Pielonefritis Enfisematosa
con Choque Séptico y Coagulación Intravascular Diseminada: Reporte de Caso y Revisión
de Literatura
RESUMEN
Introducción: La pielonefritis enfisematosa es una presentación
grave de las infecciones del tracto urinario secundaria a microorganismos
productores de gas, considerada una entidad rara, de difícil diagnóstico y
asociada a una alta mortalidad sin tratamiento oportuno. Metodología:
Se realizó revisión de la literatura relacionada, identificando el impacto de esta
entidad en la sobrevida de los pacientes, así como recomendaciones actuales
sobre el correcto abordaje diagnóstico y terapéutico. Caso Clínico:
Se trata de paciente femenina con antecedente médico de diabetes mellitus tipo
2, con mal apego terapéutico, en la cual se estableció el diagnóstico de
pielonefritis enfisematosa unilateral izquierda complicada con cetoacidosis
diabética moderada, coagulación intravascular diseminada y choque séptico, la
cual posterior a tratamiento médico y quirúrgico es egresada deambulando por
medios propios. Conclusión: La presentación clínica inespecífica de pielonefritis
enfisematosa acompañada a su rápida evolución al estado de choque lleva a
retraso en el diagnóstico y tratamiento, el cual está asociado en gran medida a
desenlaces adversos, destacando el caso presentado, que requirió nefrectomía de
urgencia e ingresar a unidad de cuidados intensivos para sobrevivir a esta
entidad.
Palabras clave: pielonefritis;
diabetes mellitus; choque séptico; nefrectomía; reporte de caso
Emphysematous Pyelonephritis with Septic
Shock and Disseminated Intravascular Coagulation: Case Report and Literature
Review
ABSTRACT
Introduction: Emphysematous
pyelonephritis is a serious presentation of urinary tract infections secondary
to gas-producing microorganisms, considered a rare entity, difficult to
diagnose and associated with high mortality without timely treatment. Methodology:
A review of the related literature was carried out, identifying the impact of
this entity on patient survival, as well as current recommendations on the
correct diagnostic and therapeutic approach. Clinical Case: This is a
female patient with a medical history of type 2 diabetes mellitus, with poor
therapeutic adherence, in which the diagnosis of left unilateral emphysematous
pyelonephritis complicated with moderate diabetic ketoacidosis, disseminated
intravascular coagulation and severe septic shock was established, which after
medical and surgical treatment, she is discharged walking on her own. Conclusion:
The nonspecific clinical presentation of emphysematous pyelonephritis
accompanied by its rapid evolution to a state of shock leads to a delay in
diagnosis and treatment, which is largely associated with adverse outcomes,
highlighting the case presented, which required emergency nephrectomy and
hospitalization to the intensive care unit to survive this entity.
Keywords: pyelonephritis; diabetes mellitus; septic shock; nephrectomy; case report
Artículo recibido 14 setiembre 2023
Aceptado para publicación: 25
octubre 2023
INTRODUCCIÓN
La pielonefritis enfisematosa
es una presentación grave de las infecciones del tracto urinario caracterizada
por la presencia y producción de gas en el parénquima renal, el sistema
colector y/o el tejido perirrenal (Almeida, 2020), considerada como una entidad
rara, de difícil diagnóstico y asociada a una alta mortalidad sin tratamiento
oportuno (Chávez, 2007).
Existen múltiples factores de
riesgo para desarrollar la infección, siendo la presencia de diabetes mellitus
la más sobresaliente, además de otras causas de inmunosupresión (Turney,
2000), pielonefritis crónica, uropatía obstructiva y factores externos como
traumatismos o posterior a procedimientos invasivos de la vía urinaria (Chávez, 2007).
El patógeno más frecuentemente
aislado en cultivos es Escherichia
coli (Sarvpreet Singh Ubee, 2010), seguido por Klebsiella pneumoniae, Proteus, Bacteroides fragilis
y Clostridium sp, al
igual que agentes fúngicos como Candida, Aspergillus y Cryptococcus (Wamsley, 2023). Algunos de estos microorganismos,
como el bacilo de Escherichia
coli, son anaerobios
facultativos que pueden crecer con facilidad en un medio carente de oxígeno,
sobre todo si los tejidos tienen altas concentraciones de glucosa, por lo que
al crecer en tejidos necróticos e hipoperfundidos, producen la fermentación
ácida mixta de la glucosa dando lugar a la producción de hidrógeno y CO2 (Ramón Peces, 2007)
Se debe sospechar
principalmente en pacientes con sintomatología urinaria que presentan sepsis
grave con antecedentes de riesgo (Olvera-Posada, 2013), además de otras
manifestaciones inespecíficas como fiebre, dolor en flancos, náuseas, vómitos,
alteración sensorial o insuficiencia renal aguda (Jamani, 2022).
