Impacto Causado por el Covid-19 en Diversas Variables Sociales a Nivel Mundial

 

Celene Margarita Romero Haddad[1]

celenehaddad1620@gmail.com

celene.romeroh@campusucc.edu.co

https://orcid.org/0000-0002-4560-6263

Docente más de 8 años

en los programas de Contaduría Pública y

Administración de Empresas.

Universidad Cooperativa de Colombia

 

Carlos Antonio Lozano Fariño[2]

fariocarlos@gmail.com

Carlos.lozanof@campusucc.edu.co

https://orcid.org/0000-0002-8368-4529

Docente más de 9 años

en los programas de Contaduría Pública y

Administración de Empresas.

Universidad Cooperativa de Colombia

 

Ana María Calvo Carrillo[3]

anamariacalvo31@gmail.com

ana.calvoc@campusucc.edu.co 

https://orcid.org/0000-0001-9356-6764

Docente más de 9 años

en los programas de Contaduría Pública y

Administración de Empresas.

Universidad Cooperativa de Colombia

 

Guillermo David Ruiz Padilla[4]

guilloruiz10@gmail.com

guillermo.ruizp@campusucc.edu.co

https://orcid.org/0000-0001-7772-2958

Profesor con más de seis (6) años

en los programas de Derecho

y Administración de Empresas.

Universidad Cooperativa de Colombia

 

Licet Paola Rubio Cano [5]

licetrubio27@gmail.com

Licet.rubioc@campusucc.edu.co

https://orcid.org/0000-0002-7716-755X

Docente, 8 años

con el programa de psicología y 1 año

con el programa de administración de empresas.

Universidad Cooperativa De Colombia

 

 

 

 

RESUMEN

El presente artículo parte de los resultados del proyecto de investigación: “Impacto del confinamiento provocado por el Covid-19 en los aspectos económicos y sociales de las familias del Departamento de Córdoba, Colombia” pretende hacer una reflexión sobre el impacto de la pandemia de Covid-19 en diversas variables sociales a nivel mundial; a través de una búsqueda de documentos originales, principalmente en la base de datos SCOPUS. Entre los resultados se tiene que el brote de la pandemia ha afectado la salud física y mental, el empleo, la economía, la educación y la vida social de las personas en todo el mundo; además, la pandemia ha exacerbado las desigualdades existentes en muchos países, incluyendo la desigualdad de género, la pobreza y la exclusión social. En conclusión, los efectos de la pandemia han sido más graves en países con sistemas de salud débiles y en aquellos con altos niveles de desigualdad social, la literatura también destaca la importancia de abordar los desafíos sociales y económicos asociados con la pandemia para mitigar su impacto a largo plazo.

 

Palabras clave: pandemia covid-19; empleo; educación; salud mental y bienestar; impacto social.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Impact Caused by Covid-19 on Various Social Variables Worldwide

 

ABSTRACT

This article is part of the results of the research project: "Impact of the confinement caused by Covid-19 on the economic and social aspects of families in the Department of Córdoba, Colombia", which aims to reflect on the impact of the Covid-19 pandemic on various social variables worldwide; through a search of original documents, mainly in the SCOPUS database. Among the results is that the outbreak of the pandemic has affected the physical and mental health, employment, economy, education and social life of people around the world; in addition, the pandemic has exacerbated existing inequalities in many countries, including gender inequality, poverty and social exclusion. In conclusion, the effects of the pandemic have been most severe in countries with weak health systems and in those with high levels of social inequality, the literature also highlights the importance of addressing the social and economic challenges associated with the pandemic to mitigate its long-term impact.

 

Key words: pandemic covid-19; employment; education; mental health and welfare; social impact.

 

 

 

 

Artículo recibido 20 agosto 2023

Aceptado para publicación: 26 setiembre 2023


INTRODUCCIÓN

La pandemia de COVID-19 ha tenido un gran impacto en las variables sociales a nivel mundial, incluyendo la salud mental, la educación, el empleo, las desigualdades y el comportamiento sociales. A medida que el mundo continúa lidiando con la pandemia, será importante seguir monitoreando estos impactos y tomar medidas para abordar las desigualdades y ayudar a las personas a recuperarse. Entre los aspectos más destacados se tiene:

La salud mental que ha tenido un gran impacto en las personas en todo el mundo; el aislamiento social, la incertidumbre y la preocupación por la salud han aumentado los niveles de ansiedad, depresión y estrés en muchas personas. Los informes sugieren que el impacto ha sido particularmente duro en grupos vulnerables como los trabajadores de la salud, las personas mayores y las personas con trastornos de salud mental preexistentes. Las personas sufren sentimientos de angustia, ira, provocando conflictos familiares que han aumentado hechos violentos, mucho trabajo a través de la web, sentimientos de soledad, entre otros. Por su parte quienes enfrentan problemas cognitivos, educativos y económicos son más vulnerables, especialmente si ya están en situaciones precarias debido a la informalidad laboral, la falta de empleo, la discriminación social, la raza o la orientación sexual. Por lo tanto, es crucial abordar estos problemas considerando múltiples riesgos, como el riesgo de contagio, de desempleo, la falta de acceso a atención médica y saneamiento básico, y otras amenazas ambientales que pueden empeorar aún más la situación. (UNESCO 2020).

