DOI: https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v8i1.9563

Programa Institucional de Tutorías desde la Visión del Estudiante de un Programa Educativo de Técnico Superior Universitario

 

José Luis Vidal Pérez[1]

[email protected]

https://orcid.org/0009-0005-2126-9935

Universidad Juárez Autónoma de Tabasco

México

 

Javier Toledo García

[email protected]

https://orcid.org/0000-0003-0328-2245

Universidad Juárez Autónoma de Tabasco

México

RESUMEN

Los Programas Institucionales de Tutorías establecidos en las Instituciones de Educación Superior (IES) tienen la finalidad de contribuir en la formación integral del estudiante y coadyuvar a disminuir los elevados indicadores de reprobación, rezago y abandono escolar. Por tanto, es fundamental conocer la opinión de los estudiantes de un programa educativo de Técnico Superior Universitario sobre el Programa Institucional de Tutorías (PIT). El diseño de esta investigación fue de tipo experimental transversal con alcance exploratorio y descriptivo. La muestra fue de 32 alumnos que respondieron un cuestionario con escala tipo Likert. Los resultados indicaron que la mayoría de los alumnos poseen una visión positiva acerca del PIT; no obstante, aún existen deficiencias que deben ser atendidas para poder mejorar.

 

Palabras claves:  tutorías, educación, contribuir, coadyuvar, formación


 

Institutional Tutoring Program from the Student’s Perspective of an Educational Program for Higher University Technicians

 

ABSTRACT

The Institutional Tutoring Programs established in Higher Education Institutions (HEIs) have the purpose of contributing to the integral formation of the student and help reduce the high indicators of failure, lag, and school dropout. Therefore, it is essential to know the opinion of the students of an educational program of Higher University Technician regarding the Institutional Tutoring Program (ITP). The research design was of a cross-sectional experimental type with an exploratory and descriptive scope. The sample consisted of 32 students who answered a questionnaire with a Likert scale. The results indicated that most of the students have a positive perception about the ITP; nevertheless, there are certain failures we must pay attention to in order to ameliorate.

 

Keywords: tutoring, education, contribute, help, formation

 

 

 

 

            Artículo recibido 20 diciembre 2023

Aceptado para publicación: 22 enero 2024


 

INTRODUCCIÓN

Las Instituciones de Educación Superior (IES) son concebidas como un instrumento que contribuye a la relación del capital humano y la generación y difusión del conocimiento, y que repercute de forma directa en la sociedad y por ende en los sectores económicos. En consecuencia, las IES efectúan distintas actividades que dan respuesta a los nuevos requerimientos de una sociedad global y en permanente transformación, situándose a la altura en los rubros de investigación, académicos, y progreso tecnológico.  

La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura UNESCO (2009) indica que los principales desafíos de las universidades en el siglo XXI se acentúan en los nuevos retos que se presentan en las sociedades y en su disposición y capacidad para afrontarlos.

Por consiguiente, la educación superior se erige como el sitio perfecto para llevar a cabo investigaciones asociadas con las problemáticas presentes en las diversas sociedades del mundo y por ende contribuir con las potenciales soluciones sobre la base de las cuatro funciones de las IES: investigación, docencia, difusión de la cultura y la transferencia de conocimientos.

Asimismo, el reto para las IES es la reingeniería institucional que debe de atender la complejidad y heterogeneidad del sistema, así como de las figuras implicadas.

Los estudiantes son una de estas figuras cuyo papel es sumamente importante como elemento fundamental en la IES. Por consiguiente, las universidades han generado una diversidad de estrategias o políticas que aseguren y favorezcan una educación de calidad y en consecuencia al desarrollo integral del alumno.

En nuestro país, las IES trabajan arduamente con el fin de disminuir los altos índices de reprobación, deserción y rezago de los alumnos que inician con sus estudios universitarios, por esta razón la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) propone a las IES el establecimiento de sistemas tutoriales que posibiliten la consecución de los objetivos de formación integral de los estudiantes (Castellanos, et al 2003).

La labor personalizada con los estudiantes constituye un medio trascendental, debido a que el estudiante es visualizado como actor central del proceso formativo, una habituación del alumno al ambiente escolar y fortalecimiento de sus habilidades de estudio y trabajo, dando como resultado el decrecimiento de los índices de reprobación, rezago y abandono escolar, y generando el incremento en la eficiencia terminal. (Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) 2000b)

Programa Institucional de Tutorías (PIT)

Para dar respuesta a la problemática antes citada surge el Programa Institucional de Tutorías (PIT) el cual contribuye a la formación integral del alumno, incrementando la calidad en su formación educativa, gestando habilidades para la toma de decisiones y generando un crecimiento en el sentido de responsabilidad.