Presentamos el reporte de un
caso de pielonefritis enfisematosa unilateral que a su llegada se manifiesta
con cetoacidosis diabética, posteriormente desarrollando coagulación
intravascular diseminada y choque séptico severo, evaluada por escala de NEWS
(National Early Warning Score) con alto riesgo y requerimiento de estancia en
cuidados intensivos; riesgo de muerte 50% con base en puntaje SOFA (Sepsis
related Organ Failure Assessment), aportando una revisión de la literatura
actual con el objetivo de incrementar su sospecha diagnóstica y brindar
tratamiento oportuno.
METODOLOGÍA
Se realizó revisión de la
literatura relacionada en bases de datos como Pubmed, Google Scholar y Elsevier,
analizando los datos más relevantes en torno a epidemiología, impacto,
abordaje, diagnóstico oportuno y tratamiento. La revisión final del caso fue
realizada por un especialista en medicina interna.
Se recibió autorización legal
para la revisión de la historia clínica por parte del paciente.
Caso clínico
Femenino de 52 años, recepcionista,
tabaquismo y alcoholismo negado. Antecedente de diabetes mellitus tipo 2 de 15
años de diagnóstico, tratamiento con metformina, con mal apego. Niega transfusiones,
otras comorbilidades, hospitalizaciones previas o historia reciente de
infección de vías urinarias.
Inició su padecimiento tres
días previos a su hospitalización con dolor abdominal tipo cólico de gran
intensidad, localizado en fosa ilíaca izquierda e irradiado de forma difusa
hacia el resto del abdomen, el cual cedía parcialmente con el uso de analgesicos
además, fiebre no cuantificada, sin predominio de horario y más de 15 episodios
de vómito de contenido gástrico, acudiendo a atención médica.
A su ingreso se recibe con
tendencia a la somnolencia, escala de coma de Glasgow 13 puntos, pálidez de tegumentos
y mucosas, hipotensión arterial, taquicardia, llenado capilar 6 segundos, taquipnea
con patrón respiratorio profundo y regular con pausas inspiratorias,
intolerancia a la vía oral, oliguria y fiebre de 39.5 grados centígrados.
Primeros estudios paraclínicos e
imagen: Dímero D 57’751 ng/mL, Fibrinógeno 0.9 g/L INR 1.4, Tiempo de
Protrombina 18 segundos, Leucocitos 13’600/µL, Neutrófilos 12’200/µL,
Hemoglobina 10.6 g/dL, Plaquetas 19’000/µL, Glucosa sérica 350 mg/dL, Urea 96
mg/dL, Creatinina 2.746mg/dL, Bilirrubina total 0.56 mg/dL PH 7.2, Pco2 48
mmHg, Po2 24 mmHg, Bicarbonato de sodio 17.3 mmol/L Exceso de base -7.9
mmol/L. Examen General de Orina Proteínas +++, Hemoglobina +++, Leucocitos
+++, Glucosa ++, Bacterias abundantes, Fosfatos amorfos abundantes. Tomografía
de abdomen simple (Figura 1) con hallazgos compatibles de cistitis y
pielonefritis izquierda enfisematosa.
Figura 1
Tomografía
de abdomen en cortes Axial (A) y Coronal (B) donde se observa riñón izquierdo
aumentado en sus dimensiones con la presencia de múltiples densidades de aire
en su interior que se extienden hasta el uréter ipsilateral, con estriación de
la grasa periférica asociada. En hueco pélvico vejiga pobremente distendida,
con presencia de sonda foley y múltiples densidades de aire.

Diagnóstico inicial: cetoacidosis
diabética moderada, lesión renal aguda AKIN 3, coagulación intravascular
diseminada y choque séptico secundario a pielonefritis enfisematosa. Escalas de
severidad: NEWS 17 puntos,
con alto riesgo y requerimiento de evaluacion por cuidados intensivos; SOFA 11 puntos, mortalidad >50%,
SAPS II 43 puntos, predicción de mortalidad del 30.6%. Tratamiento inicial con
soluciones cristaloides a 30 ml/kg, noradrenalina, insulina en infusión
continua, antibioticoterapia a base de Imipenem, transfusión de hemoderivados y
toma de urocultivo, valoración por servicio de urología y posterior colocación
de catéter doble JJ.
