bien, este breve pre�mbulo de la experiencia es fundamental para comprender lo que sucedi� en las aulas, con las pr�cticas educativas de los docentes, pero, sobre todo, entender su perspectiva� acerca de lo vivido.

Amengual (2007) describe a la experiencia como un �proceso constituyente del sujeto (...) de forma que ella misma conforma el conjunto de condiciones de posibilidad para la apertura al mundo y la realizaci�n de nuevas experiencias� (p.6). Para Luckmann (2016) la experiencia acontece en la vida cotidiana, en donde el sujeto incorpora sus propios conocimientos a la realidad social.

De cierto modo, las experiencias abren posibilidades de aprehender[2] lo desconocido y hacerlo parte de s�, para resignificar creencias, costumbres o h�bitos que de otro modo, seguir�an en la pasividad de la conciencia.

Una mirada desde la fenomenolog�a de Schutz

Alfred Schutz es un soci�logo y fil�sofo de la ciencia social que va a integrar dos grandes tradiciones: sociol�gica y fenomenol�gica. Su inter�s por los fen�menos sociales lo llevar�a a estudiar la fenomenolog�a trascendental de Edmund Husserl que posteriormente conectar�a con la fenomenolog�a comprensiva de Max Weber a partir de categor�as devenidas de la reflexi�n de las ciencias sociales. Los hechos fundamentales de la vida de la conciencia y la discusi�n de la construcci�n de la vida social son aspectos fundamentales para la sociolog�a comprensiva. En tal caso, la fenomenolog�a sustenta filos�ficamente la comprensi�n del sentido, hallada en la vida misma de la conciencia. Esta filosof�a se centra en la existencia de la conciencia del sujeto y como los objetos aparecen a la conciencia del mundo externo, pues de esta manera, tienen sentido para el sujeto. Desde Schutz (1932) este mundo social es regido por leyes en el que el sujeto se coloca frente a esta realidad y vive experiencias significativas, asimismo, tambi�n asume que el otro las vive � es posible colocarse en el lugar del otro-. Esta actitud natural frente a la realidad trastoca lo que Schutz denominar�a sentido com�n.

Teor�a del significado en las experiencias

Las vivencias per se no son significativas, lo son cuando existe una mirada reflexiva. En este sentido, la experiencia es significativa bajo distintos criterios que yacen de un orden superior, por ejemplo, la configuraci�n de significado o de contexto de significado. Schutz (1993) define esto �ltimo como �un estadio m�s alto de unidad dentro de la vivencia� (p. 104) de la experiencia vivida. Este contexto de significado comprende una serie de vivencias en momentos separados que se concretan en una s�ntesis de orden superior, en otras palabras, en una s�ntesis m�s alta y consciente (Schutz, 1993).

El conocimiento de la realidad que el sujeto aprehende en un momento inmediato de Aqu� y Ahora est� determinado por el contexto de significado. Este conocimiento se configura en un repositorio disponible para el sujeto que consiste en el almacenamiento pasivo de experiencias (Schutz, 1993).

Esta categor�a -contexto de significado- es importante retomarla para comprender las experiencias que son significativas, es decir, cuando aquello que se ha acumulado se reflexiona desde la consciencia de la propia existencia del yo, que se desenvuelve de manera individual, pero en el mundo de lo social. Esta �autointerpretaci�n� permite otorgarle significado a las propias vivencias.

Luego as�, es necesario traer a la luz el sentido de la experiencia con base en el contexto de significado al realizar una acci�n desde el aut�ntico �motivo-porque� que explica el proyecto en funci�n de las vivencias pasadas del actor. De ello, Schutz (1993) explica lo siguiente:

Supongamos que yo digo: �Abro mi paraguas porque est� lloviendo�. Ante todo, notemos que mi formulaci�n expresa un pseudomotivo-porque. Este, traslado al lenguaje de �para�, nos da lo siguiente: �Abro mi paraguas para no mojarme�. El proyecto expresado aqu� da por sentado que ser�a desagradable tener las ropas empapadas. (�) La serie para comienza con el proyecto, que a su vez da por sentado que no es agradable estar mojado. Por lo tanto, yo proyecto un acto para prevenir una situaci�n desagradable. (p. 120)

A partir de la experiencia, el yo consciente, precisa una acci�n de mayor profundidad creando un aut�ntico �motivo-porque� que deja de lado el vac�o de una acci�n evidentemente clara, pero con falta de proyecci�n fantasiosa del futuro en torno al contexto de significado de un proyecto determinado. A medida que se comprende lo que suceder� despu�s del motivo �est� lloviendo �se vuelve un razonamiento l�gico de la acci�n, ya que si est� lloviendo en alg�n momento �me he de mojar�, lo que quiere decir, que tendr�a sentido abrir mi paraguas (�anticipaci�n fantaseada�). Aquello es significativo porque est� vinculado con las vivencias del pasado, pero se anticipa al futuro para no vivir las consecuencias de lo ya conocido en el repositorio de experiencias. Ello no implica que, sea un resultado de acci�n-consecuencia de manera lineal, sino que, las experiencias no s�lo por el hecho de recordarlas (con agrado o desagrado) ya son significativas. Es pertinente, destacar que, si se ha pensado anteriormente en �stas, reflexivamente, y el hecho de que el sujeto haga algo, despu�s de haber experimentado una serie de situaciones, tenga un aut�ntico �motivo-porque�, que eso que padeci� haya de alguna manera trascendido en su vida y cambiado sus acciones en el futuro. Las posibilidades de la decisi�n del sujeto se han tornado distintas, al generar un sentido para su propia existencia. Es as� como las experiencias son significativas, dado que existe en un momento la reflexividad y la transformaci�n del sujeto que vive y le da sentido a lo que vive en un Aqu� y Ahora.

Por otra parte, Schutz (1993) plantea que el ser humano tiene una actitud natural frente al mundo social en el que se encuentra inmerso. Es consciente de su existencia y la de otros en la vida cotidiana, sabe que existen objetos tambi�n, pero no cuestiona lo que mira a su alrededor. En el mundo intersubjetivo, el sujeto interact�a en consecuencia de los otros. Cada uno parte de su propia conciencia y motivaci�n, lo que le lleva a entender a la otra persona, colocarse en su lugar y por consiguiente sus motivaciones. �Comprender el mundo social es lo que lo vuelve significativo para los sujetos, es decir, es aquello que le otorga sentido� (Fraga, 2016, p. 131).

En constraste, Leal y Herrera (2009) sostienen que �s�lo tienen un sentido social aquellas acciones cuyo contexto corresponde a un dise�o o a una formulaci�n consciente e intencional, es decir, el sentido social de una acci�n es otorgado por el prop�sito que tiene el proyecto� (p. 137).

METODOLOG�A

El presente estudio se aborda desde un paradigma cualitativo de la investigaci�n para reconocer no s�lo lo que sucedi� durante la contingencia sanitaria sino para analizar lo que los participantes interpretan de lo sucedido: las relaciones, v�nculos y el desarrollo de los conocimientos expresados durante el confinamiento de estudiantes y docentes de Posgrado UNAM. Desde esta vertiente, la metodolog�a cualitativa �se refiere en su m�s amplio sentido a la investigaci�n que produce datos descriptivos: las propias palabras de las personas, habladas o escritas, y la conducta observable� (Tylor y Bodgan, 1987, pp.19-20). [letra en cursivas en el texto original]

A trav�s del enfoque fenomenol�gico de Alfred Schutz (1932) y de su teor�a del significado, se recabaron testimonios de los informantes bajo las preguntas gu�a: �Qu� significados le otorga el docente-investigador a su pr�ctica educativa? �C�mo han sido sus experiencias - en cuanto el uso de las TIC en el espacio acad�mico de posgrado- en pandemia-pospandemia?