En razón a lo antes expuesto, la institución educativa donde se ubica el programa de Técnico Superior Universitario no es indiferente a esta situación y a partir del año 2000 da comienzo al PIT en conjunto a su modelo educativo y visualizando a la tutoría como un instrumento esencial en la formación integral del estudiante.

En consecuencia, la tutoría es concebida como el proceso de acompañamiento a través de la formación de los alumnos y se concreta en la atención personalizada de los mismos por parte de los profesores habilitados para esta actividad y con el apoyo conceptual en las teorías de aprendizaje más que en las de enseñanza. (ANUIES, 2000b)

Objetivo

En consideración a todo lo anterior, el presente trabajo de investigación tiene como objetivo establecer la percepción del estudiante de un programa educativo de Técnico Superior Universitario sobre el Programa Institucional de Tutorías, indicando que la evaluación de la actividad tutorial proporciona herramientas indispensables para la consolidación de la operatividad del mismo y por ende reforzar aquellas que lo requieran, todo a favor del actor primordial del proceso educativo, el estudiante.

DESARROLLO

Es por ello por lo que, las tutorías encuentran su fundamento en la búsqueda de la formación integral de los estudiantes, considerando que éstos no sólo deben recibir una formación académica, sino que además deben desarrollarse adecuadamente en todos los demás aspectos de su ser. (Universidad Juárez Autónoma de Tabasco (UJAT), 2005, pp.20)

Es importante mencionar que los profesores tienen un papel fundamental dentro de la institución universitaria, dado que en la actualidad una de las funciones del docente es ayudar a los jóvenes a valorar todo aquello que les es útil para su desarrollo como individuos y en la sociedad; asimismo a resaltar lo que puede ser importante para su futuro y no reducir su comunicación a sólo lo que es apropiado en un determinado momento.

La mayor parte de las contribuciones relacionadas con el sustento teórico de la tutoría, vincularon explícita o implícitamente a la actividad con el humanismo: corriente filosófica orientada a la comprensión de la naturaleza y la existencia humana. (Fresán, 2005).

Lo anterior, ha sido importante para detectar carencias en las prácticas educativas y ha coadyuvado a las instituciones a replantear algunas posturas educativas; de igual manera, a reflexionar si la actividad educativa debe centrarse en que el estudiante logre su autorrealización en los diferentes aspectos de su persona.

Del mismo modo, actividad tutorial se relaciona con la formación integral del estudiante, puesto que las tutorías se apoyan al humanismo con el fin de que éste fortalezca su formación ética que tiene como objetivo desarrollar en el estudiante los valores básicos que rigen su vida y su convivencia humana.

El siguiente documento afirma que:

Las tutorías se fundamentan en el enfoque de permanencia del alumno el cual tiene como objetivo la integración de la comunidad universitaria a partir de la apropiación de los principios y valores de la institución, que se traducen en un compromiso social y profesional para fomentar y enaltecer el espíritu e identidad universitaria. (UJAT, 2005, p.20)

Por tanto, uno de los aspectos más importantes que fundamentan la actividad tutorial es la relación pedagógica entre el tutor y el tutorado, la cual de acuerdo con Gonzáles y Otero (2019) permite una efectiva integración docente-estudiante de manera dinámica. Por tal razón, el proceso de tutorías se percibe como un acto indispensable. 

Paralelamente, la tutoría en las IES no puede calificarse como un elemento novedoso en el entorno educativo, ya que ésta se sitúa en la antigua Grecia con el requerimiento de guiar a los estudiantes en su formación académica y por ende profesional. También la tutoría ha sido visualizada a través de diversos estudios ubicados hace más de treinta años. (González-Simancas, 1973).

Con el nacimiento del Espacio Europeo de Educación Superior (EEES) en el año 1999 en Europa, se presentan nuevos cambios en las universidades similares al planteado en las declaraciones de Bolonia y Praga.

Por ello, Uria Rodríguez, et al. (2007), en conjunto con la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) a través de su documento La educación superior en el siglo XXI. Líneas estratégicas de desarrollo (2000), señalan la relevancia que ocupa el aprendizaje y ya no solo la docencia, así mismo se establecen cambios sustanciales en el rol docente y del estudiante y por ende en las formas de transmisión y evaluación del conocimiento y es precisamente en estos nuevos roles donde aparecen los ámbitos tutoriales existentes.

Orígenes la tutoría

Los programas de tutorías tienen sus raíces en las instituciones de educación superior anglosajonas: en Estados Unidos se denominó mentoring, advising y en Inglaterra se designó como tutoring o supervising, donde se trataba de desarrollar una educación individualizada que diera como resultado la reducción de las horas frente a grupo del profesor (Fresán y Romo, 2011).