Durante evento quirúrgico se
documentaron meatos en herradura visualizando meato uretral izquierdo pálido
con abundantes natas de fibrina fácilmente sangrante y epitelio uretral
desvitalizado en su totalidad de su trayecto. Pasa a unidad de cuidados
intensivos (UCI) dependiente de ventilación mecánica invasiva.
Tomografía de abdomen simple
postquirúrgica reportó pérdida de morfología de riñón izquierdo con abundante
gas en sistema pielocalicial y presencia de catéter “JJ” con punta distal en
vejiga (Figura 2).
Figura 2
Tomografía
de abdomen en cortes Axial (A) y Coronal (B) donde se observa riñón izquierdo
con pérdida de su morfología y destrucción de su parénquima acompañado de
imagen de morfología ovalada y bordes mal definidos en el polo superior de
contenido heterogéneo con centro hipodenso alternado con gas, la cual mide 4 x
3 cm, observando también abundante gas en sistema pielocalicial en espacio
perirrenal y pararrenal anterior asociado a estimación de la grasa periférica.

Paraclínicos solicitados 5 días
posteriores a intervención quirúrgica: INR 0.9, Leucocitos 19’500/µL,
Neutrófilos 16’500/µL, Hemoglobina 8.7 g/dL, Plaquetas 369’000/µL, Glucosa
sérica 331 mg/dL, Urea 149 mg/dL, Creatinina 1.7 mg/dL, Bilirrubina total 0.31
mg/dL PH 7.3, Pco2 49 mmHg, Po2 165 mmHg, Bicarbonato de sodio 21.6 mmol/L
Exceso de base -4.3 mmol/L. Resultado de urocultivo Klebsiella pneumoniae
ssp pneumoniae sensible a Imipenem y meropenem 0.25.
En UCI se mantuvo bajo sedación
con mínimo apoyo vasopresor y dentro de metas de protección pulmonar,
documentando mejoría significativa de función renal pero, persistencia de datos
de respuesta inflamatoria sistémica y descontrol metabólico, requiriendo nefrectomía
simple izquierda abierta y retiro de doble “JJ”, observando durante
intervención quirúrgica abundante edema de tejidos blandos con parénquima
desvitalizado, áreas de necrosis y múltiples adherencias. Nuevo urocultivo sin
evidencia de crecimiento bacteriano.
Por intubación prolongada se
realizó traqueostomía, se logró control metabólico, suspensión de aminas
vasoactivas y normalización de niveles de creatinina¸ tomografía de abdomen
simple 21 días posteriores
de primera intervención
quirúrgica que evidencia ausencia de riñón izquierdo sin cambios inflamatorios
circundantes (Figura 3). Es egresada para seguimiento por consulta externa.
Figura 3
Tomografía
de abdomen en corte Coronal donde se observa ausencia de riñón izquierdo.

RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Pielonefritis enfisematosa es
una infección aguda, necrotizante, grave del parénquima renal y tejidos
circundantes, causada por microorganismos formadores de gas (Arrambide-Herrera JG, 2022). Desde su primera descripción en 1898 por Nelly y MacCallum hasta la
actualidad, continúa considerándose una enfermedad rara y letal (Chávez,
2007), con una mortalidad hasta del 40% (Torres-Mercado LO, 2016).
La aparición de los síntomas
puede ser abrupta o evolucionar lentamente durante un periodo de hasta tres
semanas, manifestándose clínicamente con náuseas, vómitos, piuria, fiebre,
dolor costovertebral, taquicardia y disnea (Desai Rajeev, 2022).
Adicionalmente, se ha
documentado que afecta al género femenino con una proporción de 6 a 8:1, esto
posiblemente debido a la mayor susceptibilidad de infecciones del tracto
urinario que ellas padecen, siendo la presentación unilateral la más frecuente,
observada hasta en el 95% de los pacientes; Por otra parte, se ha identificado
un predominio de afección renal izquierda en hasta en el 60% de los casos. (Aguilar-García, 2014)
En estudios paraclínicos los
hallazgos más frecuentes encontrados son hiperglucemia, leucocitosis y lesión
renal aguda (Desai Rajeev, 2022). Los factores pronósticos más relevantes que
han sido asociados a un desenlace adverso son la alteración del estado de
consciencia, choque, trombocitopenia, falla renal, hipoalbumemia e hiponatremia,
(Torres-Mercado LO, 2016). El choque séptico puede estar presente hasta en el
19% de los casos (Desai Rajeev, 2022) y ha sido asociado a un aumento de
probabilidad de desenlace adverso (Torres-Mercado LO, 2016).
