Plataforma (SINAÍ) en procesos pedagógicos para las competencias laborales de docentes: Tendencias Educativas

 

Doris Ester Montiel Hernández[1]

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https://orcid.org/0000-0003-0285-2365

Universidad de Santander.

 

RESUMEN

Sistematizar los procesos administrativos y pedagógicos a nivel institucional, para lograr más eficiencia y calidad del servicio de gestión administrativa y pedagógica de las instituciones es fundamental en las Instituciones. Se debe considerar que no se han desarrollado de manera adecuada las funciones que se pueden desarrollar en la plataforma SINAÍ, por parte de los directivos y docente de estas instituciones, donde se siguen llevando procesos aislados y de manera física, por lo tanto, no se ha llegado a la materialización del propósito para lo cual fue adquirido dicho recurso tecnológico. Por esta razón, se estableció como objetivo de este artículo evaluar la incidencia de la implementación, apropiación y evaluación de la plataforma Sinaí para potencializar las competencias laborales de los docentes. Para lo concerniente a los aspectos metodológicos del desarrollo de este artículo se definió un tipo de investigación cualitativo, fundamentado en el modelo epistémico interpretativo, con un método de investigación hermenéutico desde un diseño de campo. Se concluyó que, la competencia del docente se refiere a la capacidad de un maestro para poner en práctica todas las áreas de conocimiento que tiene para involucrar a los estudiantes en lo que están aprendiendo y cómo están aprendiendo. De la misma manera, los procesos pedagógicos son el conjunto de prácticas, relaciones intersubjetivas y saberes que acontecen entre los que participan en procesos educativos, escolarizados y no escolarizados, en aras de construir conocimientos, clarificar valores y desarrollar competencias para la vida en común.

 

Palabras clave: procesos pedagógicos; competencias docentes; plataforma SINAÍ; competencias.


 

Platform (SINAÍ) in pedagogical processes for teachers' labor competencies: Educational Trends

 

ABSTRACT

Systematizing administrative and pedagogical processes at the institutional level, to achieve more efficiency and quality of the administrative and pedagogical management service of the institutions is fundamental in the Institutions. It should be considered that the functions that can be developed in the SINAÍ platform have not been adequately developed, On the part of the directors and teachers of these institutions, where isolated processes continue to be carried out and in a physical way, therefore, the materialization of the purpose for which said technological resource was acquired has not been reached. For this reason, it was established as an objective of this article to evaluate the impact of the implementation, appropriation and evaluation of the Sinai platform to potentiate the labor competencies of teachers. Regarding the methodological aspects of the development of this article, a type of qualitative research was defined, based on the epistemic interpretative model, with a hermeneutic research method from a field design. It was concluded that, teacher competence refers to the ability of a teacher to put into practice all the areas of knowledge he has to engage students in what they are learning and how they are learning. In the same way, pedagogical processes are the set of practices, intersubjective relationships and knowledge that occur among those who participate in educational processes, schooled and unschooled, in order to build knowledge, clarify values and develop skills for life in common.

 

Keywords: pedagogical processes; teaching skill; SINAÍ platform; competencies.

 

 


INTRODUCCIÓN

Existe en las instituciones de formación del municipio de Montelíbano Córdoba, una plataforma virtual llamada SINAÍ, la cual fue adquirida en aras de sistematizar los procesos  administrativo y pedagógicos a nivel institucional, para lograr más eficiencia y calidad del servicio de gestión administrativa y pedagógica de las instituciones del municipio, la cual no  ha sido utilizada de manera  adecuada en la ejecución de acciones que se pueden trabajar en la plataforma, por parte de los directivos y docente de estas instituciones, donde se siguen llevando procesos aislados y de manera física por lo tanto  no se ha llegado a la materialización del propósito para lo cual fue adquirido dicho recurso tecnológico.

Es necesario tener en cuenta que la tarea de los maestros está fundamentada en las competencias pertinentes que caracterizan sus prácticas de enseñanza para trabajar la formación de estudiantes capaces de formar su propio saber, cumpliendo así con un papel de orientador en el aula. Estas competencias laboral de los docentes deben comprender las habilidades y destrezas de cada ser humano aplicadas al campo laboral, así mismo, es importante el grado de motivación con las actividades relacionadas con el proceso académico considerando su elemento social, debido a ello, es necesario que el educador desempeñe un rol activo en la gestión de los componentes externos e internos que inciden en los procesos formativos, optimizando los aprendizajes obtenidos por cada estudiante (Regalado, 2020).

