Experiencias en el desarrollo de software para

las pymes y para la Educaci�n en Ingenier�a:

Una contribuci�n de las universidades de la RED ALFA

Laura Olivia Amavizca Valdez

[email protected]

https://orcid.org/0000-0003-1614-110X

Universidad Tecnol�gica del Sur de Sonora

Eusebio Jim�nez

L�pez

[email protected]

https://orcid.org/0000-0001-6893-3550

Universidad La Salle Noroeste �UTS

Helga Karina Tolano

Guti�rrez

[email protected]

https://orcid.org/0000-0002-3848-8115

Universidad Tecnol�gica del Sur de Sonora

 

Lilia Zulema Gayt�n Mart�nez

[email protected]

https://orcid.org/0000-0003-4280-6064

Universidad Tecnol�gica Del Sur De Sonora

 

Erika Ercilia V�zquez Moreno

[email protected]

https://orcid.org/0000-0002-4030-0249

Universidad tecnol�gica del sur de sonora

Mar�a Anabell Covarrubias Couder

[email protected]

Universidad La Salle Noroeste,

Ciudad Obreg�n - M�xico

Resumen

Las relaciones industria-universidad y entre universidades, deben ser motivadas y fortalecidas ya que representan una de las bases m�s importantes para lograr una educaci�n tecnol�gica pertinente y para desarrollar proyectos que beneficien a las empresas, en especial a las micro y peque�as empresas. En este sentido se form� en Cd. Obreg�n, Sonora, en el a�o 2005, la Red ALFA la cual est� integrada por tres universidades y una empresa, cuyas finalidades fueron potenciar el desarrollo de investigaci�n aplicada y apoyar a las empresas Pyme de la regi�n. En este art�culo se presentan dos experiencias relacionadas con el desarrollo de software para apoyar a una microempresa y el dise�o de una calculadora de proposiciones para la ense�anza de las matem�ticas. Los proyectos fueron desarrollados por las universidades participantes de la Red ALFA, con la colaboraci�n de profesores y alumnos. La Red ALFA ha logrado resultados positivos desde su constituci�n y ha sido clave para el desarrollo de investigaci�n entre las instituciones que la conforman.

Palabras clave: Desarrollo de software; Metodolog�as �giles; Objeto de aprendizaje; Relaciones industria-universidad


 

Experiences in software development for

SMEs and Engineering Education: A contribution of the

ALFA NETWORK universities

 

Abstract

Industry-university and university-university relations should be motivated and strengthened, since they represent one of the most important bases for achieving relevant technological education and for developing projects that benefit companies, especially micro and small enterprises. In this sense, the ALFA Network was formed in Cd. Obregon, Sonora, in 2005, which is integrated by three universities and one company, whose purpose was to promote the development of applied research and to support SME companies in the region. This article presents two experiences related to the development of software to support a microenterprise and the design of a proposition calculator for mathematics education. The projects were developed by the universities participating in the ALFA Network, with the collaboration of professors and students. The ALFA Network has achieved positive results since its constitution and has been key to the development of research among its member institutions.

Keywords: Software development; Agile methodologies; Learning object; Industry-university relationships

 

 

 

Art�culo recibido 15 febrero 2023

Aceptado para publicaci�n: 15 marzo 2023

 


 

Introducci�n

El mundo contempor�neo requiere de la participaci�n de diversos actores de una sociedad moderna enormemente diferenciada y especializada, para poder resolver las problem�ticas que se presentan cada d�a. Las complejidades del entorno y de los problemas motivan a que diversas organizaciones se vinculen y trabajen juntas para resolver los retos y desaf�os. Desde hace varios a�os, se ha suscitado una importante cooperaci�n entre m�ltiples agentes de relevancia con un notable protagonismo, a fecha de hoy, como: la Universidad, la Empresa y el sector p�blico (L�pez 2019). Est�s cooperaciones han motivado a que se formen relaciones de diversos tipos, como, por ejemplo; empresa-universidad o gobierno-empresa-universidad y entre universidades por solo mencionar algunas.

Las relaciones universidad-industria son indispensables para poder crear una sinergia que combine las potencialidades de ambos actores para resolver problemas que impliquen a la ciencia y a la innovaci�n. Las relaciones universidad-empresa no constituyen un fen�meno nuevo, pero en las �ltimas d�cadas han adquirido un mayor protagonismo, hasta el punto que su promoci�n se ha convertido en un componente clave en las pol�ticas de innovaci�n implementadas por muchos gobiernos alrededor del mundo (Vega 2011). En la actualidad en los pa�ses desarrollados, la vinculaci�n universidad-industria se da de diferentes formas, a partir de las conformaciones m�s tradicionales de principios del siglo XX, como las consultor�as y los contratos de investigaci�n, o aquellos de mediados del mismo siglo y que a la fecha persisten. Esta vinculaci�n se realiza a �trav�s de oficinas de transferencia de tecnolog�a como la vinculaci�n industrial y patentes, start-ups, los spin-offs, las incubadoras, los parques cient�ficos, las alianzas estrat�gicas o consorcios, los centros de innovaci�n, los centros de investigaci�n cooperativa, los centros de tecnolog�a, los centros de excelencia, las alianzas regionales, la vinculaci�n no relacionada con transferencia de tecnolog�a, como formaci�n continua y asesor�as y los capitales para la vinculaci�n (Magallanes 2019).