Selecci�n de participantes

El perfil del participante est� delimitado a partir del espacio y tiempo. Esto significa que se aproxim� al referente emp�rico desde su contexto. Es por esta raz�n que se eligi� a cuatro docentes-investigadores vigentes en el programa de Posgrado en Pedagog�a de la FES Arag�n que hayan situado su labor durante el momento m�s complicado durante pandemia y despu�s de �sta. El grado acad�mico de quien otorga su testimonio es de Dra./Dr. en Pedagog�a, respectivamente, con edad de entre 50 a 60 a�os. Siendo hombres y mujeres de nacionalidad mexicana.

T�cnica de recolecci�n

�Se llevaron a cabo entrevistas a profundidad semiestructuradas que permitieron recabar informaci�n, transcribirla y dar lectura de los datos recopilados. A trav�s de una gu�a de entrevista conformada por cinco preguntas, que a continuaci�n se muestra, se realizaron las entrevistas de manera abierta y flexible para mayor comprensi�n del fen�meno.��

Tabla 1.

Matriz. Gu�a de preguntas de investigaci�n

Preguntas de la investigaci�n

Referencia fenomenol�gica

En la transici�n de cambio de modalidad de presencial a virtual �Qu� efectos se produjeron en su pr�ctica educativa?

�C�mo han sido sus experiencias?; �Qu� significados le otorga a su pr�ctica educativa?

�Considera que hubo cambios en su pr�ctica educativa en relaci�n con el uso de las TIC despu�s de los primeros dos a�os de pandemia? Si es as� �Qu� ha sido de mayor relevancia para usted?

�C�mo han sido sus experiencias?; �Qu� significados le otorga a su pr�ctica educativa?

�Considera que el uso de las TIC est� estrechamente vinculado con la construcci�n del conocimiento dentro de los espacios del posgrado?

�C�mo han sido sus experiencias?; �Qu� significados le otorga a su pr�ctica educativa?; �Por qu� y para qu� utilizar las TIC? (contexto de pandemia-pospandemia)

�Considera que hubo cambios en su pr�ctica educativa en relaci�n con el uso de las TIC despu�s de los primeros dos a�os de pandemia?

�C�mo han sido sus experiencias?; �Qu� significados le otorga a su pr�ctica educativa?

�Quisiera dar un comentario final respecto a la tem�tica que abordamos?

 

 

Procedimiento

Se contact� de manera personal a una serie de docentes-investigadores con la finalidad de dar a conocer el prop�sito de la investigaci�n y los criterios establecidos de confidencialidad. Despu�s de la b�squeda de informantes, se logr� concretar lugar y hora de entrevista con cuatro de ellos.

Cada entrevista fue grabada y codificada de acuerdo con el participante como se observa a continuaci�n:

Codificaci�n de participante (CP)

Ej. D-I DPU E1.� D-I (docente-investigador), DPU (Divisi�n de Posgrado U.N.A.M.) E1 (No. de entrevista)

Subsecuente a esto, para la sistematizaci�n del contenido se realiz� lo siguiente: (a) Descripci�n fenomenol�gica. Se transcribieron cuidadosamente cada una de las entrevistas tal y como fueron expresadas en la grabaci�n; (b) Reducci�n fenomenol�gica. Se identificaron en unidad de contenido (v�ase tabla 2) de las experiencias del docente-investigador para conformar categor�as devenidas de temas y patrones desde las narrativas (v�ase tabla 3); (c) Interpretaci�n fenomenol�gica.� A trav�s del an�lisis de datos, se prosigui� con interpretaci�n y comprensi�n, dando como resultado hallazgos para la investigaci�n propuestos en seis categor�as (v�ase resultados).

Tabla 2

Matriz. Unidad de contenido

Cp

Transici�n de lo presencial a lo virtual al inicio de la pandemia

Experiencias derivadas del uso de las tic en el espacio acad�mico de posgrado

Perspectivas del presente-futuro (pospandemia) en torno al uso de las tic en el espacio acad�mico de posgrado

D-I DPU E1

Todav�a no hab�a un acuerdo (en la FES Arag�n, UNAM) con estas plataformas como Zoom para poder conectarnos y nos costaba trabajo, nos votaba. A m� en por la particular, en mis pr�cticas educativas pues a veces me sacaba, me dec�a o nos pon�a que ya se nos hab�a terminado nuestra sesi�n y nos los botaba nos sacaba y ten�amos que volvernos a reconectar.

[Fragmento, respuesta de pregunta 1]

A veces no cont�bamos con los recursos� tecnol�gicos que se sienten, tanto los docentes como las alumnas y los alumnos, pues� necesitas primeramente una banda ancha, una conexi�n este buena de internet que a veces no lo ten�an y damos por un hecho que todo mundo lo ten�a y que todo mundo gozaba de ello, y siendo que no, hubieron varias alumnas o alumnos que no ten�an ni siquiera conexi�n de internet o ya no digamos contar con un dispositivo en que pudiera conectarlo, entonces s�, para algunos fue as�, otros lo ten�an y lo ten�an a la mano y no hab�a ning�n problema,� pero los otros no y, adem�s, tambi�n el mal servicio de internet pues a veces nos desconectaba.

[Fragmento, respuesta de pregunta 1]

Tanto alumnas como alumnos y que nosotros como docentes, no debemos dejar rebasarnos por estas cuestiones tecnol�gicas, dejarnos llevar por este �canto de las sirenas� de que los instrumentos del tecnol�gicos van a desarrollar el proceso de ense�anza- aprendizaje.� Me parece que esta es una herramienta auxiliar en nuestras pr�cticas educativas, pero no es el parteaguas. Me parece que aqu� no tenemos que olvidar que estamos en las humanidades, que la docencia es eso y que no tenemos que alejarnos de lo humano.

[Fragmento, despuesta de pregunta 5]

D-I DPU E2

Lo que sucedi� en este tr�nsito entre lo presencial y lo virtual, pues un fen�meno de adaptaci�n a las tecnolog�as y quiero decirte que yo siempre fui un tanto o he sido un tanto renuente al uso de las tecnolog�as porque me parecen algo muy impersonal, el hecho de tener la experiencia y formarme, seguirme formando dentro del campo de lo educativo, para m� el contacto f�sico con el otro es muy importante cuando se habla de un proceso de aprendizaje, cuando se habla de un proceso educativo y entonces el hecho de saber que ten�amos que ahora dar continuidad a lo educativo a trav�s de las plataformas digitales para m� fue muy dif�cil.

[Fragmento, respuesta de pregunta 1]

Una primera experiencia el con quien tuve que hacer el contacto por primera vez a trav�s de estos medios fue con un compa�ero de la FES Arag�n que estaba en el segundo, tercer semestre de la maestr�a en pedagog�a, y entonces, yo no sab�a muy bien c�mo hacer el manejo, c�mo manipular los dispositivos, como generar incluso una liga aun cuando ya me hab�an dicho, porque tuvimos algunos cursos pero como esto fue de manera muy inmediata, para m� lo m�s familiar era en ese momento Facebook (�) lo m�s familiar era el contacto a trav�s de Messenger y entonces fue como le suger� trabajar� al compa�ero a trav�s de un chat, y entonces a trav�s de preguntas, a trav�s de un dialogo en lo escrito fue que trabajamos nuestra primer sesi�n (�)sent�a como si estuvi�ramos� pues si� est�bamos en mudo aun cuando hab�a un dialogo en lo escrito que era lo que m�s me acomodaba a m�, sin embargo, el hecho de no escucharnos, pues era algo as� como una pel�cula como cuando prendes la televisi�n le dejas en mudo no le subes el volumen, pero sabes de qu� est� hablando el otro, pero en mudo o sea algo muy extra�o.