En 2020, encuestas realizadas en todo el mundo confirmaron que la pandemia de COVID-19 ha tenido un impacto significativo en la sociedad y revelaron que una gran cantidad de personas experimentaron angustia durante su surgimiento. Se encontraron porcentajes elevados de angustia en varios países, incluyendo un 60% en Irán, un 45% en los Estados Unidos y un 35% en la República China, donde se originó el virus.

En cuanto a la escolarización, se interrumpió la educación de millones de estudiantes en todo el mundo. El cierre de escuelas y universidades ha afectado especialmente a los más pobres y vulnerables, muchos de los cuales no tienen acceso a la tecnología necesaria para el aprendizaje en línea. Además, la interrupción de la educación también puede tener un impacto a largo plazo en la economía y el desarrollo social.

En materia de empleo, muchas empresas han cerrado temporalmente o han reducido sus operaciones, lo que ha llevado a despidos masivos y pérdidas de empleos. Los trabajadores informales y aquellos en trabajos de bajos ingresos han sido especialmente afectados. Además, la pandemia ha aumentado la precariedad laboral y la desigualdad salarial en muchas partes del mundo. Todo ello ha desencadenado un aumento de las desigualdades sociales; La pandemia ha puesto en relieve esta situación en todo el mundo; entre los grupos más vulnerables están las personas mayores, las personas con discapacidades, los trabajadores informales y los pobres quienes han sufrido de manera desproporcionada; además, las desigualdades de género también se han agravado, con las mujeres siendo afectadas de manera desproporcionada en el trabajo y en el hogar.

También cambio en el comportamiento social; La pandemia ha llevado a cambios significativos como el distanciamiento social, el uso de mascarillas y la higiene frecuente de las manos se han convertido en la norma. Además, muchas personas han cambiado sus hábitos de consumo y han empezado a valorar más las relaciones personales y las experiencias locales.

El COVID ha impactado en muchos escenarios no sólo los sociales como, por ejemplo; en la economía, política, cultura, entre otros. Un sinnúmero de empresas desapareció ya que dejaron de producir porque su actividad económica se hacía de forma presencial, otros con la comercialización de bienes que son demandados por gustos y preferencias del consumidor, todo esto ha detenido el crecimiento económico mundial, en Colombia el producto interno bruto llegó a un -6.8% en el último trimestre del 2020 y el desempleo tuvo una cifra desalentadora de 14.2% en el primer trimestre 2021; según el (DANE 2021).

Esta reflexión se realiza con el fin de analizar los factores sociales más impactados por la cuarentena causado por el Covid-19. Este análisis es pertinente y aporta una base para que los gobiernos tanto locales como globales y entidades privadas puedan diseñar políticas públicas o implementar acciones para mitigar la situación y establecer un plan de acción para reducir el impacto que dejó la crisis, la cual ha aumentado los problemas sociales.

MATERIALES Y MÉTODOS

Este artículo muestra una relación entre los resultados de una investigación terminada, donde a través de una encuesta se identificaron diferentes factores económicos y sociales, para este artículo se analizaron sólo variables sociales como; la ansiedad, depresión, relaciones personales, vida social y salud mental, en este último caso se diseña la herramienta  teniendo en cuenta la escala de autoevaluación para la depresión de Zung (SDS), la herramienta se aplicó a una muestra de 219 personas en el departamento de Córdoba, Colombia.

Por otra parte, se analizaron fuentes originales a través de la investigación de tipo documental donde se realizó la búsqueda en tres etapas: planear, desarrollar y publicar los resultados, para hacer una reflexión entre los resultados de la investigación hecha en el departamento de Córdoba y las investigaciones encontradas a nivel mundial; A continuación, se observa y se describe el método utilizado para ello en las tablas 1 y 2.

Tabla 1.

Mostrar los resultados de la investigación terminada.