En ese sentido, el  problema se evidencia  cuando  se ve reflejada  la poca sistematización de los procesos  administrativo y académicos dejando así un alto índices de procesos  que se  desvirtúan por falta de unificación de los criterios  de tipo institucionales, por otra parte, los padre de familia se ven abocados acudir  a las instituciones a  recibir informe de cualquier índole administrativo y pedagógico, cuando todo lo podrían visualizar desde su casa y tener  información  en tiempo real y oportuno , por lo que la propuesta se enmarca  en  lograr  la implementación, apropiación y evaluación de esta plataforma como recurso virtual para mejorar las competencias laborales de  los maestros en el desarrollo de procesos de enseñanza.

En la conducción de los procesos administrativos y pedagógicos de las instituciones educativas a nivel municipal donde no se tiene apropiación de esta herramienta tecnológica, que responde a la optimización en la prestación de un servicio con eficiencia, de calidad, y oportuno en la comunidad educativa. 

 Teniendo en cuenta el contexto particular de la institución educativa San Bernardo donde se adelantará la propuesta investigativa y con base en las observaciones hechas, y de un análisis de los procesos y de las practicas abordadas por los maestros, administrativo, llamó la atención los siguientes aspectos.

No cuentan con un equipo interdisciplinario que haga seguimiento a los procesos que lleva cada docente en la plataforma, no hacen uso de los diferentes módulos de la plataforma limitan su uso solo a la sistematización de notas, no se capacita al padre de familia para que utilice la plataforma para obtener su información, no hay retroalimentación de los bancos de logros, falta la unificación de un plan de estudio a nivel municipal que garantice el cumplimiento de los estándares básicos de competencia y derechos básicos de aprendizaje reglamentados por el Ministerio de Educación Nacional.

Es un recurso de Gestión Académica y administrativa que permitirá la innovación ya que se propone la sistematización de la información segura accesible, ordenada y fácil de usar direccionada a mejorar el servicio educativo que presta las instituciones educativas que tienen bajo su responsabilidad promover el uso de esta herramienta tecnológica como recurso innovador, para potencializar las competencias laborales de los maestros en la implementación de TIC en el proceso pedagógico.

Todo lo planteado hasta aquí tiene presente que la práctica educativa se basa en la comunicación y el diálogo. Esto es para permitir que se demuestre el papel de la autoridad y el conocimiento del maestro, pero para proteger las relaciones que construyen relaciones directas con los estudiantes están relacionadas con el desempeño. De acuerdo con Sánchez (2021) la práctica pedagógica se refiere al trabajo cotidiano de los docentes en las aulas o lugares donde se desarrolla el trabajo académico relacionado con el currículo, sirve para formar a los estudiantes, y se compone de educadores, el currículo académico, los estudiantes y el proceso académico. Por ello, las tareas educativas requieren discusión, actividades y la diversión del entorno para llevar a cabo el proceso educativo.

En ese orden de ideas, este artículo presenta como objetivo evaluar la incidencia de la implementación, apropiación y evaluación de la plataforma Sinaí para potencializar las competencias laborales de los docentes de las instituciones educativas del Municipio de Montelíbano córdoba.

METODOLOGÍA

La realización del articulo asumió una metodología cualitativa, esta puede ser comprendida como una representación de acción social que hace hincapié en la manera en que un determinado grupo social analiza y comprende su experiencia para entender la realidad de los individuos. Este tipo de investigación utiliza entrevistas, diarios, observaciones e inmersiones en el aula y cuestionarios abiertos para obtener, analizar e interpretar los datos. Tomo sustento metodológico el modelo epistémico interpretativo, el cual tiene su origen en el hecho de que los métodos utilizados para comprensión del conocimiento relacionado con las ciencias humanas y sociales no pueden ser los mismos que su uso en las ciencias físicas, porque el ser humano interpreta su mundo y luego actúa en función de dicha interpretación (Hammersley, 2013). De igual forma, se asume un método de investigación hermenéutico, que se basa en el estudio de las experiencias vitales, a propósito de un acontecimiento, desde la perspectiva del sujeto y se sustenta en un diseño de campo, que consiste en observar y participar en el comportamiento social e intentar comprenderlo.