[Fragmento, respuesta de pregunta 1]

Necesitamos construir una metodolog�a did�ctica que atienda o que apele a la construcci�n del conocimiento pero en este t�rmino de que, se permita el di�logo, se permita la conversaci�n, se permita el que expongamos nuestras ideas, se permita el que a partir de una idea generadora podamos entrar en un proceso de retroalimentaci�n, de dislocamiento incluso, de esto� de poner en duda incluso lo que yo estoy comentando, entonces, por ejemplo,� una exposici�n puede ser muy v�lida, de ah� y sin embargo, la exposici�n no puede quedar solamente como un �te expongo� es decir, reproduzco un contenido, vierto mi contenido y se pierde el di�logo. Una vez que yo expongo que muestro ciertas ideas ahora s�, a ver �aqu� tienes� por ejemplo ahora lo que habl�bamos.

[Fragmento, respuesta de pregunta 3]

D-I DPU E3

Yo recuerdo que empezamos primero con la plataforma, empezamos como a buscar una plataforma que fuera la m�s accesible, la m�s f�cil, (�) r�pidamente la UNAM abri� lo de las aulas virtuales y entonces en las aulas virtuales ten�amos a nuestra disposici�n tres plataformas. Una era asincr�nica que era la de Moodle que yo ya hab�a aprendido de Moodle y d�jame decirte que no me gustaba, entonces, como que no, se me hace un poco fr�o impersonal, entonces, dije no yo no, no, no me encanta y por el otro lado,� para Zoom, entonces, empec� yo como averiguar, c�mo utilizarlo, o sea por mi lado, porque es cierto que la UNAM tambi�n ten�a un v�deo, un tutorial pues, pero no lo vi nunca, sino que yo me puse a averiguar por mi cuenta c�mo utilizar Zoom y ah� medio �piquetee� y baje �la aplicaci�n en mi computadora y empec�.

[Fragmento, respuesta de pregunta 1]

Entonces s�, tuve algunos cursos, unos por parte de la UNAM. En uno, por ejemplo, aprend� a utilizar m�s el webex entonces las aplicaciones del webex y eso me gust�.� (�) luego yo solita empezaba a revisar las aplicaciones de comunicaci�n y educaci�n entonces eso me oblig� tambi�n a meterme yo, antes que ellos, porque� quer�a� incursionar en lo digital, entonces, empec� a �picotear�,� a buscar softwares,� plataformas de evaluaci�n, buscar aplicaciones para hacer ejercicios en una sincron�a como te digo, utilic� Newport, varios �no? y luego para las presentaciones me encant� Canva, pues descubr� Canva, el famoso Canva, el Genially,� el Blindside, ese se� me olvida siempre, bueno, total entonces empec� a para hacer mis investigaciones,� y� bueno, pues eso. Hac�a presentaciones, les pon�a ejercicios en Netbook a los chavos, entonces esa fue mi experiencia.

[Fragmento, respuesta de pregunta 1]

Ahora regresamos y la novedad �ahora vamos a regresar� y todos bien felices.� Pero no va a pasar mucho tiempo cuando volvamos a caer en las mismas rutinas y en las pr�cticas de antes de la pandemia. Yo creo que lo que tendr�amos que hacer en esa parte de la innovaci�n, es el poder crear otras estrategias en las que pudi�semos recuperar esos aprendizajes en esta nueva realidad, porque esta es otra nueva realidad, que no somos los mismos antes de la pandemia, ya pas� algo, que fue durante la pandemia. Aprendimos lo que sea que hayamos aprendido.� No podemos ser autom�ticamente algo, como si no hubiera pasado nada, pero s� pas� y entonces, en ese regresar y en ese estar, yo creo que s� vale la pena el que pudi�semos generar tambi�n innovaciones en este sentido, pero para eso s� necesitamos contar con suficiente infraestructura.

[Fragmento, respuesta de pregunta 4]

D-I DPU E4

Siendo sincera yo no sab�a usar pues, ni el Classroom, ni estas cosas de la videoconferencia, pero digamos que tampoco me cost� mucho trabajo acceder a ellas o sea en el momento en que me di cuenta que no hab�a de otra, de que hab�a que aprender a usarlas, vaya, no fue tampoco este algo que me complicara mucho.

(�) Pero creo que poco a poco empezamos a ajustar cosas ellos tambi�n empezaron o empezamos pues, juntos a construir otras alternativas; empezamos tambi�n, a explorar otros recursos que de pronto en el espacio f�sico de la FES Arag�n no us�bamos tanto, entonces, al menos eso creo que es lo que me pas� a m�, o sea empec� a usar, por ejemplo, m�s recursos.� M�sica incluso, para mis clases, o sea, como que empec� a echar mano de recursos que descubr� que pod�amos usar de manera muy pr�ctica con estos recursos tecnol�gicos, claro.

[Fragmento, respuesta de pregunta 1]

Otra cosa que tambi�n trastoc� (�) Uno de mis estudiantes, es uno de los mejores estudiantes que he tenido, por cierto, pues trae una tesis hermosa realmente, pero no sabes c�mo me doli� que el examen fuera en l�nea. (�) Se pierde mucha de la riqueza o sea finalmente, s� dialogas y preguntas, intercambias, pero no s�, as� como que esa �m�stica�, ese contacto humano, ese sentir, pues, c�mo se desenvuelven ustedes en el examen, lo que se siente, en la pantalla no se puede.� Y tambi�n el contacto con los compa�eros cuando est�s ya deliberando o comentando su desempe�o de ustedes, pues no, o sea no se compara que estar ah�, estar en presencia f�sicamente es otra cosa.� A m� no me gust� nada, pero no hubo, no hubo otra posibilidad.

[Fragmento, respuesta de pregunta 1]

La invasi�n de estos �chuches� tecnol�gicos, los celulares y todas esas cosas, de por s�, antes de la pandemia cuando ten�as a las personas de todas las edades, especialmente los j�venes, incluso estando juntos est�n ah� metidos en la pantalla y ni siquiera se hablan, despu�s de esto, se increment� todav�a m�s.�

De ah� pues bueno, y qu� lugar deber�amos de tener como educadores frente a esto. Te digo son cosas que pues hasta la fecha me siguen moviendo el tapete y que creo que como educadores tenemos la responsabilidad de afrontarlo. Creo que la educaci�n tendr�a que estar centrada en construir alternativas para, h�jole, pues para construir humanidad.

[Fragmento, respuesta de pregunta 4]

 


 

Tabla 3

Matriz. Patrones de respuestas

 

Temas y patrones recurrentes en las experiencias

 

Descripci�n

D-I DPU E1

D-I DPU E2

D-I DPU E3

D-I DPU E4

1.       Empat�a y reciprocidad

El docente comprende la situaci�n particular de cada estudiante, de igual forma, percibe que el estudiantado es emp�tico con su quehacer como ense�ante.

Marca de verificación con relleno sólido

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

2.       Aspecto �ntimo-personal

El docente percibe a trav�s de sus experiencias que la educaci�n en l�nea llegaba a ser invasiva tanto para estudiantes como para ellos en la vida cotidiana, involucrando aspectos centrales de la familia, espacio, etc., en horarios de actividades personales.