Etapa 1

Resultados

§  Mostrar los resultados más relevantes en el ámbito social encontrados con la aplicación de la herramienta. (Encuesta)

Etapa 2

Análisis

§  Se analizan los resultados para determinar las conclusiones más relevantes.

Nota. La tabla muestra el método para mostrar los resultados de la investigación desarrollada por los autores.

Fuente: Elaboración propia.

 

Tabla 2.

Etapas de la búsqueda según (Kitchenham, 2004)

ETAPAS

ACCIONES

 

Etapa 1: Planear

Se planea la búsqueda de la información, utilizando como principal fuente la base de datos SCOPUS, así mismo se tomaron datos de sitios oficiales como UNESCO, ONU y DANE.

Etapa 2: Desarrollo

Se realiza la búsqueda de acuerdo con los filtros señalados.

Etapa 3: Divulgación

Se realiza el artículo para divulgación.

Nota. La tabla muestra las etapas y que acciones se desarrollan para realizar búsqueda de información original según (Kitchenham, 2004). Fuente: Elaboración propia.

 

RESULTADOS

Parte de los resultados obtenidos en la investigación desarrollada a una muestra de 219 personas en el departamento de Córdoba, Colombia, muestra un impacto significativo en algunas variables sociales analizadas, las siguientes son las preguntas relacionadas con factores como ansiedad, depresión, relaciones personales, vida social y salud mental, donde podemos ver el grado de impacto que ocasionó el Covid-19 en la vida de los habitantes de esta región del caribe Colombiano; en el gráfico 1 y 2 vemos que los niveles de ansiedad y depresión han incrementado sustancialmente en 65.3% y 48.9% respectivamente, lo que refleja que más de la mitad de la población está padeciendo estos trastornos producto de la pandemia y sus secuelas, estos resultados se relacionan con información encontrada en otros continentes como África en donde se evidenció altos niveles de estrés en la población estudiada, en este caso producto de las informaciones que recibían en diferentes medios de comunicación sobre lo que estaba pasando con la pandemia (Osuagwu et al., 2023).

Gráfico 1

Pregunta sobre ansiedad

Nota. El gráfico muestra los resultados a la pregunta relacionada con la variable ansiedad.

Fuente: Elaboración propia.

 

Gráfico 2

Pregunta sobre depresión

Nota. El gráfico muestra los resultados a la pregunta relacionada con la variable depresión.

Fuente: Elaboración propia.

 

 

En cuanto a las variables relaciones personales, vida social y salud mental, tenemos que la tercera parte de la población ha visto afectada sus relaciones personales, lo que se evidencia en el 57.5% que afirman que la pandemia impactó negativamente en su vida social, esto a su vez ha generado incremento en padecimientos de salud mental en el mismo porcentaje prácticamente con un 55.2%. Ver gráficas 3,4 y5

Gráfico 3

Pregunta sobre relaciones personales.

Gráfico, Gráfico circular

Descripción generada automáticamente

Nota. El gráfico muestra los resultados a la pregunta relacionada con la variable relaciones personales.

Fuente: Elaboración propia.

 

Gráfico 4

Pregunta sobre la variable vida social.

Gráfico, Gráfico circular

Descripción generada automáticamente

Nota. El gráfico muestra los resultados a la pregunta relacionada con la variable vida social.

Fuente: Elaboración propia.

 

Gráfico 5

Pregunta sobre la variable salud mental.

Gráfico, Gráfico circular

Descripción generada automáticamente

Nota. El gráfico muestra los resultados a la pregunta relacionada con la variable salud mental.

Fuente: Elaboración propia.

 

Teniendo en cuenta algunos de los autores más citados en SCOPUS, analizamos los estudios realizados por ellos para conocer la dimensión de la crisis en la población mundial. Ver gráfico 6.

Gráfico 6

Mapa factorial de los documentos más citados

Nota. La gráfica muestra el mapa con los documentos más citados sobre el tema estudiado.

Fuente: Elaboración propia con la base de datos SCOPUS.

 

En primer lugar tenemos que (Osuagwu et al., 2023), hizo un estudio en África de corte transversal a 2572 participantes adultos mayores de 18 años, analizando más que todo el factor de indecisión ante el uso o no de la vacuna contra el Covid-19, con las variables de correlación ( lectores de periódicos, usuarios de tv, de redes sociales, entre otros), donde la prevalencia a la indecisión se encontró en los usuarios de tv y de redes sociales con un 72% y 73% respectivamente, lo que se demuestra con los resultados de vacunación muy bajos en el continente africano con solo el 11% de adultos vacunados, se tiene que la población está bastante preocupada con la información difundida en los medios digitales, hoy día se habla de otra pandemia, la infodemia; que afecta la indecisión y la resistencia a las vacunas, por lo que se halló una relación significativa entre el estado de vacunación de los participantes y su dependencia a los medios sociales, todo esto indica altos niveles de estrés por la información recibida.