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

 Las habilidades se discutieron en la década de 1960 cuando el gobierno de los Estados Unidos se preocupó por la economía e inició estudios para determinar la productividad, la capacidad de trabajo y las características que identifican a los buenos trabajadores. Es de gran valor tener una gama de habilidades, conocimientos que demuestren el saber hacer, y una actitud propia que revele el valor que uno posee, rasgos que ayuden a definir y estandarizar el perfil de uno en particular. Persona talentosa permitida para actividades. Muñoz (2021)

Para aclarar aún más cómo podemos hablar de competencia en educación y en qué orden, Noam Chomsky acuñó en 196 el término que asoció con la capacidad de un niño para aprender liga. Comienza a hablarse de competencia en educación a través del lenguaje y áreas de trabajo (Vargas, 2019).

Al hablar de la competencia en educación en relación con la crisis económica y las normas sociales. En la década de 1990, el Banco Mundial mejoró la teoría del capital humano al relacionar el crecimiento económico con la educación y capacitación individual, lo que hizo que la fuerza laboral fuera más efectiva. Los trabajadores mejor capacitados son más productivos (Ramos, 2018). Entonces comenzó a establecerse la relación entre educación y eficacia, afectando directamente a la economía. La educación ganó importancia bajo el desarrollo de habilidades profesionales, y los maestros ya no se enfocaban en el proceso educativo, sino que tenían que empezar a desarrollar el proceso profesional. capacitación. La economía global, la política y la sociedad del conocimiento lo han demandado y han desarrollado una competencia denominada Educación Basada en Competencias (EBC), un modelo que facilita la convergencia de direcciones educativas y, más precisamente, de saberes y saberes.

Por lo tanto, las competencias laborales docentes se refieren a la competencia cognitiva y procedimental sobre qué hacer con el conocimiento, la selección y el uso adecuado de los recursos para cumplir las tareas educativas y su demostración. La acción mostrada es válida en la medida en que forma parte y afecta a un determinado sistema social. Por lo tanto, las situaciones sociales brindan oportunidades mutuas para aprender de las interacciones sociales.

En el campo de la educación también se están desarrollando estudios que enfatizan la competencia de los docentes, como el Proyecto de Coordinación de Estructuras Educativas en Europa (Duran, 2019), posicionado contextualmente como la Declaración de Bolonia (1999). Definición de un programa universitario basado en la educación por competencias. Se definen dos clases de habilidades. Hay competencias generales que existen en todas las disciplinas, y competencias específicas de las disciplinas. Este proyecto muestra que estas habilidades están estrechamente relacionadas con el aprendizaje de los estudiantes, ya que el resultado de tener estas habilidades se refleja en la calidad del aprendizaje de los estudiantes (Rios, 2019).

La investigación de Quiroz (2019) “Competencias profesionales de los docentes y su relación con las competencias investigativas de los estudiantes”, en la cual afirma su autor que las competencias docentes son el conjunto de habilidades de las que dispone el maestro para afrontar exitosamente todas aquellas acciones o eventos que ocurren ordinariamente en el aula de clase, tanto las que están referidas a aspectos puramente académicos, así como también aquellas derivadas de las relaciones sociales.

Así mismo, Casas (2019) en su tesis “Competencia docente y aprendizaje autónomo en estudiantes” expresó que la competencia docente abarca un conjunto de capacidades sociales, cognitivas, culturales, afectivos, laborales y productivas construidas a partir de las motivaciones internas de cada persona. El enfoque de la competencia docente contribuye a la pertinencia de los planes y programas educativos. Orienta un aprendizaje acorde con los retos y problemas del contexto social, comunitario, profesional, organizacional, disciplinar e investigativo y permite una enseñanza y evaluación con sentido y contenido.