Otro tipo de relaci�n entre organismos, en este caso, sistemas de educaci�n e investigaci�n, son las redes de colaboraci�n entre universidades. Las redes acad�micas fomentan la colaboraci�n entre acad�micos, investigadores y cient�ficos, este proceso de integraci�n se ha incorporado de forma progresiva como una herramienta que permite el aumento en la generaci�n de conocimiento, as� como en el desarrollo de tecnolog�as e innovaci�n en el �mbito acad�mico (Caicedo, Santiago y Parra 2021). Las redes acad�micas permiten potenciar la creaci�n de conocimientos lo que implica acelerar el avance cient�fico y tecnol�gico y con ello lograr, no solo una importante generaci�n de activos intelectuales, si no material innovador para la educaci�n de los estudiantes. La creaci�n de conocimientos y el avance cient�fico se cimientan en la competitividad, la colaboraci�n y la cooperaci�n, y estas acciones dan origen precisamente a las redes de colaboraci�n (Casas y de Gortari, 2001). La colaboraci�n entre redes fomenta e impulsa el trabajo en equipo y esto permite alcanzar un fin com�n, as� mismo, el hecho de compartir recursos e infraestructura ayuda a optimizar los resultados materiales e intelectuales en la generaci�n de nuevo conocimiento (C�rdenas, 2016).

Idealmente, las redes son concebidas como estructuras intermedias donde tienen lugar procesos interdependientes en los que se exploran nuevos caminos para el aprendizaje y la cooperaci�n entre individuos e instituciones (Rauch, 2013). Las redes de colaboraci�n dejan atr�s las formas de organizaci�n jer�rquicas que con el paso del tiempo se han vuelto obsoletas (Burns y K�ster 2016), y dan paso a mecanismos de cooperaci�n y colaboraci�n interuniversitarios e interinstitucionales, mucho m�s din�micos y abiertos, que motivan a los actores (profesores, investigadores, alumnos, directivos, funcionarios, etc.) a relacionarse de una manera distinta abriendo las puertas a la transferencia de conocimientos y al desarrollo de proyectos en conjunto extendiendo los impactos de los proyectos m�s all� de sus �mbitos oficiales. Las Redes de Colaboraci�n Acad�mica son organizaciones de investigadores que realizan investigaciones enfocadas a temas propios del �rea de trabajo a la que �stos pertenecen (Carmona y Ch�vez 2015). De hecho, una forma diferente de realizar investigaci�n es a trav�s de colectivos docentes que no pertenecen a la misma organizaci�n, lo cual permite que un trabajo tenga visiones corporativas y rigores de m�todo diferentes. A este tipo de organizaciones se les ha denominado Redes de Colaboraci�n Acad�mica (Redes). Las Redes de Colaboraci�n Acad�mica son organizaciones que se constituyen por voluntad propia y no necesariamente por obligaci�n.

Por otro lado, la colaboraci�n entre universidades y la conformaci�n de redes acad�micas y de investigaci�n, no s�lo representan mecanismos para potenciar la docencia, la formaci�n de recursos humanos y el desarrollo de ciencia y de tecnolog�a, sino que propician la innovaci�n y el desarrollo social e industrial. De hecho, dentro de los factores que concurren en la consolidaci�n de procesos de innovaci�n y cambio social, uno fundamental es la vinculaci�n de la universidad con la sociedad y, en particular, con el sector productivo (Garrido, Rondero y Vega, 2013). En este sentido, en una econom�a din�mica, globalizada y competitiva la innovaci�n se coloca como la estrategia central para el incremento de la cuota de mercado y el crecimiento econ�mico. La mayor�a de los pa�ses que han visto en la innovaci�n una oportunidad para el crecimiento han generado est�mulos financieros para el desarrollo cient�fico y tecnol�gico, mientras que para potencializar su efecto se han desarrollado estrategias de vinculaci�n para la generaci�n de redes de colaboraci�n que permitan incrementar la capacidad para innovar mediante la acumulaci�n y los �spillovers� del conocimiento (R�os y Ocegueda, 2017).

La innovaci�n es un concepto que est� siendo parte de las transformaciones industriales actuales y que para su implementaci�n requiere de la generaci�n y aplicaci�n de conocimientos, en especial por aquellos organismos que se conformen en redes de colaboraci�n capaces de interactuar entre entes de su misma naturaleza (p.e. entre universidades) o entes de distintos intereses (p.e. entre universidades y empresas) buscando objetivos comunes. Las redes de colaboraci�n tienen un alto impacto en la educaci�n en ingenier�a, pues los alumnos, profesores e investigadores participan en proyectos derivados de las empresas y centros de investigaci�n, lo cual tiene beneficios importantes, pues se adquiere experiencia, recursos econ�micos y se proyecta a las universidades hacia la aplicaci�n del conocimiento a problem�ticas reales (Jim�nez et al. 2020).

El modelo de las redes de colaboraci�n es aplicado por diversas universidades y empresas, por ejemplo, Raschio, Gallardo y Opel (2022), describen la existencia de redes universitarias privadas que trabajan en forma colaborativa desde hace 17 a�os, algunas integradas a la Red Andina de Universidades (RADU), y que realizan distintas funciones universitarias de docencia, investigaci�n y en extensi�n. Los autores describen que, si bien existen opiniones dis�miles respecto a dichas redes por parte de sus protagonistas, sostienen que las universidades en sus procesos de comunicaci�n y sus relaciones interinstitucionales, desde una mirada de cooperaci�n, han logrado superar barreras propias de una visi�n de competencia mutua y est�n logrando un impacto positivo en la sociedad de Mendoza, Argentina. Otro ejemplo de las redes de colaboraci�n es la RIED (La Red Iberoamericana de Estudios del Desarrollo) que se cre� en 2005 con el objetivo de generar un espacio de di�logo plural y un marco para la realizaci�n de actividades y proyectos conjuntos relacionados con la investigaci�n de los procesos de desarrollo con una mirada amplia, multidimensional e interdisciplinar (Gutti, Guti�rrez y Trueba 2021). Las acciones que ha llevado a cabo la RIED, confirman que la conformaci�n de redes de vinculaci�n y articulaci�n de profesionales e investigadores contribuye a la integraci�n de las comunidades acad�micas y culturales de Am�rica Latina y fortalece los procesos de construcci�n de capacidades arraigados en los problemas locales y regionales.