En el Reino Unido, concretamente en la Open University, se instauró un modelo personalizado de tutorías. Al ser una institución educativa a distancia, los alumnos estudian de manera personal, es decir, automáticamente. Por lo anterior el modelo de esta universidad plantea la reunión, en ciertos instantes, con sus estudiantes (tutorados) a quienes se les orienta en la toma de decisiones para continuar con sus siguientes etapas y se les apoya en la resolución de las problemáticas y/o dudas que se generen entre los alumnos (Fresán y Romo, 2011).

Por otra parte, en España, a través de la Ley de Ordenación General del Sistema Educativo (LOGSE), se indica que la tutoría es un elemento de suma importancia en el rol del docente, así como en la orientación para el estudiante. La LOGSE hace alusión que el rol del profesor tutor es establecer una relación de tipo personalizada con sus tutorados para, de esta manera, auxiliarlos en su vida académica, para el logro de su autonomía y su desarrollo de capacidades y actitudes en la toma de decisiones de tipo educativa y para la vida social (Gobierno de España, 1989).

En nuestro continente, en 1997, la Universidad Nacional del Rosario en Argentina, con la ayuda de los coordinadores, se aclaraban dudas que presentaban los estudiantes de nuevo ingreso referentes a diversas temáticas relacionadas, por lo general, a interrogantes sobre el ámbito escolar (Serna Rodríguez, 2010).

En nuestro país México, en torno a los años cuarenta, ya se presentaban los primeros inicios de un sistema de tutorías y con la figura de un tutor. En las facultades de Química y Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en 1970, se estableció una definición del tutor que lo calificaba como un guía del estudiante y quedó plasmado en los planes de estudio, lo que dio origen a los primeros indicios de la actividad tutorial (Fresán y Romo, 2011).

Partiendo del siglo XXI, en México se han presentado diversos programas relacionados con la tutoría en las distintas IES. Todo lo anterior, debido a que la ANUIES establece la propuesta de los Programas Institucionales de Tutorías (PIT) (Fresán y Romo, 2011).

Conceptos de tutorías

Asimismo, resulta importante indicar la existencia de una gran diversidad de definiciones del término tutorías tal y como señalan los autores Álvarez y González (2009), que hablan de la gran diversidad de significados relacionados con este término. Ferrer (2003) pone de manifiesto que la tutoría se concibe como una estrategia de índole pedagógica constante, sistemática, interdisciplinar, integral y compresiva, que establece como finalidad el contribuir al desarrollo personal del alumno, incrementando su rendimiento académico, apoyar al estudiante a participar en la vida universitaria y problemática y en su formación cultural y humana.

Conforme a la ANUIES (2000a), los programas de tutorías deben estar presentes a lo largo de la estancia académica del tutorado, además de orientarlos y canalizarlos a las distintas áreas que constituyen la institución educativa donde se encuentre y brindar una atención en términos de respeto y sobre todo de confidencialidad. Por ende, el tutor deberá generar que el tutorado se responsabilice de sus procesos de aprendizaje, generando en ellos la toma de conciencia, compromiso con él mismo y con el entorno social donde se desenvuelve.

De igual forma, la ANUIES, establece que antes de generar un programa institucional de tutorías en las IES, resulta interesante conocer y definir el concepto de tutorías tabla 1.


 

Tabla 1. Definición de tutorías

Instancia

Definición

Waite (1992)

La tutoría es empleada primordialmente para ofrecer enseñanza adicional a los estudiantes que presenten problemas de aprendizaje o que requieren de atenciones especiales que les impiden su participación en programas de enseñanza sistemáticos. Dicha tutoría se lleva a cabo durante o después del horario de clases y por personas que no sean los profesores de los tutorados.

Alcántara (1990)

Para este autor, la tutoría es una manera de atención educativa del docente a un alumno o grupo de alumnos de forma sistemática, a través de establecer objetivos, la organización por áreas, uso de enseñanzas innovadoras, mecanismos de seguimiento y/o monitoreo y control, etc.

Real Academia Española (1992)

El tutor es el personaje responsable de la orientación de los estudiantes de una asignatura o curso. La acción de la tutoría es un método de enseñanza en donde un alumno o grupo de alumnos reducido reciben educación personalizada de parte del docente.

Arbizu Bakaikoa, et al. (2005)

 

Estos autores establecen que la tutoría es “una acción de intervención formativa destinada al seguimiento de los estudiantes y que es considerada una actividad docente más”.

Cruz Flores, et al. (2006)

Definen a la tutoría como “proceso formativo de carácter socio cognoscitivo, personalizado y dirigido a convertir a los novatos en individuos competentes, mediante su integración a comunidades de práctica (Wenger, 2001) y redes de expertos, que resuelven problemas en ambientes dinámicos y complejos, crean y recrean la acción profesional y, en su caso, generan conocimiento avanzado”.