 

 

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

 

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

3.       Necesidad de interactuar en conexi�n v�a remota

La interacci�n a trav�s del di�logo, de la conversaci�n o intercambio de ideas, fueron algunas de las categor�as que sobresalieron para el docente, al situarlos como punto central de la formaci�n personal y acad�mica del estudiantado.

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

4.       Mon�logo en la ense�anza

El docente percibe que la interacci�n en algunas ocasiones se convert�a mon�logo, ello significa que, en la conexi�n de las sesiones de clase en l�nea, en el monitor de la computadora, s�lo se hac�a presente la imagen de cada participante, sin que existiera alg�n tipo de discusi�n del contenido de la clase.

 

 

 

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

5.       Adaptaci�n a �nuevos� horarios

En la transici�n de la educaci�n presencial a la virtual durante la pandemia, el docente requiri� atender sus actividades en momentos que com�nmente no se encuentran en su horario laboral.

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

6.       Cumplimiento de programa de estudio

A partir de una visi�n cr�tica el docente reflexiona sobre el af�n de las instituciones por cumplir el programa de estudio cuando estudiantes y docentes por igual, padecieron las consecuencias de la pandemia, que incluye el eminente acercamiento de la muerte a la vida de todas las personas.

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

 

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

7.       Critica y vivencia del sin sentido en la educaci�n

Algunos de los acontecimientos escolares conllevaron acciones sinsentido lo que, es tambi�n, un aspecto digno de reflexionarse en el campo pedag�gico. Un ejemplo de ello son las actividades exageradas (tareas) que no tuvieron raz�n de ser en procesos de ense�anza-aprendizaje de cualquier nivel educativo, preocuparse por la entrega de trabajo aun con lo que se estaba viviendo, etc.

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

8.       T�cnicas y estrategias did�cticas

La educaci�n en l�nea/virtual/a distancia requiri� que el docente hiciera uso de t�cnicas y estrategias did�cticas a trav�s de las TIC de formas distintas a las que realizaba com�nmente.

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

9.       La construcci�n de conocimiento es imposible sin la interacci�n social

Para la construcci�n del conocimiento es imprescindible la interacci�n social, lo que implica un espacio de di�logo con el otro e intercambio de pensamientos, ideas, perspectivas, etc. El conocimiento es el producto de una actividad intelectual compleja que deviene de la capacidad intr�nseca del ser humano, como un ser cognitivo, emotivo y espiritual que se relaciona dentro de un entorno social.

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

 

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

10.    Propuestas educativas

El docente a trav�s de su discurso propone, critica y reflexiona sobre la educaci�n l�nea/virtual/ a distancia en la �poca de la pandemia.

Marca de verificación con relleno sólido

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

Marca de verificación con relleno sólido

 

RESULTADOS

Es posible destacar que las experiencias de los docentes entrevistados convergen en distintas maneras; entre ellas, la forma en que empatizan con sus estudiantes. En otras palabras, se colocan en el lugar del otro, aun cuando las condiciones personales fueron diversas, pero evidentemente se complejizaron en el proceso educativo. Esto los enfrent� a problem�ticas que se estaban viviendo con relaci�n a las condiciones econ�micas, sociales y personales de estudiantes, as� como de las propias, dado que fue imprescindible trabajar con herramientas tecnol�gicas. Tambi�n se adaptaron a �marchas forzadas� a la educaci�n virtual utilizando las TIC como medio para asistir a los estudiantes, sin embargo, las cr�ticas y la reflexi�n forman parte de su percepci�n y de sus experiencias. El di�logo o bien, la conversaci�n, no la consideran una limitaci�n sino una posibilidad; en este sentido, para los docentes, existe una gran necesidad por intercambiar impresiones de contenido y de la cotidianidad m�s all� de la virtualidad, es decir, a partir de la inigualable presencialidad. Debido a ello, las experiencias que se han significado en este tr�nsito conllevan a pensar nuevas propuestas por parte del docente en pospandemia. Lo anterior, concierne a las categor�as formuladas que veremos a continuaci�n para vislumbrar los resultados a trav�s de la expresi�n de los propios participantes.

Categor�a I. Colocarse en el lugar del otro

Conforme pasaban las clases durante la transici�n de lo presencial a lo virtual en la educaci�n, los docentes se percataron de algunas situaciones que viv�an sus estudiantes. Quiz� por primera vez dimensionaban los problemas y la condici�n particular de cada uno de ellos. Si bien, la empat�a es una cualidad humana, en el docente suele ser com�n, pero no de la forma que ocurri� durante la pandemia. A continuaci�n, algunos testimonios:

Estas cuestiones tecnol�gicas generan una ansiedad, generan un estr�s (�) hay que ver al alumno como un ser humano que tiene muchas carencias, no solamente econ�micas sino tecnol�gicas y que le va a estar generando un estr�s una ansiedad tremenda y que no lo va a dejar cumplir con ese proceso cognitivo que necesitamos para que haya ese proceso de ense�anza-aprendizaje (D-I DPU E1)

Yo les dec�a que me enviaran fotograf�as por el WhatsApp, algunos inclusive les dije que me llevaran sus trabajos en hojas escritas y les di la direcci�n de donde pod�an dejarme (�)� en el caso de que no tuvieran infraestructura. Y los espere hasta el �ltimo momento que ten�a que subir calificaciones. Si me enteraba que ten�an alguna p�rdida cosas as�, muy delicadas, entonces lo que hac�a es que los esperaba o de plano les daba chance, o sea les dec�a �no se preocupen no hay problema, primero lo primero y tal� y yo puedo asegurar que era verdad, yo confiaba en ellos.� (D-I DPU E3)

Pero en algunas ocasiones la empat�a la percibieron rec�proca.

�La mayor�a pues extra�aba sus clases presenciales, pero creo que debido a ese apoyo que recibimos por parte de ellos, los docentes pudimos sacar adelante nuestros seminarios� (D-I DPU E1).

�Poco a poco empezamos a ajustar cosas. Ellos tambi�n empezaron o empezamos juntos a construir otras alternativas. Empezamos tambi�n a explorar otros recursos que de pronto en el espacio f�sico de la FES Arag�n de pronto no us�bamos� (D-I DPU E4)

Categor�a II. Enfrent�ndose al contexto: el coronavirus y el virus m�s all� de la pandemia

Los docentes percibieron algunas de las situaciones que probablemente no se habr�an visibilizado sin la pandemia. Parte de todo ello se debe al contexto en el que se encontraron docentes y estudiantes, incluyendo, la condici�n econ�mica, laboral, acad�mica y familiar. Los estudiantes, por un lado, deb�an estar al tanto de sus trabajos de investigaci�n, pero que, por cuestiones personales no llegaron a concluir, a�n y cuando existieron v�as de comunicaci�n a trav�s de las TIC. A veces ocurr�a lo contrario, lo que no exist�a eran los insumos para poder conectarse v�a remota. Aqu� algunos testimonios:

Por cuestiones de la naturaleza, por las lluvias, por los vientos, nos desestabilizaba la conexi�n y a veces ten�amos esa falta de suministro, de energ�a el�ctrica y que no nos permit�a conectar o nos sacaba, nos votaba abruptamente y tambi�n las conexiones de internet (�) nos afectaba m�s a las colonias populares, era donde m�s nos faltaba el suministro de electricidad y que pues repercut�a en nuestras clases. (D-I DPU E1).