En este sentido en el municipio de Cajeme localizado al sur del estado de Sonora, M�xico, se conform� en el a�o 2005 una red interinstitucional denominada Red ALFA la cual est� integrada por tres reconocidas universidades (La Universidad La Salle Noroeste, el Instituto Tecnol�gico Superior de Cajeme y la Universidad Tecnol�gica del Sur de Sonora) y una empresa (Jim�nez et al. 2004). Esta red se form� (en la parte acad�mica) buscando desarrollar proyectos innovadores de docencia e investigaci�n, as� como para apoyar (en la parte de transferencia) a las micro y peque�as empresas de la regi�n, a trav�s,� de la realizaci�n de proyectos y transferencia de tecnolog�as. Desde su conformaci�n a la fecha, la Red ALFA ha tenido importantes contribuciones al mejoramiento de la formaci�n de alumnos y profesores de las universidades que la conforman y a atender necesidades de las micro y peque�as empresas de la regi�n.

En este art�culo se presentan dos experiencias de desarrollo de proyectos generados por las universidades que conforman a la Red ALFA, uno de ellos dirigido al desarrollo de software educativo para mejorar la ense�anza y otro orientado al desarrollo de software para una empresa de la regi�n. La s�ntesis de estas experiencias reflejan que para atender diversas necesidades internas en las universidades y para apoyar la innovaci�n y la transferencia el camino de la colaboraci�n es el mecanismo m�s eficiente para dar resultados.

Metodolog�a

El m�todo de investigaci�n utilizado en este art�culo es descriptivo con enfoque cualitativo y su dise�o es no experimental de corte transversal. De acuerdo con Aguirre y Jaramillo (2015), el estudio descriptivo cualitativo es el m�todo que se puede elegir cuando se deseen descripciones rigurosas de los fen�menos. Es no experimental, ya que el recopila datos sin modificar las condiciones naturales en las que ocurren los fen�menos que se estudian y de corte transversal ya que los proyectos ocurrieron en un momento espec�fico.

El primer proyecto es el desarrollo de una calculadora que se usa para verificar la verdad o la falsedad de teoremas del �lgebra de las proposiciones y fue desarrollado por profesores y alumnos de la Universidad La Salle Noroeste la cual est� integrada a la Red ALFA, el proyecto fue desarrollado durante el trascurso de un semestre de clases. El segundo caso es el desarrollo de software realizado por un alumno de estad�a profesional de la Universidad Tecnol�gica del Sur de Sonora para una empresa Pyme.

Resultados y discusi�n

En esta secci�n se presentan la descripci�n de dos proyectos: uno orientado a mejorar el proceso de Ense�anza para Ingenier�a, el otro relacionado con aumentar la competitividad de una empresa de la regi�n.

Experiencia en el desarrollo de software educativo

Si bien existe en la actualidad diversos programas libres o con licencia que apoyan a la educaci�n en ingenier�a, en especial al aprendizaje de las matem�ticas, es necesario fomentar en las universidades el desarrollo de software educativo ya que se requiere contar con instrumentos de ense�anza a la medida y trazar un camino de desarrollo para minimizar la dependencia tecnol�gica que en materia educativa tienen diversas escuelas y universidades en M�xico.

En este sentido la Universidad La Salle Noroeste y la Universidad Tecnol�gica del Sur de Sonora ambas pertenecientes a la Red ALFA, conformaron equipos de trabajo entre alumnos y profesores, para desarrollar software educativo que apoyar� a los aprendizajes de alumnos de Ingenier�as de ambas instituciones, en particular para la ense�anza de las matem�ticas. Las materias beneficiadas fueron: Matem�ticas discretas de la carrera de Ingenier�a en Producci�n Multimedia de la Universidad La Salle Noroeste y la materia de Introducci�n a las Matem�ticas de la carrera de Ingenier�as de Tecnolog�as de la Informaci�n de la Universidad Tecnol�gica del Sur de Sonora. En la materia de matem�ticas discretas se ense�a en una unidad de competencia el tema de log�stica (�lgebra de las proposiciones) (Fregoso 1977) y la teor�a de las funciones (Fregoso 1979). El primer tema busca que los alumnos puedan comprender las propiedades b�sicas del �lgebra de Boole (ya que es fundamental para otras materias como programaci�n estructurada y programaci�n orientada a objetos) y el segundo tema est� orientado al dise�o, construcci�n y clasificaciones de las funciones. En esta secci�n se presenta el desarrollo de software educativo mejorar los aprendizajes de la materia de Matem�ticas Discretas.�

Desarrollo de una calculadora para construir proposiciones y tablas de verdad

El problema a resolver fue la construcci�n de una calculadora la cual permitiera:

1)      Construir proposiciones simb�licas.

2)      Construir f�rmulas proposicionales.