También, Castillo (2020) realizó la investigación “Programa de formación de Competencias Profesionales, en los docentes de Educación Primaria, para la evaluación del proceso didáctico”, en la cual se definió competencia docente como ámbito o campo del ejercicio docente que agrupa un conjunto de desempeños profesionales, subyace el carácter ético de la enseñanza, centrada en la prestación de un servicio público y en el desarrollo integral de los estudiantes. En la definición de desempeño se identifica tres condiciones: actuación observable, responsabilidad y logro de determinados resultados. Los desempeños son definidos como “las actuaciones observables de la persona que pueden ser descritas y evaluadas y que expresan su competencia.

Por su parte, Regalado (2020) en su estudio “Competencias laborales y gestión del talento humano de los docentes” estableció que las competencias laborales se tratan de conocimientos y destrezas con la que se realiza determinada función dentro de una institución; conjunto de destrezas que se realizan en función al área de desempeño. Las competencias laborales están vinculadas con capacidades, más que con saberes, enfatiza el saber hacer sin dejar de lado los conocimientos, predisposiciones y actitudes que lo involucran.

Igualmente, Vera (2020) realizó el estudio “Gestión de Calidad de los Servicios en las Competencias Laborales” donde definió competencias en dos niveles: el primero compuesto por conocimientos, habilidades, actitudes, valores y autoimágenes; y el segundo, formado por motivos y rasgos de la personalidad. Para poder alcanzar un apropiado nivel de calidad de los bienes o servicios que brinda, debe tener conocimiento con mucha exactitud sobre la necesidad del usuario, cuáles son las perspectivas que éste tiene y hasta qué nivel lo que se le ha ofrecido ha considerado las perspectivas con el propósito de ir mejorando cada día más y más, convirtiéndose en un proceso perenne

De igual manera, Simeón (2021) realizó la investigación “Competencias laborales y habilidades comunicativas en docentes”, donde definió que las competencias laborales se relacionan de forma regular a los caracteres de personalidad, se convirtieron en comportamientos, que evidenciaron un desempeño ideal en sus funciones de su trabajo, en general las competencias laborales se plantearon como un desempeño extraordinario en un puesto de trabajo. Adquirir nuevas experiencias para mejorar su competencia profesional y personal con desafíos reales. Es decir, será medido su desempeño y capacidad de resolver problemas complejos en la praxis de su profesión dentro de la organización.

En esta misma línea, Veintimilla (2021) en su tesis “Competencias laborales y desempeño docente” encontró que la profesión es la acción y el efecto de ejercer un cierto oficio, un arte o una ciencia y estas tienden más, la función es la instrucción de determinadas conductas y efectos industriales, artísticos o científicos y estos son más proclives a realizar, tecnificar y resolver problemas productivos. Por tanto, el compromiso y la actitud de los docentes hacia su profesión son los determinantes para su desarrollo en el desempeño efectivo. Implantar que la educación no es solo un derecho humano, sino también un pasaporte para una vida de alta calidad, y utilizar cuatro formas de conocimiento como pilares: conciencia, trabajo, existencia y convivencia.

Así mismo, Calle (2022) “Programa de competencias docentes para generar cultura de emprendimiento”, en donde se definió La Competencia Laboral como la capacidad que tiene cada persona mostrada por las habilidades, conocimientos, destrezas, aptitudes, experiencias, y otras cualidades, que posee, aprende y consolida el individuo para el ejercicio de sus funciones y conceden valor agregado en el desempeño del puesto laboral; siempre que estas cualidades se pongan en acción mediante la actitud, motivación y valores de cada persona, como un todo que hace integra a la persona, dado a partir de la a llamada competencia genérica.

En esa misma perspectiva, Martínez et al. (2018) “El desempeño docente y la calidad educativa”, quines definieron el desempeño profesional como las actividades desarrolladas en el marco de las funciones de cada profesional, teniendo en cuenta que será evaluado de acuerdo a la manera en que ejecute sus responsabilidades.

El desempeño está ligado a las características de las instituciones, las personales de cada educador y sus experiencias profesionales, por lo que el docente tiene la necesidad de cultivar competencias que le permitan fomentar su desempeño, como por ejemplo formación constante, dominio del área del conocimiento en la que cumple su labor profesional así como de estrategias pedagógicas que coadyuven a facilitar el proceso educativo de cada estudiante, tener vocación educadora y utilizar las tecnologías de la información y la comunicación en el desarrollo de las clases.