El diagnóstico de pielonefritis
enfisematosa raramente se establece clínicamente, siendo indispensable la
realización de estudios de imagen. La radiografía simple de abdomen muestra una
sombra de gas anormal en el lecho renal, suficiente para levantar una sospecha
diagnóstica (Al-Hajjaj, 2022) La ecografía es útil para buscar causas
obstructivas de las vías excretoras, pero puede ser difícil de interpretar por
interposición de estructuras gastrointestinales, (Kaiser, 2005) por lo que la
tomografía computarizada abdominal es el método radiográfico de elección para
confirmar el diagnóstico y realizar una clasificación pronostica según el tipo
y extensión de la lesión, y así poder establecer una decisión terapéutica (Yang, 2023)
En el año 2000, Huang y Tseng,
publicaron una nueva clasificación basada en una descripción tomográfica más
detallada sobre los pacientes con pielonefritis enfisematosa (Tabla 1), la cual
tiene importantes implicaciones médicas durante el tratamiento (Huang,
2000) y un impacto directo en la mortalidad asociada a una mayor clase
radiológica (Chávez, 2007).
Tabla 1
Clasificación de Huang y Tseng (Huang, 2000).
Clase 1
|
Gas confinado en el sistema
colector
|
Clase 2
|
Gas en el parénquima renal
sin extensión al espacio extrarrenal
|
Clase 3A
|
Extensión del gas o absceso
al espacio perinéfrico
|
Clase 3B
|
Extensión del gas o absceso
al espacio pararenal
|
Clase 4
|
Pielonefritis enfisematosa
bilateral o riñón único
|
Adicionalmente, la paciente
presentó una condición clínica llamada coagulación intravascular diseminada
(CID), la cual es un proceso patológico que se produce como resultado de la
activación y estimulación excesiva del sistema de la coagulación y que ocasiona
microangiopatía trombótica por depósito de fibrina en la microcirculación y
fibrinólisis secundaria (Páramo, 2006). Para llegar al diagnóstico se
requiere la asociación del cuadro clínico del paciente, pruebas de coagulación
y hemograma, por esto el Ministerio de Salud y
Bienestar de Japón (JMHW), la Sociedad Internacional de Trombosis y Hemostasia
(ISTH) y la Asociación Japonesa de Medicina Aguda (JAAM) establecieron
criterios para su diagnóstico (Álvarez-Hernández LF, 2018). En este artículo
utilizamos los criterios establecidos por el JMHW (Tabla 2), de los cuáles, la
paciente del caso presentado cumplío con 12 puntos.
Tabla 2
Criterios
para el diagnóstico de coagulación intravascular diseminada (CID) establecidos por
el Ministerio de Salud y Bienestar de Japón (JMHW) (Álvarez-Hernández LF, 2018).
Criterio
|
Puntaje
|
Recuento plaquetario
|
A) < 50’000 células/µL: 3 puntos.
B) 50’000 a 80’000 células/µL: 2 puntos.
C) 80´000 a 120’000 células/µL:
1 punto.
|
Prolongación de tiempo de Protrombina
|
A) > 1.67: 2 puntos.
B) 1.25 a 1.67:1 punto.
|
Producto de degradación de fibrina (Dímero D)
|
A) > 40 µg/mL: 3 puntos.
B) 20 a 40 µg/mL: 2 puntos.
C) 10 a 20 µg/mL: 1 punto.
|
Concentración de fibrinógeno
|
A) < 1 g/L: 2 puntos.
B) 1 a 1.5 g/L: 1 punto.
|
Existencia de sangrado o insuficiencia orgánica
|
1 punto.
|
Enfermedad subyacente
|
1 punto.
|
Diagnóstico
de CID
|
≥ 7 puntos.
|
Los pacientes quienes muestran
alteración de la conciencia, choque al momento de la presentación,
trombocitopenia e insuficiencia renal tienen mayor mortalidad. La insuficiencia
orgánica única o múltiple deben ser trasladados a una unidad de cuidados
intensivos (Mahesan, 2015).