3)      Mostrar la falsedad o la veracidad de f�rmulas y propiedades.

4)      Verificar si la f�rmula es una tautolog�a, una contradicci�n o una inconsistencia.

5)      Generar las tablas de verdad.

En primera instancia se desarroll� el proceso l�gico del sistema, para lo cual fue necesario definir las siguientes definiciones y tablas de verdad:

Una proposici�n, de acuerdo con Fregoso (1977), es un s�mbolo cuyo significado o es falso (F) o es verdadero (V), pero no simult�neamente. Si P es una proposici�n, entonces la Tabla de sus significados es la siguiente:

Tabla 1. Valores de p.

p

V

F

Sean p y q dos proposiciones, entonces los valores simult�neos se muestran en la Tabla 2:

Tabla 2. Valores simult�neos de p y q.

p

q

V

V

F

F

F

V

V

F

 

 

 

 

Las Tablas 3 y 4 muestran las tablas de verdad de los axiomas de la �y� (�) y de la �o� (�):

Tabla 3.��� Definici�n de la ����������������������������������� Tabla 4. Definici�n de la ��

�������� p

q

p�q

 

p

q

p�q

V

V

V

 

V

V

V

F

F

F

 

F

F

F

V

F

F

 

V

F

V

F

V

F

 

F

V

V

 

La Tabla de valores asociadas con la negaci�n ��� es la siguiente:

Tabla 5.� Valores de verdad de la negaci�n.

1

2

p

�p

V

F

F

V

Con los axiomas descritos en las Tablas 3 y con la definici�n de la negaci�n se pueden establecer distintas propiedades, algunas de ellas son las siguientes:

 

Para el caso de la operaci�n ���:

1)        p�q = q�p;���������������������������������� Conmutatividad

2)        (p�q)�r = p�(q�r); ��������������������������������� Asociatividad

3)        p� F =p;�������������������������������������������������� Elemento neutro

Para el caso de la operaci�n ���:

1)      p�q = q�p;����������������������������������� Conmutatividad

2)      (p�q) �r = p� (q�r), ��������� ����������������������� Asociatividad

3)      p�V =p;��������������������������������������������������� Elemento neutro

Para el caso de la operaci�n �� y ��:

1)      p�(q�r) = (p�q)�(p�r)����������������������������� Distributiva de "�" bajo "�"

2)      p�(q�r) = (p�q)�(p�r)����������������������������� Distributiva de "�" bajo "�"

Para el caso de las leyes de Morgan se tiene las igualdades siguientes:

1)      �(p�q) = �p��q ������������������������������������������������������������������������ ���

2)      �(p�q) = �p��q��

Con estas definiciones y axiomas el sistema computacional desarrollado deber�a ser capaz de demostrar teoremas. La idea principal fue que cuando los alumnos fueran capaces de dominar la metodolog�a de la demostraci�n de teoremas, estos fueran capaces de automatizar todo el proceso log�stico y que pudieran verificar si los desarrollos realizados a mano pudieran revisarse con la calculadora. Posteriormente, la calculadora ser�a usada para demostrar teoremas complejos. A continuaci�n, se presenta un ejemplo (Jim�nez et al, 2002):

Teorema 1. La propiedad conmutativa de la operaci�n ��� se satisface. Esto es:

p�q = q�p

Demostraci�n. En efecto, sean s=p � q y t=q � p, entonces al considerar las Tablas 1, 2 y 4 se construye la Tabla siguiente:

Tabla 6. Tabla de valores para la demostraci�n del teorema 1.

1

2

3

4

p

q

s

t

V

V

V

V

F

F

F

F

V

F

V

V

F

V

V

V

���������������������

Al observar las columnas 3 y 4 de la Tabla 6 se demuestra que, en efecto, la propiedad conmutativa de la operaci�n ��� se satisface y la relaci�n: p�q = q�p se cumple y, por lo tanto, el teorema es verdadero.�.

Otro ejemplo es el siguiente:

Teorema 2. La siguiente igualdad es verdadera:

�(p�q) = �p��q ������������������������������������������������������������������������ ����

Demostraci�n. En efecto, al considerar las Tablas 1, 2, 3, 4 y 5 se genera la Tabla siguiente:

Tabla 7. Tabla de valores para la demostraci�n del teorema 2.

1

2

3

4

5

6

7

p

q

p�q

�p

�q

�(p�q)

�p��q

V

V

V

F

F

F

F

V

F

V

F

V

F

F

F

V

V

V

F

F

F

F

F

F

V

V

V

V

 

Al observar las columnas 6 y 7 de la Tabla anterior se demuestra que la relaci�n:� �(p�q) = �p��q se cumple y, por lo tanto, el teorema es verdadero.�.

Por otro lado, el sistema debe poder determinar si una f�rmula es una tautolog�a, contradicci�n o inconsistencia. Para ello se requiere definir dos conectivos: el condicional (si entonces) y el bi-condicional (si y solo s�). Las Tablas de valores de dichos conectivos son las siguientes:

Tabla 8. Tabla de valores para el bi-condicional.� Tabla 9. De valores para el condicional.

.p

q

p�q

 

p

q

p�q

V

V

V

 

V

V

V

F

F

V

 

F

F

V

V

F

F

 

V

F

V

F

V

F

 

F

V

F

Una tautolog�a se presenta cuando los valores finales de la f�rmula son todos verdaderos, para el caso de una contradicci�n los valores finales de la f�rmula son todos falsos y, finalmente, para una inconsistencia los valores toman falsos y verdaderos.