Por su parte, Abril (2018) realizó la investigación “Análisis de la formación en competencias laborales generales en una institución académica”, este auto definió competencia como un saber hacer en situaciones concretas que requieren la aplicación creativa, flexible y responsable de conocimientos, habilidades y actitudes que pueden actualizarse en distintos contextos, utilizando el conocimiento en situaciones distintas de aquellas en las que se aprendieron. Conlleva la comprensión del sentido de cada actividad y sus implicaciones éticas, sociales, económicas y políticas. Las Competencias Laborales Generales como el conjunto de conocimientos, habilidades, actitudes y valores que un joven estudiante debe desarrollar para desempeñarse de manera apropiada en cualquier entorno productivo, sin importar el sector económico de la actividad, el nivel del cargo, la complejidad de la tarea o el grado de responsabilidad requerido.

De igual manera, Flores (2018) en su estudio “Modelo pedagógico de gestión del talento para potenciar competencias laborales en los docentes”, estableció que la competencia laboral se define como una capacidad efectiva para llevar a cabo exitosamente una actividad laboral plenamente identificada. La competencia laboral no es una probabilidad de éxito en la ejecución de un trabajo; es una capacidad real y demostrada. Las competencias laborales resaltan un atributo en común que poseen las competencias, la capacidad efectiva o capacidad puesta en acción que caracteriza un desempeño eficiente en la ejecución de una tarea.

Por su parte, Vargas (2019) en su investigación “Competencias profesionales docentes y gestión pedagógica” definió que la competencia es la correlación entre cada una de las conductas sociales, afectivas, cognoscitivas, psicológicas y sensoriales que permiten al docente desempeñar un rol. Las competencias docentes abarcan la correlación entre la formación teórica y la práctica que se genera dentro de las acciones de aprendizaje. Todo lo que se aprende solo tienen validez cuando se ponen en práctica de manera organizada en la solución de conflictos del medio o cuando se ejecutan acciones en favor de los estudiantes.

De la misma forma, Montoya (2018) en su tesis “Cualidades y competencias de los docentes excelentes: valoraciones del profesorado” puntualiza que la idea del docente transformador está caracterizada en todas las etapas educativas, desde la educación infantil hasta el bachillerato. Esta visión transformadora, complementa su definición con el término idoneidad en las etapas superiores, justificada de algún modo por la diferenciación sociocultural que se hace de ambas etapas. La identidad personal y la identidad profesional nos lleva a configurar nuestras líneas pedagógicas y nuestro papel como profesores, teniendo en cuenta todos aquellos modelos que influyeron en el proceso y cambiando aquellos aspectos que no consideramos correcto.

También, Muñoz (2020) trabajó el tema de las “Relación entre competencias docentes y liderazgo de los estudiantes”, aclarando que el docente es un especialista en algunas materias y su objetivo es la enseñanza de los conocimientos disciplinares a los alumnos. El proceso formativo de los profesores está interrelacionado con el manejo de la temática y los conocimientos que transmite. Lo importante es que los profesores tengan conocimientos sólidos sobre los cursos dictados; en la perspectiva de la formación docente se acentúa el conocimiento sólido de la materia de enseñanza, dando significatividad prioritaria a la disciplinariedad.

En este sentido, Acevedo (2020) realizó el estudio “Fortalecimiento de competencias laborales en la formación profesional de psicólogos de una universidad privada de Bucaramanga”, aquí se puntualizó que las competencias se han considerado desde el desempeño, relacionándolas con la probabilidad que tiene una persona para ser productivo en un contexto específico; de forma que el concepto no se construye desde la inteligencia, ya que reconoce que no solo se trata de la mente en acción, sino a la forma de enfocar la realidad a través del cuerpo, mente y emociones, que permite realizar una acción real en un tiempo y lugar concretos. Las competencias pueden desarrollar el potencial de las personas a través de características fundamentales como aprender a conocer, cultura general y conocimientos específicos; aprender a hacer, competencias que capaciten al individuo para enfrentar un gran número de situaciones.