Al principio, sobre todo al principio, pues mi hijo tambi�n ten�a que estar en l�nea, yo ten�a que estar en l�nea, pero resulta que el condenado internet, nom�s no nos daba, ni �l ni yo, o sea se cortaba la videoconferencia que �l ten�a o la m�a. Lleg� el momento en que tuvimos que instalar aqu�, hacer miles de ajustes aqu� en la casa, para poder conectarnos los dos, pero directamente con cable, porque el internet inal�mbrico no nos daba ni para �l ni para m�. (D-I DPU E4).

El compa�ero estudiante siempre estuvo muy dispuesto, de hecho, �l me ayudaba a generar el link y no tuve problemas (�) ten�a en ese momento problemas y de la conectividad que se nos iba mucho la se�al tanto a �l como a m� porque �l estaba en Oaxaca (D-I DPU E2).

Asimismo, el trabajo de investigaci�n de estudiantes se vio afectado debido a la naturaleza de �ste. Como se declara a continuaci�n:

Creo que nos afect� de alguna manera en t�rminos de la construcci�n de las diferentes investigaciones, es que pues obviamente, para mis estudiantes que estuve asesorando y en general eso fue lo que vivimos, pues era muy dif�cil hacer, por ejemplo, investigaciones que requer�an de observaciones en el aula o en otros espacios educativos era imposible hacerlas directamente como originalmente se hab�an planeado.� Hubo que hacer muchos ajustes, muchas adecuaciones y pues eso invariablemente angustiaba a los estudiantes y de pronto compart�amos esa angustia de ��C�mo le hacemos?� (D-I DPU E4)

Las p�rdidas de vidas e incertidumbre, se convirti� en una situaci�n cada vez m�s complicada, que, adem�s, impidi� el desarrollo de las investigaciones de estudiantes o su presencia en clases. Estas experiencias marcaron al docente de posgrado. Como lo expresan los siguientes testimonios:

Mira lo m�s dif�cil fue unas las p�rdidas, fue la depresi�n de los muchachos (�) toda la parte de violencia que estaban sufriendo algunos, de las p�rdidas, de la cuesti�n econ�mica, de la salud, que ten�an enfermos en casa, eso fue lo m�s dif�cil para m�. Luego, despu�s de eso que era la parte m�s sentida, era esta parte de que no ten�an un espacio donde estar.� O sea, yo los ve�a que andaba en el metro, que andaban en la calle, porque ellos no prend�an nada ni estaban ah�, no estaban. (D-I DPU E3)

Lo que le pas� a una de mis asesoradas, por cierto, no ha acabado su tesis, s� le impact� mucho, pues su pap� falleci� al inicio de COVID, obviamente eso trastoc� toda su realidad familiar y fue un golpe muy muy duro para ella. Todav�a me acuerdo cuando me llam� (estaba llorando) para avisarme que acababa de morir su pap�. �H�jole! �qu� le dices en ese momento? (�)� le cost� mucho trabajo recuperarse, pero hasta la fecha no ha retomado el ritmo, o sea hasta la fecha no ha terminado y pues no es gratuito. (D-I DPU E4)

Categor�a III. Entre complicaciones y desaf�os: adapt�ndose a la educaci�n virtual a �marchas forzadas�

Com�nmente el docente-investigador se encuentra asesorando tesis de estudiantes de posgrado, haciendo trabajos de investigaci�n, dando clases en la unidad de posgrado, etc. Pero en el caso del de las TIC, su utilizaci�n, antes de la pandemia de manera presencial era b�sica o nula. Debido a ello, cuando inici� el confinamiento, la adaptabilidad del gremio docente no se hizo esperar, por lo que a �marchas forzadas� se integraron al uso de recursos y herramientas tecnol�gicas. Como lo manifiestan a continuaci�n:

A pesar de que cont�bamos con los conocimientos necesarios para implementar la modalidad digital, en algunas cosas tuvimos que improvisar y otras cosas que tuvimos en la experiencia, en nuestras pr�cticas docentes fue que a veces no cont�bamos con suficientes recursos tecnol�gicos. (D-I DPU E1)

Lo primero que ten�a muy claro, era el sentido hacia d�nde �bamos y qu� bueno, estamos hablando de planes y programas de estudio presenciales, o sea, eso c�mo lo convert�as a una modalidad a distancia y que de pronto era resolverlo de manera inmediata o sea no tuvimos tiempo para poder organizar a lo mejor entre los profesores ponernos de acuerdo pues no, no fue posible. (D-I DPU E4)

La pr�ctica educativa y el intercambio dial�gico fue complicado para el ense�ante dado que, en algunos de los casos, las clases en l�nea se tuvieron que sesionar sin la existencia de un rostro, cuerpo o voz. As� lo mencionan los testimonios:

Para m� lo m�s familiar era en ese momento Facebook (..) creo es posible hacer el contacto a trav�s de las videollamadas, pero para m� lo m�s familiar era el contacto a trav�s de Messenger y entonces fue como le suger� trabajar� al compa�ero a trav�s de un chat, y entonces a trav�s de preguntas, a trav�s de un di�logo en lo escrito fue que trabajamos nuestra primera sesi�n (�) sent�a que me dejaba a m� sin voz, a �l tambi�n sin voz. Nuestra escritura aun cuando nos conoc�amos, no ten�a el sonido de la voz. �(D-I DPU E2)

Eso de no verles los rostros era un poco desesperante. (�) yo nom�s le dec�a: �pues yo s�lo veo puras fotograf�as de chicos y chicas sexys, pero no los veo, ya no les veo sus �caritas��. Cuando nos vimos la primera vez, ya cuando regresamos o medio est�bamos regresando, pues no los conoc�a. Dec�a tu eres� �ah! ya est� aqu� lo estoy conociendo. (D-I DPU E3)

�El problema fue despu�s cuando empezaron a llegar estudiantes que nunca los hab�a visto en persona, pues solamente conoc�a la cara de una pantalla�. (D-I DPU E4)

Otro aspecto, es que la conexi�n en l�nea se convirti� en un problema al traspasar lo �ntimo-personal en ambos casos (docente y estudiante). Como se relata a continuaci�n:

�Luego abr�an las c�maras y t� te dabas cuenta donde estaban. En pedacitos chiquitos ve�as que andaba el pap�, la mam� por ah� entonces, esa parte fue complicado�. (D-I DPU E3)

Fue la primera sesi�n y recuerdo perfecto porque te digo me negu� a usar la c�mara, un link, que nos colocar� en este contacto. Iba a ser la primera vez que yo har�a uso de las tecnolog�as o sea como que no sab�a, era tambi�n �sabes? desnud�ndome un poco aqu� contigo, es en la intimidad que irrumpe estos medios, ahorita yo ya me siento muy familiarizada vamos a decirlo as� a diferencia de aquella primera ocasi�n y yo vivo en mi habitaci�n, la comparto con mi hijo (�) Ahorita por ejemplo �l est� dormido y era m�s chiquito y cuando yo comenzaba a hablar sent�a que lo iba a despertar, entonces, una serie de cosas a nivel ya muy �ntimo, muy familiar muy personal, que para m� era m�s sencillo, pues establecer comunicaci�n y que no se escuchara mi voz porque yo iba a despertar a alguien aqu� que estaba dormido. (D-I DPU E2)

En dicho sentido, la adecuaci�n del horario de trabajo y del aspecto personal se desdibuj�. Como se menciona a continuaci�n:

Resulta que al mismo tiempo eres mam�, al mismo tiempo eres ama de casa, al mismo tiempo eres investigadora, al mismo tiempo eres docente, porque de pronto, eso s� creo que los tiempos que le dedicabas a estas diferentes esferas de la vida, se trastocaron simplemente. (D-I DPU E4)