Por ejemplo: considere el siguiente teorema:

Teorema 3. La siguiente igualdad es una tautolog�a:�(p�q) � (�p��q)

Demostraci�n. En efecto, al considerar las Tablas 1, 2, 3, 4, 5 y la Tabla 9 se genera la Tabla siguiente:

Tabla 10. Tabla de valores para la demostraci�n de una tautolog�a.

1

2

3

4

5

6

7

8

p

q

p�q

�p

�q

�(p�q)

�p��q

�(p�q) � (�p��q)

V

V

V

F

F

F

F

V

V

F

V

F

V

F

F

V

F

V

V

V

F

F

F

V

F

F

F

V

V

V

V

V

 

Al observar los valores de la columna 8 se demuestra que la expresi�n �(p�q) � (�p��q) es una tautolog�a y, por lo tanto, el teorema es verdadero.�.

De esta manera la calculadora debe ser capaz de:

1)      Construir una f�rmula y probar propiedades.

2)      Construir la tabla de verdad.

3)      Verificar si la f�rmula es una tautolog�a, contradicci�n o inconsistencia.

El dise�o de la calculadora de proposiciones se muestra en la Figura 1.

Figura 1. �Dise�o de la calculadora

El sistema puede operar hasta cuatro proposiciones y tiene activas cuatro operaciones, incluyendo la disyunci�n exclusiva (�). As�, por ejemplo, es posible demostrar teoremas usando la calculadora. A continuaci�n, se presenta un ejemplo:

Teorema 4. Demuestre que la expresi�n siguiente es una tautolog�a.

�(p�q) � (�p)�(�q)


 

Demostraci�n. En efecto, considere la figura siguiente:

Figura 2. Cargado y demostraci�n del teorema por medio de la calculadora

�

De acuerdo con la Figura 2 el teorema es verdadero (T=verdadero) y es una tautolog�a y, por lo tanto, el teorema es verdadero. �.

El desarrollo de la calculadora facilita el proceso de la ense�anza y el aprendizaje en la materia de Matem�ticas Discretas ya que los alumnos pueden probar sus teoremas con dicha herramienta, lo que permite una comprensi�n sistem�tica del �lgebra de Boole. El software fue desarrollado en lenguaje de programaci�n Java y se puede visualizar en internet. El desarrollo de este software fue realizado por alumnos de la carrera de Ingenier�a en Producci�n Multimedia para el proyecto final de la materia de Matem�ticas Discretas. Con este proyecto, los alumnos no solo pudieron aplicar sus conocimientos en cuanto al desarrollo de software a trav�s de la programaci�n, sino que adem�s, lo aplicaron para resolver una problem�tica real que se presenta en el proceso de ense�anza de la materia.

Experiencia en el desarrollo de software para una empresa.

En las empresas, un buen software de gesti�n se puede utilizar para analizar y recopilar informaci�n de apoyo a la toma de decisiones que aumente la competitividad, aumente la productividad y realice los cambios necesarios para mejorar la producci�n. El desarrollo de software es la clave para la optimizaci�n de procesos en todos los sectores deseados.

En este sentido, la vinculaci�n empresa-universidad tiene un papel muy importante en el desarrollo de proyectos que impacten en los procesos de las empresas y permitan el desarrollo de nuevas habilidades profesionales. La Universidad Tecnol�gica del Sur de Sonora (UTS) tiene un contacto cercano con las empresas debido a su modelo educativo. Al pertenecer a la RED ALFA, la UTS potencia sus posibilidades de mejorar el servicio que presta a las empresas por medio de estad�as profesionales o proyectos. A continuaci�n, se presenta un resumen de un proyecto de desarrollo de software realizado a una empresa de la regi�n:

El giro de la empresa con la cual se realiz� el proyecto llamado �Sistema controlador de pedidos MController� que atiende a todo el sur de Sonora, es una empresa sonorense con m�s de 30 a�os de experiencia en el ramo de montacargas. Se dedica a la venta, renta, servicio y refacciones de montacargas de 3,000 lbs. a 50,000 lbs, cuentan con equipos usados y Semi-Nuevos tipo Gas LP, el�ctricos, bobcats, como tambi�n con un amplio inventario Hyster, Nissan, Caterpillar, Mitsubishi, Yale y Toyota. Manejando en sus equipos llantas tipo s�lida, rodom�tica, neum�tica, todoterreno con m�stil doble, triple y cu�druple. Garantizan todos sus equipos con el mejor presupuesto del mercado. El equipo est� conformado por 20 integrantes, los cuales llevan a cabo los servicios de reparaci�n, maniobras, maquinaria para manejo de carga, refacciones, llantas, bater�as y cargadores.�

Para llevar a cabo el desarrollo de este software en dicha empresa, se plantearon algunas alternativas y� se realiz� un an�lisis costo � beneficio de cada una de ellas,� tom�ndose la decisi�n de automatizar el control de las solicitudes de las rentas, servicios y el proceso de cobro mediante una aplicaci�n web, donde se realizar� la captura de la informaci�n y se generar�n reportes actualizados para automatizar los c�lculos de la informaci�n, generando ahorro en tiempos de consulta de reportes, dar agilidad a la cobranza y visi�n instant�nea para la toma de decisiones. Lo anterior se propuso despu�s de realizar la supervisi�n del proceso de trabajo operativo y administrativo, y observando c�mo es que llevan su control administrativo de forma manual y c�mo realizan los registros de rentas de montacargas y servicios escritos en papel. Al trabajar de esta manera se presentan con frecuencia confusiones con el personal; no se tiene un seguimiento efectivo con la cobranza, se hacen apuntes err�neos, por lo cual el due�o del negocio tiene que estar presente supervisando que se registre bien la informaci�n. Dado que el proceso es manual, no realizan reportes mensuales y, por lo tanto, con los clientes que tienen cr�dito en la empresa, no se obtiene con rapidez y de manera clara la deuda que tienen, ocasionando demoras de liquidez por las mismas deudas. Se observ� que existe un punto de mejora y de no aplicarse un cambio, como lo planteado en este proyecto, se pod�an ocasionar p�rdida de dinero para la empresa.