Además, la pandemia mundial de coronavirus (COVID-19) ha tenido un impacto significativo en las actividades sociales de las personas. (Zhang et al., 2023) hizo un estudio para comprender la variación en los patrones de movilidad humana y las respuestas a las intervenciones políticas, en el espacio y en el tiempo, como una cuestión fundamental en las políticas de salud pública y comportamiento social. El estudio se hace con datos de movilidad de los teléfonos móviles que proporcionan una información única y rica para estudiar este impacto. El conjunto de datos de este estudio son el índice diario de abandono del hogar en Texas USA, proporcionados por SafeGraph, empresa que recopila datos de trayectorias GPS de dispositivos móviles en USA. Para el estudio sobre estos cambios en el índice diario de abandono del hogar y su relación con las políticas públicas y las variables sociodemográficas, se realizó a través del modelo bayesiano de ondículas para modelar y agrupar datos funcionales espaciales, se propone un algoritmo de Monte Carlo de cadena de Markov de salto reversible a medida para implementar el modelo. El método se aplica a los datos funcionales espaciales de los porcentajes diarios de personas que salieron de casa. Nos centramos en el periodo de tiempo que abarca tanto el cierre como la reapertura gradual en Texas durante la pandemia COVID-19 y se estudiaron los comportamientos que varían en esas curvas funcionales. Al vincular los resultados de la agrupación con la información sociodemográfica, identificamos varias covariables de los bloques censales que tienen un impacto notable en los patrones de agrupación de los comportamientos de movilidad de las personas, con esto se demostró que con la pandemia se generaron nuevos comportamientos sociales entre los cuales está el de la movilidad de las personas de sus hogares. En Texas, el impacto de COVID-19 en la movilidad ha variado según la ubicación geográfica y la densidad poblacional. Las áreas metropolitanas más grandes, como Houston, Austin, Dallas y San Antonio, han experimentado una disminución en los viajes diarios en automóvil, mientras que las zonas rurales han visto un impacto menor.

Con la pandemia ha habido un aumento en la popularidad de los modos de transporte no motorizados, como caminar y andar en bicicleta, ya que muchas personas han buscado formas de mantenerse activas mientras mantienen el distanciamiento social. También ha habido un aumento en el uso de vehículos personales, como automóviles y motocicletas, ya que muchas personas han optado por evitar el transporte público.

En general, la pandemia ha tenido un impacto significativo en las rutinas de movilidad de las personas en Texas y en todo el mundo, y es probable que algunos de estos cambios perduren a largo plazo.

Principio del formulario

Por su parte (dos Santos Alves María et al., 2023) a través de una herramienta compuesta por preguntas anónimas que indagaban sobre las variables como sexo, género, edad, tipo de trabajo, antecedentes psiquiátricos, grado de estudios, estado civil y 2 instrumentos específicos, la Escala de Sueño de Jenkins (JSS) y el Inventario Breve de Síntomas (BSI) e hizo un análisis transversal, buscando primero evaluar si las covariables incluidas en el cuestionario influían en el patrón de sueño de los sujetos estudiados; se midió mediante el JSS, que consta de 4 preguntas, cada una de las cuales se aproxima a la frecuencia con la que el encuestado sintió diferentes síntomas del sueño, lo que da lugar a puntuaciones mayores para una mayor angustia del sueño. Entre tanto el BSI que es un inventario de autoinforme de 53 ítems diseñado para evaluar el malestar psicológico y los síntomas psicopatológicos a través de nueve dimensiones (Somatización, Obsesión-Compulsión, Sensibilidad Interpersonal, Depresión, Ansiedad, Hostilidad, Ansiedad Fóbica, Ideación Paranoide, Psicoticismo) y un Índice de Gravedad Global (GSI), que representa la suma de todos los demás ítems. Cada dimensión se cuantificó mediante una escala de Likert de 0 a 4, que va de "en absoluto" a "extremadamente" y está diseñado para una edad mínima de 13 años, comprendiendo el público objetivo de este estudio, y su estructura interna fue verificada para la población brasileña durante la pandemia de COVID-19.

Entre los resultados del anterior estudio se obtuvo que, el diagnóstico previo de insomnio fue el mayor predictor de patrones de sueño deficientes, mientras que se comprobó que otras covariables clínicas (como la educación y el estado civil) no tenían correlación con ellos, aunque otras como el sexo y las características profesionales se correlacionaron con diferencias en las puntuaciones JSS en el análisis transversal, sólo las personas con enfermedad mental previa se les asoció con un mayor riesgo de sufrir insomnio durante la pandemia.