Como predictores de la
necesidad de ingreso a unidad de cuidados intensivos, NEWS es una puntuación de
alerta temprana para identificar pacientes con enfermedades agudas que
requieren una evaluación urgente por parte de un equipo de cuidados críticos;
es igual o superior a otras herramientas de estratificación de riesgos de uso
común, como qSOFA, la puntuación del síndrome de respuesta inflamatoria
sistémica y los criterios del equipo de emergencia médica. Es poco probable que
los pacientes con pielonefritis enfisematosa con un NEWS del punto de corte 3 o
inferior requieran ingreso en la UCI, por otro lado, considerar ingreso a la
UCI de aquellos con puntuaciones de 4 o más, ya que pueden deteriorarse
rápidamente (Yap, 2019). Esto se puede evidenciar en nuestro caso presentado,
ya que la paciente cumplío con una puntuación superior a 4 puntos y amerito
internamiento en unidad de cuidados intensivos.
A pesar del mal pronóstico de
esta afección, actualmente no existe un consenso global sobre el manejo
terapéutico (Arrambide-Herrera JG, 2022), sin embargo, está documentado que
debe ser personalizado en cada paciente en relación con la presentación clínica
y sus comorbilidades. Las opciones de tratamiento incluyen reanimación con
líquidos, reemplazo de electrolitos y terapia con antibióticos intravenosos;
hasta necesidad de drenaje percutáneo con catéter o nefrectomía. (Johnson, 2018).
Dado que la diabetes es el
factor de riesgo principal en su desarrollo, el control glucémico es importante
y se logra más comúnmente con una infusión de insulina. La elección del régimen
antibiótico debe abarcar las bacterias gramnegativas y, en particular, la E.
coli, y el manejo adicional de antibióticos puede ser dirigido por cultivos
de sangre y orina. La evidencia actual sugiere que los pacientes con dos o
menos factores de riesgo deben ser tratados inicialmente con tratamiento médico
(Mahesan, 2015). Se recomiendan las cefalosporinas de tercera o cuarta
generación y carbapenémicos (Merbouh, 2012) así como aminoglucósidos,
inhibidores de betalactamasas y quinolonas, (Pontin, 2009) ya sea como
monoterapia o terapia combinada. La duración del tratamiento antimicrobiano es
una cuestión importante. En general, se recomienda de 7 a 14 días, pero la
duración debe estar relacionada con la enfermedad subyacente (Merbouh,
2012). Los aminoglucósidos deben utilizarse con precaución en pacientes con
insuficiencia renal, y el uso de cefalosporinas bajo la consideración que
genera organismos resistentes y puede causar colitis pseudomembranosa (Pontin, 2009).
Si no responden, o en presencia
de obstrucción ureteral, se debe considerar la intervención quirúrgica, siendo
la intervención percutánea aceptada como el estándar de oro en el tratamiento.
En aquellos con dos o más factores de riesgo, una tomografía que demuestra una
destrucción de más del 50% de la pelvis renal o con enfermedad de grado 3 o 4,
se debe considerar una nefrectomía inmediata (Mahesan, 2015).
La nefrectomía tardía se ofrece
con mayor frecuencia a pacientes en los que no ha funcionado el tratamiento
médico o quirúrgico mínimamente invasivo. Esto representa aproximadamente el
13% de los casos en los que se intenta el drenaje percutáneo (Pontin,
2009).
Esto último tiene un impacto
directo mortalidad de los pacientes, evidenciado en el estudio (Pacheco
López, 2016) que comentá que si se opta por tratamiento médico puede alcanzar
cifras de hasta el 50%, en nefrectomía de urgencia hasta el 25%, si opta por
drenaje percutáneo hasta el 13.5% y en caso de nefrectomía electiva 6.6 %.
CONCLUSIONES
La pielonefritis enfisematosa
es una variante grave y de rápida progresión de las infecciones de vías
urinarias que sin tratamiento es potencialmente mortal. Tiene una
sintomatología inespecífica que afecta con mayor frecuencia a mujeres, asociado
a su anatomía, así como a pacientes con diabetes, como en el caso clínico
presentado, por lo que se debe tener un especial cuidado en este grupo de
pacientes ya que si existe una baja sospecha de la enfermedad se puede generar
un retraso en el diagnóstico y evolucionar hacia falla multiorgánica.
El estado de choque,
trombocitopenia y clases radiológicas altas se relacionan con necesidad de
estancia en unidad de cuidados intensivos, nefrectomía y una mayor mortalidad.
Por lo que, con el análisis de información, recomendamos el uso de NEWS dentro
del manejo de los pacientes con pielonefritis enfisematosa, para reducir
retraso en el traslado a la UCI y mejorar el pronóstico de los pacientes. Una
sospecha, identificación y tratamiento tempranos impactarán directamente en la
toma de decisiones y sobrevida de estos pacientes.
Conflicto de interés
Los
autores declaran no tener ningun conflicto de interes respecto a esta
publicación.
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