Este proyecto fue desarrollado utilizando las siguientes tecnolog�as: Laravel como el framework de c�digo abierto para PHP, es simple y muy potente, y tiene un sistema de ruteo, motor de plantillas (Blade), tiene un mapeador de objetos relacionales y las vincula a entidades l�gicas. Tiene un soporte para el almacenamiento cach� y MVC. Con Ajax combina varias tecnolog�as que permiten intercambiar informaci�n entre el servidor y el navegador web del cliente de forma as�ncrona, haciendo m�s fluida la interacci�n del usuario con la interfaz. Asimismo, tiene al MySQL como la base de datos ideal para este proyecto por su velocidad y ser de peque�o tama�o, adem�s que tambi�n es de c�digo abierto y esta alternativa no genera costos. Finalmente, el framewok Boostrap que ofrece un marco de dise�o estandarizado y adaptable a cualquier resoluci�n de pantalla; Xampp es un paquete de software libre, el cual ofrece un sistema de gesti�n de base de datos MySQL, el servidor web Apache y el int�rprete para el lenguaje script PHP, tambi�n se aplica DbSchema que sirve para dise�ar visualmente, implementar y documentar el esquema de bases de datos. El paquete Visual Studio Code es un potente editor de c�digo que es utilizado para crear la aplicaci�n web. PHP es el motor y c�digo del lado del servidor que atiende las peticiones de los clientes desde un navegador web siendo cada uno de ellos indispensables para un buen desempe�o de este proyecto en la empresa.

El modelo del proceso de desarrollo de software utilizado fue la metodolog�a en cascada (Sommerville 2005), la cual considera las actividades fundamentales del proceso de especificaci�n, desarrollo, validaci�n y evoluci�n, y los representa como fases separadas del proceso, tales como especificaci�n de requerimientos (An�lisis), el dise�o, la implementaci�n, las pruebas, despliegue y mantenimiento (ver Figura 3).

Figura 3. Metodolog�a en cascada.

Los artefactos resultantes, por cada fase, en la aplicaci�n de este modelo para el desarrollo del software fueron los siguientes:

Fase de An�lisis: Se inicia el proyecto con una entrevista donde se obtiene toda la informaci�n necesaria para el desarrollo. En esta parte, es muy importante lograr definir con exactitud hasta qu� punto se quiere llegar y se debe detallar en qu� estatus se encuentra el proceso de trabajo. Para poder analizar c�mo se llega del punto A (inicio) al B (t�rmino) se elabor� el diagrama de actividades y prototipos de las pantallas del sistema sobre el cual se har�n los cambios correspondientes (ver Figura 4).

Figura 4.� Diagrama de actividades

Interfaz de usuario gráfica, Diagrama

Descripción generada automáticamente

Fase de Dise�o: Despu�s de confirmar con el asesor empresarial el flujo de trabajo que realizar� la aplicaci�n, se cre� el diagrama de clases donde se muestran las entidades del proyecto y la informaci�n que se almacenar� en la base de datos. Aqu� se necesita la confirmaci�n del asesor para continuar con el dise�o de los siguientes diagramas, casos de uso, lo cual es necesario para planear la l�gica del negocio en la aplicaci�n. (Ver Figuras 5 y Figura 6).

Figura 5.� Diagrama de clases

Diagrama

Descripción generada automáticamente

Figura 6. Diagrama de Casos de Uso

Una captura de pantalla de una computadora

Descripción generada automáticamente

Fase de Desarrollo e Implementaci�n: En esta fase se instalan las herramientas necesarias para el desarrollo de la aplicaci�n, se configuran los paquetes necesarios que servir�n de ayuda para la codificaci�n. Ya con las herramientas listas, se realiza la construcci�n de las funciones que ejecutan la l�gica del negocio.

Fase de Validaci�n y Presentaci�n: El desarrollo est� dividido en m�dulos, al finalizar el desarrollo de cada uno de estos fueron presentados en la empresa para su validaci�n de funcionamiento.

Fase de Mantenimiento: Al finalizar con todos los m�dulos se toma el tiempo para revisar cada parte del proyecto para encontrar errores y corregirlos antes de presentar el funcionamiento para su liberaci�n. El resultado final obtenido del proyecto MController fue algunas de las siguientes interfaces web validadas y verificadas por el cliente (ver Figuras 7 y 8).

Figura 7.� Pantalla inicial de indicadores

En la Figura 8: se visualiza la pantalla de servicios, donde se lleva el control en forma de bit�cora de los servicios solicitados.

Figura 8.� Pantalla de servicios

En la Figura 9 se muestra la pantalla que controla cada servicio, captando la informaci�n del usuario en cada fase del proceso del servicio.

 

 

 

Figura 9. Control de servicios

Interfaz de usuario gráfica, Aplicación

Descripción generada automáticamente

Dentro del m�dulo de clientes se puede acceder al detalle del cliente, aqu� se pueden realizar el Altas/ Bajas/ Cambios (ABC) de las �reas, direcci�n y precios del cliente, como se muestra en la Figura 10.