En el análisis longitudinal, el único factor de riesgo encontrado para el desarrollo de insomnio en los TCH fue el diagnóstico previo de una enfermedad mental, especialmente adicción, TDAH y trastornos de ansiedad y del estado de ánimo. La edad, el sexo, la educación y el estado civil no fueron factores de riesgo relevantes. Estos resultados se corresponden con estudios previos que han relacionado las alteraciones del sueño con otras enfermedades psiquiátricas. Tras discriminar los diferentes diagnósticos previos de enfermedades mentales, se encontró que los individuos con adicción tenían un mayor riesgo de desarrollar insomnio, seguidos de aquellos con TAG, ansiedad social, trastorno bipolar, TDAH y depresión.

Teniendo en cuenta las características estresantes del momento y la alteración de la atención sanitaria y específicamente psiquiátrica, es razonable suponer una posibilidad de empeoramiento de los síntomas del trastorno psiquiátrico previamente diagnosticado. El predominio de los trastornos de ansiedad y del estado de ánimo en la lista de comorbilidades puede indicar un solapamiento de la patogénesis entre ellos y el insomnio, aunque sigue sin estar clara una relación causal. A pesar de que el diagnóstico previo de adicción es el factor de riesgo más importante para el desarrollo del insomnio, este estudio prospecta, pero no detalla la sustancia de la adicción.

Todo el mapa temático estudiado con respecto al tema del covid-19 ( Ver Gráfico 7), también evidencia el impacto de este virus en muchos factores sociales; según la (Inter Agency Standing Committee (IASC), 2020) la crisis del COVID-19 ha tenido un impacto significativo en la economía global y ha llevado a la pérdida de empleos y la reducción de los ingresos en muchos países, incluyendo Colombia. La falta de empleo y los problemas financieros asociados con la pandemia pueden ser un factor importante en la aparición de problemas de salud mental en los colombianos.

La pérdida de empleo puede generar altos niveles de estrés, ansiedad y depresión. La incertidumbre económica y la preocupación por la seguridad financiera pueden ser factores importantes en la aparición de problemas de salud mental en las personas que han perdido su trabajo o han visto reducidos sus ingresos.

Además, la pérdida de empleo puede afectar la autoestima y la identidad de las personas, lo que puede contribuir a la depresión y la ansiedad. Las personas que han perdido su trabajo también pueden experimentar sentimientos de aislamiento social y desconexión de la comunidad, lo que puede aumentar el riesgo de problemas de salud mental.

La falta de empleo también puede afectar la capacidad de las personas para acceder a los servicios de salud mental, ya que los costos pueden ser prohibitivos sin un seguro de salud o una fuente de ingresos estable.

 

 

 

 

 

 

Gráfico 7

Mapa temático

Diagrama

Descripción generada automáticamente con confianza media

Nota. La gráfica muestra el mapa temático del tema estudiado.

Fuente: Elaboración propia con la base de datos SCOPUS.

 

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha publicado un informe relevante sobre el COVID-19 en 2020 que se enfocó en la respuesta mundial a la pandemia. El informe destacó la necesidad de una respuesta global coordinada y basada en la ciencia para enfrentar la pandemia del COVID-19. Se hizo hincapié en la importancia de la detección temprana de casos, el rastreo de contactos, el aislamiento de los casos y la cuarentena de los contactos para contener la propagación del virus.

El informe también enfatizó la importancia de una respuesta equitativa y sostenible al COVID-19, especialmente en los países con sistemas de salud más débiles y en los grupos de población más vulnerables. Se recomendó el fortalecimiento de los sistemas de salud para responder al COVID-19 y para garantizar la continuidad de los servicios esenciales de salud.

Además, se destacó la importancia de la investigación y el desarrollo de vacunas, terapias y diagnósticos para combatir el COVID-19. Se instó a la cooperación internacional y la solidaridad para apoyar la investigación y el desarrollo y para garantizar el acceso equitativo a las herramientas de diagnóstico, tratamiento y prevención del COVID-19.

En resumen, se destacó la necesidad de una respuesta global coordinada y basada en la ciencia para enfrentar la pandemia, la importancia de una respuesta equitativa y sostenible, el fortalecimiento de los sistemas de salud, la investigación y el desarrollo de herramientas de diagnóstico, tratamiento y prevención, y la necesidad de cooperación internacional y solidaridad.