Gaitán Rossi (2013)

 

Establece que “la tutoría puede entenderse como el proceso de acompañamiento a un estudiante en el cual un profesor le provee de orientación sistemática a lo largo de su trayectoria escolar; es un proceso de responsabilidad compartida que busca la clarificación de objetivos de carrera y de vida, la toma de decisiones y la resolución de problemas” (p. 5).

Nota: Elaboración propia.

 

Tipos tutorías

De acuerdo con la ANUIES (2000a), en el Programa Institucional de Tutorías se ubican dos tipos: la tutoría individual y la tutoría grupal.

La tutoría individual radica en la atención personalizada a un alumno, donde el tutor proporciona acompañamiento a lo largo de su trayectoria escolar.

Las tutorías de tipo individual tienen como objetivo el orientar a los tutorados, partiendo de una valoración de necesidades que se recupera a partir de los resultados de la aplicación de diferentes instrumentos y las entrevistas a los estudiantes.  Lo anterior permite percibir quiénes o cuáles son los alumnos que requieren algún tipo de canalización de acuerdo con el problema detectado pudiendo ser de tipo laboral, salud, académico, emocional, etc.

Mientras que la tutoría grupal brinda apoyo a grupos pequeños o grandes optimizando el tiempo de esta actividad y se presenta cuando se tratan temas de tipo general que atañen a todos los alumnos y se orienta a descubrir posibles problemas que requieran atención focalizada.

Por último, se encuentran las tutorías a distancia donde el tutor brinda apoyo a los estudiantes matriculados en programas educativos cuya modalidad es abierta y a distancia en procedimientos o trámites en línea y presencial, lo anterior tiene el fin de garantizar aprendizajes autónomos, ser autodidactas en su instrucción académica y profesional. 

Actores inmersos en las tutorías.

PASCUAL-LEONE PASCUAL (1984, como se citó en Benavent 1984), establece dos términos inmersos en la palabra tutor las cuales son la de protector y la de preceptor. El concepto de protector tiene su base en el segundo tercio del siglo XV y tiene su base en el latín “tueri” cuyo significado es proteger, defender (De Nicolás Galache et al, 1989; Lázaro y Asensi, 1989; Galve y García Pérez, 1992; Ortega Campos, 1994).

Por otra parte, la idea de preceptor se relaciona con las distintas maneras de enseñanza que se han desarrollado a través del tiempo y han transcurrido en dos periodos. El primer periodo se distingue por un tipo de enseñanza individual del estudiante con su preceptor y siendo la pieza fundamental la persona que enseña, así como la persona que aprende y no los contenidos. El segundo periodo se conoció como periodo de estado universal, cuya característica es que el tipo de enseñanza comienza a institucionalizarse con planes de estudio, métodos, libros y la enseñanza inicia a democratizarse y posteriormente a manifestarse.

De acuerdo con Caballero y Añorga (2007), el tutor es un docente, guía, intercesor, una persona que debe distinguirse por su actitud y conocimiento, con capacidades psicopedagógicas y científicas.

Badillo (2007), indica que el tutor guía el proceso formativo del alumno con una perspectiva de formación integral, al igual que orienta y conduce al estudiante a lo largo de su trayectoria escolar, impulsa la disposición de responsabilizarse de su propio aprendizaje y formación, y ofrecer atención pertinente a las necesidades de tipo académicas, de adaptación al medio escolar y socioafectivo.

En la tabla 2 se muestras diferentes concepciones de la palabra tutor que diferentes profesionales han efectuado a través del tiempo.

Tabla 2. Definición de tutor

Autor

Definición

ARTIGOT

Tutor es un docente que además de sus actividades relacionadas con la enseñanza, se encarga de atender diversos aspectos que no quedan lo suficientemente claros dentro de las clases. (l973, p.18).

García Crespo

Tutor es el profesor que además de sus actividades relacionadas con la enseñanza, se encarga de apoyar y orientar a un determinado grupo de alumnos, a quienes deben prestar sus servicios tanto a nivel individual como grupal. (1987, p.1)

Ortega

Tutor es el docente que se encarga del desarrollo, maduración, orientación y aprendizaje en el grupo de alumnos al encomendarlo, conoce y tiene en cuenta el medio escolar, familiar y ambiental en que viven y procura potenciar en ellos un desarrollo integral (1994, p.20-21).

Rus

Tutor es un profesor que ejerce la docencia y al mismo tiempo, desarrolla acciones relacionadas a la vida académica, familiar y social de un grupo de estudiantes, de los que él es docente, dentro del trabajo escolar (1996, p.193).