Figura 10.� Cliente Detalle (ABC Precios y Direcciones)

En la Figura 11, se muestra la pantalla de las unidades donde se realizan las funciones de altas, bajas y cambios.

Figura 11. �Unidades (Altas, bajas y cambios)

En la Figura 12 se muestra la pantalla de altas, bajas y cambios de los tanques de gas.

Figura 12.� Tanques (Altas bajas y cambios)

Interfaz de usuario gráfica, Aplicación, Word

Descripción generada automáticamente

Con el desarrollo de este proyecto se concluye que es de suma importancia estar a la vanguardia con la tecnolog�a, ya que las empresas al no tomar en cuenta el �mbito tecnol�gico se cierran a una infinidad de posibilidades que esta �rea brinda. Se debe de buscar la mejora continua, ya que en poco tiempo el mundo ha sufrido cambios que orillan a tener que adaptarse, de lo contrario afecta a todos. Se puede tomar como ejemplo este proyecto donde se detecta un �rea de oportunidad ya que la empresa no estaba siendo eficiente en sus procesos internos por descuidar el flujo y control de su informaci�n.�

Discusi�n

La colaboraci�n universitaria es una estrategia que da resultados y mejora los procesos educativos y de transferencia hacia la sociedad. Las experiencias descritas en este trabajo muestran que es posible contribuir a los aprendizajes y a la mejora de las empresas Pymes por medio de la tecnolog�a, en este caso, el desarrollo de software. La conformaci�n de equipos de trabajo entre profesores y alumnos para el desarrollo de proyectos hace que la educaci�n se fortalezca ya que los alumnos aprenden tomando en consideraci�n el entorno que les rodea y participan en las diversas problem�ticas, en otras palabras, les encuentran sentido a los conocimientos aprendidos. El proyecto de la calculadora de proposiciones naci� por la discusi�n sobre la enorme dependencia tecnol�gica que M�xico tiene, tanto a nivel industrial como a nivel educativo. Si bien ya existen desarrollos similares a la calculadora (Nieto y Ramos, 2016), el reto era demostrar que en una materia como Matem�ticas Discretas se pod�a desarrollar software educativo y ajustarlo a las necesidades de la clase. Este sistema tambi�n se utiliz� para los aprendizajes de los alumnos de la carrera de Ingenier�a Mecatr�nica de la Universidad La Salle Noroeste.

Por otro lado, la colaboraci�n en el formato de estad�a entre la Universidad Tecnol�gica del Sur de Sonora y la empresa beneficiaria ha dado resultados importantes ya que es posible contribuir a la mejora de los procesos con la ayuda de la tecnolog�a, en este caso, con el desarrollo de software. El desarrollo del �Sistema controlador de pedidos MController� permiti� a la empresa corregir procesos de venta, renta, servicio y refacciones de montacargas. El sistema le ayud� a la empresa a tener informaci�n precisa de sus procesos para mejorar la toma de decisiones y para visualizar que con la ayuda de la tecnolog�a puede aumentar su competitividad y mejorar el flujo de sus procesos. Para el caso del alumno que desarrolla este proyecto, aprendieron la manera de c�mo utilizar las herramientas de desarrollo de software para apoyar a las Pymes, lo que sin lugar a duda contribuye a su formaci�n y al desarrollo de aquellas competencias y habilidades blandas que en la empresa son requeridas.

En este sentido, se puede afirmar que la colaboraci�n entre universidades y entre universidades y empresas es uno de los caminos m�s adecuados para la transferencia de conocimientos, para la alta formaci�n de los estudiantes y egresados, para mostrar el compromiso social universitario y para desarrollar a las empresas en el marco del desarrollo tecnol�gico. La conformaci�n de la Red ALFA ha permitido el trabajo colaborativo entre las universidades que la integran y su funcionamiento es importante para motivar la trasferencia de conocimientos de las universidades a las empresas.

Conclusiones

Sin lugar a dudas, la colaboraci�n institucional ayuda a potenciar el desarrollo de proyectos en el �mbito educativo y en los procesos de transferencia de conocimientos hacia la sociedad. Los problemas que enfrenta d�a a d�a la sociedad no pueden ser abordados por una sola universidad, por lo que las relaciones de colaboraci�n universitaria resultan esenciales para poder mejorar la ense�anza y el desarrollo de proyectos. Bajo esta visi�n se cre� la Red ALFA en el a�o 2005 y a la fecha las universidades que la integran han desarrollado diversos proyectos acad�micos, de investigaci�n y de transferencia. En este art�culo se han descrito dos proyectos de software desarrollados por la Universidad La Salle Noroeste y la Universidad Tecnol�gica del Sur de Sonora, ambas integradas a la Red ALFA.�

El primer proyecto consisti� en el desarrollo de una calculadora de proposiciones y fue dise�ada por alumnos y el profesor de la materia de Matem�ticas Discretas de la Universidad La Salle Noroeste, asesorados por profesores de la UTS. Este proyecto demostr� que es posible desarrollar tecnolog�a propia en peque�a escala para asistir a la educaci�n, en este caso, a la ense�anza y el aprendizaje de las matem�ticas. Es necesario desarrollar software educativo con la finalidad de reducir la enorme dependencia tecnol�gica que tienen los pa�ses subdesarrollados y para que los alumnos participen y se formen logrando poner en pr�ctica sus conocimientos en proyectos reales.