Por su parte (Lozano-Vargas, 2020) afirman que las personas encargadas de la salud han estado en la primera línea de la lucha contra la pandemia del COVID-19 y han enfrentado numerosos desafíos y problemas durante la crisis. Algunos de los problemas más comunes que han experimentado incluyen: Mayor riesgo de infección, escasez de suministros, sobrecarga de trabajo, impacto emocional incluyendo estrés, ansiedad y depresión. La exposición a pacientes enfermos y la preocupación por la seguridad de sus propias familias y comunidades también ha sido un factor estresante para los trabajadores de la salud, problemas sociales como la discriminación y el estigma relacionados con la exposición al COVID-19.

Otro factor que influye en el detrimento de la salud mental es el miedo, que, aunque es una emoción normal y natural que puede ayudarnos a protegernos de situaciones peligrosas, cuando se vuelve excesivo o prolongado, puede tener efectos negativos en la salud mental y física de una persona. Durante la pandemia del COVID-19, el miedo ha sido una emoción común entre muchas personas y ha contribuido al detrimento de la salud mental de varias maneras; puede aumentar la ansiedad, y ésta puede afectar negativamente la calidad del sueño, la capacidad de concentración y el rendimiento en el trabajo o la escuela, también el miedo prolongado también puede contribuir al desarrollo de la depresión, que se caracteriza por sentimientos de tristeza, desesperanza y pérdida de interés en actividades que antes eran placenteras, puede aumentar los niveles de estrés, lo que puede tener efectos negativos en la salud física y mental, como presión arterial alta, enfermedades cardíacas, dolores de cabeza y problemas digestivos, también puede llevar a las personas a aislarse socialmente para evitar la exposición al virus y este a su vez puede tener efectos negativos en la salud mental, como sentimientos de soledad y depresión.Principio del formulario (Cabezas-Heredia et al., 2021).

Las condiciones del contexto, como el mercado laboral, la falta de ingresos, los bajos salarios, la inestabilidad laboral y el desempleo, pueden tener un impacto significativo en el bienestar psicológico de las personas y contribuir al aumento del estrés; por la incertidumbre económica, ya que la inseguridad en el mercado laboral y la falta de ingresos pueden generar preocupaciones acerca de cómo se cubrirán las necesidades básicas y cómo se cumplirán las obligaciones financieras, especialmente en situaciones en las que las personas no tienen un plan claro para manejar sus finanzas. La falta de reconocimiento y remuneración adecuada por el trabajo realizado, la inestabilidad laboral, la preocupación acerca de si tendrán trabajo en el futuro, si tendrán que cambiar de empleo y cómo se ajustarán a estos cambios, puede afectar el sentimiento de seguridad y la autoestima de las personas (Ferradás Canedo et al., 2021).

En Colombia, según (Ministerio de salud y protección social de Colombia., 2021) la salud mental de la población es uno de los principales desafíos, especialmente durante la pandemia de Covid-19 y el aislamiento social. Esto ha llevado a un aumento de hasta el 30% en las consultas por problemas de salud mental, principalmente por depresión, ansiedad y violencia. La depresión es uno de los trastornos que ha prevalecido durante la pandemia, y se caracteriza por una tristeza recurrente, falta de placer, sentimientos de culpa y baja autoestima. El Covid-19 ha agravado los síntomas depresivos al punto de paralizar a las personas y llevarlas al aislamiento social. Las mujeres tienen mayor probabilidad de presentar síntomas depresivos, pero aún falta apoyo y estrategias para ambos géneros. La ansiedad también se ha convertido en un trastorno emergente en la salud mental debido a la pandemia, ya que aparece como una respuesta natural frente a la incertidumbre y el temor. Los síntomas de la ansiedad pueden tornarse incontrolables y llevar a problemas físicos. En general, la pandemia ha generado múltiples desafíos para la salud mental de la población en diferentes países, lo que requiere intervenciones que promuevan la calma, la construcción de comunidad y la esperanza.Principio del formulario

La pandemia ha provocado depresión, una enfermedad mental que tiene múltiples causas, entre ellas el miedo a enfermarse o a perder a seres queridos. La información que se difunde a través de diversos medios sobre el coronavirus, como las cifras de contagios y muertes, así como la incertidumbre sobre la evolución de la enfermedad, ha aumentado el estrés y la depresión, afectando especialmente a las mujeres. Aunque las mujeres pueden manejar mejor el estrés relacionado con la pandemia que los hombres, el apoyo y las estrategias para ambos géneros aún son insuficientes. (Huarcaya-Victoria et al., 2022)

En relación con los estudios sobre la depresión durante la pandemia, un análisis realizado por (Prieto Molinari et al., 2020) y su equipo en Lima, Perú, concluye que el aislamiento obligatorio ha llevado a la depresión en adultos, que se presenta de diversas formas según las variables sociodemográficas. Además, según (Nicolini, 2020), para hacer frente a la depresión, es necesario contar con intervenciones que fomenten la tranquilidad, fomenten la comunidad y mantengan la esperanza. En cuanto a la salud mental de adultos jóvenes en Perú, Argentina y Colombia durante el aislamiento por Covid-19, se ha registrado una tasa de depresión del 29%, 22% y 12%, respectivamente, en participantes mayores de 10 años, según el estudio llevado a cabo por Uribe y su equipo.