�Se trabaj� en muchas ocasiones fuera del tiempo laboral para ajustarse a los tiempos del programa, era muy complicado�. (D-I DPU E1)

Tener como objetivo el cumplimiento de los programas educativos fue parte del sinsentido (desde la perspectiva de los participantes) de la educaci�n virtual. Como se expresa con los siguientes testimonios:

El chiste era cumplir� , el objetivo era cumplir, dar la clase, dar continuidad con la din�mica, no perder de vista los programas, que eso, obviamente hab�a una cr�tica muy fuerte (�) es decir, para que nos estamos conectando cuando escuch�bamos de la cantidad de personas que lamentablemente estaban perdiendo la vida (�) sabemos que la vida no la tenemos asegurada, sin embargo, ah� estuvimos muy de cerca conviviendo con la muerte y entonces nos conect�bamos para dar continuidad a los contenidos program�ticos. (D-I DPU E2)

Otra cosa que tambi�n creo que impact� mucho en m� la experiencia que tengo pues al respecto, que era que al mismo tiempo que yo era docente intentando trabajar a distancia con los estudiantes, al mismo tiempo mi hijo era estudiante haciendo lo mismo, y entonces, era muy interesante, para m� era un reto mayor sumamente angustiante, porque yo ve�a, h�jole, el enorme sin sentido que estaba viviendo mi hijo. O sea, actividades que hab�a que hacer qui�n sabe para qu� y hab�a que entregarse, y el pobre como loco entregando mil cosas (�) Sentado todo el santo d�a, eso a m� me obligaba a pensar bueno �y t� qu� est�s haciendo, t� qu� est�s haciendo con tus estudiantes de tal manera que lo que trabajes tenga sentido �no? y nos lleve a alg�n lado a construir algo juntos�. (D-I DPU E4)

Categor�a IV. Desdibujando el distanciamiento para encontrarse con el otro.

A pesar de todas las experiencias vividas durante la pandemia, el uso de las TIC permiti� establecer un medio de comunicaci�n e interacci�n con los estudiantes. As� entonces, abri� un panorama amplio sobre la posibilidad de adaptar a trav�s de t�cnicas y estrategias did�cticas. A continuaci�n, los siguientes testimonios:

Les pon�a musical al iniciar, siempre pon�a m�sica. (�) A los muchachos les gustaba mucho cuando yo les pon�a los ejercicios en Inpod, porque como tienen la posibilidad de hacer presentaci�n, de hecho, tu PowerPoint puede aparecer ah� y entonces vas exponiendo el tema y luego los pones a hacer ejercicios y haces otra exposici�n y se ponen a hacer ejercicios. Eso para los para m� y para ellos fue muy interesante. El asunto de la m�sica y estas reflexiones que te acabo de decir, o sea para m� fueron sensacionales, porque eran para ellos relajante y dem�s. (D-I DPU E3)

Me atrev� a por ah� a lanzar alg�n ejercicio: ��c�mo est�s viviendo la pandemia?� ��cu�les son tus experiencias?� o ��c�mo est� siendo en este momento tu realidad familiar, tu realidad personal, tu realidad acad�mica?� y creo que de ah� se enganchan a los muchachos, era cuando m�s voces escuchaba, porque cuando se trataba de abordar un contenido me quedaba yo sola. (D-I DPU E2)

Empec� a usar, por ejemplo, m�s recursos.� M�sica incluso para mis clases o sea como que empec� a echar mano de recursos que descubr� que pod�amos usar de manera muy pr�ctica con estos recursos tecnol�gicos claro. (�) ac� en FES Arag�n y que de hecho eso lo hac�a desde antes de la pandemia, durante la pandemia lo sigo haciendo, trat� de ajustar el trabajo de los seminarios a lo que est�n construyendo o sea a la construcci�n de sus objetos de estudio, entonces, trato de ajustar textos, trato de buscar cosas que les puedan servir para detonar, para problematizar, para contextualizar. (D-I DPU E4)

Ten�amos que por ah� cambiar modificar nuestras pr�cticas educativas y tratarlas de acercarnos para que se tuviera ese intercambio de personal, ese intercambio humano y aun cuando est�bamos a la distancia virtualmente bueno pues sinti�ramos como si estuvi�ramos en el sal�n de clases a pesar de ser un aula virtual. Escuchar sus deseos, angustias, sus necesidades, ser emp�ticos. (D-I DPU E1)

Categor�a V. Intersubjetividad, di�logo e intercambio para la construcci�n de conocimiento

Pese que las TIC coadyuvaron a la comunicaci�n entre docentes y estudiantes, en alg�n momento, surgieron varias problem�ticas derivadas de las fallas t�cnicas que suelen ocurrir en la educaci�n a distancia, por lo que, en los procesos de construcci�n de conocimiento de estudiantes y docentes, las TIC son consideradas un medio sin llegar a poseer un valor did�ctico por s� mismo. Es, por lo tanto, imprescindible desde esta perspectiva; el di�logo, el intercambio, la conversaci�n que favorezcan las capacidades humanas. Aqu� algunos testimonios:

Para m� hablar de ense�anza no hay solamente la transmisi�n de un saber, de un conocimiento, para m� hablar de ense�anza es entrar en un proceso de dialogo, de construcci�n con quien tengo como interlocutor y al tener eso como concepci�n, mi noci�n de ense�anza en que no soy yo la que sabe y transmite, al contrario, es un proceso rec�proco, es una unidad lo podr�a llamar de esta manera, dial�ctica, en donde y entramos en interacci�n. (D-I DPU E2)

Organice un encuentro de estudiantes y lo hicimos por Zoom. Y fue muy interesante, porque todo mundo present� expuso y luego inclu� m�sica en vivo de los mismos chicos que cantan y dem�s, ellos cantaron muy bien; a alguien le toc� el piano (�) ya est�bamos en pandemia, lo que fui aprendiendo con estos colegas de los martes y los jueves que para m� fue s�per significativo ya que lo fui adecuado a mis clases y fue muy padre. Fue muy rica esa experiencia, muy interesante E.so a nosotros nos ayuda mucho a la retroalimentaci�n a trav�s de estas charlas a ir construyendo saberes, conocimiento. (D-I DPU E3)

La tecnolog�a por s� misma no resuelve, no construyen o incluso puede ser te digo, hasta un obst�culo (�) Me lleva a pensar �t� qu� est�s haciendo con tus estudiantes de tal manera que lo que trabajes tenga sentido y nos lleve a alg�n lado a construir algo juntos� (D-I DPU E3)

Categor�a VI. Transform�ndose durante la pr�ctica: propuestas reflexivas despu�s de la pandemia

El cambio es inevitable. Despu�s de las experiencias, el docente ha reflexionado sobre su pr�ctica y todo lo acontecido con los estudiantes y su propia vida. Lo que de alguna forma ha transformado su percepci�n del mundo, la forma de pensar y actuar durante la transici�n hist�rica de la pandemia y hasta lo �ltimo de �sta. En este sentido, han devenido propuestas de lo vivido en la vida cotidiana y el �mbito acad�mico. Algunos testimonios:

Yo despu�s de la pandemia soy mucho m�s flexible, era mucho m�s r�gida, mucho m�s exigente: �me lo traen bonito, me lo traen qui�n sabe que, qui�n sabe tanto�, pero despu�s de la pandemia dije: no.� Porque no s� en qu� circunstancias est�n y como est�n. (D-I DPU E3)