El segundo proyecto estuvo relacionado con el desarrollo de software para apoyar y mejorar los procesos de una empresa Pyme. La estrategia de colaboraci�n empresa-universidad a trav�s de las estad�as profesionales implementada por la UTS, permite participar activamente en el desarrollo de proyectos con las empresas. La trasferencia de conocimientos y de recursos tecnol�gicos se simplifica con este modelo de colaboraci�n y los alumnos tienen una formaci�n de campo que les permite poner en pr�ctica las competencias y las habilidades aprendidas en las aulas as� como fortalecer u obtener nuevas.

Finalmente, la colaboraci�n universitaria debe ser promovida como el mejor mecanismo que existe para mejorar las condiciones y los procesos educativos, y para potenciar la transferencia de conocimientos y tecnolog�as al sector empresarial.

Lista de referencias

Aguirre J.C. Jaramillo L. G. (2015). El papel de la descripci�n en la investigaci�n cualitativa, Cinta moebio, Vol. 53, pp. 175‐189

Burns, T. y K�ster, F. (2016). Governing Education in a Complex World. Educational Research and Innovation.Paris: OECD Publishing

Caicedo, H., Santiago, E. & Parra, M. (2021). Productividad e igualdad de g�nero en redes de colaboraci�n cient�fica. Revista Saber, Ciencia y Libertad, 16(2), pp. 216�230.� https://doi.org/10.18041/2382-3240/saber.2021v16n2.74381

C�rdenas Tapia, M. (2016). Sustentabilidad y redes de conocimiento an�lisis con la teor�a de grafos. Publicaciones empresariales UNAM, FAC Publishing.

Carmona E. A., Ch�vez R. (2015). Investigaci�n acad�mica y redes de colaboraci�n: evidencias de M�xico. Revista Internacional Administraci�n & Finanzas Vol. 8, No. 5, 2015, pp. 63-80

Casas, R., y de Gortari, R. (2001). La formaci�n de redes de conocimiento: una perspectiva regional desde M�xico (Vol. 11). Anthropos Editorial.

Fregoso A. (1979). Los elementos del lenguaje de la matem�tica: Parte II. Funciones. (1979). Editorial Trillas. M�xico.

Fregoso A. (1977). Los elementos del lenguaje de la matem�tica": Parte I. L�gica y conjuntos. Editorial Trillas. M�xico.

Garrido C., Rondero N., Vega V.� (2013). Innovaci�n, vinculaci�n universidad-empresa y desarrollo. Desaf�os y posibilidades de la REDUE en el espacio ALCUE, Universidades, n�m. 58, pp. 6-23.

Gutti P., Guti�rrez L.E. Trueba R. (2021). Redes de vinculaci�n acad�mica: el caso de la Red Iberoamericana de Estudios del Desarrollo, A dimens�o cultural nos processos de integra��o entre pa�ses de Am�rica Latina, Suzuki, Cintra, Cerquer�a de Araujo editores. Universidade de S�o Paulo, pp. 162-183.

Jim�nez E., Mart�nez V.M., Beltr�n Y. y Ontiveros S.R. (2020). La importancia de las empresas Spin-Off el desarrollo econ�mico regional, JU'UNEA Revista de Investigaci�n, Universidad La Salle Noroeste, No. 5, pp. 5-15.

Jim�nez E., Reyes L.A., Garc�a D., Ruelas J.E., Cota A. (2002). Sistematizaci�n del �lgebra de Boole en el conjunto binario. Informe Interno de Investigaci�n. Divisi�n de Estudios de Posgrado de la Facultad de Ingenier�a. Universidad Nacional Aut�noma de M�xico, pp. 1-48

Jim�nez E., Ochoa F., Mart�nez V. (2004). �Red Alfa: Red Universitaria Empresarial�. Informe Interno de Investigaci�n No 1. RED ALFA � ULSA Noroeste. Sonora M�xico

L�pez D. (2019). Notas cr�ticas sobre las relaciones entre universidad, gobierno e industria

Revista de Ciencias Sociales (Ve), vol. XXV, n�m. 4, pp. 40-48.

Magallanes M.C. (2019). Vinculaci�n universidad-empresa para acceder a la autonom�a financiera. IV Congreso Virtual Internacional Desarrollo Econ�mico, Social y Empresarial en Iberoam�rica, pp. 523-534.

Nieto S., Ramos H. (2016). Construcciones de funciones boleanas extendidas a partir de tablas de verdad utilizando el programa Mathematica. XVIII Simposio Internacional de Inform�tica Educativa SIIE 2016, pp. 91-96.

Raschio, C., Gallardo, A., Opel, G. (2022). Redes en la gobernanza universitaria mendocina: visi�n de sus protagonistas. Contextos de Educaci�n, 33, pp. 19-27.

Rauch, F. (2013). Regional networks in education: a case study of an Austrian project. Cambridge Journal of Education, 43(3), 313-324

R�os, J., Ocegueda, J. (2017). Capacidad innovadora y crecimiento regional en M�xico: un enfoque espacial. Econom�a, Sociedad y Territorio, vol. xvii, n�m. 55, pp. 743-776

Sommerville, I. (2005). Ingenier�a del software: Cap�tulo IV. El modelo en cascada. Editorial PEARSON EDUCATION, S.A. Madrid.

Vega J., Manjarr�s L., Castro E., Fern�ndez L. (2011). Las relaciones universidad-empresa: tendencias y desaf�os en el marco del Espacio Iberoamericano del Conocimiento, Revista Iberoamericana de Educaci�n. N. � 57, pp. 109-124