La pandemia de Covid-19 ha generado un trastorno emergente en la salud mental conocido como ansiedad. Este trastorno se manifiesta de manera impredecible y abrupta frente a temores relacionados con lo desconocido o algo que no se puede controlar, lo que se ajusta a la situación actual. La incertidumbre acerca de la enfermedad, el miedo al contagio, la pérdida del empleo, la escasez de recursos financieros y los cambios en las dinámicas familiares pueden llevar a la ansiedad, que puede ser incontrolable y producir síntomas físicos. (Becerra & Becerra, 2020)

En relación con los estudios sobre ansiedad durante la pandemia de Covid-19, se realizó un análisis por la Organización Panamericana de La salud para revisar las tasas de ansiedad y depresión en la población general durante el confinamiento. Los resultados mostraron que el 25% de las personas dio positivo en la prueba de trastorno de ansiedad generalizada, además, la ansiedad fue más evidente en las personas con mayor riesgo de mortalidad. (OPS, 2022)

En Colombia, investigaciones de Profamilia en las primeras fases de la pandemia por Covid-19 mostraron que un 27% de la población expresó preocupaciones sobre la aparición de ansiedad y depresión durante el aislamiento. El 12% de las personas que se resisten a la situación de la pandemia reportó signos de nerviosismo, ansiedad o depresión. Mientras que el 73% de las personas que se adaptan a la situación manifestó haber experimentado eventos de nerviosismo, ansiedad o depresión (Ángela Cifuentes-Avellaneda et al., 2020). En general, se puede observar el impacto de la pandemia por Covid-19 en la salud mental de la población, lo que demuestra la necesidad de investigar y destacar estas consecuencias psicosociales y económicas para implementar medidas enfocadas en su tratamiento.

CONCLUSIONES

El alcance y la magnitud del impacto del covid-19 varían según el continente y el país. En Europa y América del Norte por ejemplo, las tasas de ansiedad y depresión han aumentado significativamente desde el inicio de la pandemia. Además, se han reportado mayores niveles de soledad y aislamiento social debido a las medidas de distanciamiento físico y las restricciones de viaje, aunque en América Latina, se han exacerbado las desigualdades socioeconómicas existentes, lo que ha llevado a mayores niveles de estrés y ansiedad. Además, la falta de acceso a la atención médica y los recursos adecuados ha agravado los problemas de salud mental en la región.

Por su parte en Asia y África, los efectos económicos de la pandemia han sido más pronunciados, lo que ha llevado a un aumento en la pobreza y el desempleo. Esto ha llevado a niveles significativos de estrés financiero y emocional en estas regiones.

Es posible que exista una correlación entre las variables de depresión, ansiedad y cambios en comportamientos debido al COVID-19, ya que el brote de la pandemia ha tenido un impacto significativo en la salud mental de muchas personas, ya que la pandemia ha creado un ambiente de incertidumbre, miedo y estrés que puede conducir a problemas de salud mental; muchas personas han experimentado cambios en su estilo de vida, como la implementación de medidas de distanciamiento social, el aumento de la preocupación por la salud personal y la de sus seres queridos, así como la interrupción de rutinas diarias.

La depresión y la ansiedad son problemas de salud mental comunes que pueden ser exacerbados por el estrés y la incertidumbre asociados con la pandemia. Los estudios han demostrado que las tasas de depresión y ansiedad han aumentado significativamente desde el inicio de la pandemia, además, los cambios en el comportamiento, como la reducción de actividades sociales y la implementación de medidas de distanciamiento social, pueden contribuir a la aparición de la depresión y la ansiedad.

En resumen, existe una alta posibilidad de correlación entre las variables de depresión, ansiedad y cambios en comportamientos debido al COVID-19. Sin embargo, la correlación puede variar según el contexto y las circunstancias individuales.