Creo que antes estaba m�s preocupada en general, tanto en la FES, como en la Normal, pues por trabajar, seg�n yo, las habilidades, las cuestiones te�ricas, las cuestiones metodol�gicas. No quiere decir que ya no me importe, o sea, no va por ah�, sino que creo que ahora he descubierto que todas esas cosas no son el centro, sino que m�s bien, son el pretexto para poder construir otra l�gica relacional para podernos vincular como seres humanos. (D-I DPU E4)

No me puedo estar negando, considero es una es una tem�tica pues de gran vigencia, a m� me parece que s� como tiene ventajas tiene desventajas. Algo que nos deja la pandemia es el empoderamiento en toda esta sociedad de la informaci�n; esta sociedad de conocimiento en la que nos encontramos y que llega directamente a nuestros hogares y que la vemos materializada en la relaci�n tan cercana que tenemos con los dispositivos. (�) me atrevo a decir de nuestra misma indumentaria y pues, esta l�gica y ante esta realidad dif�cilmente nos podemos seguir negando a hacer de la tecnolog�a un medio para la construcci�n del saber. (D-I DPU E2)

 

DISCUSI�N

Es destacable que las experiencias del docente-investigador de posgrado durante el periodo de pandemia y al aparente t�rmino de �sta, tienen una conexi�n preponderante con las relaciones humanas y todo lo que conlleva al aspecto sensible y emp�tico de las vivencias compartidas con sus estudiantes, familias y conocidos. No obstante, la relaci�n con las TIC ha quedado en un t�rmino secundario, debido a diferentes razones durante la experiencia pand�mica. Un aspecto sobresaliente, se debe a todas las dificultades que aparecieron en el periodo m�s �lgido del confinamiento, entre estos, problemas relacionados con el miedo e incertidumbre por motivo de la muerte de personas cercanas de toda la comunidad acad�mica. Ello impidi� que inclusive terminaran algunos estudiantes su investigaci�n y, por tanto, la conclusi�n de su posgrado. Adem�s, la conectividad no fue homog�nea en todos los casos, ni tampoco equitativo; en otras palabras, algunos estudiantes y docentes tuvieron pocas oportunidades en el lugar en donde resid�an, pues, la infraestructura, servicio de internet, servicio de luz, etc., no siempre estuvo disponible durante las sesiones de clase en l�nea.� Otro de estos motivos se debe al poco conocimiento del uso de las TIC por parte de los docentes, ya que, las actividades, t�cnicas y estrategias se realizaban con frecuencia en el aula de manera presencial, pero durante el confinamiento, se tuvo que adaptar su utilizaci�n aun con todas las dificultades que se presentaron en lo cotidiano. Con el tiempo y en algunas ocasiones de forma aut�noma, los docentes asimilaron los procesos, recursos y herramientas digitales tom�ndolos como punto de referencia para sus clases; entre estos se encuentran: Classroom, Meet, Zoom, Webex, Canva, Mentimenter, entre otros. La comunicaci�n poco a poco fue adquiriendo asertividad, aunque al inicio del aislamiento no fue as�. Asimismo, se enfrentaron a desaf�os educativos debido a que, en el momento de impartir la clase en sesi�n en l�nea, estudiantes manten�an la c�mara apagada, sin embargo, cuando �sta estaba encendida se lograba tener mayor entendimiento entre los participantes de los seminarios.

En el caso de posgrado, fue de suma importancia mantener discusiones te�ricas de los temas para mantener el inter�s, pero, sobre todo, para darle continuidad a los programas de estudio. No obstante, este �ltimo punto, tambi�n fue se�alado a manera de cr�tica, como un sinsentido de lo que se estaba viviendo, al preocuparse m�s por terminar el contenido de los programas de estudio en medio del desalentador panorama que padec�a la humanidad.

El primero de los entrevistados cito a Boaventura De Sousa Santos (2020) en �La cruel pedagog�a del virus� y refiri� sobre lo que la pandemia nos mostr�, es decir, carencias en todos los �mbitos de la vida, no s�lo en las pr�cticas docentes sino nuestras carencias econ�micas, financieras, tecnol�gicas. Esto por supuesto, es el reflejo de los problemas del sistema educativo y de lo poco preparado que est� ante acontecimientos inesperados. Igualmente, trastoca el entorno privado e individual de lo que no fuimos capaces de solventar no precisamente por la incompetencia profesional sino por la variabilidad de la profunda y compleja realidad.

De acuerdo con De Sousa Santos (2020) �hemos vivido en cuarentena, en la cuarentena pol�tica, cultural e ideol�gica de un capitalismo encerrado (...). La cuarentena causada por la pandemia es, despu�s de todo, una cuarentena dentro de otra� (pp. 84-85).

Con un sinf�n de factores que se suscitaron, como podemos observar, hasta en el grado acad�mico con mayor oportunidad, aparentemente, no fue posible salir avante limpiamente y sin repercusiones. Por el contrario, adaptarse a todas las posibles variables, es parte de lo que experimentaron los docentes de posgrado. Integrar actividades fuera de su horario laboral, por ejemplo, o esperar lo inesperado: entre incomodidad e invasi�n a la privacidad de la familia, que si bien, no es una experiencia particular sino generalizada en la esfera social, es un aspecto que qued� en la memoria del docente-investigador.

Con todo lo ocurrido, el docente tuvo la intenci�n de acercarse a sus estudiantes pese a la distancia y a la forma en que se llevaron las clases en l�nea. Hubo por su parte, la iniciativa de romper la barrera con sus estudiantes, y aunque no fue posible establecer una comunicaci�n y encuentro equivalente a la presencialidad, fue un precedente en los coloquios de los participantes durante las sesiones de clase.

En cada uno de los casos, los participantes, explicitaron lo fundamental que es el di�logo, la conversaci�n o el intercambio de ideas entre profesores y estudiantes, b�sicamente, sin este momento de interacci�n no es posible construir conocimiento, en tanto que, esto �ltimo se adquiere socializando y se aprehende a trav�s del otro. Resulta entonces, que las TIC por s� mismas, no son un elemento pedag�gico, pues es necesario desarrollar pr�cticas que respondan a la complejidad de los sujetos de experiencia. En otras palabras, atender elementos intr�nsicamente humanos desde la did�ctica aplicada a recursos y herramientas tecnol�gicas y no al rev�s, intentando pedagogizar excesivamente los dispositivos que est�n al alcance en el proceso educativo, sin un sustento pedag�gico real.

Por �ltimo, todo lo acontecido durante la pandemia de la COVID-19 recobra valor en tanto que, desde la perspectiva de Schutz (1932) las experiencias son significativas, no s�lo porque permanecen de situaciones del pasado sino porque esas marcas, huellas o cicatrices, fueron transformaron lo que se es y c�mo se piensa despu�s de cierta experiencia. En este sentido, la perspectiva despu�s de lo vivido, pero tambi�n, como ha cambiado la forma de ver e interactuar en el mundo. Y eso, justamente, es lo que sucedi�. El docente-investigador, bajo su propio testimonio, indica que hoy en d�a- en lo que se denomina pospandemia- se ha vuelto una persona m�s emp�tica, menos restrictiva por el bien de sus estudiantes, pero sin dejar de lado el rigor de la ense�anza. De igual forma, la actitud hacia el uso de las TIC es distinta, pues ahora es m�s optimista ante su aplicaci�n en el proceso de ense�anza-aprendizaje, aunque tambi�n es consciente de las carencias de �stas ante las dificultades m�s esenciales para el ser humano.