Nota: Elaboración propia

 

Por otra parte, el tutorado es un alumno que posee un tutor que lo apoya y orienta en su formación académica y que lo auxilia en diversos problemas o necesidades que muestre a la larga de su trayectoria académica. La tabla 3 muestra diferentes definiciones de tutorado.


 

Tabla 3. Definición de tutorado

Autor

Definición

 

Cabral y Castolo (2011, p.225)

“Tutorado es concebido como el sujeto que recibe la tutoría. Comprende y procesa información para obtener conocimiento sobre su entorno y, entonces, ejecutar una operación bajo la supervisión del tutor; dicha acción no se ve limitada por los propósitos del tutor”.

Freixas y Ramas (2015, p.9)

Los autores definen al tutorado como “todo estudiante inscrito en algún programa educativo que cuenta con un tutor asignado de quien recibe acompañamiento a través de medios electrónicos en su actividad escolar y personal para promover su formación integral, desarrollando conjuntamente acciones de información, formación y orientación”.

Cruz Flores, et al. (2011)

Los autores establecen que la literatura cataloga al tutorado como un novato, un aprendiz, alguien menos experto que el tutor.

Ramos Cabral y González Castolo (2011, como se citó en Hernández Gallardo y Andrade Cázares 2011)

Definen al tutor como “una entidad que recibe la tutoría. Una persona que asimila y procesa información para adquirir conocimiento sobre su entorno y, entonces, ejecutar una operación bajo la supervisión del tutor; dicha acción no se ve limitada por los propósitos del tutor” (p. 225).

Nota: Elaboración propia.

 

MÉTODOLOGÍA

Informantes

En este trabajo de investigación la población total fue de 32 estudiantes y la muestra se determinó a través de una calculadora de muestras de Asesoría Económica & Marketing Copyright 2009, considerando un margen de error del 5%, un nivel de confianza de 99% y una población de 32 alumnos.  Por lo anterior, el tamaño de la muestra fue de 32 alumnos a encuestar.

La fórmula fue la siguiente: 

Z^2(p*q)                     

E^2 + (z^2(p*q))        

N                                  

n= Tamaño de la muestra

z= Nivel de confianza deseado

p= Proporción de la población con característica  deseada (éxito)

q= Proporción de la población sin la característica  deseada (fracaso)

 e= Nivel de error dispuesto a cometer

N= Tamaño de la población

 

Instrumentos y procedimientos

La metodología utilizada fue cuantitativa, el diseño de la investigación fue de tipo experimental transversal con alcance exploratorio y descriptivo.

El instrumento utilizado para la recolección de datos fue un cuestionario con escala tipo Likert, constituido por cuarenta y cinco ítems distribuidos en cinco dimensiones de los cuales 5 se refieren a datos generales y los restantes distribuidos en cada una de las cinco dimensiones: integración y permanencia, vocacional, escolar y de aprendizaje, académica-profesional y desarrollo personal y social.

Asimismo, el cuestionario se dividió en tres secciones: datos generales, primera parte (se refiere a   la información que el tutorado obtiene a través de la actividad tutorial), y segunda parte (se refiere a manera en la que la actividad tutorial apoya al tutorado en todos los aspectos de su formación)

La escala que se consideró para el instrumento fue: totalmente de acuerdo, de acuerdo, en desacuerdo, y totalmente en desacuerdo.

RESULTADOS

Para responder a la finalidad de este trabajo de investigación, a continuación, se presentan los primeros resultados de la aplicación del cuestionario el cual lo respondieron 15 mujeres y 17 hombres, la edad fluctuaba entre 18 y 30 años, de los 32 encuestados el 71.88% indicó ser soltero, el 18.75% estableció ser casado (a), y el 6.25% señaló estar en unión libre. En referencia a si realizan alguna actividad remunerada el 40.63% señaló que sí, mientras que el 59.38% indicó no efectuar ninguna actividad. Por otro lado, al cuestionar a los encuestados si tienen dependientes económicos el 65% señaló que no y el resto indicó que sí.

Por otra parte, el ciclo que estaban cursando los encuestados al momento de responder el cuestionario se ubicó entre el tercer y el octavo ciclo.

Finalmente, al responder los encuestados la pregunta: “¿Durante cuántos ciclos has recibido tutoría?” Las respuestas fueron las siguientes: 5 alumnos indicaron que sólo un ciclo, 12 señalaron que dos ciclos, 10 indicaron que tres ciclos, y 1 estudiante manifestó que cuatro ciclos, el resto no respondió.

En cuanto a la primera dimensión del cuestionario que se refiere a la integración y permanencia que el tutorado obtiene a través de la actividad tutorial y que toma como referencia los siguientes ítems: 12, 13, 14, 15, 25, 26, 27, 28 y 29, se destacan los siguientes resultados:

Gráfica 1. Primera dimensión: Integración y permanencia.