Igualmente, Flores (2020) desarrolló el estudio “Las competencias docentes y la calidad de los procesos educativos en los estudiantes de la opción ocupacional de operación de computadoras” en donde estableció que referirse a las competencias es entender que esto se viene discutiendo ya hace mucho tiempo atrás, desde los años setenta se observan en trabajos de investigación que ponen en agenda el tema en mención. Sin embargo, es necesario mencionar que el término fue evolucionando y adecuándose a la necesidad de las profesiones, especialmente de aquellas que se ven involucradas en el proceso de enseñanza y aprendizaje.

 

 

CONCLUSIONES

La competencia docente es un constructo que pretende explicar las distintas habilidades y capacidades que pueden mostrar los docentes en el ejercicio de su labor y que deben tener como resultado el aprendizaje de sus alumnos. Pueden ser consideradas como el conjunto de conocimientos, actitudes, valores, experticia, este conjunto de saberes tipifican a un docente como tal en el ejercicio de la labor docente.

Estas competencias son una serie de conocimientos, habilidades, actitudes y valores requeridos para efectuar una docencia de calidad, es decir que provoque aprendizajes sobresalientes y que sean perdurables en el tiempo, los profesores deben saber y hacer diversas estrategias para afrontar de manera satisfactoria los dilemas que le presenta la enseñanza, el rol docente se encuadra en un enfoque sistémico e interdisciplinario, donde la docencia, la investigación, su saber, saber hacer y querer hacer constituyen la actividad educativa.

Por lo tanto, las competencias docentes están vinculadas con las habilidades requeridas para realizar el quehacer pedagógico de un modo pertinente, por lo tanto, no es adecuado afirmar que un educador es competente solo en la mediada de poseer determinados conocimientos sobre un área o asignatura especifica que haga parte de la malla curricular, sino que es indispensable considerar las distintas maneras en las que se pone en práctica este conocimiento mediado por las particularidades del contexto.

Cuando se hace referencia a las competencias laboral de los docentes es necesario comprender las habilidades y destrezas de cada ser humano aplicadas al campo laboral, así mismo, es importante el grado de motivación con las actividades relacionadas con el proceso académico considerando su elemento social, debido a ello, es necesario que el educador desempeñe un rol activo en la gestión de los componentes externos e internos que inciden en los procesos formativos, optimizando los aprendizajes obtenidos por cada estudiante (Regalado, 2020). Lo anterior es importante considerando que el conocimiento que alcance cada educando se constituye en uno de los componentes esenciales que ayudan a establecer el rendimiento del docente ligado a los elementos cognoscitivos y comportamentales que ayuden a un desarrollo individual e institucional.

Los educadores y el proceso escolar que estos dirigen están orientados a desarrollar y fomentar las competencias indispensables para que los alumnos alcancen los objetivos educacionales y las capacidades necesarias para afrontar los distintos retos que les traiga la cotidianeidad, en concordancia con los requerimientos de la sociedad moderna, la cual se mantiene en transformación permanente. De este modo, para que el docente tenga un rendimiento satisfactorio debe orientar su quehacer pedagógico hacia las competencias, asumidas como la habilidad para saber hacer, superar las dificultades que surjan en el camino y darles un manejo pertinente a los conocimientos específicos de cada asignatura.

Las competencias que debe tener y fomentar el docente considerando lo fundamental de su práctica profesional, ya que tiene la función de dirigir el proceso formativo tanto cognitivo como conductual y disciplinar, por ello, es necesario utilicen todas las herramientas estructurales y tecnológicas que tengan a su disposición, que involucren a los acudientes en el desarrollo del proceso académico, el cuan debe enfocarse en que los estudiantes construyan y promuevan valores como el respeto, el compañerismo, solidaridad, generosidad, compromiso, entre otros y que aprendan a reflexionar, cuestionar, interpretar y entender los distintos conocimientos que se abordan en el desarrollo de las clases.

Entonces, es indispensable considerar que los procesos pedagógicos van de la mano con la gestión que es un aspecto fundamental para el logro del horizonte institucional en lo cual la labor de equipo cumple un importante papel en la implementación y desarrollo de las políticas educativas trazadas desde el nivel central, lo cual se sustenta en la importancia que ostenta el currículo como medio de reproducción social, es el elemento del cual se sirven los grupos de poder o el aparato estatal en algunos casos para modelar la sociedad.

LISTA DE REFERENCIAS

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[1] Autor Principal