CONSIDERACIONES FINALES

El docente-investigador antes del confinamiento ocasionado por la COVID-19 no hac�a uso de las TIC en sus sesiones de clase de manera frecuente; no obstante, con la pandemia esto cambio. Despu�s de una serie de experiencias encontr� otras formas de acercarse a sus estudiantes, siendo sensible ante las condiciones particulares de cada uno de estos �ltimos. Por otro lado, obtuvo conocimientos en cuanto a la aplicaci�n de las TIC en el �mbito educativo, en gran parte fue de manera autogestiva y en otras en combinaci�n con cursos.� Ello le permiti� aplicar estrategias y t�cnicas de ense�anza para su pr�ctica y el cumplimiento del programa de estudios de posgrado. Igualmente, en virtud de su formaci�n, no le fue posible pasar de largo algunas de las situaciones que se estaban viviendo, por lo que, mir� desde un enfoque cr�tico y reflexivo su quehacer y el de otros docentes, as� como el de las actitudes de estudiantes y todo aquello relacionado con el sistema educativo.

En consecuencia, de todo lo anterior, los docentes tuvieron experiencias significativas que transformaron su pr�ctica educativa despu�s del momento m�s dif�cil que vivi� la comunidad educativa. Ello tambi�n indica la trascendencia como educador que otorga sentido a sus pr�cticas y resignifica lo experimentado durante este periodo de tiempo (pandemia) y posterior a esto (pospandemia).

En perspectiva, los docentes no le temen a las TIC, pero despu�s de tres a�os tampoco disponen de �stas como antes. Despu�s de todo lo sucedido su uso se fue desvaneciendo, dejando, su integraci�n asidua de lado en los procesos de ense�anza-aprendizaje. Entre los motivos, seg�n el testimonio de los participantes, se debe a que la instituci�n educativa (FES Arag�n, UNAM), ya no presta tanta atenci�n a la aplicaci�n de estas herramientas digitales -en especial, el uso de plataformas educativas- en el aula de los seminarios de posgrado, como en el momento en el que inici� el confinamiento, y tambi�n, se han dejado de lado, porque los docentes consideran poco necesarios para su pr�ctica en la �poca pospandemica.

Para terminar, es relevante destacar que algunas de las cuestiones que no se mencionaron en el presente trabajo, atienden a propuestas de los docentes, sin embargo, no se retomaron debido a que la investigaci�n se centr� especialmente en sus experiencias como ense�antes, pero sobre todo como seres humanos y no estrictamente como profesionales en el uso de las TIC, aunque en este �ltimo aspecto, es notable que su perspectiva es inherente a su formaci�n acad�mica y a sus propias experiencias durante el confinamiento.�

AGRADECIMIENTOS

El desarrollo de la investigaci�n fue posible gracias al Programa Investigadoras e Investigadores COMECYT EDOM�X y al apoyo de la Divisi�n de Posgrado e Investigaci�n FES Arag�n UNAM como estancia receptora.

Al docente-investigador de Posgrado de la FES Arag�n UNAM que concedi� su testimonio para la realizaci�n del trabajo.

REFERENCIAS

Acu�a y S�nchez (2020). Educaci�n Superior pospandemia. Las asimetr�as de la brecha tecnol�gica. Revista Venezolana de Gerencia. Venezuela, vol. 25, n�m. 92, Universidad del Zulia, Venezuela. https://www.redalyc.org/journal/290/29065286039/29065286039.pdf

Amengual, G. (2007). El concepto de experiencia de Kant a Hegel. T�picos. Revista de filosofia Santa Fe (Rep. Argentina). N�m. 15, pp- 5-30. https://www.redalyc.org/pdf/288/28811907001.pdf

CEPAL-UNESCO (2020). La educaci�n en tiempo de la pandemia de COVID-19. Informe COVID-19, CEPAL-UNESCO. https://repositorio.cepal.org/bitstream/handle/11362/45904/1/S2000510_es.pdf

De Sousa Santos, B. (2020). La cruel pedagog�a del v�rus (1� ed.) (Ed.) CLACSO. Libro digital. http://biblioteca.clacso.edu.ar/clacso/se/20200430083046/La-cruel-pedagogia-del-virus.pdf

Fraga, E. (2016). Experimentar naturalmente y conocer cient�ficamente las formas de la comprensi�n del mundo seg�n Sch�tz y Luckmann. Iber�forum. Revista de Ciencias Sociales de la Universidad Iberoamericana, vol. XI, n�m. 21, pp. 125-141. https://www.redalyc.org/pdf/2110/211049494004.pdf

Guzm�n, C. y Saucedo, C. (2015). Experiencias, vivencias y sentidos en torno a la escuela y a los estudios. Abordajes desde las perspectivas de alumnos y estudiantes. Revista Mexicana de Investigaci�n Educativa, Vol. 20, N�m. 67, pp. 1019-1054 https://www.scielo.org.mx/pdf/rmie/v20n67/v20n67a2.pdf

Larrosa, J. (2017). Pedagog�a profana. Estudios sobre lenguaje, subjetividad y educaci�n (2� ed.). Mi�o y D�vila Editores, Buenos Aires.

Luckmann, T. (1996). Nueva sociolog�a del conocimiento. Revista Espa�ola de Investigaciones Sociol�gicas, pp. 163-172 https://www.redalyc.org/pdf/698/69842551002.pdf

Leal y Herrera (2009). La constituci�n de significado en el �mbito de las relaciones intersubjetivas: el acto personal y la acci�n social. ALPHA N�m. 28, pp- 135-151 https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=3024046��

Schewe, L. y P�rez, A. V. (2020). Pospandemia, educaci�n y (dis)capacidad, �salir del aislamiento?. Sociales y virtuales.� Repositorio Institucional Digital de Acceso Abierto de la Universidad Nacional de Quilmes http://ridaa.unq.edu.ar/handle/20.500.11807/3774

Sch�tz, A. (1993). La construcci�n significativa del mundo social. Introducci�n a la sociologia comprensiva. Editorial Paid�s, Buenos Aires.

Schutz, A. (2015). El problema de la realidad social. Escritos I (3� ed.).� Amorrortu editores, Buenos Aires.

Taylor y Bodgan (1987). Introducci�n a los m�todos cualitativos de investigaci�n (2� ed.). Ediciones Paid�s, Barcelona.

Vithoulkas, G. (2014). Conciencia y Consciencia: La Definici�n. International Academy of Classical Homeopaphy. Journal of Medicine and Life. Vol.7 1� Emisi�n, pp. 1-6. https://www.vithoulkas.com/sites/default/files/Conciencia%20y%20Consciencia%20-%20La%20Definicion%20-PDF_-.pdf

 



[1] En el caso particular de la presente investigaci�n se se�ala especialmente el concepto de �educaci�n en l�nea� como referencia a la interacci�n de los actores educativos (estudiantes y docentes) de forma sincr�nica en el espacio digital, apoy�ndose, de recursos y herramientas tecnol�gicas. Por otro lado, se menciona eventualmente la �educaci�n virtual� que puede comprenderse en el mismo sentido que lo anterior, pero a diferencia de este, se trabaja de manera asincr�nica intercambiando recursos para la ense�anza y aprendizaje. Por �ltimo, la �educaci�n a distancia� se refiere a la combinaci�n de las dos anteriores. Tambi�n es importante aclarar, que el t�rmino m�s utilizado a partir de la crisis sanitaria fue el de �educaci�n remota de emergencia� (cambio de modalidad de la educaci�n presencial a la educaci�n a virtual).

 

[2] N�tese que se hace el uso de �aprehender� como capturar, prender o asir y no desde la acepci�n �aprender� como la adquisici�n de conocimiento. Eventualmente al hacerlo parte de s�, se captura desde los sentidos para posteriormente crear un nivel m�s profundo de conciencia desde la experiencia humana.