Nota: Elaboración propia. En la gráfica el color azul representa totalmente de acuerdo, el rojo de acuerdo, el amarillo en desacuerdo y el verde totalmente en desacuerdo.

 

 

De acuerdo con la gráfica 1. Podemos destacar que los encuestados señalaron que la actividad tutorial les ayudó a mejorar sus habilidades para el trabajo en equipo o en grupos de trabajo académico con un 31.25 % que indicó estar totalmente de acuerdo, un 62.50 % de acuerdo y solo un 3.13 % indicó estar en desacuerdo y un 3.13 % en total desacuerdo. Asimismo, sobre conocer el campo laboral en donde los tutorados pueden ejercer su profesión un 28.13 % señaló estar totalmente de acuerdo, el 56.25 % estuvo de acuerdo, el 15.63 % en desacuerdo y nadie indicó estar totalmente en desacuerdo. Por otro lado, podemos destacar que con referencia a la información sobre los servicios y programas que les pueden ayudar en su formación profesional y personal, los resultados fueron que solo el 12.50 % estuvo totalmente de acuerdo, el 53.13 % indicó estar de acuerdo, el 25 % señaló estar en desacuerdo y el 9.38 % estuvo totalmente en desacuerdo, es decir, que los tutorados no recibieron la información necesaria sobre este aspecto y que contrasta con los resultados mencionados anteriormente. Sin embargo, en la mayoría de los resultados de esta dimensión gran porcentaje de los estudiantes señalaron estar de acuerdo con los ítems presentados.

Por otro lado, con respecto a la segunda dimensión del cuestionario la cual es la vocacional, se toman en cuenta los siguientes ítems: 16,17, 18, 30 y 31.

Gráfica 2. Segunda dimensión: vocacional.

Nota: Elaboración propia. En la gráfica el color azul representa totalmente de acuerdo, el rojo de acuerdo, el amarillo en desacuerdo y el verde totalmente en desacuerdo.

 

 

En referencia a la información de las diferentes fuentes documentales y de información electrónicas que los tutorados recibieron por medio de la actividad tutorial el 21.88 % señaló estar totalmente de acuerdo en que sí recibieron dicha información, el 56.25 % estuvo de acuerdo, el 9.38 % indicó estar en desacuerdo y finalmente, el 12.50 % de los encuestados estuvo en total desacuerdo con este ítem. Asimismo, sobre la importancia de trabajar en grupo, de desarrollar hábitos de estudio y mejores formas de aprender los resultados indicaron que el 31.25 % estuvo en total acuerdo, el 59.38 % señaló estar de acuerdo, mientras que, el 9.38 % indicó estar en desacuerdo, nadie indicó estar totalmente en desacuerdo. Por otra parte, acerca de la información adquirida mediante el PIT sobre las condiciones y requisitos para realizar las actividades curriculares el 31.25 % estuvo totalmente de acuerdo, el 56.25 % de acuerdo y el 12.50 % indicó estar en desacuerdo. Por lo que se refiere al ítem reconocer mis fortalezas y debilidades como estudiante el 31.25 % dijo estar de totalmente de acuerdo, el 56.25 % de acuerdo y el 12.50 % en desacuerdo. Finalmente, el ítem sobre mejorar mi aprovechamiento académico el 40.63 % indicó estar totalmente de acuerdo, el 37.50 % estar de acuerdo y el 21.88 % estar en desacuerdo.

Paralelamente, en la tercera dimensión escolar y de aprendizaje la cual se conforma por los siguientes ítems: 19, 20, 32, 33, 34, 35, 36 y 37. Se destacan los siguientes resultados.

Gráfica 3. Tercera dimensión: escolar y de aprendizaje.

Nota: Elaboración propia. En la gráfica el color azul representa totalmente de acuerdo, el rojo de acuerdo, el amarillo en desacuerdo y el verde totalmente en desacuerdo.

 

De acuerdo con los resultados obtenidos, el ítem con mejor aceptación fue el que se refiere a la importancia de desarrollar habilidades para comunicarse y relacionarse con los demás, puesto que un 15.63 % indicó estar totalmente de acuerdo, un 71.88 % de acuerdo, mientras que 9.38 % en desacuerdo y solo un 3.13 % totalmente en desacuerdo. Asimismo, acerca del ítem sobre ser responsable en mis compromisos académicos el 31.25 % señaló estar totalmente de acuerdo, el 59.38 % estar de acuerdo y solo el 9.38 % estuvo en desacuerdo, nadie indicó estar totalmente en desacuerdo. Contrastando lo anterior, hay dos ítems en donde el porcentaje negativo es más alto, uno de ellos es el de tener la capacidad de relacionarse y resolver conflictos con los demás en donde el 37.50 % dijo estar totalmente de acuerdo, el 37. 50 % de acuerdo y el 25 % estuvo en desacuerdo. De igual manera, sobre desarrollar una actitud ética en mi formación profesional, el 37.50 % indicó estar totalmente de acuerdo, el 40.63 % estuvo de acuerdo y finalmente el 21.88 % en desacuerdo. En estos últimos ítems el porcentaje de desacuerdo fue mayor que en los anteriores ítems.