También vemos una correlación entre otras variables, como por ejemplo el estrés; que es una respuesta natural del cuerpo ante situaciones cambiantes y desconocidas y puede ser un factor contribuyente a los trastornos del sueño. La pandemia ha sido una fuente importante de estrés para muchas personas, ya sea por el miedo al contagio, la preocupación por la salud de los seres queridos, las dificultades financieras o la incertidumbre sobre el futuro.

La frecuencia de salidas a la calle puede estar relacionada con el nivel de exposición al COVID-19. Las personas que salen con mayor frecuencia pueden estar más expuestas al virus y, por lo tanto, pueden experimentar mayores niveles de estrés y preocupación. Además, la pandemia ha llevado a la implementación de medidas de distanciamiento social y confinamiento, lo que puede limitar la capacidad de las personas para salir a la calle y realizar actividades que antes les resultaban gratificantes, lo que puede afectar su bienestar emocional.

Los trastornos del sueño pueden estar relacionados con el estrés y la frecuencia de salidas a la calle. Las personas que experimentan altos niveles de estrés pueden tener dificultades para conciliar el sueño o mantenerlo durante la noche. Además, las interrupciones en la rutina diaria y la limitación de actividades pueden afectar la calidad del sueño y contribuir a los trastornos del sueño, esto a su vez repercute en su vida social y las relaciones con otras personas, ya que al experimentar estrés por miedo a contagios y la pérdida de la costumbre al salir y interactuar con otros hace que nuestros patrones de conducta también cambien y nuestra vida social sea diferente, la socialización en persona se ha vuelto cada vez menos común y aún cuando estamos en grupos vemos que las personas tienden a no desconectarse de sus celulares y las conversaciones no son tan fluidas.

En general, la pandemia ha tenido un impacto significativo en la salud mental y el bienestar en todo el mundo, pero la naturaleza exacta de este impacto ha variado según el continente y el país. Es importante reconocer que la pandemia ha afectado a las personas de manera desproporcionada según su situación socioeconómica, raza, género y otros factores, y que se necesitan respuestas adaptadas y equitativas para abordar estos desafíos de manera efectiva.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Ángela Cifuentes-Avellaneda, Danny Rivera-Montero, & Camila Vera-Gil. (2020). Informe 3. Ansiedad, depresión y miedo: impulsores de la mala salud mental durante el distanciamiento físico en Colombia.

Becerra, B., & Becerra, D. (2020). Ansiedad ante la muerte en adultos peruanos, durante la pandemia de la COVID-19. Revista Cubana de Enfermería, 36, 1–14.

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[1] Autor principal

Correspondencia: celenehaddad1620@gmail.com

Doctorante en Dirección de proyectos, Magister en administración de empresas, especialista en docencia virtual y especialista en recursos humanos; Diseñadora de aulas virtuales en Moodle, blackboard, Q10 académico, Brighspace, manejo de Teams, Zoom, Google Meet, diseño páginas web y blogs. Nivel de inglés Reading B2, certificado ITEP. Profesora Investigadora del programa de Administración de empresas de la Universidad Cooperativa de Colombia (Colombia).

[2] Administrador de empresas de la Universidad Luis Amigó de Medellín Colombia; Profesional en Mercadeo y publicidad de la Universidad Remington de Medellín Colombia; Licenciado en Matemáticas y Física de la universidad de Córdoba de Montería Colombia; Especialista en Gerencia administrativa de la salud de la universidad de Córdoba Montería Colombia; Magister en Educación de la Universidad de oriente de Rio Negro Antioquia Colombia y Estudiante de Doctorado en Administración Estratégica Empresarial de la universidad Utel de México. Investigador perteneciente al grupo de investigación GIPE con semilleros de investigación ZENÚ de la Universidad Cooperativa de Colombia. 

[3] Magister en Administración, Universidad Pontificia Bolivariana (Colombia), Especialista en Gerencia del Talento Humano, Universidad Pontificia Bolivariana (Colombia), Administrador de Empresas, Universidad Pontificia Bolivariana (Colombia), Profesora Investigadora del programa de Administración de empresas de la Universidad Cooperativa de Colombia (Colombia). 

[4] Economista titulado de la Universidad del Sinú Elias Bechara Zainúm; Especialista en Gerencia Empresarial – Universidad de Córdoba; Magister en Administración de Negocios con énfasis en finanzas empresariales – Universidad Metropolitana de Ciencia y Tecnología de Panamá.

[5] Psicóloga, titulo otorgado por la Universidad Cooperativa de Colombia, Especialista en Gerencia del Talento Humano- Universidad Pontificia Bolivariana – Especialista en Gerencia Informática – Corporación Universitaria Remington – Magister en Prevención de Riesgos Laborales _ Universidad Internacional de la Rioja España.