Por otra parte, en la dimensión académico-profesional se toman en cuenta los siguientes ítems: 21, 22, 38 y 39.

Gráfica 4. Cuarta dimensión: académico-profesional.

 

Nota: Elaboración propia. En la gráfica el color azul representa totalmente de acuerdo, el rojo de acuerdo, el amarillo en desacuerdo y el verde totalmente en desacuerdo.

 

 

Acerca de la información obtenida mediante el PIT de los factores que interviene en la construcción de un proyecto de vida el 21.88 % indicó estar totalmente de acuerdo, el 62.50 % de acuerdo, el 12.50 % en desacuerdo y el 3.13 % en total desacuerdo. Respecto al ítem sobre sentirse parte de la institución, 21.88 % señaló estar totalmente de acuerdo, el 65.63 % de acuerdo, el 6.25 % en desacuerdo y el otro 6.25 % estuvo en total desacuerdo. Por otro lado, sobre la formación que los estudiantes tuvieron con la actividad tutorial, en el caso de argumentar y defender mis ideas el 37.50 % señaló estar totalmente de acuerdo, el 43.75 % de acuerdo y el 18.75 % en desacuerdo. Al mismo tiempo, sobre tomar decisiones de manera independiente y fundamentada, el 28.13 % indicó estar totalmente de acuerdo, el 53.13 % de acuerdo y el 18.75 % en desacuerdo.

Finalmente, en la dimensión sobre desarrollo personal y social, la cual consta de los ítems: 23, 24, 40, 41, 42, 43, 44, 45, 46 y 47.

Gráfica 5. Quinta dimensión: desarrollo personal y social.

Nota: Elaboración propia. En la gráfica el color azul representa totalmente de acuerdo, el rojo de acuerdo, el amarillo en desacuerdo y el verde totalmente en desacuerdo.

 

 

De acuerdo con la gráfica 5. En referencia al ítem sobre el compromiso que adquirieron los encuestados con su formación profesional el 34.38 % estuvo totalmente de acuerdo, el 53.13 % de acuerdo y el 12.50 % en desacuerdo. Asimismo, uno de los ítems con valores similares fue ser responsable ante las demandas de mi vida personal y social, en el cual el 31.25 % indicó estar totalmente de acuerdo, el 53.13 % de acuerdo y el 15.63 % en desacuerdo. Por otro lado, uno de los ítems que contrasta con los anteriores y en el que los estudiantes estuvieron más en desacuerdo fue en aprovechar los programas y servicios de apoyo que ofrece la institución en donde el 31.25 % dijo estar totalmente de acuerdo, el 40.63 % de acuerdo y el 28.13 % en desacuerdo. El resto de los ítems de esta dimensión tienen resultados similares que se pueden apreciar en la gráfica.

Para finalizar, se presentan los resultados del último ítem sobre en qué medida las actividades de tutoría han permitido al tutorado conocer la institución y adaptarse al ambiente institucional, reafirmar su vocación profesional, ser mejor estudiante, desarrollar habilidades y actitudes para su futura práctica profesional y sentirse mejor consigo mismo y con los demás. Los resultados fueron los siguientes:

Tabla 1. Frecuencia Porcentual (%)

Segunda parte: La Formación

En términos generales la participación en las actividades de tutoría, te han permitido:

Bastante

Suficiente

Poco

Nada

Conocer tu institución y adaptarte al ambiente institucional

31.25

46.88

18.75

3.13

Reafirmar tu vocación profesional

46.88

40.63

12.50

0.00

Ser mejor estudiante

31.25

43.75

25.00

0.00

Desarrollar habilidades y actitudes para tu futura práctica profesional

40.63

34.38

21.88

3.13

Sentirte mejor contigo mismo y con los demás

31.25

43.75

21.88

3.13

Nota: Elaboración propia

 

Gráfica 6.

Nota: Elaboración propia

Para el análisis de los siguientes resultados la escala utilizada fue bastante, suficiente, poco y nada. Primeramente, al preguntar a los estudiantes si su participación en las actividades de tutoría les ha permitido sentirse bien con ellos mismos y con los demás el 31.25 % indicó bastante, el 43.75 % suficiente, 21.88 % poco y el 3.13 % nada. Asimismo, en cuanto a desarrollar habilidades y actitudes para su futura práctica profesional el 40.63 % señaló bastante, el 34.38 % suficiente, el 21.88 % poco y el 3.13 % nada.

Por otro lado, con relevancia si el PIT les ha ayudado e incentivado a ser mejores estudiantes el 31.25 % comunicó bastante, el 43.75 % suficiente, y el 25 % poco. Al mismo tiempo, referente a reafirmar su vocación profesional el 46.88 % dijo que bastante, el 40.63 % suficiente, el 12.50 % poco y ninguno indicó que nada. Por último, con relación a conocer su institución y adaptarse al ambiente laboral el 31.25 % indicó bastante, el 46.88 % suficiente, el 18.75 % poco y finalmente, el 3.13 % señaló nada.

CONCLUSIÓN

En la presente investigación se logró apreciar la visión de los estudiantes sobre el PIT mediante los resultados obtenidos en los cuestionarios aplicados. Anteriormente, se mencionó que el programa de tutorías surge para dar respuesta a la problemática de crecimiento de los índices de reprobación, rezago y abandono escolar dentro de las IES. Asimismo, se enfoca en generar estrategias que favorezcan y aseguren una educación de calidad y al mismo tiempo, coadyuvar al desarrollo personal del alumno. Todo esto, mediante la interacción que se lleva a cabo entre el tutor en cargo y el tutorado.

Particularmente, en el caso de los estudiantes de Técnico Superior Universitario, el cuestionario proporcionó información relevante sobre los diferentes aspectos de la actividad tutorial. En general, los resultados de la investigación demostraron que los encuestados tienen una visión positiva acerca del PIT basados en la percepción y valoración sobre la actividad tutorial que han adquirido a lo largo de su formación académica; por consiguiente, la mayoría de ellos indicó estar totalmente de acuerdo y de acuerdo con los diferentes ítems del cuestionario, tanto en el apartado de información como en el de formación. Por tanto, es importante mencionar que los resultados reflejaron que mediante el PIT los estudiantes han obtenido información que los ayudó a mejorar su aprovechamiento académico mediante el trabajo en equipo y el desarrollo de mejores hábitos de estudio y formas de aprender; de igual manera, la mayoría de ellos recibieron información sobre el campo laboral donde pueden ejercer su profesión y sobre los servicios y programas que les pueden ayudar en su formación profesional y personal. De igual manera, reconocieron sus fortalezas y debilidades como estudiantes. Por otro lado, las actividades tutoriales les proporcionó información para la realización de las actividades curriculares y extracurriculares necesarias para su formación profesional.

Finalmente, los resultados demostraron que el programa de tutorías no solo ha contribuido en el ámbito académico, sino también en el bienestar y el desarrollo personal e integral del estudiante mediante el desarrollo de habilidades para comunicarse y relacionarse con los demás, reconocer la importancia de argumentar y defender sus ideas y la toma de decisiones de manera independiente y fundamentada; al mismo tiempo, coadyuvó para que los estudiantes reconocieran la importancia de construir sus proyectos de vida.

A manera de conclusión, es importante mencionar que el PIT ha funcionado de modo aceptable en las diferentes dimensiones evaluadas de la tutoría dentro de la comunidad estudiantil, favoreciendo la permanencia y la continuidad de los estudiantes durante su proceso de formación académica. En la mayoría de los casos, ha implementado estrategias que beneficiaron al desarrollo personal y social, fomentando de esta manera la búsqueda de una vida mejor y un desarrollo integral para los estudiantes. No obstante, no todos los estudiantes indicaron haber tenido experiencias aceptables, dado que los resultados reflejaron que algunos tuvieron experiencias negativas durante los ciclos en los que recibieron tutorías. Cabe mencionar que en la mayoría de los casos esto sucede cuando los docentes no tienen una noción clara de lo que significa la actividad tutorial ni tampoco la preparación necesaria para cumplir con los objetivos de dicho programa.

Para finalizar, es necesario reconocer el buen trabajo de los docentes, pero también aceptar que existen deficiencias que deben ser erradicadas para que los estudiantes tengan mejores experiencias con la actividad tutorial. Es por eso por lo que uno de los factores clave para ello es invitar e incentivar tanto a docentes como a estudiantes a llevar a cabo las actividades que requiera el programa de tutorías, destacando la importancia de éste dentro de los diferentes aspectos que ayudan a favorecer y coadyuvar el proceso formativo de los estudiantes con la finalidad de evitar el decrecimiento de los índices de reprobación, rezago y abandono escolar y ocasionando el crecimiento de su aprovechamiento académico y el desarrollo en su formación integral y social.

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